Sie sind auf Seite 1von 118
BENSON MATES LOGICA DE LOS ESTOICOS Los derechos para la versién castelana de la obra Sioic Lone publiesda por University of Califorma Pres, Berkeley y Low Rinmeies (USA) © University of California Pres, 1973, 50m propiedad de Edhioral Tecnos, S.A “Traduecin: Miguel Garcia Rar Cubiera: J. M, Dominguer y J. Séneher Cuene Impresion de cubierta: Grificas Molina Reservados todos fn derechos. Ni a oalidad mi parte de ete Bote pucve seproducitse transriise por singin proce re eGecbkice 0 mecanco, mcuyendo fO1copi. Rab n'magnctiea © catguier almacenamento. de snformaciba Sducma de recuperaaon, sin perms certo de Fiera rete 8.8 © EDITORIAL TECNOS, 5.4. 1985 007 Mit Deponito Legals M- 12858 (988 ‘spat pur GAMA. S.A. Printed in Spain. tmprse Praca, (7 = 28037 Madrid INDICE, PREFAcio ooo le 1. INTRODUCCION : Resume 1 probieia 2 ures estoicos que hay que sonsiderar 3. Fuentes de la lope estoics U,| SIGNOS, SENTIDO ¥ DENGTACION “Resumen! pavers Th "Exposiciin dl icovia esosca 2 Comparacion-con teoras madras ul, PROPOSICIONES, VERDAD Y NECESIDAD Resumen _ [ Proporiciones 2 Verda 3. Necesiad y posblidad Ly, CONECTIVAS PROPOSICIONALES Resumen “ 1 mplicacion eeeteavin 2 Danan - {La conjuncion el resto de concetivas higias 4. Ta imerdefinbildad de las conectivas Vv. ARGUMENTOS ..-- se Resumen. Bet y lsticacn ‘ined fipos basis Je arguments indcmos wade El principio de condiionalzacion | tnaliss de los aryumentos no simples Angumentes 9 valdos. Paradojas Vi. ESTIMACIONES DE LA'LOGICA ESTOICA Resumen i Z 1 Los jucios de Bran y Zeller 2 Lx confesiin en tomo a eumudoon 2 Conchsian Avexbice A raduceiones) ‘Arenoace i (glosaro) Binviooearia Tnoices, bed PREFACIO En los ocho aos que hace que este libro se publicé por primera vez, varios erusitos han llevado a cabo importantes contribuciones al tema. Merecen notarse sobre todo las siguientes: Sexto Empirico, Opera. Ed. H. Mutschmann, con cnmiendas, adiciones y correceiones del Dr. Jurgen Mau, Leipzig, Teubner, 1954 (vol. 3) y 1958 (vol. 1) Esta nueva edicion del Sexio de Teubner es un enorme progreso. Proporciona un texto completa mente fable, que, junto con los indices completos aportados al tercer volumen por el Dr. Karl Janiéck, facilitara. grandemente todos los trabajos futuros sobre el tema Galeno, Einfithrung in die Logik. Comentario critico_y’exegetico, con traduccion alemana, por el Dr. Jtingen Mat, Deutsche Akademie der Wissen- schaften 2u Berlin, Berlin, Akademie-Verlag, 1960 E] Dr. Mau presenta aqui un estudio definitive de la Introduccion a la Légica de Galeno. Becker, Oskar, «Ueber die vier Themata der stoischen’ Logik», en: Zwei Untersuchungen zur antiken Logik. Wiesbaden, Otto Harrassowitz, 1957 E] profesor Becker ha tenido un éxito notable en su intento de hacer una reconstruccién plausible de! perdido *Cuarto Tema’ de los estoicos (cf. pp. 132 ¥ ss., mas adelante). Su ensayo arroja también luz sobre los otros Temas, Bochetiski, 1. M., Formale Logik. Freiburg/Miin- chen, Karl Alber, 1956. Este libro de consulta es tuna importante contribucidn a la historia de la 1o- ica, y especialmente a la historia de In lgica antigua. Es indispensable para el lector que desee 9 comprender la logica estoica en rel desarrollos que la precedieron y con los que la prior, A. N., «Diodorean Modalities», en: Philo- sophical Quarterly, vol. 5 (1955), pp. 205-213. En este interesante estudio del llamado argumento «So- berano» (ef. pp. 71 y ss.. mas adelante), el profesor Prior investiga las propiedades logicas de la impli cacién diodériea. Cf. tambien, del mismo autor, Time and Modality, Oxford, Clarendon Press, 1957, passin; y «Diodorus and Modal Logic», en: Philo ‘Sophical Quarterly, vol. 8 (1958). pp. 226-230. Casari, Ettore, Sulla disgiunzione nella logica megarico-stoica», Proceedings of the &th Internatio nal Congress for the History of Science, paginas 1217-1224. El Dr. Casari muestra la importancia de las conectivas no veritativo-funcionales en la logica estoica, ‘Quiz’ no es superfluo semtalar que, si escribiera este libro de nuevo, el principal cambio que intro~ Uuciria seria alenuar w omitir por completo las ct cas a otfos autores. Pastas criticas me chocan ahora por curiosamente desabridas y exageradas, y es especialmente irdnica su presencia en una obra que trata de subrayar los valores de la investigacion objetiva Estoy en deuda de gratitud con el profesor Harold Cherniss, sin cuya ayuda me habria sido totalmente imposible emprender este estudio, y con el profesor 1.-Mz Bochetiski, por sus amables consejos y su aliento, BENSON Mates 12 de mareo de 1961 CAPITULO 1 INTRODUCCION RESUMEN El objetivo de este estudio es presentar una des- cripcién fiel de la ligica de la Stoa Antigua. Repite la mayor parte de las conclusiones de Lukasiewicz sobre este tema que han sido publicadas, y ofrece pruebas adicionales en favor de elas. Ademas: 1) describe la teoria semantica de los estoicos y la compara con ciertas teorias modernas_ similares: 2) intenta resefiar mejor Ia hasta ahora mal enten- ida implicacion diodérica; 3) sefala la version ‘estoica del principio de condicionalizacién; y 4) dis- ‘cute la opinion de los estoicos, sein a cual su logic. proposicional era completa. En apéndices, ofrece y justifica nuevas traducciones de algunos importantes fragmentos referentes a la légica es- toica. Los autores estoicos por cuya obra nos interesa- ‘mos especialmente son Zenén, Cleantes y Crisipo. Estuvieron en estrecha relacién con ellos Diodoro Crono y Filén, de la escuela megirica. Puesto que los escritos de’ estos-hombres-se-han perdido, y ya ‘que nuestras fuentes, por-lo-comiin, no-distinguen entre las opiniones de los diversos estoicos, nos vemos obligados a tratar toda la Stoa Antigua como tuna unidad. Naturalmente, esto erea muchas dificul- tades. Nuestras mejores fuentes son Sexto Empirico y_ Diocles de Magnesia (apud Diogenes Laercio). ‘Tambien extraemos fragmentos de informacién de n Cicerén, Gelio, Galeno, Boecio, Apuleyo, Alejandro de Afrodisia, Simplicio, Filopén, Origenes, Proclo, Estobeo, Epicteto, Séneca y unos pocos mas. De ést0s, slo Epicteto y Seneca estaban favorable- mente dispuestos por lo que hace al estoicismo, pero restringieron desgraciadamente su atencién casi por completo a la ética. Asi, pues, es extra- ordinario que los fragmentos de la logica estoica, {ransmitidos por manos no amistosas, sean tan cla ros y consistentes como son EL PROBLEMA Durante més de dos mil afos, la logic de Aris- tételes predomind tan completamente, que en 1787 pudo decir Immanuel Kant: «lo curioso de la logica es que tampoco haya sido capaz, hasta hoy, de favanzar un solo paso. Segiin todas las apariencias se halla, pues, definitivamente concluida»', Pero Cincuenta afios después de que se escribieran las palabras de Kant comenzé un proceso que, con el tiempo, consiguié transformar la logica en una dis- ciplina ‘tan exacta y adecuada como cualquier parte de la matematica, Se han dado tantos pasos adelan- te, que es probable que el estudiante de logica de hoy en dia solo encuentre a Aristoteles mencionado en las notas historicas a pie de pagina de su texto. El periodo de la hegemonia aristotélica en la bi- gica habria podido terminar antes, si ciertos textos Jntiguos hubieran sido mas cuidadosamente estu- diados, Hace unos cincuenta afios, C. S. Peirce ‘observo que los antiguos habian tenido noticia de la relacion que ahora se lama «implicacion material» ¥ que incluso habian discutido ampliamente sobre 7 Critica de la Razin Puro, VIM (ead. Pedro Ribas; Madrid Alara, 1978), 2 ella?. Por lo que yo sé, ni Peirce ni ningin otro rastrearon més alld el asunto hasta 1927, fecha en Que el eminente Iogico polaco Lukasiewiez senalé que no sélo la implicacién material, sino también Muchos otros conceptos y métodos importantes de la légica modema habian sido anticipadas en los, escritos de los primeros estoicos?, mostré que la logica estoica habia diferido esencial- | mente de la légica aristotélica, con la que luego fue confundida. La diferencia estriba ante todo en dos circunstancias: {) la logica estoica fue una logica de proposiciones, en tanto que la logica aristotélica fue una légica de clases4; 2) la Idgica estoica fue 7 Collected Papers. Vi. vo tp. 198: vl lwp. 29.28, Para Tos estos mis mportates de takasice sobre la logy he vn S°Al caracterizar la lipca enone como ana gia de propo siciones Ta lice arstoctica como ona logea de clases, ue femos Ucir que tw valves. ls yarible que-apresen en {ns formulas estoxan son prupasinones ls sstiutos son eau Siados), micriras gic Jor valores delay varblesaibiteiess Som clases m vacas (os sustimas som os teminos gue cores Fonden a esa eases). Los estoicos usaban como varaes Bi feria tang Acie ym cnr ean tas (Apuleyo, in De Inter. ede Ou 279; prec. Gale. Ina Log, 1) Bleue Geren Bee Sood Hand ‘priner® indemostads 6 co ie Silo primero, entonces lo segundo, Lo paimero [Cuego To segundo. ‘Como eiemplo conereto de este tipo de infrencia solian poner: Si es de dia, entonces hay luz Es de dia ego hay tz chars eee etal aaa es iio ele vi aaa? i ins Cetin en at tors Gia ea cere B luna teoria de esquemas de inferencia, mientras que ferasy Lukasiewicz mostro tam- Be que Mic caiocabian asede etncions we ritativo-funcionales para todas las conectivay propo- sicionales comunes. Llamo ademas la atencion sobre el hecho de que los estoicos distinguian claramente los argumentos, de las proposiciones condicionales correspondientes; y.—esto es lo mas importante de todo— sobre que los estoicos tenian_una_especie de célculo de esquemas-de-inferencia: establecian como validos sin prueha_cince esquemas de inje- rencia y derivaban de ellos, rigurosamente, ots ‘esquemas validos. Comparando tales hechos con las Caracterizaciones extremadamente adversas € ine- ‘mento de Ammonio (vid. Ammonio, In An. Pr. p88, lines 28) mento realizar semejante sustineiba.obtuvo To siguiente Si hombre, entonces animal Pero lo primer, [igo To semundo, gue, al parecer, e pretende que represents» um inerencia ara todo x, six es un hombre. entonces + es un animal ero aes un homie: Lege aes un animal ‘Alora ben, eta especie nrg ive fananentainene icada el eemipla stoic. SRE dae vette covies don varies eo posicionales deberia ser cisipala por los Aoyoriraex mencioas flos por Diogenes y Sexo: Si Platén vive, entonces Plata respia Lo primero. Loego To segundo, Sil sudor Muye a través de la sperfcie, entonces i pe tiene poros intcligbes Lo primero Kego o Seguado.. (Dios, L.. Viuge VIL, 77; Sexto, Ade, Math, VII, 38. CE Sexo, Hyp: Pyerh. It 120) “ xactas que hacian de la ldgica estoica Prantl, Zeller Y ottos autores «al uso», y al observar que se daba luna situacion semejante por lo que hacia a la lbgica medieval. Lukasiewicz, comprensiblemente, leg la conclusion de que li historia de-la logica debia ser reescrita, El presente libro inte ‘dedigna de la logica estoica, Lo que se propone es; “DUES, silo una pequefia parte del programa sugerido por Lukasiewicz. Repite, con unas pocas excepcio- nes de reducida importancia, las conclusiones de este autor publicadas, y las apoya con nuevas pruc- bas. Aflade cuatro puntos que pasamos a resumir 1) _En su teoria semantica los estoicos emplearon una distincion muy semejante a las distinciones de i avoid pices. Si A.mecenes aio 8 » CADET Stone c pete ee ata da Si Ste mii, ese ons so ‘tamos como condiciones, pero Tos peapaeas on slan eX fener como ress. Veme Hache: De Conegsenia p. 7 Enkawewce aio Sflyine pF) Ueno cor setae ete logo ser Si animal pertenece «todos Jos cuerpos y sustancias a todos Tox unitales, enionces sistancit pertenese 1 todos los caer siJo ante nesesta commas apropi: ‘heuer caso, ODMO QUE el resultado de sus Tas variables por Gmina en un ‘ismo anstorelico carecera sempre de en Eukasiewiee («Zur Gesehichie der Aussagenlogiks, p. 113) sefialo a rave confusion qe es evidente en a trabiceion de Branil(Geschichie der Log vol Iv p- 439) del primer esquema estoice Silo primero es, emonces es lo segundo Pero b primero es. Logo's fo sewurdo. AR. D. Hicks, en td traduccion de Diigenes) de la coleccidn [Loeb vol Il p89, Comets st misibo error.) Siniicativamente, _b0.3¢ halla ninguna Correspondensia dela palabra es en et Texto ‘que Prat iraduc, Ch p. 122. nota 53 Is a Se | Frege y de Camap entre, respectivamente, sentido y denotacién. e intensién y extensién. La légica estot- ca es una idgica de. proposiciones, y_no de enun- Be ‘Aunque son bastante bien conocidas las lineas gefierales de la/controversia estoica sobre ta5-comigi: iciones de verdad de las proposiciones] «si ces, Clertas importantes posiciones.que intervinie- ton en la disputa han sido ampliamente didas. En particular, se ha supuesto mente que la llamada simplicacion diodorica» era una versién antigua de la implicacién estricta. El presente estudio ofrece una caracterizacion mas fiel de la opinién de Diodoro respecto de los condicio- rales y muestra como se halla en estrecha conexién con los puntos de vista de este fildsofo, bastante insélitos, sobre la necesidad y la posibilidad. Procu- ra también informar con mas precision de lt posi in de Crisipo en la controversia indicando que su tipo de implicacidn era probablemente lo que ahora se,gonace como simplasin esrictar. Uno de los principios estoicos resefiados por Litas es Canney Mine Wester ea mas de gran importancia, Este principio es: un argu- mento es valido, si y sdlo si la proposicién condi- ional cuyo antecedente es la conjuncion de Tas pre= misas_y cuyo consecuente.es la conclusién es 16gi- |camenie verdadera. La semejanza de este principio ‘con el llamado «principio de condicionalizacion» y con el «teorema de deduccién> es obvia pero, con todo, interesante. 4," Los estoicos sostuvieron que su sistema de logica proposicional era completo, en el sentido de que todo argumento valido podia ser reducido a u serie de argumentos de cinco tipos basicos. Incluso, el método de reduccion no se relego a la vaguedad, sino que fue caracterizado con precision por medio de cuatro metarreglas, de las cuales poseemos dos 6 ©, quizi, tres. Si el sistema estoico era en verdad completo o no, es cosa que solo se podria decidir con la ayuda de las reglas perdidas. Se afiaden dos apéndices. El Apéndice A traducciones nuevas de varios de los Tragmentos ‘mis importantes relativos a la logica estoica. Solo s¢ incluyen aquellos fragmentos que no habian sido ain adecuadamente traducidos al inglés; de acuerdo ‘con esta regla, sin embargo, estin includes casi todos los fragmentos de mayor importancia. En las notas a pie de pagina a estas traducciones se en- contraran varias propuestas para reconstruir partes de los textos de Sexto y Diogenes. El Apéndice B consiste en un glosario de términos técnicas de la ligica estoica. No pretende ante todo ser un diccio- nario, sino mis bien un aparato oportuno para su- ministrar pruebas de la correccion de la version de 10s diversos términos que contienc. 2. AUTORES ESTOICOS QUE HAY QUE CONSIDERAR Se dice que Zenon, el fundador de la escuela filoséfica estoica, recibid sobre todo la influencia de dos escuelas socriticas: los cinicos y los megiri- cos’, Se suele decir que tomé de los cinicos. su doctrina moral, y de los megairicos, su lgica. Dado nuestro presente tema, omitiremos toda discusion sobre los cinicos y dedicaremos nuestra atencion a los megaricos. La escuela megirica-fue-fundada-por-Buclides, seguidor-de Sécrates y contemporaneo de Platén, ® Estoy en deus, por lo que hace a as siguientes informa cones, con Zeller, Die Philosophie der Griechen, vol 2, pate pp. 24485. 9 vol. 3. parte I, pp. 2749: y con. W. Smith, Dievionary of Greck and Roman Biography and Mythology (Bos ton, Lite, Browa, 189), 3 vols 7 eens NN aaa Nn i de alguna mas edad que éste. (Vid. fig. I.) Entre los discipulos de Euchdes se contaron: Eubilides, un Idgico célebre a quien se atribuye a veces la antinomia del mentiroso; Ictias, el sucesor de Eucli- des en la direccion de la escuela; y Trasimaco de Corinto, que es conocido ante todo como el maestro de Estiipon. Estlpon, contemporineo de’ Aristo- teles, g0z6 de una gran reputacion como profesor. Euclides ae cee eo cee alee ete | x tea | cleantes \ | \ pen Se supone que_fue_algo_influido por los_cinicas. Su_discipulo-més famoso fue Zenon, fundador del estoicismo. Otra importante rama de la escuela megarica esta constituida por Eubiilides, Apolonio Crono, Diodoro Crono y Filén, en este orden. Los dos tiltimos tienen mucha importancia para la légica ‘estoica, prineipalmente por sus opiniones acerea de las condiciones de verdad de los condicionales, 18 Diodoro, que nacié en laso de Caria, vivi6 en la corte de Alejandria durante el reinado de Ptolomeo Soter. Su sobrenombre 0 mote, «Crono» («viejo tonto»), se explica de diversos modos. Sein un felato, Se lo puso Ptolomeo a causa de su incapa- Cidad para resolver un problema de I6gica propuesto por Estilpon en un banguete real. Hasta se dice ‘que Diodoro tomé tan a pecho su fracaso, que re- gresé a su casa, escribié un tratado sobre el tema Y murio desesperado, Segin otra informacion, Dio- ‘doro tomé su sobrenombre de su maestro, Apolonio Crono. En cualquier caso, Diodoro no fue conside- rado en la Antigtiedad, ciertamente, como un viejo tonto. Al contrario, fue tan celebrado por su des- treza dialéctica, que se le Mamé el logico» y sel maximo Wgico~ (Stadexrexsiraos). Este epiteto fue convirtiéndose poco a poco en un apellido, y se aplicé incluso a las cinco hijas de Diodoro, que fueron también Iogicas famosas. Casi nada se sabe de la filosofia de Diodoro, fuera de dos importantes definiciones (y de ejemplos que las ilustran): 1) una proposicidn es posible, si y solo et serine ose jena Phun proposicion condicional es verdadera, fue posible que el antecedente sea (nj fiers) verdadero y el consecuente sea (ni fuera) falso, Se sabe que Construyé el famoso argumento, «Soberano» (6 vpteiany) para justificar su definicién de Pilopen como fuentes de informaicic sobre lr Kgicauntgua en Bochefshi, La Logique de Théophrasie, ap. 25 la logica, tanto mis corrupto va estando el texto. Debido a la terminologia técnica y a los insélitos enunciados con que los estoicos ilustraban a veces Sus cuestiones, se deja comprender el origen de estas dificultades textual. Pero. las difettades subsisten. Esto es especialmente sensible en la Ins titutio Logica de Galeno, en que, en ocasiones, se Pierde el hilo del argumento. A la vista de todas estas dificultades, el lector quiza se pregunte si hay testimonios bastantes como Para justificar el intento de ofrecer una resena com. Pleta sobre la logica estoica. Puede contestar por Si mismo a esta pregunta leyendo los capitulos que siguen y, si estd interesado en ello, cotejando ka exposicion con los pasajes estoicos que se citan, Encontrara que no se ha hecho nada por ocultar ‘© minimizar pruebas en contra de las distintas tesis Propuestas. El precio exigido por este proceder es que la descripeién no es siempre tan sencilla y clara como uno desearia. CAPITULO IL SIGNOS, SENTIDO Y DENOTACION RESUMEN El capitulo se divide en dos secciones. La primera da cuenta de la distincién estoica entre el signo, el significado (llamado el Iektdn) y el objeto fisico al que se refiere el sign. Se describen detallada- mente varios tipos de signos y sus correspondientes lektd*. En la segunda seccién se compara la teoria esloica con las teorias modemas de Frege y de Camap y se muestra que aquélla se parece notable- mente a éstas, sobre todo por lo que respecta a lo que llama Carnap la «intensidn» de las expresiones lingiisticas. También se indican numerosas deseme- Janzas, las mas importantes de las cuales son: 1) los estoicos resiringieron la denotacién de las expresio- nes a cuerpas; 2) los estoicas no consideraron los valores de verdad como denotaciones de los enun- ciados. 