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CONDENSADO FERMIÓNICO

(SEXTO ESTADO DE LA MATERIA)


El condensado de Fermi es un estado de agregación de la
materia en el que la materia adquiere superfluidez. Se
produce a temperaturas muy bajas cercanas al cero
absoluto. Fue creado en la universidad de Colorado por
primera vez en 1999. El primer condensado de Fermi
formado por átomos fue creado en 2003.

La naturaleza del condensado implica que todas las


partículas que lo conforman se encuentran en el mismo
estado cuántico, lo cual es sólo posible si dichas partículas
son bosones (componentes del estado Bose-Einstein). Ahora
bien, el Principio de exclusión de Pauli impide que cualquier
pareja de Fermiones (componentes de este estado) ocupe el
mismo estado cuántico al mismo tiempo. Por lo tanto un
condensado fermiónico no debería existir.

Sin embargo, en el año 2004, el grupo del


Deborah Jin logró la condensación de pares de
átomos fermionicos.

El principio de exclusión de Pauli establece que es


imposible que dos fermiones ocupen el mismo
lugar. Deborah Jin, Markus Greiner y Cindy Regal
han dado un paso más y también, gracias a la
ultra congelación de partículas, han encontrado
un nuevo estado de la materia, el sexto: EL GAS
FERMIÓNICO. Como aseguran estos físicos, el
hielo cuántico (estado Bose-Einstein) está
compuesto de bosones, una clase de partículas que inherentemente son gregarias (tendencia a
agruparse) y sus leyes estadísticas tienden a favorecer la ocupación múltiple de un mismo
estado cuántico. Sin embargo, el gas fermiónico está completamente integrado por fermiones.
Éstos, a diferencia de los bosones, son poco sociables y por definición nunca dos de ellos
pueden ocupar el mismo estado de movimiento. Un par de fermiones idénticos no pueden
ocupar el mismo estado cuántico. A altas temperaturas, las conductas de estas partículas
elementales son casi imperceptibles. Sin embargo, cuando se enfrían tienden a buscar los
estados de más baja energía y es en este instante cuando se acentúa el carácter antagónico
de bosones y fermiones. ¿Pero cómo se comportan los fermiones ultra congelados?

Para resolver el enigma, los físicos de Boulder usaron rayos láser para atrapar una pequeña
nube de 500.000 átomos de potasio. Limitando su movimiento natural, enfriaron los átomos a
50.000 millonésimas de grados por encima del cero absoluto (-273,15°C). Por su carácter
arisco o antisocial, los fermiones de esos átomos deberían repelerse, pero no fue así. Al aplicar
un campo magnético a los átomos superfríos, éstos se juntaron brevemente en parejas y
crearon un maravilloso condensado. Según los padres del nuevo estado, este hallazgo podría
dar pie a una amplia gama de aplicaciones prácticas. Por ejemplo, el gas fermiónico ofrece una
nueva línea de investigación en el campo de la superconductividad, el fenómeno por el que la
electricidad discurre sin resistencia alguna.

Jin sospecha que el sutil emparejamiento de un condensado fermiónico es el mismo fenómeno


de emparejamiento que se ve en el helio-3 líquido, un superfluido. Los súperfluidos fluyen sin
viscosidad, así que los condensados fermiónicos deberían hacer lo mismo.

Un fenómeno relacionado cercanamente es la superconductividad. En un superconductor, los


pares de electrones (los electrones son fermiones) pueden fluir con cero resistencia. Existe un
enorme interés comercial en los superconductores porque podrían ser utilizados para producir
electricidad en forma más barata y más limpia, y para crear maravillas de alta tecnología como
trenes levitantes y computadoras ultra-rápidas. Desdichadamente, los superconductores son
difíciles de manejar y de estudiar.
Los condensados fermiónicos podrían ser de ayuda. El mayor problema hoy en día con los
superconductores es que la temperatura más cálida en la que pueden operar es de apenas –
135° C. El nitrógeno líquido o cualquier otro criogénico necesario para enfriar los alambres
hace que los aparatos que utilizan superconductores sean caros y abultados. Los ingenieros
preferirían trabajar con superconductores a temperatura ambiente.
“La fuerza de unión en nuestro condensado fermiónico, ajustada
para masa y densidad, podría corresponder a un
superconductor de temperatura ambiente”, hace notar Jin. “Esto
hace que sea optimista acerca de que la física fundamental que
aprendamos a través de los condensados fermiónicos ayude a
otros a diseñar materiales superconductores más prácticos”.

La NASA tiene muchos usos para los superconductores. Por


ejemplo, los giróscopos que mantienen orientados a los satélites
podrían utilizar rulemanes (elemento mecánico que reduce la
fricción entre un eje y las piezas conectadas a éste, que le sirve
de apoyo y facilita su desplazamiento) hechos de imanes
superconductores, mejorando su precisión. También, ya que los
superconductores pueden trasladar la misma cantidad de
corriente que el cobre en un alambre mucho más fino, los
Los pares de fermiones motores eléctricos superconductivos a bordo de las naves
pueden unirse y actuar como espaciales podrían ser de 4 a 6 veces más pequeños que los
bosones. En este diagrama, motores ordinarios, ahorrando un volumen y un peso preciosos.
los espines de las partículas
emparejadas están alineados. Otros especulan que los superconductores podrían jugar un
En el trabajo de Jin, son papel importante en una base permanente en la Luna. Los
opuestos. superconductores serían una elección natural para una
generación y trasmisión ultra-eficiente de energía, ya que las
temperaturas ambientes bajan hasta los –173° C durante la larga noche lunar.

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