Sie sind auf Seite 1von 15

BETHOVEN

La familia de Ludwig van Beethoven, cuyos miembros contaban con una tradición musical
naciente, vivía bajo condiciones modestas. Su abuelo paterno, llamado también Ludwig,3
(Malinas, 1712 – 1773), era descendiente de una familia de campesinos y granjeros
originarios de Brabante en la región de Flandes (Bélgica) que se trasladaron a Bonn en el
siglo XVIII. La partícula van de su nombre, contrario a lo que pudiera creerse, no posee
orígenes nobles, mientras que Beethoven probablemente pudo haberse derivado de Betuwe,
una localidad de Lieja, aunque otra hipótesis apunta a que el apellido proviene de Beeth,
que quiere decir remolacha y Hoven, que es el plural de Hof, que significa granja. Por ello,
Beethoven quiere decir «granjas de remolachas».4

En marzo de 1733, el abuelo Ludwig emigró a Bonn en donde trabajó como director y
maestro de capilla de la orquesta del príncipe elector de Colonia. El 17 de septiembre de
ese mismo año contrajo matrimonio con Maria Josepha Phall, cuyos testigos fueron el
organista van den Aeden y Johann Riechler. Su hijo y padre de Beethoven, Johann van
Beethoven (1740 - 1792) era músico y tenor de la corte electoral. El 12 de noviembre de
1767 Johann se casó en la iglesia de San Remigio en Bonn con Maria Magdalena Keverich
(19 de diciembre de 1746 - 1787), una joven viuda e hija de un cocinero de Tréveris. Por
ese motivo, el matrimonio contó con la oposición de Ludwig, su padre, que por aquel
entonces ya era el prestigioso maestro de capilla de la corte y consideraba a la joven de una
clase social inferior a la de su hijo.4

El matrimonio se trasladó al n.º 515 de la calle Bonngasse y dos años después, en 1769,
nació su primer hijo, bautizado como Ludwig Maria van Beethoven. Sin embargo, apenas 6
días después de su bautizo, el niño falleció. El 17 de diciembre de 1770, fue bautizado su
segundo hijo en la iglesia de San Remigio de Bonn, con el nombre de «Ludovicus van
Beethoven», tal como se describe en el acta de bautismo. Su fecha de nacimiento,
generalmente aceptada como el 16 de diciembre de 1770, no cuenta con documentación
histórica que pueda respaldarla. María Magdalena tendrá aún cinco hijos más, de los que
sólo sobrevivirán dos: Kaspar Anton Karl van Beethoven, bautizado el 8 de abril de 1774, y
Nikolaus Johann van Beethoven, bautizado el 2 de octubre de 1776. Los biógrafos no
tienen claras las fechas de nacimiento exactas de ninguno de los hijos de María Magdalena
Keverich.

Primeros años de vida

El padre de Beethoven estaba muy impresionado por el hecho de que Wolfgang Amadeus
Mozart daba conciertos a los siete años y quería que su hijo siguiera sus pasos. Con la
intención de hacer de Ludwig un nuevo niño prodigio, comenzó a enseñarle piano, órgano y
clarinete a temprana edad.5 Sin embargo, el estudio musical coartó el desarrollo afectivo del
joven, que apenas se relacionaba con otros niños. En mitad de la noche, Ludwig era sacado
de la cama para que tocara piano a los conocidos de Johann, a quienes quería impresionar;
esto causaba que estuviera cansado en la escuela. Ya era usual que dejara de asistir a clases
y se quedara en casa para practicar música.
Éstos no eran los únicos problemas. El padre era alcohólico, lo que ocasionaría que perdiera
el puesto de director de la orquesta de Bonn —puesto heredado del abuelo Ludwig—, y la
madre estaba frecuentemente enferma. Aunque la relación con Johann fuera más bien
distante, Ludwig amaba mucho a su madre a la que denominaba su «mejor amiga». 5

El 26 de marzo de 1778, cuando tenía 7 años, Beethoven realizó su primera actuación en


público en Colonia. Su padre afirmó que la edad de Ludwig era de 6 años, para que el
músico pareciera más joven y destacar su precocidad. Por ello, siempre se creyó que
Beethoven era más joven de lo que era en realidad. Debido a que el talento musical y
pedagógico de su padre era limitado, Ludwig comenzó a recibir clases de otros profesores.
Sus avances fueron significativos, sobre todo en la interpretación del órgano y la
composición guiado por músicos experimentados como Christian Gottlob Neefe. Neefe fue
un profesor muy importante e influyente en su instrucción y supo valorar inmediatamente el
nivel excepcional de Ludwig. Además de transmitirle conocimientos musicales, Neefe dio a
conocer a Beethoven las obras de los pensadores más importantes, tanto antiguos como
contemporáneos.5

En 1782, cuando contaba con 11 años de edad, Beethoven publicó su primera composición
titulada 9 Variaciones sobre una Marcha de Erns Christoph Dressler (WoO 63). Un año
después, Neefe escribió en la Revista de Música acerca de su alumno: «Si continúa así,
como ha comenzado, se convertirá seguramente en un segundo Wolfgang Amadeus
Mozart».6 En junio del siguiente año, Ludwig es contratado como músico en la corte del
príncipe elector de Colonia Maximilian Franz, por recomendación de Neefe. Este puesto le
permitió frecuentar la música de los viejos maestros de capilla además de facilitarle la
entrada en nuevos círculos sociales, en los que se encontraban algunos de los que serían
amigos suyos durante toda su vida, como la familia Ries, los von Breuning (en cuya casa
conoció a los clásicos y aprendió a amar la poesía y la literatura), el violinista Karl Amenda
o el doctor Franz Gerhard Wegeler (con quien años más tarde viajaría a Viena).

