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UNIVERSIDAD DE SAN MARTIN DE PORRES
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIA POLITICA
ESCUELA DE POSTGRADO
DOCTORADO EN CIENCIAS PENALES:
DERECHO PENAL DEL ENEMIGO
INVESTIGACION REALIZADA POR LOS DOCTORANDOS:
Lorenzo Flores, Rossmery Elvira
Macuri Luna, Marfa Rosario
Mendoza Retamozo, Aissa Rosa
‘Mendoza Vasquez, Enrique
Navarro Martinez, Dante Guillermo
‘Sueno Chirinos, Zoila Marianela
DIRECTOR DE LA INVESTIGACION:
Prof. Dr. Julio F. Mazuelos Coello
Lima, Diciembre del 2006CAPITULO |
INTRODUCCION
Como tema de investigacién en nuestros estudios de Doctorado en Derecho,
los miembros de este grupo de manera coincidente elegimos el polémico tema:
"Derecho penal del enemigo’, atraidos por el debate e interesante discusion
que al respecto se ha suscitado hoy en dia entre sus defensores y detractores.
Gunther Jakobs, en una ponencia realizada en Berlin en el afio 1999, fue quien
impuls6 decisivamente la discusién haciendo referencia al denominado
“Derecho penal del enemigo’, el cual pretende ser una respuesta ante la ola
criminal que afecta la convivencia en sociedad y que se ha acrecentado a ralz
de la anomia y nihilismo reinante en los ltimos tiempos. No obstante esta onda
expansiva de un Derecho penal excepcional, es menester preguntamos sobre
la posible existencia de un Derecho penal del enemigo dentro del marco del
Estado de Derecho. Asimismo, cabe preguntarse {Quién hard la disquisicion
entre ENEMIGO y CIUDADANO? ¢Representa el Derecho penal del enemigo
una afectacién de las garantias y derechos consagrados en las Cartas
Constitucionales y Tratados Intemacionales de Derechos Humanos? o 2Es tal
vez el uitimo recurso con el que cuenta el Estado para posibilitar su
subsistencia y asi permitir la vida en sociedad? En definitiva, gTiene sentido y
utilidad, en nuestra realidad, intentar aplicar los criterios politico-criminales que
en las sociedades post-industriales se postulan frente a la actual crisis que se
deriva del fenémeno denominado “expansién del Derecho Penal’ (Derecho
penal del enemigo)?
Al abordar este tema resulta apasionante intentar dar respuesta a cada una de
las interrogantes planteadas, y verificar de una manera bastante proxima la
problematica sobre la busqueda de una eficiente lucha contra la criminalidad en
un pais como el nuestro.
Cabe sefialar que la inquietud que nos motiva al desarrollo del presente tema
se debe a dos primordiales razones, primero, porque se trata de un tema cuyoandlisis implica desde un inicio una toma de postura frente a la actuacién del
sistema de justicia penal, con el cual se puede o no estar de acuerdo; y
segundo, por ser un tema que ha sido poco trabajado en nuestro medio.
‘Ambos argumentos nos ha permitido darnos cuenta que estamos frente a un
tema viable para la realizacién de una profunda y objetiva investigacién; en la
que desde un principio nos comprometemos a realizar exhaustivo andlisis de
este nuevo modelo de Derecho penal, esperando con ello contribuir a la
formacién de opinion sobre el tema y de esta forma brindar un aporte a nuestra
legislacién, doctrina y jurisprudencia
Pues la historia reciente nos muestra que el problema de la criminalidad y la
delincuencia en nuestro pais se agudizé radicalmente en las décadas de los
afios ochenta y noventa, no esta lejos los dias en que /a actividad delictiva de
los grupos terroristas se perpetraba con gran intensidad incluso en la capital de!
Pert. Los medios de comunicacién, dia a dia, daban cuenta de cémo los
terroristas de Sendero Luminoso o del Movimiento Revolucionario Tupac
Amaru cometian graves atentados contra la vida, el patrimonio, la tranquilidad
publica y la seguridad del Estado.
Actualmente otro es el flagelo criminal que nos acecha, pero igualmente
repudiable y violento: como el asesinato de una mujer embarazada para
extraerle a su bebé, o el secuestro cada vez més frecuente de nifios y adultos,
el trafico de menores, el tréfico de drogas, las violaciones sexuales de
menotes, etc., todo lo cual ha contribuido a una sensacién generalizada de
inseguridad ciudadana, de temor, no sélo por la perpetracién de graves actos
criminales, sino también porque el Estado a través de sus drganos se ha
mostrado torpe e impotente, no teniendo una respuesta adecuada y oportuna
frente a dichos actos, lo que ha dado lugar a que la sociedad cuestione a las
instituciones del Estado, debido a que el mayor numero de tales actos
delictivos quedan impunes.
