Año XX Número 469

22 de diciembre de 2006
¿Qué es la reingeniería personal?
LOS 5 DESEOS HUMANOS

El ser humano quiere felicidad y placer y no AVISO

sufrimiento y dolor. En estos tiempos políticos revoltosos, hemos decidido hacer
¿Cómo obtiene la felicidad y el placer? una pausa en el camino para hablar de cosas más profundas,
Generalmente logrando sus deseos... Si que nos pueden ayudar a entender lo que está pasando... y
sobre todo lo que está pasando en nuestro interior.
clasificamos al ser humano como especie, En lugar de regalarles algo material, hemos decidido regalarles
tendríamos que decir que es una “especie que esta Carpeta, con algo de la mayor sabiduría que ha producido
desea” o “un ser que desea”... el ser humano.
Si se sienten decepcionados porque en esta ocasión no vamos
¿Y qué desea el ser humano? a hablar de Felipe Calderón o de López Obrador, del
Si le hacemos caso a los griegos clásicos, Presidente legal o del Legítimo, de la crisis política que vive
básicamente se desean 5 cosas: la verdad, la México o de los escenarios que vienen, entonces esta Carpeta
es precisamente para ustedes... Dense unas vacaciones y
bondad y la belleza, el poder y la riqueza 1/. ¡disfrútenla!
Otros dirían salud (bondad con uno), dinero
(riqueza) y amor (bondad, belleza, poder).
Ahí se engloba todo:

La Verdad
- La verdad es el conocimiento, la ciencia,
la información (¿qué hacemos aquí? ¿para qué
vivimos? ¿qué sentido tiene la vida? ¿estábamos
en algún lado antes de nacer? ¿estaremos en
algún lugar después de morir? ¿en un infierno,
en un limbo, en un purgatorio o en un paraíso?
¿venimos de la nada y vamos a la nada? ¿existe
lo espiritual o únicamente un universo material-
Búsquedas del Ser Humano
Bienes materiales
energético en una dimensión tempo espacial
pero sin alma? Nos gusta que nos digan la
verdad, pero somos, dice Outspensky, una
“especie mentirosa”, ya que constantemente
decimos mentiritillas, mentirototas, mentiras
piadosas, mentiras dulces, mentiras duras, etc.
Ya ni nos damos cuenta cuándo y cómo
mentimos (”te hablo mañana”, “luego”, “si lo
Equidad Trascendencia

Mano de obra Solidaridad

Capital Tierra Convivencia
Ayuda
Igualdad
Sobrevivir Riqueza Dinero
Altruismo Bondad
Moral
Satisfactores Agua Energía
Desarrollo Etica Amor Salud
espiritual
Tecnología Infraestructura
Imaginación Creatividad Compasión
ISSN 0188-0098

Ser humano
Inspiración Belleza Naturaleza

Estética Equilibrio Intuición

Proporción de Armonía Armas Fuerza

Información
Orden Fibonacci o
Matemáticas sección aurea Arte Libertad Seguridad Liderazgo
Educación
Filosofía
Inventos Verdad Derecho Poder Justicia
Ciencia

Vacuidad Control
Conocimiento Capacidad
de elegir mental

1
 voy a hacer”, “la próxima semana”, “sí
llego”, “sí voy a ir”, “sí le dije”, etc.).
Necesitamos la verdad, el conocimiento, para
transformarnos y transformar nuestra realidad.
Para saber más cómo controlar una naturaleza
que a veces la sentimos cruel y despiadada
(terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas,
epidemias, heladas, etc.). La verdad, el
conocimiento, nos hacen libres y sobre todo, nos
da poder.
La Bondad
- ¿Quién no quiere bondad? ¿Quién no
quiere que lo traten bien, que lo apapachen, que
lo amen? ¿Quién no quiere sentirse bien?
¿Quién es insensible a las caricias, a los besos, a
los abrazos? ¿Quién no se arruga ante la mirada
inocente de un niño que le sonríe a uno? Somos
seres amables, es decir preparados para recibir
amor, que buscamos y queremos dar amor,
aunque a veces no sabemos cómo y acabamos
amando sólo a unos pocos, a un puñado,
odiando a muchos más e ignorando a casi todos
(”no los conozco”, “no sé quienes son”, “no me
conocen”, “no significan nada para mí” versus
aquella frase de alguien que dijo que veía en los
demás amigos que todavía no había tenido la
oportunidad de establecer contacto con ellos).
Amamos sólo a nuestra familia, a nuestra pareja,
a nuestros hijos y estamos dispuestos a hacerle
la guerra al vecino, a otros seres humanos, a
quienes no vemos como hermanos, sino como
enemigos, como competidores, como aquellos
que nos quieren arrebatar lo nuestro (”
mentalidad de escasez”) o que se van a apropiar
antes que nosotros de lo que nosotros mismos
queremos (riqueza, poder, posesión,
conocimiento, mercados, etc.).
La Belleza
- ¿A quién no le gusta la belleza? ¿El arte?
¿Lo bonito? ¿Un bello paisaje? ¿Una puesta de
sol? ¿El esplendor de un bosque, una montaña o
la magnificencia del mar? El ser humano vibra
con la belleza, se sacude su espíritu. A quién no
se le van los ojos tras un ser humano hermos@,
bien proporcionad@. Somos víctimas de la
belleza. Nos quedamos extasiados frente a un
Van Gogh o un Rodin. ¿Quién no se deslumbra
ante un diamante? ¿Quién es insensible ante el
oro? Nos gustan las ropas bonitas, los autos bien
diseñados, los aparatos tecnológicos más
sofisticados. ¿A quién le gusta lo feo, lo sucio, la
contaminación, la basura? Nos imaginamos un
paraíso limpio, ordenado, estético. Asociamos lo
bello con la verdad, con el equilibrio, con la
armonía, con las matemáticas, con el orden
universal. Por eso las religiones se han acercado
2
a la música, a la pintura, a la escultura, al
teatro, al cine. El arte es una puerta para el
espíritu. ¿Quién quiere dormir junto algo feo o
sucio? Nos gusta lo que se parece a nosotros, en
lo que nos sentimos reflejados, porque de esa
manera alimentamos nuestro ego, nuestra
vanidad, nuestro orgullo. Hacemos los dioses a
nuestra imagen y semejanza.
La Grecia Clásica construyó una
civilización poderosa en base a esos tres
principios: la verdad, la bondad y la belleza.
Pitágoras, Sócrates, Platón y Aristóteles
demostraron que la verdad se convierte en la
lógica, la bondad en la ética y la belleza en la
estética 2/. Aristóteles reingenió a Alejandro
Magno en base a esos tres principios y le enseñó
cómo utilizarlos para ganar una guerra, fundar
una ciudad, conquistar a una mujer o gobernar a
un pueblo. Con base en esos tres principios
Alejandro Magno jamás perdió una guerra,
conquistó dos Imperios, el de Oriente y
Occidente y todo el mundo conocido para su
época. En 13 años de reinado (de los 20 a los 33)
fundó más de 70 ciudades, entre ellas Alejandría
del Nilo, Bucéfalia, Nicea. Fue el primer
conquistador que no esclavizaba a los pueblos
que derrotaba, sino que les daba la libertad. Hizo
dos de las 7 maravillas del mundo clásico: el
Faro y la Biblioteca de Alejandría.
La civilización occidental, por el contrario,
le ha dado más preeminencia o se ha fundado en
los otros dos principios: el poder y la riqueza.
Hemos hecho una civilización materialista,
egoísta, egocentrista, individualista e insensible,
la cual es capaz de destruir toda belleza, de
destruir especies vegetales y animales, de
explotar al ser humano, de contaminar lo que sea
y de acabar con bosques o cualquier paisaje con
tal de acumular dinero y poder. El ser humano se
ha convertido en la peor plaga de este planeta,
amenazando incluso la viabilidad de esta nave
llamada Tierra en la cual viajamos 7 mil
millones de seres humanos.
El Poder
- ¿Quién no quiere poder? ¿A quién no le
gusta ser obedecido? ¿A quién no le gusta dar
órdenes, imponer su punto de vista, que se haga
lo que él dice, lo que él quiere, lo que su
capricho manda? ¿A quién no le gusta la fama,
sentirse importante, sentirse el rey, el mandamás,
el jefe aunque sea de su pequeña tribu, feudo,
escuelita? ¿Cuántas personas no nos
autodesignamos pomposamente “Presidente” o
“Director General” de las organizaciones que
nosotros mismos creamos y que generalmente
sólo tienen un miembro? Todos queremos sentir
que tenemos un poder aunque sea sólo frente a
 nuestro cónyuge o nuestros hijos o nuestra
secretaria o empleada doméstica. Aquí sí, como
decimos en México, “mis chicharrones truenan”.
Toda relación, dice Foucault, es una relación de
poder. En toda relación alguien manda y otro
obedece. Uno se impone y el otro se subyuga o
se deja imponer. Donde hay dos seres humanos
juntos surge inmediatamente un conflicto de
poder. Incluso para decidir dónde se cuelga un
cuadro, o cuál es el orden para sentarse a una
mesa, o qué platillos se van a servir o qué
materias y quiénes las van a impartir en una
escuela y en qué horarios. Donde quiera que
volteemos hay asuntos de poder, aunque muchas
veces los disfracemos con frases corteses “¿Te
gustaría esto?”, “¿Estás de acuerdo con esto?”.
O frases más rudas “Aquí se hace lo que yo
digo”, “yo soy el que toma las decisiones”,
“mientras vivas en mi casa harás lo que yo
digo”, “las instituciones están de mi lado”, “yo
tengo el poder notarial”, “yo tengo la patria
potestad de los hijos”, “a mí me favoreció el
fallo”, “tengo a la justicia de mi lado”, “soy
amigo del Presidente”, “tengo a los mejores
abogados”, “las decisiones las toma el consejo”,
etc. Somos pequeños bravucones queriendo
asustar o imponernos a los demás, para que nos
respeten, para que se haga nuestra voluntad
aunque sólo sea sobre los bueyes de nuestro
compadre. Nos sentimos felices cuando se
hace lo que nosotros decimos o queremos. “Vete
por aquí”, “qué tal si vamos a comer a tal o cual
lado”, “¿porqué no estudias tal carrera?”. Nos
sentimos por el contrario ignorados o burlados
cuando otro se sale con la suya o rechaza seguir
nuestros consejos, nuestras directrices. Sólo la
democracia ha puesto un poco de freno a las
imposiciones de pequeños dictadorzuelos que no
se conforman con dominar a su corte sino
quieren dominar a todo un pueblo... Lo curioso
es que parece que es más fácil dominar a los
demás que dominarse a sí mismo. Es más fácil
tener poder sobre los sirvientes que sobre uno
mismo. Incluso mientras más poder se tiene
sobre los demás menos se tiene sobre uno
mismo. Esto lo han dicho desde Confucio y
Sócrates hasta Sun Tzu («El guerrero invencible
no es aquel que ha ganado mil batallas, sino el
que se ha vencido a sí mismo.» y¨Quien vence a
otros es fuerte, quien se vence a si mismo es
poderoso¨) y el Oráculo de Delfos (”Conócete a
tí mismo y conocerás al Universo y los Dioses”).
El problema es que queremos poder sin hacer el
esfuerzo de conocernos a nosotros mismos. Por
eso Aristóteles previno que todo aquel ser
humano que busca el poder por el poder es un
ser enfermo. Foucault señala que hay dos esferas