1. EXPOSICION DE LA TEORIA ESTOICA Segtin los estoicos, hay tres cosas en_conexién:| 1) el significante © signo, 2) el significado y.3}.to * Lekiom y leled son las transcripciones de las formas newtras os leks pate Wado Tos e450 yl y plural, respectivamente. (N. del T.) 2a ue existe! El significante es el sonido, por ejem Dlot-el sonido Dione, Lo que existe 28-0 obit ue existe extemamente, que en el ejemplo seria Dion mismo?, Estas dos cosas —el sonido y lo. que existe— son cuerpos u objetos fisicos. El tercer fac tor, en cambio, no.es un cuerpo. Es descrito como vel ente? mismo indicado o revelado por el sonido ue aprehendemos como subsistiendo junto. con [o sea, en] nuestro pensamiento>‘. Es lo que los barbaros no entienden cuando oyen pronunciar pala bras griegas‘. El término técnico estoico para cllo ©5_hexrov,. que raducido Iteralmente ‘como «lo que esta significado o mentado> "Estos tres factores se distinguen también en un eae eee Supongamos, dice, que Veo andar a Caton. FI sentido de la vista me lo manifiesta y mi mente lo cree. Lo que veo, eso alo que dirijo mis ojos y mi mente, es un cuerpo. Pero cuando digo «Catén anda» (el sonido), 1o que miento (el lektén) no es un cuerpo, sino mis bien Cierta afirmacién acerea de un cuerpo. Algunos Io " Sexio, Adv. Math, VIL liso mis rp Yrs ra nares irugepee aspen, 70.76 Orpaurjtior nad To por mek raion EE iy 5 a, 1 als Ba Spm porn nau eens am ea eo me Sa es es werd ag ol pa ah cue Ns “i geg ares ¢ En la terminologinestoica,Aéyew se iting de mperair ‘ean. Aye era emir un son signin el pense (Ade. Afath, VIM. 80), EV sentido Je mponrnirree se Wists ‘Como en este pusaje: & yay: heya Miy nati heyee jc ate twiro, Mi ehedys, mpauraces Se yo) sherrew (Phitarco, De ‘Stoic, Repugnes Cap. pe 10874), Cf, sin embargo, Steithal, Geschichte der Spracksitsenschaft, vo. I. pr 298+ acerca de la abierencia entre Aéyewy padepect ep. N71 28 Glee llaman tiene dos sentidos, uno comin y otro especial. En su uso comin, Ia palabra se Tefiere a cualquier cosa que, por decirlo asi, sirve para «revelar> otra que ha sido antes observada en onexién con la primera. En el sentido. especial, mienta lo que es indicative de algo no evidente (ra évbeucrixiv 708 ibmAouuevou mpceyucrros)". Las, sefiales, en el primer sentido de la palabra, son lamadas «conmemorativas»; en el segundo, «indi ccativas»'®. Asi, la sefial conmemorativa, habiendo ao ate vanomer ine Septum scenes eee chee Seeman ore ee ae ee see Seles eens ro ec Deora ooo aS es i ee ewes See a gene generates meres See er eerreees secatncts thier serene ore Sepeerie Ui ear eh rere See DUB re oe tae vo ear ae ease: arene ao ee ree cee Se coe ease eae ie ee eh miter cee nie re ee 31 Observable en conexion con nada”, fi stan satan me, ame ues nunca se presenta a nuestra percepcidn ther in embargo, €s indicada 0 significada indicative: mente por los movimientos del cuerpo, puss caine. amos» que el cuerpo, para manifestar ley mann tos, tiene una especie de poder interior’ Volviendo momentaneamente a la dificultad arri- 1 doi, 152 dd. 153 3 ud 138 * Tid 135 32 exactitud, cuando intentan fijar el concepto de la senal, dicen que una sefal es una proposicién ante- cedente verdadera en un condicional verdadero, y que es tal, que sirve para manifestar el consecuen- te»), Pasa luego a definir la proposicion; y, acerca del término «npoxad™nyoiwerov», que he traducido por «antecedente verdadero», dice: «Con poxa- @nyovjevow significan el antecedente de un condi- cional verdadero que tiene un antecedente verda- dero y un consecuente verdadero. Sirve para mani festar el consecuente. Por ejempio, la proposi “tiene leche" sirve para manifestar la proposicién ha concebido” en este condicional: ‘Si tiene leche, entonces ha concebido'»”*, A continuacion, Sexto procura mostrar que no hay pruebas en favor de la existencia de cosa tal como un lektén, y que, por tanto, no hay pruebas en favor de la existencia de cosa tal como un mpoxatrryoipevor. Esto indica que Sexto, si pro- cede con honradez, cree estar refutando Ia opinion estoica que sostiene que las sefiales indicativas no objetos fisicos, sino, mas bien, lekid —y, espe- cificamente, proposiciones—. Pero a la vez afirma cosas como ésta’ «En muchas ocasiones y en mu- cchos lugares hemos mostrado que algunas cosas sig nifican y otras son significadas. Los sonidos signi- fican, en tanto que las cosas significadas son lekrd, los cuales incluyen las proposiciones. Y puesto que todas las proposiciones son cosas significadas, y no ‘cosas que significan, se sigue que la senal [ro ‘emusioy| no sera una proposicién»"*, Asi, pues, el propio Sexto hace notar la contradiccién que hemos, estado considerando Sento, Hyp Porrh I, 104; ef. Ade. Math, Vid, 26 2 Hsp. Boh 2% Ade. Math. Vill, 268, Vid. ibid, 11, donde esta opnisn cesta Cxpresamenteatibunda «los extocr, B No podemos atrituir la dactrina de los lekrd a los ¢stoicos sin ciertas reservas. Parece que haya habi do una controversia dentro mismo de la escuela acerca de si tales cosas existian. Ello es, sin em: bargo, escasamente sorprendente, ya que, por lo que sabemos, la opinién metafisica que prevalecio entre los estoicos fue el pansomatismo, la opinion de que sélo los cuerpos existen”*, Sexto nos reliere que algunos negaron la existencia de los lektd y ue no fueron solamente gentes de otras escuelas —por ejemplo, los epicureos—, sino tambien algu- hos de entre los mismos estoicos?’. Por ejemplo, Basilides y sus seguidores sostuvieron que no existe ‘nada incorpéreo**. Mis adelante menciona Sexto que el combate sobre la existencia de los lekta es imerminabl 5 Zeller. op. cit, vol 3, pane 1, p. 119, nota 2, tae muchas referencias sobie eto. ‘Ade. Math. Vill, 25, gun Zeller, Basile fue maestro de Marco Aurelio Brochard supone que ex el estoio que figura en Trex Here! cSt 3 Ade, Math, VIL, 262; 1,28. Respecto de ese ssunto, Zell dice «Sin embargo, ‘provablemente fueron solo estos mss Fecientes los que. acuiades por sus adversaos, suacitaron a duds? Basdes fue el maestid de Marco Aurel, Fue de ah el ser de Tos Jekta se habla con toda naturalidads top city vol. 3. parte 1, p. 89, nota 1). Scholz, en cambio, Wee qu Crisipo mismo materialize ls proposiciones » que la reac periputica ello esta en la raiz del tratamiemo cater Lt logics que hizo Galeno (Dewsche Literaturcetung, nme. 97% (1542), Cols. 66-868). Hay, om efecto. varios passes como estos \Wumados de Galeno}, sas seguidores de Cris, stems mas al habla que a los objetoy usan ol termi "conjuncion ‘ara todas las proposiciones compctas mediate las coneetias Sonjuntvas..= ast, Log pI liteas $56) Une suman jomo ésta! “Si mo es de dia, enlonces ex ue noche’: a cus ‘cuando se dice en una form lingustica condiciones lunads “eunticional” por lon que sole pret aension alo que se tien ibid, p. 9, lincas 11 ss). Sin embargo. estos pus no cen ue, Cosips entificara las proposiciones con enunciadoy t sonidos. Alo que parece, Tos perpatetisns desesbam argument uM La definicién estoica del iektém) segiin Ia tras- ten Sexto y Didgenes en pasajes casi idénticos, €s:[+Aquello que subsiste en conformidad con una Fepresentacion racional-}®. (Sexto sigue diciendo que, de acuerdo con 108 estoicos, una represen- tacion racional es aquella en que lo yorraadey (10 que esta representado) puede ser transmitide por el discurso (Agyq).’ Luego refiere que Cadecir algo, segiin declaran lds mismos estoicos, es emitir un so” nido capaz de significar el objeto concebidos?" Desgraciadamente, todas estas observaciones vie~ nen a dejamos en la oscuridad por lo que hace al significado de los eked Con todo, es itil examinar la extension del tér- mino. Sexto y Didgenes, de nuevo en pasajes casi identicos, dicen que los’estoicos dividen los leked ten dos especies: los que son completos en si mis- mos, y los deficientes?? [Los lektd deficientes. se escriben como «aquellos cuya enunciacion es in- completa, por ejemplo: “escribe’: pues queremos saber “cquien?'s}*. Los lekrd completos son los que oe es Ge lato coi onl See grosar ames seas oo eke Secon : sarap paren Te ae a same are eer eresy evil ce aot ere ante errr aes tye haonston, 6, Site te gates tee oi tele Be ines e's eee a 5 0 ee in on rh me 0 isneom completa. Cl. Diog L, Vitge Vil. 63: vid, tunbien Son Amim. Stoiconum Veteron Fragments, vol. Ul, p. IX sta ultima iva se cia en adelante SVF Vatae VIL 63 La denotacion +8 riyxdror (3 lee Droneuaro) Pyeto externa} El significado — ‘1B emaursner (ro beer) {al leltn) Re aisyuncion beferyuiror moleestar ol, ark conjuneion Taek 4 sao == rion peepee auprenheypiroy id Hu \y ate route ae poseen una enunciacion completa. Se daran en lo que sigue mas ejemplos. Los lektd delicientes se dividen en dos clases reves ¥ KaTmyopmuara™. Es dificil traducir con exactitud estos terminos, en parte a causa de la dis- ‘crepancia de los testimonios antiguos, y, en parte, porque son términos técnicos y la mayoria de las istintas. versiones castellanas posibles para ellos son también técnicas. Pero los siguientes puntos pueden servir para fijar el significado de estos tér- minos. Entre las partes del discurso —que son sig- Ros y, por tanto, objeto fisicos— hay Jos nombres Propios (vdmava), los nombres de clases (mpoon- opiat) yl Yerkox (onli): Us nombre Beas (Diogenes», «Socrates», «Paris», «Aquiles») es una parte del discurso que significa una cwalidad que perienece a lo sumo a un individuo**. Notese que «significa» se usa aqui para indicar la relacion entre cel signo y el fektén. Un nombre de clase es una parte del discurso que significa una cualidad comuin: ™ Para una diseusion de este punto, vid. Zeller, op. cit vol. 3. parte I, p90, nots 2. El uatamento de Zeller, mo 0bs- {ini conten graves confusiones. Por ejemplo, no advierte uc mt Dio. L.. Vitae VIL. $8 — lugar que el cits se dice que fh piace significa el marmyipmic, mientras que en Putareo, (Gut Play X. 1.2, p. 108 —lagat que tambien ita, se dice ‘yee fret es el ecrnpipmaer Por su parte, Zeller, adem, tice que ls lkidincomplatos —que, desde huegs, mo se Comporeos— se divider en nombres propos y adjetvos (Ligen- Shartsworie. Todo el asun esta, oscireeido por Tos testi. hos discrepuntes. Vo he seguido'a Diogenes, que por lo menos ce una informacion inernamente comsisteme. Ex ni sero Sinn que gram parte de la confusion en estos tomas denve de {ef Ta fle arisiotelca ua proposicion esta compet por A mone 5 vei aaa). CI, Ape, In Be Ter. Diog. L.. Vitae. 57 53.1 Galeno. De Hipp. et Plat. Plac Vil, 3: Sexta, Ads. Adah * Dig, Ley Vitae VI, 3 Benya Be ders pp dow bode {bic mouse Wi. tarbienSeholia in Dione Thracs Artem Grimmaticar, ed. Hilgard, 214, 9 Sex, Ade, Math 1, 13, 37 hombres, «caballos, ediosae, para traducir mowdrns: sin em: bargo, ouirns entrafia una referencia a la clase de cosa de que se trata y, por lo tanto, tiene un significado que desborda el de ecualidads.) Un ver” —de nuevo, puede que ésta sea una version demasiado estrecha de priua— es una parte del dis- curso que significa un xaropmyar nd compuesto beber ajenjo», ssemtarses, sandars, «camtary?® Asi, pues, podemos traducir xarmyipmya por =pre- dicado>, bien entendido que en este uso «predicados no denota un signo ni ninglin otro objeto fisico™; Y¥ quiza para mrdxvs ta mejor versién sea «sujeton (que es un término general para las entidades ex- presadas por nombres de individuos o nombres de clases)". Asi, segiin nos dice Diogenes, un predi- cado es un lekicn deficiente que se combina con Un Sujeto (en caso nominativo) para formar una pro- Posicion®!. Asi, por ejemplo, las palabras «anda~ Y «se sienta» expresan predicados Die, La, Vitae VIN, Sk “Ears 6¢ apoorvopin pty wain Ti Auer uepos Abyoo matron ange sousrhne, se ‘Aviporos, araax. CF taniben Seto. Ade, Mati T. 18h MVitwe’ VILL 58 jr be cone pepon hiyowomuaivor soivtrow waryagrer Para los ejemplon, vi Sedton Tsp Pore, Tl 280, 38d Aah Vile 1009 113. Stem 20, ei 'p. 299. arma que iw = aryyipna’ airman asombrowa, a vista de que Diogenes tes tfurma Ge due 1 un pyr significa Compares) tin mermropmuns ¥ 2 ida uma’ a} thuego. un aun). en tanto Gur Un Rerpeppt 8,u Tek (Iuep0 sigan) 2 Esto concierda com el uso fregeano de Praditat Cl, Sex, Ade. Math, VAIL. 100, donde un xarnyojepr puede pertene: ote im objeto, SAS, la oe eperr0~ significa (enuaie) una erdens a. un'animal que lar Au Adah, XI 29 1 Dig Ln Vilae VI, 64. Un predicady es un Aewri ékAenés queraxran ép0hy roar mpirstiguauen poruoue Ch thie Sento, Ads. Mach. Vill, $9. 9%. No\comprendo. come Peds sctle posible a un leon, en cuanto distingo de une potato estar en nominative. Pero hay muchas coses en la metafinics 8 :n este punto, bajo el rotulo «lektd deficientes», cesperariamos haliar exposiciones de la célebre teoria estoica de las categoria. Pero ni nosotros indica- vemos donde tenia su lugar en las introducciones estoicas a la Logica el tratimiento de las eategorias, ni, como hace ver Zeller, hay constancia de nada que lo indique*®. Ademas, casi no hay considera- ones sobre las Categorias en Sexto, Diogenes Laet- Gio 0 Galeno, que son nuestras unicas buenas fuen- tes para la logica estoica, En su lugar, tenemos que epender de Alejandro, Simplicio, Dexipo, Porfirio, Plutarco y Estobeo, mas algunos indicios de Séneca y de otras, todos los cuales sabemos que son rela- iivamente no fiables en tales temas*, Reduciremos, ‘en consecuencia, la presente descripcion a un escue- Uisimo bosquejo de las categorias estoicas, en la es peranza de que puedan otros investigar esta materia en el futuro con mis éaito. : ‘En_comparacisn con las diez cateyorias de Aris- toteles, las de los estoicos no son mis que cuatro, ‘mas una «nocion Suprema. La nosion Sup denominada 76 sé, -€L algo indefinido:. y las ‘categorias eran: 1) ri Goweiuemy —— sujeto 0 substrate 2) fa mown ual 3) To mow exes hte 3) tarpon fe mas dyor Folacion Se nos dice que estas cuatro categorias estan re- wcionadas las unas con las otras de modo que cada categoria precedente esta contenida en la que le sucede y esta determinada-eon mis precisién_ por Jos lett —asi como en la de las proposiciones— que yo fo entiendo. Se apliva ello especialmente ta airmacion te que los fekta' as proposicnmes iene pate ul *e Zeller, op! eit vol. parte 1, p92, nota 1 CF. Rochen bi, Aten! Formal Loui, pr €7 ‘Para las fuentes, vide Zeller, op. cit, val. 3, pp. 98 35 39 ella“*, De Lacy" pretende discernir en los escritos de Epicteto y de otros ensayos reales de investiga: ‘cin de objetos mediante las categorias. Al tratar un tema, Epicteto come estableciendo el sujeta: luego, sus cualidades; luego, sus_habitos, et Como, sin embargo, De Lacy no ha encontrad rningin ejemplo en que se usen las cuairo calegorias, y. ya que 5 obvio que sena muy dificil examinar ‘ningin tema sin usar por lo menos alguna de ella, parece que su tesis esta por ahora insuficientemente apoyada por pruchus. Volvamonos ahora a los lekid completgs. Para la Jogica, la subclase més importante de ellos es la de las proposiciones.. Una proposicion, yegiin la detini- ccion estoica establecida, es un fekrén comple 5 asertorico (0 sea, verdadero o falso) en si mismo Pero también hay muchas otras especies de lekid completos*’. Hay las preguntas, que, como las pro- osiciones, son lekid completos pero que exigen luna respuesta: «{Es de dia?» No son ni verdaderas ni falsas. Hay las pesquisas, que son como las pre- guntas, excepto por el hecho de que no pueden ser tespondidas con sin 0 «no»: «,Donde vive Dion?» (Aqui, en exposiciones paralelas, Sexto trae lia interrogacion y Diogenes la respuesta: «Vive en tal ¥ tal sitios.) Hay los imperativos (que expresan Srdenes), Jos juramentos y los saludos CArpetin iiburre, vad dvBpv “Aydueuvor). Ademas Je estos, Hay las cuasi-preguntas (+iQué parecido a los hijos de Priamo es el boyero!), las sugerencias timidas, los deseos, los ruegos y muchos otros. Esta es la clasificacion de los lekid. Puesto que Tid, p10. 