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TESIS

Maestría en Arquitectura
Título:

“CARAL: Aproximaciones
al Orden Primigenio”
Urbanismo mítico - astronómico en la Organización
Espacial del “Complejo Arqueológico de Caral- Supe”

AUTOR
Arqº LUIS ALBERTO MARROQUÍN RIVERA

Director:
Arq. Dr. José Canziani Amico

LIMA – 2010

1
………..Dedicado a mis Padres.

2
Agradecimientos

A la Sección de Posgrado y Segunda Especialización de la Facultad de


Arquitectura, Urbanismo y Artes de la Universidad Nacional de
Ingeniería por otorgarme la beca para realizar los estudios de Maestría.

Al Doctor José Canziani Amico por su asesoría y dirección en el


presente trabajo de investigación

A Emilia Paredes V. por la corrección y revisión del presente texto.

A los arquitectos Willey Ludeña U, Feruccio Marussi C. y


especialmente al Arquitecto Víctor Pimentel Gurmendi por sus
asesorías y apoyo con sus conocimientos directos sobre Caral.

3
RESUMEN
La presente investigación se enfoca en el estudio de las
edificaciones prehispánicas ubicadas en el Complejo
Arqueológico de Caral, en el Valle de Supe, a ciento
ochenta y dos kilómetros al norte de Lima.

El redescubrimiento de este sitio destaca por su extensión,


diversidad y por la particularidad de sus estructuras
monumentales; la datación de diversos textiles encontrados en
las pirámides a través de pruebas radiocarbónicas dan como
resultado una antigüedad próxima a los cinco mil años
(dataciones entre 3,000 y 2,600 años antes de nuestra era),
determinando así que conforman uno de los complejos
arquitectónicos más antiguos descubiertos en América.

Oficialmente el estudio de las edificaciones prehispánicas de


Caral está a cargo del Proyecto Especial Arqueológico
Caral-Supe, (en adelante PEACS), unidad ejecutora del INC,
que ha planteado un programa multidisciplinario de
investigación, exploración, conservación y puesta en valor que
viene operando desde 1994 bajo la dirección de la arqueóloga
Ruth Shady Solís. Este trabajo es difundido permanentemente
a través de publicaciones, congresos, encuentros científicos y
en su portal en Internet (www.caralperu.gob.pe)

El avance y consolidación de la zona arqueológica del Valle de


Supe en está última década ha sido trascendente, sin embargo
existen aún innumerables materias por explorar en profundidad
sobre Caral, por lo que la presente investigación aborda desde
el marco académico de la Escuela de Postgrado de la
Facultad de Arquitectura , Urbanismo y Artes de la Universidad
Nacional de Ingeniería el estudio urbanístico y análisis del
modelo de organización espacial para las edificaciones
redescubiertas en el “Complejo Arqueológico de Caral- Supe”.

4
Desde un enfoque científico se realiza una aproximación al
pensamiento mítico astronómico de la época y su influencia
como variable determinante en las decisiones para la
organización de la arquitectura en Caral.

El estudio establece correlaciones entre arquitectura y


astronomía prehispánica a partir del entendimiento del
concepto y observación del tiempo de los antiguos pobladores
mediante el análisis de edificaciones ceremoniales y sus
componentes arquitectónicos que tuvieron funciones
colaterales de observación de la bóveda celeste, calendarios
tectónicos que sirvieron como indicadores estacionales (inicio
del invierno o año nuevo andino) y ciclos lunares para la
eficiente administración de la producción agrícola y la
organización de faenas de extracción de recursos marinos.

Como parte integral del documento se promueve un enfoque


metodológico poco aplicado en nuestro país para
investigaciones de asentamientos arqueológicos prehispánicos,
a partir de un análisis que relaciona arquitectura y simbolismo
astronómico, mediante la exploración y búsqueda de patrones
urbanos y componentes arquitectónicos conectados con
eventos celestes, para determinar si existió una conexión
mítica del lugar asociada a la adoración de las luminarias del
cielo, consideradas en aquella época manifestación tangible de
sus dioses tutelares.

5
ÍNDICE

1.00 PLANTEAMIENTO DEL ESTUDIO


1.01 Ubicación y descripción geográfica………………… 7
1.02 Estado de conservación…………………………… 10
1.03 Antecedentes e investigaciones previas…………… 11
1.04 Formulación del problema específico……………… 23
1.05 Definición de Objetivos………………………………. 37
Objetivos Generales
Objetivos Específicos

1.06 Justificación teórica y metodología………………… 38


1.07 Alcances y limitaciones……………………………... 38
1.08 Metodología de la Investigación…………………… 39
1.09 Hipótesis……………………………………………… 43
2.00 MARCO REFERENCIAL
2.01 Marco teórico
2.01.01 Cosmovisión del mundo prehispánico…. 44
2.01.02 Estudio de la astronomía del pasado…. 58
2.01.03 Nociones de astronomía científica.……. 66
2.01.04 El calendario y la observación de
los ciclos naturales…………………..… 92

3.00 DECODIFICANDO CARAL


3.01 Componentes Urbano – arquitectónicos…. 99
3.02 Arquitectura y pensamiento mítico………….. 123
3.03 Concepción Espacio - tiempo……………… 125

4.00 CONCLUSIONES
 Conclusiones finales……………………….. 127

5.00 FUENTES DE INFORMACIÓN


Referencias bibliográficas………………………. 133

6
1.00 PLANTEAMIENTO DEL ESTUDIO

1.01 UBICACIÓN Y DESCRIPCION GEOGRAFICA

El territorio peruano, posee una geografía accidentada:


hacia el Oeste tiene una desértica franja costera
colindante con el Océano Pacífico, que varía entre los
21 y 180 km de anchura con ocasionales valles en las
desembocaduras de los ríos que nacen en los deshielos
de una cordillera con escarpadas montañas que llegan a
superar los 6,000 metros de altitud y separa
longitudinalmente en dos el territorio del país con la
densa Selva amazónica hacia el Este.
“El Complejo Arqueológico de Caral-Supe” está
localizado en la latitud: 10°53’Sur y en la longitud:
77°31’Oeste del Meridiano de Greenwich, a una altitud
de 350 msnm, y a una distancia de 32 km del litoral
marino, abarcando una extensión de 66 Ha en el sector
del Valle Medio de Supe. Este forma parte de la región
Norcentral de la costa peruana con los valles de Huaura,
Pativilca y Fortaleza. El sistema de cuatro valles está
geográficamente integrado por la proximidad física y los
rasgos topográficos, con quebradas accesibles a los
pobladores locales que los conectan entre sí (gráfico
no. 1).
La cuenca del valle de Supe posee peculiaridades
geográficas y bondades climáticas que determinaron las
condiciones para que hace aproximadamente cinco mil
años pudiera desarrollarse en el lugar una comunidad
con un complejo nivel de conocimientos. Las pirámides
de Caral se asientan en una elevada y árida terraza
aluvial fuera del alcance de las crecidas del río,
protegida por la estribación de la cordillera andina, con
dunas y cerros de cumbres rocosas.

7
Gráfico nº 1 Localización del “Complejo Arqueológico de Caral – Supe”

8
Los fértiles valles colindantes donde se desarrolló esta
urbe primigenia fue la principal fuente del cual los
antiguos pobladores extrajeron sus alimentos, junto con
la proximidad del océano la cual les permitió
complementar una dieta que incluía recursos
alimenticios extraídos del mar (1).

Gráfico nº 2 Vista panorámica del “Complejo Arqueológico de Caral” ubicado


sobre una terraza árida elevada colindante con el río Supe y áreas fértiles del
valle.(2)

1
SHADY Ruth (2007) La alimentación de la Sociedad de Caral-Supe en los
orígenes de la civilización. En: Seminario Historia de la Cocina Peruana,
Universidad de San Martín de Porres, Lima, pp. 23-43
2
Panorámica realizada desde globo aerostático por el fotógrafo Christopher
Kleinhege publicadas en . “Caral , the firts civilization in the America” ,
USMP 2008.

9
1.02 ESTADO DE CONSERVACIÓN
Después de transcurridos cinco mil años, llama notablemente la
atención el excelente estado de conservación encontrado para
realizar la investigación de una remota urbe hecha de barro y
piedra. Esto se debe a diversos factores que contribuyeron en
su preservación:

a) Factores antrópicos
a.1. Prehispánicos.- Los antiguos pobladores de Caral
enterraron sus edificios, posiblemente como parte de
una cosmovisión del universo en la que las
edificaciones al igual que los seres humanos,
culminaban su ciclo de vida y eran cubiertas o
enterradas, pasando desapercibidas por grupos
humanos posteriores al ser confundías como
promontorios naturales.
a.2. Vandalismo.- El lugar estuvo protegido de
alteraciones por factores humanos, debido a la
ausencia de cerámica y orfebrería, condición que no
despertó el interés de vándalos, huaqueros y
reducidores.
a.3 Agricultura.- La naturaleza árida del suelo impidió la
destrucción de la zona arqueológica, evitando la
ampliación de las actuales áreas de cultivo, por parte
de agricultores locales en el valle de Supe.

b) Factores naturales
b.1 Sismos.- La configuración estructural piramidal de
las edificaciones monumentales favoreció su
integridad contra los embates de cientos de sismos
y terremotos propios de la zona sísmica peruana.
b.2 Inundaciones.- Todo el Complejo arqueológico al
estar situado en una meseta elevada salvó de
inundaciones estacionales del río Supe, por la

10
destrucción encontrada, se reconoce que al menos
un remoto aluvión dañó la zona frontal de la
“Pirámide del Anfiteatro”, posiblemente muchos años
después de haber sido abandonado el sitio.

1.03 ANTECEDENTES E INVESTIGACION PREVIAS

1.03.01 Inicios del siglo XX


Los primeros estudios científicos del Valle de Supe
fueron efectuados en 1905, por el arqueólogo alemán
Max Uhle, quien registró en la zona del litoral el
asentamiento Aspero, lugar de pescadores del
Arcaico Tardío y Puerto Supe, actualmente
desaparecido bajo obras modernas. El valle también
era conocido por otros asentamientos arqueológicos
importantes como: Chimo Cápac (Horizonte Medio) y
San Nicolás (Horizonte Medio, Intermedio Tardío,
Horizonte Tardío), uno de los objetivos de las
exploraciones de Max Uhle en Supe ,fue la búsqueda
de vasijas, con la intención de desarrollar una
cronología cerámica de la costa central peruana. Su
búsqueda no halló resultado en aquel entonces y hoy
sabemos que fue debido a que los lugares explorados
pertenecían a períodos precerámicos.

Max Uhle (1865 – 1944) Julio C. Tello (1880 – 1947)

11
En 1937 Julio C. Tello exploró también la zona de
Áspero, pero no existe evidencia ni registro sobre si
se adentró en el Valle de Supe para explorar otros
asentamientos arqueológicos coetáneos del lugar.
Respecto a Caral y otros sitios arqueológicos al
interior del valle de Supe, fue el Doctor norteamericano
Paul Kosok el primero en dar a conocer existencia de
sitios con arquitectura monumental, visitó el lugar con
su colega Richard Schaedel hacia fines de la década
del 40, utilizando fotografías aéreas Kosov logra ubicar
algunos asentamientos arqueológicos importantes en
la región. Durante la visita a uno de ellos llamado
“Chupacigarro Grande” (como se le denominaba
anteriormente al Complejo Arqueológico de Caral)
realizó excavaciones y concluyó que sería difícil
ubicarlo cronológicamente mientras no se encuentren
evidencias de cerámica (3).
En 1954 Áspero fue excavado nuevamente por los
arqueólogos Gordon Willey y John Corbett, quienes
tampoco encontraron restos o evidencia de cerámica
en el lugar, asumiendo que se trataría de un
asentamiento coetáneo a un cementerio cercano al
lugar y que la ausencia de cerámica sería producto de
distinciones de tipo funcional.
Fue recién en 1970 que las excavaciones realizadas
en el mismo lugar por el arqueólogo norteamericano
Robert A. Feldman(4), proporcionaron evidencias para
determinar que el sitio pertenecería a un período
acerámico y que la carencia de fragmentos de vasijas
se debía justamente a esa gran antigüedad.

3
Kosok, Paul (1965) “Life, land and water in ancient Peru”. Nueva York:
Long Island University Press
4
Feldman, Robert (1980) “Aspero, Peru: Architecture, Subsistence
Economy and other Artifacts of a Preceramic Maritime Chiefdom”.
Tesis. Cambridge: Harvard University

12
1.03.02 Inventario, catastro y delimitación del patrimonio
arqueológico del Valle de Supe
En Junio de 1978 el arquitecto Carlos Williams y el
arqueólogo Francisco Merino iniciaron el estudio
más importante de registro, prospección y análisis de
patrones urbanos de los asentamientos arqueológicos
del Valle de Supe, este estudio comprende
investigaciones bibliográficas, fotografías aéreas y
trabajo de campo. En el informe de dos tomos
“Inventario, Catastro y Delimitación del Patrimonio
Arqueológico del Valle de Supe” entregado en 1979 al
“Instituto Nacional de Cultura” contienen y describen
de forma detallada 98 sitios arqueológicos con sus
respectivos, croquis detallados , nombres locales
conocidos registrados en la literatura especializada en
un área de exploración que abarca los 120 kilómetros
cuadrados. Gracias a este trabajo se tomó conciencia
por primera vez de la extraordinaria concentración de
centros ceremoniales con pozos ceremoniales
hundidos en el pequeño valle de Supe.

