Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Así, ¡cuánta necesidad habría de algunas medidas para En efecto, si yo me observo, “yo es otro”. La duplicación del
nada! Y del derecho a una larga apertura. Se hablaría pensamiento es automáticamente desdoblamiento del ser. En
simplemente de la alegría de meditar, a fin de cobrar la penumbra, la conciencia de estar solo siempre es la
conciencia clara de que la meditación es un acto, el acto nostalgia de ser dos.
filosófico. Habría meditación pura. Se jugaría con las Heme aquí entonces como materia de duda, como materia
hermosas palabras abstractas. Se creería. Y luego se dejaría de dualidad que fermenta, pesada y ligera según se
de creer, felices de vivir otras abstracciones. Vivir enriquezca o se evapore, según corra o huya. En mí
abstracciones, ¡qué movilidad! Todos los pensamientos, los meditando –dicha y estupor- el universo viene a
graves y los finos, los apasionados y los fríos, los racionales contradecirse. Es materia firme y engañosa. En mí, el
y los imaginarios tendrían un papel en esa meditada partida. universo entero viene a aislarse, viene a enloquecer hasta
Se dudaría con el espíritu o con el corazón, docta o creerse un solo pensamiento.
cándidamente, metódica o hiperbólicamente, sinceramente o Pero, apenas reunido, el universo se multiplicaría.
de farsa. Se preludiarían ya las grandes escenas cuando el Dialectizando toda unidad y en el umbral de su obra, el
universo y el hombre solo intercambian la luz o el desafío, espíritu regularía su meditación polimorfa. Daría a todos
cuando el hombre se estrella o desprecia. Se cantaría al nuestros sentidos, tanto al gusto como a la vista, su tiempo
filósofo en los campos, al filósofo en su celda, alborozado, justo para meditar. Cada sentido nuestro podría tener un
en lágrimas. El tiempo sería juventud y muerte, sería personaje, cada personaje su escenografía. En literatura, la
silencio. Podría suspenderse. Sería aquel por quien todo descripción del decorado siempre es psicología. Habría
vuelve a empezar, por quien todo se sorprende. Con cuando menos cinco universos sensibles, cinco sistemas de
frecuencia nos preguntaríamos: ¿dónde estoy? ¿quién soy? soledad sensibles. Todos los fabricantes de universos en
¿En qué espacio imaginario me han encerrado mis lazos? potencia en la vida humana tendrían libertad de dominar su
¿cuál es ese extraño rasgo del pensamiento filosófico que mundo, de glorificar el imperialismo filosófico del sujeto
hace sorprendente lo conocido? ¿cuál ese extraño camino de solo. ¡Ah! Si el filósofo tuviera el derecho de meditar con
los filósofos en donde todo punto es encrucijada? El todo su ser, con sus músculos y su deseo; ¡cómo se
pensamiento filosófico es vacilación continua, sumamente desembarazaría de esas meditaciones fingidas en que la
sorda, aun cuando tiene las pomposas seguridades lógica esteriliza la meditación! O, antes bien, ¡cómo pondría
dogmáticas. Incluso cuando avanza, se repliega hacia sí. Se en el lugar que merecen las meditaciones fingidas, las
le cree uno y él se rompe. ¿No habría que demarcar para el meditaciones del espíritu de sutileza, del espíritu díscolo,
filósofo la definición barresiana del poeta: malicioso, que se empecina en una voluntad de diferenciar, y
será el filósofo “un alienado que hace alienados”? que al menos tiene la bella función de relajar la rigidez de
las convicciones bloqueadas!