1 Stoke Categories as Metiadologea Principles. pp. 246263, * Sento, Ades Math VIILT8, 1 Dog. Ley Vite Vil, 65: Gelio, Nocies iticae XVI, si Sade. Mah. VIIL, TU'ss. Vitae Vl, 66 ss, CE tambien Apuleyo, Jn De tnterp., ex. Oisd, 268; SVP IL, 18 hosotros nos ocupamos en la légica, nos interesa sobre todo tan solo una especie de Tekin completo: la proposiciéns Trataremos de ella en el préximo capitulo, 2. COMPARACION CON TEORIAS MODERNAS Hay interesantes semejanzas entre la seméntica estoica y ciertas teorias modemas, especialmente las de Frege y Carap. Nuestro objetivo es aqui, como en el resto de este estudio, ofrecer un cuadro veruadero de las contribuciones’ de los estoicos. y no intentar mostrar que no hay nadka nuevo bajo el sol. Expondremos la teoria de Frege tomando como base un articulo al que durante mucho tiempo se presto escasa atencion"* y que es el origen de muchos ejemplos y de. mucho del contenido que se encuentra en las discusiones contemporineas entre Carnap, Quine, Church y otros. El punto de vista de Camap se éxtraera de uno de sus libros recien- tes, que contiene —cosa que resulta dtl para hnuesira larea— una comparacion de la distincién de ‘Carnap entre intension y extensiin con la que hizo Frege entre sentido y denotacion"®. Los conceptos tradicionales de connotacién, denotacién, extension © Frege, Ueber Sinn und Bedeutung, pp. 25-50. & Caamap, Meanong und Necessit “= Adoptanios las siguientes versiones para los teminoy de Frege Sinn: sentido, Zeichen: Signo, Hdeutang: deneacion. ——‘Bezeichnen: Uesignas Bedeuten: denots. Gegenstand: objeto ‘Auadrcken” expresar Subjets suelo Gdane: proposicsn Pradikat: predicado. Vorstellung: representacin, Behaupeungssate enunciado, Ch, Camap, op. cit, p. 118, mata 21. El temine Eigenname lo introduse Frege (op cit. p27) para refers a fos nombres ide idividaos, pero mo se alco siempre a este USO cE p. 34 4 € intensién de los términos se subsumen como casos especiales bajo los conceptos, mucho mas amplios, introducidos por Frege y Camap, que se aplican a los enunciados enteros tanto como a sus partes. Mas abajo veremos que la teoria estoica es, asi mismo, més bien de las amplias que de las restrin- gidas. Por ello es por lo que hemos escogido para la comparacion a Frege y a Carnap, en vez de a ung de los autores tradzionles, come, por ejemplo, Para simplificar la exposicién y la comparacion de los tres conjuntas de conceptos, adjuntamos la tabla |. Se trata de una ordenacién de los términos correspondientes empleados en las tres teorias. Nos referiremos a ella indicando ta fila y la columna, Las columnas 1, 4 y 7 contienen los terminos estoicos; las columnas 2, y 8, los términos de Frege: las columnay 3,6 y 9, los téiminos de Camap, En primer lugar tenemos que referimos a dos serias deficiencias de la teoria estoica (0 de lo que ‘queda de ella), comparada con las teorias de Frege y de Camap. Ante todo, no se puede hallar ningun principio de intercambiabilidad en ninguno de los Fragmentos estoicos, ni hay discusion alguna de los problemas que surgen en conexion con tal princi- pio’, Solo poseemos los elementos esenciales es- 2 CF Brochard, «Sur in logue des Stoiciens», p. 66 5 La formulacién lelbniziana Wel principio, citada por Frege (op. cit, pr 33), ex: «Eudem sani quae bh mutue substi Dustunt, shea sedate. Cl. Casnap, ap it pp. S158, 131-22 Cr tambien Sexi, Hyp. Pyirh. Il. 227. -Precisamente pore Paris y_ Alejandro on idénticos, no es posible que "Algjandro camina’ Sea verdadera y "Pars camina’ sea fas.» El contexte Sigiere que Sexto pensaba que lor estotcos estanan de acento fon ello, quiza porgue fuera una apliacion de uno de sus pro” ios principos. «Parse y «Alejandro» era ejemplos eioicos habi- tuules. CC Simplicio, fv Car. ed. Kalbfetsch, p36, meas 8s. 2 TABLA 1 Parangén de la terminologia esioica con las de Frege y Carnap i : i i - a : 5 “pasa aty i 2 vor f ? fe dk sb LH § 4Pi og Cie er meena Ly pbod vf ee ees tne 43 cuetos de Ia teoria estoica: no hay ejemplos de aplicacion de sus principios a la solucién de pro: blemas concretos. Asi, el intento de resolver la lla mada santinomia de la relacién-nombre», que, en una u otra forma, ha marcado el curso de’los enfo- ques modernos, esta por completo ausente de este poco de teoria estoica que se ha filtrado hasta osotros*®. En segundo lugar, y estrechamente rela- cionado con el mismo punto, esta el hecho de que NO poseemon discusiones esioicas ueerea de oeu- rencias «oblicuas»** © «no puramente designati vase’* de expresiones linguisticas, Debido a ello, nos sera posible comparar lo que Se conoce de los conceptos de Frege y Carnap mucho mas sencilla- mente de lo que podria parecer en principio, Pues, como dice Camap, sus conceptos coinciden con los de Frege para ocurrencias ordinarias de expresio nes: para cualquier expresion, su sentido ordinario y su denotacion ordinaria son, respectivamente, los ‘mismos que su intension y su extension®®, Por con- Siguiente, no tenemos base alguna para tratar la te0- ria estoica en algiin respecto en que no coincidan las teorias de Carnap y Frege. La distincién estoica fundamental es la que se hace entre 75 ompaivov, ro Aexrov y To TUyxavor. Corresponde en muchos aspectos a las distinciones 5 CE. Camp, op. cit, pp. 153 38, Sabemos, sin embargo, {que [0s eprureos contra fds eles dspam sabre todo Extoicos— sostenian ef punto de vist iigenud sigmo- objet gue “Gs lugar al surgimiento Ge la antinom(Sexto, Ay Matte Vill 12), Tambien Saberus que Crisia propo’ ceras parsdajas «que requleren, para ser Failmente resis a no Ue smth Yo'gr.” «Dion ha mers. (Sie! enunciado ex verdadero. mo thay Uenotacion para sDon-: no obstante, el enuncialo es sg niftcative.) Frege, op. cit, pp. 28 et passin. % W.¥V. Quine, “Notes on Existence and Necessity, Journal of Philosophy, ol. 0 U8), pp. HE12 Fe Carmep, op. cit, p. 26 “ Zeichen-Sinn-Bedeutung _y _ designator-intension- extension, de Frege y Camap. No hay duda acerca ve que coinciden los Conceptos de 7) omuaivov, Zeichen y designator. En lo que hace a 7) Aexr6v, Sinn e intension, en cambio, el acuerdo no es com: pleto. El lekton es to que el signo designa o mienta y que captamos (dariAayBaviuela) que existe, en estrecha conexion con nuestro entendimiento; es, por otra parte, lo que los barbaros no entienden ‘cuando oyen pronunciar las palabras griegas*”. Los conceptos de Sinn intension, segin Camap, , pero las dos expresiones no tienen el mismo sentido™, Lucero de la mafana» y «lucero de la tarde» es ‘otro par de expresiones que tienen la misma deno- tacin pero diferentes sentidos. Frege distingue cuidadosamente entre represen- tacion (Vorstellung) y sentido®. La representacion, dice, ¢s subjetiva y privada; el sentido es objetivo y piiblico. De modo semejante, los estoicos distin- utan entre la representacion (guawrawria) y el lekidn Este tltimo es lo que constituye cl contenido de una epresentacién racional, que, a st vez, es una repre- sentacidn con respecto a la cual lo davrabev puede ser transmitido por el discurso*'. De modo Sento, Ade. Mati. VIL, 70 45 que el fekidn es lo que podria llamarse el contenido objetivo» (70 davracrder) de la representacién, en tanto que el sentido ex caracterizado por Frege como el «contenido objetivo» de la Vorstellung®? ‘Ademas, Frege describe el sentido como estando entre». ia representacion subjetiva y el objeto de- notado®*; lo cual es paralelo a la descripcion del lektén por Ammonio como un peor ente el pen- samiento (vonua) ¥ la cosa (70 pana)". Estas descripciones generales del lekidn y del sentido muestran, en la medida en que son inteli- gibles, cierta semejanza. Pero un juicio sobre la Coincidencia de ambos apenas seria de far si se basara Gnicamente en caracterizaciones tan vagas como éstas. Lo que necesitamos saber es esto: ces cl lekton de cada expresion lo mismo que su sen (ordinarioy? Para responder a la pregunta, conside- raremos las cuatro clases de expresiones mencio- nadas en las filas b ae de la tabla 1: nombres de \dividuos, nombres de clases, expresiones predi- cativas y cnunciados. ‘Segiin Ia teoria estoica, el lektén que correspon- de a un nombre de individuo** es una caracteristica ‘que es peculiar de un individuo. Frege no hace en ningun lugar una afirmacion tan explicita acerca de lo que él piensa que es el sentido de un nombre de individuo (Eigenname); pero parece mis o menos claro que no esta por completo de acuerdo con ‘© De echo, bs versn de Zaller par denna es Vos Bochetah, Li Logue de Thtophrase, p33 teadace Macros Pore sens omec rege. op ip. 30. Ammonia, fr BE inter. e8. Buse, p17, ine 27. Adi tase que at 0 ep sc sa ene srt poraicc. 9 fo en el de lov exten, sepun los cuales seta Siri de 1 ee Sequin Stental op. cit p. 297 fe Crspo mismo auien vii ox aroun et iru propiamese chon Y mise vos % los estoicos. Examinemos uno de los ejemplos de Frege. Para el nombre de individuo «Aristoteles» —dice—, podria tomarse como sentido: el discipulo de Platén y el maestro de Alejandro Magno. El lektdn estoico de «Aristoteles» seria en este caso la propiedad de ser discipulo de Platén y maestro de Alejandro’. Carnap toma lo que denomina «el concepto indi vidual» como la intension de una expresion indivi dual. Dice: «Parece razonable pensar que lo que él [Frege] quiere decir con el sentido de una ex- presion individual es aproximadamente Jo mismo ‘que nosotros queremos decir con un concepto in- dividual»*®, Por consiguiente, parece que tanto Frege como Carap difieren en este punto de los estoicos. Sin embargo, lo que los estoicos propo- hhian es por lo menos tan plausible como lo que proponen estos pensadores modernos. Frege y ‘Carnap coinciden con los estoicos en considerar que Ia intension de un nombre de clase es una propiedad que pertenece a los individuos que son miembros de la clase. {Qué podria ser mas natural ‘que identificar a los individuos con sus clases de un Solo miembro y pensar, asi, que un nombre de in- dividuo expres una propiedad que pertenece tan solo a un individuo?®*. ‘A proposito de la extensién de una expresién % Frege, op. cit. p. 27, nota. Evidentemente, a frase des cripuiva ocurreagui en un Zomtexto ebicvo OT teatamienta estico de los nombres propos recuerda un tanto al procedimieno de. V- Quine para a elsminacion de Tos nombres propios (véase st Mathematical Lugie —New York Norton, 1980. pp. 199 5.) BN Camap. op. el, . 136 ‘= Es imerenante a este proposito la definicién estoica del indivi como uma ‘enecie qe mo conien ninguna tra specie. En correspondenei, la clase universal era defrwda cano especie que no esta conlenida en ninguna otra especie Digg E- Vitee VIL, 61 47 individual, no encontramos ningun término especial ni en la teoria de Frege ni en la de los estoicos. Carnap usa el término «individuo» (individual)”® Con todo, aqui es necesario destacar cierta supe- Fioridad del punto de vista modemno sobre el anti- uo. Los estoicos, de acuerdo con su materialismo, aafirmaron rotundamente que los objetos denotados or todas las expresiones son cuerpos, como a: mismo son cuerpos los signos. Ningtina opinion metafisica de esta indole se inmiscuye en la se- mantica de Frege © de Camap. Desde luego, Frege toma las armas contra los escepticos y los idealistas, que dicen que ninguna expresion tiene denotacion Pone de relieve que, por lo comiin, pretendemos hablar sobre algo mas gue sobre nuestras propias ideas; que normalmente suponemas que nuestras expresiones tienen denotaciones: y, ademas, que, incluso si nos equivocamos al hacer esta suposi- ion, nuestra intencion es justificacién bastante para Ja introduccién del concepto de denotacién”. Pero esto, manifiestamente, no es un argumento contra punto de vista metafisico alguno. Camap tampoco hace parte de su definicién o explicacion de_cextension~ (extension) a ningun supuesto me- tafisico. Pareceria, por otra parte, que los estoicos hhabrian’necesitado alguna clase de teoria de tipos © niveles, pues, si no, su analisis habria excluido las proposiciones acerca de proposiciones; pero no tenemos ningun indicio sobre como trataron este problema —si es que alguna vez pensaron en él— Pasemos a examinar los términos que aparecen en la fila c de la tabla. Hallamos aqui que Carmap Sin embaryo, el ejemplo de Frege -Avisteless)y el jem plo estoigo («Dion») muestran que Frege y los estoicos habran {stay de acuerdo con Carmap en este asinlo, Asi se dice que fa Genotacion de «Dion es Dion msm. Cl. Frewe, oP. a. . 37, mola; Sexto, Adv. Math. VIIL. 12 7 rege, op. cit. pp. 3-32 48 considera las intensiones de los nombres de clase como propiedades; en efecto, muestra como las cla- ses mismas pueden ser consideradas propiedades de una indole especial”®, Parece que los estoicos coin- iden con él por lo que hace a los nombres. El lektén de un nombre de clase (rpoonyopia) es una propiedad que pertenece a varios individuos ( own mowrns). Sin embargo, hay que confesar Que quiz la coincidencia no €s tan notable como parece. Es muy dudoso que los estoicos hubieran aplicando el tétmino owns donde Carmap usaria propiedad» (property). Los unicos ejemplos. de nombres de clases mencionados en los fragmentos estoicos que hacen al caso son; shombres, «caba- los», wliosa» e «ira», Cada uno de ellos parece ser el nombre de una especie”; quizi una mourns es la propiedad que define a los miembros de un gene- ro 0 de una especie (por ejemplo, shumanidad>), La etimologia lo sugiere timidamente”’. De todos modos, parece que los estoicos no consideraban toda eoleccién de cosas como un género o una es- pecie™’, aunque su definicién del individuo como una especie que no contiene ninguna otra especie, puede suscitar ciertas dudas en este punto”. Frege no nos dice cual es la denotacién’ de un nombre de clase, y, por ello, ni siquiera emplea un término especifico’ para los nombres de clases. Church, cumpliendo los que quiz eran los propo- sitos de Frege, toma como denotaciones de expre- siones predicativas a clases; y puede suponerse que Frege habria asignado la misma denotacion a los Carmap. op. it, 2 DOE Le 'itee Vi, 5; Sexto, Ad. Math 1 1, % Cr Water VI, Quiere decir etimoligicamente, sel estado de ser-de-una indoles. Vitae Vi, 60, ” Thad. 81 49 nombres de clases que a las expresiones predicati- vas correspondientes”*. De ser asi, habria estado de acuerdo con Cammap. Los estoicos guard silen- tio acerca de esto. Solo sabemos que el 77yxavor de un nombre de clase, sea cual sea, sera corporeo. Respecto del sentido de estos terminos, podemos inferir que Frege habria usado la palabra Subjekt para abarcar el sentido tanto de los nombres de Individuos ‘como de las expresiones.predicativas Ello coresponderia exactamente con el termino estoico mraois, pues, del mismo mado que dice Frege que toda proposicion (Gedanke) esta com- puesta de Subjekt y Pradikar™, los estoicos decian que una proposicion (céapa) se compone de rams y KarnyopnBa”™®. El término estoico fmywa parece corresponder bastante estrechamente’ con ef termino camapiano predicate. Su lektén se denomina Un xaryyopnjua simple", y, otra vez, de la misma manera que un nombre de individuo 0 un nombre de clase se com- binan con una expresion predicativa para formar un enunciado (sentence), asi tambien una aries se combina con un Kernyopywa para formar un Gklaua. Por ello ‘hemos escogig los. terminos ‘«predicado» y «sujeto» para traducir, respecti 7A. Church, reseha de: Carnap, Inrducton to Seman. cen The Philosophical Review, vol82 (1813), pp. 298304 as em, Carap, Meaning end Necessity, p. 12) "» ege op. in pe 3S © Diop. Lr Vitae Vil 6: Bar 8¢ 10 naryimuar- hexsir shes evn, 8 ron sear ar Frege upc p38 -Subgkt warns ng Gn opiehen Sinne”verstnien) Gedunkenthte». CX. Camp. Meaning und Necessity, p. Sl: «Si damos un avevo paso en el ann de ex proposicion, halamos como componente suy0% la propeciad Fiumano concept individual Walter Seat. Ambos vom ent xn eempisas, samb neta Se We Vie 38 50 MENLE, KaTHYySppEe y mrderis. Frege tampoco usa de modo especifico ningun termino para las expresio- nes predicativas, pero parece que’ sus sentidos les aplicaria el termino Prddikat. Segin Camap, la in- tensidn de un predicador (predicator) es una propie- dad (property): la misma propiedad que es la inten- sion del nombre de clase correspondiente ‘Surge entonces la pregunta: {cual es la distincion estoica entre 4 moors y To KaTnyopnua, entre el lekton de un nombre de clase y el de una expresién: predicativa? Es ésta una pregunta a la que el autor hho sabe qué contestar. Da la impresion de que los estoicos no pensaban que toda asercion verdadera sobre un ente expresara una rorns de ese ene En vez de ello, podria expresar tan, s6lo un ros Exov del ente, 0 un mpis 70 mus éxov. Pero la expresion predicativa de cualquier enunciado ex- presa, seg ellos, un xor-ryipnua. Probablemente, para contestar de modo adecuado a la pregunta se Tequerinia una informacion més adecuada sobre la teoria estoica de las categorias. Si pasamos a la fla e, hallamos que hay completo acuerdo acerca de la intensién de los. enunciados: los estoicos, Frege y Carnap dicen todos que la in- tension de un enunciado es una proposiciéa™. Pero en la teoria estoica no hay huella alguna de la idea de Frege y de Carnap, segun la cual la extension de tun enunciado es su valor de verdad. Contra los epi- etireos, que sostenian que «la verdad deberia ser considerada como un predicado de ciertos sonidos», los estoicos decian que la verdad es «respecto del» lektdn (esto es: que tiene que ver con él)". En otro lugar deseribian la relacién como siendo de tal indole que la verdad esta en el leksén™. En ningin Aeetea de Aeyoe = Sats, vid. Steimtal, op. cit. p. 22. Seto, Ade. Marh Vl 1-13 ™ ide 7. st sitio sugirieron que la relacién entre fa proposicién y la verdad sea de algiin modo semejante a la que hay entre, por ejemplo, el lektdn de un nombre de indi viduo y el individuo que existe externamente. La nocion estoica de la verdad se describira mas plena- mente en el proximo capitulo Como conclusion de nuestra comparacion del punto de vista estoico con madernos puntos de vista Semanticos, podemos decir que uno y otros son no- tablemente semejantes. sobre touo por lo que hace & la intension de las distintas expresiones linguisticas, Ello se muestra por: 1) el acuerdo entre las tres teorias acerca de los entes elegidos como intensio- nes de los diversos tipos de expresiones; y 2) el hhecho de que las tres opiniones afirman que la i tension de una parte de un enunciado es una parte de fa intension del enunciado. Hay tambien ciertas afinidades en la concepcion general. Por ejemplo, parece que los estoicos eran tan rescios como Car- nap a admitir entidades «metafisicas» del estilo de las proposiciones; sin embargo, las admitieron. Es, con todo, perfectamente posible que, si se supiers mas acerca de la doctrina estoica, se hicieran © denies miltiples desacuerdos de importancia con los analisis moderns. Incluso una sola eloayarys estoica nos permitiria reseftar inconmensurablemen- te mejor los puntos de vista estoicos en légica y se- mantica. Basta imaginar a alguien que estudiara el afio 4000 las teorias de Frege valicndose tinicamente de unas pocas criticas hostiles en algunas publica. iones no técnicas, para apreciar el hecho de que Sean tan claas y consstentes muesirasreiguas de la doctrina estoi CAPITULO AL PROPOSICIONES, VERDAD Y NECESIDAD RESUMEN Este capitulo se divide en tres secciones. La pri mera define y clasifica las proposiciones y trata de sus propiedades fundamentales. Una proposicisin~ se dice que es sun fekién completo asertorico en si_ mismo». Su propiedad mas basica ¢s la de set ver dadera 0 falsa_y no ambas cosas. Las se clasifican env alomicas ¥ moleculares, Cad Ae estas clases se divide a su ver en ¥ ejemplos que comiencen por «todos. los» En la segunda seccién se estudian sucesivamente Jos miltiples usos estoicos de las palabras «verdad» y_ «verdadero». Todos estos usos son definibles en iérminos del uso que se refiere a proposiciones. La tercera seccién se ocupa con las nociones es- toicas de necesidad y posibilidad, tal como se en- cuentran en los fragmentos de ciertos fil6sofos (me- garicos) a los que originalmente se debieron. Se muestra que en la opinién de Diodoro acerca de la posibilidad juega un papel muy importante una refe- rencia al tiempo. (Lo cual guarda una estrecha rela- ‘cidn_con su posicion en la controversia sobre la implicacion, que sera discutida en el capitulo LV.) Se incluye una breve resefia de lo que se sabe del célebre argumento «Soberano» de Diodoro, junto con unas pocas observaciones acerca de las opinio- 3 nes de Fil6n y de Crisipo respecto de la. pasibi lidad 1. PROPOSICIONES Aulo Gelio' cuenta que cuando regresé de Atenas a Roma decidio estudiar un curso breve de logica. En consecuencia, se procurd un libro de texto estoico una introduccion a la kogica en eriego leireryaryy Buadexrucy)?