Gráfico nº 3: Catastro del Patrimonio arqueológico en el Valle de Supe realizado


por Williams y Merino en 1979 (Fuente: Revista Waka XXI Nº 4, UNI ,2006)
13
Estudios sobre patrones de asentamiento en la costa
Central Las investigaciones exploratorias del
arquitecto Carlos Williams (5) publicadas en diversos
medios escritos y ponencias se desarrolla
enfocándose en los modelos de organización espacial
y de las culturas prehispánicas de toda la Costa
Central, cabe señalar las siguientes:

1 La difusión de los pozos ceremoniales en la costa


peruana (1972)

2 Centros ceremoniales en los valles del Chillón,


Rimac y Lurín (1971).

3 Complejos de pirámides con planta en U: patrón


arquitectónico de la costa Central (1978-1980)

4 Un esquema para la arquitectura monumental


temprana en la costa central del Perú (1985)

5 Exploraciones y excavaciones en el valle Sechín


y Casma (1977)

En el articulo “Complejos de Pirámides con Planta en U:


Patrón Arquitectónico de la Costa Central“ publicado en la
Revista del Museo Nacional (Lima 1978-1980) Carlos
Williams escribe:
……”Un rasgo común a todos estos complejos de
pirámides es su orientación nor-noroeste y este.
Para cada valle la orientación de las estructuras es
prácticamente la misma, con una variación de muy
pocos grados conforme se avanza de valle a valle,
del Sur hacia el Norte, la orientación gira hacia el
este. Variación cuya significación se desconoce. En
cualquier caso resulta siempre paralelo al eje del
Río”……..
………..”El paralelismo de los complejos para cada
Valle debió haberse obtenido mediante
observaciones de carácter astronómico” …….

5
El arquitecto José Canziani ha realizado una valiosa compilación de su obra en
el libro “Arquitectura , Urbanismo y Arqueología en la Obra de Carlos
Williams” Instituto de Investigación FAUA, UNI , Lima 2008

14
1.03.03 EL PROYECTO ESPECIAL ARQUEOLOGICO CARAL–
SUPE (PEACS)
En el año 1994 se realiza un reconocimiento
arqueológico con el apoyo del Instituto Nacional de
Cultura y la National Geographic Society, bajo la
conducción de la Dra. Ruth Shady, se identifican 18
asentamientos arqueológicos, pero se continúa sin
saber a qué período exactamente pertenecen, dos
años después se reinicia un programa de
excavaciones en Caral, nuevamente con el apoyo de
National Geographic Society. Se escoge Caral por ser
uno de los asentamientos más grandes y mejor
conservados. Por primera vez se confirma que Caral
data del Precerámico.

En el año 1996 se iniciaron las excavaciones en el


asentamiento arqueológico de Caral, el cual fue
elegido porque era uno de los más extensos, por la
distribución ordenada que mostraba su traza urbana y
por su variada arquitectura monumental.

En el año 2,000 se marca un hito importante en la


arqueología mundial con la noticia de la antigüedad de
Caral, a través de pruebas radio-carbono aplicados a
textiles hallados en las pirámides, los cuales fueron
llevados a los Estados Unidos y Alemania para sus
análisis, donde se determinó en ambos países que las
fibras orgánicas de los tejidos hallados en Caral
tendría una antigüedad próxima a los 5,000 años,
convirtiéndose en el primer foco civilizatorio del
continente americano6.

6
Shady,Ruth,Jonathan Hass y Winifred Creamer (2001) "Dating Caral, a
Preceramic Site in the Supe Valley on the Central Coast of Peru". En
Science, 292(5517), pp. 723-726

15
El equipo de investigadores del PEACS expone que
los antiguos pobladores disponían de conocimientos
en los campos que hoy conocemos como
matemáticas, astronomía, agronomía e ingeniería que
les sirvieron de base para ubicarse estratégicamente
en el “Valle medio” y se establecer un Estado
primigenio , apoyándose en la religión como medio de
afirmación y cohesión social.

Gracias a las excavaciones y hallazgos de enseres e


instrumentos cuya catalogación e información
analizada y procesada ha sido presentada en
exhibiciones abiertas al público y difundida en las
numerosas publicaciones del PEACS ( 7), sabemos que
los antiguos habitantes de Caral desarrollaron también
un pensamiento complejo que se manifestó en:

1 Habilidades musicales y capacidad para la


fabricación instrumentos como sonajas, flautas y
antaras, las que fueron utilizadas en la celebración
de rituales.
2 Conocimientos matemáticos y uso de
herramientas y técnicas como el quipu para el
conteo y administración de los recursos
productivos.
3 Manifestaciones religiosas y artísticas reflejadas (8)
es estatuillas humanas, tejidos elaborados,

7
SHADY Ruth y Carlos LEYVA, (2003) La ciudad sagrada de Caral-Supe.
Los orígenes de la civilización andina y la formación del Estado prístino
en el antiguo Perú. Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe, Lima.
8
SHADY Ruth, Pedro NOVOA y Dolores BUITRÔN (2001) Artefactos
simbólicos de Caral-Supe y su importancia en la tradición cultural
andina. En Boletín del Museo de Arqueología y Antropología de la
UNMSM, año 4, nº 4, Lima, pp. 87-94

16
adornos rituales y accesorios que eran utilizados
por una elite o casta sacerdotal.
4 Técnicas constructivas avanzadas y elaboración de
herramientas para la edificación de monumentales
pirámides.

Gráfico nº 4 Objetos hallados durante las excavaciones de las pirámides (fuente: PEACS)
1) Tupu tallado en hueso 2) Adorno con grabado en espiral en concha marina.
3) Cesto de fibra vegetal 4) Símbolo religioso conocido como “Ojo de Dios”
5) Quipu de fibra vegetal 6) Flautas fabricadas con huesos de pelícano
17
En Caral no se halló evidencia de fabricación de
armas, testimonios o rastros de haber organizado un
ejército o liderado una guerra sobre la que dejar
constancia. Para la Arqueóloga Ruth Shady en el
territorio hubo una amplia variedad de adaptaciones
culturales, sus estudios demuestran que el desarrollo
de la cultura Supe se debió a la creciente
complejización de los sistemas sociales que se
consolidaron en las regiones del área norcentral del
actual Perú, estas sociedades habían alcanzado
excedentes productivos y un nivel de organización que
les permitía cierta especialización laboral, la
construcción de edificios públicos y actividades de
intercambio en toda la región, sus deducciones se
inclinan a concluir que los pobladores del antiguo
valle de Supe lograron sintetizar distintas experiencias
adaptativas y aprovecharon en su beneficio el
excedente productivo de las poblaciones del área. La
cuantiosa inversión de trabajo en obras monumentales
y su permanente remodelación fue sustentada por la
producción de las poblaciones de los otros valles que
el estado local captó.

18
Cronología de Caral
La secuencia de ocupación del asentamiento de Caral
abarcó aproximadamente 1,200 años que los
arqueólogos del PEACS dividen en seis períodos (9):
A) Período remoto (3,000 – 2,600 a.C.)
Primeros asentamientos nucleados y habilitación
de tierras de cultivo con edificaciones menores.
B) Período antiguo (2,600 - 2,300 a.C.)
Se inicia la construcción de edificaciones
monumentales, grandes explanadas y plazas.
C) Período medio inicial (2,300 - 2,200 a.C.)
Reestructuración del diseño del lugar, ampliación
de edificaciones y plataformas.
D) Período tardío inicial (2,200 - 2100 a.C.)
Entierro de algunos elementos y componentes
arquitectónicos.
E) Período tardío final (2100 – 1,800 a.C.)
Remodelación de edificios públicos, entierro y
abandono del lugar.
Para el profesor José Canziani Amico, arquitecto e
investigador del Departamento de Arquitectura (PUCP)
las construcciones y edificaciones en Caral son una
extraordinaria evidencia acerca de una temprana
manifestación de un incipiente urbanismo, sin embargo,
el complejo arqueológico de Caral no reúne los
elementos necesarios para ser denominado ciudad, al
respecto cabe mencionar que las investigaciones en le
Valle de Supe aun están en una fase inicial como para
determinar estas categorías ,con el avance de las
excavaciones dispondremos de evidencias sobre su
desarrollo para establecer exactamente su categoría.

9
Ruth Shady Solís. Daniel Cáceda Guillén. Aldemar Crispín Balta. Marco Machacuay
Romero. Pedro Novoa Bellota. Edna Quispe Loayza. (2009.) “Caral, la Civilización
más antigua de las Américas. 15 años develando su historia” ,Lima,

19
Estado actual de las excavaciones
Los procesos de excavación, investigación y
restauración de edificios monumentales y anexos
residenciales menores continúan en el Valle de Supe a
cargo del PEACS (Ver gráfico nº 4).

Dentro de este conjunto de edificios, se encuentran en


fase avanzada de restauración y consolidación las
siguientes edificaciones:

a) Edificaciones monumentales:
 Pirámide Mayor ( Sector E )
 Pirámide Menor ( Sector G )
 Pirámide de la Galería ( Sector H)
 Pirámide de la Huanca ( Sector I)
 Pirámide del Anfiteatro ( Sector L)
 Pirámide de la Cantera ( Sector B)
 Pirámide Antigua ( Sector C)

b) Las edificaciones menores:


 Anexos residenciales y edificaciones poli
funcionales dispersas por todo el complejo
(Sectores K / F / M / N / R / S / T / R / U / V )

20
Gráfico nº 5 : Levantamiento arqueológico realizado por el “Proyecto
Especial Arqueológico Caral- Supe” realizado en el 2007

21
Gráfico nº 6.- ISOMETRIA DE LAS EDIFICACIONES DE CARAL EN NIVEL
AVANZADO DE CONSOLIDACION Y RESTAURACION (Fuente: PEACS- 2008)

Pirámide Mayor (Sector E)

Pirámide de la Galería (Sector H) Pirámide Menor (Sector G)

Pirámide de la Huanca ( Sector I) Anexos residenciales periféricos

Pirámide del Anfiteatro. (Sector L) Pirámide de la Cantera (Sector B)

22
1.04 FORMULACIÓN DEL PROBLEMA ESPECÍFICO
Hasta la fecha no se ha definido un modelo integral para
explicar y comprender las estrategias de ocupación espacial
de las edificaciones prehispánicas redescubiertas en Caral, el
foco civilizatorio más antiguo del continente americano. Si bien
es cierto que las excavaciones en el Valle de Supe están en su
fase inicial, existe un número significativo de edificaciones en
un estado de conservación y restauración adecuadas para
iniciar un estudio urbanístico del sitio.

Un aspecto aún no abordado por los investigadores gira en


torno a determinar cuáles fueron las variables que
predominaron en la planificación y ordenamiento de la
arquitectura del lugar, en una época en la que el pensamiento
mágico religioso era el núcleo vital de la antigua sociedad en
Caral y dirigía un enorme esfuerzo humano y destinación de
recursos para la edificación de sus monumentales edificios y
pirámides ceremoniales.

1.04.01 Aporte interdisciplinario.- El estudio del pasado


prehispánico desde una visión holística por parte de
arquitectos y urbanistas genera un efecto sinérgico al
complementarse con el enfoque del arqueólogo para
manipular, interpretar datos y clasificar vestigios.
Esta aproximación para el estudio de edificaciones del
pasado, nos permitiría integrar variables adicionales
(urbanísticas, espaciales, funcionales, formales,
semiológicas, programáticas, tecnológicas,
ambientales, etc.) que se traducen de manera sintética
en el diseño de los edificios, al margen de la fecha de
su realización, permitiéndonos aproximarnos desde
otra perspectiva hacia posibles explicaciones que
develen las intenciones o motivaciones de sus
constructores originales.

23
La aproximación arquitectónica al estudio de las
edificaciones en Caral desde nuestro enfoque
disciplinario, que incorpora en su labor el control de
variables objetivas y subjetivas, permitiría también
proponer explicaciones para acercarse al
entendimiento del complejo arqueológico en el ámbito
de la arquitectura ceremonial, el simbolismo y sus
posibles conexiones con el pensamiento mágico de la
época, en una sociedad en que la cosmovisión
sacralizada del universo jugaba un rol central en todas
sus actividades y que podrían haber intervenido
predominantemente en las decisiones de sus
pobladores para el arreglo de componentes
arquitectónicos y emplazamiento de algunas de las
edificaciones.

Es pertinente señalar que la relación entre astronomía,


simbolismo y arquitectura para la celebración de
rituales ya ha sido demostrada en estudios de culturas
que florecieron siglos después de Caral y en diferentes
latitudes del planeta, por lo que la presente
investigación ingresa a este campo aún no abordado
por los arqueólogos del PEACS el cual arrojaría
nuevas luces sobre las motivaciones para la
disposición y arreglo de algunas de las pirámides
ceremoniales del complejo arqueológico.
El estudio de los 20 asentamientos descubiertos del
Valle de Supe desde una perspectiva regional
permitiría también aproximarnos al entendimiento de
las posibles estrategias de ocupación geográfica,
donde Caral posiblemente fue el núcleo religioso de
una red de asentamientos menores a lo largo de este
valle , interrelacionados también con otros centros
poblados.

24
1.04.02 Selección de edificaciones para el análisis del
Complejo Arqueológico Caral – Supe

El complejo arqueológico de Caral está actualmente


dividido en 17 sectores de estudio que abarcan 66 Ha,
(Ver gráfico nº 4) donde están comprendidos edificios
públicos, conjuntos residenciales y una zona de
periferia. Las edificaciones de Caral siguen en proceso
de excavación, aún falta desenterrar un porcentaje
menor de edificaciones, entre ellas la Pirámide Antigua
que tiene la mayor envergadura en todo el complejo.

