LA ÚLTIMA CIMA

Un modelo de cura

FICHA TÉCNICA
Título original: La última cima. Dirección: Juan Manuel Cotelo.
Año de producción: 2010. Duración: 82 minutos. Nacionalidad:
española. Género: Documental. Guión: Juan Manuel Cotelo.
Fotografía: Alexis Martínez. Producción: Infinito + 1.
Distribución en cine: European Dreams Factory. Estreno en
España: junio de 2010.

EDADES RECOMENDADAS
A partir de los dieciséis años.

SINOPSIS
A través de la voz y de la imagen física del protagonista y de múltiples personas cercanos a él, el
director de este documental va componiendo un rompecabezas en el que se despliega la singular
personalidad de Pablo Domínguez, sacerdote diocesano, decano de la Facultad de Teología de San
Dámaso (Madrid) y fallecido prematuramente a los 42 años al despeñarse bajando del Moncayo, en
una muerte que de algún modo el había anunciado.

CRÍTICA
Siguiendo la estela de otras películas recientes de género documental, el realizador de este atípico
film presenta mirando directamente al público la figura de este joven sacerdote, doctor en Filosofía
y Teología y dotado de una personalidad arrolladora, ante la que no cabía la indiferencia en quien
entraba en contacto con él.
Lo primero que me ha llamado la atención en esta película es su factura netamente profesional y su
contundencia audiovisual basada en una imagen cuidadosamente presentada, con la voluntad
estilística de hacerse notar en planificación, temas musicales y grafismo; todo ello viene como
anillo al dedo en el sistema de vídeo de alta definición utilizado en la realización.
El segundo aspecto que me ha impactado es el desparpajo del director –convertido en este caso
también en actor- dirigiéndose al público de la sala, es decir, rompiendo lo que en cine clásico se
ha llamado “la cuarta pared” y haciéndolo a base de planos medios de su figura sobre fondo
blanco. Lo consigue dando un una impresión de gran inmediatez y de querer agarrar el toro por los
cuernos, sabedor de que va contra corriente en este país en el que de un sacerdote se espera
escándalo, corrupción o doblez.
Pero la figura que Cotelo presenta es la de un buen cura y lo defiende con la convicción de haber
encontrado un filón que vale la pena mostrar; de ahí el tono apologético católico que impregna
todo el film y que se transparenta en las primeras imágenes videográficas auténticas Pablo
pronunciando una conferencia en el aula de apologética (ojo al dato) de la Facultad: toda una
declaración de intenciones.
El film va desconstruyendo -como ahora se dice- en pequeños fragmentos la vida y milagros de
este sacerdote singular. A un ritmo vivo y acertado, sobre todo en los dos primeros tercios de la
película, desfilan por la pantalla los testimonios de amigos, familiares y superiores de Pablo;
también lo hacen personas anónimas interrogadas a pie de calle sobre qué opinan de los curas de
hoy. No faltan tampoco vídeos domésticos de este sacerdote, fotos, canciones y puntualizaciones
casi doctrinales a veces a ritmo de videoclip, así como una reconstrucción harto discutible y un
tanto amanerada de su última ascensión a la cima, con una misa solitaria en las alturas que vale
más que tres lecciones de liturgia... preconciliar.
Vista en conjunto, La última cima me parece una película estimable, a contracorriente de modas y
tópicos ideológicos dominantes y más moderna en la factura que en el fondo. Su mayor peligro del
que no acaba de zafarse el realizador es su carácter excesivamente “hagiográfico” (historia de la
vida de un santo), realizado eso sí, con un envoltorio todo lo moderno que se quiera. Existe una
carencia de contrapuntos críticos hacia la figura de este sacerdote “distinto” y se pasa de puntillas
sobre las oscuras circunstancias de su muerte al bajar del Moncayo; el espectador atento sacará sus
conclusiones.
Estamos ante la presentación entusiasmada de un sacerdote que deviene modelo, ejemplo e ideal
para estos tiempos duros en la Iglesia, pero entra la duda de si no existirán otros modelos
igualmente válidos de sacerdotes para estos comienzos del siglo XXI. Recién terminado el Año
Sacerdotal, ¿cabe sólo un modelo de sacerdote como el de Pablo? ¿No estaba para esto ya el Santo
Cura de Ars? ¿No será toda la película, al fin y al cabo, “vino viejo en odres nuevos”?

Josep Lluís Burguera

1 de julio de 2010

PARA DEBATIR O PARA PENSAR

1) ¿Con qué rasgos de la personalidad y del sacerdocio de Pablo te has sentido más en sintonía?
2) ¿Con qué características te has sentido más distanciado o contrario?
3) ¿Te parece que la puesta en escena de la película es acorde con el tema tratado y la naturaleza
del protagonista?
4) ¿Qué elementos de la figura de Pablo realza más la película?
5) ¿Qué aspectos echarías a faltar en la personalidad, el pensamiento o acción de este sacerdote?
6) ¿Cuáles han sido las escenas más conseguidas desde el punto de vista estético? ¿Por qué?
7) ¿No corre esta película el riesgo de ser, como dice el evangelio: “vino viejo en odres nuevos”?

TRÁILER DE “LA ÚLTIMA CIMA”

Los primeros cinco minutos del film pueden visionarse en esta dirección:
http://www.youtube.com/watch?v=Av6oD1eaE64&feature=related