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BASES FILOSOFICAS DEL PENSAMIENTO EDUCATIVO DE JOSE VASCONCELOS Guadalupe Basila Delgado 1. Filosofia y educacién L referirnos a Vasconcelos cuando hablamos del Fendmeno educa- livo, no podemos prescindir de sus concepeiones filosoficas, Para élla educacién en todas las latitudes y en cualquier momento dela historia surge irremediablemente ligada a una Filosofia que le olorga centido y validez. No podemos elaborar proyectos para educar y formar al hombre, mucho menos proponer métodos y estrategias, si antes no defi- 1: posibilidades y hacia donde se nimos qué es el hombre, cudles son = dirige; por lo tanto, todos los cuestionamientos en Lorno al fenémeno educativa, todas las propuestas acerca de los objetivas, contenidos, planes, peculaciones sino hay metodologias, etc., quedaran reducidas a simple una concepcién filosdfiva que les dé fundamento y justificacién. Por ello dice Vasconcelos: “En su filosofia hallara el educador el punto de partida de su pedagogia” ! Precisamente en esLe aspecto encuentra él la causa del fracaso de la pedagogia contemporanea, que a partir de Rousseau y hasta Dewey, pasando por la escucla positivizta, no ha podido fundamentar cus posiciones pedagdgicas con el estudio profundy vy esencial del hombre —, va que “por —que, finalmente, constituve el objeto de la educacidr carecer del fondo ideoldgica de una concepeidn cabal de! mundo, la peda- dogia contemporanea uspendida del hilo de la experiencia particular, VASCONCELOS, José, Dr Rohrason ¢ Cilisee en Alicia Molitia. Teatos sobre wlucaciin. México FCE-SEP, 1881, p. 4 He desgencralizada, va de aqui para allé on Lanteos y andlisi de pequeau: resultados” 2 Por otro lado, Vasconcelos se rebela contra los pedagogos contempora- neos, que desde Rousseau se han basado en una supuesta perfeccidn original que el hombre tiene por naturaleza, y han pretendido quitar ala educacion “el caracter de regla impuestaa la conciencia desde el exterior’? al dejar al nifio en libertad, es decir, el arbitrio del libre curso de su desarrollo natural, y al olvidar que, “desde el jardin, que abandonadg asi mismo torna a ser un hierbal, hasta la conciencia del hombre, que falio de la luz del saber ajeno cae en la bestialidad, no hay un sdélo caso en que la cullura no represente un esfuerzo de reorientacién de lo natural y de intervencién en su desarrollo”. Por otro lado, afirma que la pedagogia contempordnea —en su afan de condenar la escuela tradicional y libresca acusandola de dogmatica y opresora— ha dado la espalda al acervo de experiencias acumuladas a través de la historia y cae en laimprovisacién a partir de las necesidades inmediatas, lo que trae como resultado una educacién utilitaria y pragmatica ajena a nuestra idiosincrasia y anuestra realidad; e incluso si la comparamos con la escuela dogmatica, “cuyos efectos todas reconocemos, pero que somete el alma a preceptos, y la escuela pseudolibre del pensador americano, que erige en disciplina su- prema la realidad de la accién social, resulta opresora la primera, pero la segunda resulta vil’”.5 Este tipo de educacién que se encuenira lo mismo en la doctrina de Dewey que en los planteamientos elaborados por Pestalozzi o Decroly y en la educacién positivista, produce un tipo de hombre apto para la utilizacién del medio pero esclavo del mismo, “con apariencia de libertad; entonces lo que en realidad se obtiene es producto de millones de ejempla- res humanos aptos para el aprovechamiento de ciertos aspectos del medio externa, ciegos para lo desinteresado, fieles al rebafio, y sin otra finalidad que el record, lo mismo en el trabajo que en la diversidn y en el goce’.® [balone, yy 93, balm, p34 “Thule, p35. Ibilom p44 Uden), 46 S7 En el caso especifico de México el filésofo considera que el problema no reside solamente en la ausencia de una fundamentacion filoséfica para la elaboracién de una pedagogia que abarque al hombre en toda su dimen- sién, sino también en la falta de una definicién del mexicano, que a partir de nuestra realidad historica, social y cultural, sirva de base a la organiza- cidén del sistema educativo nacional; hasta ese momento, la pedagogia en México era simplemente una recopilacion de sistemas y doctrinas extran- jeras que norespondian a las caracterfsticas nia las necesidades de nuestro pais. Un claro ejemplo de ello lo constituye la educacién positivista que predominé en México durante cuarenta afios, con modelos importados, de Comte o de Spencer, que finalmente fracasaron por ajenos a la sociedad mexicana En la critica que Vasconcelos hace a la educacin positivista, reconoce los aportes de Barreda en el desarrollo educativo del pais, sobre todo porque implant6 un sistema de pensamiento