Para el presente estudio se analizarán las


edificaciones que se encuentran en un nivel avanzado
de excavación, consolidación y restauración, las que
agrupamos en dos tipologías principales:

a. Edificaciones monumentales:
a.1 Pirámides escalonadas
a.2 Pirámides con pozos circulares ceremoniales

b. Edificaciones menores (ocupan áreas pequeñas y están


dispersas por todo el complejo):
b.1 Edificaciones polifuncionales.
b.2 Anexos residenciales.

25
1.04.03 Diagnóstico preliminar de patrones urbanos
Observando el conjunto de las ruinas del “Complejo
arqueológico de Caral”, gracias al acceso a imágenes
satelitales de la zona, apreciamos que los vestigios de
edificios se ubican aproximadamente a 200 m. a lo
largo del cauce del río Supe, posiblemente buscando
algún ordenamiento casi en paralelo con este, en el
sector colindante se aprecian áreas cultivadas y
zonas de abundante vegetación en ambas márgenes
ribereñas. El complejo arqueológico está emplazado
sobre una terraza árida, rodeado por colinas y
elevado sobre el nivel del río, protegido de
inundaciones estacionales. Se percibe una dirección
para la accesibilidad espacial a la zona en el eje Este-
Oeste condicionada quizás por la topografía del lugar,
que probablemente estaría en relación a la conexión y
flujo de pobladores en la red de 19 asentamientos
contemporáneos a Caral, ubicados en el valle a lo
largo del cauce del río Supe.
En la imagen satelital (Gráfico nº 7) no se percibe un
orden o modelo evidente en la organización del lugar,
ni en el emplazamiento de las diferentes estructuras
que nos guiara a un patrón de ocupación reconocible;
sin embargo al trazar tentativamente ejes axiales en
las pirámides Menor, Pirámide de la Galería y
proyectar un eje paralelo a los muros aterrazados de la
Pirámide Mayor observamos que estas construcciones
presentaban un relativo paralelismo entre ellas.
Esta observación nos condujo a un punto de partida
para iniciar la búsqueda de un patrón de
ordenamiento desconocido para nosotros y quizás
evidente para los pobladores de aquella época.

26
Dirección y sentido
del cauce de río Supe

Eje Axial para


Pirámide Menor

Eje Axial en
Pirámide de
la Galería

Eje longitudinal de
Pirámide Mayor

500 metros

Gráfico nº 7 Foto satelital del “Complejo Arqueológico de Caral Supe” tomada en el


2009 en la cual realizamos trazados preliminares paralelos en ejes de tres edificaciones.
(Fuente: Google Earth 5.1.3533.1731)

27
1.04.04 Nacimiento y evolución de asentamientos humanos
Los criterios universales usados en el pasado y en distintas
latitudes para la elección de lugares donde iniciar un proceso de
asentamiento humano radicaban en la convergencia de múltiples
factores, según los que se ponderaban elementos simbólicos,
funcionales, técnicos y principalmente de habitabilidad del lugar,
destacan:
1) Cercanía a una fuente natural de agua dulce (ríos, lagos,
manantiales, etc.).
2) Cercanía a tierras con condiciones favorables para el
desarrollo de actividades agrícolas y obtención de recursos
alimenticios.
3) Clima, suelo y relieve propicio para la construcción de
edificaciones.
4) Accesibilidad y conexión con otros asentamientos humanos.
5) Consideraciones de protección contra probables invasores.
6) Terrenos ubicados en zonas protegidas contra agentes
naturales destructivos (principalmente inundaciones
estacionales y huaycos.).
Paralelamente a estas consideraciones para la habilitación del
lugar, los arqueólogos, antropólogos e historiadores coinciden en
afirmar que en la mentalidad asociativa del hombre arcaico
intervenían decisiones de carácter simbólico, mítico y religioso
para el ordenamiento del lugar habitado y de las edificaciones
como parte de una cosmovisión sacralizada del universo, en
conexión con eventos astronómicos y sus dioses tutelares.

Estrategias de ocupación territorial en Caral


El complejo de edificaciones de Caral (350 m.s.n.m.) y la elección
del lugar encaja con los parámetros universales mencionados
anteriormente al estar situado en el Valle Medio, sobre una
terraza aluvial elevada cerca de una fuente de agua dulce que

28
representa el río Supe (10 ) y a la vez protegida de inundaciones
estacionales, que permiten construir edificaciones sin riesgo de
colapso. El lugar está rodeado de áreas favorables para la
siembra de diversos productos alimenticios en la zona del Valle
Medio inferior de la cuenca Supe (Plano nº 1), punto central del
valle y en conexión con los 19 asentamientos menores aledaños.
Todo el valle de Supe fue en el pasado y es actualmente un
ecosistema propicio para el cultivo de tubérculos, maíz y
algodón; este último insumo base encontrado en las excavaciones
y utilizado para la fabricación de vestimentas, redes y cestas.
Finalmente Caral se encuentra cerca del mar (a 26 Km del litoral)
en conexión con dos asentamientos costeros coetáneos (Aspero
y Piedra Parada) que proveían recursos marítimos para una
nutrición balanceada, estas premisas se desprenden del estudio
de los restos de numerosas especies marinas, redes de pesca y
fibras vegetales descubiertos por los arqueólogos en el interior de
las pirámides excavadas en Caral y otros asentamientos menores
del valle. Sin embargo, todavía existen algunas preguntas sin
responder para el estudio del Complejo Arqueológico de Caral y
están relacionados a la inexistencia de una arquitectura militar y
ausencia de hallazgos de armamento defensivo en las
excavaciones. Con respecto al enfoque organizativo del lugar
como consecuencia de la probable influencia del pensamiento
mágico que poseía un rol central en las sociedades del pasado, el
análisis de posibles patrones de orientación y alineamientos
vinculados con eventos astronómicos arrojaría luces sobre otros
factores para entender e interpretar el ordenamiento espacial del
Complejo Arqueológico de Caral, que probablemente se haya
manifestado en la disposición específica de algunas edificaciones
monumentales.

10
Una característica de los ríos de la costa central peruana es su caudal estacional,
siendo torrentoso de Diciembre a Marzo y seco o casi seco de Junio hasta Agosto.

29
30
1.04.05 Alineamiento y paralelismo de edificaciones
monumentales

A partir de trazados longitudinales realizados sobre el plano del


levantamiento topográfico elaborado por el PEACS (Plano no. 1)
y con el apoyo de programas informáticos (CAD), observamos
un posible paralelismo entre los ejes axiales de las Pirámides
Menor y la Pirámide de la Galería con el eje longitudinal de
la Pirámide Mayor.(ver gráfico nº 8)
Utilizamos como referencia el eje geográfico Norte-Sur para
realizar mediciones angulares de los ejes axiales de la Pirámide
Menor, la Pirámide de la Galería y los muros aterrazados de la
Pirámide Mayor, donde encontramos en forma reiterada la
orientación azimutal aproximada de 294° hacia el Noroeste,
tomando en consideración la orientación de las escalinatas
principales de la Pirámide Menor y de la Pirámide de la Galería.

Gráfico nº 8

31
1.04.06 Probable orientación astronómica de tres edificaciones
monumentales
Una característica remarcable de estos alineamientos paralelos
para los ejes axiales de la Pirámide Menor, la Pirámide de la
Galería y los muros aterrazados de la Pirámide Mayor, es que
prácticamente coinciden con la proyección azimutal (11) del ocaso
del disco solar con el horizonte meridional durante el solsticio de
invierno (22 de Junio) para la latitud geográfica donde se ubica
Caral con una precisión de +20 minutos de arco (12), en probable
relación a fines astronómicos y ceremoniales en una fecha
significativa en el ciclo de cambio de estación (ver gráfico nº 9).

De comprobarse y validarse estos alineamientos, serían el primer


indicio importante para encontrar un ORDEN y SIGNIFICADO en
la organización del sitio, que denotaría además un conocimiento
avanzado por parte de sus pobladores en la planificación del
lugar.

Esta información de la correlación de datos astronómicos y


alineamientos de edificaciones fue asistida con programas
informáticos para arquitectura, que reproducen el movimiento del
disco solar durante todo el año y configurada con el apoyo de
equipos de GPS para la latitud de Caral, con el objetivo de
analizar y de aproximarse con los menores márgenes de error a
posibles alineamientos y correlaciones entre astronomía y
arquitectura del “Complejo Arqueológico de Caral”.

11
Datos obtenidos utilizando el software Ecotech ( versión 5.1), utilizado por
arquitectos para el estudio de asoleamiento de edificios y que proporciona
información detallada sobre el desplazamiento del Sol durante el año.
12
La imprecisión de minutos de arco estaría asociada al movimiento de eje terrestre
que varía 3º grados cada 40,000 años, que fueron enunciados en la Teoría
de Milankovitch generando un movimiento cíclico que será necesario ajustar a la
época en que fueron construidas las pirámides de Caral.

32
Paralelismo de ejes principales en
tres edificaciones monumentales
asociadas al solsticio de invierno

Gráfico nº 9 : Alineamientos con el ocaso del Solsticio de invierno

33
Investigando tradiciones ancestrales comprobamos que en
diferentes latitudes del planeta, el ser humano ha dejado
evidencias de haber usado como referencia la bóveda celeste,
objetos monolíticos y accidentes geográficos para ubicarse en
el tiempo y en el espacio. Esta habilidad se convirtió en una
tradición constructiva en diferentes civilizaciones y fue
evolucionando en objetos y herramientas como gnómones,
menhires, dólmenes, obeliscos, pirámides trazados e
inscripciones alusivas al sol, la luna, las estrellas, etc.

En el Perú un testimonio directo del que disponemos sobre los


conocimientos y prácticas astronómicas de las culturas
prehispánicas es el que expone Garcilaso de la Vega Inca en
dos capítulos de la primera parte de sus "Comentarios Reales
de los Incas" (1609). Garcilaso tuvo acceso a la información
que manejaban los Amautas del Incanato sobre la astronomía.
Fue testigo directo de las construcciones para hacer las
determinaciones de los tiempos de los solsticios y equinoccios.
En esta obra (Cap. XXII) nos comenta que:

…. “alcanzaron los equinoccios y los solemnizaron muy


mucho", para determinar los cuales tenían columnas
de piedra riquísimamente labradas, puestas en los
patios o plazas que se levantaban ante los templos del
Sol" […..] Estas columnas estaban en el centro de un
cerco redondo muy grande en el cual marcaban con un
hilo una raya de oriente a poniente"[…..] “Por la
sombra que la columna hacia sobre la raya veían que
el equinoccio se acercaba"[…..] “Cuando la sombra
tomaba la raya de medio a medio desde la salida hasta
la puesta del sol y no había sombra al mediodía,
decían, que ese día era el equinoccial". "Por lo cual
adornaban las columnas con flores y yerbas olorosas,
pues en ese día el sol se asentaba con toda su luz, de
lleno y adoraban al sol con muchos goces y
ostentaciones".

34
1.04.07 Preguntas de la investigación
Para el presente estudio se han separado en tres los
componentes para el análisis espacial del complejo
Arqueológico de Caral – Supe:
a. Urbano arquitectónico.- Modos de asentamiento y
análisis de patrones en la planificación de Caral y sus
edificaciones que comprende variables relacionadas a:
Función, morfología, tecnología constructiva, simbolismo,
emplazamiento, orientación, tipología, accesibilidad-flujos-
circulaciones.
b. Semiológico.- Significado e influencia que habría tenido el
pensamiento mágico en las decisiones para la
organización de la arquitectura en la zona.
c. Concepción espacio–temporal.- Aproximarse al
entendimiento del concepto y observación del tiempo de
los antiguos pobladores de Caral, mediante el análisis de
elementos arquitectónicos que posiblemente fueron
usados como observatorios astronómicos.

En base a estos tres componentes se formularon las siguientes


preguntas específicas para la presente investigación:

1. ¿La organización espacial del complejo obedece a un


ordenamiento espontáneo y aleatorio de los edificios en
el tiempo o hubo una intencionalidad en la planificación
de Caral?

2. ¿Qué modelo organizativo o de ocupación regional y


preurbanística habrían generado las culturas
precerámicas en el Perú?

3. ¿El modelo de organización espacial redescubierto en el


Complejo Arqueológico de Caral correspondería más a
un importante centro ceremonial administrativo, en lugar

35
de la tesis que postulan los arqueólogos del PEACS
señalando que hubo un tipo de “ciudad sagrada”?

4. ¿Las características arquitectónicas del complejo


arqueológico asociadas a un importante centro
ceremonial explicarían la presencia de monumentales
edificios públicos y la ausencia de hallazgos en
armamentos y edificaciones con particularidades
defensivas?

5. ¿De que manera pudo influenciar el pensamiento mítico


en las decisiones para la configuración de las pirámides
ceremoniales y su ubicación en el complejo?

6. ¿Es posible hallar conexiones y respuestas para el


modelo de ocupación de culturas precerámicas a partir
del estudio de analogías geométricas con tejidos, quipus
y manufacturas encontrados en el interior de las
pirámides?

7. ¿Los antiguos pobladores de Caral (3,000 A.C.) tuvieron


los conocimientos matemáticos necesarios que les
permitieran relacionar arquitectura y astronomía para la
observación del tiempo?

8. ¿Fue la arquitectura ceremonial el eje a través del cual


se integraban y articulaban los aspectos fundamentales
de la sociedad en Caral (Religión - Estado –
Economía)?

9. ¿Son las edificaciones monumentales de Caral el origen


de una legendaria tradición constructiva de las culturas
prehispánicas que se extendió luego por otras zonas de
nuestro territorio?

36
1.05 Definición de Objetivos

1.05.01 Objetivo general

 Aportar explicaciones al modelo de organización espacial


de las edificaciones redescubiertas en el “Complejo
Arqueológico de Caral – Supe”.