Miseria
Flagelos del Ser Humano
Persecución
Aislamiento religiosa o racial
Agotamiento
Hambre
Falta de de recursos no Inequidad
Falta de Intolerancia
agua renovables
educación
Pobreza Robo Maldad Secuestros
Desempleo
Crisis Asesinatos
económica Pobreza Lo feo Depresión Odio
Inflación Enfermedad
Sobrepoblación Desaparición Violaciones
de especies
Malas Insensibilidad
Vulgaridad costumbres
Fealdad
Los deformes
Contaminación
Manipulación
Suciedad
Destrucción Injusticia Justicia
Desinformación del arte
Fraudes Esclavitud por
Incultura Desorden propia
Charlatanería Inseguridad mano
Demagogia Ley de la
selva
Mentira Estupidez Impotencia Opresión
Dogmas No
Ignorancia saber
elegir Dictaduras
Falta de Violación de Guerra
Tecnología principios Imposición

3
 de poder, la de un individuo sobre otro y la de
un grupo de individuos o un grupo social sobre
otros. El poder, dice, está presente en la multitud
de actos que a diario son protagonizados por el
individuo. El poder se genera y materializa en
una extensa gama de relaciones interpersonales
desde las cuales se eleva hasta constituir
estructuras impersonales. Sin embargo, el reto es
que pase a formar parte del propio ser de cada
individuo. Al decir de Paulo Freire el mismo
debe alojarse en la cabeza del dominado hasta
que éste considere como natural lo que desde el
nacimiento se le está imponiendo. 3/ El poder,
en última instancia, es el que garantiza que en
una comunidad haya o no haya seguridad,
justicia o libertad, el triángulo bajo el cual se
construye la sociedad humana. ¿Qué es el poder?
El que decide qué, cómo, cuándo, dónde,
porqué, para qué y para quién. ¿Quién tiene
seguridad? ¿Quién recibe justicia? ¿Quién es
libre? Eso lo decide el poder.
La Riqueza
- Finalmente, ¿a quién no le gusta la
riqueza? “Por dinero, baila el perro”. Todos
queremos bienes, posesiones, riqueza traducida
en alimentos, vestido, casas, automóviles,
artículos electrónicos como computadoras,
televisores, iPods, stéreos. Como alguien dijo: la
mitad de la vida nos la pasamos tras la chuleta,
tras la riqueza, para luego gastarnos lo poco que
ahorramos en consultas médicas o en hospitales.
Primero dejamos que el stress se apodere de
nosotros buscando la riqueza para luego utilizar
esa riqueza para bajarnos el stress en masajes,
vacaciones u hospitalizaciones. Los seres
humanos requerimos bienes para sobrevivir. No
nos conformamos con los bienes que nos
procuró una naturaleza pródiga. Somos
insaciables, siempre queremos más y más y más.
No tenemos llenadera. No hay manera de
comprar a un ser humano, de llegarle al precio.
Siempre pedirá un extra, siempre buscará algo
más. Nadie se conforma con lo que tiene, con lo
que le ha dado la vida o la naturaleza. Queremos
rendir a la naturaleza, ponerla a nuestro servicio:
a ver cómo producimos los tomates más grandes,
más resistentes a las plagas, cómo hacemos que
una vaca rinda más leche o más carne, cómo
engordar a un pollo para que rinda más
monedas, sin preocuparnos por su bienestar -los
pollos, afortunadamente, dirían muchos, no
piensan, o no sienten, o no existen los “derechos
humanos de los pollos”, los pollos simple y
sencillamente están para servirnos, para
hacernos más ricos, para alimentarnos. Algunas
religiones sostienen que Dios creo el mundo y
sus riquezas a nuestro servicio, para que las
4
disfrutemos y las explotemos. Este mundo es
nuestro y podemos acabárnoslo, total es nuestro
y podemos hacer con él lo que queramos. Las
riquezas son de quien se pone buzo, de quien se
las apropia primero. Las tierras son de quien
primero declaró que son suyas -”derecho de
antigüedad”-. Todo el planeta ya tiene dueño y
ahora hay quien quiere apropiarse de la Luna o
de Saturno. Nos apropiamos de palabras, de
frases, de ideas, de inventos. Todo lo
registramos, todo. Aunque nos gusta lo nuevo y
lo gratis (new and free), buscamos por el
contrario que en este mundo ya no quede nada
gratis (al rato ni el aire) ni nada nuevo más que
la tecnología (por cierto, ¿existirá la frontera
tecnológica o llegaremos al día en que ya no
podamos hacer una computadora más pequeña,
más potente, más barata, más bonita? ¿Se
imaginan la depresión que eso nos causará?
Especialmente a nuestra generación que se ha
acostumbrado a tener cada 6 meses
computadoras nuevas, autos nuevos, robots,
máquinas de juegos electrónicos, nuevas
versiones de programas, nuevas medicinas, etc.).
A pesar de la gran riqueza que ha acumulado el
ser humano y que la ciencia, la tecnología y la
ingeniería nos permiten producir prácticamente
lo que queramos en las magnitudes que
queramos, seguimos teniendo un planeta con
hambre, con miseria, con enormes
desigualdades. Aunque tenemos los materiales y
el conocimiento para producir casas o autos para
todos los habitantes del planeta, sigue habiendo
gente sin techo y sin algo que llevarse a la
panza. No es un problema de ingeniería o de
tecnología, son problemas ideológicos, políticos
o económicos. Ciertamente los recursos son
escasos (sino no existiría la ciencia económica),
pero si bien los antiguos hacían guerras entre
tribus para apropiarse de la riqueza del vecino,
hoy en día creamos sistemas políticos, sociales o
económicos para hacer lo mismo sin disparar
una sola bala o lanzar una flecha.
Así como deseamos la verdad, la bondad y
la belleza, el poder y la riqueza, igualmente
deseamos escapar de sus antípodas o de sus
contrarios. Barrington Moore Jr 4/, advirtió que
a lo largo de la historia cuatro son las grandes
causas del sufrimiento humano colectivo:
a) la guerra
b) la pobreza, el hambre y la enfermedad
c) la injusticia y la opresión, y finalmente
d) la persecución motivada por ideas o
creencias políticas o religiosas
El ser humano huye de:
- La ignorancia, traducida en la mentira, los
 dogmas, la demagogia, los merolicos, los
charlatanes, los sofistas, la incultura, la
estupidez, la falta de tecnología, la violación de
principios.
- La maldad, traducida en la falta de
educación, la vulgaridad, la intolerancia, la

nuestra existencia. No es fácil pero sí es posible, aunque son pocos

depresión, el aislamiento, las malas costumbres,

Inercia
Albedrío

Aunque hay muchas cosas que nos condicionan, lo cierto es que

Libre
la corrupción moral, las enfermedades,

tenemos nuestra libertad y voluntad para cambiar el curso de

epidemias y la peste, los robos, asesinatos,
secuestros, violaciones, la opresión o
persecución racial, política o religiosa, la

Libertad
inequidad.
- La fealdad, traducida en la destrucción del

Somos producto de causas y condiciones

arte, la contaminación, la desaparición de
especies animales y vegetales, la suciedad, la
proliferación de la basura.
- La impotencia, traducida en la

Presente
Nosotros
inseguridad, la injusticia y la falta de libertad, la

aquí y
ahora
Karma
politiquería, la grilla, el no saber o no poder
elegir, la imposición, las dictaduras y la
manipulación, los fraudes electorales.
- La pobreza, traducida en la crisis
Hábitos
económica, la falta de recursos, la crisis del

Genes
agua, el agotamiento de los recursos no

los que lo intentan.

renovables, la sobrepoblación.

Familia

Ambiente
Medio
Queremos lo bueno, repudiamos lo malo.
Escuelas

Pasado
Sociedad
PRESAS DE 5 VENENOS
Entorno
Lo que no sabemos es que para alcanzar

Director General: Yuri Serbolov (yuri@mexico.com)
Editada por: Servicios Especiales de Publicidad, Promoción e Información, SA de
CV. Análisis de coyuntura Nicolás Chávez Caballero.
República de Uruguay 36 Despacho 6 Centro Histórico 06010 México, D.F.
Suscripciones al teléfono 5512-8242 y 5512-8246 fax 5512-8247.
Publicación Quincenal. Tiraje 300 ejemplares. Distribuidos por la misma empresa.
Circulación: Dania Medina.
Miembro No 1740 de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana.
Certificados de Licitud de Título No. 3836 y de Contenido No. 8599 de la
Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas. Franqueo pagado.
Publicación Periódica. Permiso Num: 082 0987 Características: 216251209.
Autorizado por Sepomex. Reserva de Derechos de Autor No. 521-87. No. de
Control 10306. Dirección General del Derecho de Autor. SEP. 20 agosto de 1993.
Editor responsable: Yuri von Berner Serbolov Palos. Los autores se responsabilizan
del contenido de los artículos firmados. No se permite la reproducción parcial o
total (puede sacar fotocopias sólo para uso del mismo suscriptor). Impresión: S.G.
Profesionales. Eje Central Lázaro Cárdenas 339-C Col. Buenos Aires México, DF.
Dirección de Correo Electrónico Suscripciones y Aclaraciones con la Sra. María
Acosta al buzón mary@kyna.com.mx Internet: www.kyna.com.mx
INDICE
Año XX Número 469
22 de diciembre de 2006
¿Qué es la reingeniería personal?
LOS 5 DESEOS HUMANOS.............................. 1
Búsquedas del Ser Humano................................. 1
AVISO................................................................... 1
Flagelos del Ser Humano..................................... 3
Indice..................................................................... 5
5 Venenos.............................................................. 7
¡ADVERTENCIA! ¡PELIGRO!......................... 8
La ignorancia profunda....................................... 9
5 Antídotos............................................................ 9
Tres Aproximaciones a la Realidad.................... 11
Correcta visión o entendimiento de la realidad. 13
Atención Unipuntual............................................ 15
¿Porqué violamos principios?............................. 17
El Despertar y la Liberación............................... 18
Las enseñanzas...................................................... 19
La Iluminación...................................................... 20