Es en este contexto, de sistematica violacién de los derechos individuales y
desprecio a la ley, que el Estado (poder legislativo y ejecutivo reaccionando
tardiamente), en su afan de conseguir la maxima eficacia en la prevencién y enel castigo de la actividad delictiva, ha introducido reformas sustanciales al
Codigo Penal, Codigo Procesal y Cédigo de Ejecucién Penal, reformas que se
caracterizan por establecer penas cada vez més elevadas, por penalizar la
puesta en peligro de determinados bienes juridicos y/o relativizar las garantias
Procesales; muestra clara de este endurecimiento es la legislacién
antiterrorista, y mas recientemente la Ley 28726, mediante la que se ha
incorporado en el Cédigo Penal las instituciones de la reincidencia y la
habitualidad; de igual forma en el caso del concurso ideal de delitos se faculta
el incremento de la pena més grave hasta en una cuarta parte, siempre que no
exceda los treinta y cinco arios de privacién de la libertad; de otro lado, se ha
modificado los requisitos para la imposicién del mandato de detencién, al
establecerse que se puede adopter dicha medida cuando ‘la sancién a
imponerse 0 la suma de ellas sea superior a un afio de pena privativa de
libertad o que existan elementos probatorios sobre la habitualidad de! agente al
delito; todo fo cual indica que. debido al fendmeno de violencia, se esté
transitando de una legislacién juridico - penal a una legislacién de lucha o
emergencia
De otro lado, para realizar una investigaci6n objetiva hemos visto necesario ir a
la fuente legislativa, es decir, efectuar una revision de las normas juridicas que
se han venido emitiendo a lo largo de estos ultimos quince afios en diversas
reas del Derecho: Penal, Procesal Penal y Ejecucién Penal; especialmente
respecto a los delitos de terrorismo, narcotrafico, criminalidad organizada,
secuestro, violacién sexual de menores, para demostrar si se encuentra
presente el derecho penal del enemigo en nuestro ordenamiento juridico.
No podemos negar la presencia intermitente en nuestro ordenamiento juridico
de leyes que presentan rasgos pertenecientes al “Derecho penal del enemigo’,
no debemos olvidar la derogada legislacién terrorista y los derogados decretos
legislativos Nros. 896 y 897, sobre delitos comunes agravados, y la actual
nueva ley sobre reincidencia y habitualidad, anteriormente mencionadas;
asimismo, no debemos olvidar que en algunos supuestos del delito de tréfico
ilicito de drogas como en los delitos de violacion sexual de menores, no existen
beneficios penitenciarios, asi, por ejemplo, en los siguientes supuestos: LeyNro. 27507, promulgada el 12 julio 2001; Ley Nro. 28704, promulgada el 13 de
marzo de 2006; y Ley Nro. 25916, promulgada el 28 de noviembre de 1992.
Ante la puesta en vigencia de! Cédigo Procesal Penal en parte del territorio de
la Republica (Distrito Judicial de Huaura), este cuerpo de leyes serd también
parte de la legislacién a analizar en el presente trabajo, principalmente el
andlisis recaera en la verificacién de si el paso de un sistema inquisitive a un
sistema acusatorio supera los rasgos de! contenido de un Derecho penal del
enemigo.
Otro de nuestros objetivos es determinar si la sobrecriminalizacion de las
conductas delictuosas y el aumento de las penas han logrado o estan logrando
el resultado esperado por nuestra sociedad, es decir, Se ha controlado la ola
criminal?, ,Existen menos delincuentes cada dia? .EI Estado cumple su rol de
control necesario para detener a la delincuencia? ¢Se puede decir que vivimos
en una sociedad segura?
Finalmente, hemos visto por conveniente cuestionar la legitimidad de las
normas que tendrian rasgos del Derecho penal del enemigo, esto es, si se trata
de normas que pueden convivir dentro de nuestro ordenamiento sin mayor
problema, o si dichas normas deben ser denunciadas para que sean
expulsadas de nuestro ordenamiento legal.CAPITULO II
ANTECEDENTES HISTORICO- FILOSOFICOS DEL DERECHO PENAL DEL
ENEMIGO
1. SANTO TOMAS DE AQUINO (1225-1274)
Santo Tomas de Aquino, en su obra La Summa teolégica', sostiene que “todo
poder correctivo y sancionario proviene de Dios, quien /o delega a la sociedad
de hombres; por lo cual el poder pubblico estd facultado como representante
divino, para imponer toda clase de sanciones juridicas debidamente instituidas
con el objeto de defender la salud de la sociedad. De la misma manera que es
conveniente y licito amputar un miembro putrefacto para salvar la salud del
resto del cuerpo, de la misma manera lo es también eliminar al criminal
pervertido mediante la pena de muerte para salvar al resto de la sociedad”
La idea defensista aparece meridiana en un texto de Santo Tomas, quien
afirma que no es licito encarcelar a un hombre, “a no ser que se haga por
orden de la justicia, sea como castigo o para evitar que el reo cometa otros
dafios”.