distinto al que impero en la Spoca colonial, tan restringido por el catolicismo, y supa dar al desarrollo educativo un orden y una disciplina que habian sido practicamente anula- dos en los afios de la lucha por la independencia, siempre revelando gran preocupacién por el bienestar de la sociedad. “Don Gabino Barreda — expone— importé tres ideas fundamentales de su maestro Comte: la solidaridad, virtud emanada del instinto de sociabilidad, permite la vida colectiva en que la civilizacion se desarrolla. El altruismo, inclinacion social a obrar en beneficio de los demés por el provecho que con ello nos resulta; y, como premio de los mds altos servicios, la inmortalidad que se alcanza en la memoria de las generaciones venideras”.? Mas adelante critica la estrechez y las limitaciones impuestas por esta Lendencia que domino la educacién nacional, a la que condenaba sobre todo por sajoni- zante, es decir, que se adecuaba mejor al lemperamento empirico-y orde- nado de los anglosajones que a la fantasia y el ingenio propios dela cabeza latina, lo que finalmente se traduce en una educatidn ajena e incompleta. “El positivismo de Comte y de Spencer —sigue diciendo— nunca pudo contener nuestras aspiraciones; hoy que por estar en desacuerdo con los datos de la ciencia misma se halla sin vitalidad y sin razdn, parece que nos liberamos de un peso en la conciencia y que la vida se ha ampliado. El anhelo renovador que nos Ilena ha empezado yaa vaciar su indeterminada potencia en los espacios sin confin, donde todo aparece como posible; el VASCONCELOS, Jns6. "Pon Gabino Barreda y las eas coniempuraneas” en juan Hernander Luma Conteronfasilel Areneeile fn Jicentad, Prod. y recog ale, Méxica, =e, 1982, p, 101 mundo que una filosofia bien intencionada pero estrecha quiso cerrar, esta abierto.”s En la consideracién de estas deficiencias que presenta la pedagogia, Vasconcelos expresa su concepcidn del fendmena educativo fundandose en una cosmovisién de la cual deriva su concepto acerca del hombre ensu dimensién universal; por otro lado, considera !a necesidad de proponer una educacién para el caso especifico de la sociedad mexicana, que parie del estudio de la historia, la Lradicién y las caracteristicas sociocullurales de nuestro pueblo 2, El hombre La idea de Vasconcelos acerca de] hombre la encontramos fundada en su cosmovisién: E] hombre es un componente de la totalidad energética que se mueve continuamente a través de los ciclos, forma parte de esa “co- rriente dindmica universal’; participa asi de la esencia comin a Lodo cuanto existe y es a la vez una de sus parliculares manifestaciones, en la cual, las tres instancias de la realidad activa, el atomo, la célula y la conciencia, acidan y coexisten orgdnicamente. De esta manera reconoce que la materia forma parte del hombre en cuanto ser fisico pero no lo define, ya que “la materia es pasado que la esencia dindmica de la que estamos hechos nosotros ha superado ya, o bien es decadencia de nuestra propia sustancia’.° Lo que realmente define al hombre es una realidad presente, la conciencia, dentro de la cual“asoman ilimitadas posibilidades de un porvenir al que hace falta saltar”,! es decir, que el hombre, definido en su realidad consciente en la cual concurren el 4tomo, lacélula y la imagen, igual que todo lo que existe, se encuentra impregnado de ese anhelo, de esa nostalgia con respecto del Espiritu Absoluto y se inserta entonces en un movimiento ascendente cuya ultima finalidad es verterse en la Totalidad Asi vemos que el hombre tiene que trasladarse por el ciclo biolégico, el ciclo consciente y mas alla hasta reintegrarse al Espiritu Absoluto. Oscila- mos en un ciclo intermedio, nos encontramos precisamente en el instante Hiden, ps 112. hones | [M Mesiio, bibrenie Mesicanas Lnilis # VASCONCELOS, Juste MI 1961 (Laure), p © Li phades poo 180. 9 a en que el movimiento intencionado, caracteristico del ciclo biolégico, va aclarando cada vez mas los objetivos de sus acciones, hasta definirlos y hacerlos conscientes; es decir, estamos en el momento en que surge la conciencia y nos abre, a través de la imagen, la puerta del ciclo espiritual Ahora bien, si es cierto que nuestras acciones van encaminadas al fin supremo y preexistente desde la eternidad, un largo trayeclo antecede a este hallazgo. En primer lugar, hemos visto que la inteligencia, la voluntad y la conciencia son factores que en un momenta conilevan a la persecucién de aquellos fines que no estan contenidos en la dinamica de fuerzas que corresponden al campo meramente bioldgico; es decir, en los Fines que se persiguen se ha superado la dimensién biolégica y se organiza la actividad humana, lo mismo en el individuo que en las sociedades, a efecto de convertir el