Ludwig van Beethoven fue bautizado el 17 de Diciembre de 1770, en Bonn. Su


familia era originaria de Brabante, en Bélgica. Su abuelo era el director de capilla
de la corte y su padre era cantor y músico en la corte de Bonn, con una persistente
inclinación hacia la bebida. Su madre ha sido siempre descripta como una mujer
dulce, modesta y pensativa. Beethoven hablaba de ella llamándola su "mejor
amiga". La familia Beethoven tuvo siete hijos, pero solo tres varones
sobrevivieron, de los cuales Ludwig fue el mayor.

Muy pronto, Ludwig mostró interés hacia la música, y su padre Johann lo instruyó
en los fundamentos del sublime arte, noche y día, cuando volvía a su casa de los
ensayos o de la taberna. No había ninguna duda de que el niño manifestaba el don
de la música, y su padre pensó entonces en poder lograr un "niño prodigio", un
nuevo Mozart.

El 26 de Marzo de 1778, a la edad de 7 años, Beethoven hizo su primera


actuación en público en Colonia. Su padre anunció que tenía 6 años, para hacerlo
ver como más precoz. Por esto, Beethoven siempre pensó que era más joven de lo
que era en realidad. Inclusive mucho mas tarde, cuando recibió una copia de su
certificado de bautismo, el pensó que pertenecía a su hermano Ludwig Maria, que
había nacido dos años antes que el, y que había muerto a los pocos días de nacido.

De cualquier modo, los talentos musicales y pedagógicos de Johann eran


limitados y hubo que buscar otros instructores. Ludwig aprendía rápidamente,
especialmente órgano y composición guiado por músicos experimentados como
Gottlob Neefe. Neefe fue muy importante para la instrucción de Beethoven.
Reconoció el nivel excepcional del genio de Beethoven inmediatamente. Fue una
influencia grande para el joven ya que tanto como transmitirle conocimientos
musicales, el hizo conocer al joven Beethoven las obras de los mas importantes
pensadores, antiguos y contemporáneos.

En 1782, a la edad de 11 años, Beethoven publicó su primera composición: "9


Variaciones sobre una Marcha de Erns Christoph Dressler" (WoO 63). Mas tarde
en 1783, Neefe escribió en la "Revista de Música", acerca de su talentoso alumno:
"Si continua de esta manera, será sin duda, el nuevo Mozart"

En Junio de 1784, por recomendación de Neefe, Ludwig es contratado como


músico en la corte de Maximilian Franz, Elector de Colonia. Este puesto le
permitió frecuentar la música de los viejos maestros en la orquesta. También esto
le permitió la entrada en nuevos círculos sociales. En estos conoció gente que iba
a convertirse en amigos por el resto de su vida. La familia Ries, los von Breuning
con la encantadora Eleonora, Karl Amenda, el violinista; también a Franz Gerhard
Wegeler, un doctor y muy querido amigo de Beethoven que también viajo luego a
Viena, etc. En la casa de los von Breuning, el joven Beethoven conoció a los
clásicos y a aprendió a amar la poesía y la literatura.

El Príncipe Maximilian Franz estaba conciente del talento de Beethoven, y por lo


mismo, en 1787 lo envió a Viena a estudiar con Mozart y proseguir su educación.
Viena era entonces el faro cultural y musical de Europa.

En relación al encuentro entre Mozart y el joven Beethoven, solo existen textos de


disputable autenticidad. De cualquier modo la leyenda dice que Mozart habría
dicho: "Recuerden su nombre, ya que este joven hará hablar al mundo!"

Pero su madre enfermo gravemente, y en una carta su padre le pidió que regresara
inmediatamente. Su madre, la única persona hasta entonces, con la que Ludwig
había desarrollado una profunda relación de amor, murió finalmente de
tuberculosis el 17 de Julio de 1787.

A partir de esto y poco a poco, Ludwig comenzó a reemplazar a su padre en el


hogar. Primeramente en lo económico, ya que Johann, a partir de la muerte de su
esposa, se fue deteriorando personalmente, entró en depresión y se hizo más y
más dependiente del alcohol. De esta forma tanto su rol de padre, como su trabajo
en la corte fueron mermando. El joven Beethoven entonces, se sintió que tenía
que tomar la responsabilidad sobre sus dos hermanos menores sobrevivientes, un
sentimiento que mantuvo por el resto de su vida, y que a veces llevó a cabo en
exceso. Un sentimiento de responsabilidad por su familia, que en realidad, le dio
más dolores que alegrías.

