El psiclogo americano defiende en su publicacin que el xito de una persona no viene
determinado nicamente por su coeficiente intelectual o por sus estudios acadmicos
, sino que entra en juego el conocimiento emocional. Cuando hablamos de intelige ncia emocional, hablamos de la capacidad del individuo para identificar su propi o estado emocional y gestionarlo de forma adecuada. Esta habilidad repercute de forma muy positiva sobre las personas que la poseen, pues les permite entender y controlar sus impulsos, facilitando las relaciones comunicativas con los dems.