238 DIVAGACIONES DIARIO DEL HOMBRE 239
El universo se revela permeable a todos los tipos de cuanto un alma se encierra bien en su soledad, toda
meditaciones, dispuesto a adoptar el pensamiento más impresión es oportunidad de un universo. Sin duda, al
solitario. Basta con meditar el tiempo suficiente una idea revolverse después, sus universos múltiples forman un
fantástica para ver al universo realizarla. Sin duda el esbozo mundo complejo. Pero el mundo es intenso antes de ser
puede ser frágil. Basta una ruptura de soledad para romperlo. complejo. Es intenso en nosotros. Y si se obedeciera a las
Pero, en sueños más regulares, la soledad es un mundo, la imágenes dinámicas, a las imágenes que dinamizan nuestro
decoración inmensa de todo el pasado nuestro. Todos ser, se sentiría mejor esa intensidad, esa necesidad íntima de
nuestros sueños, el de la selva y del arroyo, de la vendimia y proyectar un universo. Así, creemos que antes de las grandes
de la mies, vienen a fijarse allí, al punto, en ese árbol, en ese metafísicas sintéticas, sinfónicas, deberían aparecer estudios
haz. Para el filósofo que sueña el menor objeto es una elementales en que el asombro del yo y las maravillas del
perspectiva en que se ordenan toda su personalidad, sus mundo serían sorprendidas en su correlación más estrecha.
pensamientos más secretos y más solitarios. Ese vaso de Muy felizmente se devolvería entonces la filosofía a sus
vino pálido, fresco y seco pone en orden toda mi vida en dibujos de niño.
Champaña. Se cree que yo bebo: me acuerdo… El menor Mediante la soledad se devuelve al filósofo al destino de
objeto contemplado fielmente nos aísla y nos multiplica. la meditación primigenia. Mediante la soledad tiene la
Ante muchos objetos, el ser que sueña siente su soledad. meditación toda la eficacia de la admiración. La meditación
Ante un solo objeto, el sujeto que sueña siente su primera es al mismo tiempo receptividad total y
multiplicidad. productividad cosmologizante. Por ejemplo, una meditación
Así, en sus mil aspectos, en sus mil intercambios, el matutina inmediatamente es un mundo por despertar. Para
universo y su soñador traducen la acción realizante de una ilustrar el dinamismo ingenuo del ensueño matutino,
meditación activa. La meditación solitaria nos devuelve a la volvamos a leer esta anécdota que a Oscar Wilde le gustaba
primitividad del mundo. Vale decir que la soledad nos pone contar: un santo que se levantaba diariamente mucho antes
en estado de meditación primigenia. Para clasificar el del alba rogaba a Dios para que Dios hiciera salir el sol un
pluralismo enorme de todas las meditaciones sensibles, se día más. Luego, al brillar la aurora, rezaba a Dios para
necesitaría que el filósofo se aislara en cada una de sus agradecerle que hubiera accedido a sus ruegos. Cierta noche,
imágenes. Muy pronto reconocería que todos los aspectos presa de un sueño pesado como plomo, olvidó el santo su
sensibles son pretextos de cosmologías separadas. Pero él va plegaria nocturna. Al despertar, el sol estaba ya muy arriba
demasiado rápido a las grandes síntesis y, en su creencia del horizonte. Entonces, tras un instante de confusión, el
verbal en la unidad del mundo, cree no tener sino un mundo santo se puso a rezar para agradecer a Dios que, pese a la
por proyectar. La proteiforme teatralidad del ensueño culpable negligencia de su servidor, de todos modos hubiera
cosmológico escapa entonces al filósofo de escuela. En hecho salir el sol.
240 DIVAGACIONES DIARIO DEL HOMBRE 241
noche, aprender a ignorar, a ignorarse, olvidar un poco profundo que ennegrecerá los árboles. Dos seres negros en la
mejor antiguas penas, muy antiguas penas en un mundo que existencia negra: una misma nada que respira.
olvida sus formas y sus colores? No ver sino lo negro, no Pero esta sublevación es breve. El ser preso en las
hablar sino al silencio, ser una noche en la noche, ejercitarse ondulaciones de la soledad dichosa y de la soledad
para no pensar más en un mundo que no piensa es sin desdichada ve volverse todas sus “proyecciones”. Todas las
embargo la meditación cósmica de la noche calmada y dichas, todos los ánimos sufren un choque en reciprocidad.