propésito en accién redentora que nos aleje de lo corrupte, de la energia degradada que se ha apartado de la Unidad Absolutay que a ella anhela reintegrarse. De aqui que toda |a civilizacién constituya” un movi- miento ético, un conjunto de disciplinas que llevan la vida a repetir aciertos y en seguida, a trascenderlos. En cierto sentido general, se puede afirmar que es moral todo lo que nos lleva a trascender la existencia; inmoral, a la inversa, lo que nos regresa al caos y ala animalidad”.! Cuando nuestras-acciones se mueven por el camino acertado, adquieren un valor, y éslos constiluyen movimientos que se encaminan ala suprema finalidad; “los valores no son entes con existencia aulénoma, no son ni siquiera formas, sino cauces, modalidades obligadas de la potencia que acierta el camino”,!2 Estos movimientos son resultado de la combinacidn de varias corrientes de energia, que se produce en la conciencia humana, en la cual surge”una especie de sentido nuevo, mas penetrante que los sentidos del cuerpo, un sentido interno palpa directamente y juzga por si y ante si el valor de los fines que persigue”.13 Este sentido interno capta los moyimientos correc- tos y acertados, o sea, aquellos que superan lo material y lo biolégico hasta llegar a identificarse con el mundo del espiritu. De ahi se desprende que una conducta es positiva en la medida en que se acerque a esta finalidad, por lo que cualquier tipo de moral que se postule como laica no es HW VASCONCELOS, José Etat en Ohrne Compliras, Lo ML (Loe 1 Thaleon, p 1 Talim, p. 785 oo verdadera y profundamente valida, ya que cae en simple utilitarisma puesto que se limita a proponer normas y conductas nos ibordinadas a los fines superiores y no logra Lrascenderse asi misma. Mas allé de una moral Llerresire o metafisica, es decir, mas alla de aquel conjunto de normas que expresen los fines que la humanidad persigue en cuaniv a su bienestar material y social y a su provecho intelectual, Vasconcelos propone una “moral revelada, producto de la relacidn intima del hombre con Dios, una moral que organiza la vida conforme a sus potencialidades ms altas, y sélo secundariamente atiende al interés de la sociedad como organismo, del individuo como identidad biologicosocial”.14 Una vez mas percibimos en los planteamientos de Vasconcelos una profunda influencia del cristianismo como la doctrina de Ja vida eterna y sobrenatural en comunién con Dios: son buenos aquellos aclos que nos alejan de lo temporal y mundano, de lo corporal y pecaminoso, y nos acercan a lo eterno y espiritual para finalmente poder llegar limpios de todo pecado a la presencia de Dios y gozar la dicha eterna. Sélo unos cuantos “iluminados”, como los profetas biblicos o los santos de nuestra era, han tenido el privilegio de ser elegidos por Dios para conocer sus designios; he aqui un acto de revelacién: Dios revela su voluntad a aqué- llos que transmitiran alos demas su palabra. Esto ultimo tampoco es ajeno a lo que Vasconcelos ha dejado planteado: “La revelacion —nos dice— aporta un elemento nuevo. La élica que llamamos revelada procede de la iluminacion de grandes personalidades excepcionales.”1 Y son precisa- mente estos personajes los uinicos que pueden establecer normas de conductaa las sociedades, como Moisés, que habiendo recibido de Dios las Tablas de la Ley, las impone asu pueblo, pero dada la importancia de éstas, no se limilan a regir exclusivamente al pueblo judo. “Los diez manda- mientos —nos dice—, base de toda civilizacién durable, eran desde enton- ces la sefial de la eleccién.”1¢ Podemos concluir entonces que, para Vasconcelos, es la finalidad lo que define ala moral y al valor. Los valores se jerarquizan en la medida en que ge-acercan al Hin, absolute, ¥ la raoral revelada es aquélla quesprocede de Dios y a El mismo se revierte conduciendo o guiando las acciones humanas hacia fines que trascienden su propia naturaleza. Por ultimo, y también en | Thien po OFF nih 903 lobileat, p. 908, ol relacién con el concepto del libre albedrio que propone el cristianismo, el hombre es libre de escoger entre el bien y el mal, es decir, entre aquellos fines que lo conducen alotrascendentaly divinay aquéllos que le alan alo corrupio y mundano. Una forma de superar cietia tendencia que lodos en algtin momento experimentamos hacia estos ultimos es, por un lado, la ayuda divina, el don sobrenatural de la gracia, la providencia de Dios y, por alro, aquells que Vasconcelos denomind la actividad estética Hasta aqui hemos. visto que el hombre lleva a cabo una actividad teleolégica que va desde la persecucién de fines terrestres, en log que busca su bienestar ‘emporal come individue y dentro de la sociedad, para mds adelante empezar a buscar fines ideales, es decir, aquéllos