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ESCUELA NORMAL URBANA FEDERAL

“LIC. EMILIO SÁNCHEZ PIEDRAS”

ENSAYO

LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA EN LA ESCUELA PRIMARIA

Profesora: Dolores Pérez Alvarado

Alumna: Irene Sánchez lázaro

Grupo: 206

14 de marzo 2011

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ÍNDICE

Pág.

Introducción 3

La historia: el camino para la identidad nacional 4

Historia a la carta: ¿Qué es lo que desea? 5

La importancia de la enseñanza de la historia en la escuela 6


primaria: ¿Por qué?, ¿Para qué? y ¿Cómo?

Recomendaciones para el estudio de la historia 9

Conclusión 10

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INTRODUCCIÓN

Muchos son los autores que nos dicen que la historia es un viaje al pasado para
entender nuestro futuro, y como es que los acontecimientos, hechos y personajes
han repercutido en nuestra vida, y estoy completamente de acuerdo, sin en
cambio a pesar de la importancia de la historia en la vida no solo de una persona
sino de todo un país, se ha dejado en segundo lugar su enseñanza, su
importancia y su gran valor formativo.

Ciertamente si hay una materia dentro del currículo de educación primaria que
cumpla con objetivos académicos, formativos y sobre todo valor moral es la
historia; el valor instructivo de la historia es relativamente inferior al de materias
tales como la geografía, la geometría, aritmética etc; en educación intelectual casi
las iguala, pero en educación moral es incomparablemente superior.
Rebsamen(1904).

La historia por mucho, es una materia en la cual se puede encontrar el


conocimiento moral del alumno, los contenidos que se abordan son de una riqueza
cultural e intelectual incomparable, transmite valores y sobre todo es una rasgo
distintivo del un pueblo, pues la historia de una nación es la historia de un
individuo, que une a cada individuo en un sentimiento común, la identidad y unidad
nacional.

Por mucho tiempo la historia ha sido abordada de manera errónea, volviéndola en


una materia aburrida, tediosa, haciendo uso de la memorización, volviéndola
complicada y completamente difícil de abordar, este problema no solo lo presenta
el alumno en la escuela primaria, sino que también lo presenta el docente, pues al
no tener el completo dominio de la historia, su fundamento pedagógico y social,
puede perder el rumbo y no aprovechar verdaderamente el valor de la materia.

LA HISTORIA, EL CAMINO PARA LA IDENTIDAD NACIONAL.


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Son múltiples los comentarios acerca del gran valor moral que contiene la historia
(Caso, Torres Bodet, Jean Meyer). A lo largo de los relatos que contiene el libro de
historia nos relata una sucesión de acontecimientos que si se hace uso del análisis
y la reflexión, nos dejan una enseñanza valiosísima.

Como país, compartimos múltiples factores que nos identifican como mexicanos y
mexicanas: el territorio, la bandera, el himno, las costumbres, las tradiciones, las
creencias; hasta rasgos como la gastronomía, la artesanía etc, hablar de ser
mexicano es ser un amante de la patria, sin caer en fanatismo, mas bien es
valorar el lugar donde vives y estar orgulloso de estar ahí, es por eso que la
historia juega un papel primordial en la creación de una identidad nacional.

La historia mediante su estudio nos da a conocer rasgos de nuestra vida nacional


que desconocíamos, nos muestra cómo es que nuestra nación es como es, por
somos como somos, da respuesta a incógnitas sociales nos une mediante hechos
relevantes que dejan claro que México es nuestro país ,por eso es muy importante
enseñar de manera correcta a las nuevas generaciones y futuros ciudadanos,
mostrarles que el país en el que viven a pasado por muchos cambios del los
cuales ellos son parte, por lo tanto se sugiere que la historia muestre por una parte
los hechos más importantes dentro del acontecer nacional, enseñarle al alumno
los movimientos, y luchas sucedidas en el país, los diferentes cambios que se
suscitaron a lo largo de las historia, la diversidad de culturas, la llegada de
colonización y muchos otros factores, tuvieron un porqué y un propósito, y
enseñarle a reflexionar y pensar cómo es que aquellos hechos del pasado han
repercutido en su presente y como creen que lo harán el futuro.