Cinco años más tarde, en 1792, Beethoven volvió a obtener del Príncipe Elector la
posibilidad de proseguir su educación musical en Viena. Nunca volvió a su
pueblo natal. La noche antes de partir, su amigo el conde Waldstein le escribió en
su diario: "recibirás el espíritu de Mozart de las manos de Haydn…"

En Viena, el joven músico tomo lecciones de composición con Haydn, después


contrapunto con Alberchtsberger, y lírica con Salieri. Pronto llamó la atención y
deslumbró a Viena con su virtuosismo en el piano y sus famosas improvisaciones.
En un par de años se convirtió en el músico de moda en la aristocrática y musical
capital de los Haugsburg.

En 1794, Beethoven publica su Opus Nº 1, tres Tríos para Piano, violín y cello. El
año siguiente pudo realizar su primer concierto público en Viena (una
"Academia"), en la cual interpretó sus propias obras. Luego siguió una gira:
Praga, Dresden, Leipzig y Berlín. Antes de eso un concierto en Budapest. Una
enorme actividad para el joven Beethoven que estaba ya sintiéndose llamado a
grandes cosas en la música.

Beethoven hizo numerosas relaciones en Viena. Todos en el mundo aristocrático


musical de Viena admiraban al joven compositor. Estos amantes de la música se
convirtieron rápidamente en sus leales mecenas y sostenedores. Cada tanto tenía
una pelea con uno u otro de ellos, y a menudo hacia las paces honorablemente
después. Su gran talento les hacia excusar tanto su comportamiento impulsivo,
como sus reacciones que en otro caso hubieran sido juzgadas como excesivas. Su
fuerte carácter y conciencia de su valor hicieron que pudiera conseguir para si, un
respeto y valoración que no habían sido otorgados a nadie antes.

En 1800, Beethoven organizó un nuevo concierto en Viena, que esta vez incluyó
la presentación de su Primera Sinfonía. Aunque hoy en día, nosotros podamos
juzgar esta obra como mas clásica, y cercana las composiciones de Haydn y
Mozart, en ese momento, el publico encontró esta obra extraña, demasiado
extravagante y hasta audaz. Nuestro genial Beethoven aun siendo todavía un
joven compositor, estaba ya empujando los limites de las posibilidades de la
música. Su obra entera parece una lucha contra los limites de las posibilidades de
expresión del arte.

Su actividad iba en aumento, y también tuvo alumnas entre las jóvenes


aristócratas, muchas de ellas jóvenes y hermosas con las que estuvo
intermitentemente enamorado.

En 1801, Beethoven confiesa a su amigo Wegeler, en Bonn, so preocupación


acerca de su progresiva sordera. En Heiligenstadt, el año siguiente escribe el
famoso texto en el cual expresa su desesperación y disgusto ante la injusticia de la
vida: que el, un músico, pudiera volverse sordo era algo que el no podía concebir
ni soportar. Inclusive contemplo la idea del suicidio, pero la música y su ya fuerte
convicción de que había "algo" que el debía concretar en ese campo, hizo que
siguiera adelante. En ese "Testamento" escribió que el sabia que todavía tenia
mucha música por descubrir, explorar y concretar. Beethoven no se suicidó, más
bien, sabiendo que su enfermedad se iba haciendo peor con el tiempo, se zambullo
de lleno en el trabajo componiendo excepcionales sonatas para piano, (como la
Opus 31, "La Tempestad"), la Segunda y Tercera Sinfonías, y por supuesto mucho
más.

Beethoven escribió su Tercera Sinfonía en "memoria de un gran hombre",


Bonaparte. El mismo era visto en ese momento como un liberador de su pueblo, y
que desde la Revolución Francesa, estaba abriendo una puerta a la esperanza.
Cuando el Primer Cónsul, se declaro a si mismo Emperador, Beethoven se
enfureció, y borro violentamente el nombre de Napoleón de la primera página de
la partitura. La "Eroica" se estrenó el 7 de Abril de 1805.

Entre 1804 y 1807 estuvo enamorado de la joven y bella Condesa Josephine


Brusnwik viuda del Conde Deym. La condesa correspondía a su amor pero este
no pudo realizarse por las rígidas restricciones sociales de la época y la estricta
separación entre la nobleza y el vulgo. En esta etapa hay una correspondencia
amorosa entre ambos. Esta relación termina alrededor de 1808, al no poder
concretarse.

Mientras tanto Beethoven había finalmente terminado su opera, "Leonore". La


única opera que el iba a componer. Escribió y re-escribió cuatro diferentes
overturas. Finalmente el nombre de la Opera fue cambiado a Fidelio, en contra de
los deseos del compositor. El 20 de Noviembre de 1805 fue la fecha de la primera
representación…. en frente a una pobre concurrencia de publico en el que se
encontraban muchos oficiales franceses. Napoleón y su ejercito habían entrado en
Viena por primera vez en esa misma semana!

Esto volvió a ocurrir en 1809.

En los años siguientes, la actividad creadora del compositor se tornó intensa.


Compuso muchas sinfonías, entre ellas las famosas Quinta, la Pastoral, la overtura
Coriolano, inclusive la pequeña pieza para piano conocida como "Para Elisa".

El Archiduque Rodolfo, hermano del Emperador, fue alumno suyo en


composición, y eventualmente se convirtió también en su mas grande benefactor.

