Hoodoo: Desvelando el poder secreto de las raíces, la magia popular, la conjuración, la brujería y el mojo

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Introducción

El hoodoo es un tema que ha existido desde que los africanos fueron traídos a las costas americanas como esclavos y emigraron a través del país, compartiendo su magia y creencias. Las hierbas y raíces que usaban se amalgamaron con otras creencias para formar la práctica que ahora conocemos como hoodoo.

Mucha gente cree que el hoodoo es una práctica religiosa, pero la verdad es todo lo contrario. El hoodoo no se basa en la adoración de dioses, diosas u otras deidades formales. En su lugar, es una forma de practicar la magia popular utilizando las herramientas e ingredientes más básicos. Entonces, ¿qué relevancia tiene el hoodoo en la sociedad actual? Bastante. Los seres humanos están empezando a comprender los poderes que hay en la naturaleza y cómo utilizarlos.

La progresión natural hacia la magia y los rituales de trabajo de raíces transmitidos en la historia parece inevitable. Entender por qué algunas plantas y hierbas pueden atraer la buena suerte mientras que otras forman un escudo protector atrae nuestro sentido personal de bienestar. Este tipo de magia y conjuro puede ser llevado a cabo por cualquiera que quiera probarlo, siempre que se respete el poder y se aprenda a protegerse del daño.

Este libro tiene todo lo que usted necesita saber para llevar a cabo este arte de forma segura y poderosa. ¡Aprenda el antiguo arte del hoodoo y vea cómo puede cambiar su vida para siempre!

Capítulo 1: Historia del hoodoo

El hoodoo fue una práctica utilizada por los esclavos africanos para conservar sus raíces cuando fueron transportados a América como esclavos. El hoodoo es magia popular e incorpora las creencias y los sistemas de las antiguas culturas africanas junto con el cristianismo que los amos de los esclavos insistieron en enseñar a sus esclavos. No es una religión, aunque tiene su propio conjunto de deidades y dioses a los que se puede adorar o no, según las preferencias de cada uno.

Varias fuentes afirman que el hoodoo es principalmente un sistema de protección y trabajo de raíces de origen africano que se utiliza para proteger a los negros de sus opresores, y que solo debe ser practicado por los negros. Los practicantes más modernos creen que hay tres hilos diferentes de hoodoo que abarcan diferentes etnias. Hay un hilo negro del hoodoo para las personas con herencia africana, un hilo blanco para las influencias europeas y un hilo rojo para los nativos americanos. Sin embargo, es necesario reconocer a todos los seres humanos y celebrar sus diferencias para que el rico tapiz del hoodoo se vea en su totalidad.

El hoodoo es una práctica personal y será utilizada de diferentes maneras por diferentes personas. Las influencias culturales y teológicas influyen en la forma en que los individuos utilizan los rituales y el trabajo de raíces para proteger o enriquecer sus vidas. La veneración de los antepasados es una parte fundamental del hoodoo, y el trabajo realizado se basa a menudo en prácticas históricas.

No hay barreras para el hoodoo. La gente puede utilizarlo para hacer daño y travesuras, pero sobre todo se utiliza para curar y proteger. El trabajo y los rituales están influenciados por ciertos materiales y talismanes para señalar las intenciones y necesidades de la persona que los realiza. El conocimiento de las hierbas y plantas y de los poderes que representan es esencial porque, cuando se combina con otros elementos mágicos, funciona en conjunto con ellos.

Los orígenes del término hoodoo son muy discutidos, pero se cree que se originó en el siglo XVII con la llegada de hombres y mujeres africanos esclavizados a América. Durante el periodo de la esclavitud en EE. UU., personas de múltiples grupos étnicos fueron arrojadas juntas para trabajar para sus amos blancos. Entre ellos se encontraban personas del Kongo, Akan y Ewe, entre otros muchos lugares. Estas personas trajeron consigo sus conocimientos y creencias indígenas que se fusionaron para convertirse en la práctica del hoodoo.

La medida en que los esclavos podían practicar su magia popular dependía de la tolerancia de sus propietarios, y algunas regiones la practicaban libremente mientras que otras se veían obligadas a llevarla a la clandestinidad. Un cúmulo de creencias y prácticas se convirtió en la base de esta magia, y el hoodoo se utilizaba para curar y proteger a los esclavos de sus amos y para traer la desgracia a los que los maltrataban.