Si bien es muy importante que le niño conozca la historia para enriquecer su


acervo cultural e intelectual, también sirve para enriquecer su alma y su espíritu, la
historia nos muestra valores tales como el valor, la responsabilidad, el respeto, la
colaboración entre muchos otros, mismos que mediante un buen tratamiento de la
información y la correcta enseñanza de un determinado acontecimiento, el alumno
puede adquirir esos valores y usarlos en su vida diaria, por eso es que se
recomienda que los alumnos vean en los héroes nacionales un ejemplo, y traten
de seguirlo, mas eso no implica imitar sus acciones, se trata de que el alumno vea
en la narración de la historia no solo un conjunto de hechos, sino también de
valores y actitudes.

Entonces este rasgo es muy importante y destacable, la historia es de alto


contenido moral y una herramienta indispensable para la formación integral del
alumno en la escuela primaria, dichas enseñanzas se pueden reflejar en la
transmisión de conductas de respeto a la patria, a sus instituciones y símbolos

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patrios, se puede reforzar dichas conductas en eventos cívicos, conmemoraciones
nacionales.

Lo más importante es que el alumno sepa y este orgulloso de su patria y de su


historia, sea objetivo con los demás y consigo mismo, aprenda a vivir en sociedad,
a solidarizarse y vivir en armonía, respetar al prójimo y respetar a su país, amarlo,
cuidarlo, y admirarlo, porque para ser un verdadero mexicano, se necesita amar a
la patria.

HISTORIA A LA CARTA: ¿QUÉ ES LO QUE DESEA?

Es muy importante el estudio objetivo de la historia, ya que se puede decir es


materia angular dentro de la escuela primaria, también se puede decir que, debido
a lo ya mencionado, a su importancia dentro de la formación moral del alumno y la
transmisión de valores, entonces podemos hacer mención de Pulckrose; el hecho
de que la historia puede conducir al estudiante a reflexionar sobre valores y
actitudes adoptadas por la sociedad, hace que su estudio sea vulnerable a la
interferencia política Pulckrose(1993), y es muy cierto, realmente la historia tiene
un alto contenido social, y político, pues en la mayor de los casos muchos
acontecimientos tiene que ver con algún movimiento social, que tiene algún fin u
objetivo, y detrás de todo esto, un gobierno que maneja la situación como mejor le
convenga.

El por eso que el tratamiento de el hechos histórico es una situación delicada,


pues la información que se le transmite al alumno debe de ser lo más real,
concreta y objetiva posible, como en la ciencias, mas tampoco debe ser absoluta,
el niño debe conocer la verdad, debe aprender a indagar y hacer uso de su
raciocinio para clasificar e identificar lo bueno y lo malo, de esta forma el se
convertirá en un ser crítico y aprenderá el valor de la verdadera historia.

Para mi es lamentable ver que muchas son las ocasiones en las cuales el hechos
histórico es tomado para fines políticos, exaltando héroes irreales, creyendo
historias ficticias, llevando en su memoria hechos erróneos y manipulados, ya sea
por la instauración de un gobierno y por negligencia, lo cierto es que se debe
evitar a toda costa hacer del estudio de la historia una arma en contra de la
sociedad misma, y al niño que comienza su formación histórica de hechos que
puedan transformar de mal forma su concepción de el país en donde vive y su
lugar histórico.

La escuela es el lugar en donde el niño aprende los fundamentos del


conocimiento, el acude a ella con la firme convicción de que es ahí donde
aprenderá cosas reales, es por eso que el docente debe aprender a diferenciar
una información de otra, consultar diversas fuentes, preocuparse por que su
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alumno no se vea atrapado en una maraña de sucesos que lo confundan, debe
aprender a ver el hechos histórico de manera analítica, a darle la correcta
interpretación, darle sentido a lo que narra y no prestarse a la manipulación ni
cambio de lo que cree, por que debe tener convicción y compromiso con la
escuela y sobre todo con el alumno.

