Clase Dominical 02-28-10

Tema: Firmeza en Tiempos Difíciles

Texto: Santiago 5:13-18

Intro: Durante la clase pasada mencionamos que las promesas que tenemos de parte del Señor deben de ser un
aliciente para nuestras vidas en medio de los tiempos difíciles. Específicamente mencionamos lo que nosotros
conocemos como la segunda venida del Señor, esta es nuestra mayor esperanza, pues a partir de ese momento
que nos reunamos con El, nuestra aflicción y sufrimientos desaparecerán. Esa bienaventurada esperanza y
manifestación gloriosa de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, debe ser motivo para permanecer firmes. El autor
de este libro hace mención varias veces a la oración, entre una de estas, nos exhorta a orar en los momentos de
sufrimiento y aflicción, aunque la biblia nos manda a orar en todo tiempo. Aunque el tema de la oración es
amplio, veremos algunos aspectos que puedan ayudarnos a considerar la importancia de esta arma tan
poderosa que nos dejo el Señor para usarla en su nombre.

Santiago 5:13-15
13
¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas. 14¿Está alguno
enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre
del Señor. 15Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le
serán perdonados.

La oración ha sido y seguir siendo el fundamento de los hombres de Dios, todos aquellos que han dejado su
huella como siervos de Dios han sido hombres y mujeres de oración. El tiempo que pasaron con El determino lo
fructífero de su llamado, la biblia nos exhorta a orar en todo tiempo y con todo tipo de oración.

1Timoteo 2:1-2
1
Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los
hombres; 2por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en
toda piedad y honestidad.

La exhortación a la que el apóstol nos llama, es a que la oración tenga su preeminencia ante todas las demás
cosas, “ante todo” denota la idea de que este en primer lugar, que sea en tiempo y lugar lo que ocupe el primer
lugar entre las demás cosas. Rogativas, oraciones, peticiones y acción de gracias, aparentan ser sinónimas, sin
embargo difieren de su significado en su idioma original.

Las rogativas, denotan la idea de orar por una necesidad específica, es decir, este tipo de oración esta motivada
por una necesidad la cual se hace por medio de una suplica. El segundo termino con lleva la idea mas
generalizada, es decir, es aquella que abarca toda forma de discurso reverente dirigido a Dios.

El termino “enteuxis” que se traduce por peticiones, denota la idea de encontrarse con alguien que es superior,
y hacerle una petición a favor o en contra de alguna persona, es lo que se traduce como intercesión. La acción
de gracias es lo que completa el ciclo, es la gratitud expresada en palabras, así que, teniendo el derecho de
presentarle nuestras necesidades, e intercesiones, también tenemos el deber de presentarle nuestras acciones
de gracias.

Salmo 50:13-14
14 15
Sacrifica a Dios alabanza, y paga tus votos al Altísimo; E invócame en el día de la angustia; Te libraré, y tú
me honrarás.

Santiago y el autor de los salmos expresan la misma idea, el invocar a Dios en el tiempo de la angustia, en el
momento de la aflicción, del problema, en el momento de la calamidad, en el tiempo difícil Dios nos invita a que
le invoquemos, a que oremos al El. Y promete que el nos librara, el nos libertara y nos sacara de aquella
situación difícil en la cual nosotros estemos pasando. Y nosotros le glorificaremos, le honraremos por su favor.
Salmo 91:14-16
14
Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi
nombre. 15Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré. 16Lo
saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.
En este salmo el autor nos da mas detalles; primeramente hace énfasis que Dios tiene una respuesta favorable
para aquellos que han puesto su amor en El y han conocido su nombre, promete darnos liberación, respuesta a
nuestra oración, y aunque tendremos tiempos de angustia nos promete que El estará con nosotros, nos honrara
por haber confiado en El y nos saciara da larga vida y nos mostrara su salvación.

Santiago 1:6-8
6
Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por
el viento y echada de una parte a otra. 7No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.
8
El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.

La fe significa confianza, por el contrario la duda se manifiesta en la desconfianza, cuando oramos debemos de
hacerlo en fe, no dudando nada, el que duda esta dividido en su pensamiento, esta vacilante, titubea, contiende
en su mente. Por lo cual, todo aquel que duda no recibe lo pedido, es un hombre o mujer de doble animo.

Marcos 11:22-24
22
Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios. 23Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este
monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo
que diga le será hecho. 24Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os
vendrá.

