Sie sind auf Seite 1von 1

el paradero me desata una nueva alternativa

me ensea que la muerte est en todas las esquinas, que no sirve de nada
esconderse, sino
salir a su encuentro fortuito. Tendr que viajar si es necesario, para conocerla,
para saber su rutina diaria
y encontrarle as, sentido a la ma.
Me agobiaban los encierros impermanentes, la repeticin de los colores, el
dilogo consensuado y el aburrimiento gratuito. Ms bien, yo prefera
cambiarme de piel si era necesario-, y dejar de ser el animal que soy. Partir
hacia el descenso de los sueos, en donde el nico escape es el despertar
bruscamente y el olor a cigarro mojado.
Ya haban sido varias las veces en que me dorma siendo no s que bicho y me
converta lentamente en la ilusin que nunca pude aceptar.. largos dientes,
piernas que desaparecan, alas espinosas que chocaban con el colchn y no lo
dejaban descansar, y a lo lejos el mar, y a lo cerca el cielo, y a lo lejos lo blanco
y a lo cerca, lo negro.
Y ni una pincelada del dolor poda completar el cuadro que so aquella noche.
Me obligaron a despertar un par de veces : parece que me estaba haciendo
adicto a esas inyecciones, que segn ellos eran letales, yo les explicaba que
uno no slo se baa sino que se sumerge completamente para entender el
sonido de las ballenas lamentndose.
Pronto, entregara mi fuego a la injusticia. El tiempo pasaba y mi ansiedad se
difuminaba, como para hacerse ms aceptable al estilo que dominaba en el
lienzo. Qu me esperaba debajo de las nubes que se lleva el viento? Hacia
dnde va seor taxista? Cunto ms durar el fuego de la vela que me
mantiene escribiendo y viviendo? No haba ms razones para seguir entre
cuatro estaciones, no haba.

Das könnte Ihnen auch gefallen