que subor= dinados ala razén pretenden establecer normas v leyes generales basadas en ideas abstractas; finalmente, el hombre tendré que orientarse hacia los fines no comprendidos en el ambilo terrenal o intelectual, hacia aquello que es sobrenatural y divino, la sublime identidad con Dios En este ultimo punto se inserta lo que Vasconcelos llamo la actividad estética, misma que forma ‘parte fundamental de su sistema. Esta co- mienza cuando surge la imagen que significa para Vasconcelos una forma de existencia superior a las formas fisicas, Asi vemos que “la imagen introduce en el dinamismo moral de la vida, una suerte de espacio-tiempo o cubo sin dimensiones, una suerte de alto piso, donde desaparece la nocién material del espacio y su posibilidad misma y donde el tiempo que corre, no arrastra en su seno a las crealuras” !7 Al crear la imagen el hombre tiene la capacidad de trasladarse del mundo material al epiritual, y lo mismo hace con los objetos, convirlién- dolos en imagen; los transporta del plano mudable de lo Fisico al inmaterial de la conciencia. Esta facullad de transmutacién nos convierle en“ejes de movimiento y reformadores de su sentido; del exterior nos Ilegan todos los temblores y el corazén los devuelve convertidos en energia de valor; lo que era repelicion mecanica infecunda, se vuelve creacién esplendente y dichosa”.18 Es el hombre entonces capaz de dar un nuevo valor a las formas de existencia material, ya que al introducirlas en la dimensién inmaterial de la conciencia las convierte en energia liberada y transmuta su ritmo en el de que es poseedor de este aparato de sentido del espirilu; “a ca VASCONCELOS: Jott Miafiemere Cline Compliant Uh poses Thain, Brot e2 transmutacion, el hombre desempefia sin saberlo y a sabiendas, una funcidn césmica trascendental: la de convertir el objeto en imagen y, como si dijésemos, de transportar la creacién entera a un plano diferente del fisico y acaso ya inmortal, ya divino”.19 3. Hacia una educacién popular y nacionalista Aunque muchas de las ideas filoséficas y educativas de Vasconcelos hasta aqui expuestas fueron escritas en afios posleriores, se encuentran implici- tas o presentes en la gran obra educativa que realizé cuando en 1920 fue nombrado rector de la Universidad Nacional de México y posteriormente titular de la Secretaria de Educacién Publica, que él mismo fundara. Numerosos factores confluyen para ir formando el pensamiento del joven atenefsta avido de conocimientos y experiencias intelectuales, here- dero de una educacidn de corte netamente positivista caracteristica del porfiriato, buscador inquieto de nuevas alternativas, al parecer tan lejanas como la filosofia hindu o el profundo misticismo oriental einfluido por un ferviente cristianismo que encontraba en el seno familiar y en toda la sociedad mexicana; también las circunstancias historicas por las que atra- viesa el México posrevolucionario dieron forma y direccién ala incompa- rable labor educativa que se inicia en México alrededor de 1920 y durante la administracién del general Alvaro Obregén Vasconcelos inicié sus gestiones coma jefe de! Departamento Universi- tario y de Bellas Aries, dependencia que hasta ese momento se encargaba de los asuntos referentes a educacidn, debido a que el ministerio permane- cia cerrado desde abril de 1917. Asimismo, al desempedar este puesto le correspondia el cargo de rector de la Universidad, desde el cual realizaria el proyecto de creacién de la Secretaria de Educacién Publica. Antes de exponer la creacién de esta dependencia y sus gestiones como titular, mencionaremos algunas de sus realizaciones como jefe del depar- tamento citado; La primera gran obra que Vasconcelos realizé como rector fue la cam- pafia nacional de alfabetizacién cuya direccién qued6 en manos de Eulalia Guzman. Como no existian ni el presupuesto ni los profesores necesarios para llevar a cabo esta empresa, recurrié ala buena disposicion de perso- Fe Toulon 03 nas voluntarias —entre las cuales tuvo una importante participacién la mujer mexicana— gue con el titulo de maestros honorarios” trabajaron en esa tarea. No fueron pocas las ocasiones en que la labor de los alfabetizadores era precedida por una camparia de limpieza y saneamiento, que hacia hincapié en lanecesidad de instruir al alumnado acerca del aseo personal, ejercicios respiratorios y régimen alimenticio, lo cual resultaba indispensable dadas las condiciones de insalubridad en que se encontraba la mayor parte del pais. La campajia se organizé desde e] Departamento de Desanalfabetiza- cién, que planteaba como objetivo fundamental erradicar el analfabetismo del pais; de aqui el caracter transitorio de dicha dependencia: una vez que se lograra alfabetizar a toda la