La exhortación del Señor a tener fe en Dios, fue a causa de la higuera que se seco por la Palabra del Señor,
usando un proverbio judío que se usaba para describir a aquellas personas, específicamente a los maestros
sabios, que podían resolver grandes problemas les consideraban removedores de montes, el Señor nos enseña
sobre el poder ilimitado de Dios.

Este se puede manifestar a través de nuestras palabras, cuando oramos debemos de creer que aquello que
estamos declarando nos será hecho si no le damos lugar a la duda, no importa que tan difícil sea aquella
situación, debemos de creer que lo que pedimos en oración lo recibiremos. La clave para el éxito en la oración es
esperar resultados, la duda nos estorba en nuestra vida de oración

Hebreos 11:1-2
1
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 2Porque por ella alcanzaron
buen testimonio los antiguos.

El termino certeza denota una firme y plena seguridad, una realidad, es tener la seguridad de que es suyo y que
es, algo tangible lo que esta esperando, es la prueba, la evidencia de lo que aun no ha visto. Es creer
firmemente, en plena seguridad, es tener la evidencia de lo que se espera aun cuando todavía no lo ve. La
oración y la fe van ligadas y no se pueden separar.

Romanos 10:17
17
Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.

Si nos preguntamos ¿De donde viene la fe? O ¿Cómo puedo tener fe? La respuesta esta en la palabra de Dios,
pues la fe viene por el oír, y el oír por la palabra de Dios. La aplicación de la fe a cualquier situación esta
directamente relacionada al conocimiento que tenemos de Dios. El hombre no puede tener fe para ser salvo
antes de saber que Dios le salvaría.

Entre mas conocemos su palabra y le conocemos a EL mas nos desarrollamos en el crecimiento de nuestra fe, el
tener conocimiento de sus promesas nos da la capacidad de orar de acuerdo a lo que ya nos ha prometido. Así
que la palabra de Dios, la fe y la oración esta fuertemente ligadas.
Mateo 14:28-31
28
Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. 29Y él dijo: Ven.
Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. 30Pero al ver el fuerte viento, tuvo
miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! 31Al momento Jesús, extendiendo la
mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?

Como lo mencione anteriormente la duda es enemiga de la fe y también de la oración, y un aliado de la duda es

el temor, el pasaje anterior nos da una muy buena ilustración de esto, todos los discípulos tuvieron miedo, aun
Pedro, y lo notamos en la inseguridad que tenia al preguntarle al Señor ¿Qué si era el? Jesús respondió a la
petición de su impulsivo discípulo, mandando que este caminara sobre las aguas.

Pedro salio de la barca y comenzó a caminar literalmente sobre un embravecido mar, con la vista puesta en su
maestro, pero cuando quito la vista de el Señor y la puso en las circunstancias, le vino el temor, su vista se fijo en
el fuerte viento y lo mas probable las olas embravecidas y tuvo miedo y el miedo menguo su fe y le entro la duda.

Su miedo y su duda fue en que el estaba caminando sobre las aguas, es decir, en lo que el estaba haciendo, no
dudo del Señor, pues al hundirse rápidamente clamo a El y el Señor lo tomo, y le llamo hombre de poca fe. Y le
pregunto; ¿Por qué dudaste? Pedro tuvo el privilegio en ese momento de moverse en lo sobrenatural, a pesar
de lo que estaba ocurriendo en lo natural.

Pero al ver lo natural, le entro temor y luego duda, y se salio de la esfera sobrenatural para entrar a la natural.
Una vez que el Señor subió con ellos en la barca la tormenta se calmo demostrándoles que el tenia el control de
todas las circunstancias. Así que no debemos someternos a las circunstancias, sino al Señor quien controla las
circunstancias.

Filipenses 4:6-7
6
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego,
con acción de gracias. 7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y
vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

A no estar preocupados por nada es la exhortación del apóstol Pablo, aunque la misma palabra puede denotar
un interés por alguien (2:20) aquí en este contexto, esta preocupación es aquella que nos lleva a la distracción, y
a la perdida de la paz en nuestra vida. Mejor es declarar o manifestar nuestras peticiones, mediante la oración y
la suplica, con acción de gracias.

Así de esta manera cambiamos la preocupación por la paz de Dios, esa paz que esta por encima de todas las
circunstancias, que sobrepasa todo entendimiento, desvanecerá las preocupaciones y ansiedades, guardando
como con una guardia militar, así será guardada nuestra mente y nuestro corazón en Cristo Jesús.