5
 esos 5 deseos y escapar de los flagelos
somos presa de 5 venenos o dragones, que viven
dentro de nosotros y que nos manipulan, nos
ofuscan, nos aturden: la ignorancia, el apego, la
aversión, el ego y la depresión, de los cuales se
derivan una infinidad, tales como los celos y la
envidia, el enojo, el odio y la ira, el miedo y la
preocupación, la lujuria, los vicios, etc.
Aunque somos seres racionales, también
somos seres pasionales o emocionales y como
dice mi amiga Laura Delgado, generalmente la
hormona le gana a la neurona, especialmente
cuando se trata de cuestiones de poder y de
riqueza, pero también cuando se trata de
imponer nuestra “verdad” o nuestro punto de
vista sobre qué es bello o cuando queremos ser
amados y respetados por los demás. El
hemisferio derecho del cerebro se impone al
izquierdo que es más analítico, más racional,
pero también más lento para reaccionar como lo
han demostrado los científicos y como lo
planteaban Gurdijeff y Ouspensky en Cuarto
Camino.
La Ignorancia
- La mamá de todas las emociones es la
Ignorancia. Es la más peligrosa, pero también la
más escurridiza. Por ignorancia le asignamos
cualidades positivas o negativas a las cosas. A
las positivas nos apegamos y a las negativas las
rechazamos. Cuando conseguimos lo que
deseamos se infla nuestro ego, nuestra
autoestima, pero cuando no lo conseguimos
entonces nos inunda la depresión y la tristeza, se
baja nuestra autoestima. Sin embargo, por falta
de sabiduría, caemos en la duda, la
incertidumbre, la confusión, especialmente
cuando tenemos que optar entre comernos un
plato de camarones o una langosta, entre el filete
o el pollo a las brazas, entre ir de vacaciones a
New York o San Francisco, entre ir al cine o al
teatro, entre tomarnos un whiski o un vodka...
Pero, evidentemente, nadie nos vamos a
considerar un ser ignorante. Ciertamente
reconocemos que no tenemos toda la sabiduría o
que no somos el más sabio del planeta, pero de
ahí a aceptar que somos ignorantes, nuestro ego
no lo permitiría. Sin embargo, somos ignorantes
en muchas cosas, por ejemplo, yo soy ignorante
en como construir una bomba atómica o cómo
realizar una operación a corazón abierto o cómo
clonar a un ser humano o cómo realizar los
trámites fiscales en México. Ignoramos, por
ejemplo, si existíamos un año antes de haber
sido concebidos o si habrá vida después de la
muerte o si algún día lograremos viajar en el
tiempo o si algún día las computadoras serán
más inteligentes que los seres humanos (la
6
máquina Deep Fritz acaba de derrotar 4-2
al campeón del mundo Vladimir Kramnik. Pero
¿tendremos computadoras o robot que se
autoprogramen a sí mismas o que aprendan de
sus errores? ¿La película Matrix es una fantasía
o una premonición de un futuro no tan lejano?).
Podemos tener fe en un Dios, pero en realidad
ignoramos si éste en realidad existe. Ignoramos
si estaremos vivos la próxima semana o el
próximo año o dentro de 20 ó 50 años.
Ignoramos qué hacemos en éste planeta, cuál es
el sentido de la vida que nos planteaba Víctor
Frankl y si hay vida en otros planetas en el
Universo o somos los únicos seres inteligentes
que habitan en esta inmensidad. Ignoramos si en
realidad el ser humano desciende del mono
como dijo Charles Darwin o fue creado por un
Dios a su imagen y semejanza. La ciencia nos
dice una cosa, la religión otra, pero ¿a quién le
consta?. Nadie duda de la evolución de las
especies, pero ¿la mente humana es sólo el
producto de la combinación de átomos de
carbono que se van recombinando hasta que
mágicamente surge la inteligencia hará unos 120
mil años cuando se cree surge el Homo
Sapiens?. Recordemos que la civilización
humana apenas tiene 10 mil años de antigüedad.
Ignoramos si el Sol saldrá mañana o habrá una
erupción solar que vuele ese astro en millones de
pedazos y que acabe con toda la vida en la
Tierra, aunque los científicos nos aseguren que
le quedan 5 mil millones de años de vida. Pero el
sol no ha firmado contrato con nadie. Ignoramos
si algún día podremos salir de este vecindario y
llevar la vida humana a otro planeta, otra estrella
u otra galaxia. Ignoramos tantas cosas que como
Sócrates sólo podemos decir “sólo se que no se
nada” o como Confucio “el verdadero
conocimiento es conocer la extensión de la
propia ignorancia”.
Sin embargo, además de esta ignorancia
superficial, hay otra ignorancia más profunda,
que es la que explica no sólo el origen del
sufrimiento, sino el porqué estamos atrapados en
nuestros paradigmas, en nuestros hábitos, en
nuestras inercias, en nuestros patrones. Pero de
esta ignorancia hablaremos más adelante.
Los Apegos
El segundo veneno son los apegos o los
deseos. Deseamos dinero, poder, salud, amor,
conocimiento, amigos, amantes, drogas, alcohol,
tabaco, fama, posesiones. Somos seres del deseo.
Por eso los publicistas tienen tanto éxito. Por eso
la sociedad de consumo se ha arraigado tanto. El
ser humano es víctima de sus deseos. No tiene
llenadera, quiere más y más y más.
 Nos apegamos a las cosas a las cuales les
asignamos cualidades positivas, cosas que
consideramos que son buenas, bonitas y... caras.
Nos gusta el lujo, queremos tener cosas que nadie
más tiene. Sentimos que el tener nos hace ser y
nos da poder. “Mientras más tengo más soy”. “La
gente me respeta por lo que tengo”.
¿Cuál es la diferencia entre el apego y el
amor? ¿Estamos apegados a nuestra pareja y a
nuestros hijos? El apego es enfermizo, en tanto el
amor es sano. El apego es negativo, en tanto el
amor es positivo. Como dice la frase: “si amas
algo déjalo ir, si realmente te pertenece regresará
a ti. Si no regresa es que nunca te perteneció”.
Pero ¿quién se atreve a abrir la jaula? Tenemos
miedo a quedarnos solos, a perder nuestras
posesiones, nuestros seres queridos. Cuando un
padre se preocupa porque un hijo no ha regresado
de una fiesta no está preocupado por el hijo, sino
por la pérdida que él va a tener si no regresa. Esa
preocupación no es positiva, no es sana, es
enfermiza.
La Aversión
El lado contrario de la moneda de los apegos
es la aversión o el rechazo que sentimos hacia las
cosas a las cuales les asignamos
Pasión
Culpa
Gula
Pereza
Apego
Vicios
Lujuria
Deseo
Avaricia
Duda
Incertidumbre
Generosidad
Autoestima
Ego Vanidad
Orgullo
Soberbia
cualidades negativas, por ejemplo a la
basura, a la suciedad, a lo feo. Cuando pensamos
que una gente tiene cualidades negativas (es
grosero, es inculto, es vulgar, es violento, es
pesimista o problemático) entonces sentimos
rechazo hacia él, queremos apartarnos lo más
que podamos de su presencia. No lo vemos
como un maestro del cual podemos aprender el
arte de la paciencia. Rechazamos a los
criminales y los apartamos en cárceles para que
dejen de dañar a la sociedad. Sentimos odio
hacia todo aquello que nos vulnere o nos haga
daño. La aversión se convierte en la ira y nos
puede llevar al enfrentamiento, a los conflictos y
a la guerra. Por aversión somos capaces de matar
a nuestro vecino y de hecho lo hemos hecho en
los 40 millones de años que tienen los
antropoides sobre el planeta y en los 4 millones
de años que existen los humanoides.
De hecho, como dijo Karl von Clausewitz:
“la política es la continuación de la guerra por
otros medios”. Usamos la política para aplastar a
nuestros enemigos, para evitar que estos
consigan poder o riqueza. Usamos la política
para imponer nuestra verdad, nuestro arte y
nuestro concepto de bondad.
Con la aversión, la ira o el odio enseñamos
nuestro peor lado.
5 Venenos
Emociones Perturbadas
Ayuda a los
demás
Soledad
Depresión
Envidia
Celos
Intuición Tristeza
Ignorancia
Preocupación
Miedo Cortante
Ira
Odio
Enojo
Aversión
Simbología Furia
Encabronamiento
Pecados capitales
Coraje
Energía liberadora
7
 El Ego
Cuando conseguimos lo que deseamos se
infla nuestro ego. Somos individuos egóicos.
“Pienso, luego existo”, “siento, luego existo”.
Somos yo-yos: “yo, primero yo, luego yo,
siempre yo”. Como decía Paco Stanley: “qué
bonito soy, cuánto me quiero”. Vivimos por y
para nosotros. Primero yo y luego todos los
demás. Somos soberbios, orgullosos,
prepotentes, a menos que logremos dominar a
esta bestia. No es que la autoestima sea mala,
siempre y cuando no esté basada en el culto a
nuestro ego. Es bueno que sintamos un apego a
nosotros, porque de lo contrario no tendríamos
aprecio a nuestra vida, a nuestro cuerpo. Pero
cuando tenemos una actitud autocentrada
rayamos en la estupidez. Nosotros somos
insignificantes ante los demás. Sólo somos
importantes cuando somos importantes para los
demás. Nosotros, por sí mismos no valemos
nada si no tenemos un valor para alguien más.
Debemos entender que sólo somos un eslabón de
una gran cadena: abuelos-padres-hijos-nietos,
etc. Nuestra función es que la cadena no se
rompa y que mejore. Centrar toda nuestra vida
en el eslabón y no ver la cadena hace que nos
sintamos el ombligo del universo, como si todo
girara a nuestro alrededor. No venimos a este
mundo a recibir sino a dar. Cuando tenemos una
mano extendida pide y pide, sólo tenemos a un
pequeño ego queriendo suplantar la pluralidad y
la diversidad del universo. El ego nos
empobrece, la generosidad y la humildad nos
engrandecen.
La Depresión
Cuando no conseguimos lo que queremos,
entonces nos viene la depresión, la tristeza, el
sentimiento de soledad o de abandono, que es la
moneda contraria del ego. Sentimos que estamos
solos en todo el Universo, aunque haya 7 mil
millones de seres humanos a nuestro alrededor,
viajando con nosotros en la misma nave. Nos
sentimos incomprendidos, fuera de lugar. La
depresión no es sino otra máscara del ego, el
cual es un enemigo escurridizo y muy hábil.
Cuando nos sentimos abandonados lo único que
sentimos es que nadie le está dando importancia
a nuestro ego. Lo mejor que podemos hacer es
salir a ayudar a algún necesitado, un enfermo, un
desvalido, un pobre y entonces veremos cómo la
depresión se esfuma cuando veamos a gente que
realmente tiene problemas y tiene de qué
quejarse, pero que aún así tiene la dignidad y el
valor de no hacerlo, entonces nuestro ego se
apachurrará y la depresión desaparecerá.
8
Estos 5 venenos, decíamos, distorsionan
nuestra búsqueda de los 5 Deseos. ¿Cuántas
guerras no se han hecho en su nombre? ¿Cuántas
veces un ser humano ha matado a otro ser
humano para obtenerlos? Son esos venenos los
que nos llevan al asesinato, al robo, a la mentira,
a la calumnia y a tantos otros pecados o acciones
no virtuosas.
La ignorancia está en el centro de estos dos