1.05.02 Objetivos específicos

 Determinar algunos de los factores que predominaron en


los antiguos habitantes para la organización y planificación
urbanística de Caral.

 Aproximarse desde una perspectiva científica al


pensamiento mítico de la época y evaluar la probable
influencia en sus constructores para el emplazamiento de
las edificaciones monumentales y anexos residenciales.

 Identificar características específicas en la traza urbana de


la zona y componentes arquitectónicos de las edificaciones
monumentales, que demuestren la probable conexión
directa entre las siguientes variables :

1. Urbanismo: Planificación anticipada del lugar.


2. Observación del tiempo para administración de los
recursos productivos.
3. Arquitectura ceremonial y rituales ligados a eventos
astronómicos.

37
1.06 Justificación teórica y metodológica

La importancia del estudio del modelo de organización espacial


en el complejo arqueológico de Caral, considerado como unos
de los primeros focos civilizatorios del continente, pretende
aproximarnos a:

 Una visión de los primeros modelos organizativos


regionales y urbanísticos de las culturas precerámicas y
la influencia del pensamiento mítico para el
ordenamiento de su arquitectura.
 Una propuesta metodológica de análisis urbanístico que
vincule factores astronómicos y simbólicos como
entrada no convencional para la investigación de
patrones urbanos en asentamientos arqueológicos.

1.07 Alcances y limitaciones

El trabajo de investigación se inicia como un estudio


descriptivo de los componentes físico-espaciales de la zona
arqueológica y finalizará como explicativa/correlacional ya que
busca aportar una comprensión del modelo de organización
espacial de Caral y establecer conexiones entre arquitectura y
urbanismo con variables relacionadas a conocimientos de
carácter funcional, simbólico, astronómico y de tecnología
constructiva.

El estudio del “Complejo Arqueológico de Caral“ se limitará a


analizar las edificaciones monumentales y centros
polifuncionales excavados por los arqueólogos dentro de la
zona del Complejo Arqueológico ; las demás edificaciones aun
en excavación y dispersas a lo largo de treinta kilómetros en el
valle de Supe, serán utilizadas solo como referencia formal.

38
1.08 Metodología de investigación

El método de trabajo se estructura siguiendo las pautas del


método científico, para lo cual se han secuenciado tres fases:
exploración, análisis y síntesis.

Las diversas fuentes de información de han ordenado según


sus niveles de complejidad, divididos en aspectos de mayor,
mediana y menor complejidad según su dificultad para acceder
a fuentes rigurosas, aspectos subjetivos o de difícil
cuantificación e interpretación para establecer correlaciones
entre las numerosas variables a analizar.

La metodología genera una matriz de trabajo (ver tabla nº 1)


que contiene columnas con las variables dispuestas según su
complejidad e hileras donde se ubican las fases de la
investigación:

FASE 1: Exploración.- El estudio se inicia en base a la


información recabada mediante una compilación bibliográfica
acerca del tema, donde se incluyen:

 Publicaciones del PEACS unidad ejecutora del INC


encargada oficial de los trabajos de excavación y
restauración del complejo arqueológico.
 Recopilación de los planos del levantamiento topográfico
de la zona de estudio.
 Aerofotografías e imágenes satelitales del complejo
arqueológico.
 Publicaciones de arqueología y arquitectura
prehispánica en revistas especializadas de la UNMSM,
URP y PUCP.
 Trabajos de investigación y tesis disponibles en Intenet.

39
Como complemento para el estudio consideramos también
recoger información de disciplinas que servirán de apoyo
teórico, como astronomía, historia del Perú prehispánico,
Antropología y arqueoastronomía, a través de entrevistas y
asesorías especializadas, finalmente serán considerados
factores culturales heredados del mundo prehispánico aún
vigentes en la actualidad como las diversas fiestas
vernaculares del lugar, rituales de agradecimiento y relatos
heredados por los pueblos andinos y amazónicos.

FASE 2: Análisis.- Incluye los procesos de selección,


valoración, verificación, evaluación, procesamiento de datos e
interpretación, tomando en cuenta el orden inicialmente
planteado en componentes que van desde aspectos de menor
complejidad (componentes físico espaciales) hasta los de
mayor complejidad (antropología, cosmovisión andina,
simbolismo prehispánico, etc.)

Para el estudio urbanístico del lugar arquitectónico se incluye


como principal referente las ruinas excavadas restauradas y
consolidadas, empezando por las construcciones de mayor
envergadura cuya monumentalidad era indicio de su
importancia.

Al descubrir regularidades en las observaciones del tejido


urbano o patrón del asentamiento de Caral se utilizó la lógica
inductiva para el planteamiento de las hipótesis. El trabajo de
campo se apoyó en los datos obtenidos con un equipo GPS y
estación total para determinar rigurosamente la orientación de
cada una de las edificaciones. La información se procesó con
el apoyo de programas informáticos de asoleamiento para
simular el movimiento aparente del disco solar y de
astronomía para emular el movimiento de la Luna en la bóveda

40
celeste en fechas cercanas a los fechados radiocarbónicos
que ubica a Caral cinco mil años en el pasado, variable
significativa en la investigación.

FASE 3 : Síntesis.- Consiste en la reunión racional de los


elementos analizados por separado en una nueva totalidad.
Se establecen posibles conexiones y correlaciones entre las
variables de estudio que en un principio no fueron evidentes,
para formular una explicación racional y verificable al
problema inicialmente planteado.

41
Tabla 1 . Esquema metodológico
42
1.09 SISTEMA DE HIPÓTESIS

Hipótesis Nº1:

El modelo de organización espacial del


“Complejo Arqueológico de Caral-Supe” fue
constituido a partir de la convergencia de
múltiples factores, no todos ellos espontáneos y
que se dieron en un período que abarcó
aproximadamente 1,200 años. Estos factores
habrían generado un modelo de organización
espacial que sintetiza los elementos simbólicos-
religiosos en unión a requerimientos funcionales,
administrativos, regionales y de habitabilidad,
donde el emplazamiento y ubicación de las
edificaciones monumentales obedecería
posiblemente a motivaciones de carácter
mítico y astronómico, común en una sociedad
y época caracterizada por adoptar el
pensamiento mágico–religioso para realizar
todas sus actividades.

Hipótesis Nº2:

El modelo de organización espacial en Caral


pudo haber sido parte orgánica e inseparable
de un modelo mayor de ocupación cultural y
regional de 20 asentamientos conectados en red
y ubicados a ambos márgenes del río en la
cuenca del Valle de Supe, donde Caral cumplía
un rol de centro ceremonial administrativo y
zona capital o núcleo religioso que se proyectaba
hacia una amplia región que se extendía desde
la Costa hasta los Andes y la Amazonía.

43
2.00 MARCO REFERENCIAL
2.01 Marco teórico
2.01.01 Aproximaciones a la Cosmovisión prehispánica
……….“Así pues el mundo no es únicamente
compresible a través de un sistema de “reglas”, la
idea del orden , la existencia de relaciones entre
fenómenos , es inherente a nuestro cerebro y es el
axioma principal de nuestra conciencia.
[…..] Aunque ese orden no existiese, lo
buscaríamos y lo encontraríamos
indefectiblemente. La orientación principal de
nuestro pensamiento está hecha de tal forma que ,
partiendo del conjunto más heterogéneo y arbitrario
posible ( por ejemplo Caos ), nos fabricamos
categorías para poder reunir , según criterios
abstractos, los componentes de este conjunto en
diversos grupos” …….
Yona Friedman( 13)
Entendemos como “cosmovisión” a la percepción estructurada
acerca del cosmos que un grupo humano plantea como una
constante solución a las cuestiones existenciales de su presencia
en el mundo. Es una forma de ver, sentir, comprender y vivir en el
mundo. Dicha concepción se basa en la observación e interacción
cotidiana con todo lo que le rodea, por medio de la cual se
construye una cultura, una manera particular de ver y estar, ideas
y normas que regulan la vida social y permiten su supervivencia y
desarrollo.
En ámbito académico nacional está muy difundida la noción de
“Cosmovisión andina”, como concepto que agrupa a las
concepciones de los antiguos pueblos y culturas que habitaron el
Perú prehispánico, sin embargo cabe señalar que aquella
cosmovisión no solo se limitó a la región andina, sino también
perteneció a los antiguos pueblos que habitaron la Costa y la
Amazonía.
Lo que denominamos “cosmovisión andina” es el producto de una
herencia milenaria que posiblemente tuvo su origen en la costa
peruana y no en los andes como tradicionalmente se piensa, esto

13
“Hacia una arquitectura científica” . MIT Press (1975)

44
lo afirmamos a partir de la abundante evidencia arqueológica
encontrada en Caral, que es un testimonio material del nivel de
desarrollo cultural y la complejidad de pensamiento abstracto que
lograron sus pobladores hace 5,000 años, el que probablemente
se extendió hacia posteriores culturas por toda la región.
Una aproximación al pensamiento y visión de los pobladores del
antiguo Perú se enfrenta la difícil tarea de entender un sistema
socio cultural originario y particular, el posterior
encuentro/desencuentro con el mundo occidental a través de
España fue completamente destructor de la cultura local, por lo
que intentaremos esbozar algunos aspectos originarios de esta
cosmovisión milenaria del Perú antiguo, a partir de la evidencia
arqueológica del Valle de Supe y apoyados referencialmente en
los escritos posteriores de los cronistas de Indias y su análisis por
parte de historiadores, que nos permitirían comprender algunos
aspectos esenciales de la Cosmovisión del mundo en Caral , la
denominada “Primera civilización de América”.

Surgimiento de la primeras Civilizaciones en el mundo

Civilización, utilizando el término en un sentido restringido, es una


sociedad compleja. Las civilizaciones se diferencian de los grupos
nómadas y las sociedades tribales basadas en el parentesco por
el predominio del modo de vida urbano y el sedentarismo (que
implica el desarrollo de la agricultura y a partir de ella el desarrollo
económico con la división del trabajo, la comercialización de
excedentes y, más tarde, la industrialización y la terciarización).
Con pocas excepciones, las civilizaciones son históricas, es decir,
utilizan la escritura para el registro de su legislación y su religión
(aparecidas con el poder político -realeza, estados- y religioso -
templos, casta sacerdotal-) y para la perpetuación de la memoria

45
de su pasado (incluyendo la aparición de los conceptos de tiempo
histórico y calendario) 14

En el Asia Menor se desarrollaron las civilizaciones más antiguas


de las que se tenga conocimiento. Excavaciones arqueológicas
revelan la existencia de asentamientos humanos en Mesopotamia
a partir del 10.000 a.C. Los sumerios llegaron a la región
mesopotámica alrededor de 5,500 años antes del presente,
sentando las bases de la civilización occidental y dejando un
legado en diferentes áreas de la ciencia y la cultura.

Posteriormente, y casi de manera simultánea a las civilizaciones


desarrolladas en Egipto y Asia surgen en el litoral del Perú focos
civilizatorios cuya importancia e indicios permanecieron ignorados
por muchos años. Entre ellos podemos mencionar El sitio
arqueológico conocido como Áspero y Piedra Parada en el Valle
de Supe, junto a otros sitios contemporáneos como, Bandurrias,
Sechín, Lurinhuasi, Miraya, distribuidos en la costa y sierra central
del País y muchos otros más aún no estudiados.

Gráfico nº 10 Los siete focos civilizatorios de la historia (Fuente: PEACS)

14
José Álvarez Junco: ¿Qué es civilización? (fuente: La Fundación Atman)

46
El pensamiento mítico en las cosmovisiones universales de
diversas culturas en el planeta

Para el hombre arcaico, el mito era una historia verdadera, que le


daba una explicación y sentido a toda su existencia constituyendo
un "modelo ejemplar" para todas sus actividades, ya que éstas
fueron realizadas por primera vez por un dios o varios seres
míticos, Para la mentalidad hombre primitivo elaborar una
interpretación mágica de las cosas, le dio la sensación de poder y
dominio sobre ellas, y de esta manera, participó de la naturaleza
sagrada del Cosmos a través de sus manifestaciones, lo que le
permitió reproducir el acto creador. En esta forma de pensamiento
se basó el hombre para realizar, por ejemplo, sus ritos de
agradecimiento e inicio de actividades agrícolas en conexión con
los cambios estacionales cíclicos, reiterando un proceso de
creación. Pero no sólo en los ritos de agradecimiento se manifiesta
el tiempo mítico, sino en todos los demás actos ya que todos se
viven ritualmente debido al modelo ejemplar que a cada una de
ellos le antecede.

Esto supone una verdadera actitud religiosa; se trata de vivir de


acuerdo con el modelo ejemplar de los seres fabulosos o dioses,
sacralizando la existencia toda, se vive en un tiempo sagrado que
se distingue del cotidiano habitual, en un espacio también
consagrado que participa de la naturaleza divina.

El pensamiento mágico expresa de esta forma una gran riqueza


que podía ser aprehendida merced a su repetición ritual, dando al
hombre arcaico las respuestas a los interrogantes tales como el de
la creación del Cosmos, el nacimiento, la muerte y el sentido de la
vida, cumpliendo una función ordenadora y centralizadora de su
existencia.

El pensamiento mágico se caracteriza por que éste carece de un


método, entendido como un conjunto de pasos para llegar a un

47
conocimiento racional y verificable, para llegar a descubrir la
verdad. Además, todo el acontecer cósmico, social y político está
relacionado estrictamente con la divinidad. Todo lo que sucede es
por causa de los Dioses.