poblacién, el departamento desapareceria. Vasconcelos logré apoyar el trabajo de los alfabetizadores mediante la impresidn de cartillas de lectura y escritura y repartiendo algunos mate- riales como pizarras, cuadernos, etc. Dofia Eulalia Guzman inaugur6 el dia del alfabeto, en el que se dieron a conocer los resultados de la campafia, mismos que se publicaban periddicamente en el boletin de la Secretaria de Educacién. Mds adelante se realizé un plebiscito para nombrar director de la Preparatoria, quedando como tal Antonio Caso, del grupo ateneista Destituyé a algunos maestros y directores de educacién publica, entre ellos algunos protestantes o personas que ejercian sin titulo o sin los debidos requisitos. Ante la necesidad de centralizar la ensenanza, formé una comisién con objeto de difundir el proyecto de creacién de una Secretaria de Educacion que abarcara todo el territorio nacional. Para llevar a cabo este objetivo, Vasconcelos cont desde el principio con el apoyo presidencial de De la Huerta, aunado al del ya presidente electo Alvaro Obregén; sin embargo, dadas las caracteristicas del proyecto, resultaba imprescindible el apoyo del piblico y de los estados, que veian la accién como un atentado a la soberania que la Constitucién les olorga. La comisién estuvo integrada por Antonio Caso, Gamez Robelo, Raberto Montenegro, Carlos Pellicer y Jaime Torres Bodet, todos ellos colaboradores del futuro secretario. La creacién de la nueva Secretaria imponia la reforma al texto constilu- cional vigente, por lo cual necesilaba el voto de las 28 legislaturas del pais Para tales efectos se present6 una inicialiva de ley ante las camaras, que exponia la estructura y funcionamiento de la nueva dependencia federal que se intentaba establecer. Seguin el plan presentado, ésta se dividiria en tres deparlamentos principales: od a) Departamento de Escuelas, para atender toda la enseianza técnica y cientifica en sus distintas ramas, tanto tedricas como practivas, asi como la planeacién y programacién de las disciplinas ético-sociales. b) Departamento de Bibliotecas, como apoyo y complemento de la accion educativa de las escuelas. c} Departamento de Bellas Artes, que tendria a su cargo la ensefianza y los institulos de cultura artistica superior, tales como la Academia Nacio- nal de Bellas Artes y el Conservatorio Nacional de Musica Se exponia ademés la necesidad de establecer dos deparlamentos provi- sionales y auxiliares: a) Departamento de Ensefanza Indigena, “que no tenia olro propdsilo que el de preparar al indio para el ingreso a las escuelas comunes”,?° y b) Departamento de Desanalfabelizacion, que se proponia erradicar el analfabetismo en México y que, una vez cumplido su objetivo, desapareceria Estos cinco departamentos empezaron a funcionar desde antes de la creacion oficial de la Secretaria de Educacion Publica, sirviendo a ésta de propaganda y justificacién frente al futuro gobierno, los gobernadores de los estados y el puebla de México. Por otro lado, Vasconcelos inicia las obras de construccién de un edificio para la Secretaria. Se acordé entonces que al antiguo convento de Santa Teresa, que durante el porfiriato hiciera las veces de Escuela de Jurispru- dencia, se antepusiera un patio y un palacio nuevo que conservara el mismo estilo colonial del convento; quedé en manos del ingeniero Méndez Rivas el proyecto arquilectonico del conjunto. Asimismo, se consulté al Departamento de Bienes Raices de la Secretaria de Hacienda, para resca~ tar algunos inmuebles y bald{os para la consiruccidn de escuelas y diversas instituciones educalivas que requeria el proyecto Finalmente, el 20 de julio de 1921, fungiendo coma presidente de la republica el general Alvaro Obregon, entré en vigor la nueva ley que sustentaba la creacion de la Secretaria de Educacion Publica, que de hecho ya estaba funcionando. A continuacién Lranscribimos el decrelo que, para tales efectos, fue turnado por el Congreso de la Uni6n al presidente de la republica, general Alvaro Obregén. 8 VASCONCELOS, Jose. Filan. Mexico, Hiotas. 