calmante. Esa meditación debería unir fácilmente nuestro ser Sí; este árbol, este tilo que se estremece está lleno de ramas,
mínimo a un universo mínimo. Pero he aquí que yo dudo lleno de hojas aún vivas. ¡y ninguna es para ti! Para que una
incluso por debajo del mínimo de duda, en una duda no sola de sus hojas sea tuya, se necesitaría que la cortara y te la
formulada, en una duda inconsciente, material y filtrante que diera un ser humano. Todo don viene de un tú. El mundo
perturba una materia tranquila. La noche negra ya no es entero no puede dar sin un tú. Los soplos de la noche pasan
claramente negra. En mí, la soledad se agita. La noche te sobre ti. Estás solo, solo en la noche negra. Solo en la noche
niega su soledad evidente y su presencia. Ya no es perfecta negra: frase de novela infantil, frase pobre, frase hecha, ¡y
la homografía de la soledad humana y del cosmos nocturno. tan cierta!
Vuelves a ser presa de una pena antigua, vuelves a la ¿No se relajará el alma romántica que hay en mí? Cuando
conciencia de tu soledad humana, de una soledad que quiere las imágenes se apagan, ¡con qué facilidad se oye un mundo
marcar con una huella imborrable a un ser que sabe cambiar. de murmullos! Esta noche tiene también voces carnales.
Creías soñar y te acuerdas. Estás solo. Estuviste solo. Estarás ¿Cómo no oír en los jardines vecinos ese batir de alas, el
solo. Tu duración es la soledad. Tu soledad es tu muerte amor de las aves nocturnas? ¿Puede el oído negar, como el
misma que dura en tu vida y bajo tu vida. ojo con un parpadeo, ese universo homogéneo del amor
Entonces, sé filósofo, sé estoico. Y vuelve a empezar tu murmurado que reúne casi en la misma voz el lamento
meditación diciéndote a la manera de tu maestro, a mi colérico y agudo de los gatos y el amor demasiado dulce y
manera schopenhaueriana: “La noche es mi soledad, la redondo de las palomas?
noche es mi voluntad de soledad.” También ella es Pero un grito demasiado agudo basta para sacarnos de los
representación y voluntad, mi voluntad nocturna. sueños. De pronto se siente terror. No sé por qué, en mi
Proyectando sus penas sobre el mundo, el hombre disfruta al memoria revive un poema de Supervielle:
menos del gusto salobre de la proyección. Sé pues activo en
el acto de tu nada. Sabe disminuir al mundo y a tu ser con Cimetière aérien, céleste poussière…
intensidad. Comprende que la vida puede disminuir de ser
aumentando de intensidad. La noche activa, la noche
proyectada será entonces un poco de mi ser oscuro y Con toda mi alma, lo traduzco a la imagen auditiva
de mi noche. Ese negro cementerio es aéreo y
244 DIVAGACIONES DIARIO DEL HOMBRE 245
móvil. En el aire negro, llenando el inhumano firmamento Pero si esa contradicción que desencanta al ser se anuncia
en sentido opuesto con el tono del ánimo, ¿por qué cobra
Lorsque le vent vient du ciel otra vida: la soledad desdichada es una soledad dichosa? La
J’entends le piétinement desdicha tiene un sentido, una función, una nobleza. En
De la vie et de la mort qui troquent leurs prisonniers cuanto la mediación dispone a la vez de la idealidad y de la
Dans les carrefours errants. imagen, en cuanto cambia de registro yendo de la convicción
Qué importan entonces las brisas que soplan en este amarga a la convicción valiente, las contradicciones dan
prolongado otoño. Qué importan los mil mensajes de una otras síntesis humanas.
naturaleza en fiesta, el bello ejemplo de los frutos pesados, ¿No es esa fragilidad, esa trasmutación de los valores de
de las flores tardías. Para mí esta noche está vacía y muda. la soledad prueba de que la soledad es el revelador
He perdido la patria de la dicha. Ya no soy sino una soledad fundamental del valor metafísico de toda sensibilidad
para curar. humana? En todos los sentimientos, en todas las pasiones, en
todas las voluntades, la pequeña palabra determina por sí
misma ondulaciones sin fin. Tan comúnmente estudiada por
los filósofos, la duda permanece mucho más exterior a
III
nuestro ser que la impresión de soledad, de abandono y
No hay en ello declaración sobre la naturaleza insensible e desconcierto. Si filosofar es, como creemos, mantenerse no
indiferente, puesto que no había sentimientos por confiar. La sólo en estado de meditación permanente, sino además en
prueba de tu soledad viene en esta hora en que comulgas con estado de meditación primigenia, en todas las circunstancias
la paz de las cosas en una noche apacible. Se sostiene en este psicológicas es necesario reintroducir la soledad inicial.