En la antigüedad, según Jung, se tendía a este tipo de


pensamiento…. "Todo, el interés y la energía que el hombre
moderno invierte en la ciencia y la técnica, consagrábala el antiguo
a su mitología. Es su afán creador el que explica los
desconcertantes cambios, las transformaciones caleidoscópicas,
los reagrupamientos sincretísticos y los incesantes remozamientos
de los mitos del ámbito cultural griego. Nos movemos aquí en un
mundo de fantasías que, poco preocupadas por la marcha externa
de las cosas, manan de una fuente interna y producen
variadísimas figuras, unas veces plásticas, otras esquemáticas.
Esta actividad del espíritu de los primeros tiempos de la
antigüedad obraba por antonomasia artísticamente. Parece que la
finalidad del interés estribaba, no en captar objetivamente el cómo
del mundo real, sino en adaptarlo a fantasías y esperanzas
subjetivas." ….

Para la mentalidad del hombre antiguo, prosigue Jung15, el sol era


el gran padre del cielo, y la luna, la madre fecunda. Todo era
antropomórfico o teriomórfico y el Universo entero estaba animado
por dioses y demonios.

15
Jung, C. G. ( 1997).
“El hombre y sus símbolos”, Editorial Caralt, Buenos Aires.

48
Mundo mítico en las culturas prehispánicas del Antiguo Perú

La cosmovisión prehispánica tuvo un rasgo esencial del cual se


derivan los demás aspectos y es que se fundamenta en un
sentimiento de estrecha comunión con la naturaleza,
manifestación tangible de sus dioses tutelares,

Las primeras comunidades de habitantes se sintieron todavía


parte orgánica de la naturaleza, no existió lo que hoy conocemos
como un “sentimiento de individualidad” o “separatividad” de cada
miembro con la sociedad y su entorno. Esta visión orgánica se
entiende en parte por su conexión y dependencia de los recursos
alimenticios provenientes de la tierra (Pachamama) y el mar
(Mamacocha) que se tradujeron en rituales, ceremonias de
agradecimiento y sacrificios como gestos de reciprocidad.

El Sol fue identificado como un agente divino proveedor de calor y


luz asociado a una figura masculina y la Luna como complemento
femenino, asociado a la noche.

En la visión del mundo prehispánico, lo humano y lo espiritual


fueron inseparables y se hallaron en una interacción dinámica
constante a través de un pensamiento mágico que atribuía a los
dioses el acontecer de los hechos. Esta forma de pensamiento
consideraba que todos los seres animados e inanimados (ríos,
lagos, cerros, nevados, estrellas, etc.) estaban vivos y dotados de
un espíritu sagrado, por tanto toda actividad cotidiana, como el
trabajo, se convierte de forma implícita en una ofrenda a sus
dioses, a sus huacas, a sus antepasados, y a todos aquellos
espíritus protectores presentes en todo lo manifestado.

Las investigaciones y el valioso aporte al entendimiento de las


culturas prehispánicas realizado por la doctora María

49
Rostworowski (16) (miembro del IEA) nos proporciona un rasgo
importante de esta visión milenaria, al respecto nos dice lo
siguiente:
.”En las creencias indígenas no existió la idea abstracta
de Dios, ni palabra que lo expresara. Esto de hecho no
significa que no hubiera una multitud de Dioses, incluso
jerarquía entre ellos, A las divinales se les conoce por
sus nombre propios sin que existieran términos que los
manifestaran como tales. Lo sagrado se expresaba con
la voz “huaca” que contenía una variedad de
significados”

Los incas incorporaron a sus propias creencias, conforme se


expandieron y evolucionaron espiritualmente, la cosmovisión de
culturas más antiguas y lejanas, por lo que desarrollaron una
religión sumamente compleja, así como una organización política y
social eficiente, basada también como en los antiguos pueblos en
el bien común, la reciprocidad, el amor a la naturaleza y al prójimo,
la solidaridad, el respeto al anciano, la veneración de los muertos
y principalmente a sus dioses.

Si bien algunos cronistas aseguran que en el imperio incaico se


veneraban a muchos dioses (el sol, la luna, las constelaciones, la
tierra, el mar, el rayo, el arco iris, etc..), otros afirman que por el
contrario, tenían mas bien un solo Dios, creador y hacedor de
todas las cosas vivientes y no vivientes, padre del sol, la luna, las
estrellas, los animales, el ser humano y todo lo que existe en la
naturaleza, a quien llamaron Viracocha en los andes y
Pachacamac en la costa, y cuyos restos de templos se conservan
aun hoy en las ciudades peruanas de Cusco y Lima ,
respectivamente.

16
Rostoworowski María (2007) “Estructuras andinas del poder, ideología
religiosa y política “En: Obras Completas , Volumen VII, Lima, pp. 11

50
Los sacerdotes fueron los encargados de dirigir las ceremonias
religiosas en los templos y huacas alrededor del imperio,
ostentando gran poder y respeto entre los habitantes, puesto que
eran guardianes de mitos, leyendas y rituales desde tiempos del
primer inca. Poseían una gran sabiduría y eran intermediarios
entre el mundo espiritual y el mundo de los vivos, siendo
consultados por la nobleza y el mismo inca sobre el clima, la
siembra, la cosecha, la guerra, etc.
Un registro valioso del simbolismo prehispánico
En el año de 1613, el cronista indígena Juan de Santa Cruz
Pachacutic Yamqui Salcamayhua publica, en su libro Relación de
Antigüedades deste Reyno de Perú, un grafismo de la imagen
andina del cosmos (ver figura adjunta). Este grafismo se
corresponde con en el altar mayor del santuario del Sol
de Curicancha ("patio de oro") en el Cuzco.

Gráfico nº 11:Grafismo de Don Joan de Santa Cruz Pachacuti Yampi (1613)

51
Curicancha
Siguiendo la descripción que realizara Lesmann-Nietzche (17), el
Curicancha constaba de seis edificios mayores colocados para
formar un patio y conectados por una pared que los rodeaba.
Dichos edificios eran: el santuario del Sol, la capilla de la Luna, la
capilla de las Estrellas, la capilla del Rayo, la capilla del Arco Iris, y
la sacristía y casa del cabildo. Este complejo ceremonial fue
construido con el auspicio de Manco Capac, el primer gobernante
Inca en la primera mitad del siglo XII. Los siguientes gobernantes
lo agrandaron y enriquecieron, entre ellos: Mayta Cápac,
Pachacutic y Huascar. En 1533, después de haber sido saqueado,
fue entregado a Juan Pizarro por su hermano el Marqués. Juan
Pizarro, a su turno, se lo obsequió a los frailes dominicos, quienes
destruyeron el Curicancha para erigir una iglesia que hoy ocupa su
lugar.
El santuario de la Luna, esposa del Sol, se encontraba totalmente
cubierto con láminas de plata, así como también era de plata la
imagen de la Luna. En él se encontraban sentadas las momias de
las reinas muertas.
La capilla de las Estrellas estaba dedicada a Venus, las Pléyades
y otras constelaciones. La puerta de entrada y las paredes
interiores estaban enchapadas con láminas de plata y tachonadas
de estrellas. Una parte de las paredes tenía numerosos agujeros
destinados a recibir los ornamentos astrales.
De la capilla dedicada al Rayo, el Trueno y el Relámpago, no se
tiene mayor descripción. Para los Incas estos seres no eran
divinidades sino guerreros del Sol.
La capilla del Arco Iris estaba totalmente guarnecida de oro. En
uno de sus costados, sobre las planchas de oro, tenía pintado al
natural el arco del cielo, tan grande, que iba de una pared a otra
con todos sus colores al vivo. Los Incas sabían que el Iris proviene

17
LESMANN-NIETZCHE, L. (1929) .Textos tomados y editados de
Coricancha, “el Templo del Sol en el Cuzco y las imágenes de su altar
mayor” ,(s.e.) Buenos Aires, 1950

52
del Sol y lo tomaban como su blasón puesto que ellos se
consideraban descendientes del Sol. Cuando veían el Arco Iris en
el aire, cerraban la boca, tapándola con la mano, puesto que su
presencia desgastaba y producía podredumbre en los dientes.

A propósito de Illapa (rayo, trueno, relámpago) y de Cuichi (arco


iris), podemos anotar lo siguiente: el Rayo era la potencia sagrada
del fuego, cuyo cuerpo es una serpiente luminosa que avanza
zigzagueante entre las nubes (fuyu) para profundizarse en el
submundo (ucu pacha). Así mismo es un guerrero celeste que al
sacudir su honda (huaraca) producía un estallido que gestaba
fuego, luz y ruido; en su otra mano portaba una porra y con ella
producía lluvia y granizo. El Rayo (Illapa) configuraba en sí tres
potencias celestes: Chuki Illapa (lanza-rayo), Cutu Illapa ( gargajo-
rayo, como su sonido-estruendo) e Inti Illapa (sol-rayo). Además
de su relación con el fuego y lo ígneo, el Rayo está relacionado
con el agua (yacu): él es Yacumama, quien dará origen a los
grandes ríos. Cuando el Rayo se profundiza en el submundo, al
emerger de él surge como la sierpe madre de las aguas-ríos, el río
Allcumayu (perro-río), como lo señala el dibujo de Pachamama
copiado por Juan de Santa Cruz Pachacutic Yamqui
Salcamayhua. De esta manera el Rayo se relaciona
zoogónicamente con la serpiente (amaru) y con el perro (allcu), se
considera a la serpiente (amaru) como Sachamama (sacha:
monte, selva): una sierpe de dos cabezas que se erecta como un
árbol, el árbol Mallki en el dibujo de Santa Cruz Pachacutic. Al
ascender del árbol proyectada a lo celeste, se convierte en el
Cuichi (Arco Iris) para fertilizar y dar color a la Tierra y a todas las
cosas vivas. Así mismo, el arco iris se conforma por el destello
energético de la gran serpiente amaru.

La denominada por Lesmann-Nietzche como sacristía y casa del


cabildo, estaba dedicada para el uso del sumo sacerdote y sus

53
asistentes. Allí se ordenaban los cultos y sacrificios que habían de
hacerse. Este recinto, como los demás, estaba cubierto de oro.

En el centro de este recinto sagrado de Curicancha, estaba el Inti


Pampa o Campo del Sol. El círculo de los muros exteriores medía
aproximadamente 68 metros por 59, con un ábside redondeado
que se proyectaba sobre 34 metros desde la esquina suroeste. El
lado exterior de este muro estaba adornado, a la mitad de su
altura, con una franja de oro de unas dos palmas de ancho. Las
diversas puertas también estaban cubiertas de oro. Los muros
interiores que daban frente al patio, también estuvieron adornados
con un friso de oro y tenían más de una yarda de ancho. El patio
era un jardín sagrado, cultivado por el Inca y sus parientes más
cercanos. El abono era llevado desde el Valle de Chincha, ubicado
en la costa; y el jardín era regado por una de las cinco fuentes
situadas dentro del patio, que desde manantiales distantes era
surtido por tuberías subterráneas, en parte en oro. Esta fuente era
un tazón de piedra de forma octogonal de 7 pies de largo, 4 de
ancho y 3 de profundidad. En él se vertía la chicha de maíz
ofrecida al Sol y allí se bañaba la cuya (esposa) del Inca,
realizando un baño ritual previo a su matrimonio. La piedra de este
tazón estaba encajada en oro, en el cual se hallaba estampada
una imagen del Sol.

Tres grandes fiestas se realizaban en el Inti Pampa del


Curicancha: en la época de siembra, después de la cosecha y
durante la investidura de los señores principales o Curacas.
Durante estas fiestas, el Campo del Sol estaba plantado con
crecidos tallos de maíz, forjados en oro. Además, allí había un
jardín de oro sobre terrazas situadas debajo del ábside circular:
maizales de oro, tanto sus cañas como las hojas y las mazorcas.
Junto a ellas había más de veinte llamas con sus crías, también en
oro; y los pastores con sus hondas y cayados, hechos del mismo
metal.

54
El santuario principal de Curicancha estaba dedicado al Sol y se
hallaba sobre el ábside circular. Su techumbre era de paja. Sus
paredes estaban cubiertas de arriba a abajo de planchas de oro.
El altar mayor estaba al oriente, regido por la figura del Sol hecha
de una plancha de oro. A uno y otro lado de esta imagen estaban
los cuerpos de los Incas muertos, colocados de acuerdo a su
antigüedad como hijos del Sol, momificados y sentados en sus
sillas de oro, puestas sobre tablones de oro.

Ensayando una interpretación simbólica del grafismo

En la representación del cronista indígena se percibe claramente


la cosmovisión dualista, formada por grupos de opuestos
complementarios (Izquierda – derecha), a partir de este eje de
simetría se ordenan las representaciones del Varón y la mujer, en
alegoría al elemento masculino y femenino, los cuales son también
relacionados y asociados a la pareja divina: Sol (Inti) y la Luna
(Quilla) como su reflejo en el cielo.

Otros componentes los representa la Chakana (Cruz del Sur), Las


Pléyades, y Venus el lucero de la mañana y del atardecer según la
estación en el año.

En el lado izquierdo encontramos una alusión a elemento “Tierra”


(pacha) y en el lado derecho al elemento “Agua” (cocha o lago),
los cuales son llamados Pachamama y Mamacocha
respectivamente, lo que ratifica la presencia ancestral de los
rituales de reciprocidad a la fertilidad y productividad de la “Tierra”
y el “Agua”, como proveedores de alimento y sustento de la vida
en la comunidad.

Otros fenómenos climatológicos son incluidos como parte de una


visión animista del Universo donde las nubes, el granizo y el Arco
iris representaban diversos roles dentro de un variado mundo
mágico religioso.

