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Mito adaptado para obra teatral escolar grado 6E Institucin Educativa LA MILAGROSA, sede GREGORIO
HERMANDEZ Municipio de Palmira.
En un pueblo muy lejano se hablaba de un jinete que acostumbraba a hacer su recorrido por las noches en un caballo,
la gente muy extraada se preguntaba por qu hace eso?, ya que no era muy comn que alguien saliera por las
noches a hacer esos recorridos.
En una noche muy oscura y con fuertes relmpagos desapareci del lugar, sin dar seas de su desaparicin. Pasaron
los aos y la gente ya se haba olvidado de esa persona, y fue en una noche igual a la que desapareci que se
escuch nuevamente la cabalgata de aquel caballo. Por la curiosidad muchas personas se asomaron, y vieron un
jinete cabalgar por las calles, fue cuando un relmpago cay e ilumin al jinete y lo que vieron fue que ese jinete no
tena cabeza. La gente horrorizada se meti a sus casas y no se explicaban lo que haban visto.
Cuentan que hace mucho tiempo un hacendado conocido por sus malos sentimientos enamoro y robo la hija de otro
bien conocido y poderoso en el llano.
Cuentan que el enojado padre y su hijo se reunieron para encontrarle solucin a su penumbra y traer sana y salva al a
doncella de nuevo a su hogar junto a su familia
PERSONAJES:
Padre: Santiago Salazar Giraldo
Ramiro (hermano): Juan Jos Pinto
Vecino: Santiago Snchez Perdomo
Jinete (Antonio): Juan Andrs Salazar Bolvar
En una sala de la hacienda se encuentran padre e hijo.
PADRE: (Con tono enojado) Ramiro cmo es posible que ese mal hombre se haya llevado a mi hija?
RAMIRO: vamos a hacer lo posible por evitarlo pap, y cueste lo que cueste la salvaremos, llevemos las espadas por
si algo sale mal.
De pronto cuando van saliendo de la hacienda se encuentran un vecino
VECINO: a donde van con espadas vecinos?
PADRE: vamos a darle una leccin a ese mal hombre que se ha llevado a mi hija.
VECINO: (tomando su espada) vamos.
Llegando a la casa de Antonio el mal hombre que cautivo a la hija.
PADRE: Antonio sal, mal hombre da la cara.
RAMIRO: vamos a darte tu merecido
ANTONIO: me llevare a tu hija cueste lo que cueste
En ese momento empieza la pelea a filo de espadas.