subibajas:
- el del apego y la aversión, y
- el del ego y la depresión.
Si logramos derrotar a la ignorancia
entonces todo este armatoste se vendrá para
abajo y nos habremos liberado de esos cinco
enemigos. Pero la ignorancia es un monstruo
más peligroso de lo que podemos imaginar. No
hablamos de la ignorancia de tal o cual materia,
sino de la ignorancia profunda, que subyace en
nuestro ser y que hemos denominado la
ignorancia profunda y de la cual hablaremos en
la siguiente parte de éste análisis.
¡ADVERTENCIA! ¡PELIGRO!
¡DETENGASE AQUI!
Si usted es feliz con su vida actualmente. Si
no se siente confundido. Si tiene todo lo que
desea. Si ha logrado todo lo que se ha propuesto
en la vida. Si ama este mundo tal cual es y si
está totalmente conforme con lo que tiene, sus
seres queridos, sus conocimientos, sus creencias
y sus posesiones, no siga leyendo este artículo.
¡Pare aquí!. Si continúa leyendo es bajo su
propio riesgo, ya que lo que viene a
continuación puede alterar sus paradigmas y
puede, como se dice coloquialmente, moverle el
tapete y confrontarlo con realidades para las
cuales quizá no está preparado y que pueden
causarle daño. Si sigue es bajo su propia
responsabilidad. Sólo si tiene un profundo deseo
de saber, sólo si está dispuesto a confrontarse
realmente entonces siga adelante. Lo que sigue
adelante puede alterar totalmente su vida.
Muchos seres humanos no conocen la
felicidad sino sólo el sufrimiento, otros se
conforman con la felicidad mundana y no tiene
nada de malo, pero hay otros que buscan la
realización o felicidad espiritual. Para esos
buscadores se han dicho y están escritas las
siguientes palabras.
 La ignorancia profunda
Hay aún una ignorancia más profunda, por
ejemplo cuando confundimos la realidad con
nuestros paradigmas. Cuando pensamos que la
realidad es tal cual la vemos o la oímos o la
sentimos, sin darnos cuenta, como advirtió
Tomas Kuhn 5/ que filtramos la realidad a través
de nuestros paradigmas, lo que hace que sólo
veamos un tercio de la realidad, en tanto que
otro tercio lo distorsionamos y un tercio de plano
nos es invisible, oscuro, inexistente (los
porcentajes varían de caso a caso).
Creemos que la realidad es lo que captamos
con nuestros sentidos, con nuestra vista, nuestros
oídos, nuestro olfato, tacto y gusto. Pero los
sentidos son muy engañosos. Muchas veces
vemos algo que no existe o confundimos una
cosa con otra. Al final de cuentas hay mucha
más realidad de la que pueden captar nuestros
sentidos. Por ejemplo, un perro oye frecuencias
inaudibles para el ser humano. Hay más rayos u
ondas de las que podemos percibir, como los
rayos x o gama.
Pocas veces nos detenemos a pensar que en
realidad hay tres visiones de la realidad:
1. La visión materialista. Aquellos que
consideran que la realidad es algo sólido,
5 Antídotos
Generosidad
Emociones Correctas
Arrepentimiento
Templanza
Diligencia
Libertad
Desapego
Castidad
Ayuno
Intuición
Renuncia
Sabiduría
Certeza
Seguridad
Autoestima
Humildad Modestia
Virtudes capitales
Humildad
tangible, concreto, que podemos ver y
tocar, una materia que los científicos pueden
estudiar, medir, analizar. El Dios materia, dicen,
es en lo único que podemos confiar y que
algunos representan en su versión del Dios
Dinero. Como algo que existe en forma absoluta
y permanente, y que es igual para todos, aunque
ahora mismo los científicos acaban de descubrir
que en realidad no existe ninguna materia sólida,
sino que todo es energía, o más aún, sólo vacío.
6/ ¿Pero qué es el vacío? En realidad, dicen los
budistas, nada tiene existencia por sí mismo,
inherente, desde su propio lado. Todo está como
hueco, todo está compuesto de partes y estas
partes a su vez de otras partes, hasta el infinito
(les recomendamos ver la presentación de la
Nasa desde lo infinitamente grande a lo
infinitamente pequeño Nasa.ppt. Si no la tienen,
pueden solicitarla por mail a yuri@mexico.com
y con gusto se las enviamos). No existe nada a lo
cual podamos llamar materia. Al final del viaje
sólo hay energía y esa energía, como demostró
al estudiar la física cuántica Heisenberg no se
puede predecir, debido a que está sujeta al
Principio de Incertidumbre que planteó en 1927,
al señalar que cuando se intentaba determinar la
posición de una partícula al tratarla de
observarla era alterada por el observador, por lo
Caridad
Acompañamiento
Pertenencia
Actitud de Sentirte
servicio parte de los
demás
Alegría
Confianza
Paciencia Amor
Contento
Tolerancia
Alegría Proactividad
Carácter
9
 cual era imposible saber algo sobre la
misma. ¿Significa ello que todo es incierto?
¿Significa ello que la ignorancia siempre será
congénita a nosotros?. Los budistas señalan que
sí es posible llegar a la sabiduría absoluta, a la
Iluminación, pero únicamente con el
entrenamiento de la mente (aprender a
desarrollar atención unipuntual a través de la
meditación y hacer un análisis de las causas de
las causas de las causas que están atrás de todos
los fenómenos o efectos) y una vez que nos
desprendamos de ideas preconcebidas y
equivocadas de la realidad, de las emociones
perturbadas (la duda, el apego, la aversión, el
ego y la depresión) y nos purifiquemos del
karma acumulado (es decir, el residuo que queda
en nosotros como consecuencia de los pecados
que cometemos. Cada acción genera una
reacción de la misma intensidad a la acción que
la generó, pero en sentido contrario, dijo Newton
en su tercera ley sobre las fuerzas que dominan
la realidad). Los pecados, dice el Cristianismo,
no se borran, sino que hasta que uno los
reconoce, se arrepiente y pide perdón.
Igualmente, el Budismo señala que el karma que
se acumula al cometer malas acciones (robar,
matar, mentir, etc.) no desaparece, sino que
sobrevive como una semilla la cual germina
hasta que las condiciones son propicias.
Mientras no nos limpiemos o purifiquemos de
esos pecados o karma, mientras no desechemos
esos pensamientos equivocados de la realidad e
impuestos por nuestros paradigmas y mientras
no nos liberemos de los 5 dragones de las
emociones perturbadas, entonces viviremos en la
ignorancia. Así que esos quienes le rezan al Dios
Materia, porque consideran que la ciencia es lo
único fiable, sólido, creíble, deben pensar, como
advierte Allan Wallace, si no están asumiendo
una actitud dogmática.
2. La visión nihilista. Pero el negar la
existencia de la materia, no significa que nada
existe, que venimos de la nada y que nos
dirigimos hacia la nada, que todo es producto de
un sueño de un extraterreste que en estos
momentos duerme en otro universo y que en el
momento en que despierte nos esfumaremos.
Platón decía que sólo somos sombras que
vivimos en una cueva y que no resistiríamos la
luz del sol. Que afuera de la cueva lo único que
existen son las ideas, las cuales sí son eternas. Si
bien podemos negar la existencia de la materia,
eso no significa que no existe una realidad
relativa, aunque no conozcamos la absoluta.
Nada viene de la nada, de la nada nada puede
surgir, porque si no no sería nada. “Pienso, luego
existo”, dijo el matemático francés René
Descartes. Pero esos pensamientos no pueden
10
venir de la nada, surgen de algo, de una
mente, de un aprendizaje. Por lo tanto algo
existe. Pensar que surgimos de la nada y vamos
a esfumarnos nuevamente en la nada no sólo es
un pensamiento abrumador, sino lógicamente
inconsistente.
3. La visión vacua. La tercera visión de la
realidad es que lo único que existe es el vacío,
ya que como decíamos anteriormente nada tiene
una existencia inherente, por sí misma, desde su
propio lado. No existe nada sólido, concreto, que
exista por sí mismo y que no sea producto de
causas y consecuencias. Todo está
interconectado o interelacionado, todo es
imperecedero, todo es finito, todo acaba y nada
es igual para dos perceptores distintos. Por
ejemplo, como dice el consultor Pedro
Guadiana, “el perro no sabe que se llama perro”.
La hormiga no sabe que la mesa es una mesa o
que una migaja es una migaja. Para ella la mesa
puede ser un camino y la migaja una comida
completa.
Según el budismo, el ignorar que la realidad
es vacío, el asignarle cualidades positivas o
negativas a las cosas que no tienen y que hace
que nos apeguemos a ellas o las rechacemos,
alimentando nuestro ego o nuestra depre, es la
causa principal del sufrimiento. La ignorancia,
sostuvo Sidartha Gautama, provoca formaciones
kármicas, denominadas también construcciones
o composiciones mentales o predisposiciones,
las cuales se conforman de la voluntad, los
hábitos, las actitudes y el carácter de una
persona. En otras palabras, determinan su
paradigma y de este emana la conciencia, de la
cual emana las formas y los nombres o
conceptos que les asignamos, de lo cual emanan
los sentidos, que producen un contacto, una
sensación, una sed y un apego, el cual una vez
que se sacía produce el devenir, lo que nos lleva
al nacimiento, al envejecimiento y a la muerte.
La ignorancia es el eslabón principal de esa
cadena de condicionalidades, por eso erradicarla
nos libera y nos ilumina.
¿Cómo escapar de la ignorancia?
En realidad sólo hay 3 caminos:
1. Por contacto o experiencia directa (”yo lo
ví”, “yo lo oí”, , “yo lo sentí”, “yo estuve ahí”,
“a mí me consta”)
2. Por inferencia (“no lo vi, pero vi sus
efectos”; “no vi el fuego, pero vi el humo y vi a
los bomberos”, “no vi cuando se rompió, pero
ahí están los vidrios”)
3. Por autoridad (“lo dice la Biblia, el
Corán, el Cannon Pali, la Cábala, el Kybalión,
etc.”, “lo dijo Jesucristo, el Buda, Mahoma, el
Papa, el Dalai Lama, etc.”)
 No tenemos la sabiduría para percibir la
Realidad Absoluta, sólo podemos percibir
nuestra Realidad Relativa y distorsionada. Sin
embargo, si confiamos en un maestro que tenga
la verdad, podemos empezar a familiarizar a
nuestra mente con esa verdad, en tanto
desarrollamos las capacidades mentales propias
para comprobarla y verificarla por nosotros
mismos.
¿Por qué es importante entender lo que es la
ignorancia? Debido a que la ignorancia es la
madre de nuestros deseos, pero también es la
madre del sufrimiento y de la infelicidad.
Los seres humanos tenemos una preciada
vida humana si es que contamos con la
posibilidad de aprender, si contamos con una
casa, con comida, con vestido, con salud, con los
órganos sensoriales intactos, si contamos con
seres que nos quieren y nos protegen, si vivimos
en una sociedad tolerante que respeta la libertad
y los derechos individuales, si hemos tenido