1938, pe Devreto: Articulo To. Se establece una Secretaria de Estado, que se denominara Secretaria de Educacién Publica Articulo 20. Corresponde a la Secretaria de Educacién Pablica, entre tanto se expide la ley completa de Secretaria de Estado, que asigne definitivamente sus dependencias a dicha Secretaria, lo siguiente: Universidad Nacional de México, con todas sus dependencias actuales, mas la Escucla Nacional Preparatoria. Extensiones Universitariasy Direccién de Educacion Primaria y Normal: todas Jas escuelas oficiales, primarias, secundarias y jardines de nifos del Distrito Federal y Territorios sostenidos por la Federacin; Escuela Superior de Comercio y Administracion; Departamento de Bibliotecas y Archivos, Departamento Escolar: Departamento de Educacién y Cultura para la raza indigena; Depariamento de Bellas Artes: Escuelas o instituciones docentes que en lo sucesive se funden con recursos federales; Museo Nacional de Arqueologia, Historia y Etnologi Conservalorio Nacional de Musica; Academia ¢ institutos de Bellas Arles, que, con recu en los estados; Conservalorios de Musica que se creen en los esiados con fondos federales; Museos de Arte ¢ Historia que se establezean, ya sea en el Distrito Federal o en los estados, con fondos federales; Inspeccion general de Monumentos Artisticos @ Historicos; El fomento del teatro nacional, En general, el fomento de la educacidn artistica del pueblo, por medio de conferencias, conciertos, representaciones tealrales, musicales o de cualquier género: ‘Academia Nacional de Bellas Artes; Talleres Graficos de la nacidn, dependientes de! Ejecutivo; La propiedad literaria, dramatica 0 artistica; La exposicién de obras de arte y la propaganda cultural por medio del cinematégrafo, y todos los demas medios similares y las representaciones y concursos tealrales, artist cos o culturales de cualquier parte del pais; Pensiones en el extranjero; Articulo 30. El lugar que ocupara la Secretaria de Educacion Publica entre las demas secrelarias, sera el que definitivamente se fije en la revision de la Ley de Secretarias de Estado del 25 de diciembre de 1917, la cual queda reformada conforme a las disposicio: nes de la presente! os de la Federacidn, se organicen LVSILVA HERZOG, Jess, De le historia de Mites 11870-79881. Docunnemies tirntimrendales, ensinyas » opinions, 2 tomes. México, FCE, 1980, p. 253 oo La creacién de la Secretaria de Educacion Publica con earacter federal y el cuantioso presupuesty, sin precedentes en la historia de México, que se aprobé para poner en marcha los proyectos que se planteaban, no sélo anunciaban la realizacian de una gran Jabor educativa sino que también sentaban “el precedente de que es el Estado el que debe fomentar la educacién, destinandole una parte considerable de los recursos fiscales”.2? No obstante la diversidad de instituciones que quedaron bajo la direc- cién de la Secretaria, durante la administracién vasconcelista funciond con la organizacion departamental que constituia eje y centro de todas sus actividades, en tal forma que los cinco departamentos, que funcionaban ya desde antes de la creacion de la misma Secretaria constiluyeron su base y fundamento. La estructuracién en departamentos y Funciones, asi como algunos elementos que se incorporarian mas tarde ala dinamica educativa de este periodo, fueron inspirados a Vasconcelos por la obra del pedagogo ruso Lunatcharsky, iniciador de la gran obra educativa emprendida por la tevolucién bolchevique. 4. Conclusiones Al estudiar los planteamientos filoséficos y pedagégicos implicados en la practica educaliva de José Vasconcelos, se advierte la inevitable necesidad de fundamentar cualquier accién sobre las bases de una filosofia que inserte al hombre en un determinado proyecto de vida. Esta es la postura de Vasconcelos frente a la educacién y a partir de su cosmovision nos propone una definicién del hombre, sujeto de la educacién. La cosmovisién vasconceliana aprehende al universo como obra de arte cuyos elementos adquieren sentido y significacién en la unidad que los contiene, y que a su vez consliluye la manifestacién de una potencia divina que crea por efusién de su amor infinilo. La conjugacion de estos elementos en un constante fluir revela el anhelo de todo el universo: el retorno a la unidad primigenia. En este complejo tinico y multiple se inserta el hombre, que a Lravés de la imagen irrumpe en el mundo del espirilu, y que como ctialura individual y social, peco a la vez en sui dimension universal, esta impregnado de este anhelode reintegracion ala totalidad. Sin embargo, el hombre, igual que tode lo que existe, se encuentra en estado de caida, se ha apartado de su fuente original y solamente una Jo8 2 VASCONCELOS, Joo, lndolegia env Alicia Molina, { oF accién bien orientada que encuentre en la belleza, el arte o el amor, los motivos més profundos de su crecimiento y transfor macién, sera capaz de conducir al sujeto hacia el logro de su tiltima finalidad. De aqui precisa- mente la importancia de la educacidn en el pensamiento vasconcelista: La acci6n educativa se inserta en la corriente dindmica universal como una actividad liberadora y redentora puesto que es capaz de orientar el de- sarrollo de las potencialidades humanas hacia el encuentro con las formas mas allas que adopta la existencia El pensamiento educative de Vasconcelos va mas alla de un conjunto de normas, propuestas metodolégicas 0 sistematizacian