En 1809, Beethoven se encontraba descontento de su situación en Viena,


especialmente bajo el aspecto económico. Entonces se planteo la invitación de
Jerome Bonaparte, para dejar Viena y radicarse en Holanda. Su vieja amiga la
Condesa Anna Marie Erdödy, logró que se quedara en Viena con la ayuda de sus
más ricos admiradores: El Archiduque Rodolfo; el Príncipe Lobkowitz y el
Príncipe Kinsky. Estos aristócratas ofrecieron a Beethoven una pensión anual de
4.000 florines, permitiéndole de esta manera vivir sin ninguna clase de apremio
económico. La única condition era que Beethoven no dejara Vienna. Beethoven
aceptó. Esta pensión, hizo de él, el primer artista y compositor independiente de la
historia. Antes de este contrato, los músicos y compositores (inclusive Bach,
Mozart y Haydn), eran sirvientes en las casas de las ricas familias aristocráticas.
Eran parte del personal domestico, sin mas derechos que los demás y con la
adicional tarea de la composición y la interpretación de música cuando a los
patrones les placía. Las condiciones del arreglo de Beethoven con sus
benefactores, eran absolutamente excepcionales: el era libre de escribir lo que
quería, cuando quería, y por pedido o no, según el lo prefiriera. Condiciones
excepcionales para un músico que era además, un hombre de un carácter también
excepcional.

En 1812, Beethoven se traslada a tomar cura de aguas a Tépliz, desde donde


escribe su ardiente carta a su "Amada Inmortal". Esta carta que fue encontrada en
un compartimiento secreto de su escritorio con el "Testamento de Heiligenstadt",
ha provocado toda clase de teorías y suposiciones en los estudiosos y biógrafos
desde entonces. Numerosas mujeres entre sus amigas, alumnas o relaciones, han
sido propuestas por turnos como candidatas a destinatarias de esa hermosa y
apasionada carta. Pero, pese a todo el esfuerzo de investigación, a no ser que
algún nuevo documento sea descubierto (tal vez ubicado en este momento en
alguna colección privada) es posible que la verdad acerca de esta misteriosa mujer
continúe siendo un secreto. Evidentemente así lo quiso Beethoven.

A fines de Julio de 1812, Beethoven conoció a Wolfang von Goethe, encuentro


organizado por Bettina Brentano. Los dos grandes artistas, se admiraron
mutuamente pero no pudieron comprenderse. El compositor juzgó al poeta como
demasiado servil con la aristocracia, y el poeta opinó que Beethoven era un ser
"indomable". Pese a esto, la admiración de Beethoven hacia Goethe como poeta
no disminuyó, al contrario, continuó poniendo música a muchos de sus poemas, y
lo reverencio bajo ese aspecto hasta el final de su vida. Siempre lamentó no haber
sido mejor comprendido por Goethe.

Entonces, uno de sus benefactores, el Príncipe Lobkowitz tuvo un quebranto


económico, y el Príncipe Kinsky se mató en una caída de su caballo. Los
herederos de Kinsky decidieron no pagar las obligaciones financieras que el
Príncipe había contraído con Beethoven. Aquí recomienzan las dificultades del
compositor para mantener su independencia económica.

Entonces el Checo Johann Nepomuk Maelzel se contactó con Beethoven.


Talentoso inventor, e inventor del metrónomo, Maelzel ya había conocido a
Beethoven y le había construido varios instrumentos para ayudarlo con sus
dificultades auditivas: Cornetas acústicas, un sistema de escucha conectado al
piano, etc. En 1813, Beethoven compuso "La Victoria de Wellington" un trabajo
escrito para el instrumento mecánico construido por Maelzel, el "panharmonicon".
Pero fue principalmente su trabajo en el metrónomo, que ayudó a la evolución de
la música. Beethoven se entusiasmó tanto con el aparato que escribió cartas a
editores recomendándolo y fundamentalmente, comenzó a hacer
escrupulosamente las anotaciones de las marcas de metrónomo en sus partituras,
de modo que su música pudiera ser interpretada precisamente como el lo había
planeado.

La "Academia" de 1814, reagrupara este trabajo ("La Victoria de Wellington"),


con las Séptima y Octava Sinfonías. Este era también el tiempo de re-escribir y
reformar Leonore, como Fidelio, la única Opera de Beethoven. Esta vez, el
trabajo se convirtió en un gran éxito frente al público. Un éxito también
económicamente. Los conciertos que realizo en esta época fueron todos exitosos a
ese nivel.

1814 fue también el año del Congreso de Viena, que reunió en la capital a todas
las cabezas de estado que decidían el futuro de Europa después de la derrota de
Napoleón. Todo Viena era una celebración. Este fue uno de los momentos de
gloria de Beethoven. Se realizaron numerosos conciertos con su música como
parte de las celebraciones, y fue invitado a tocar muchas veces, recibiendo
admiración y reconocimiento de los cuales podía estar perfectamente orgulloso.

El 15 de Noviembre de 1815, muere Kasper Karl, el hermano menor del


compositor. Al morir, deja una esposa, a la que Beethoven llama "La Reina de la
Noche" -parafraseando la opera de Mozart, y debido a su débil moral, y un hijo de
9 años, Karl.

A partir de este momento la vida del compositor iba a cambiar dramáticamente.


Su hermano había escrito que deseaba que la tutoría de Kart fuera ejercida
conjuntamente por su mujer y su hermano Ludwig.