acceso a la educación y al conocimiento. La
mayor parte de los seres humanos que coexisten
con nosotros en este planeta no tienen esta
preciada vida humana.
Sin embargo, por muy buena que sea esta
vida, lo único seguro es que es finita, que es
impermanente, que se va a acabar tarde o
temprano. Los seres humanos pensamos que
poseemos casas, coches, joyas, familia, amigos,
etc. Pero todo eso es prestado, todo eso es un
equipaje que vamos a dejar a la hora de la
muerte. Nada de eso nos lo vamos a poder llevar
a la otra vida, si es que existe. Como dijo el
escritor Jorge Luis Borges: “si volviera a vivir,
viviría más ligero. Con menos equipaje”. Pero
por inseguridad, por ignorancia nos dedicamos a
acumular y acumular y acumular, por nuestros
apegos o deseos. Pensamos que mientras más
tenemos más valemos, cuando en realidad el
gran reto es de cuántas cosas podemos
desprendernos, de cuántas cosas podemos
renunciar. El problema no es conquistar más,
apoderarnos de más, sino como le dijo Diógenes
a Alejandro Magno: “Soy más grande que usted,
mi Lord, porque me he deshecho de más de lo
que Usted ha conseguido”. Sin embargo, esto va
en contra de nuestro paradigma, por lo menos el
occidental.
Esa preciada vida humana está sujeta a
causas y consecuencias. Dependemos de
nuestros genes, de nuestra familia, del ambiente
donde crecimos, de nuestras escuelas, de
11
 nuestras iglesias, de nuestros maestros, de
nuestros amigos, de las oportunidades que nos
ha brindado la vida y también dependemos de
nuestro karma, positivo o negativo, acumulado
en el pasado. Nuestros pecados, como ya
dijimos, no se borran, se van acumulando en una
especie de Cuenta de Banco Kármica, donde de
un lado tenemos los haberes y del otro lado los
deberes. En una columna se anotan los puntos
positivos, de las acciones buenas que realizamos
(ayudar a una viejita a cruzar la calle, acompañar
a un moribundo, asistir a un enfermo, cuando
llegamos a tiempo a nuestras citas, etc.). Del
otro lado está la columna donde se apuntan los
puntos negativos (decir mentiras, llegar tarde,
pasarnos un alto, ofender a alguien, etc.). Si no
existiera el karma, podríamos matar y robar sin
ningún problema, siempre y cuando nadie se
diera cuenta (la justicia divina o la justicia
humana). Simplemente todo se limitaría a un
problema de nuestra conciencia. Pero el
problema es que si matamos o robamos o
violamos esa energía negativa se queda
depositada en nuestra mente y tarde o temprano
vamos a pagar las consecuencias, ya sea en la
forma de un remordimiento, con una
enfermedad u otra desgracia, ya sea en esta o en
otra vida (con el infierno, según el cristianismo o
con un renacimiento desafortunado, según el
budismo. Sin embargo, parece ocioso decir esto
en México donde hacemos lo que queremos,
como queremos, cuando queremos y a quien
queremos. Porque aquí somos tan listos que
podemos pasarnos todos los principios por el
arco del triunfo, así como todas las leyes o
mandamientos que nos pongan en frente. Ya que
los mexicanos no somos humanos, sino dioses
que estamos más allá del bien y del mal. ¿Será?
Esa preciada vida humana está sujeta a
ciclos de placer y dolor, de sufrimiento y
felicidad, de ratos buenos y ratos malos, pero al
final del día siempre gana el sufrimiento, porque
todo se acaba, nada dura para siempre. Nuestros
seres queridos se mueren. Nuestras ganancias se
acaban o se pierden. Una buena comida se
termina. Nuestra salud y nuestra juventud se
pierden. Nuestra vida se agota. Todo es
impermanente, imperecedero, finito, nada dura
para siempre. Y cuando perdemos lo que
amamos nos duele, sufrimos. ¿Es esto una visión
pesimista de la vida? No. Es una visión realista.
Lo podemos demostrar científicamente,
estadísticamente. ¿A quién no se le ha muerto un
amigo o un familiar? ¿Quién no ha perdido algo?
¿Quién no se ha enfermado? ¿Quién no ha
envejecido? La salud, la belleza, el poder, la
riqueza todo se pierde. Incluso nuestros
12
conocimientos llega un momento en que se
vuelven obsoletos o simplemente con la vejez
los perdemos junto con la pérdida de la
memoria.
Claro, del otro lado está nuestro ego que
dice que a nosotros no nos va a pasar. O nuestra
ambición de acumular más y más para que nos
alcance para nosotros, para nuestros hijos, para
nuestros nietos, para nuestros bisnietos, para...
Ponemos una parte en acciones, otra parte en
oro, otra en bienes raíces, otra en bonos, etc.,
para que si sucede una desgracia las pérdidas en
una inversión se cubran con las ganancias en
otra. Pero por más que hagamos malabarismos,
con la muerte perdemos todas las inversiones. Al
cambiar el paradigma de vida a muerte, todos
retornamos a cero, se pierden las ventajas o
ganancias previas y cambia la correlación de
ganadores y perdedores: quien estaba arriba
ahora puede estar abajo y viceversa.
Nadie ha escapado de la muerte, ni
Jesucristo, ni Buda, ni Gandhi, ni el Papa, ni la
Madre Teresa... ¡Nadie! ¿Porqué habríamos de
ser nosotros los primeros en escapar de esa ley,
de ese principio? Pero preferimos ignorarlo,
cerrar los ojos, y dedicarnos a disfrutar de la
vida, total: lo bailado, lo comido y lo gozado
nadie nos lo quita. Por eso estamos en una
carrera desenfrenada para tener más viajes, más
perfumes, más ropa, más amigos, más fiestas,
más experiencias. El objetivo es aprovechar al
máximo la vida, sacarle jugo o partido, no
desperdiciar ningún momento. No descansar,
porque ya tendremos mucho descanso cuando
lleguemos al panteón.
¿Cuál es el sentido de la vida? El que uno
decida, el que uno quiera darle. Incluso si no le
damos un sentido, la vida ya tiene un sentido en
sí misma. Para unos el sentido de la vida es
acumular más poder, más riqueza, más
conocimiento, más amor o más belleza. Para
otros el sentido de la vida es ayudar a los demás
(de hecho sólo trasciende quien vive para los
demás. Los panteones están llenos de gente que
vivió sólo para sí mismos, nadie se acuerda
quienes fueron. Nos acordamos de la gente que
hizo algo para los demás). Otros viven para
realizarse o desarrollarse espiritualmente. Otros
simplemente para irla gozando. Unos se dedican
a pensar la vida, otros a vivirla y la gran mayoría
a sufrirla.
Pero por muy bonita o buena que sea la vida
que nos haya tocado, no podremos liberarnos del
sufrimiento. Incluso si nosotros fuésemos los
 únicos eternos, que nunca fuésemos a
morir, entonces nos tocaría más sufrimiento,
cuando veamos morir a nuestros padres,
hermanos, hijos, amigos, conocidos, etc. El
sufrimiento parece algo consustancial a la vida,
aunque no lo queramos reconocer. Eso llevó al
Buda a plantear sus Cuatro Nobles Verdades:
1. La vida es dolor y sufrimiento (sufrimos
al nacer, al crecer, al enfermar, al envejecer y al
morir. Cuando no tenemos lo que queremos o
perdemos lo que nos es grato).
2. La causa de todo ese sufrimiento es la
ignorancia, el deseo y los apegos, las avesiones
(el llamado triple veneno).
3. Si suprimimos la causa suprimimos el
efecto (este es el lado optimista del asunto, es
decir que sí es posible liberarnos de ese
sufrimiento, aunque no sabemos por el momento
cómo o somos incrédulos).
4. El método para liberarse de ese
sufrimiento es el llamado Octuple Noble
Sendero: correcta visión, correcta atención,
correcto esfuerzo, correcto pensamiento,
correcta habla, correcta acción, correcto sustento
y correcto despertar, liberación e iluminación.
. Correcta visión o entendimiento de la
realidad. Cuando entendemos el vacío, la
vacuidad, que nada tiene una existencia
inherente, por sí mismo, desde su propio lado.
Que todo está condicionado. Que todo es parte
de un sistema, un subsistema o está compuesto
de subsistemas y partes. Que nada es sólido y
que nada existe igual para todos los perceptores.
Intente pensar en algo que exista por sí mismo,
sin ser producto de causas y condiciones, que
haya surgido de la nada y que sea eterno, es
decir que nunca vaya a dejar de ser, que jamás
envejezca. Me podrían decir que un Dios. Si
existe, sería lo único con esas características.
Porque hasta el más lujoso automóvil está
compuesto de partes, envejece y es dependiente
de que exista una gasolinería donde surtirse. Por
ejemplo, en la Luna no nos serviría para nada.
¿Porqué es tan importante esta correcta visión?
Porque por ignorancia le asignamos cualidades
positivas y negativas a las cosas que no tienen y
eso nos lleva a buscarlas o rechazarlas, lo que
alimenta nuestro ego o depresión cuando las
conseguimos o no lo logramos. Estamos
atrapados en ese juego por un error
paradigmático, es decir por una visión
equivocada de la realidad. Pero ya lo advirtió
Tomas Kuhn: lo más difícil es ver nuestros
13
 paradigmas, sus límites, escapar de ellos,
romperlos. Vivimos en una cárcel cuyos barrotes
son nuestras ideas o creencias de lo que es
verdadero. Y no se trata sólo de entenderlo
intelectualmente, sino que realmente lo debemos
experimentar, sentir, vivir. Por ejemplo, si
pensamos que el dinero es vacío o vacuo, no nos
debería doler desprendernos de él, regalarlo o
tirarlo a la basura. Por el contrario, como le
asignamos cualidades positivas, nos apegamos a
él, queremos atesorarlo, porque sentimos que
nos da poder y que nos da acceso a la riqueza.
Al respecto me gusta mucho la historia de
un Lama que conocía muy bien la vacuidad y
que un día invitó a sus discípulos laicos a dar
una vuelta en un bote por un lago. El alumno
más rico de todo el grupo de pronto le entró la
duda de porqué si su Lama era muy sabio y
realizado porqué era tan pobre. En ese momento
el bote se hundió y junto con él todos los
discípulos, menos el maestro que se quedó
parado sobre las aguas ayudando a rescatar a
todos los discípulos excepto al rico que venía
dudando. Este le imploró que lo ayudase y
entonces el maestro le dijo:
- si crees que eres más rico y poderoso que
yo, entonces porqué no te salvas por ti mismo.
En ese momento éste se dio cuenta que si su
maestro sabía leerle la mente y caminar sobre el
agua, podría tener todo el dinero y el oro que
quisiese. No lo tenía porque no le interesaba, al
igual que a un empresario o un político no le
interesaría apoderarse de las canicas de sus hijos,
por mucho dinero o poder que tengan. Ya que
por muy valiosas las canicas resulten para sus
hijos para ellos ya no tienen ningún valor o
significado. Igualmente para una persona
despierta, liberada e iluminada, el poder y la
riqueza de los humanos mundanos es algo
insignificante, sin valor, aunque estos no tengan