— y se puso por si solo a la tured. El capitulo primero se ttulabs «De las proposiciones» (epi dgtwusiran)*. Por lo visto, Gelio fo enconind muy dificil, pues comenzé a buscar diligentemente lun comentario latino. Descubrio por fin uno en la biblioteca y lo ley6 cuidadosamente. Por desgraci no contenia nada que aclarara Ia materi al contra Fio —nos dice—. su autor (Lucio Aelio) habia eseri- to el libro mas contra su propia falta de memoria que para la instruecién de otras. Asi, pues, Gelio volvid por fuerza a su libro grie- 0. Hill6 en él la definicion estoica de proposicion: «un lektén completo, asertorico por Si mismont. Habia también algunos ejemplos: «Anibal fue un cartaginés», «Escipion destruyé Numancia, «Milon fue declarado culpable de asesinato», «EI placer no es ni bueno ni malo». En realidad, dice Gelio, los Iogicos llaman «proposicion» (@giwa) a todo pen 1 Nocies Avie XVI, Vl Me eae til bile neues xis a \ogica Es tambien et tuo del tatado de Galeoo comer ae, Vigan iF si ” Este er también un to tabu, al que hace referencia No, Diogenes, Boecio, Pcie oro, ’s tradoce Je Rolfe (el, Loch, tl. 3. p. 15% nota 4 An ahtolte and setsecitentpropoions yer completanate (réénae) la correspondiente propos id > iid, 9, CL. €l Glsar, sv. sovuaiuere y droge. Sexo, Ades Maih. Vili, 8.90; Aputeyo, Be Ineyp cl Ou 286; Hoces, Im enter, ed. tecunda, Mee, 2H, Apolots ‘de Alina. epi Somber ade Scheie. S18 "© Nad Seat, de. Math. Vil, 89 5" Note la explcacién en séominos de aleaner Ge ly negativn El alcance de anos eh Sina conjuneiOn negate pocde” sr la cuttin en parca serena Seto Hap Yr i i ee yo fe fanaa adopt bcorecsion de ent de Weber vide appr fs eres dla edcion de Mutsenann). =e ‘Apuleyo, In De Inter 2 oo negada: «Es de dias. Desgraciadamente, el ejemplo de doble negacién que trae Diogenes, atx? uepa ox éory, es dificil de conciliar con la precedente regla sobre la anteposicién de la particula nega- tiva Se apreciard que en ningun lugar de ésta mas bien, elaborada clasificacién se ha dejado hueco para pro- posiciones universales afirmativas, o sea, para pro- posiciones que empiezan por «todos los». Podria ser esto una pura casualidad; pero también se observari que ni una sola de las muchas proposiciones men- ‘cionadas por los estoicos como ejemplos ilustrativos de las diversas partes de su légica comienza con stodos los», La razon de ello quiza esté relacionada “Sg Veo tt i, Sain ements cn a Sat ors ete se are orci nS, fn Goals a at cet, asin que mise tot pes de hn somentadores arse Stes se Sgr pote ohreett a arbre eetae er ieee ee See ee pages See Sura Sees ayo oa ee es ese cen Soe eee eee Sareea Ley acter “Si Srpmns bien alae go mae oe er cope Soeew ea poe ES a noe de Es de di © no es de dis No! no es de dis Tvego es de din Naturalmente, «0» se usa agui en su sentido exelusivo, a de algiin modo con el supuesto nominalismo de los estoicos"*; 0 es posible que los estoicos interpre taran lo que nosotros considerariamos proposiciones tniversales como proposiciones acerca de la clase correspondiente; 0, también, quiz las juzgaban simplemente como equivalentes de las negaciones de proposiciones indefinidas. En cualquier caso, el autor no esti en disposicion de offecer ninguna explicacién apoyada en pruebas! ‘Hasta agui las informaciones estoicas acerca de las proposiciones atémicas. Habria mucho mas que decir sobre ellas si las obras estoicas se hubieran ‘conservado, pues solo Crisipo escribio al menos un libro acerca de cada una de las especies de propo- sicion atomica, y tres sobre Ja negacion’ ‘Una proposicién moleculanesta siempre. sefialada por la ocurrencia dé-tina conectiva (avsdea}0s) 0 de varias en el enunciado correspondiente. Una co nectiva es una parte indeclinable de la oracion que tune las partes del enunciado®. Las proposiciones moleculares se clasifican, por (anto, segun las co- nectivas que contienen (en la cesura. principal) Asi, pues, hay el condicional (umpyévor). la con juncion (cuprembeyueror), la disyuncion (buefevy évov) y varias otras. La proposicion condicional 5 la que esta formada, a partir de dos ocurrencias de la misma proposicidn o a partir de proposiciones diferentes, por medio de Ii conectiva si- (et 0 Acerca del nominalism este y eiico, vi. Zeller. op. i vol, 2 parte I, pp 29S s6.y vol 3 parte [yp i Sekto-nos dice que li dkfinckon = hombre es anal racional mortals tiene el imo siiicado que: “Site un hombre, eatonces es un atimal taconal mortals, y Mama est) Ultimo meonuxse. Se meaciona a Crispo: pero no pucse esiise si este termine provede de él 0 de Sex. Sent, Adv ‘Math Xl, Sigg... Vitor VIE, 190, 8 Doak, 8 Doids Ts. SVE ML, 182 02 eimep). Afirma que la parte que no sigue inmediata- mente a si» e$ una consecuencia de la parte que sigue inmediatamente a «sir?S. Las condiciones de su verdad fueron el tema de una gran controversia entre los estoicos, y se tratarin en el préximo ca- pitulo, Una conjuncién es una proposicion molecu- lar compuesta mediante la conectiva »y» (nad): «ES de dia y hay luz». Una disyuncién esta unida por medio de la conectiva «o» (), que hay que enten- der siempre en un sentido exclusive. La disyuncion fafirma que los disyuntos no son ni ambos. verda- deros, ni ambos falsos. Ejemplo favorito de los estoicos es: «Es de dia o es de noche». Ademas, hay las lamadas -cuasi disyunciom> (uous. Bee Ganycior) y «pscudodisyuncion» (rapectevyusioe). Ta Ultima corresponde a nuestra «disyuncion incl sivas. Junto con los cuasi condicionales y los pseu- docondicionales, serin definidas y estudiadas en el ‘capitulo siguiente ‘Ademas de todo ello, Didgenes anota cierts tipos no veritativo-funcionales. de proposicién molecu- lar*, La proposicion causal se construye mediante Ja conectiva «porque». Por ejemplo: «Porque es de dia, hay luz». Aqui, sel antecedente es como si fuera loiavei} una causa del consecuente». Hay también ciertas proposiciones moleculares de esta indole: «Con mayor probabilidad es de dia que es de noche». Se les da el nombre de propasiciones?”. Parece que estes, ¢¢/uso fundamental de la palabra en la logiea estoice En estrecha conexion con él esta el sentide en al Que se dice que ciertas funciones proposicionnice Sicin.que Ia describe con exactitud, Supseee es zg Gurrarla presente, digo s de dia». Si en efecto es de dia, entonces ia Proposicién es verdadera, y también lo es la repres Sentacién. Una representacién falsa es la que ex ta que sera falsa una proposicién que la describa con Exactitud. Asi, por ejemplo, cuando veo un remo describir exactamente res stamente mi representacion ¥ “lenny “EI remo esta dobladon: pero como et ne is gee a yu, vetdaderass 0 «se hacen fais. Vid el tetany ae oe ee o esta doblado, la proposicidn y la representacién son falsas, Las clases de las representaciones verdaderas y falsas ni se excluyen mutuamente, ni son mutua- mente exhaustivas: algunas representaciones son verdaderas y falsas, y algunas no son ni una cosa ni la otra. Como'ejemplo de una representacion que €s verdadera y falsa, cita Sexto la imagen de Electra que ve Orestes en’ su locura. Sexto explica que esta representacién era verdadera en la medida en que estaba causada por algo que existia, pues Elec: tra existia; pero que era falsa en la medida en que parecia ser la representacién de una Furia, pues no habia en realidad una Furia. Desgraciadamente, los ‘ejemplos que se ofrecen no diferencian con claridad entre representaciones falsas y represcntaciones verdaderas y falsas. Pues parece que tanta raz6n hay para decir que la representacion del remo do- blado era verdadera en cuanto que provenia de un objeto existente, como la hay para considerar fa vision de Electra tenida por Orestes como verdadera en un sentido. Hay pocas perspectivas de aclarar esta confusién, ya que este punto no se trata en ningiin otro fragmento ¥y los restantes ejemplos que se ponen aqui resuelven igual de poco", La nocién de representaciones que no son ni verdaderas.ni falsas es alin mas criptica: «Las representaciones, que no son ni-verdaderas ni falsas son las.repre- sentaciones generales: pues los géneros de cosas cuyas especies son de esta 0 aquella indole no son de esta 0 de aquella indole“'. Por ejemplo, algunos Ou ejemplo de una representacon falsa ex: «EI Potico se estrechin: azerea de su significa. eC. Hyp. Pym 1. ik (Otro ejemplo de uta represenacion que es verdadara ¥ fala fe sclanda un hombre’ imagina en suchas gve Dion esta ea pe Junio al (estando Dion vivo}. “W Nitese que est clase de afimacion, que fos hombres han ‘considera durante dos mil anos verdadera ycigns de ser dich, 65 hombres son griegos y algunos hombres son barba- os, pero el Hombre genérico no es griego (en tal ‘caso, todos los hombres fabrian sido de la especie “) nies barbaro (por la misma razén).» La correcta interpretacion de este pasaje espera inves. tigaciones ulteriores. Todavia_en_un cuarto sentido, «verdadero» era aplicado por 10s estoicos « argumentos’ Trataremos de ello de manera més completa en el capitulo 1V. ‘Aqui consignamos tan sélo una definicion: un arg Mignto-es verdadero, si y sdlo si es valido y tiene premisas_verdadenis. Sh no-es-valido 0 tiene una remisa falsa, se dice que es falso* Asi, pues, hay_por lo menos cuir sentidas de sverdadero», Podria pensarse que verdad» signif | G la caracteristica de ser verdadero ¥-que, en consecuencia, cuando se hubieran deter- minado los sentidos de «verdadero», se. habrian determinado ipso. facto los. sentidos_de «verdad. En el uso linguistico estoico no ocurria asi En dos largos pasajes que se confirman el uno al otro detalle por detalle, describe Sexto una dis- Lincién estoica entre lo verdadero (ro andes) y la veriad (% idxjGeia)". Segiin él, los estoicos dicen que lo verdadero se distingue de la verdad de tres modos: en esencia, en constitucién en significa. ¢iOn. Difieren en csencia porque lo verdadero es incorporeo (pues es una proposicién, y una propo- sicion es un lektcn, y un lektén es incorporeo), en tanto que la verdad es un cuerpo. En efecto, la verdad es conocimiento asertérico de todas las pro. osiciones verdaderas, y el conocimiento es la parte principal del alma enn cierto estado (rus ¢yor, la tercera categoria estoica). El alma, a su vez, era SAE Seti sin tor eto. o mimo eure ipa Go ae 2 sys mo. © Mb HU sc; Adee Math, VIL 38 6 lerada por los estoicos un cuerpo (el aliento). ‘Asi, del mismo modo que un puiio es un cuerpo, Porque no es mas que una mano en cierto estado, asi también ef conocimiento es un cuerpo, ya. que 5 tan sélo la parte principal del alma en’ cierto estado a ‘La verdad y lo verdadero difiereh en constitucion, puesto que la verdad suponie conocimiento de muchas verdades, mientras que lo verdadero es algo simple; por ejemplo: «Estoy habland pesar de que la proposicion se describe én muchos lugares como un ouverovy**. Difieren_tambie! significacion (Bvvdye1), pues la verdad pertenece al conocimiento, y lo verdadero, no. Por otra parte, la verdad solo’se halla en el hombre bueno, pero incluso un hombre malo puede decir algo verdadero. En conexién con esto ultimo, los estoicos distin- guian entre mentir y decir falsedades. El hombre bueno puede decir una falsedad, quizi por cumpli- do, tal vez porque es un médico o un oficial del ejército; pero el hombre bueno no puede ser lun mentiroso. Lo que cuenta no es el acto mismo, sino el motivo; por ejemplo, dice Sexto, la de se° pulturero puede ser una profesion honrada 0 vil, segn las razones por las que se excavan las sepul- turas. El criterio para determinar la verdad de las repre- sentaciones —muy discutido por les estoicos— es uun problema episiemologico y que escapa del am- bito de esta obra. Se dice que las proposiciones son verdaders, cuando la cosa nombrad pore nome: sujeto el predicado expr lo por la expre- sion predicaiva. Asi, «Este hombre esta semtdos 5 verdadera clando el objeto indicado pose l Predicado en cuestion («esta sentado~)*’. Didgenes, Adv, Math. VIM, 79, © ed, 100, or empleando un ejemplo distinto, nos dice que «Es de dia» es verdadera si es de dia; si no es de dia, la proposicion ¢s falsa“*. Otros pasajes.expresan la misma noci6n* 3. NECESIDAD Y POSIBILIDAD Ya se ha mencionado antes que en Ia escuela estoica se discuti constantemente sobre la inter- pretacion de los condicionales. En el origen de las {tes opiniones dominantes estuvieron Diodoro Cro- no, Filn_y Crisipo. Estos hombres formularon también teorias acerca de las definiciones precisas de «necesidad» y «posibilidads, y se veri en lo que sus teorias sobre el condicional estaban muy estrecha con sus teorias acerea de sidad. Parece oportuno, por lo tanto, resefar brevemente los puntos de vista estoicos sobre la necesidad y la posibilidad. La comprensién de la teoria de Diodoro Crono esta dificultada por el hecho de que, segun parece, Consideré las proposiciones como si contuvieran va. iables de tiempo. Sus ejemplos traen siempre ex- Presiones como «Es de dia, y dice que son ver- daderas en ciertas ocasiones y falsas en otras, o que se convierten en verdaderas y que se convierten en falsas. Parece, pues, que en vez de habérselas con Jo que hoy llamariamos «proposiciones», estaba de hecho considerando las correspondientes funciones formadas afiadiendo «en ¢» a cada proposicion: «La nieve es blanca en f», «La hierba es verde en to. Es de dia en t, ete. Asi, «(¢) (la nieve es blanca % Vitae Vi © SVEN, ‘Buena parte de la descrpcion de la tenia de Diodoro que sigue esta mcluida en mi artcule «Disdovean Implcations 68 en 1» representaria la proposicién tipo diodérica La nieve es blanca’ es siempre [cie‘] verdadera» y Ef) (la nieve es blanca en 1» representaria la asercion “La nieve es blanca’ es a veces [nore] verdadera». (Las palabras «siempre» y +a veces» tienen, desde luego, que tomarse aqui en sentido temporal.) Si simbolizamos ademas con 1° el mo- mento presente y con < la relacion de precedencia temporal, podemos expresar aserciones diodéricas suo Es de cocter tee yewderie ) CEs A noche’ no volver nunca a ser verdaderas. Se con- vierten, respectivamente, en: (2 U <1. Bs de noche en 1) ~ (Bi) oF <4, Bs de noche en 0, La famosa definiciGn diod6rica de sposiblen, cé- lebre en toda la antigiedad y tema de libros enteros de criticas, suele formularse asi: «Lo posible es lo {que es 0 sera». Mencionan esta definicién muchos autores antiguos en muchos lugares; pero slo Boe- cio trae las definiciones diodéricas de los términos estrechamente asociados— imposible», «nece rio» ¥ «M0 necesariow™, las cuales. a'su vez. mestran que ta definicién de posible era ligeramen- te eliptica, Deberia haber sido: «Lo posible es 10 que es 0 sera verdaderon. Estas son las otras tres definiciones: «Lo imposible es lo que, siendo falso, no sera verdadero»; «Lo necesario es lo que. siendo verdadero, no serd falso»; y «Lo no necesario es lo que es’ 0 sera false. ‘Su formalizacion por el © Al, An fre, Walls, 18, Akan vee ssn nl Sei ios or pe oe ee ion 2 mga bien er em Cov. ae fou, pote ew nie ae ana. ana Rezite bave is Socio, In De Imerp, ed. secunda, Meises. 