Para Beethoven, la responsabilidad tenia que ser tomada muy seriamente. Por una
parte se negaba a compartir la crianza con una mujer de cuya moral tenia tantas
dudas y por otra parte, como un soltero de casi 45 años que ya casi no podía oír,
encontró muy difícil comprender a un niño con una infancia muy distinta de la
suya propia, y que se transformo en un adolescente difícil, tironeado entre su
madre y su tío. Todo esto fue la causa de un muy largo juicio entre la madre del
niño y Beethoven, y el origen de sufrimiento, conflicto y numerosas
preocupaciones para él.

El 1816, Carl Czerny (futuro maestro de Franz Liszt, y antiguo alumno de


Beethoven) se tornó maestro de música de Karl, pero no encontró talento musical
en el niño, cosa que Beethoven desilusiono a nuestro compositor. El hubiera
deseado que el niño pudiera dedicarse al arte. Al mismo tiempo, se encontraba
terminando su hermoso ciclo de canciones "A la Amada Lejana" y escribió el
primer esbozo de un tema de la Novena Sinfonía.

Dos años más tarde, el Archiduque Rodolfo, fue nombrado Cardenal y Beethoven
comenzó escribir para su encumbrado alumno, su enorme Misa en Re. La misa
naturalmente no estuvo lista para la entronización, pero se transformó finalmente
en una obra maestra de belleza y espiritualidad incomparable.

Gioachino Rossini, triunfaba en Viena en 1822, donde se encontró con


Beethoven. La barrera del idioma y la sordera de Beethoven ocasionaron que solo
pudieran intercambiar breves palabras. El compositor alemán apenas toleraba la
opera italiana, -la encontraba poco seria, pero Rossini años después aun recordaba
su encuentro con reverencia.

La Novena Sinfonía estaba prácticamente terminada en 1823, el mismo año que la


Missa Solemnis. Liszt que tenía entonces 11 años, conoció a Beethoven, cuando
el maestro (dicen algunos) concurrió a su concierto del 13 de Abril, y felicitó al
niño. El joven virtuoso, años más tarde, transcribió todas las sinfonías de
Beethoven para piano, y fue un gran interprete de su obra.

El 7 de Mayo de 1824 fue la fecha del estreno de la maravillosa Novena Sinfonía,


y a pesar de las dificultades técnicas de la música y los problemas de la exigencia
en las partes cantadas, fue un éxito rotundo. Lamentablemente este éxito no
resulto en una ganancia financiera. Los problemas financieros continuaban
preocupando mucho al compositor. Siempre tenía dinero que estaba ahorrando,
pero este dinero no podía tocarse, ya que estaba ya destinado a su sobrino.

Entonces en medio de preocupaciones, enfermedad y disgustos, pero también de


una serenidad espiritual excepcional, comienza el periodo de los Últimos
Cuartetos, música tan excelsa y espiritual como ninguna otra. Estos cuartetos son
todavía hoy difíciles para las audiencias contemporáneas, que puede comprender
la mayoría del cuerpo de su obra. Comienza a escribir la Décima Sinfonía.

A fines de 1826, Beethoven se resfría seriamente volviendo de la propiedad de su


hermano Johann, donde había pasado el verano y con el cual había peleado otra
vez. La enfermedad se complica asociándose a problemas hepáticos serios de los
que Beethoven había sufrido toda la vida. Finalmente después de una enfermedad
dolorosa de tres meses Beethoven muere, rodeado de sus amigos, el 26 de Marzo
de 1827, justo cuando una tormenta rompe sobre Viena.

Los servicios fúnebres fueron celebrados en la Iglesia de la Santa Trinidad,


distante un par de cuadras del domicilio de Beethoven. Se estima que entre 10.000
y 30.000 personas concurrieron a sus exequias que fueron muy importantes. Franz
Schubert, muy tímido y un gran admirador del compositor (que nunca se animó a
acercársele) fue uno de los que cargaron el cajón, con otros músicos. Schubert
murió el año siguiente y pidió ser enterrado al lado de Beethoven.

El actor Heinrich Anschütz leyó la oración fúnebre que fue escrita por el poeta
Franz Grillparzer, a las puertas del Cementerio de Währing, (ahora Schubert
Park).

HELLEN KELLER

Helen Keller (*27 de junio de 1880 – 1 de junio de 1968) fue una autora, activista política,
y oradora estadounidense sordociega.

Helen Keller nació en Tuscumbia, una pequeña ciudad rural de Alabama, Estados Unidos.
Su sordoceguera fue causada por una fiebre en febrero de 1882 cuando tenía tan solo 19
meses de edad. Su incapacidad para comunicarse en tan temprana etapa de desarrollo fue
muy traumática para ella y su familia, debido a esto, estuvo prácticamente incontrolable por
un tiempo.

A pesar de sus discapacidades, muchos años después daría discursos acerca de su vida, e
incluso escribiría libros sobre sus experiencias personales. Todo esto fue posible gracias a
la gran ayuda e influencia de su institutriz Anne Sullivan, quien le enseñó a leer y
comunicarse con los demás, junto con llevar una vida disciplinada.

Por un tiempo, Sullivan dio clases a Helen en una cabaña ubicada en la propiedad de la
familia, para que no se separara de sus protectores padres. Sullivan permitía que Helen
tocara las cosas y entonces deletreaba, lo que el objeto era, en la mano de Helen. Así, Helen
aprendió a leer.

