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Introducción

Al dar inicio a la lectura de este material me he propuesto


absolver todo lo posible para que me sirva de apoyo para
un futuro.

Espero que sea del agrado de mi profesor y todo aquel


que le de lectura pueda enriquecerse tanto como yo.

En este de acuerdo a su tema podré ver los diferentes


sistemas de apareamiento que existe entre los animales.
SISTEMA DE APAREAMIENTO

Hay muchos tipos distintos de sistemas de apareamiento, y su evolución está modulada


por los factores ecológicos. No cabe duda de que, para un macho, resulta beneficioso
aparearse con la mayor cantidad de hembras posible. Si las crías pueden sobrevivir por
sí mismas o bien con los cuidados parentales proporcionados por la hembra, fecundar
los huevos de varias hembras le reportará a un macho muchos beneficios en términos de
eficacia biológica. En cambio para una hembra, las ventajas de aparearse con varios
machos son mínimas.

Poliginia
La poliginia (aparearse con varias hembras) es un tipo de sistema de apareamiento
polígamo (múltiples compañeros sexuales) que se caracteriza porque un macho se
aparea con varias hembras, mientras que las hembras lo hacen solamente con un macho
o un número muy reducido de machos.

Existen notables diferencias en el grado de poliginia que presentan las distintas especies
animales, estas pueden ser moderadas o muy extremas. La poliginia puede adoptar
distintas formas.

Poliginia de defensa de recursos


En este sistema de apareamiento los machos consiguen acceder sexualmente a múltiples
hembras estableciendo un territorio que contiene algún recurso valorado por las
hembras. Los machos defienden los recursos y, en el proceso, establecen un harén de
hembras con las que solamente ellos tienen derecho a aparearse.
Los machos pueden defender distintos tipos de recursos. Por ejemplo, los machos de
mosca damisela de alas negras establecen sus territorios en franjas de vegetación
flotante. Cuanto más larga es la franja, mayor es la cantidad de hembras atraídas.
Consecuentemente, los machos con territorios más grandes tienen más éxito, por lo
menos, temporalmente.

Poliginia de defensa de las hembras


En esta el macho defiende directamente a las hembras que ha conseguido monopolizar
enfrentándose a otros machos. Este tipo de poliginia es bastante habitual entre los
ungulados y los primates de vida terrestre.
Las hembras suelen formar grupos y alimentarse dentro de un área relativamente
amplia. En estos casos, la estrategia óptima para un macho consistirá en unirse a uno de
esos grupos, y establecer un harén, que podrá defender enfrentándose a otros machos.
Por ejemplo, el ciervo común tiende a formar harenes defendiendo directamente a las
hembras.

Poliginia de lek o de arena


Es un sistema de apareamiento relativamente poco frecuente, propio de unas pocas
especies aisladas de insectos, aves y mamíferos. Un lek es un área de reunión que
funciona a modo de escenario, donde un grupo de machos hace ostentación de sus
rasgos más llamativos. Dentro del lek, los machos establecen pequeños territorios
adyacentes. Las hembras entran en el lek y se aparean con uno de los machos.
Poliginia de carrera competitiva
Esta carece de toda estructura y organización. En este sistema de apareamiento poco
habitual, ilustrado por las ranas de bosque, los machos se dedican a ir por la mayor
cantidad de cópulas posibles en un periodo de tiempo breve. Apenas hay una elección
activa de compañero sexual por parte de ninguno de los dos sexos. De todos modos,
actúan ciertos procesos selectivos, ya que los machos de mayor tamaño suelen tener más
éxito que los pequeños.

Poliandria
Es lo contrario de la poliginia: una hembra poliándrica se aparea con varios compañeros
sexuales, mientras que los machos se aparean solo con una hembra (o bien con una
cantidad menor de individuos que las hembras).

Poliginandria
Los animales poliginándricos viven en grupos, en los que tanto las hembras como los
machos se aparean con varios compañeros sexuales. Este sistema de apareamiento es
poco frecuente, pero se ha descrito en algunos mamíferos. Por ejemplo en algunos
grupos de leones africanos, dos o tres machos pueden aparearse con todas las hembras
del grupo, el macho más dominante es el que realizara la mayoría de las cópulas. Puesto
que los machos suelen estar emparentados, hasta los que tienen escasa descendencia
obtienen ciertas ventajas en términos de eficacia biológica inclusiva.

Monogamia
Una relación monógama puede ser beneficiosa, puesto que el macho puede colaborar en
el cuidado de la progenie y proteger a la hembra y a las crías de los depredadores y las
agresiones de otros machos coespecificos. Estas conductas pueden aumentar
significativamente las probabilidades de supervivencia de la progenie. El macho obtiene
otro beneficio importante: la posibilidad de acceder sexualmente a una hembra cuando
sea fértil, lo que aumentará notablemente sus probabilidades de tener descendencia. Los
machos monógamos suelen implicarse en actividades de vigilancia o control de la pareja
que reducen las probabilidades de que las hembras les engañen con otros machos, y, por
lo tanto, tengan que invertir en unos hijos que no son suyos.