24 69 método arriba descrito pone de manifiesto que se satisfacen ciertos requisitos importantes: By tp es posible ene por "ip en VEO) <1 pen 2) tp es imposible cn't* por pen tint 9— p i Sommers sane, De esia manera, el definiens de 1) es la contra: dictoria det definiens de 2), tal y como debia; y, asimismo, ¢l definiens de 3) es la contradictoria del de 4). Ademis, es evidente que, segiin estas defi niciones, una proposicién es posible, si y s6l0 si Su negacién es no necesaria; y es imposible, si y sdlo si su megacién es necesaria®', Por lo tanto, sean los que sean los otros posibles méritos de estas definiciones, hay que admitir que guardan unas con otras las relaciones adecuadas’?, Diodoro, comprendiendo, al parecer, que las cua- tro definiciones pueden considerarse dependientes 5 antendiendo, en lina con nuestm interpretacion de lox cnumciatios Woon, ge '= ip ent! ex euler 8 (9) 5 Es imteresante observar que Boccko mismo no compreniis las definicones estetas. que ox ha conserved, Doses sel Silent modo una dom esa de a propoiome p91) ‘fos esoicos}dviden ass roposiciones unas props dicen, son posibles, otms son imposbles: de le posse, unas ‘som necesaras Os som eves. aa ver Aeenie las no nee sia, unas Son ponibis otras Som iy sible. ‘Com ello ponen intensata y lemeraramet a fo poste un tempo como pénero y como especie ve To no nevenrio = Sin dda, Hose prensa eo un diagrams eae po, Proposciones Posbles Iemposiles Necesarias No necesaras rea ir de la primera, intent6 construir un argumento para justificarla", El trilema resultante fue llamado «el Soberano» (6 kypueiay), y la gran fama de Diodoro como ldgico se bas6 ante todo en él. Pero, desgra- Ciadamente, s6lo poseemos informacion bastante Sobre el argumento como para hacer de su verda- era naturaleza un problema torturante. Varios autores hacen mencion de él nombrindolo, pero Unicamente esta tratado por Epicteto"*, y su refe- rencia es demasiado vaga para servimos. Sin em- bargo, dive al inenos esto: Diodoro sostuve que las tres proposiciones siguientes no podian ser todas verdaderas: 1) Toda proposiciin verdaders sobre el pasado es ne 2) Ua proposicin imposible no puede seguir de una proponeion posible 2), Hay una propossion que es posible, pero que no es senders net vender Como, segtin Epicteto, las dos primeras. proposi ciones le parecian a Diodoro més plausibles que la Tercera, renuncid a ésta, y ello explica su defini- cion de Jo posible como «lo que es verdadero 0 sera verdadero», Sigue diciendo Epicteto que otros, filosofas eligen vias diferentes para escapar a la ie que dean los extenos. Pra 0p. is p43, comete intial Squivocacn que Boecio. Ch. Zeller. ap. ei va 3 paste Tp. 110, nota 2 qtehindros dn An Pr, ed, Wallies, p. 184. Vid. nota 4: I frase siguiente est «¥ para estableeer eva [la nowion Je po Silda Tue popes por Drodore el argumento “Soberane = Mi Ln 1 ey ae, sidopnin pair avcera Kose yp ar us tos mt maine apie Ghana. 7a Tas mapehyAides abies ran ebay mi 1g, Sumer dBeraron fy imohwtetr. we te Somezov lice 8 6r arr Game ob Boras. vir The natgne naveny & Sbopor rj tov rparew Bygte nuberorir. Tevdyehoary wpos zapecraot Toi Miybay else Biron & i tore eke ofr dificultad. Cleantes y su escuela aceptaron las pro- posiciones segunda y tercera, en tanto rechazaban Ta primera; Crisipo aceptaba la primera y la tercera, mientras que negaba la segunda. Es cosa notable que nadie impugné el alegato de Diodoro sobre la incompatibilidad de las tres proposiciones. La cuestion es: (por qué son incompatibles? Apenas hay indicios bastantes para justificar ni si quiera una conjetura, pero, naturalmente, ello no ha impedido los eruditus estar seguros sobre el asumto. Zeller*® piensa que Diodoro confundia en la segunda proposicion la consecuencia logica con la consecuencia temporal, y que su argumento venia a ser éste: Supongamos (de acuerdo con 3) que hay una pro- posicion que es posible pero que ni es ahora verda- era, ni lo sera. En tal caso, su negacion es ahora verdadera y seri verdadera siempre. En cuanto el presente se haga pasado, la negacién de la propo- siciOn se hard necesaria’(segin la primera de las proposiciones de Diodoro). Pero si su negacién se hace necesaria, la proposicién misma se convierte en imposible. De este modo, una proposicion que % Zeller, op. cit, vol 2, parte 1, pp. 268270. Cf. tambien el ariculo de Zeller «Lieber den sapuctae des Megarkers Di idoruss, pp. 151-189, en el que expone as el argument: Si Tera posible alge que nies mi sera de algo posible se Sepia algo imposible. Ahora bien, Je algo posible mo puede sepoirse fila imposible. Lulego 90 es posile nasa que mi es 1 ser (Ea premisa menor de este razonamiento —que de algo posible ‘no Se Spite nada imposible se presuponia fecomoetta, En ‘camibio, fa premisa mayor hipotéica nece aba ulterior funds ‘mentacion, 9 la abluve mediante la proposicnn Je gue tno pasado ex necesano. En efecto, si ovurre uno de dow casos {Qe se exeluyen mutuamente, queda con ello supeimida a pos Diidad Uel otro, pues lo que ba suceido no puede mosiearse [ar rapedmhoion deuynatn), El segundo eae es, pus, ors Impositle. Por tant santeshubicra sido posible, hab Sree dor cree ‘Diodoro, algo impoble & purr de algo posible CF ambien Pranth op cite pp n era posible se habri convertido en imposible, vio Jando la segunda proposicién de Diodoro, Esta explicacion no es muy satisactoria. Estriba, cen primer lugar. sobre la idea de que Diodoro confundia la sucesion temporal con la consecuen logica: pero esto es escasamente verosimil, porque el propio Diodoro se hailé en el centro de un debate muy sofisticado acerca de la naturaleza de la con- secuencia Kigica. El termino usado en la resena de Epicteto es dixohoudeir, que es el mismo empleado por Diodoro para es consecuente de» en este de- hate. Por otra parte, parece improbable que Crisipo haya pasado por alto una confusion tan elemental: de hecho, puso objeciones a la segunda proposicion de Diodoro, pero no basandose en que no se refi riera a la consecuencia logica®. Mas, aunque es fécil encontrar reparos a la ex; fil hallar una mejor. Toda buena explicacién deberia ser compatible con el supuesto de que cuando Diodoro decia Suveeri Gidiveror jxh axoXovbeds usaba la palabra dxohou- feiy en la avepcin diodsriea, Pero en tanto no se tencuentren nuevos indicios, ia posibilidad de dar on una explicacion satisfactoria esta casi suprimi a, porque, a pesar de que Diodoro predica normal- mente la necesidad de lo que en realidad son fun- iones proposicionales, parece que, en la primera de sus tres proposiciones incompatibles, la necesi- ddad se predica de una proposicion. Considerese la funcion: «Socrates muere en 1. Ahora bien, esta funcidn proposicional es satisfecha por ¢ = 309 a.C.; pero, desde luego, no es nevesaria en el sentido de Diodoro, ya que no se cumple para todos los va- % Crisipo puso en tela de uicio la segunda proposicion de Dioworo e intento encontrar un ejemplo en vont Vid. nota 21 Cr también Pluareo. De Sioie. Repusm.. cap. 46, p. 10834, Proclo, on Pas, Parm. WW, 13 (SVF Ml, 22), B lores de la variable temporal. Probablemente es la proposicién ~Sdcrates murié en 399 a.C.» lo que ahora es necesario’”. Por lo tanto, en la primera de las proposiciones incompatibles de Diodoro parece estar usada la palabra «necesario» en un sentido diferente de aquel en el que Diodoro solia usarla ‘De nuevo ¢s el comentario de Boecio la mejor fuente para las opiniones de Filon acerca de la po- sibilidad"*. Por el sabemos que, segin Filon, una proposicién es posible «si en su naturaleza intima es susceptible de verdad». Asi, kt proposicion «Hoy voy a releer las Bucolicas de Tedcrito» se dice que 8 posible de acuerdo con el criterio de Filin, pues- to que (por lo que se refiere a su naturaleza) puede ser afirmada con verdad si nada exterior impide que ocurra ese hecho. sLo necesarior se define como lo que, siendo verdadero, no es, por su naturaleza misma, susceptible de falsedad>. =Lo no necesarior es «lo que por su naturaleza es susceptible de falsedad>. Correspondientemente, «lo imposible» es slo que segiin su naturaleza no'es susceptible de verdad. Las demés fuentes concuerdan todas con este forme sobre la opinion de Filén. Asi, Simplicio, tratando la cuestion de como puede decirse si algo es cognoscible 0 perceptible, dice: »;Decidiremos nicamente por la “aptitud’ [2rernBeusrmral, como decia Fil6n, incluso si no hay conosimiento de ello 2 Desde neg. no esti del todo claro como hay que iter iret laprinere proposnion de Dado. He spuewto We gue Fevdeci lo mismo que e! principio escola eitado por Letbeiz thls Teadcea (Phi. Schtien, ed. Gehan, v0 6. pith Untnguodgue, quando est opoit esses Yes Wet, due. puesto que tna proposcisn cs venaders, cs meveva ye que Su-negicion implica una contydejon—). CT Ansngces, De iver 9.19 8 23: 30 piv oye 7 bray py ek 1B lr Gea en tine Ob wie re Shonen doo ane ob pate Cte SP Boecio in De Iter. ed seeunda, Meise, 234 ” ni lo habré jamis?» Por via de ejemplo, dive que tun pedazo de madera en el Océano Ailantico es combustible «en si mismo y segin su naturaleza propia, aun cuando probablemente nunca sera que- ‘mado**, Alejandro menciona en su resefia cl mismo cjemplo, y dice que Fikin juzgaba la. posibilidad por «la mera ‘aptitud” (€rempBewraral para existir, incluso si la existeneia debia ser impedida por la necesidad externa», Esta tiltima observacion so- bre la necesidad externa puede parecer desconcer- tante®!, La resenta de Filopén muestra con maxima claridad el cardcter circular de la definicion de Filon: «Pilén dice que lo posible es lo que ha su- cedido 9 lo que puede suceder pero no sucede ‘nunca», El ejemplo de Filopén es que una concha en el fondo del mar es perceptible, aun cuando nadie la vera jamas. Su version, como la de Alejandro, no concuerda completamente con lo que refirid Boecio; pero, al parecer, el punto esencial es que Filén estimé la posibilidad de un suceso por refe- rencia a su aptitud interna para ocurrir, y no por referencia a si ocurriri o no. Se sube poco sobre el punto de vista de Crisipo, excepto que, en desacuerdo con Dicdoro, sostenia ‘que ciertos ‘Ssucesos que nunca tendran lugar son sin embargo posibles*’. Afirmaba también que no fa necesario que Cipselo gobenara en Corinto, aunque el oriculo lo hubiera aseverado mil anos antes, Para que algo fuera posible se requeria tan © Simplicio, Jn Cat. ed. Kalbeiseh, 195-196. Alen, ds amr. ed. Wallen, I Alejandro Jo inserta para distinguir la opine de Fon de de Afsiveles, que, sepun Alejindro, era un punto de visti wermedio ent los de Diodoro y Filo: =Lo posible es lo que 5 capa event al Sery noes peti, mae ho Nemes eFilopén, fn Am. Pr ed. Wallies, p. 169, lneas 19 5, © Cheeron, De Faro, 12 Vid. Zeller op. cit, vo. 3, parte 1 p. 110, nora? 75 solo que fuera «capaz de ser». Esto parece ser esencialmente lo mismo que la teoria de Fildn. Quiz la informacion que se ofrece en Diogenes Lacrcio, Vitae VII, 75, representa la opinion de Grisipo**. Segin ella, algunas proposiciones son po- sibles, otras son imposibles, otras son necesarias y otras Son no necesarias. Una proposicién posible es la que «admite ser verdadera, cuando sucesos ex- ternos no impiden que sea verdadera»; por ejemplo: sDiocles viver. Una proposicion imposible es la que hho admite ser verdudera; por ejemplo: «La Tieira Vuela». La proposicién necesaria es la que, siendo verdadera, no admite ser falsa, 0 admite ser falsa pero lo impiden circunstancias externas; por ejem- plo: «La virlud es beneficiosir. La proposicion no evesaria es la que es verdadera y es capaz de ser falsa (y las circunstancias externas no lo impiden); como: «Dion anda-. Esto se parece mucho a la opinion de Filon, pero esta distinguido expresamen- te de ella y caracterizado como la teoria estoicat® Como vamos a ver ahora, los distintos modos de interpretar las proposiciones condicionales estaban estrechamente Felacionados con los diversos puntos de vista sobre la necesidad y la posibilidad % Phutareo, De Stoic. Repuen.. cap. 4, p. 10554. puede in terpretarse come indicando que Crispo mauve esia vpinien. COhhervese la semejriea uel temple con jmp de Cs¥po fen Ciceron, De Fato, 12 "S Boecio, In De’ Incerp., ed. secuada, Meiser, 24235, 16 CAPITULO IV CONECTIVAS PROPOSICIONALES RESUMEN Los estoicgs formularon definiciones veritativo- funcionales de todas las conectivas proposicionales ‘mas importantes, y definieron también algunas co- nectivas no veritativo-funcionales. Estas definicio- nes y las diferentes controversias sobre ellas cons tituyen el objeto del presente capitulo. Lat primera seccién, acerca de la implicacion, contiene una re- censidn del cuddruple debate sobre las condiciones de verdad de las proposiciones hipotéticas. Se muestra que el tipo fildnico de la implicacién era exactamente lo mismo que la moderna simplicacion materials. Se define la implicacion diodorica y se la distingue de la implicacién crisipica, que es el equi- valente antiguo de lo que ahora se llama simpli- cacion estricta», Se pone de manifiesto la conexién entre los puntos de vista de Diodoro acerca de la implicacion y de la necesidad. En la secci6n segunda se trata de la disyuncisn, Los estoicos distinguieron entre la disyuncidn inchu- siva y la exclusiva, ofrecieron definiciones verita- tivo-funcionales de ambos tipos y formularon tam- bien una definicion no veritativo-funcional del tlt mo tipo. La tercera seccién se ocupa con a conjuncién, @ la vez que con varias otras conectivas. En la cuarta seccién vemos cémo se definia la implicacién en términos de conjuncién y negacion; n y también como se definia la disyuncién exclusiva ‘en términos de negacion y equivalencia. Se seftalan ciertas dificultades concernientes a los testimonios acerca de estas definiciones, 1. IMPLICACION Parece que las cuestiones de lgica se tomaban muy en serio en los tiempos antiguos. Cuando Dio- doro Crono fue incapaz de resolver sobre la marcha tum acertijo ldgico que le fue propuesto durante un banguete real en Alejandria, murio desesperado! Filetas de Cos, otro légico, fle victima de la famosa aantinomia del’ Mentiroso, como sabemos por su epitafio: Soy Fleas de Cos. MMe hiseron mone! Menon $Tas noche de incom por su cas? Asimismo, el problema de las condiciones de verdad de las proposiciones condicionales, aunque por lo visto no originé ninguna fatalidad, desenca- dené tanta controversia en Alejandria, que cuenta Calimaco: «Incluso los cuervos graznan en los teja- dos en tomo a la cuestiOn de qué condicionales son verdaderos». Es verdaderamente una pena que se hayan conservado tan pocos resultados de todo aque! debate. Investigaremos en esta seccién qué queda del tra- tamiento antiguo del problema que acabamos de "Bi Co Vaae A 1 2 then 1X. 401c 2 Sestu, Ad. Math, 1, 309-10. Calmaco fue uno de los mis céebnes gramaicos y'poetasaleandrinos, Fe ef bbtecari> Principal Se la gran bibioteca,de-260 x 340 C. Bratnones, ¥" Apolonio de‘ Rolas se contaron entte sis -dscipulos. Hay Feferenciay al debate en Ciceton. Arad: ly 18, Seno, Ade Math. Vil 13.38 Hyp. Pyerk it, 1 8 mencionar. Sabemos que el debate fue iniciado por Diodoro y Fildn en la escuela de Megara y que fue reanudado y ampliado por los estoicos. La mayor arte de éstos parece que adoptaron la posicién de Filon‘, aunque hubo defensores de otros tres puntos de'vista por lo menos. En la época moderna C. S. Peirce fue el primer logico competente que coments el antiguo debate*. Quedo impresionado por el hecho de que la nocién de implicacion de FilOn era exactamente lo mismo que lo que moder- namente se llama simplicacién material», que tam- bién ha provocado amplia controversia. Otros auto- res han hecho referencia a este mismo punto de semejanza®, y hoy es probablemente la cosa mis sabida sobre la logica estoica. Comencemos repitiendo la definicién de condi- ional (suvmupérov): es una proposicién molecular ‘compuesta mediante la conectiva «si». Por ejemplo: «Si es de dia, es de diav; 0: «Si es de dia, hay luz»’. Esta conectiva afirma que lo segundo se sigue logicamente de (éxoXovdeiv) lo primero; pero la cuestion de encontrar un criterio correcto para este ssseguirse» es precisamente lo que planted tanta controversia en la escuela estoica’, Sea dicho entre paréntesis que no hay duda en que el término «con- dicional» (evrnuuévor), que parece haber sido usa- do por primera vez. en este sentido técnico por Cri- Hyp. Prk, M, 10H; Ad. Math. VU, 25, 5 Colected Papers, vo ily pW vol ML, pp 27928 + Viale'por Gempl. tos aricuon de Hurst Chcolm, kasiewics(cZur Gechichte der Ausopealogite, Bochemid (De Concquentis,p 3) y Reymond” Vel amen De lacy, Piste ‘demu! Om Methods of Inference, p59. nota Stcis Sito pr 2228: A Task, dno to Lone (New York, Oxterd, TBin)p 2h, note 3; WV" Quine, Mathematical Lote Ne. York; Bort, 10), pi **Sentoy Ade. Math. VI, 108, 2 Diop vitoe vin 1 > Aa Maik. Vinh, 12. sipo'®, conservé su sentido técnico a todo lo largo de la historia de la logica estoica. En los fragmentos estoicos no se aplica nunca el término a un argu- ‘mento 0 a un esquema de inferencia; todos los ejem- plos que traen los autores antiguos para aclarar el significado de ovimuevov son proposiciones condi- cionales. Todas las definiciones del término —y hay ‘muchas— estén de acuerdo en que un condicional 8 una proposicién, no un argumento'! La postura de Filon en el debate antiguo fue que un condicional es verdadero, si y sélo si no tiene antecedente verdadero y consecuente also"; esto es: vale el condicional, a menos que su antecedente sea verdadero y su consecuente sea falso". Esta definicion, que a los logicos les es perfectamente familiar, sonaba, por lo Visto, paradéjica a algunos fen aquellos dias, como efectivamente les suena a algunos ahora. Por lo tanto, se repite entera en ‘muchos lugares en los fragmentos, y hay muchos ejemplos'*. Sexto trae para la combinacion (VY): «Si hay dioses, entonces cl universo esti regido conforme a la providencia divinay; para (FF): «Si la Tierra esta volando, entonces ‘la Tierra tiene alas»; para (FV): «Si la Tierra esti volando, enton- ces a Tierra existe»; y para (VF): «Si esta en mo- jento, entonces esta andando- —en ¢l caso, dice Sexto, de que el hombre en cuestiGn esté moviéndose pero no ande'®, Didgenes, que presu- miblemente seguia también un manual estoico, ofre ce un grupo afin de ejemplos: para (VV); +Si es de dia, hay luz»; y para (FF): «Si es de noche, esta Galeno, Opera, ed. Kuhn, XI, 99 (SVF I 212) Vid. cap. Vi § 2 Ads. Mevh, VIM, 112 bid, 6 Bbid 11385245 9,333,378, 49: Hyp, Bye. Hh, 106985 Vuge Vii, 3 Sgt Meith, VIM, 248: AL, 1617 0 ‘oscuro» (suponiendo ambas veces que es de dia). Para (FV) trae: «Si la Tierra yuela, entonces la Tie- tra existe»; y para (VF): «Si la Tierra existe, la Tierra vuela» Estos ejemplos y definiciones muestran con chi- ridad que la implicacion filénica es lo mismo que Jo que ahora se llama «implicacién material». La tabla de verdad misma estaba anticipada, segin puede verse en el pasaje siguiente Ya que, pues, hay euro combinaciones posibles pars las partes de un condicional ~antecedente verdade?o ¥ consccuente verdadero, amecedente flso'y comecucate Taso, falso y verdadeio a la inven veruidero y {also dicen queen tos tes prineros casos el conden ¢ verdadero (0 sea: si c|antocedente ex verdader onsecuenie es veradero, ex verdadero 5 falso yfilso, dernevo es verdadero; lo mismo, pra Taso y verdade7: ero que tan S00 es Yalso\em un caso, saber. cuando e fmtecedente es verdadero y el conskeuene es also” Incluso el orden de enumeracién de los casos parece haber sido convencional, pues siempre en- contramos (VV), (FF), (FV), (VF). ‘Sin embargo, Diodoto sostenia que una proposi- ciGn condicional es verdadera «si no es ni fue ‘nunca posible que el antecedente sea (0 fuera) ver~ dadero y cl _consccuente sea (0 fuera) falso»'® Para distinguir esta opinién de la de Filén, Sexto ofrece un grupo de tres ejemplos criticos: 1) Sies de dia, entonces estoy vomversando 2). 