55
Gráfico nº 12.- Esquema síntesis de cosmovisión dualista

56
Vestigios intactos de la cosmovisión prehispánica en el Perú
contemporáneo
En la actualidad poco queda de aquella grandes culturas del
pasado, de sus logros sociales, tecnológicos y espirituales,
producto de la extirpación de idolatrías que se inició con la
conquista y siguió en la república. Pese a ello, algunas
manifestaciones originales se pueden ver aún hoy en algunas
comunidades campesinas altoandinas, cuya cosmovisión y forma
de vida se conserva casi intacta. El campesino altoandino sigue
rindiendo culto al Sol, a los “Apus” protectores, a la Pachamama y
a la Mamacocha en los lagos, respetando a la naturaleza, viviendo
en grupos familiares y comunitarios en los cuales los lazos
emocionales y espirituales, la cooperación y la solidaridad entre
sus miembros, son la norma.

Los rituales o ceremonias religiosas heredados por sus ancestros


se desarrollan en toda actividad importante, tanto de la vida
cotidiana, como iniciar un trabajo, sembrar, cosechar, el
nacimiento, el paso a la adultez, la muerte, etc., como en
ocasiones especiales cuando se celebraba la paz, siempre en
honor y agradecimiento de una divinidad. Estas fiestas se
desarrollan dentro de la familia, así como dentro de la comunidad.
Los ritos están entendidos también en cantos, en cuentos, en
historias, en danzas que se transmiten con carácter de
permanencia y de certidumbre e infalibilidad.

La actividad de los ritos iniciativos, determinaban el paso de una


etapa a otra, lo que les llevaba a marcar en un ceremonial esa
nueva etapa en su vida, renovando y reafirmando los criterios que
la sociedad tenía respecto del papel que las personas deben
desempeñar, en la nueva etapa vital a la que acceden.

57
2.01.02 Estudio de la astronomía del pasado

El estudio de la astronomía antigua puede ser considerado


desde dos puntos de vista por los diferentes motivos de
interés que ofrecen. El primero es puramente científico y
tiene la intención de buscar, en los antiguos textos,
comentarios y datos remotos de fechas astronómicas. El otro
punto de vista, habitualmente menos explorado son resultado
de un interés especial en la filosofía y la historia.
Jean Baptiste. Biot 1862

Desde que el astrónomo francés Jean Baptiste Biot (1774 - 1862)


escribiera el texto citado ha pasado un siglo y medio de investigación
académica del papel jugado por la observación de los astros y sus
ciclos en las culturas de la antigüedad.
Durante estos años, las cuestiones abordadas y los métodos
científicos aplicados han experimentado un considerable desarrollo,
especialmente en las últimas décadas gracias al apoyo de los
programas informáticos de astronomía que reproducen la
configuración del cielo de cualquier pasada época y del apoyo
sistemas de medición y registro planimétrico con apoyo satelital para
el análisis de edificaciones y asentamientos arqueológicos que
estuvieron probablemente estuvieron relacionados a observaciones
astronómicas.

Los nombres bajo los cuales se han caracterizado los estudios de


astronomía del pasado varían en función de las culturas y las épocas
consideradas, así como de los tipos de fuentes y técnicas utilizadas.
Actualmente se suelen distinguir tres grandes grupos de estudio:

1. Arqueoastronomía: Estudio de la práctica y uso de la


astronomía por las culturas de la antigüedad, partiendo de datos
históricos y estudios de asentamientos arqueológicos cuyas
edificaciones y sus componentes arquitectónicos ( menhires,
escalinatas, ventanas, portales, etc) estuvieron relacionados ,
alineados y orientados con los movimientos de las luminarias

58
(sol y luna) o algún objeto resaltante de la bóveda celeste, el
análisis arqueoastronómico es parte de un acercamiento
interdisciplinario a la cosmovisión mágico religiosa de una época,
que se enfoca principalmente en el estudio de antiguos
observatorios astronómicos , templos y edificaciones
ceremoniales en conexión con calendarios celestes , basados en
los movimientos cíclicos del Sol , Luna y las estrellas.

2. Etnoastronomía: Estudio de la práctica y uso de la astronomía


por los diferentes grupos culturales en base a datos etnográficos
(orales o escritos). Esta disciplina abarca a todas las relaciones
entre astronomía y cultura, o, si se quiere, las implicancias
culturales de la observación de lo celeste. La Etnoastronomía es
una de las subdisciplinas de la Astronomía Cultural, que busca
aproximarse mediante las técnicas de la etnología a comprender
las ‘otras’ astronomías del ‘otro’ cultural que son los grupos
étnicos. Es decir, estudia cómo una cultura, diferente a la cultura
de donde surgió la astronomía ‘académica’, occidental y
predominante, ve los objetos celestes.

3. Historia de la astronomía: Recopilación y estudio basado en


fuentes escritas, grabados e imágenes antiguas que aborda la
recopilación y registro de las antiguas teorías astronómicas de
las diferentes culturas del pasado de la humanidad.

Para el estudio del “Complejo Arqueológico de Caral- Supe”


nos enfocaremos en el modelo utilizado por la arqueoastronomía
para el análisis de las edificaciones monumentales y pirámides
ceremoniales con la finalidad de aproximarnos al entendimiento de
la organización espacial del lugar, a partir de la búsqueda de
patrones y ejes asociados al movimiento de las luminarias (sol y
luna) en fechas específicas como solsticios, lunasticios y

59
equinoccios para identificar probables fines de orientación
referencial en el tiempo y su uso como calendario ceremonial.

El origen de los estudios arqueoastronómicos puede remontarse a


1723, año en que el reverendo inglés William Stukeley escribía un
libro dedicado al monumento megalítico de Stonehenge
(Inglaterra), en el que llamaba la atención del lector sobre la
orientación del eje principal de este monumento hacia el noreste, es
decir, hacia el lugar de la salida del Sol en el solsticio de Verano (
22 de Junio en el hemisferio norte ), la orientación del eje de este
monumento hacia el solsticio de verano es un hecho comprobado,
habiéndose alcanzado actualmente un alto grado de consenso entre
historiadores y arqueólogos sobre la intencionalidad de esta
orientación astronómica por parte de los constructores del
monumento. Al trabajo inicial de Stukeley siguieron a lo largo de los
siglos XVII y XVIII otras investigaciones sobre la supuesta
información astronómica codificada en éste y otros monumentos
megalíticos ingleses, lo que provocó ya en su época un amplio
debate, en el que los participantes se situaron abiertamente a favor
o en contra de la pertinencia de tales estudios.

En las primeras décadas del siglo XIX, las expediciones


napoleónicas a Egipto y la transcripción de los primeros textos
jeroglíficos por J. F. Champollion, introdujeron en Francia un nuevo
campo de estudio, la astronomía egipcia. A diferencia de lo que
ocurría en el megalitismo inglés, a partir del desciframiento de la
escritura jeroglífica por Champollion, los estudios de la astronomía
egipcia tuvieron a su disposición, no sólo restos arqueológicos, sino
también documentos escritos.

Sería, precisamente, el astrónomo francés Jean Baptiste Biot,


estrecho colaborador de Champollion en la traducción de textos
astronómicos, y autor de varios trabajos fundacionales sobre
astronomía egipcia, publicados entre 1831 y 1862, quién, al tiempo

60
de su muerte, dejase redactada una precisa exposición de los
principales problemas metodológicos por los que atravesaba en su
época la investigación de la astronomía egipcia. Tras su
fallecimiento, dicha exposición se publicó como introducción a su
tratado sobre las astronomías antiguas de la India y la China.

En ella, Biot advierte hace siglo y medio de la necesidad de dar un


enfoque interdisciplinar a la investigación que incorpore al menos la
astronomía, la filología y la historia. Resaltando, muy especialmente,
los problemas de intercomprensión entre los científicos de estas
disciplinas, debidos principalmente a la falta de una formación
interdisciplinar adecuada que permita evaluar con justeza las
aportaciones provenientes de otras áreas de investigación.

Más importante aún, Biot advierte de la necesidad de definir las


bases metodológicas por las que se debe regir esta investigación
interdisciplinar. Tanto en lo que se refiere al estudio de la posible
función astronómica de los monumentos arqueológicos, como a la
reconstrucción de los conocimientos y prácticas astronómicas de la
civilización que los produjo. Sentando dos puntos metodológicos
esenciales: necesidad de reconstruir la literalidad de las fuentes
escritas utilizadas de la forma más precisa posible y poseer una
buena experiencia personal en la observación de los astros a simple
vista.

Entre 1867 y 1868, pocos años después del fallecimiento de J. B.


Biot, el historiador alemán Heinrich Nissen y su colaborador Richard
Schöne miden las orientaciones astronómicas de los templos de
Pompeya, Atenas y Roma. En 1887 estos investigadores habían
publicado en diversos trabajos las orientaciones de unos 350
templos.

Un importante avance se produce en 1894, cuando el astrónomo


británico Sir Norman Lockyer, fundador y director durante 50 años

61
de la prestigiosa revista científica Nature, publica “The Dawn of
Astronomy.“ Sobre la importancia de este campo de estudios baste
decir que sobre él sigue descansando hoy en día el peso de las
investigaciones sobre la cronología absoluta egipcia. ha reconocido
este hecho como una de las causas importantes que, aún hoy,
dificultan el desarrollo metodológico de la astronomía cultural, donde
presenta los resultados de sus investigaciones sobre la orientación
astronómica de diversos templos egipcios hacia posiciones
relevantes del Sol y la estrella Sirio en el horizonte local. Sin dejar
de hacer referencia al contexto religioso que sustentaban sus
apreciaciones. Desde entonces hasta hoy, el estudio de la
información astronómica codificada en los registros arqueológicos
no ha dejado de suscitar un apasionado debate sobre los métodos
utilizados y el alcance de los resultados obtenidos. Cuyos
principales puntos de evolución pueden situarse en los trabajos de
Gerald Hawkins sobre Stonehenge, reabriendo la vieja polémica
entre arqueólogos y astrónomos que generaran los trabajos de
Lockyer. Los numerosos trabajos de Alexander Thom sobre el
megalitismo inglés, sentando las bases estadísticas que
caracterizarán toda una época de estos estudios. Y la plena
asunción de la arqueoastronomía como disciplina con objetivos y
métodos propios por parte de un creciente número de arqueólogos y
antropólogos.

62
Estudios de arqueoastronomía en el Perú

En el Perú existe desde hace más de una década grupos de


arquitectos, docentes universitarios y arqueólogos los cuales han
abordado el enfoque arqueoastronómico para el estudio de
asentamientos arqueológicos, cabe mencionar de manera especial
los estudios de Arqueoastronomía en Pachacamac por parte del
Arquitecto Alfio Pinasco C. (URP) quien ha realizado una
publicación(18) donde se identifican las principales orientaciones
astronómicas de los templos y edificaciones ubicadas en el
“Santuario de Pachacámac” en la provincia de Lima.

Gráfico nº 13.- Edificación piramidal con rampa central en Pachacamac


Si bien es cierto que ya hace más de medio siglo con el estudio de
“Las líneas de Nazca” por Maria Reiche y Paúl Kosov, se
establecieron antecedentes para iniciar un estudio científico y
compresión del conocimiento astronómico del pasado prehispánico
y su correlación con antiguos calendarios , es recién ahora con el
apoyo de tecnología satelital e instrumentos topográficos de
precisión y programas informáticos de astronomía que podemos
abordar un estudio sistematizado y riguroso de diversos sitios
arqueológicos a partir de un enfoque arqueoastronómico.

18
Alfio Pinasco Carella (1999) , “Con el Sol, la Luna y las Estrellas ,
Arqueoastronomía en Pachakamaq” Universidad Ricardo Palma - Lima

63
En el interior del país se están realizando importantes
investigaciones sobre astronomía incaica, citamos el estudio del
“Observatorio astronómico en el Tampu Inca de Huánuco
Pampa” a cargo de un equipo de arqueólogos, encabezados por
José Luis Pino ( UNMSM) , Manuel Perales Munguia y Hernán
Ramos Doria así como de Dawn Denoncourt de la University of
Florida, Martha Bell y Adam Stack de Yale University , el proyecto
de investigación tiene más de cinco años trabajando el tema de
Astronomía Inca, especialmente en Huánuco Pampa y otros
tambos de la Sierra Central Andina.

Recientemente ha tomado relevancia mediática el observatorio


astronómico ubicado en la provincia costera de Ancash, conformado
por las Trece Torres de Chankillo, , levantadas en línea, de norte
a sur sobre la cima del monte del mismo nombre, que indicaban con
precisión el desplazamiento anual del Sol, así como los solsticios y
los equinoccios. Además, contiene dos puntos artificiales de
observación separados por unos 200 metros con una especie de
fortaleza rodeada por tres anillos concéntricos.

Gráfico nº 14.- Observatorio astronómico “Las trece torres de Chankillo”

64
Su construcción revela que existía un conocimiento astronómico que
registraba el ciclo anual del sol hace 2,300 años, según los
arqueólogos Iván Ghezzi, de la Pontificia Universidad Católica del
Perú, y Charles Ruggles, de la Universidad de Leicester, en el Reino
Unido. También son una prueba de que en ellos se realizaban
ceremonias religiosas vinculados a fenómenos astronómicos.

La amplia e innumerable cantidad de asentamientos arqueológicos


dispersos en el territorio Peruano, hace cada vez mas necesario
adicionar el empleo de un enfoque que incorpore el estudio de la
arqueoastronomía como parte de una aproximación científica e
interdisciplinaria al estudio astronómico del pasado y compresión de
la cosmovisión de las culturas prehispánicas.