capacidad de comprenderlo, así como un niño
que atesora canicas no entiende que otros no
sientan ningún aprecio por las mismas.
ii. Correcta atención. En occidente no nos
han enseñado a controlar nuestra mente. Nunca
llevamos en la escuela una clase de meditación.
Nadie nos dijo que al igual que entrenamos a
nuestro cuerpo, debemos aprender a entrenar a
nuestra mente y que debemos hacerlo
diariamente, a fin de que no pierda condición
mental. Se trata quizá de la disciplina más difícil
que podamos intentar. Se requiere mucho
esfuerzo, coraje, dedicación y muchas horas de
práctica. No tiene nada que ver con el cociente
intelectual, ni si somos o no muy inteligentes o
muy listos. Pero ¿qué es el control mental?
14
Nuestra mente tiene la capacidad de pensar
4 cosas al mismo tiempo. Podemos estar leyendo
esto, oyendo música, contestando una llamada
de teléfono y pensando en lo que vamos a hacer
mañana. Por eso se ha comprobado que en una
conferencia de una hora de duración la gente
sólo recordará 15 minutos. Si se le muestran
imágenes la retención aumentará a 25 minutos.
Si la gente toma notas podrá aumentar su
retención a 35 minutos, pero sólo si se involucra
en una acción, si lleva a cabo una dinámica
entonces la retención podrá subir más, aunque
nunca será total, debido a que la mente es muy
dispersa y se distrae fácilmente con esto y con
aquello. Nuestra mente es como un changuito al
que le gusta la variedad, lo nuevo, lo diferente,
siempre está buscando algo en qué entretenerse:
una película, un libro, una plática, un viaje, un
programa de televisión, un partido de fútbol,
etc., pero la mente siempre quiere su droga de
entretenimiento, es adicta a la variedad, lo único
que no soporta es la monotonía, lo que le
produce un gran aburrimiento.
La meditación consiste en decirle a ese
changuito que se va a quedar con la atención fija,
unipuntual, en un punto en la pared, o en una
vela, o en nuestra respiración o en una imagen o
en cualquier objeto. Al principio el changuito de
nuestra mente pensará que se trata de un nuevo
juego y como es algo distinto a lo que ha hecho
en toda su vida pensará que es algo divertido.
Sin embargo, a los 5 segundos de que nos
sentamos a meditar y fijamos la mente en ese
objeto, el changuito pensará que lo hemos
engañado y que le hemos dado el juego más
aburrido de toda la vida e inmediatamente se
escapará con el primer pensamiento o emoción o
sensación que cruce por la mente. Antes de que
nos demos cuenta el changuito ya se habrá ido.
Algunos dicen que es como si pusieramos a
nuestra mente en una estación de metro o de
ferrocarril. Cada pensamiento o emoción es un
tren que pasa por la estación. El objetivo de la
meditación es no subirse al tren. Simplemente
verlo pasar. El problema es que el tren se para en
la estación, abre sus puertas y nuestra mente se
sube al tren y antes de que nos demos cuenta ya
estamos 5 o 10 estaciones lejos de la estación
donde le dijimos a nuestra mente que se quedara.
Al principio sólo estamos meditando cuando nos
damos cuenta que nuestra mente-changuito se
escapó y vamos tras él y lo regresamos a la
estación unipuntual. Esto lo debemos hacer una
y otra vez, ad infinitum, hasta que logremos que
el tiempo en que la mente permanezca en la
estación unipuntual sea más largo que el tiempo
en que la mente anda vagando en los trenes de
estación en estación.
 El problema es que cuando empezamos a
lograr cierto expertise en esto y pensamos que ya
logramos domesticar al changuito, este se
transforma de un ser amigable, cariñoso y
gracioso en el peor orangután, furioso y
violento. Nuestra mente empieza a sacudirse y
nos empiezan a ocurrir cosas inimaginables: nos
sentimos agotados, sentimos que tenemos
muchas cosas pendientes por hacer, nos da
hambre, nos da sueño, nos acordamos que
tenemos algo importantísimo que tenemos que
hacer, etc. y entonces de pronto ya no tenemos
ni tiempo, ni ganas, ni fuerza para sentarnos a
meditar. El gorila ha triunfado. El nos ha
dominado siempre y no aceptará tan fácilmente
que nos liberemos de él. Nunca hemos tenido
control de nuestra mente y lograrlo es una
verdadera guerra, la más dura, difícil y
complicada que podamos enfrentar en nuestra
vida. Todo lo demás es un juego de niños:
obtener poder, riqueza, conocimiento, amigos,
etc. Quien domina su mente puede lograrlo todo,
ya que la mente es el instrumento más poderoso
que posee el ser humano.
Una mente entrenada podrá dilucidar el
problema más complejo que se le presente,
podrá entender las causas más profundas, podrá
entender las situaciones más complejas.
Análisis
Método
Atento Calma
Atención Unipuntual
Fijar la mente en un objeto y dejarla ahí a voluntad el tiempo que uno decida. Hay 9 niveles
de desarrollo y pueden tardar varios años en alcanzarse.
El entrenamiento de la mente va aparejado a
un correcto entendimiento, lo que se traduce en
la renuncia, en el ayuno y en la paciencia.
Me gusta mucho la historia de Herman
Hesse sobre Sidartha. Cuenta que éste después
de muchos años de permanecer entrenando a su
mente en los bosques decide un día regresar a la
vida mundana de la ciudad y al entrar ve a una
hermosa doncella de la cual se enamora. Se
acerca a platicar con ella y le pide que sea su
amiga. Ella le dice que con mucho gusto, pero
que a ella le gustan los placeres, las joyas, las
buenas ropas, los perfumes y todo tipo de
riquezas. Que si él le ofrece algo de ello, con
mucho gusto será su amiga. El, que lo único que
tiene en la vida es su túnica de renunciante, le
dice que dónde puede conseguir lo que a ella le
gusta. Entonces la doncella le da la tarjeta de un
rico comerciante que es su amigo para que le
pida trabajo. Va Sidartha y éste le pregunta qué
sabe hacer y él le contesta:
- Se pensar, se esperar y sé ayunar.
El comerciante suelta una carcajada y le
pregunta que para qué le sirve a él una gente con
ese currículum.
- Se pensar y cuando tenga un problema
muy difícil yo se lo puedo resolver. Me he
Pensar
Logros
Esperar Ayunar
15
 pasado años en los bosques entrenando mi
mente y es capaz de solucionar el mayor
problema que se le presente.
- No tengo ningún problema. Dice el
comerciante.
- No se preocupe, puedo esperar hasta que
lo tenga. He cultivado el arte de la paciencia.
Puedo esperar días, semanas, meses o años hasta
que el problema surja.
Se vuelve a reír el comerciante:
- No te voy a pagar por estar esperando.
- No se preocupe -le contesta Sidartha- no
me tiene que pagar, se ayunar. Así que puedo
esperar sin sueldo a que ese problema aparezca.
Como no implicaba ningún compromiso
para el comerciante aceptó y el día que se le
presentó el problema, Siddartha se lo resolvió y
entonces se dio cuenta de lo útil que era y
decidió contratarlo. Le pagó, con lo cual pudo
comprar lo que quería su amiga y entonces
fueron felices para siempre.
En el mundo de la consultoría he
comprobado que cuando una empresa tiene
problemas y no nos puede pagar, algunos
consultores dejan de pensar, porque no saben o
no pueden ayunar ni esperar. Entonces dejan de
ser útiles y dejan de ser parte de la solución y se
convierten en parte del problema. Precisamente
los consultores debemos ayudar a las empresas a
resolver sus problemas para que no dejen si pago
a nadie.
iii. Correcto Esfuerzo. Se refiere al
esfuerzo que tenemos que hacer para alinearnos
a principios. Los seres humanos violamos
constantemente principios porque eso nos
produce una ganancia fácil y rápida. Alinearnos
a principios implica un gran esfuerzo. Por
ejemplo, si decimos que mañana nos vamos a
levantar a las 6am y lo hacemos sin esperar ni
uno ni cinco minutos más, tenemos una pequeña
victoria frente a nosotros mismos que nos
levanta nuestra autoestima y que fortalece
nuestro carácter. A eso se refiere el correcto
esfuerzo, es decir cuando decidimos llegar a
tiempo a nuestra siguiente cita y lo logramos o
cuando hacemos una promesa y la cumplimos.
Se requiere mucha disciplina, mucho coraje.
Pero las pequeñas victorias nos van preparando
para proponernos cada vez mayores retos. Hay
dos tipos de seres humanos, como dice Stephan
R. Covey: los que se basan en la ética de la
personalidad (son los que saben cantar mejor o
contar los mejores chistes, o tienen el papá más
rico o poderoso, o el automóvil último modelo o
la mejor ropa, etc.) y los que se basan en la ética
del carácter (que son aquellos que han decidido,
16
han peleado y han ganado su guerra
personal).
Somos Perfectibles
No hay nada más corrupto, más sucio, más
criminal, más bruto, más estúpido que un ser
humano. Son los seres humanos quienes han
hecho las peores matanzas, quienes han
inventado las máquinas más sofisticadas de
tortura, quienes han instalado los más crueles
tribunales de la inquisición, o los únicos que han
cortado cabezas con una guillotina, quienes han
creado los más inhumanos calabozos y quienes
han destruido más éste planeta. Lo peor que
existe en este mundo es un ser humano.
Sin embargo, también lo más noble, lo más
puro, lo más elevado, lo más santo, lo más
espiritual que ha existido en este mundo ha sido
un ser humano. Quienes han hecho las cosas más
nobles, más elevadas, quienes han hecho los más
grandes sacrificios, quienes han demostrado su
humanidad para ayudar al prójimo, al desvalido.
Ha sido un ser humano el capaz de cometer el
más grande sacrificio, entregar su propia vida, en
defensa de otro ser humano o de un noble ideal,
como la justicia o la libertad.
Los seres humanos no somos perfectos, si lo
fuésemos seríamos Dioses. Pero tampoco somos
imperfectos. Somos perfectibles. Hasta el más
sanguinario criminal tiene su lado positivo.
Tiene algo puro en sí, algo incorruptible, aunque
quizá ni él mismo lo sabe. Eso significa que los
seres humanos podemos evolucionar, mejorar,
crecer, desarrollarnos.
Violamos Principios
Como no somos perfectos, los seres
humanos constantemente violamos principios.
Es decir cometemos acciones no virtuosas. Por
ejemplo, robamos, decimos mentiras,
engañamos, matamos otras especies a veces por
pura diversión (los cazadores, los toreros) o
cuando no se ajustan a nuestros paradigmas
(plagas, insectos). Y generalmente hacemos eso
por inercia, como autómatas, como si
estuviéramos dormidos, como si viniéramos
preprogramados para hacerlo, por costumbre,
por moda o por imitación.
Violamos principios por ignorancia, por
sentido común, por estrategia (el fin justifica los
medios) pero también porque nos producen