Se evidencia en fa doctrina expuesta por Tomas de Aquino, que la realizacion
de la justicia puede llegar en determinados casos a la exclusién del delincuente
de la sociedad, a fin de preservar la integridad de los demas miembros. Lo cual
permite acercar este pensamiento con la descripcion actual de! Derecho penal
del enemigo.
* Aquino, Santo Tomas de: Summa teofdgica, Cuestion 64 de la Segunda pars; Editorial Catslica, Madrid,
1978, 1 I, p. 448 y 449,
* Aquino, Santo Tomés de: Trarado de la justicia, 2 ed., trad. de Carlos Ignacio Gonzalez, México,
Porsia, 1981, p. 180.Jakobs expone, en lineas generales, una diferencia conceptual entre ciudadano
e individuo, otorgando esta ultima categoria a ciertos delincuentes
considerados enemigo sociales, "que es interceptado muy pronto en el estado
previo y al que se le combate por su peligrosidad’ °, a diferencia del trato al
ciudadano, en el que se espera “hasta que éste exterioriza su hecho para
reaccionar™; por tanto, en el caso del individuo no hace falta esperar la
manifestacién del hecho para intervenir penalmente, sino que es posible la
intervencién sobre el delincuente para evitar futuros dafios.
En este sentido, el concepto de peligrosidad expuesto por Jakobs se asemeja
al pensamiento defensista de Tomés de Aquino, esto es, que para evitar que el
reo 0 “enemigo” cometa otros dafios, es licito recluirlo, por ello Jakobs
considera que “el lugar del dafio actual a la vigencia de la norma es ocupado
por el peligro de dafios futuros: una regulacién propia del derecho penal del
enemigo”. Siempre bajo el mismo pensamiento defensista se procede,
igualmente, a una generalizacién e incremento sustancial de las penas de
prisién; se restringe al maximo la obtencién de beneficios penitenciarios, para
prevenir una reduccién de su duracién 0 un aligeramiento del régimen de
cumplimientor
Toms de Aquino afirma, asimismo, en la Summa Teolégica Parte |, cuestion
65, que "a ninguna cosa se le niega una dignidad que le corresponde por
naturaleza, como no sea por su culpa". Muestra que el don natural de la
dignidad humana puede perderse de manera culpable y deliberada. Pero
mucho més claros son otros textos como los siguientes: “el hombre pecando
desciende en la dignidad de su naturaleza”, "el hombre por el pecado decae de
la dignidad de ta razén, y el que obra contra razon se compara a los seres,
* takobs, Gunther y Cancio Melia, Manuel, Derecho penal del enemigo, Universidad Externado de
Colombia, Centro de Investigaciones en Filosofia y Derecho, Coleccién de Estudios Nro. 35, Bogoti,
2005, p. 31
"Loe. ft
3 Jakobs, Gunther y Cancio Melia, Manuel, Derecho penal del enemigo, p. 36
* Diez Ripollés, José Luts, “De la Sociedad del riesgo a la seguridad ciudadana: un debate desenfocado”,
cn Revisia Electronica de Ciencia Penal y Criminologia, hep: criminet.ugr.esireepc, p. 01.23.irracionales”; "(el hombre) cuando se aleja de la dignidad humana es tratado
‘como un animal irracional”
‘Aqui, encontramos presente de modo explicito como para Tomés de Aquino la
dignidad humana, que naturalmente se posee como una disposicién a obrar de
acuerdo con la raz6n, puede perderse obrando contra la razon. E! pecador es
/ malvado que se niega a interpretar correctamente, a pesar de las evidencias.
No es simplemente que no pueda ver, si no es que no quiere ver. Su
comportamiento se equipara al del animal, pues se mueve por un apetitivo
sensorial instintivo, empero a diferencia de éste su voluntad esta dirigida a un
fin, que es precisamente hacer el mal.