La historia y su estudio es todo un conjunto de experiencias maravillosas hechas


por la misma vivencia y mano del hombre, por lo mismo es manipulable por él;
pero no debemos dejar que eso suceda, no debemos engañar a los alumnos con
relatos fuera de la realidad, la verdad implica muchas cosas, pero así como tiene
sus riesgos también tiene su recompensas, mentes jóvenes, capaces y soñadoras
que conocen su mundo, conocen su país, y se conocen a sí mismos, estas mentes
son los alumnos, tal vez futuros historiadores, y porque no decirlo, futuros
maestros.

LA IMPORTANCIA DE LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA EN LA ESCUELA


PRIMARIA: ¿POR QUÉ?, ¿PARA QUE? Y ¿CÓMO?

Para abordar este segmento del ensayo me dirigiré a responder tres preguntas
que me parecen articuladoras de todo lo aprendido durante el bloque sobre la
historia y su enseñanza,

La primera preguntas es: ¿Por qué enseñar historia en la escuela primaria?, creo
que la respuesta ya ha sido dada de forma muy generalizada, pues hemos
mencionado que la historia es rica en un contenido moral, trasmite valores y
conductas de la sociedad, y puede llevar al alumno a reflexionar sobre sus actos y
los actos de la sociedad en la que vive y convive, creo que es ahí donde cae el
compromiso de la historia con la formación del individuo y su importancia de que
desde edades tempranas es trasmitida al alumno de edad escolar.

La siguiente cuestión a la que hare referencias es: ¿Para qué estudiar historia?,
no sé qué tal claro puede ser el propósito de estudio de la historia, pero a mi
parecer se estudia historia para conocernos, como componentes de una sociedad
en constante cambio, es muy común escuchar la afirmación de “quien no conoce
su historia, está condenado a repetir los errores del pasado” o que “ las historia te
permite conocer el pasado, para no cometer los mismos errores en el futuro”, y es
cierto de cierto modo, pero hay que ver esto desde el punto pedagógico, y
considerar que tanta importancia le da el niño al estudio de la historia, pues si
reflexionamos nuestra propia experiencia en la escuela y tratamos de recordar lo
que aprendimos nos damos cuenta que muchas veces lo que aprendemos sobre
historia está muy alejado de lo que se fundamenta en los propósitos y enfoques de
los planes y programas de estudio; pues se cree o se tiene la noción de que la

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historia solo sirve para recordar algunos hechos relevantes, fechas y personajes,
que año con año conmemoramos y hacemos fiestas para celebrar nuestra
independencia o la luchas revolucionarias , pero olvidamos reflexionar el por qué
de los hechos y sus consecuencias.

La historia por lo tanto no es solo el repaso y la memorización de unos cuantos


hechos y fechas, va mas allá de una sistematización, el alumno debe adquirir una
enseñanza de ella, hacer suya la historia, sentirse parte de ella y ella de él, solo
así el alumno encontrara un sentido lógico a lo que lee y escucha y aprenderá de
ella.

La escuela y la historia tiene una tarea fundamental: la formación integral del


individuo, es ahí donde se responde la cuestión.