Para que aprendiera a escribir, Sullivan le consiguió a su discípula un tablero especialmente


diseñado, acanalado de modo que un lápiz podía formar letras.

Para enseñarle a hablar, Sullivan ponía la mano de Helen en su garganta para que pudiera
sentir las vibraciones creadas al comunicarse. Sullivan hacía que Helen tratara de formar
estas mismas vibraciones. Este procedimiento se utilizó para enseñarle a Helen a hablar
desde joven.
Su discurso, sin embargo, seguía siendo confuso. No fue hasta años después que, con la
ayuda de la técnica de un profesor de voz y el apoyo de Annie, Helen pudo finalmente
hablar de manera clara.

Eventualmente Helen Keller fue a la Universidad de Radcliffe y se graduó con honores.


Publicó su primer libro en 1902, "La Historia de Mi Vida", el mismo que fue redactado por
John Macy.

Hay una calle dedicada a ella en la localidad española de Getafe y una escuela para ciegos
lleva su nombre en Santiago de Chile. En Corrientes, Argentina, una escuela para sordos
fue fundada con su nombre. En Córdoba, también Argentina, hay un colegio para ciegos
que lleva su nombre.

Hija del capitán Arturo Henley Keller y Kate Adams Keller, Helen nació con la vista y la
audición completas. Hoy en día la naturaleza de su enfermedad sigue siendo un misterio.
Los doctores en su tiempo la llamaron "fiebre del cerebro", mientras que los médicos de
hoy piensan que pudo haber sido escarlatina o meningitis.

Cualquiera que haya sido la enfermedad, por muchos días lo único que se esperaba es que
Helen muriera. Cuando la fiebre bajó, la familia de Helen se puso feliz creyendo que su hija
iba a estar bien otra vez. Sin embargo, la madre de Helen pronto notó que su hija no podía
responder cuando sonaba la campana de cena, o cuando ella pasaba su mano delante de los
ojos de su hija. Llegó así a ser evidente que la enfermedad de Helen la había dejado ciega,
sorda y muda.

Los siguientes años fueron muy difíciles para Helen y su familia. Helen se hizo una niña
muy difícil, aventaba los platos y lámparas y aterrorizaba la casa entera con rabietas, gritos
y su mal genio. Los parientes la miraban como un monstruo.

Pero su familia - y ella misma - no se resignan con ese destino, y lo fueron superando a
fuerza de voluntad y constancia, y gracias también a tutores y amigos que la ayudaron;
entre ellos, Anne Sullivan.
Helen Keller con Anne Sullivan, de vacaciones en Cabo Cod, julio 1888 (foto redescubierta
en 2008)

Anne Sullivan fue su profesora personal, y amiga de toda la vida. Anne le ayudó primero a
controlar su mal genio, y después le enseñó a leer, en primer lugar con el alfabeto manual
táctil y más adelante, con el sistema Braille, a escribir de forma normal y a través de las
máquinas de escribir en Braille.

Helen fue a la escuela de Cambridge para señoritas desde 1896 y en el otoño de 1900 entró
en la Universidad de Radcliffe, siendo la primera persona sordociega que podía alcanzar el
reto de presentarse y transitar en una Universidad.

La vida en Radcliffe era muy difícil para Helen y Anne, y la cantidad enorme de trabajo
condujo al deterioro de la visión de Anne. Durante su tiempo en la universidad Helen
comenzó a escribir sobre su vida. Ella escribía la historia en Braille y en una máquina de
escribir normal. Fue en este tiempo que Helen y Anne resolvieron con Juan Albert Macy
que él debía ayudar a corregir el primer libro de Helen ("La historia de mi vida"), el cual
fue publicado en 1903 y aunque al principio no fuese exitoso en ventas, se convirtió más
adelante en una obra clásica.

El 28 de junio de 1904 Helen se graduó "Con Honores" de la Universidad de Radcliffe,


siendo la primera persona sordociega en obtener un título universitario. Ese mismo año en
la exposición de San Luis habla por primera vez en público.

Helen y Anne iniciaron en los años siguientes una gira de charlas y conferencias sobre sus
experiencias. Helen contaba su vida y su discurso era interpretado frase a frase por Anne
Sullivan, lo que siempre generaba sesiones de preguntas y respuestas acerca de sus
historias. A causa de sus viajes, Helen y Anne buscaron una nueva forma de vivir a través
de sus conferencias y la venta de sus obras literarias.

En 1918 la demanda de sus obras había disminuido, pero ellas seguían viajando con más
interés, mostrando las cosas increíbles de Helen, como la primera vez que entendió el
significado de la palabra "agua". Ese año Helen, Anne y John (Esposo de Anne), se
trasladaron a Forest Hills en Nueva York. Helen usaba su nueva casa como la sede para
consecución de fondos de la Fundación Americana para Ciegos. Ella no solo recolectaba
dinero, también hacía campañas para mejorar la calidad de vida y las condiciones de las
personas ciegas, quienes eran rechazados y erróneamente educados en asilos. Su insistencia
fue uno de los factores importantes para que las condiciones de éstos cambiaran.