¿Qué es el vudú?

La principal diferencia entre el hoodoo y el vudú es que el primero es una religión. Tiene prácticas específicas y los líderes religiosos deben someterse a algún tipo de ordenación. En el hoodoo, no existe esa formalidad, y todo el mundo es libre de realizar los ritos y trabajos de raíz que constituyen el aspecto mágico de la tradición.

El vudú tiene dos ramas distintas, conocidas como vudú haitiano y vudú de Luisiana o Nueva Orleans. Existen diferentes grafías de la palabra, incluyendo vodoun o vodou, y las dos ramas siguen influencias claramente diferentes.

El vodú haitiano es una religión africana que viajó desde la isla de Haití cuando los miembros de las tribus de esa zona fueron transportados a la esclavitud y desarrollaron vínculos para asegurarse de que podían depender unos de otros en esas horribles condiciones. Los espíritus Lwa se convirtieron en un punto de referencia al que todos los miembros acudían en busca de orientación. Entre ellos estaban el Gede Lwa, que representaba a los espíritus de los muertos, y el Petro Lwa, que encarnaba el espíritu ardiente del Congo. Los rituales y hechizos que realizaban incluían gris-gris y wanga mágico, y su lengua litúrgica era el creole.

El vodoun de Luisiana es claramente diferente. Se basa en una amalgama de prácticas religiosas con profundas raíces espirituales. Comparte muchas raíces con el hoodoo, pero no debe confundirse con esta práctica. Esta forma de vudú mezcla los espíritus Lwa del vudú tradicional haitiano con santos y simbolismos católicos. El lenguaje litúrgico utilizado por los practicantes era el inglés con una pizca de creole francés.

Ambas formas de vudú utilizaban vetas (símbolos religiosos) y otros símbolos pintados con adornos para decorar su entorno, utilizando harina de maíz y arena para dibujarlos en el suelo. Todos estos símbolos tienen un significado y están relacionados con los santos. Los seguidores podían dejar ofrendas a la familia Lwa y a los santos católicos relacionados en las fiestas señaladas. Estos velos se utilizan para crear un puente entre el mundo espiritual y el físico, y cuando se utilizan en los rituales, los participantes están invitando a los Lwa a tomar posesión de sus cuerpos para transportarlos.

Por desgracia, las representaciones estereotipadas y racistas de las prácticas vudú en el cine y la televisión han dado mala fama a estas dos prácticas. El uso de muñecos o marionetas vudú para dañar a la gente y el lanzamiento de hechizos para zombificar a las personas están lejos de la verdad. Satanás no desempeña ningún papel en el hoodoo ni en el vudú. No hay pactos con el diablo ni cabezas encogidas. El uso de muñecos mágicos para causar daño a la gente es una tradición de brujería europea.

El hoodoo es la magia popular del sur y se ocupa principalmente de curar y mejorar ciertos aspectos de la vida. Los polvos curativos y los baños mágicos se potencian con velas y lámparas para realizar los hechizos. Estos rituales suelen ir acompañados de oraciones y lecturas de la Biblia mientras se invoca a los espíritus de los santos católicos. Este tipo de petición es más personal y no implica imágenes ni rituales.

Los hoodoos conjuran a los médicos y a las madres espirituales a través de los tiempos

La mejor manera de mostrar cómo se ha practicado el hoodoo a través de los años es estudiar algunos de los ejemplos más famosos de médicos o madres espirituales de la historia.

Cada comunidad rural tenía un médico conjurador responsable de la curación y tenía un conocimiento ancestral de hierbas, raíces y huesos. Tenían una bolsa de trucos llena de una mezcla de elementos naturales y artificiales que podían influir en la salud, la riqueza y la prosperidad. También tenían el poder de castigar a las personas que perjudicaban a otras, en forma de enfermedad o mala suerte.

Los registros históricos indican que estos tipos de practicantes de hoodoo nacían con el don de los poderes espirituales y a menudo eran bendecidos con el don de la vista. Esto significaba que podían predecir el futuro y dar consejos sobre todos los aspectos de la vida. Varias personas