La última pregunta planteada es: ¿Cómo enseñar historia?. Muchos se a


comentado acerca de la malinterpretación y uso de la historia y su enseñanza, de
la memorización, la falta de imaginación y propuestas para encontrar formas
llamativas y efectivas en la escuela para enseñara historia, y es que la materia
sido estigmatizada de ser aburrida y sosa, demasiado teórica, muchas letras que
en múltiples ocasiones no se entiende y en vez de conseguir progresos y
alimentar el interés del alumno por la materia , alimenta la apatía y el desagrado
por estudiar una disciplina tal amplia y emocionante como lo es la historia. Es por
eso la necesidad la plantear nuevas alternativas en la enseñanza del conocimiento
histórico, de modo que el docente sepa identificar cuáles son sus debilidades y en
que o de qué forma su modo de enseñanza se ha vuelto poco productivo y no
muestra resultados. La autoevaluación del trabajo docente puede hacer
recapacitar acerca de lo que hacemos bien o mal y permite modificar nuestras
técnicas de enseñanzas para realmente conseguir un progreso, el aprendizaje de
los alumnos, en mi consideración los planes de estudio establecen la enorme
necesidad de replantar los propósitos de la enseñanza de la historia, evitar la
memorización y la mecanización de conceptos que hacen que la materia pierda su
valor educativo, el error de muchos maestros es que dejamos de darle la
importancia conveniente a la historia dejándola en segundo plano dentro de la
labor escolar, basando su enseñanza en la lectura, mas no en la narración de los
acontecimientos; corroborar los conocimientos adquiridos mediante técnicas
lineales y poco practicas, haciendo una clase aburrida donde el maestro se dedica
a leer y el alumno a escuchar un texto que muchas veces no entiende y tiene
miedo de preguntar. El maestro limita al alumno a ser un oyente, y al mismo
tiempo se limita a sí mismo, tomando en cuenta esta reflexión podemos concluir
que ahí que realizar un cambio real en nuestros modos de enseñanza y
contemplar al alumno no como un componente de la clase, si no como un
elemento primordial para la adquisición de conocimientos, por lo tanto dedicare
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este último apartado a hacer algunas recomendaciones muy útiles para el
desarrollo del conocimiento histórico tomando en cuenta el punto de vista de
varios autores citados durante el bloque.

• Debemos hacer que el alumno vea en la historia una forma de construir y


dotar al alumno de una identidad a la diversidad de humanos, luchar por
recuperar su pasado y compartir valores sociales compartidos (Florescano
1997).

• El maestro debe conocer la forma y los métodos que se requieren para


llevar el estudio de la historia de la forma más objetiva y concreta,
enseñarle a utilizar métodos lo mas cercanos posibles a los utilizados en la
labor científica, enseñándoles a usar su lógica, el examen cuidadoso de los
vestigios históricos, someterlos a testimonios o pruebas de veracidad,
cuestionar, razonar, explicar, analizar, ser crítico con el fin de fundamentar
su conocimiento.

• Un niño pasivo en su proceso de enseñanza, no puede aprender realmente.


Hay que acercar al niño lo más próximo posible a las técnicas de un
historiador profesional.

• El docente por lo tanto debe conocer y considerar muy bien lo que


enseñara, el educador debe poseer una excelente memoria que retenga
con facilidad los acontecimientos con todos sus pormenores, sepa agrupar
de manera conveniente y lógica a fin de lograr así el mayor grado de
comprensión infantil. (Tijerina 1952).

• Examinar cuidadosamente los hechos históricos de forma que por


convicción, el educador brinde al alumno un conocimiento pulcro,
verdadero, fuera de toda concepción errónea, donde no impliquen otros
fines más que el de el conocimiento, pues al encontrarse en un proceso
formativo, la información que reciba puede ser de gran provecho o bien
afectarle e implantar en el sentimientos desagradables y poco productivos.

• La enseñanza de la historia debe estar mas allá de la memorización, debe


implantar nuevas técnicas de estudio y objetivos: debe desarrollar un
interés en el niño, hacerlo comprender los valores de la sociedad, aprender
las situaciones más importantes de su propio país y el mundo.