♦ ADAPTACIONES INSOLITAS

Monogamia en un pez

La monogamia es rara en peces, sobre todo en las especies que viven en las praderas
marinas. De todos modos, el caballito de mar practica una forma insólita de monogamia.
La hembra deposita los huevos dentro de la bolsa de incubación del macho. Después de
fecundar los huevos, el macho continúa llevándolos dentro de la bolsa hasta el momento
del parto. Durante el embarazo, el macho se encarga de proteger a los huevos. Cada
mañana la pareja realiza una ceremonia de saludo en la que bailan juntos durante varios
minutos. Esta ceremonia, aparte de consolidar el vínculo de pareja, permite que la hembra
evalúe como progresa el embarazo del macho.
Cópulas fuera de la pareja monógama
En una pareja monógama, la infidelidad o las cópulas fuera de la pareja por parte de uno
de los miembros, representan una amenaza para la eficacia biológica del otro. Si una
hembra copula con un macho que no es un compañero sexual habitual, este último
puede invertir tiempo y energía cuidando de unos hijos que no son suyos.

Posibles ventajas de copular fuera de la pareja para las hembras


Las hembras en comparación con los machos, tienen menos que ganar del hecho de
aparearse con múltiples compañeros sexuales. Sin embargo, las investigaciones han
permitido identificar algunas ventajas que puede reportar la poligamia (es decir, el
hecho de aparearse con más de un compañero sexual) a una hembra. Por ejemplo, las
hembras de algunos insectos reciben regalos nupciales de los machos a cambio de
copular con ellos. Por lo tanto, en estos casos aparearse con varios machos reporta
beneficios materiales a las hembras.

Estrategias condicionales
A un animal puede resultarle ventajoso cambiar de sistema de apareamiento, adoptando
el que proporcione la mejor relación entre coste-beneficio en cada circunstancia. Puesto
que la solución que permite obtener el mejor balance no tiene porque coincidir en
ambos sexos, es posible que surjan conflictos.

Cambiar de la monogamia a la poligamia


Este tipo de relación es más probable encontrarlas cuando abundan los recursos. Parece
ser que hay un umbral de poliginia, es decir, un punto a partir del cual a una hembra le
compensa pasar de una relación monógama a otra poligínica. Por ejemplo, una hembra
puede mantener una relación poligínica a pesar de que le reporte beneficios inmediatos
ligeramente inferiores a los que les reportaría una relación monógama.

Cambiar de un tipo de poliginia a otro


También existen pruebas de que los animales pueden cambiar de un tipo de poliginia a
otro en función de las condiciones ambientales. Cuando la densidad poblacional de
ranas de bosque durante la estación reproductora sólo es moderada, los machos se
vuelven territoriales y se desplazan muchos menos.

COMPETENCIA POSTCOPULATORIA
La competencia que se establece entre los machos por fecundar un gran porcentaje de
los ovocitos de una hembra no acaba con la cópula. Un macho se expone a que otro
macho copule con la misma hembra y que el esperma del rival fecunde sus ovocitos.
También existe la posibilidad de que la hembra ya haya copulado previamente con otro
macho y que los esfuerzos de este sean infructuosos.

Vigilancia de la pareja
Una de las formas más directas de garantizar la paternidad es el enfoque
comportamental: vigilar la hembra o no permitir que se le acerquen otros machos
mientras esté receptiva. Tanto en las aves como en los insectos, la hembra puede
conservar el esperma dentro del tracto reproductor durante varias semanas después de la
cópula, hasta que los ovocitos estén listos para ser fecundados.
Efectos de primacía y de recencia sobre la fecundación.

Efecto de recencia Efecto de primacía


Definición El macho que copula en último El macho que copula en primer
lugar tiene mayores probabilidades lugar tiene mayores
de fecundar los ovocitos de la probabilidades de fecundar los
hembra. ovocitos de la hembra.
Ejemplos Insectos y aves Mamíferos
Efecto sobre Fuerte presión selectiva a favor de Escasa presión selectiva a favor
la vigilancia la vigilancia de la pareja. de la vigilancia de la pareja.
de la pareja

Prolongar la cópula
Otra forma que tienen los machos de vigilar a la pareja consiste en permanecer unidos a
al hembra en una larga cópula. Las moscas damisela a veces permanecen unidas por el
abdomen hasta seis o siete horas, sobre todo cuando la competencia entre machos por
acceder a las hembras es muy intensa.

Vigilancia de pareja por parte de la hembra


Puesto que mientras un macho está copulando con una hembra no puede, por lo menos
temporalmente, copular con otras hembras, el hecho de que una hembra solicite cópulas
a su compañero sexual frecuentemente puede considerarse una forma de vigilancia de la
pareja. Por lo tanto, elevar el nivel de actividad sexual puede servirle a una hembra para
evitar que su compañero sexual copule con otras hembras, aparte de aumentar las
probabilidades de fecundación.

Competencia espermática
Otro tipo de estrategias para reducir las probabilidades de que un macho rival fecunde
los ovocitos de una hembra son las adaptaciones fisiológicas que permiten que el
esperma del macho compita eficazmente con el esperma de los machos rivales.