65
2.01.03 NOCIONES DE ASTRONOMÍA CIENTÍFICA
En este capítulo describimos los movimientos aparentes y
cíclicos del Sol y la Luna sobre el cielo de un observador
situado en la latitud donde se emplaza el complejo
arqueológico de Caral, la elección exclusiva de las
luminarias para la presente investigación responde a su
predominante presencia visual en el firmamento y son el
punto de partida para iniciar un estudio de correlación entre
arquitectura del pasado y observación astronómica.
No se descarta la importancia que posiblemente pudieron
tener algunas constelaciones prehispánicas o agrupamientos
de estrellas como la “Chakana” ( conocida en la actualidad
como “Cruz del Sur”), considerándolo como una materia de
exploración para futuras investigaciones.

Datos del planeta Tierra


Para nuestros propósitos podemos considerar que la Tierra
es una esfera homogénea cuyo radio mide 6,370 km y que
gira constantemente sobre sí misma alrededor de un eje que
pasa por su centro, y que llamaremos Eje de la Tierra. El Eje
de la Tierra intersecta la superficie de la Tierra en el polo
norte geográfico (aquel desde el cual se ve girar la Tierra en
sentido contrario a las agujas del reloj) y el polo sur
geográfico. Se denomina ecuador terrestre al círculo máximo
cuyos polos son los polos geográficos. El ecuador terrestre
divide la superficie de la Tierra en hemisferio norte y
hemisferio sur.

Para definir la posición de un observador sobre la superficie


de la Tierra se utiliza el sistema de coordenadas geográficas.
Su círculo fundamental es el ecuador terrestre, su polo
principal es el polo norte geográfico y su meridiano principal
es el meridiano que pasa por el observatorio de Greenwich

66
(Inglaterra). Las dos coordenadas (λ, ϕ) que definen la
posición de un punto sobre la Tierra se denominan longitud

(λ) y latitud (ϕ) geográficas. La longitud se mide positiva en


sentido contrario a las agujas del reloj. En la superficie
terrestre se destacan cuatro paralelos: el Círculo Polar Ártico

(ϕ= 90º - ε), el Trópico de Cáncer (ϕ= ε), el Trópico de

Capricornio (ϕ= - ε) y el Círculo Antártico (ϕ= - 90º + ε). La


franja de la Tierra comprendida entre los trópicos se
denomina zona tropical. La franja comprendida entre el
Trópico de Cáncer y el Círculo Polar Ártico se denomina zona
templada boreal. La franja comprendida entre el Trópico de
Capricornio y el Círculo Polar Antártico se denomina zona
templada austral. Los casquetes limitados por los círculos
polares se denominan zona glaciar ártica y zona glaciar
antártica, respectivamente.

a) Sistema heliocéntrico

Una forma particularmente sencilla de describir el movimiento


de los astros consiste en suponer que el Sol se encuentra
estacionario en el centro del Universo y el resto de los astros
se mueven en torno a él.
Todas las estrellas se mueven en el espacio cada una con un
movimiento propio, pero están tan lejos del Sol que sus
movimientos sólo resultan apreciables a simple vista al cabo
de varios milenios, y nunca antes de muchos siglos.
Consideraremos, pues, que las estrellas están fijas en el
espacio. Mercurio, Venus, la Tierra, Marte, Júpiter y Saturno
giran alrededor del Sol siguiendo órbitas elípticas casi
coplanares. Todos giran en la misma dirección.

67
Gráfico nº 15 .- Inclinaciones de ejes de la Tierra y Luna

El plano de la órbita de la Tierra pasa por el centro del Sol y


se denomina Plano de la Eclíptica. El eje perpendicular al
plano de la eclíptica que pasa por el centro de la Tierra se
denomina Eje de la Eclíptica. Las fuerzas gravitatorias de
los planetas perturban periódicamente la posición del plano
de la eclíptica, causando una pequeña oscilación de su eje
con un período de unos 41,000 años y una amplitud de unos
0º.85. Este movimiento se denomina precesión planetaria.
La Luna se mueve alrededor de la Tierra en el mismo
sentido en que lo hacen los planetas alrededor del Sol,
siguiendo una órbita elíptica que tarda un mes en completar.
Mientras, sigue a la Tierra en su periplo anual alrededor del
Sol.
El plano de la órbita de la Luna alrededor de la Tierra pasa
por el centro de la Tierra y se denomina Plano de la Luna. El
eje perpendicular al plano de la Luna que pasa por el centro
de la Tierra se denomina Eje de la Luna. Las fuerzas
gravitatorias que ejercen la Tierra y el Sol sobre la Luna
perturban periódicamente el plano de la Luna, haciendo que
su eje describa una superficie cónica alrededor del Eje de la

68
Eclíptica con un período de 18.61 años y un ángulo ι =
5º.145. Este movimiento se denomina precesión del Eje de la
Luna
La Tierra gira sobre sí misma alrededor del Eje de la Tierra
en el mismo sentido en que lo hace alrededor del Sol,
completando una vuelta en un día. Las fuerzas gravitatorias
que ejercen el Sol y la Luna sobre la Tierra perturban
periódicamente la dirección del Eje de la Tierra, haciéndole
describir una superficie cónica alrededor del Eje de la
Eclíptica, con un período de unos 26,000 años. Este
movimiento se denomina precesión del Eje de la Tierra. El
ángulo ε que forman el Eje de la Tierra y el Eje de la Eclíptica
se denomina oblicuidad de la eclíptica y mide actualmente
23º.439. Su valor viene disminuyendo lenta pero
constantemente en los últimos milenios a consecuencia de la
lenta perturbación que ejercen los planetas sobre el plano de
la eclíptica.
b) La esfera celeste
El sistema heliocéntrico permite describir cómodamente el
movimiento de los astros en torno a un observador situado en
el Sol, pero nosotros necesitamos describirlos respecto a un
observador situado en la Tierra. Para ello utilizaremos la
esfera celeste, una esfera de radio arbitrario centrada en el
observador y en cuya superficie se disponen los astros tal y
como éste los observa en un instante determinado. Por
comodidad, supondremos primero un observador situado en
el centro de la Tierra (sistema geocéntrico) y pasaremos
después a un observador situado en la superficie terrestre
(sistema topocéntrico).
c) Sistema geocéntrico

El Eje de la Eclíptica intersecta la superficie celeste en el polo


norte eclíptico (PNE) y el polo sur eclíptico (PSE). El círculo
máximo cuyos polos son los polos elípticos se denomina

69
eclíptica (E). Para nuestro observador, el Sol se traslada
entre las estrellas fijas en el mismo sentido en que gira la
Tierra sobre sí misma, recorriendo en un año el círculo de la
eclíptica.

Gráfico nº 16
El Eje de la Tierra intersecta la superficie celeste en el polo
norte celeste (PNC) y el polo sur celeste (PSC). El círculo
máximo cuyos polos son los polos celestes se denomina
ecuador celeste. El ecuador celeste divide la superficie
celeste en hemisferio norte celeste y hemisferio sur celeste.
La eclíptica y el ecuador celeste están inclinados el ángulo ε
de la oblicuidad de la eclíptica. Sus puntos de corte se
denominan equinoccio de primavera (EP) y equinoccio de
otoño (EO). El equinoccio de primavera es aquel en que el
Sol pasa del hemisferio sur celeste al hemisferio norte celeste
Los puntos de la eclíptica situados a 90º de los equinoccios
se denominan solsticio de verano (SV) y solsticio de invierno
(SI). Sobre esta base se definen los siguientes sistemas de
coordenadas en la esfera celeste.
d) Precesión de los equinoccios
La posición de la eclíptica en la esfera celeste oscila
ligeramente sobre su posición media con un período de
41,000 años, debido al movimiento de precesión planetaria

70
del plano de la eclíptica. El Polo Norte Celeste gira alrededor
del Polo Norte Eclíptico en el transcurso de unos 26,000 años
debido al movimiento de precesión del Eje de la Tierra. Como
resultado de ambos movimientos de precesión, los
equinoccios rotan sobre la eclíptica en dirección contraria al
Sol, completando una revolución en el transcurso de unos
26,000 años. Este lento movimiento de los equinoccios por la
eclíptica se denomina precesión de los equinoccios.
e) Las estrellas
Las posiciones de las estrellas en la esfera celeste se
mantienen prácticamente constantes durante milenios porque
sus movimientos propios son muy lentos, y porque todas
están muy lejos de la Tierra en relación al radio de la Tierra y
los ejes de la órbita terrestre. Sin embargo, sus coordenadas
eclípticas y ecuatoriales cambian secularmente debido a la
precesión de los ejes coordenados.
f) El Sol
El Sol se mueve por la eclíptica en sentido contrario a las
agujas del reloj, completando una vuelta en el transcurso de
1 año. Sus coordenadas en los solsticios y en los equinoccios
son siempre las siguientes:

g) La Luna
La órbita de la Luna transcurre por el círculo máximo (OL)
que resulta de intersectar el plano de la Luna con la esfera
celeste. La órbita de la Luna y la eclíptica (E) están inclinadas
un ángulo ι = 5.145º. Sus puntos de corte se denominan nodo
lunar ascendente (Ω) y nodo lunar descendente (Ω). Debido
al movimiento de precesión del Eje de la Luna, la órbita de la
Luna es una curva no cerrada que cambia constantemente su
posición entre las estrellas que rodean a la eclíptica, con un
período de 18.61 años. Los nodos lunares rotan sobre la

71
eclíptica con el mismo período, moviéndose en dirección
contraria al Sol, fenómeno que recibe el nombre de
movimiento de regresión de los nodos lunares.

Gráfico nº 17.- Los Nodos lunares

La declinación de la Luna varía mensualmente entre dos


valores extremos a uno y otro lado del ecuador celeste. El
extremo máximo, llamado lunisticio norte, lo alcanza
cuando su longitud eclíptica es la del solsticio de verano
(90º). El extremo mínimo, llamado lunisticio sur, lo alcanza
cuando su longitud eclíptica es la del solsticio de invierno
(270º). A su vez, debido al movimiento de precesión de su
órbita, el intervalo de declinaciones recorrido mensualmente
por la Luna varía con un período de 18.61 años,
aproximadamente, de la siguiente manera. Cuando el nodo
ascendente coincide con el equinoccio de primavera, la Luna
alcanza sus declinaciones mensuales extremas a lo largo del
ciclo de 18.61 años. Esta configuración recibe el nombre de
lunisticio mayor. La declinación mensual de la Luna en este
momento oscila entre ε+ι (lunisticio mayor norte) y -ε-ι
(lunisticio mayor sur). Pasados unos 4.6 años, el nodo

72
ascendente se encuentra en el solsticio de invierno, momento
en que el intervalo de declinaciones mensuales de la Luna
coincide con el intervalo de declinaciones del Sol a lo largo
de un año tropical. Pasados unos 4.6 años, el nodo
ascendente se encuentra sobre el equinoccio de otoño y la
Luna alcanza sus extremos mensuales mínimos. Esta
configuración recibe el nombre de lunisticio menor. La
declinación mensual de la Luna en este momento oscila entre
ε-ι(lunisticio menor norte) y -ε+ι (lunisticio menor sur).
Pasados unos 4.6 años, el nodo ascendente se encuentra en
el solsticio de verano, momento en que el intervalo de
declinaciones mensuales de la Luna vuelve a coincidir con el
intervalo de declinaciones del Sol a lo largo de un año
tropical. Pasados unos 4.6 años, el nodo ascendente vuelve
a situarse sobre el equinoccio de primavera y el ciclo vuelve a
comenzar. Las coordenadas de la Luna en los Lunasticios
mayores y menores sólo se ven afectadas por la disminución
de la oblicuidad de la eclíptica, siendo siempre las siguientes:

h) Sistema topocéntrico

Un observador situado en la superficie de la Tierra sólo


puede ver en cada instante una parte de la superficie celeste
que le rodea. La frontera entre la parte visible y la parte
invisible se denomina horizonte aparente. Para evitar las
irregularidades que suele presentar el horizonte aparente se
define en su lugar el horizonte astronómico.

73
Gráfico nº 18.- Sistema de referencia Topocéntrico

El horizonte astronómico (H) es el círculo máximo centrado en


el observador que tiene por eje la dirección del campo
gravitacional local, esta dirección define la vertical astronómica
del lugar. La vertical astronómica intersecta la superficie
celeste en dos puntos, llamados zenit (situado encima del
observador) y nadir (situado debajo del observador).
El Eje de la Tierra intersecta la superficie celeste en el polo
norte celeste (PN) y el polo sur celeste (PS). El ecuador celeste
(EC) es el círculo máximo cuyos polos son los polos celestes.
El ecuador celeste divide a la esfera celeste en un hemisferio
norte celeste y un hemisferio sur celeste.
El círculo máximo que pasa por los polos celestes y el zenit del
lugar se denomina meridiano celeste. La intersección del
meridiano celeste con el horizonte astronómico define los
puntos Norte (N) y Sur (S) del horizonte astronómico. Los polos
del meridiano celeste definen los puntos Este (E) y Oeste (O)

del horizonte astronómico. La altura angular ϕ del polo norte


celeste sobre el horizonte astronómico es exactamente igual a
la latitud geográfica del observador.