81 en de noche, entonces extoy conversando. 3) Sies de noche! estones es de di Supongamos ahora que es de dia y estoy conver- sando. Entonces, de acuerdo con Filon, 1) es un Vitae VU. 81s. "Ade. Maa WIM, 247, " fbid., VIS ss. Este pasaje y el de Hyp. Prk. I, 10 ss. cconstituyen nuestras mejores comparseiones de las Spinone’ Filon y Diodoro acerca de la impliacisn condicional verdadero, ya que su antecedente («Es de dia») y su consecuente («Estoy conversando») son ambos verdaderos. Pero Diodoro no estaria de acuerdo en que el condicional sea verdadero bajo la presente suposicidn, pues es posible que el ante- cedente sew verdadero y el consecuente sea falso Para probarlo, se refiere al tiempo «en que todavia 5 de dia, pero ha dejado de conversar». Fue tam- bién posible que el aniecedente fuera verdadero y el consecuente fuera falso: el tiempo en cuestion gs el tiempo i jams Tuc tapas de tener antecedente verdadero y consccuentefabo. Sepin él el endicionalrecien ct parece sr tals, ya que, cuando side din y'me he qvedido callado, tendraaniccedente Cf. C1 Lewis y CH. Langford, Symbolic Logie (New York. Appieton-Centiry. 1932), pp 122, 124 =p implica.’ 0 ‘p implica esricamente g° quiere decit “és false que sea posble Que p sea verdadero y sea falo™. Vad ambien C1 Lewis Survey of Symbolle Logic (Berkeley, University of Californie Press, 118), 9. 2 86, Ae gate ee on wane omar aval Se eee SSiace tee eon ee ena Coes pode mye Set ores cheae genes Bo ee Serer en Bp ene ers aa ee whnea ommac sre ote doce eer aineiPils ne Set fe oe acer cee eres Oa E] ejemplo de implicacién diodérica citado en este pasaje indica que los antiguos eran conscien- tes. de que ln implicncion diodorica, igual que laf lonica, tenia su paradoja; a saber: que una. propo- sicion que es ~siempre falsa~ implica cualquier pro- posicién, incluso su propia negacién. El tercer tipo de implicacion, que estriba sobre la incompatibili- dad de la negacién del consecuente con el antece- dente, se cree que representaba la posicion de Cri- sipo®, Puede suscitarse una cuestion respecto del significado de «incompatible». Juzgando por el lugar de este tipo en Ia lista —la cual, manifiestamente, se proponia proceder del mis débil al mis fuer- te—”, somos conducides a la suposicién de que , y el asunto del que se trata en el lugar citado es la definicién es- toica de ssefial indicativas’*. De este modo, el pac saje no arroja luz alguna sobre la naturaleza de la implicacién diodérica © Chisholm. op. ci. p. 383; Sexto, Hyp, Patek. 111. EL passe Gitado contiene unt version ertinea de Bury del termine uma. Chisholm, ap. ct. p. 382. Bl pasaje citado por Chisholm fs, taduccion de Sexo, Ade. Maile VIM, 249, en Lach, oP Videel Glowaro, vv. sadmpxperny 9 DISYUNCION Parece que hubo una controversia, correspondien- te a la anterior, acerca de la disyuncidn; pero, des- graciadamente, ignoramos los detalles de este de- bate. El asunto fue aproximadamente como sigue. Dos tipos fundamentales de disyuncién fueron reco- nocidos por los estoicos: la disyuncién exclusiva y la inclusiva. La disyuncion exclusiva (Guteryuévor) fue la mas usada, y ¢5 el dnico tipo de disyuncién que aparece en ios cinco esquemas de interencia fundamentales de la logica proposicional estoica. Esti claramente distinguida de la disyuncién inciusiva (rapadueeryérov), que, como sugiere su nombre Griego, se consideraba que carecia en cierto modo de las propiedades que tiene que tener una dis yuncion, Por lo que hace a Ia definicién correcta de la disyuncion exelusiva, pareve que hubo al menos dos opiniones. Segin una de ellas*", una disyuncién exclusiva es verdadera, si y s6lo'si un miembro exactamente es verdadero; 0, como la expone Dic- genes: una disyuncién exclusiva afirma que exacta- Mente una (ro érepor) de sus (dos) proposiciones componentes es falsa"?. Esta es la definicion ver- tativo-funcional habitual, y corresponde bien a los aargumentos basicos cuarto y quinto*®, De acuerdo con éstos, si se supone dada una disyuncion ver- dadera, puede inferirse de la verdad del_ primer miembro la falsedad del segundo, o de la falsedad del primero la verdad del segundo**, “Prantl Geschichte der Logik im Abendlamde, p. 4h) 1 Sexto, Adv, Mavh VIII, 28. # Dog. Vaae Vil, 72 Vict cap V + Aeste espeeto, tiene cierto interés 40 siguiente: «La di Yuncion exclusiva anuncta que. w esto, aguella ny guc, a ‘quello, esto nos tse) Apolamio de Alpine: Mle Sey 8. Sehinener. 222 8 Hubo entre los estoicos quienes no consideraron verdadera una disyuncion a menos que sus compo. hentes fueran incompatibles, 0 sea, a menos que no pudieran ser verdaderos ambos componentes. Tene. ‘mos acerca de ello el testimonio de Gelio y Galeno, € indicios en algunas observaciones de Sexto. Tras Presentar el famoso argumento de Bias sobre el matrimonio; te cases con una mujer hermosa, 0 te casas con ua fe, ies hermosa, la compartis con Sitos Stes fea, serd'un canigo, Pero ninguna de estas cosas es cescable Luego no te cases" Gelio lo critica sobre la base de que la disyuncién fo es correcta (iusium), ya que no es necesario que tuno de los dos disyuntas sea verdadero, «lo cual 5 necesario en una proposicién disyuntivan*™. kn otro lugar sostiene, de modo semejante, que la afir. macidn de los que dicen: «Las drdenes de un padre son. honrosas o viles> no es una disyuncidn verda- dera y regular (inués et vouyuoy bueleryuevor), ¥ gue le falta el tercer miembro: «O no son ni honro- Sas ni viles»*?. Aun en otro pasaje, pone Gelio to- davia mas de manifiesto que la logica estoica con la que habia entrado en contacto tiene que haber Propuesto un tipo de veritativo-funcional de dis- yuncién: pf rt he ba ta tt ene eet ements | Sots areca Soar ee ccs ee oe Daas Ree ae Gallo, Noctes Auiae V, XL, 12 thal V9 © Ibid. WN 1 4 Ser fais, Pero si ninguna de ells es venadeo. 0 0 ton todos, o fo es mas de uno, 6 + x Uyumios no son incompaties,o sas conadictoras no som contac. monde a diyuncion «fsa Galeno refiere que 10 que los antiguos llamaron =protasis hipotéticas discontinuas» es llamado «dis- yunciones» por los filésofos recientes (0 sea, os estoicos)**, y Galeno mismo lo llama «cuasidisyun- ciones»"®, También nos dice que las partes de una protasis hipotética discontinua exhiben incompatibi lidad parcial". Esto quiere decir que no es posible ‘que ambas partes sean verdaderas, aunque es posi- ble que ambas sean falsas. Galeno contrasta esta opinion més bien extrafa con la suya propia’, segin la cual el término . El pasaje fen cuestion, que es aceptado por Lukasiewicz como testimonio de que los estoicos estaban al corriente de la definicion (p V q) = (~ p 3 4). €8 como sigu YY una proposcion como «Es de dao es de noche= <5 llamada =proposicon dsyntnas po los flaos f= nies. eprtants hiotctica comin po os Sing. peSunie discomtmun purcce tenet el misma Snificado que ina airmacin comb ests m0 3 de. fs de noche [ze cuando se dice en una forma de faba condiciones lama -condhcionals por quienes $00 ander sow Sonido, pe dnc beens) por quienes atenden a la naturleca de fo gue se ee Seiie'De modo samiar, un forma de tar com noes de nace, ex dedi es ina propos dsj or ta haturleza de Wo que se migmar pero poser eu el Fetus forma den conticiona ‘Aqui, sin embargo, se encuentra una gran diffcul- tad. La'disyuncion de la que se trata en esta afirm ccidn deberia ser una disyuncién inclusiva (rapabse- {exynévor), pero la palabra usada por Galeno es el {ermino estoieo para la disyunci6n exclusiva (é4e- {evyucvor). El ejemplo, ademas, es un tipico ejemplo, de disyuncion exclusiva. Por otra parte, podemos, estar seguros de que Galeno no se refiere a los estoicos en la frase «quienes atienden a la naturaleza de lo que se mienta»”?. La Solucién correcta de este problema ha sido hallado por J. W. Stakelum, autor de una excelente obra acerca de la ldgica de’Galeno”’. Muestra que Tis, Log, 9. He teaducido spinous por oprotasse. en ver de por spropesicions, pars sstnguto del temnno EMO iGione 7 ibid.. 11. Galeno dice expresamente que los sepidores de ‘Crisipo aiienden al modo de hablar en ver de a las cOsis Ue Tas gue se habla WS Galem and the Logic of Propositions. pp. 48-53. Vi. tam bien pp. 7374 100 € la palabra «condicional> (ovimapéror), ¥ no la palabra «disyuncion» (BueCevyyevor), la que se usa cen este pasaje en un sentido inhabitual. Pues Galeno dice que hay tres relaciones entre estados de cosas: 1) incompatibitidad, entre los que nunca existen a la vee; 2) consecuencia (dxodovdta), entre los que coekisten siempre, y 3) una relacion la que a0 aun nombre especial, y que es la que hay entre los que a veces coexisten y a veces no coexisten”. Dice también que los estados de cosas son comple- famente incompatibles sies imposible que coexistan © dejen de existir simultaneamente”*, Los ejemplos de Galeno muestran también que considera que los estados de cosas presentan completa consecuencia si existe el uno cuando y solo cuando existe el otro. A partir de ello, vemos que las condiciones bajo las que A y B son estados de cosas completamente incompatibles son exactamente las mismas que las condiciones bajo las que A y ~ B estin en relacién de completa consecuencia. Evidentemente, pues, la proposicion que se asevera es ova o ¥y scondicional» se usa por «bicondicionals. El ejem- plo corrobora esta interpretacion”®. Pues «Es de dia» y «Es de noche» representan estados de cosas completamente incompatibles; luego «No es de no- che» y «Es de dia» representan estados de cosas entre los que se da cixoAoudia. Asi, el buelevyneror sEs de dia o es de noche» se dice que tiene el mismo significado que el evimypévov «Si (y sélo si) no es de noche, es de dia» Es dudoso que estas observaciones de Galeno indiquen que la equivalencia de que se trata les Tat Low, p33, tines Ibid. p', Hineas 17 5 "Toi... 9. lineas 5 38, ss 101 era conocida a los estoicos. Parece que mis bien dice que lo que algunas personas «que solo atienden a los sonidos» Ikiman ewmppevor es lamado die Gevywerov por ciertas otras «que atienden a la natura leza de lo que se mienta-. Ahora bien, quiénes eran estas gentes? Las dos términos, curmuwerov Y deelevypevor, eran términos técnicos estvic0s, 10 {que podria indicar que los dos grupos representaban facciones estoicas, Ademas, como Galeno dice en otro lugar que «los seguidores de Crisipo.... ponen mas atencion en el modo de hablar que en las cosas sobre las que se habla», hay alguna probabilidad de que los estoicos partidarios de Crisipo fueran una de las facciones. we capiTuLo v ARGUMENTOS RESUMEN Este capitulo consta de cinco secciones. En la primera se define « *, También Sexto resuelve ocasionalmen- te que un argumento es falso basandose en que st conclusion es falsa"”. Asi como los argumentos verdaderos constituyen un subconjunto de los argumentos vali bign_los_argumentos. demosirativos. (daobeuccuxot) san un subconjunto de Jos argumentos verdaderos. Unos argumentos validos —se nos dice—- tienen conclusiones que son previamente evidente, otros tienen conclusiones que son no evidentes'*. Por ejemplo, estos argumentos tienen conclusion nes previamente evidentes: Sies de dia, hay luz Es de dia Coego hay I Si Dion anda, Dion se mucve. Dion anda ego Dion se mueve Hay luz» es exactamente tan evidente como «Es de dia», y «Dion se mueves es exactamente tan ‘omiise de la version de Sexto: pues no silo es supertun —va ‘duc Io guc se sigue valnamente de preminas vedaderas tine que Ser verdadero sino qUe su presencia en est har hace redun ‘ante ie siguienie observacion Ue Sexto. Sin embargo, le gan lainad. de kos posajes das entender que tanto Sento como Diogenes estahar efinéndose a manuales estlcos muy seme jantes, yes posible que la observacion redundarte se'deba 2 Sento, hientfas que Ia Gefiniion que ls prevede estartacopiada el manual Sea de ello lo. que quiers. et contenido Kgico de Is observacidn no queda afectado. Galena, De Peccatorum Dignatione, ed. De Boet, p. Sb lineas 2 5, ‘Ade. Math, VIN, 418, Para todo el \fatumiento de ls argumentos demostratives, ‘ucstras fentes, a menos gue se sefale ura cosa, son: Ade ‘Math VUll, 08314 € Hyp. Pore. Ul, 4018, 108 evidente como «Dion andar. Pero el siguiente argu- mento tiene una conclusiGn no evidente: Si dor ye a ans de lanerce, a i El tudor faye res dela superfle ‘Luego lapel viene pote inteibles Ademas, de entre los argumentos vilidos que tienen conclusiones no evidentes, unos xavanzan> meramente hacia sus conclusiones (@pobevrias); otros avanzan «por via de descubrimicnto~ (&dubeu- texas Kat éxxaurrixox). Esta distincion, que no ¢5 en modo alguno clara, se supone que se ilustra con el siguiente ejemplo: Si un dios te ha dicho que este hombre sen ric, Este di [Zvs) ea dicho gue este hombre ser io. ego este hombre sera neo. Segiin Sexto, en este angumento aceptamos la conclusion no por la fuerza del argumento, sino por nuestra fe en la afirmacién del dios. Por con- Siguiente, éste es un ejemplo de argumento que me- ramente avanza hacia su conclusion y no la «des- cubre». Pero en el argumento acerca de los poros, Jas premisas sirven de algiin modo para «descubrir nos» la conclusién. Se dice que un argumento de este tiltimo tipo es demostrativo. Asi, pues, el argumento demostrafive).es el que es verdadero y sirve para revelar una conclusion no evidente. Didgenes 10 define de modo mis sencillo Como «él argumento que, mediante lo que se aprehende mas claramente, concluye lo que se aprehende menos claramente>". Luego hayl tes tipos principales de argumentos:| los vilidos, los verdaderos los demostrtivas: De ellos, los demostrati “siempre validos y ver- daderos; los verdaderos son siempre validos, pero Vitae Vi ‘no son necesariamente demostrativos; los vilidos no son _necesariamente verdaderos 0 demostrati- vos®. Sexto, segtin acostumbra, ofrece ejemplos criticos para ilustrar Jos tres tipos y_distinguirlos, mutuamente. En primer lugar. dice, supéngase que es de dia y considérese el ‘siguiente argumento: Sies de noche. esti osu. Es de noche Lacgo esta oscuro” Este argumento, segiin él, es valido; pues, cuando las premisas se’ conceden, se sigue la conclusién. Pero no es verdadero, ya’ que contiene la premisa falsa: «Es de noche» (0, como dice en otro lugar’®, ya que conduce a una ‘conclusion falsa). A cont ‘nuacién, y haciendo el mismo supuesto, considé- rese el Siguiente argumento: Sis de dia, hay ur Es de dia Tego hay hue Este argumento ¢s valido y es también verdadero, pero no es demostrative, ya que su conclusion es Previamente evidente. Un ejemplo de argumento ‘que, ademas de ser verdadero, es también demostra- tivo, es el siguiente: Si tene leche en sus pechos, ha concebido “Tene leche en sus pechos, [Liego ha concebido™™ “Adv. Math, VII, 412 55,428 8 bad. ML 2 bi, $13. En otco har typ, Py Uy 139) Sexto coms dera ef mismo elemplo. Dice que él argumento es vido pore ie proposicion condicional «Si (es de noche si es de noche sth oscuro), enlonces esta oscuro» es verdaderas pero gue el lrgumento. no es verdadero porque la conjuncion antecedeate del condicional e flsa, ya que contene un miembro fas. ode. Math VII, 312; ct 2 bid. 425. CE Hyp. Prk ik, 106; Arisételes, An. Pr, 27; Whet. 1.2, 16; Plton, Mees. 3376, 10 a —eSTRRASS intervene en el término estoico «indemostrado» 2 Ade. Math Vill, 23, Pero en 228 se presenta esta misma caractrftics como ago diferencial de los argumentosindeino™ tao simples, Ee esta una grave iiealtad se ps 4-209" En F 2 se olrecen employ de las varies especies de egumeatosinderostados ut cuando se aplica a los argumentos basicos. Pero si esti claro que no es el mismo sentido que interviene en la palabra «demostrativo»; pues un argumento no valido seria no demostrativo, pero no seria inde- mostrado*”. También parece que los cinco argu- ‘mentos basicos no se llaman «indemostrados» por- que sean axiomaiticos, en tanto que otros argumen- tos se prueban por referencia a ellos”; pues los ar- Bumentos que se prueban por referencia a los cinco rgumentos indemostrados se llaman también argu- ‘mentos «(no simples) indemostrados»*®. Al parecer, todo argumento reducible a los cinco argumentos basicos es un argumento indemostrado™ Ala inverss, Jos argumentos de sla leches ¥ slo poross, ‘que han sido ejemplos de argumentos demosiratives, son tambien jemplos de aegumento indemostrado del pol Sh'Esto se opone a Lukasiewicz, «Zur Geschichte Jer Avssa senlogks, p. 117" «Entre las formulas. de inferencia, unas se onsidcran ‘indemostrales’ —ivego se aceptan como Corrects, [por asi deci, axiomaticamente: ls demas se recucen lat Indemostrables, Las formulas ue inferencia indemostables, © silogismos, quiza as establecio Crispo. Son las cinco sic ese» (sigue con una lista de los cinco tipos de argument in emowtiados) Cl. totus 30'y 31'y Zelle, Die Philophic der Griechen, vol. 3, parte 1, p18, ot | 3 Sexto, Ade. Madh, VIM, 282 % Supongo que junio con mis datas acerca de que «inde mostrado~ quiera. decir lo que otros han ereido, deb ofrecer iss explicacion de lo que Tealmente quiere decir. Paro no me 8 posible hacen. Sin embargo. congeturars fo siguiente. Segun Jos estoizos. gpud