Eyaculaciones frecuentes
Algunos machos que tienen que hacer frente a la competencia de otros machos eyaculen
varias veces en un periodo de tiempo breve mientras copulan con una hembra. Conviene
tener en cuenta que no está claro por qué una mayor frecuencia de eyaculación se asocia
a una mayor cantidad de esperma en el cuerpo de la hembra que los eyaculadores menos
frecuentes. Otra posibilidad es que, al aumentar la frecuencia de eyaculaciones, se
incrementen las probabilidades de que una de las eyaculaciones coincida con el
momento óptimo para que se produzca la fecundación de los ovocitos.

Extracción de esperma ajeno


J. K. Waage (1973) identificó una adaptación sorprendente en el pene de la mosca
damisela. El pene de este insecto dispone de una especie de cuernos cubiertos de púas
que permiten que el macho lo utilice a modo de cepillo limpiador. Antes de copular, el
macho puede extraer más del 90% del esperma depositado en la espermateca (el saco
donde la hembra guarda el esperma antes de que se produzca la fecundación).
Producción de grande cantidades de esperma
Quizás el método más simple que puede utilizar un macho para aumentar las
probabilidades de tener descendencia consista en eyacular grandes cantidades de semen
y espermatozoides. De este modo, se incrementaran las probabilidades de que parte del
esperma consiga fecundar los ovocitos de la hembra.

Introducción de antiafrodisiacos
Otra adaptación fisiológica relacionada con la competencia espermática consiste en
depositar un antiafrodisiaco –una sustancia que disminuye el atractivo de la hembra-.
Inmediatamente después de inseminarla. Generalmente son los machos los que
producen estas sustancias.

EVOLUCIÓN HUMANA
Como ocurre con muchas especies de animales, los humanos practicamos lo que podríamos
denominar una mezcla de estrategias de apareamiento. De forma similar, algunas de las formas
de competencia espermática que acabamos de describir también se encuentran en los humanos.

SISTEMA DE APAREAMIENTO
Los primero homínidos probablemente vivían en grupos que sólo contenían un macho
sexualmente activo. Más adelante, la atenuación del dimorfismo sexual sugiere que los
primeros humanos probablemente eran menos poligínicos y tal vez presentaban ciertos grados
de monogamia.
Como nuestros ancestros, los humanos modernos tendemos a practicar ambos sistemas de
apareamiento: la poliginia y la monoginia.
Como ocurre en muchos animales no humanos, el tipo de sistema de apareamiento adoptado
por una sociedad humana, hasta cierto punto, con la disponibilidad de hembras. Aparentemente
la disponibilidad relativa de compañeros sexuales influye sobre el tipo de sistema de
apareamiento adoptado tanto por los animales no humanos como por los humanos.
David Buss y David Schmitt clasificaron las tendencias poligámicas individuales (como
opuestas a los matrimonios poligámicos culturalmente aceptados) como estrategias de
apareamiento a corto plazo (implican aparearse sin ningún compromiso de cara al futuro) y las
tendencias monógamas como estrategias de apareamiento a largo plazo (reflejan una visión de
futuro y un compromiso con una persona y con sus hijos).
Las ventajas e inconvenientes asociadas a cada una de estas estrategias difieren entre ambos
sexos. Para el hombre en el caso de la estrategia de corto plazo es mucho más beneficiosa ya
que pueden tener muchos hijos sin ninguna inversión parental en términos de tiempo y
recursos. Pero en el caso de que adopten la estrategia de a largo plazo hasta para los hombres es
más conveniente ya que pueden atraer más a las buenas madres, formen alianzas mutuamente
beneficiosas con su pareja, contribuyan activamente a la eficacia biológica de sus hijos
proporcionándole cuidados parentales.
Para las mujeres, la estrategia a largo plazo generalmente es más beneficiosa que las estrategias
a corto plazo.

COMPETENCIA ESPERMATICA
Robin Baker (1996) detectó una correlación positiva y significativa entre la cantidad de
espermatozoides eyaculados y la cantidad de tiempo que la pareja había permanecido separada
antes de mantener relaciones sexuales. En otras palabras, los hombres eyaculan una mayor
cantidad de esperma cuando habían permanecido separados de sus parejas durante cierto tiempo
que cuando habían permanecido juntos a sus parejas. Baker también llego a la conclusión que si
una mujer mantiene relaciones sexuales con varios hombres en poco tiempo, el esperma del
hombre cuya eyaculación se asocie a orgasmos en la mujer tendrá una ventaja competitiva
sobre el esperma de los hombres con quienes la mujer no experimentó orgasmos.

Conclusión

Al finalizar este trabajo he podido aprender un sin numero


de cosas que ni siquiera imaginaba.

Pude ver los diferentes sistemas de apareamiento que


tienen los animales y sus métodos para que sus especies o
generaciones puedan tener continuidad. Además de la
relación que existe entre los sistemas de apareamiento de
los animales y la evolución de los sistemas de
apareamiento humano.

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