Como veremos posteriormente, el Derecho penal del enemigo asume la
posicién de que el enemigo es el malvado que actua contra el orden
establecido, a quien por esta condicién se debe exterminar, pues su accionar
esta di
como un animal, habiendo "perdido su estatus de persona”.
ido conscientemente a realizar el mal, comportandose instintivamente
2. THOMAS HOBBES (1588 a 1679)
La doctrina que se ocupa del ‘derecho penal del enemigo" toma a Hobbes
como uno de sus precursores. Hobbes sostuvo: que cada hombre en el estado
de naturaleza debia ser el Unico juez de los medios necesarios para su propia
conservacién, por lo que en este estado “cada quien tenia derecho a todo”, era
una “guerra de todos contra todos"'’.
pero nadie estaba seguro en ese estado
de naturaleza, por lo que para asegurar su propia conservacion el hombre
debia buscar la paz y defenderse contra aquellos que no se la brindaban; para
ello cada quien debia estar dispuesto a prescindir de su derecho a todas las,
cosas, cuando los demas también estuvieran dispuestos a hacerlo, debiendo
7 En Garcia Cuadrado, José Angel: “Acerca de la dignidad del Hombre”, Facultad Eclesidstica de
Filosofia, Universidad de Navarra, en www, 155.210.60.15/SOFIME/carpetas/cuadrado.
* Jakobs, Gunther y Cancio Melié, Manuel, ob. cit. p. 34
* Hobbes, Thomas, Leviaidn /, Edici6a Sarpe, Fondo de Cultura Econémica, México, 1983, p. 153,
" Hobbes, Thomas, Leviatdn J, ob. ci. p. 139,conformarse con tanta libertad contra los demas como él permitiera a los
demas en contra de si mismo; esta mutua cesién de derecho se lograba con el
acto social. Este pacto de unién hobbesiano es uno de sumisién en el que los
contratantes son individuos singulares vinculados entre si que se comprometen
reciprocamente ante un tercero no contratante. Advirtiendo que todo aquél que
no participe en el pacto permanece en estado de guerra y, por tanto, eran
enemigos de los demas’. No obstante, se consideraba que todo aquél que
vivia en una Republica aceptando la proteccién del gobierno, del soberano,
tacitamente entraba en el pacto. Mediante ese pacto los subditos se
comprometian a cumplir las leyes civiles dictadas por el soberano, por el temor
a que los castigos a imponérseles eran peores a la conducta quebrantada; sin
embargo, dicho pacto social sélo los obligaba cuando alcanzaba el fin por el
cual se habia suscrito, cual era la deseada seguridad, que debia ser la ley
‘suprema’?.
Jakobs encuentra en el pensamiento de Hobbes que para éste “no es el
contrato el que fundamenta las obligaciones, sino el hecho a él vinculado o
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previo a é! del sometimiento, que es irreversible". Entonces la fuente del
orden estatal no es el contrato fundacional, sino el aparato coactivo que se
enouentra inserto en ese orden legal
Este sometimiento a la institucionalidad permite alcanzar la ansiada seguridad,
Hobbes sefiala que el perdén es una garantia de paz'*; sin embargo, dicho
perd6n no podia ser concedido a los enemigos'”.
"' Bers, Laurence, “Thomas Hobbes”, en Leo Strauss y Joseph Cropsey (Edits.), Historta de la Teoria
Politica, Fondo de Cultura Evonémica, México, 1996, p. 386 (Nota: ver, Leviatdn, Cp. XVI, p. 184 “Si
{a mayoria ha proclamado un soberano mediante votos concordes, quien disiente debe ahora consentir con
el resto, es decir avenirse a reconocer todos los actos que realice o bien a exponerse a ser eliminado por el
resto”)
Al respecto, véase los comentarios de Berns, Laurence, “Thomas Hobbes”, ob. cit, p. 382 y 54 y
Robbio, Norberto, “La Teorfa Politica de Hobbes” en Thomas Hobbes, Fondo de Cultura Economica,
México, 1993, p. 48.y s
" Jakobs. Glinther, Sobre fa génesis de la obligacién juridica, traduccién de Manuel Cancio Melié,
Universidad Externado de Colombia, Centro de Investigaciones de Derecho Penal y Filosofia. del
Derecho, Bogota, 1999, p. 25.
Hobbes, Thomas, Leviatin I, ob. cit, p. 161
‘5 Gracia Martin, Luis, “Consideraciones Criticas sobre el Actualmente Denominado “Derecho penal del
enemigo”, en Revisia Electrénica de Ciencia Penal y Criminologia, httpil! eriminet.ugr esirecpe, p. 17
(conclusion a fa que llega Gracia Martin de Ia Sexta Ley de Naturaleza de Hobbes en el Levietin, Cép.
XY, p. 161).