ganancias fáciles, sin esfuerzo, rápidas, de corto
plazo, tangibles y concretas. Por eso es muy
atractivo violar principios. Generalmente no lo
vamos a reconocer en público pero si hacemos
 un examen de conciencia veremos que día a
día violamos principios, por ejemplo cuando
llegamos tarde a una cita, cuando nos pasamos
un alto, cuando decimos una cosa y hacemos
otra, cuando no cumplimos una promesa o no
pagamos una deuda, cuando hacemos un
compromiso y no lo honramos, cuando no
pagamos nuestros impuestos. Tenemos infinidad
de oportunidades de violar principios y el que
diga que nunca ha violado un principio pues o
no es un ser humano o está violando el principio
de la verdad. Como dice el Cristianismo: “todos
somos pecadores”.
Requerimos tener un gran dominio mental,
estar totalmente alertas y despiertos para no
violar principios. Se requiere un gran esfuerzo,
una gran disciplina. Sin embargo, al principio el
reto no es no violar principios, sino simplemente
darnos cuenta cuando lo hacemos y aplicar los 5
Poderes de Oposición cuando nos equivocamos
o cometemos un error:
Los 5 Poderes de Oposición
1. Admitir que nos equivocamos o pero él siempre tiene la razón, él es perfecto, él
cometimos un error.
2. Ofrecer una disculpa
3. Reparar el daño
PRINCIPIOS
¿Porqué violamos principios?
Violación
Fáciles, sin esfuerzo, rápidas, de corto
Ganancias plazo, tangibles, concretas
Pequeñas, pírricas
Tamaño
Tipo Inestables, no duraderas
Con costo, con factura, siempre se pagan
Consecuencia tarde o temprano
Cínicos, “traidores”
Quiénes
Por mala educación, por sentido común,
Razón por costumbre o hábito, porque estamos
“dormidos”. Porque no somos perfectos.
Motivo Por ignorancia, por cinismo, por
estrategia (“el fin justifica los medios”)
Ejemplo Robar, mentir, matar, abusar, violar,
engañar
Ser humano El 90% del tiempo está violando
principios
4. Tener un gesto de compensación
5. Hacer un voto o compromiso de no
reincidir
Si practicamos con honestidad estos 5
Poderes, iremos desarrollando una capacidad
para cada vez violar menos principios.
La reingeniería no consiste en que seamos
santos, sino simplemente darnos cuenta cuando
violamos un principio y volver a ruta. Los
expertos señalan que el 95% del tiempo estamos
violando principios. Pero debemos ser como un
avión que aunque nunca vuela por la misma ruta,
ya que va ajustando el vuelo a las condiciones
climáticas, bolsas de aire, etc. aterriza siempre
en el aeropuerto correcto.
La diferencia entre un ético y un cínico es
que el ético reconoce que es humano y por lo
tanto comete errores, pero está dispuesto a
reconocerlos y aplicar los 5 Poderes de
Oposición, lo que le permite crecer y
evolucionar. Un cínico por el contrario jamás
reconocerá una falla, él es perfecto, el es un
cuasidios, infalible, “se equivocan los demás”,
está por encima de todos los principios, de todas
las reglas y leyes. No sólo viola principios sino
lo hace con total desparpajo, con total cinismo,
Alineación
Difíciles, con esfuerzo, lentas, de largo
plazo, intangibles
Grandes
Estables, duraderas
Sin costo, sin factura, no hay nada que
pagar
Eticos, “ingenuos”
Sentido estratégico y prospectivo, por
reingeniería, al “darnos cuenta” o
“despertar”. Al perfeccionarnos.
Por educación, por principio, por
autoconciencia
No robar, decir la verdad, respetar la vida
y a los demás
El 10% del tiempo estamos alineados a
principios
17
 pensando que mientras más lo hace eso
demuestra que es más listo para salirse con la
suya o para verle la cara a los demás. Incluso
muchas veces viola principios sin darse cuenta,
como dormido o autómata, por pura inercia.
Desgraciadamente podemos dividir a la
humanidad entre los éticos y los cínicos, entre
los honestos y los deshonestos
El correcto esfuerzo es volvernos más
éticos. Pero como dice mi amigo Raúl Fraga,
“soy éticamente perverso”. Cuando lo escuché
pensé que estaba en un error, ya que la gente o
es ética o es cínica. Sin embargo, como no hay
nadie éticamente perfecto, ni nadie que sea
totalmente cínico (ya que el mal, como dijo
Aristóteles, afortunadamente es imperfecto).
Entonces eso significa que si hay gente más o
menos ética y que todos tenemos algo de cínico.
Es decir, llevamos sobre nuestros hombros un
angelito y un demonio. El primero nos aconseja
portarnos bien y el segundo que nos salgamos
con la nuestra. A veces le hacemos caso a uno y
a veces al otro. Alguien 100% ético o cínico no
sobreviviría en este mundo. El primero porque
se santifica y se va al cielo, o se despierta, se
libera, se ilumina y se va al Nirvana y el
segundo porque se autodestruiría.
iv. Correcto Pensamiento. Si tenemos una
visión correcta de la realidad, controlamos
nuestra mente y estamos alineados a principios
entonces dejaremos de tener malos pensamientos
o pensamientos ociosos.
v. Correcta Habla. Si pensamos bien,
hablaremos bien. Evitaremos el chismorreo, la
malidicencia, el habla agresiva, golpeadora.
Como sugería Dale Carnegie en Cómo Ganar
Amigos e Influir en las Personas, debemos evitar
criticar, juzgar y condenar a las personas. En
lugar de ello debemos aprender a entenderlas,
ayudarlas o compadecerlas.
vi. Correcta Acción. Si tenemos una visión
adecuada de la realidad, controlamos nuestra
mente y nuestros pensamientos, así como
nuestra habla, entonces podremos trabajar de
una forma honesta o estudiar a conciencia o
hacer bien lo que tengamos que hacer.
vii. Correcto Sustento o correcta forma de
vivir o modo honesto de subsistir. Si actuamos
correctamente entonces podemos vivir
decentemente. (esta es la vía mundana).
viii. Correcto Despertar, Liberación e
Iluminación. La máxima meta del desarrollo del
ser humano. (esta es la vía espiritual)
18
El Despertar
¿Qué es el despertar? La hipótesis es que
los seres humanos vamos como dormidos por la
vida, como si estuviéramos soñando. Apenas si
nos damos cuenta de lo que sucede a nuestro
alrededor. Somos elefantes que vamos
aplastando a las hormigas a nuestro paso sin
darnos cuenta. Como nuestra mente brinca de
aquí para allá, hacemos las cosas como
autómatas, por inercia, por hábito, por
costumbre. Por ejemplo, quién se acuerda lo que
comió el jueves de la semana pasada. Quién se
acuerda lo que estaba haciendo el 24 de
noviembre del año pasado o el 24 de noviembre
de 1961, si es que ya había nacido. Quién se
acuerda de lo que soñó ayer. Quién se acuerda
de cuando estaba en su vientre materno o de sus
primeros años de infancia. Sólo tenemos
chispazos, instantáneas en nuestra mente de
algunos momentos memorables, todo lo demás
se ha esfumado y sólo un hipnotizador o un
sicólogo podría sacarlo del sótano de nuestra
mente para volvernos a hacer conscientes de
ello.
¿Qué es el despertar? Es estar atento, alerta
a todo lo que sucede dentro de nuestro ser y
fuera del mismo. Es detectar cualquier
pensamiento, cualquier emoción, cualquier
sensación. Es estar consciente de cuál es el
estado preciso de nuestra mente: somnolienta,
dispersa, con esfuerzo, con lasitud. Es detectar
cualquier forma que llega a nuestros sentidos:
visual, auditiva, olfativa, táctil o gustativa.
Sólo una mente entrenada en atención
unipuntual, sólo una mente que controlamos, es
capaz de estar alerta, no sólo en el periodo
meditativo, sino en el postmeditativo.
El despertar consiste en un triángulo:
1. una mente alerta, atenta
2. una mente tranquila, en paz, en calma
3. una mente discriminativa, analítica, con
poder de analizar cualquier asunto en sus causas
primarias, secundarias o las más profundas: la
causa de la causa de la causa. Lo que algunos
denominan la capacidad de retrocognición. De
hecho se dice que una mente despierta puede
recordar toda su vida e incluso vidas anteriores.
La Liberación
Si no hemos logrado el despertar, menos
podremos lograr la liberación. ¿Pero de qué nos
tenemos que liberar?
- De pensamientos o ideas equivocadas de la
realidad. Por ejemplo, cuando tenemos una
visión nihilista de negación de todo o cuando
pensamos que las cosas existen como no existen
 (sólidas, concretas, por sí mismas,
eternamente). Nos tenemos que liberar de la
ignorancia y de falsas creencias que construyen
la cárcel de los paradigmas entre los cuales
vivimos prisioneros.
- Nos tenemos que liberar de las emociones
perturbadas, de los cinco venenos: la duda o
incertidumbre, el apego o los deseos, la aversión
o el rechazo, el ego o la soberbia y la depresión
o la tristeza. Esos venenos nos producen
sufrimiento y generan un sin fin de emociones
como los celos, la envidia, el miedo, la
preocupación, la lujuria, etc. Cada emoción es
una energía negativa que podemos utilizar para
lograr la iluminación. Por ejemplo, la ira es
como una central nuclear poderosísima con la
cual podemos conseguir hacer los análisis más
profundos que jamás hayamos sospechado. Por
eso, si tiene que hacer un análisis político o
financiero es bueno que se enoje, pero en vez de
que deje salir ese enojo como un potro
desenfrenado, canalícelo hacia algo positivo. Al
igual que si requiere hacer una investigación lo
más recomendable es que sufra celos, ya que la
persona celosa es la mejor detective, que es
capaz de seguir hasta las más pequeñas pistas.
- Nos tenemos que liberar del karma
acumulado o conseguir el perdón de nuestros
pecados, según de qué paradigma estemos
hablando, el budista o el cristiano. Si no
purificamos nuestro karma entonces este seguirá
brotando como el agua de un manantial o como
el vapor de una olla de presión sin tapa. Pero
para poder limpiar el karma sólo lo podemos
lograr en los estados más altos de la meditación,
cuando hemos aprendido a controlar nuestra
mente y somos capaces de hacer
retrocogniciones profundas, que nos permitan
romper los patrones causales que nos llevaron en
el pasado a cometer tal o cual acción, de tal
forma que si volviéramos a estar en una
situación similar no actuáramos de la misma
manera. Los 5 poderes de oposición son una
herramienta poderosa para purificar nuestro
karma o nuestros pecados, por muy graves que
hayan sido, siempre y cuando lo hagamos
profundamente, con convicción y con una gran
sinceridad. Si lo hacemos superficialmente o
como una simple fórmula lo único que
estaremos fortaleciendo será nuestro cinismo.
- Finalmente, lo más difícil de liberarnos es
de falsos refugios. Un refugio es un lugar donde
nos sentimos seguros y protegidos.
Generalmente nos refugiamos en nuestra familia,
en nuestra casa, con nuestros amigos, en nuestro
trabajo o en nuestra escuela, en nuestra iglesia,