Sexto, un argimento es valdo sel cond ‘ional que le corresponde’ es Giadoricamente verdadero, Habra, fas al menos dos clases de argumentos vaiJos: aquellos CU¥O Cofdicional corespondiente es na tastlegis,» iavellos Suro ‘condicional corespondieme es verdadero diodorcamente. pero noes tautoloyien. a primera clase de argumenton seria la 10 lrgumentos indemostrados. © nclua Tos argumcntos. de lon finco tipos basicos y todos los argumentos denvables de ellos Ea segunda clase de argumentos constaria Je los argumentos sdemostras. Estos seian vidos. porque sus condiciones co- ‘respondents seran Uiodércamente verdaderos: pero, al menos respecto de algunos, la validez no seria inmeditameme evident, m2 Aunque se afirmaba que el sistema estoico era completo, se afirmaba también que no todo argu ‘mento valido es un argumento indemostrado. Dio- genes llama «silogistico» a un argumento, si o bien 5 uno de los cinco argumentos indemostrados, 0 bien es reducible, mediante una © mas metarregias, a los argumentos indemostrados. A continuacion ofrece un interesante ejemplo de argumento que es valido, pero que no es silogistico: AEs de diay 8 de nctes ex fal, Esueul Lego io es de nxhe Porque descancaria sobre una proposicin empiric, Asi, supe fen gue =Sien e dis, entooes el Sol ah sobre tet s diodoncamente verdadero aunque sea concebible que fara falso, el siguiente arpumento de una sols prema sein Po de argimento demotraso Es de dia [Ego el Sot esti sobre fa Tiers Esto, desde Iuego, es eonjetur del principio al fin. Diogenes ‘que oo presenca ef requisto e ser diodorkcumente verdadero fn eonesion con fa validez. sino cuyas observaciones smplcan mus bien el requisite de sor Kigicamente verdadero, mo parece Splicar el temino sindemostrados 4 argumestos. Que son de ables de Tos afgumenton tuvscos, Supueste, Que tanto’ Sexto como Diogenes seguian manusles escicos,crecmos my. vero Simil que’Sexto tuviera razon al decir quc las diferencias de Opinion sobre la implicacion erearon una gran confusion ‘mentos indemostrados sn angimentos indemostraos, cpor que hace meacion por separado de sios argumentos indemostradese Ye «los que som reducibkes alos argumentos indemostados:? Para “silgistion». cf Sexto, flyp. Byer Il. 189 1B No hay duda de que esto es seal de que los ‘estoicos distinguian entre la negacién de una propo- sicion y la afirmacién de que la proposicion es falsa™. Varios fragmentos mencionan una disputa en la escuela estoica sobre si hay argumentos de una premisa (iovodyujaroe Adyou)», La opinion de que 2% Observese que este argumento esta preentado por Ditge res come Ui argumente que nies indemestrado, mbes reduce ‘un argumento indemostrado, Por tanto, es caro que Disge bes no ests affecendo meraente algo que suponga que eS Uh rumen de est forma No: Platon esti muero y Prati vive Platon ests mueno Lego Piaton no 8 ive pues este tiltimo argumento lo caraterza como un aegumen 1 indemosirado (Vitze Vil, 81) Asi, pues, pare que los es foicos sabian istinguir entre la negacion do tna proposicion 1a afirmacion de que esa proposicion es fas. Comparese el afgumentg al que hace Tenciin Alejandro, In An Pr. ed. Walhes, p22 lineas 1758 Es de dia Dies que es de dia. idego dices la verdad Sepin Alejandro, este argumento es valde, pero no silopsico. Dos ejempo ma ibid, p. 343} son Dion dice que es de din. Dion dice que es de dia Dion dice la verdad Erde dis, Luego es de di ego Dion die la verdad ‘Otro ejemplo imeresante de angumento que es valido pero no silogstico es B se sigue de A. rs Lingo B. (Alejandro In An. Pr, p. 373, lineas 31-38.) Vid. ademis Gale: fo, Inst. Lag.» p. 42, lineas 18 ss y Sexto, Hyp. Pye I 186, °s Sexo, Adt- Mash. VIM. 443. Hyp. Prorh I, 167: Apuley. dn De Interp., ed. Oui, 273; Aijaniro, Im Top, Walbes, 48 La falta de aeuerdo , ‘que es «hacer claro algo que no parece conocerse, y hacerlo mediante lo que es conocido y clara» Un tltimo punto que debe mencionarse antes de gue nos volvamos a la consideracién de los cinco Lipos simples de argumento indemostrado, afecta a la definicion de «modo». Un modo (spares) es una especie de figura (oxiza) de argumento. Por ejem- plo, en correspondencia con el argumente ‘Si-es de dia, enionces hay luz Es de dia Lego hay luz tenemos el siguiente modo: Silo primero, entonces lo segunde, Lo primer ‘Lego Ho segundo Alejandro, Jn Top., ed. Wallis, p. 10. Cf. Cicerén, Acad, 11,96, para otto ejemplo de slogsmo Gupicado, Alejandro, Iman. Pr. ed. Wallies, p. 3, tineas 225 . 10, linews 3 ss. Cl tambien bud. pI mes 8.2 Apu eyo, an De terp., ed Ov 40 Dog. Ls. Vitae VIL, 76; Sexto, Ade. Math, VI 236-237; Gano, Inst. Log. p18, lineas 89 221,216, U6 Los esquemas se clasifican en validos ¢neés © avvaxrixds) 0 no vilidos (woxPnpds 0 daxvhos), segin que correspondan a argumentos validos 0 no. Algunas veces, para evitar largas e inncesarias repeticiones, se usaban argumentos-esquemas —mi tad argumento y mitad esquema—: ‘Si Plata esti vivo, entonces Plato respirs. Lo prinere. Cg To segundo ®, Hay que observar que los numerales ordinales ‘que aparecen en los esquemas toman siempre por valores proposiciones, nunca clases. 2. LOS CINCO TIPOS BASICOS DE ARGUMENTO INDEMOSTRADO Segtin los estoicos, habia cinco tipos basicos de surgumento indemostrado. Se ilamaron «indemostra- dos porque no necesitaban demostracién, «ya que su validez es clara de modo inmediato>*, Era bassicos —tal se sostenia— porque todos los demas argumentos silogisticos podian ser reducidos a ellos, Y porque se pensaba que estaban supuestos incluso en los silogismos categsricos“*. Ciceron nos dice ue, a partir de estos esquemas basicos, los estoicos ‘sgeneraban innumerables inferencias, que constitu- yen casi la dialéctica entera-*. Y Sexto dice que, ST Senta, Hyp. Perk I, 146, 147, 1845 Ade, Mash VIL 132, 41 414, 409, 44, © Vue Vit, 79, Cl Ade. Mah, VII, 306: Sil sudor Nye a través Je ia supetivie, Ta pel tiene porosintelgibles. Lo primero Lege 1b Segundo. * Ade, Math. HU, 25 Vitae VL 79: Hyp. Pyrrh. I, S615 * Topica, $7 7 ssi puede mostrar que no son validos los cinco esque- iis baisicos, entonces habra sido echada por tierra la dialéctica entera‘*. Parece, pues, que al menos Una parte importante de la dialéctica consistia en tuna especie de calculo, con los cinco esquemas bit- sicos de argumento establecidos como axiomas y los demas esquemas indemostrados (no simples) de ar- gumento probados sobre la base de aquellos cinco. Hay pocas dudas respecto de que los cinco tipos baisicos de argumento indemostrado fueron propues- tos por Crisipo, en quien quiz (aunque cabe que no) tuvieron su origen*”, Jugaron un papel muy importante en la logica antigua, y fueron incorpori- dos a la logica peripatética bajo el titulo de «teoria del silogismo hipotético». Hubo cierta controversia acerca del mimero de los argumentos bisicos* dos de nuestras fuentes catalogan mas de cinco“ Se nos informa de que fue Crisipo quien insistid fen que habia dnicamente cinco® ‘Nuestros conocimientos sobre los cinco argumen- tos basicos poseen mas certeza que Jo que sabemos de cualquier otro aspecto de la ldgica estoica. Por fortuna, los cinco estan resefados en ocho lugares cuando’ menos (por siete 0, posiblemente, ocho autores); y, ademas, se mencionan varios subcon- % Hsp. Parr 1,136, Como puede Sesto ser tan insemsato 47 En’ muchos hgares Se attuyen a Cro. Sem ale th Vill, 233; Dio. Lev Vitae Vil, 19: Galeo, tat Log 53, M4. Pram Zelicr suponen que fs cinco esque 4e aapimeato Se debiron orgmalmeste's Teoria, Respect fll dice Bocherski all fala done toute tn preepiean et fe manque’ de jugement de Pran! pou affime gus ble Kean thf tense fe et cra ct mucoup d'autres Uses encores La Lagique de Thcophrone Pp, IIIT, Vid cap. Vis ota 5. “8! Viae, Vil, 7, 2, Geeron, Topica, 47: Marciano Capel, Opera 1V, 44 ss 2 te Mi EL tat Log. 8 sLog eos deca sue m9 ay seit, Seino, ost, sve ou ign a ‘same lindemontrado basic) ng Juntos de los cinco, El segundo argumento indemos- irado esta descrito en al menos trece pasajes dife- rentes (escritos por diez, o posiblemente once, auto- res diferentes)*". Con una 0 dos excepciones, las fuentes concuerdan enteramente, y differen tan slo en el canicler més o menos completo con que tratan los diversos puntos. (Véase la tabla 2.) Ya ue, en conjunto, las informaciones de Sexio son Tas ‘mis detalladas y claras, las seguiremos en nuestra exposicion Un argumento indemostrado del tipo | es aquel que, a partir de un condicional y de su antecedente, infiere como conclusién el consecuente. «Esto es —dice Sexto—: cuando un argumento tiene dos pre- misas, de las cuales una es un condicional y la otra 6 el antecedente del condicional, y tiene, ademis, como conelusidn el consecuente del mismo condi- ional, entonces este argumento se dice que es un fargumento indemostrado del tipo I», A continua ion, Sexto ofrece como ejemplo el siguiente argu- mento y lo explica: Sies de dia, emonces hay uz. (EI condiional) Fede d {Su amecedeie) ge ay hz (Sa eonsecvente) ‘Aftade que el esquema es: Si fo primero, entonces lo seaundo To prnero nego to segundo" T Depende de si Galeno es 0 mo el mismo que Prewlo- Galen Phd, Math, VU, 24 is 1s [i adccn de Bury de ovempdooe come mayor ipo tétcas es um poco confa, pots et la exponeion de. Sento ia dae prt a aa re eum oan ta, may tampace nada qe prahiba hs remiss serine Sais, Esw se aplica tambien a la veruon Je Bry sel resto de ambos pasayn ‘Ede sem que presentan nuestras diversas fuentes revelan 119 aoa Satin] S| st] ogo Spat] TA] ar cyan Un argumento indemostrado del tipo 2 es aquel que. 2 partir de un condicional y la contradictoria de su consecuente, infiere como conclusién la con- tradictoria del antecedente, «Esto es: cuando un argumento tiene dos premisas, de las cuales una 8 un condicional y la otra es la contradictoria del consecuente del condicional, y, ademas, tiene como conclusidn la contradictoria del antecedente, enton- ‘ces este argumento es un argumento indemostrado {gue alunos de sus autores eran mejores higieos gue iron. Asis Sento y Diogenes iracn ejemplos que son perfectaente apr Pinos: pera Tos cemenitores, gle ntentun mee va fetza ld teoria estoica eh tne math? arse, no son tat de dia. (La contadictona de antecedente) El esquema es: Slo primero, entonces lo segundo No lo segundo Tego no fo primero” Un argumento indemostrado del tipo 3 es un argu- mento que tiene por primera premisa la negacion de una conjuncion; por segunda premisa, uno de los Algo no va bien en el eemplo que da Diowenes: 1 de dia, entonces hay hz Ede noche. hago no es de di Probablement, a segunda premiss, dais wy rig dar, debe (ser coe bt guy acme Seat, Cfo elemplo de Dagens do wument indemost Sel tipo $, La rocemsion de Caleno (ist. Phos.) foe recon tpn ele rai te ao con Sex Hyp. Fore. Il, 191. Flopén yet docimento de Ammono pe Sean Ort vez esemplos dudou, yl ecolasta de Ammo yer completamente ‘Si hombre, entonces animal. Sino animal, entonces no ‘Sino animal, emonces no hombre hombre Ss hombre, eatonces anima 1 ejemplo de Gileno, iustrindo la splicacibn de la filosotin 41 La medica (Opera, ed. Kuhn, 1, 4-435, es Si-el hombre fuera uno. mo tendria dolores Tene dolores Lego n0 es uno, La vers de Marciano Cagella contcne una dsposicim de las pariculas neguivas diferente: ‘Si mo fo primero, entonces no fo semundo, a tegund idego 0 primero. conjumtados; por conclusién, la contradictoria del 110 conjuntado. Asi, por ejemplo: No: es de diay es de noche. (Conjunciin nega) Es ue dia. (E! primer conjuriado) ‘Luego no es de noche. (Lt contractor del otro eoajuniade)| Su esquema es: Nor lo primero y lo segundo, Lo primer. ego mo fo segundo {Las tragucciones de Bury de estos pusijes no som nada ‘buenas, oero la vers de Hicks del pasige de Didgenes conticne lun error arave. EL griego dice sprue be tori dsrmebeures 6 66 dnadacis oywmnonis mal G06 noe be th mph), rubepur 70 cvrinuerar od howd. Hicks tduce: “the third kin! of indemonstable empoys u comunction of newative propo Sitions for major peemiss und one of the conjrned propenticns {or minor premiss, and concluding thence the contralttory of the remaining proposition® (ae cursvas som miss) CT Galo, nse. Lig, 10, Gone define exphtamenteizedericy cma) rect deseabe auc, adenin de ents eres de monte como (Gurueedwevov) esperariamos encontrar «nega. ion» (cerodarixdv)*¥; al menos si no hay que juzgar erroneos los esquemas. Asi, segiin la descripcion éste seria un argumento indemostrado del tipo 2: Si es de di, enurives no es de noche Es de woche Tog mo es de da: pero, segiin el esquema, no lo seria. Desgraciadamente, no es decisivo ninguno de los gjemplos ofrecidos por nuestras fuentes. La cues- tion que esti en juego es, esencialmente, si los es- toicos asumian el principio de doble negacion. Pue de decirse con buena certeza que no es accidental el hecho de que aparezca la palabra dvruce(yevov, pues nuestras fuentes estan de acuerdo en ello. % Apolonio de Aleandria, Hepi Sevdésuay, ed: Schneider. 2218, Como no pareve haber ningun camino practicable para de ‘idir st ejempliica mas correctamente la tears estoica el ejemplo fel esquema, 0 si, debido a algun principio de conmutstividad, fi sigurera hay el problema, prefiere el testimonio de Diogenes Sento al. de Cicerun (Galen presta apaye amb verses) ba general, Ciceron no inform de ningun aspecto de ta Wai esioica an claramente com Sexio o Diogenes. ‘Como se indies riba, en la nota $8. Cicenim offecié ang mentos indemosirados bisicos adicionales. No puede consi fuse que den lugar a tn problema muy xer0, ya que’ 1) m0 hacen sentito:2)no los menciona nadie mis, excepto Marciano Capea. qe probablemente copiaba de Ciceron:j°3) poseeos \etlaraciones' expresas de que los est1cos pensaban Que habe femco # solo ceo arguments indemenirados basicos. CT. m0 1a, Vid, el Glosrio, . v. déxodarin. 7 PRINCIPIO DE CONDICIONALIZACION Por «principio de condicionalizaciéme se quiere aqui decir una cosa como ésta: $i una conclusion 8 vilidamente derivable de las premisas a. 1... im entonces la proposicién condicional "(ay esse, %,) > 8)" es logicamente verdadera. Para que un indole tenga un significado preciso, Es necesario que la expresion «validamente deriva ble» tenga un significado preciso. Hablando de un modo general, esta expresidn se defininia por rele. fencia a las reglas de inferencia del sistema de logica que se estuvieran considerando. Asi. pues, tun principio de condicionalizacién puede ser consi, derado una regla de inferencia, aunque insolita en el sentido de que su establecimicnto se referiné a otras reglas e incluso a (aplicuciones previas de) si misma”, Ahora bien, hay ciertos pasajes en los fragmentos, estoicos que podemos decir que son virtualmente afirmaciones de un principio de condicionalizacion, Si hacemos las siguientes importantes. reservas: 1) los estoicos afirman siempre el principio como tuna equivalencia, en vez de como un condicional: 2) los contextos:en los que aparece el principio Siempre son contextos en los que Sexto interpreta que los estoicos intentan dar un eriterio de la vali- dez de los argumentos; 3) «légicamente verdaderos 2 Nos remitimos a Quine, A Short Course in Logic, sap. Is Gentzen, ‘Untersuchungen aber ‘dis lognche Siceen pp. 176-310, sS-431,y askowsk, «On the Ruler of Suppeateon, In Formal Logie, Fs obvio que este principio exta canes Felicionado con et icorema de dedscchwt Ue Tarshy ten ‘on Ue que no fay gue proveer nada sobre sustiuiin: ya tee fo ay regla alguna de Susttacion. Asi taminen, en aegis , ¢s falso, y el consecuente, Esti oscuro, es falso: x dsb gt condicional es verdadero, Y” de noche tendra el antecedente verdadero y el consecuente verdadero, y, por lo tanto, sera verdadero.» En esta cita, ta palabra enunca> parece claramente haver referencia a tiempo, especialmente puesto que kt afirmacidn esti apoyada en la mostracién de que el Maton ha ete ee ai ats des incapciad pars ser la distncon evtoice entre un a mento waldo yl onion verdadero coresposdiente Fine (Studion p19) ela ta sepuro de eh qe sta propane enmentat ei ikio sre esta fase" Vid Ape, fone 129 condicional es verdadero tanto cuando es de dia, ‘como cuando es de noche, o sea, siempre, Es muy dudoso que los estoicos consideraran tautolégico a «Es de noche o es de dia»; compirese con la segunda premisa de la parado) Si no es de noche, entonces es de di i nada existe enionves no es de noche, Luego, Sind existe, entonces es de i Pocas secciones después, Sexto considera otro ejemplo y arguye de nuevo que el condicional co- rrespondiente nunca tiene antecedente verdadero y consecuente falso, ya que esto no ocurre cuando es de dia y no ocurre cuando es de noche". Ofrece entonces un ejemplo de argumento no valido, y prueba que no es valido mostrando que el condi ional correspondiente tendra antecedente verda- dero y consecuente falso cuando sea de noche. El argumento es: Si es de dia, hay tu Hay Iz Liege de dia EI condicional correspondiente, que no es diod6- ricamente verdadero, es éste: Si thay luz y si es de dia, hay 2), emonces es de dia Hay claras referencias al mismo principio en Adv. Math., y hay varias otras exposiciones de él y re- ferencias a el en Hyp. Pyrrh.