En 1957 fue presentada por primera vez "La trabajadora milagrosa" un drama donde Anne
Sullivan muestra sus primeras formas de comunicación cuando Helen era una niña, fue la
primera aparición en televisión en los Estados Unidos. En 1959 esta obra fue presentada en
Broadway y llegó a ser un éxito por casi dos años. En 1962 se realizó otra película en
donde las actrices que hacían el papel de Anne y Helen recibieron premios Oscar por sus
actuaciones.
En octubre de 1961 Helen sufrió el primero de una serie de accidentes cerebro vascular, y
su vida pública se fue cerrando. En los últimos años de su vida se dedicaría entonces a
cuidar su casa en Arcan Ridge.

En 1964, Helen fue galardonada con la Medalla Presidencial de la Amistad, el más alto
premio para personas civiles otorgada por el presidente Lyndon Johnson. Un año más tarde
fue elegida como La mujer del ―Salón de la Fama‖ en la Feria Mundial de Nueva York.

Poco antes de su muerte en 1968, a la edad de 87 años, Helen Keller le dice a un amigo:
"En estos oscuros y silenciosos años, Dios ha estado utilizando mi vida para un propósito
que no conozco, pero un día lo entenderé y entonces estaré satisfecha."

El primero de junio de 1968, en Arcan Ridge, Helen Keller muere mientras dormía. Su
cuerpo fue cremado en Bridgeport, Connecticut, y su funeral se realizó en la Catedral
Nacional de Washington DC. La urna más tarde sería llevada a un lugar cerca de donde
descansaban los restos también de Anne Sullivan y Polly Thomson.

La historia de Helen Keller y Anne Sullivan


Helen Keller quedó sorda y ciega a causa de una enfermedad cuando tenía 19 meses de edad.
Llegó a desarrollarse culturalmente y ser una escritora y conferenciante pública mundialmente
famosa. Helen no se desanimaba fácilmente. Pronto comenzó a descubrir el mundo usando
sus otros sentidos. Tocaba y olía todas las cosas que estaban alrededor de ella y sentía las
manos de otras personas para «ver» lo que estaban haciendo e imitaba (copiaba) sus
movimientos. Cuando tenía siete años de edad inventó 60 signos diferentes que le servían para
comunicarse con su familia. Al no poder expresarse ni entender su frustración aumentó con la
edad y su rabia iba a peor. Se convirtió en una persona salvaje, revoltosa y muy agresiva. Esta
situación hizo que se viera claramente la necesidad de hacer algo. Justamente, antes de cumplir
siete años, la familia contrató a una tutora privada.
Anne Sullivan venía de un ambiente muy pobre. Había perdido la visión cuando tenía cinco
años y fue abandonada en una casa de escasos recursos. Tuvo la suerte de haber encontrado un
lugar donde fue bien acogida, el Colegio Perkins para Ciegos en Boston. Después de varios
años, y tras dos operaciones con éxito recuperó su visión. Se graduó obteniendo el título de
honor. Para el director de la escuela estaba claro que Anne Sullivan era la persona adecuada
para educar a Hellen Keller.
El primer paso de Anne fue comunicarse con ella venciendo su agresividad con fuerza y
paciencia. El siguiente paso fue enseñarle el alfabeto manual. Anne le ponía en contacto con
los objetos y le deletreaba en la mano las palabras. Así comenzó a animarse y cada cosa que
encontraba la cogía y preguntaba a Anne cómo se llamaba. Así fue preparando a su alumna
con nuevas palabras e ideas que necesitaría para enseñarle a hablar. Como resultado de todo
este trabajo, Hellen llego a ser más civilizada y amable, y pronto aprendió a leer y escribir en
Braille. También aprendió a leer de los labios de las personas tocándoles con sus dedos y
sintiendo el movimiento y las vibraciones.
Anne la ayudó en varias instituciones trabajando con otros materiales y textos, enseñándole
distintas lecciones y actuando como su intérprete. Ella interpretaba en las manos de Hellen lo
que los profesores decían en clase, y transcribía en los libros utilizando el sistema Braille.
Hellen se graduó con título de honor de la Radcliffe College en 1904. Tenía un poder de
concentración extraordinario, muy buena memoria y muy buenos recursos personales para
mejorar. Mientras estaba en aquella escuela escribió «La Historia de Mi Vida». Este libro tuvo
un rápido éxito y gracias a él ganó suficiente dinero para comprarse su propia casa.
La ceguera era, a menudo, causada por una enfermedad que también era la causa de que
muchos vivieran en pobreza. Hellen colaboró en la creación de la Fundación Americana para
los Ciegos con el objetivo de ofrecer servicios a otras personas ciegas. Llegó a ser famosa,
invitada por muchos países y recibió títulos de Honor de diferentes universidades extranjeras.

CRISTOFER REEVE

Reeve poseía una altura de 1,92 metros y su verdadero color de cabello era rubio. Durante
su adolescencia tuvo problemas musculares debido a su altura, padeció asma y en ciertas
épocas de su vida tuvo alopecia. Durante el rodaje de Superman, conoció a la ex-modelo y
publicista británica Gae Exton con quien convivió durante una década y tuvo dos hijos,
Matthew y Alexandra.