de contenidos para constituir un proceso permanente para la liberacion espiritual tanto de los individuos como de la sociedad en su conjuntu. Ahora bien, el método educativo que propone para realizar este proceso presenta tres momen- tos; primeramenie, el hombre, a través de la observacién y la experimen- tacién, asimila e incorpora asus esquemas mentales el maravilloso mundo fisico que lo rodea; posteriormente va imprimiendo a este mundo un significado, hasta conferir a sus propias acciones sentido y finalidad. De esta manera, los elementos que integran el universo se van jerarquizando a que movimientos y ritmos conforme a valores que no son otra c especificos, encauzados hacia la suprema finalidad y motivados por ese impulso que experimenta el cosmos hacia el reencuentro con la unidad absoluta, presente en el hombre desde que a través de la emocién se percata de su propia existencia. Este anhelo de totalidad y de absoluto otorga a la corriente dinamica universal un sentido interno a partir del cual se dirige hacia el sumo bien Sin embargo, paralela a este deseo de superacién, subyace en la conciencia humana la capacidad de eleccién. L| hombre es libre de elegir entre el proyecto de vida que lo conduce hacia la plenitud del espiritu humano que se reintegra a la divinidad, y aquellas acciones que lo atan alo meramente fisico, a la energia degradada que se revierle en forma repetitiva y recu- rrente, sin la posibilidad de incursionar en otros niveles de la energia: el libre de permanecer y limitarse a lo mundano, privandose el acceso a la riqueza del mundo espiritual. Frente a este dilema la accién educativa tendra que ir mas alla del ejemplo que nos da la historia de las grandes personalidades éticas, cuya plenitud espiritual nos demuestra que eligieron el camino acertado. Es preciso consumar el método educativo que plantea Vasconcelos y aleanzar ese instante en que se propone una comuniéna Lravés de la cual penetra- mes en el fascinante mundo del espfritu. En este momento la relacién 08 entre educadores y educandos deberd ser tal que lransmita el encanto que experimenta la vida en contacto con la divinidad y permitalacomprension de la totalidad Al considerar la riqueza y variedad de los elementos que integran la obra educativa de Vasconcelos, nos alrevemos a asegurar que su valor y trascendencia han rebasado los limites del espacio y del tiempo que le concedié la historia para poner en practica sus ideas acerca de una educa- cién integral que abarcara al hombre en toda su dimension Las realizaciones de la Secretaria de Educacién Publica durante ese periodo se encuentran vinculadas a la vision que Vasconcelos tiene del hombre y del Cosmos; la triada vasconcelista de los ciclos de la energia —el ciclo del mundo fisico, el del mundo ético y el del mundo estético— eslablece una correspondencia organica con todos sus demas plantea mientos filoséficos y pedagdgicos. De aqui que el fendmeno educalivo, concebido por Vasconcelos en su triple dimension —educacién Fisica; educacién élica y educacién estélica— se vea reflejado en la organiza: de la Secretaria de Educacién, en la disposicion de los programas educati- vos, en la elaboracion de los mélodos de trabajo, en la eleccién de los textos de lectura, en la estructuracién de los planes de estudio que Lanto a nivel formal coma no formal contemplan estos {res aspectos de la educacidn; y, finalmente, la prioridad de la que siempre gozo el ramo de educacion artistica, no puede ser en ningtin momento ajena a las concepciones estéticas del secretario. La actividad de Vasconcelos se extendid a todo lo largo y ancho del territorio nacional. La escuela era importante, y si no existia habia que crearla, pero las calles, los parques, los nuevos y viejos edificios coloniales, los cines y los teatros, eran (ransformados por Vasconcelos en auténticos centros educativos en los que se promovia el deporte, la musica, la leclura y el arte; en una palabra, se impulsaba el desarrollo espiritual del pueblo de México. Por otro lado, Vasconcelos no olvida las circunstancias historicas por las que atravesaba nuestro pais. El empefio que puso en la tarea de educar a nuestra sociedad, teniendo en cuenta el propésito de elevar el nivel cultu- ral del pueblo a la vez que intentaba conformar y definir una cultura propia que liberara el espiritu de la nacion, hacen a su obra esencialmente popular y nacionalista, lo cual responde al proyecto polilico obregonista y en general al de todos los gobiernos revolucionarios. Pero el sentido nacionalista de la obra educativa de Vasconcelos no responde simple mente a los lineamientos que marea la politica general del Estado Mexi- oo cano, sino que obedece a reflexiones mas profundas; no es el nacionalismo