RECOMENDACIONES PARA LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA

Si bien hemos considerado recomendaciones que se deben de tomar en cuenta


para la enseñanza de la historia también hay que considerar la importancia de la

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forma de enseñanza. En primer lugar debido al desarrollo del niño no se puede ni
debe atosigar al alumno con conceptos difíciles ni periodos complejos o de
extenso estudio, por eso se propone que el estudio de la historia escolar se hace
forma gradual, acercando al niño con su entorno; a los niños más pequeños, el
estudio de su pasado inmediato les resulta más compresible, mientras que para
los niños mayores, casi cualquier periodo puede brindar la oportunidad para
desarrollar técnicas históricas (Pulckrose1993).

Es también muy indispensable que dentro de las técnicas para la enseñanza de la


historia, el educador conozca y tome en cuenta el valor de la narración para este
objetivo y haga el uso adecuado de ella; a este respecto Tijerina hace la siguiente
recomendación:

Es también indispensable que le docente posea gran habilidad ara narra de


manera sencilla, agradable y atrayente para los niños. Esta cualidad es de
capital importancia y podemos bien afirmar sin exageración, que los buenos
resultados en la enseñanza de la historia dependen en gran parte de la
facilidad que posea el educador para dar sus relatos, claridad, sencillez,
colorido y belleza.

Es muy importante que le docente sepa y encuentre formas de hacer de su clase


entretenida para el niño, debe tener un vocabulario extenso, claro pero a la vez
debe ser culto y divertido, debe hacer que le niño usa una cualidad innata de él: la
curiosidad.

La curiosidad a demostrado ser una cualidad muy productiva del humano, por lo
tanto se debe hacer uso de ella si se quiere logar cautivar el interés del niño en
una clase de historia, por lo general el niño no tiene nociones muy claras de lo que
la historia puede significar para su desarrollo cognitivo, es un ser aislado y poco
razonable, sin embargo si se considera su grado de desarrollo, sus capacidades e
interés se puede logara que el alumno sin que sospeche adquiera dichos
conocimientos en prácticas que parecieran cotidianas, resolver las dudas que de
su curiosidad surgen puede ayudar a llevar una ilación en los contenidos y saber
cómo y por donde dirigir el conocimiento histórico para que sea digerible para los
niños.

Hay que evitar a toda costa que la historia se pierda en un cumulo de prácticas
conservadoras y restrictivas, no hay que temer a experimentar con ella, a jugar
con la historia y sus conceptos, solo así teniendo un niño dentro lograremos
trasformar las prácticas de enseñanza de antaño y acoplarlas a las necesidades
actuales. Vivimos en una sociedad en constante cambio, los nuevos tiempos
exigen una formación educativa cimentada en los valores y el respeto social,

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tomemos en cuenta pues a la historia para conseguir este fin, no dejemos se
pierda en esta maraña de pesimismo, dejemos de lado a los maestros autoritarios
y sabelotodo y pongamos a trabajar las mentes de los alumno y de nosotros
mismo.

CONCLUSIÓN

Los logros educativos de la enseñanza de la historia implican una labor conjunta


entre autoridades educativas, historiadores, maestros y alumnos, poner énfasis en
la importancia y la necesidad de enseñar historia en la escuela primaria es
fundamental, pues sabemos su importancia social y si funcionalidad para la
formación de un carácter individual, para la conformación de un país y una unidad,
y a pesar de todo esto aun no se le da su lugar dentro del plan de estudios,
cambiemos la visión del conocimiento histórico, orientémoslo a un concepto más
productivo y eficiente, dejemos de lado los prejuicios y hagamos un cambio,
alejemos a nuestros niños de la historia aburrida, y acercándolos a la realidad con
entusiasmo, práctica y optimismo por aprender, olvidar el método de leer y leer e
intentar que comprendan algo automáticamente, la explicación y la creatividad
pueden hacer un cambio increíble en el aprovechamiento del alumno, si la historia
nos demuestra los cambios, los progresos y también tropiezos del acontecer
humano, porque no hacerlo con la educación y analizar qué es lo que realmente
hacemos por la educación, propongamos metas y cumplámoslas solo así
podremos sacar un provecho de historia y su estudio.

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