Tras separarse de Exton, en verano de 1987, Reeve conoció en el Festival de Teatro de


Williamstown presentándose en la mesa a la joven Dana Morosini, una actriz y cantante de
quien se enamoró y con quien contrajo matrimonio en 1992. De dicha unión, nació su tercer
hijo, Will.

Siendo una persona bastante accesible, mantuvo una gran amistad durante toda su vida con
el también actor Robin Williams, quien fue compañero de estudios en Julliard y quien
cubrió sus cuentas médicas tras el accidente. También mantuvo cordiales relaciones con su
compañera de rodaje en Superman, la actriz Margot Kidder, el director Richard Donner y
su co estrella de Somewhere in Time, Jane Seymour, quién bautizó a uno de sus hijos
"Christopher" en homenaje al actor. También mantenía una estrecha relación de amistad
con Gene Hackman, su también compañero de rodaje en la saga de Superman.

Dana Reeve le sobrevivió dos años más ya que se le diagnosticó cáncer de pulmón sin
haber sido ella fumadora y luchó con su mal hasta el 7 de marzo de 2006, fecha en que
falleció a los 44 años de edad. Su esposa había ganado reconocimiento internacional con la
fundación, pero el gobierno de George W. Bush redujo ostensiblemente los fondos y
practicamente paralizó el tema del uso de células madres. El actor fue un firme opositor a
Bush y a las jerarquías católicas, a los que acusaba de frenar las investigaciones sobre
células madre.

La vida de Christopher Reeve cambió para siempre el 22 de mayo de 1995, cuando en una
competición hípica en Culpepper, Virginia, cayó de su caballo al no poder superar un
obstáculo, fracturándose las dos primeras vértebras cervicales.
Tras ser sometido a una peligrosa operación, solo pudo recuperar la movilidad de los dedos
de su mano izquierda, que consiguió articular con mucho esfuerzo, colaboró con
entusiasmo desmesurado con asociaciones como la Unesco, para luchar por causas
similares a la suya. También asistía al senado a pesar de su estado para intentar que éste
permitiera trabajar con células madre embrionarias a los investigadores para intentar
conseguir el mayor deseo de Reeve, volver a andar.

Se convirtió en un orador motivacional y un ícono de la lucha y el temple ante la


adversidad y creó la "Christopher and Dana Reeve Paralysis Foundation" donde además de
luchar por el desarrollo de la investigación de la cura de enfermedades usando células
madre, busca apoyar a quienes han quedado parapléjicos o tetrapléjicos como él, ya sea por
causas naturales o en accidentes. Su esposa Dana fue apoyo fundamental para que Reeve
pudiese recuperarse emocionalmente en los primeros difíciles momentos de esta dura etapa
de su vida, ella permaneció como incondicional compañera hasta su deceso ganándose la
estima, el respeo y la admiración por su abnegación y coraje.

En ese difícil momento de su vida, Reeve sugirió la separación y su esposa Dana Reeve le
brindó su apoyo con la simple frase:

-"Todavía sigues siendo tú...(..) te amo"-


1

Dana adecuó la casa en la granja para la nueva situación de su marido y dejó en segundo
plano su carrera. Christopher Reeve gracias a los cuidados y amor de hogar logró asumir su
condición de discapacitado y realizó conferencias e incluso apoyó a su esposa en varias
actividades de índole profesional. El actor no renunció a la lucha y sus conferencias fueron
un ejemplo de la lucha contra la adversidad. Siempre estuvo a la vanguardia como
estándarte de los estudios para la cura de la parálisis de la médula espinal. Reeve incluso
llegó a ofrecer su cuerpo para experimentos de neurotrasmisores, en uno de ellos le
implantaron celdas electrónicas que generaban pulsos eléctricos que estimulaban la
reacción refleja y que le hacían mover sus extremidades de manera robótica, hizo una
presentación en público, sin embargo esto no prosperó.

Dana apoyó públicamente al senador John Kerry como candidato a la presidencia; sin
embargo George Bush Jr suspendió en 2001 el uso de los dineros de los contribuyentes para
el estudio de células embrionarias.

Un año después de su muerte, la fundación creada por él, Centro de Investigación Reeve-
Irvine de la Universidad de California (EE.UU.), consiguió reparar lesiones medulares de
ratones usando células madre provenientes del tejido nervioso de seres humanos. A medida
que pasaba el tiempo, su organismo se iba deteriorando, le aparecieron escaras y sus
musculos sin tono comenzaron a atrofiarse definitivamente, se hizo suceptible a sufrir
infecciones.
En 2003 y 2004, tuvo varias infecciones serias; recuperándose de tres mientras que la
última fue fatal para él. En octubre de 2004, estaba siendo tratado por un problema de
hipotensión causando por sepsis. El 9 de octubre, Reeve se sintió bien y estuvo con su hijo
Will. Esa noche, tuvo un ataque cardíaco después de recibir un antibiótico para la infección.
Entra en coma y es llevado al Hospital North Westchester en Mount Kisco, Nueva York.
Dieciocho horas después, el domingo 10 de octubre de 2004, fallece a los 52 años. Su
doctor, John McDonald, cree que fue una reacción adversa al antibiótico que le causa su
deceso.2 Un servicio conmemorativo para él se celebró en la Iglesia Unitaria en Westport,
Connecticut, donde él y su esposa habían asistido.3

Das könnte Ihnen auch gefallen