*, Sin embargo, estas exposiciones estan, por regla general, mal traduci- das, y pocas entre las referencias serian siquiera Feconocidas por un lector que no trabaje con el SF Alejandro, An. Pr. ed, Wallies, p. 376, lineas 25 58 Ade. Math, WIM 419, Wd. 421-22: cf. Apéndice A. not 1, park comentario al texto Ch ls exposiciones en yp. Pyerk 13, 137 (vid. Apa dice Al 130 ‘original griego. Por ejemplo, el lector de la versién de Bury encontrar; «... el argumento concluyente €5 no-aprehensible, pues si se juzga por la cohe- rencia de la premisa hipotética, y Ia coherencia en esta premisa es cuestion de disputa no decidida...» que, ciertamente, no es una referencia muy clara ‘@ nuestro principio; en vez de: +... el argumento vilido es no-aprehensible, pues si se juzga por la verdad! logica del condicional, ln verdad lgiea del condicional es cuestion de disputa no decidida.. ue es una referencia inconfundible al principio (asi como a la disputa sobre la implicacion). ‘Como los condicionales que corresponden a cier~ tos argumentos, especialmente a los que tienen por premisa un condicional, son proposiciones bastan- te insolitas y, desde luego, no expresiones que se encontraran muy a menudo en el griego corriente®’, puede entenderse ficilmente cémo se ha corrompido el texto de Sexto en muchos de los lugares en que se mencionan estos condicionales. Por fortuna, la tarea de reconstruccion es relativamente facil, ya que Sexto suele decir que va a formar una propo- siciGn condicional con tal y tal antecedente y tal y tal consecuente; asi, en efecto, nos estan dadas las directrices para reconstruir los pasajes mutilados. ‘Ademas, pasajes que guardan gran analogia se han corrompido de modo diferente, y, asi, nos han que- dado, distintas partes del mismo condicional bar- aro, El principio de condicionalizacién no se halla en la resefia sobre la logica estoica que trae Didgenes. Pero Diogenes dice que un argumento es vilido, si y solo sila negacion de la conclusiin es. incomps: Wid, 145 (sequn ta aduceion Loeb, vol. 1, p. 25), © Por demplo™ Si [st es de dia, ny Wwe) es de dial, emionces Ray Ie» (yp. Pym tk. 113). "Va, mi articulo *Sio%e Logie and the Text of Sextus Em piricuss BL ible con la conjuncién de las premisas, y dice también que un condicional es verdadero, si y s6lo si la negacién del consecuente es incompatible con el amtecedente®, Probablemente, los estoicos esta- ban de acuerdo cn que un argumento es valido, si y solo si el condicional correspondiente es nece- safiamente verdadero; pero discrepaban acerca de la definicion de «necesario-. Unos, siguiendo a Dio- doro, afirmaban el principio exigiendo precisamente que el condicional fuera siempre verdadero; otros, siguiendo la nocion mis usual de necesidad, e que el condicional fuera necesariamente verdadero ‘en su acepcién de «necesario». La critica de Sexto (en el sentido de que el principio estoico no ofrecia Nhingiin criterio practico de la validez, porque los estoicos no se habian puesto de acuerdo en la cues tion de las condiciones de verdad para los condi- ccionales) seguiria estando relacionada con lo mis- mo’, 4. EL ANALISIS DE LOS ARGUMENTOS ‘NO SIMPLES Por «andlisis» de um argumento significaban los estoicos el procedimiento de reducir e) argumento una serie de argumentos indemostrados basicos”! Tenian cuatro reglas generales (Géwa7a) por las que debian levarse a cabo estos anilisis”. Por desgra- cia, ‘nuestro conocimiento de estas reglas y del modo exacto en que eran aplicadas es muy defi- ciente. © Vitae Vil, 73,76. 2 Hyp. Pye. Th 18S: Ade. Math, VIM, 26-427, % Ade. Math, Vill. 239,250, 231, 38, 37, 240, 2 Para un ita de lo iragmontes relevanies, vid. el Glos rio, 5 ¥- Bene 132 Apuleyo”® nos ofrece una formulacion explicita de la primera regla (7 mporor Peja). Dice que los estoicos ta llamaban prima constinutio y primum expositum y que la enunciaban asi: «Si de dos pro- posiciones ‘se deduce una tercera, entonces cual: Quiera de las dos junto con la negacion de la con clusion produce la negacidn de la otra»”* Gracias a Alejandro y a Simplicio”®, poseemos tambien una formulacin explcita de la tercera regla (70 rptrov Géya): «Si de dos proposiciones se de- duce una tercera y hay proposiciones a partir de las cuales puede deducirse una de las premisas, en- tonces la otra premisa junto con estas proposiciones producira la conclusion.» Permanecemos en la oscuridad por lo que hace @ la naturaleza de las reglas segunda y cuarta. Sin embargo, Sexto hace mencion de «un teorema [eesipmuctl dialéctico que se ha transmitido para el aanilisis de los silogismos», que decia asi: «Si tene- ‘mos premisas que producen una conclusion, tene- ‘mos también en realidad a esta conclusion entee las Premisas, incluso sino esti explicitamente consig nada», Hay razones poderosas para considcrar este Becipnua uno de los cuatro dearer: quizii no es mas que otra versidn del tercero’”, Sexto mues- 1 In De tnterp.. ed. Oud. 2772 * Observese fa semejanaa de ests regla com el siguiente ey ‘quem de infetencia, que fle prohado po Ios esloicos ‘Silo primero y lo segundo, entnces ko tecero No lo tree. Lo primero [rego no segundo ® Alejandro, In An. Pr. 0d. Wallies, 9. 27K. lineas 6 9.: Simplicio, fu De Caco, od. Heiberg. p. 33. lingas She Ct Ak Jnr, op. cit, p. 278, ness 19 9 ‘wade. Math Vill, 4 " Estas ranones soa: 1) La forma y el contenilo generates de fete deeymgcs son ames a los de 10s Aeyara’ 2) 56 dice del 1233 tra con cierto detalle cémo se usaba esta regia. Expuesto de un modo general, el método era como sigue. Supongamos que una conclusion pretendida- mente se sigue de ciertas premisas y que queremos aanalizar el argumento por medio de nuestro Hecipmyc Geom que > una regh para el andlnis de silogismos, lo cual 6S detetamenie hi nto ath Hs Pere 3) rma ‘eopmun 6s apicato por Algandro 4 la version penputcica de to are aig pm as estar camera es semtado. por Setto. come na. parte det legia. esa Syincho, in exprestn stanumide pars el ans de slog ioe ea unl came tn iar ‘os dice explickamene fe argument fs Bo spore «euyo’ engin "conocemon)” puede “analiza mediante los Seycna pre segundo, Estamos tutte seguron Ue die terete Que da Apuleyo es et primer don Ast 1 ecg 4c Seg gan, dehemos poder andar el arpinemto ua ‘iw sporomde mediante extas Gos Tegan. Esto puede hacer et modo siguiente: por el primer cuca ndemonical, Te 1-2 |A partir de Jo cusl. por aplicacion del primer Beya tenemos =a -) Puesto que esto es silogistico, ko siguiente es también silos tice em virtud del écwpmuay: 132 I ==> Pero es obviv que el terver su serira para esta prueba exe lamente igual que el bpm 14 a Fa a ca AIS he eg Tomamos las premisas y deducimos de ellas varias conclusiones valiéndonos de los cinco argumentos basicos; «afadimos» entonces estas conclusiones las premisas y repetimos el procedimiento. F mente, si el argumento original era silogistico y si somos lo bastante habiles, deduciremos la conchi- sién. EL nimero de inferencias innecesarias que se hagan dependera de la habilidad y de la prictica de la persona que realiza el analisis”® ‘Sexto nos ofrece dos ejemplos muy claros de ani- lisis de un argumento en sus argumentos. basics componentes. Estos ejemplos estin en estrecho pa ralelismo y deben leerse en mutua referencia, El Primer argumento que analiza es este 1) Stes de dis, entonces si es de dix hay uz 2) Es de du Euego hay tu ‘Segiin los estoicos, este argumento esti compuesto por dos argumentos indemostrados del tipo I, «co- mo veremos por el andlisis». A partir de I) y de 2), Por un argumento indemostrado de tipo 1, infe Fimos: 3) Sies de ia, hay uz Afiadimos ahora 3) a las premisas, conforme al Gewpruce para el analisis de inferencias; y, tomando 3) y 2), inferimos mediante otro argumento indemos- irado de tipo | «Luego hay luz, que es la conclu- sion. De este modo, dice Sexto, el argumento pre- sentado esti compuesto por dos arguments inde- ‘mostrados de tipo 1: Si-es de dia, entonces si eb eit hay hz Es de dig Luego sites de dia, hay i 7 EI modo vegulir 6e llevar a cabo et unatiss era valine le las metaregios ol (ecu. pero a veves podian encontarse Pruebas mis breves (es de presumir que haciendo uso de reps Probadas prevamenie). Vid SVP S38 13s Sis de di, hay hz Bede di Tego hay ae El segundo ejemplo es ste, Considérese el esque ma de argumento: 1) Sito priner yo seaundo,entnces fo tee 3 Noo ercero 3) La primer. ego no To segundo, Este argumento esti compuesto por un argumento indemostrado de tipo 2 y otro de tipo 3. A panir de 1) y de 2), mediante un argumento indemostrado de tipo 2, obienemos: 4)-No: lo primera y la segundo, ‘que, conforme a la regla dialéctica, puede conside- rarse ahora una de las premisas, aunque no estaba explicitamente mencionada entre ellas. A continua- cidn, podemos construir un argumento indemos- trado de tipo 3-4 partir de 3) y 4), que da por resultado: «No lo segundo», que era la conclusién. De este modo, hemos vuelto a analizar un argumen- to en dos de los argumentos basicos: Silo primero y lo segundo, entomees lo fercev. No lo terer, neg to" 10 primero y lo segunde No: lo primero y lo segundo. Lo pase [Eco To segundo Estos son, por desgracia, los tinicos ejemplos que tenemos de las «innumerables» inferencias que ge- neraban los estoicos a partir de los cinco argumen- Sento, Adv. Math, VIII, 230233 8 id. PH tos indemostrados y que constituian casi la diakéc- tica entera*'. Es decir, estos son los unicos ejem- plos para los que poseemos pruebas estoicas. Se Mencionan o ilustran sin prueba varios otros argu- mentos. Esta, por ejemplo, el esquema: D120. Noi No2. Lego 3 Segan Crisipo, incluso los perros hacen uso de este tipo de argumento. Pues cuando un perro sigue el rastro de algin animal y llega a la encrucijada de tres caminos, si olfatea primero los dos caminos Por los que no ha ido el animal, se lanzara por el lercero sin detencrse a olfatear. Crisipo afirmaba que el perro razonaba efectivamente asi Se ha ilo © por este. © por ese, o por aguel camino. No se ha wo por este camino No se ha Wo Por ese camino LCuego se ha ido por aguel oti Es obvio que este argumento, que se dice que encierra la aplicacion repetida del quinto argument indemostrado, puede de hecho analizarse en dos aplicaciones de este argumento basico™” Oiro esquema de inferencia usado a menudo por los estoicos fue llamado sel argumento a partir de dos condicionales» (Bue bv rpozuxiv)"- Debemos Cheer, Topica, 5. © Sexto, liye: Pir. |. 69. Otto ejemplo de este tip ve st gumento puede hallarse sbi, Il. 130. Vuk. Apel 2a Sexe Empinicus», Rheinisches Museum, sol. 39 (1804). pp. 2728 AA dllerencia de “Apelt'y otros que lo spun, enti bes Aewrun como sigaticado scepetiamente>-0 sc str Je ite vez, Este argimento puede anaizase en dos aplicaciones del quinio esquera indemuostrado de argumento, igual que el oto {ngumento fue analizado por Ios estocos en sos aplcaones del esquena primero. "Vid. cl Glesaro. sv. rpomuci. Lukasiewicz y Stakehim son fos unicos autores que han entendido corvectamente eat ler 1B? 4 Origenes la conservacién del siguiente importante ejemplo estoico de esta clase de argumento: Si sabes que estis muert, ests musta Si sabes due estis mueri, no ests muero, [Luepo no sabes que estas mueito, Origenes hace también mencion de su esquema estoi Silo primero, entonces to segundo lo pamerd. entonces no 30 segundo, Phage no to pamero™ El siguiente es representativo de algunos otros, _argumentos usados por los estoicos: Si existe ua signo, existe un sign. Si no existe Un slgno. existe un sino. Existe un Signo, 0 n0 exe lego existe sien. El esquema era: Silo primera, entonces fo primero Si no'lo primero, emonces To primer {Lo primero o no ko primero. [Giego To peimero™. Tipo; la mayor han tomado spomeasr como signiticando con Jicional. He aceptado la explicacion Je Stakelom, il como la presenta en Culen and the Logie of Propostifons, pp. 03-4 re Origenes, Contra Celsum Vil, 18 (Werke, ed. Koetschi vol, 2.'pp. 166-167. kukaslewicy (Zur Geschichte der Aussa ienlogike, p. 128, nota 23) menciona que la expheacion de ‘Grgenes pfucha que Prant! Geschichte. der Logik um Abend lande, vol. I. p. 480) y Zeller (Die Philosophie der Griechen. Vol. 3, pastel pp. L115, nota 8) se equivocan respecto del Signiicado de ‘ur Bio spores. Podemos afadiies b BUY ue. dice Weuus'Empiicus. Loch Classical Librry, vol. 1, ISI, nots d. «The hypothetical syllogism “by two hypotheses Fas its major premas tm double form; eg, “ICA s, Bs, an iA‘ not, Bis; but A cliher is or is mot; therfore Biss 5 Sento, Adv. Math. VIL. 28 CL iid. 46 « Hp. Parr. I 186, El esquens esta cn Ads. Mack. VII, 292. En Hyp. Pooh 1, 342, 35, Sexto ofrece dos argumentos, euyo esquema sri No se ofrece indicio alguno acerca de cémo se ana- izaria esta clase de argumento en términos de los cinco argumentos basicos. En las Lineas Muestras del Pirronismo, Sexto introduce cl tratamiento de los cinco argumentos in- demostrados diciendo: «.. 108 arguments indemostradose, dé os gue tanto italaton fos estos." som arpumenion qe, dicen cles no necesitan de prueba que les de apoyo ellos misma Sircen de pruchas dela codes de how demée are ‘Ahora bien, los estoicos imuginan muchos argumentos indemostrados, pero los inca qUe princialmente prope sen 9 los gue ssi parece, pce vem takes Las partes de la cita que he escrito en cursiva dan a entender que los estoicos pensaban que su Logica proposicional era completa; en otras palabras: que todo argumento valido (excepto los argumentos que contienen términos metalingiisticos) podia probarse tan solo a base de argumentos de los cinco tipos indemostrados. Didgenes Laercio menciona esta pretension en el contexto de su resefia de los argumentos indemostrados: Hay también certos arguments sindemosirados: (po que no necesitan demostracion). cinco segin Crisp = fue en esto discrep los autores), que se san em i Sons ttuceion de todo argumento. Estin supuestos en todos los sllogismos valdos, tanto categorices Come hipotetices” Silo primero, entonces fo segundo ho tercero, No lo segundo NO Io treet Legs 20 19 primer, Lo agumeny de es inde puede raid, mei primer Beary el Yespnuer de Sesto, en un arguments nernos- trado del tipo 5 y otra del ipo 2 © Hlyp. Pyerks IL 186 ss © Vitae Vit. 7s, Hay dos o tres referencias mis a la completud™. Es evidente que una tesis de esta indole tiene que haber formado parte de las introducciones estoicas ‘con las que estaban familiarizados Sexto y Didge- nes. No puede decidirse si la logica estoica era efec~ tivamente completa, en tanto no se conozcan las cuatro metarreglas para el analisis de argumentos, 5. ARGUMENTOS (0 VALIDOS. PARADOJAS Los logicos estoicos, igual que los logics de todas las épocas, tenian mucho interés en clasificar ¥y explicar paradojas y argumentos no vilidos. Con- Servamos la clasificacion estoica de los argumentos rng validos y un poco del tratamiento que dicron a Jas paradojas, pero la mayor parte del mucho trabajo que llevaron a cabo sobre estas ultimas se ha perdido". Es dificil descubrir el principio que usaron los estoicos —si es que lo hubo— para su clasificacién de los argumentos no validos (denivaxrot 0 dmépea~ ro), Distinguian cuatro clases de tales argumen- os; pero no parece que estas clases se excluyan mutuamente: 1. Los argumentos incoherentes (mapa Suiprn- rw) son argumentos no vilidos porque no hay en ellos conexion kigica de las premisas entre si o con fa conclusion. © Hop. Pork I, 1-167, 18: quien Cicero, Jopica, S7 es tambien una referencia ln compli Vids la lst de obras de Crisp que da Didgnes. EW Hyp. Por. Il. bi 38 152133 se us el Lermino dy ‘rom ch los pases pelo em Ade. Math. VIML D9 una Termine arepavzoe. Son sions mo ay’ 0 alge pars Iradueir drepavros sindefinuor somo Io hace Bury 29. cl. IST, nota dh, va que en su ano loyico repenen quer deci Feoncluts 0 vsacar una conelusiines CE Epletelo, Maw, 140 ‘Se vende trigo en el meres, Teg Dron anda 2. Los argumentos redundantes (rapa wapoh- xj) contiene una premisa que no es necesaria para extraer la conclusion, Sies de di, hay luz. Si es de dia, hay hr Esde da. Es de dia Dion anda 1a Vira es benefici Tego hay uz Theo hay hue ‘Seguin todos los procedimientos habituales de com- Probacién, estos serian argumentos perfectamente Vilidos, aunque inelegantes. Quizi Sexto cometio aqui unia equivocacién, 0 quiz’ siguié un texto de menos calidad. 3. Los argumentos que se proponen con un esquemia no valido (€y wox@mp@ areiieart) son tales como este: Si es de dia, entonces hay luz Noes de dia ego mo hy hur, cuyo esquema no vilido es: Si primer, eaonces i semis, 1 lo primero. ‘Lego no fo segundo 4. Los argumentos deficientes (wapée tdeuj © rapt: rapaheufiv) contienen una premisa que no es compieta La rqueza es buena ola sigue es ml No es mala Teg es Be Si Hip. Porrh. UW, M6: Ado. Mach, VI ‘hyp. Psrohs MN, Adv Mai NULL 3 © Hip. oerk I 187 1am Ade, Mar, Vill, 00. i Se dice que esto n0 es vilido por deficiencia, ya que la primera premisa deberia ser: La rigueza es © buena © mala © ni una cosa ni la tra También sabemos que los estoicos tenian noticia de Ia falacia del circulo vicioso y que disponian de un nombre especial para ella (6 duidAndos pom0s); pero no conservamos ningun tratamiento de este tema®* ‘Se ha colmado de desprecio 4 los estoicos por su interés en las paradojas. En un lugar, Sexto dice (del ldgico estoico tipico): YY una vez que ha reunido una coleccim de tales de- sechos, enarca las ces y expla Uisiética,y se esfuerza om micha sclemnidad en demosiramos por prucbes io istcas que una cost Hega a ser, que una cosa se mucve. fue la neve es blanca y que 1nd tenemos cuernos. AU ‘que profablemente basta conlrontar e1 desecho con él Rech patente para desir laalirmacton posi de ecos por medio dels evidencia contadiciona equipolente der ada de as aparienctas™, La mis famosa paradoja (rapdBofov)””, tratada or los estoicos y probablemente la unica paradoja estoiea que sigue interesando a los ldgicos, es El Mentiroso (3 WevBizevos). Esta importante antino- mia, que se pretende que caus6 por lo menos una victima en la Antigiedad, fue objeto de seis libros de Crisipo y tambien de al menos uno de Teofras- “Tip. Pur, I, 190; Ade, Math. VII, 434, CE. Gelio, Nec tes attieae W Vil, 2LW-XL ast XLVI, 1 Hyp. Pyori il, 114: Ado. Math, Vill, 448. Bl Buinnnror eyo efa deardeacos, como se observa en SUF Il, 273, Com pense os duran nepatnorres, p16 arriba Hyp. Pyrek th, 246 Tsegin la trhiccin de Bury. Loeb (Classical Labray. vol 1, p. 313). “Cicenin, Acad i, 196, euenia que rapedoga ec el emi ‘estoica para estos rompectbezss 142 to. Crisipo eseribié también muchas réplicas contra quienes creian que podian resolverla’®. La paradoja se propuso de varios modos. El apdstol Pablo, sin intencidn de sefialar una para- doja, cuenta que Epiménides el cretense decia que todos los cretenses eran mentirosos"* y, ademas, que lo que éi deci era verdadero. Pero El Menti- Toso no esta expuesto como paradaja de esta ma- nera por ningiin autor antiguo. Una versin antigua caracteristica es la que trae Alejandro:

Das könnte Ihnen auch gefallen