superfluo del discurso politico revolucionayio, nila estrecha visin de los nacionalismos que fragmentan la cultura hasta despojarla de toda inten- cién creativa, innovadora o ingeniosa. Busca su propio rastro en la diversi- dad de elementos que lo integran y se enriquece en la amalgama, en el conjunto, en la mezcla. Su rebeldia contra la penetracién sajona en todos los renglones de la vida del pais no es mas que un llamado a la conciencia nacional para que indague hasta desentrafiar el misterio de su propio origen. Como parte de una generacién dispuesta a trabajar por el desarrollo de una cultura propia, Vasconcelos no podia ser mas consciente de que habiamos perdido los nexos con nuestra propia historia. El predominio de corrientes y modelos extranjeros, que desde el porfiriato habian marcado las directrices del desarrollo cultural de nuestro pais, relegaron lo propio hasta el desprecio; no existia identidad nacional, se rompian los vinculos con nuestras propias raices. De aqui la necesidad de volver atras ras- treando las huellas de nuestra historia para encontrar su Fuente. (era también encuentra en la rica tradicién grecolatina, que nos llega a lravés de Espafia, el origen de nuestra cultura: Grecia, Roma, Espaia y las culluras americanas se mezclan en toda su yariedad y su riqueza, Como apunta él mismo, somos herederos de una cullura milenaria que nos define y nos conforma como nacién y a través de la cual llegamos al hombre en su dimensién universal, Adoptamos entonces una forma parti- cular, constiluimos una sociedad especifica con todas sus peculiaridades De aqui la necesidad de conformar un tipo de educacian acorde con nuestra propia naturaleza, tradicion e historia. Vasconcelos también con- sidera este aspecto, y no pacas de sus accione uvieron determinadas por las caracieristicas socioeconémicas y culiurales del momento que vivia enlonces nuestra nacion Entre otras cosas nuestra sociedad exigia alencidn priorilaria y defini- tiva a la educacién primaria y elemental; consideracion jnmediata al pro- blema de la educacién indigena; creacién y fortalecimiento de la escuela primaria rural; promocién y difusion de la ensefianza técnica; atenci6n ala educacién corporal, higiene, saneamiento y profilaxis, y un esfuerzo permanente de alfabetizacién que sentara las bases de una paulatina y progresiva labor educativa. Todas estas acciones fueron caracterislicas vel periody vasconcelista, y no asbstante que se desprendieron de necesidedes inmediatas y concretas, nunca se olvidé el objetivo ulterior del proceso educative global: la libera- ro cién espirilual de la sociedad mexicana. Junto a cada propuesta de accién educaliva emergia siempre la preocupacidn por el desarrollo de la activi- dad estética, no slo como apoyo en el proceso de integracién y definicién cultural sino como actividad liberadora y reveladora. Al concluir esta exposicidn, mencionaré la diversidad de influencias filosdficas que concurren en el pensamiento vasconcelista; entre olras se advierten Jas de Pitagoras, en el cual se inspira para elaborar su teoria del ritmo; Plotino, con el cual comparte la nostalgia de lo Uno; los plantea- mientos crislianos en torno a la gracia, la revelacién o el libre albedrio; Bergson, que otorga los elementos para hacer de la emocion condicidn y principio de todo conocimiento; la triada hegeliana; la alternativa que ofrecen Boutroux y Poincaré al conocimiento que no alcanza la ciencia, tan defendida por los positivistas, etc. Esto se explica en gran medida por las circunstancias que motivaron a Vasconcelos a incursionar en Jos caminos de la filosofia. Como parte de una generacién inquieta por-la opresion y el vacio que provoco el positivismo frente al rigor cientifico que se proclamaba, habia que abrir las puertas del mundo espiritual, buscar nuevas alternativas en las corrientes del pensamiento universal, y ala vez promover el entusiasmo para crear y conformar una cultura propia; habia que motivar el sentido estético y llegar a la contemplacidn mistica del universo. Vasconcelos propone una opcién frente al positivismo que regia en aquel entonces y se compromete en la lucha de crear a través de la accién educativa nuevas alternativas y unainmensa gama de posibilidades para el desarrollo espiritual de México. Su pensamiento abierto y comprometido hizo que ademas dela preocu- pacidn social y el sentido practico que supo imprimir a sus programas, su obra educativa poseyera aquello de lo que actualmente muchos proyectos carecen: una vision totalizadora que incorpora al hombre en un proceso de realizacin integral y que confiere a cada una de sus acciones un sentido, que puede ser el mas rico, el mas pleno.

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