instante sutil, cruel y claro como el absurdo -¡como una Deslizar en todos nuestros sentimientos la alegría o el temor
flecha!- en que la ondulación de la soledad dichosa y la a la soledad es poner ese sentimiento en la oscilación de un
soledad desdichada viene a concentrarse al punto de que ritmoanálisis. Mediante la conversión de la desesperanza en
condensas lo absurdo del dolor humano en una contradicción: valor, mediante súbitos hastíos de felicidad, nace en el ser
la soledad dichosa es una soledad desdichada. El corazón humano solitario una tonalidad de vida que sucesivamente se
más tranquilo ante la noche más indiferente viene de calma y se aviva, que irrita o regocija. A menudo ocultos por
ahondar su abismo. Por una cosa de nada, a propósito de la vida social, esos ritmos trastornan el ser íntimo. Un
nada, en mi corazón en calma, la palabra pequeña de la metafísico debería descubrir sus resonancias profundas.
soledad, esa sola palabra acaba de cambiar de humor. Son Pero nuestros conocimientos metafísicos del ritmo son
raras, ¡pero qué humanas!, las palabras cuya doble escasos y superficiales. Confundimos los ritmos vivos con
sensibilidad es tan clara, ¡cuyo “valor” es tan frágil!
246 DIVAGACIONES DIARIO DEL HOMBRE 247
las ondulaciones de humor. El ritmoanálisis, 1 cuya función Rilke agregaba: 2 “Y tú, levantas los ojos y me dices: „Oh
consiste en desembarazarnos de las agitaciones contingentes, amigo mío, hombre del pueblo, no has cumplido tu
nos devuelve, por ello mismo, a las alternativas de una vida palabra…‟ En el primer cuaderno de Achicoreas me habías
verdaderamente dinámica. Mediante el ritmoanálisis y prometido luz y consuelo, y aquí nos „pintas la noche y el
gracias a los ritmos profundos bien restituidos, las sufrimiento‟.” Yo replico:
ambivalencias, que el psicoanálisis caracteriza como
inconsecuencias, pueden ser integradas y dominadas. “Hombre del pueblo, ¡Oh amigo mío!, escucha esta
Aparecen entonces los ambivalores, es decir, valores pequeña historia. Dos almas solitarias se encuentran en el
opuestos que dinamizan nuestro ser hacia sus dos bordes mundo. Una de ellas se lamenta e implora consuelo a la
extremos, por el lado de la infelicidad y por el lado de las desconocida. Y la desconocida se inclina hacia ella y
alegrías. La soledad es necesaria para desligarnos de los murmura dulcemente: También para mí es de noche.”
ritmos ocasionales. Poniéndonos frente a nosotros mismos, ¿No es acaso un consuelo?
la soledad nos lleva a hablar con nosotros mismos, a vivir así
una meditación ondulante que repercute por todas partes sus
propias contradicciones y que intenta sin fin una síntesis
dialéctica íntima. El filósofo se contradice mejor cuando está
solo.
IV
¿Es ése entonces tu mensaje de vida, oh pobre sueño
hueco? ¿Es tu destino de filósofo encontrar tu claridad en tus
contradicciones íntimas? ¿Estás condenado a definir tu ser
por sus vacilaciones, sus ondulaciones y sus incertidumbres?
¿Debes buscar tu guía y tu consuelo entre las sombras de la
noche?
Responderé con una página de Rilke.
A su drama Ahora y en la hora de nuestra muerte,
1
En un capítulo de nuestra Dialectique de la durée hemos expuesto los 2
principios del ritmoanálisis de Pinheiro dos Santos. Traducción de J.-F. Angelloz.