Triple Entrenamiento
Las 4 Nobles Verdades
1. Correcta
Sabiduría visión

2. La causa del 4. El Método

4. Correcto
Pensamiento dolor es la es el Octuple
Control ignorancia
mental Etica 5. Correcta
Palabra Noble Sendero
2. Correcta
3. Correcto 6. Correcto
atención
Esfuerzo acción
1. La vida es 3. Si suprimimos
Los 4 Pensamientos dolor y la causa
sufrimiento suprimimos el
efecto
2. Es 4. Nos lleva de
Impermanente ciclos de placer
Octuple Noble Sendero
a dolor 8. Correcto
7. Correcto
3. Correcto despertar,
sustento
Esfuerzo liberación e
1. Tenemos 3. Está sujeta a iluminación
1. Correcta
una preciada causas y Visión 6. Correcta acción
vida humana condiciones 2. Correcta 5. Correcta habla
atención 4. Correcto
Pensamiento

19
 en nuestras creencias. El problema es que
esos son falsos refugios, ya que nada de eso es
eterno, nada de eso tiene existencia en sí mismo,
sino son productos de causas y consecuencias.
Son refugios que no han existido siempre y que
no van a existir siempre. Cuando venga una
fuerte tormenta o una gran crisis nos daremos
cuenta de lo endeble de nuestro refugio. El único
refugio verdadero, estable, seguro es nuestro
propio ser interior y su capacidad de
iluminación, las enseñanzas que nos permiten
lograrlo y la comunidad de maestros, discípulos
y amigos que nos pueden orientar, acompañar o
guiar en el sendero. Nuestra mente profunda es
indestructible, es totalmente pura, aunque está
cubierta por un velo de ignorancia y por los
patrones kármicos, por el ego y por falsos
pensamientos y emociones. Si logramos acceder
a esa mente que los budistas llaman la mente
primordial o rigpa, entonces veremos que ahí
contamos con el único poderoso refugio. Otros
se refugian en su Dios, pero si asocian a ese
Dios con el Dios que habita en su interior,
entonces estaremos hablando de lo mismo. Por
el contrario, si piensan en un Dios externo,
todopoderoso que va a venir a protegerlos o
liberarlos esperemos que realmente exista y esté
presto a acudir en su socorro.
La Iluminación
Es lograr la sabiduría, el amor y la felicidad
trascendental.
La sabiduría o ecuanimidad se logra cuando
se conoce la verdad absoluta y ya no las
verdades relativas que tenemos a nuestro
alcance. Es cuando comprendemos la naturaleza
verdadera de todas las cosas: el vacío. Entonces
podemos actuar ecuánimamente, sin apegos, sin
rechazos, ante todas las cosas.
El amor, la bondad y la compasión se logra
cuando somos capaces, como dijo Jesucristo, de
amar a nuestros enemigos y amar a nuestro
prójimo como si se tratara de nosotros mismos.
Generalmente amamos a unos pocos, a otros
muchos los odiamos y a la gran totalidad los
ignoramos. Amamos lo que nos conviene, lo que
nos produce placer o satisfacción o una
ganancia. Lo difícil, como dijo Gandhi, es amar
incondicionalmente, incluso en contra de
nuestros intereses. Lograr amar a todos los seres
sintientes se dice fácil, pero no es fácil lograrlo.
Finalmente, la Iluminación es alcanzar la
felicidad absoluta, no la felicidad mundana
perecedera, sino un gozo eterno, una alegría que
está por encima de todo lo terrenal. Es cuando se
logra lo que los budistas llaman el Nirvana y los
Católicos el Paraíso Terrenal.
20
En conclusión. Si dejamos que nos
controlen nuestros 5 venenos y centramos
nuestra vida en lograr únicamente los 5 deseos,
es factible que logremos una felicidad mundana,
la cual siempre será temporal. Ese camino o vía
es válido, pero también hay otro camino o vía: el
desarrollo espiritual, pero esto significa una
reingeniería, es decir cambios radicales, brutales
y profundo en la forma en que hemos vivido,
bajo los patrones que nos hemos conducido, de
nuestros hábitos y finalmente, del sentido que le
damos a la vida.
Nada de esto es algo en lo que deba de creer
o aceptar. Aunque es algo que hemos escuchado
o leído de grandes maestros, no tenemos ninguna
realización para afirmarlo. Sólo estamos tratando
de repetir lo que hemos oído. Por lo tanto es algo
en lo cual debe dudar, debe cuestionar, debe
poner a prueba, una y otra vez hasta que
compruebe por sí mismo que tiene o no algo de
verdad y de utilidad. Como dijo Sidartha
Gautama “no coloques ninguna mente encima de
la tuya” y “No creas en lo que has oído. No creas
en la tradición porque provenga de muchas
generaciones. No creas en nada de lo que se ha
hablado muchas veces. No creas en algo porque
haya sido escrito por algún viejo sabio. No creas
en las conjeturas. No creas en la autoridad, en
los maestros o en los ancianos. Cuando hayas
observado y analizado detenidamente una cosa,
que esté de acuerdo con la razón y beneficie a
unos y a todos, entonces acéptala y vive
conforme a ella”. “Primero realice una
investigación adecuada” 7/.
Notas:
1/ Benjamín Jara, IICA Guatemala. Principios
Griegos.
2/ José Cruz Ramírez (Los Valores de la Excelencia.
Su aplicación al liderazgo. Ed. Panorama)
3/ M. Foucault. Aproximaciones a claves de su
pensamiento. M. Insp. Mag. Douglas Ifrán. www.
monografias.com/trabajos12/foucuno/foucuno.
shtml#CONCEP
4/ Barrigton Moore Jr. Reflections on the Causes of
Human Misery and Upon Certain Proposals to Eliminate
Them, Boston, 1973, p.2, citado por Lorenzo Meyer.
5/ Thomas Samuel Kuhn. La estructura de las
revoluciones científicas (1962).
6/ Para abundar sobre el vacío que hay atrás de la
materia les recomendamos ver la película What the Bleep
do we know¡? que fue traducida al español como ¿Y tú
que @#√* sabes?
7/ Advertencia que le da Sidartha a Upali. Citado en
Buena Pregunta, Buena Respuesta, del Venerable S.
Dhammika.