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• Aunque las grandes potencias de todo el mundo han estado investigando el tema
durante más de sesenta años, no fue hasta la década de los setenta (1974) que en
la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, saliera a la luz el
descubrimiento del “Radiosleep”, el cuál es un método para inducir el sueño por
medio de frecuencias de radio
Aunque las grandes potencias de todo el mundo han estado investigando el tema
durante más de sesenta años, no fue hasta la década de los setenta (1974) que en
la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, saliera a la luz el
descubrimiento del “Radiosleep”, el cuál es un método para inducir el sueño por
medio de frecuencias de radio. El mismo, se experimentó con una unidad militar en
Novosibirsk. [6] [7] Esta posibilidad técnica, de hacer que un humano se duerma
por medio de la utilización de radio frecuencias, fue confirmada realizando una
investigación sobre los efectos del electromagnetismo.[8] En un informe de la
O.M.S. de 1991, sobre la monitorización de la radiación, se puede leer: “muchos de
los efectos biológicos observados en animales expuestos a “campos ELF”[9],
parecen estar asociados directa o indirectamente, con el sistema nervioso.[10] En
la actualidad, existen métodos más avanzados para influenciar, como los
microondas, investigados por el Ejército, la Fuerza Aérea y la Marina de EE.UU.
(Behavior Controled Stimulation). Esta situación, ha llevado a la Comisión Nacional
de Bioética Francesa a advertir sobre la necesidad de que se reconozca a la
neurociencia como una amenaza potencial para los Derechos Humanos”. [11]
Parece sacado de la ciencia ficción pero las agencias militares y de inteligencia que
han experimentado con la tecnología de control mental, a espaldas de la población
y gran parte de los académicos, han logrado unos resultados sorprendentes. Por
dar un ejemplo, en Maryland e Israel y otros países, “superordenadores de más de
20 billones de bits/segundo pueden monitorear a millones de personas
simultáneamente. De hecho, en el futuro unos pocos dominarán a los muchos.[13]
Si tomamos en consideración que el pensamiento humano tiene una velocidad
aproximada de 5,000 bits/segundo, se puede intuir con rapidez que no hay nada
que hacer, en contra de un ordenador actuando vía satélite, implantes y otras
formas de biotelemetría. Me pregunto, ¿para qué será el “Brain Training”?
De acuerdo con los expertos, la manera más fácil de utilizar esa tecnología de modo
que se pueda llegar a toda la población es a través de los móviles. Según la Dra.
Ruani Leena, “en estos momentos, las fuerzas militares y policiales de las grandes
potencias pueden seguir a cada usuario con GPS (Global Positioning System),
influenciar sus pensamientos a través de microondas, causar que personas
saludables escuchen voces en la mente y si es necesario quemar sus cerebros al
incrementar la corriente 20,000 veces.” Probablemente, esto fue lo que le ocurrió al
líder Checheno, General Dudayev que murió hablando por teléfono móvil. De
acuerdo, con estudios realizados por la Marina de EE.UU., también pueden causar
estados de fatiga, depresión, insomnio, agresividad, perdida de la memoria a largo
y corto plazo (más frecuente), cataratas, leucemia, cáncer, infartos del miocardio,
tumores cerebrales, estados catatónicos temporales y muchos otros efectos. Se
preguntarán, ¿cómo es posible todo esto? Según el Dr. Ross Adey, ¡con la
utilización de 0,75 milivatios por centímetro cuadrado de intensidad de microonda
modulada por pulso a una frecuencia de 450 MHz es posible controlar todos los
aspectos del comportamiento humano!
[3] Flammarion, C.: (1915) “Lo Desconocido y los problemas psíquicos”. París
[6] Lopatin, V., Cygankov, V.: (1999) Psychotronic Weapon and the Security of
Russia. Publishing House:SINTEG, Moscow, Russian Federation.
[7] Russian Daily TRUD (1991-1992) Este medio organizó una búsqueda de
documentos secretos de Moscú relacionados con éste y otros temas de
manipulación.
[8] Evans, J.: (1992) “Mind, Body and Electromagnetism”. The Burlington Press,
Cambridge.
[13] Leena, R.: (1999) “Microvawe Mind Control: Modern Torture and Control
Mechanisms Elimination Human Rights and Privacy.” HELSINGIN SANOMAT.
September 9.