74
i) Coordenadas horizontales
Su círculo fundamental es el horizonte astronómico, su origen
es el punto Norte del horizonte astronómico y su polo principal
es el zenit del lugar. Las coordenadas (a, h) del sistema se
denominan acimut (a) y altura (h). El acimut se mide positivo en
el sentido de las agujas del reloj. A veces, en lugar de la altura
h se utiliza la distancia cenital z del astro (z = 90º - h).
j) Coordenadas horarias
Su círculo fundamental es el ecuador celeste, su origen es el
punto de intersección del meridiano celeste con el ecuador
celeste situado encima del horizonte, y su polo principal es el
polo norte celeste. Las coordenadas (θ, δ) del sistema se
denominan ángulo horario (θ) y declinación (δ). El ángulo
horario se mide positivo en el sentido de las agujas del reloj.
k) Movimiento diurno
El arco que describe diariamente un astro sobre el horizonte se
obtiene intersectando el paralelo de declinación del astro con el
horizonte astronómico del observador

Para un observador situado en latitud ϕ ≥ 0, los astros con

declinación δ > 90º- ϕ permanecen todo el día sobre el

horizonte. Los astros con declinación δ < -(90º - ϕ)


permanecen todo el día bajo el horizonte. Los astros con

declinación |δ| ≤ 90º - ϕ salen y se ponen a lo largo del día.


Los puntos de salida y puesta de un astro son simétricos
respecto de la línea N-S del horizonte astronómico.

75
Gráfico nº 19.- Modelo del movimiento diurno

Un astro alcanza su altura máxima hm sobre el horizonte al


pasar por el meridiano celeste, lo que se denomina culminación

superior del astro. Los astros con declinación δ< ϕ culminan

al sur del zenit (hm = 90º - ϕ+δ). Los astros con declinación δ

= ϕ culminan en el zenit (hm = 90º). Los astros con declinación

δ > ϕ culminan al norte del zenit (hm = 90º + ϕ-δ).


l) Tiempo sidéreo y tiempo solar
La declinación de un astro determina su trayectoria diurna.
Para saber en qué lugar de su trayectoria se encuentra en
cada instante hay que conocer, Además, su ángulo horario en
cada instante. Para ello es suficiente conocer su ascensión
recta y el ángulo horario del equinoccio de primavera en cada
instante.
Con este fin se define el día sidéreo como el período de tiempo
que transcurre entre dos culminaciones superiores sucesivas
del equinoccio de primavera en el horizonte local. El tiempo
transcurrido desde la culminación superior del equinoccio de
primavera hasta cualquier otra posición de ese punto,

76
expresado en fracciones de día sidéreo, se denomina tiempo
sidéreo.
El ángulo que gira la esfera celeste desde el momento de la
culminación superior del equinoccio de primavera hasta
cualquier otro momento, es igual al ángulo horario del
equinoccio de primavera en ese momento. En consecuencia, el
tiempo sidéreo en un meridiano dado es numéricamente igual
en todo momento a la ascensión recta de un astro cualquiera,
más el ángulo horario de éste.
El tiempo sidéreo resulta muy útil para calcular las posiciones
de los astros en el cielo, pero la vida en la Tierra se rige por la
sucesión de los días y las noches, es decir, por la rotación
diaria de la Tierra respecto al Sol. Con este fin se define el día
solar (medio) como el período de tiempo (medio) que
transcurre entre dos culminaciones superiores sucesivas del
Sol en el horizonte local. El período de tiempo transcurrido
desde la culminación superior del Sol hasta otra posición suya,
expresado en fracciones de día solar, se denomina tiempo
solar (medio). Debido al movimiento diario del Sol sobre la
eclíptica, el día sidéreo resulta más corto que el día solar en
algo menos de 4 minutos solares. Fórmulas matemáticas
sencillas permiten pasar el tiempo sidéreo a tiempo solar, y
viceversa, por lo que, una vez conocida la hora solar o sidérea
del instante de observación, es sencillo calcular las posiciones
de los astros respecto del horizonte del observador.

m) Posición aparente de un astro


El esquema geométrico descrito determina las posiciones de
los astros en la esfera celeste sin tener en cuenta las
distorsiones que introducen la atmósfera, el horizonte aparente,
los diámetros del Sol y la Luna y la posición geográfica del
observador sobre la superficie de la Tierra. Estos efectos
deben de tenerse en cuenta cuando se desea conocer con

77
precisión las posiciones aparentes de los astros respecto del
horizonte local.

n) Diámetros del Sol y la Luna


A diferencia del resto de los astros, los diámetros aparentes del
Sol y la Luna, lejos de ser inapreciables, miden
aproximadamente 0º.5 cada uno de ellos. Dado que sus
trayectorias de salida y puesta están inclinadas respecto al
horizonte, sus azimuts de salida y puesta varían ligeramente en
función del punto del disco que se tome como referencia.
o) Horizonte aparente
Los puntos de salida y puesta de un astro en el horizonte
aparente dependen críticamente de la altura del horizonte
aparente en las zonas de salida y puesta del astro. Como las
alturas pueden variar enormemente, incluso de un lugar a otro
muy cercano, los puntos de salida y puesta deben ser
calculados para cada horizonte aparente particular.
p) Refracción
La atmósfera terrestre desvía la dirección de los rayos de luz
que la atraviesan causando que la altura aparente de un astro
sea mayor para un observador rodeado de atmósfera, que para
un observador sin atmósfera. La diferencia positiva entre estas
dos alturas se denomina ángulo de refracción. El ángulo de
refracción depende básicamente de la temperatura, la presión
atmosférica, y la distancia cenital del astro. Su efecto es más
acusado cuando el astro se encuentra cerca del horizonte
astronómico (mide unos 0º.6 en el horizonte astronómico),
disminuye rápidamente a medida que aumenta la altura del
astro y se anula en el zenit. La refracción no afecta al acimut
del astro, pero al tener efecto sobre su altura, afecta a sus
azimuts de salida y puesta, que deben calcularse teniendo en
cuenta este fenómeno. Como la refracción varía en función de
las condiciones atmosféricas, los puntos por donde sale y se

78
pone un astro con declinación δ varían dentro de un pequeño
margen, en función de las variaciones atmosféricas.
La refracción causa, además, que los discos del Sol y la Luna
se observen de forma ovalada en las cercanías del horizonte.
Ello es debido a que la refracción del borde inferior del disco es
mayor en unos 0º.1 que la refracción del borde superior,
mientras que el diámetro horizontal del disco se mantiene
inalterado.
q) Extinción
El paso por la atmósfera debilita la luz que nos llega de un
astro, en función de las condiciones atmosféricas y la distancia
que atraviesa en ella. El debilitamiento es mayor cuando el
astro está cerca del horizonte astronómico y disminuye
rápidamente en la dirección del cenit. Este pequeño
debilitamiento no afecta en la práctica al Sol o la Luna debido a
su gran luminosidad. En el caso de las estrellas y los planetas,
el debilitamiento puede llegar a extinguir completamente el
rayo de luz del astro mientras éste se encuentre por debajo de
una cierta altura sobre el horizonte. La altura mínima aparente
a la que debe de encontrarse el astro sobre el horizonte
astronómico del lugar para ser visible se denomina ángulo de
extinción del astro. Su efecto sobre los azimuts de salida y
puesta sólo debemos tenerlo en cuenta cuando la altura del
horizonte aparente sea menor que el ángulo de extinción del
astro.
r) Paralaje
Estrictamente hablando, la posición de un astro respecto a los
ejes coordenados celestes no es la misma cuando se observa
desde el centro de la Tierra, que cuando se observa desde un
punto de la superficie terrestre. Para resolver este problema se
define la paralaje geocéntrica de un astro como la diferencia
entre sus alturas geocéntricas y topocéntricas. La paralaje
geocéntrica de un astro se anula en el cenit, crece con la
distancia cenital del astro, y es máximo en el horizonte

79
astronómico del observador (paralaje horizontal). Dada la gran
distancia existente entre la Tierra y los astros, este efecto sólo
resulta realmente apreciable a simple vista en el caso de la
Luna, cuyo paralaje horizontal ecuatorial medio mide 0º.95,
mientras que el del Sol es inferior a 9 arcosegundos, el de los
planetas es inferior 1 arcosegundo y el de las estrellas es
inferior a 0.00004 arcosegundos.
s) Movimiento del Disco Solar
Visto desde la superficie de la Tierra, el Sol es un disco o
círculo cuyo diámetro aparente mide en promedio unos 32
arcominutos, y cuyo centro se mueve a lo largo de la eclíptica
completando una órbita en unos 365.24 días, contados a partir
de su paso por el equinoccio de primavera. Este período de
tiempo se denomina año solar ó año tropical. En consecuencia,
el lugar por donde sale y se pone el Sol en el horizonte cambia
cada día, cambiando también la amplitud y altura del arco que
describe cada día en el cielo. Como es bien sabido, este
cambio cíclico anual en las condiciones de insolación de las
distintas zonas de la Tierra es el causante directo de la
sucesión de las estaciones climatológicas en la Tierra. El
movimiento del Sol sobre el horizonte a lo largo del año tropical
cabe resumirlo de la siguiente manera.

Gráfico nº 20.- Recorrido aparente del disco solar

80
 Solsticio de invierno: El Sol alcanza este día su
declinación mínima anual (-ε), sale por su posición más
al sur en el horizonte este, describe su arco más bajo y
más corto en el cielo, y se pone por su posición más al sur
en el horizonte oeste. Señala la noche más larga del año.
A partir de este día la declinación del Sol empieza a
aumentar continuamente, por lo que el Sol sale y se pone
cada vez más al norte, describiendo arcos cada vez más
altos y más amplios en el cielo. Disminuye la duración de
las noches.
 Equinoccio de primavera: La declinación del Sol alcanza
el 0º. El Sol sale por el punto Este del horizonte, describe
medio círculo máximo en el cielo, y se pone por el punto
Oeste. La noche iguala al día. En días sucesivos, la
declinación del Sol continua aumentando, por lo que sale
y se pone cada vez más al norte, describiendo arcos cada
vez más altos y más amplios en el cielo. La duración de
las noches sigue disminuyendo.
 Solsticio de verano: El Sol alcanza su máxima
declinación (+ε), por lo que sale y se pone por sus
posiciones más al norte en el horizonte, describiendo su
arco más alto y más amplio en el cielo. Señala la noche
más corta del año. A partir de este día la declinación del
Sol comienza a disminuir, por lo que se invierte la
dirección del movimiento del Sol en el horizonte, que
ahora sale y se pone cada vez más hacia el sur,
describiendo arcos cada vez más bajos y más cortos en el
cielo. Aumenta la duración de las noches. A partir de este
día la declinación del Sol comienza a disminuir, por lo que
se invierte la dirección del movimiento del Sol en el
horizonte, que ahora sale y se pone cada vez más hacia
el sur, describiendo arcos cada vez más bajos y más
cortos en el cielo. Aumenta la duración de las noches.

81
 Equinoccio de otoño: La declinación del Sol alcanza el
0º. El Sol sale de nuevo por el punto Este del horizonte,
describe medio círculo en el cielo, y se pone de nuevo por
el punto Oeste. La noche iguala al día. En días sucesivos
la declinación del Sol continúa disminuyendo, por lo que
sigue saliendo y poniéndose cada vez más al sur, y
describiendo arcos cada vez más bajos y más cortos en el
cielo. Sigue aumentando la duración de las noches.

Gráfico nº 21.- Equinoccios y solsticios en relación a la inclinación del eje terrestre


Cuando la declinación del Sol alcanza de nuevo su valor
mínimo en el solsticio de invierno, el ciclo vuelve a comenzar.
El movimiento del Sol en el horizonte invierte su sentido,
saliendo y poniéndose cada vez más al norte, hasta alcanzar
sus posiciones extremas en el solsticio de verano unos seis
meses más tarde. Y así, sucesivamente.
t) Determinación del año tropical
Numerosas culturas han utilizado el movimiento del Sol sobre
el horizonte para registrar el transcurso del tiempo y las

82
estaciones, ya sea observando directamente los lugares del
horizonte por donde sale y se pone, ya sea observando la
dirección de la sombra de un gnomon a la salida o la puesta
del Sol, o su longitud al paso del Sol por el meridiano local.

La observación y descubrimiento de este aparente


desplazamiento solar fue un hecho clave y de importancia
fundamental para que los antiguos pobladores de Caral se
orientaran en el tiempo edificando objetos orientados hacia
estos puntos relacionados con el disco solar en fechas que
advertirían oportunamente de cambios en los ciclos
estacionales con su repercusión en la naturaleza,
posiblemente dispusieron las pirámides de modo que fueran
utilizadas como hitos de referencia espacio temporal para
poder visualizar y vigilar el cambio de las estaciones.

Hasta nuestros días podemos encontrar esta antiquísima


tradición en agricultores del altiplano, que se rigen por la
observación de diversos fenómenos astronómicos para
guiarse en los momentos que debían iniciar las diversas
faenas agrícolas y ganaderas, como siembras, cosechas o
esquilas.

La fecha mas significativa la representa el Solsticio de


Invierno (Inti Raymi de los Incas) este es el momento elegido
para la celebración del Año Nuevo Andino, que "marca el fin
de una temporada de cosecha y el inicio de una nueva época
de siembra". Según los antiguos Amautas en junio descansa
la tierra. Y el 22 de junio es cuando más se aleja el sol.
Indicando el punto clave para que retorne el reordenamiento
de la tierra. Originalmente es el marat'aqa, o el
agradecimiento al Sol y la Pachamama por las cosechas. A
partir de ese momento se inicia la nueva siembra. Es el de

83
realizar una ceremonia de agradecimiento “para que el sol
brinde su energía para una buena cosecha”.

Con la ayuda de un simulador computacional de la bóveda


celeste se pudo recrear virtualmente la trayectoria del Sol en
el complejo arqueológico que incluyen las montañas del
lugar, con el objetivo de emular el movimiento del disco solar
en su recorrido anual y como fue posiblemente percibido por
los pobladores de la época desde la zona en que se ubican
las pirámides.

Gráfico nº 22 Visualización en modelo digital del Valle de Supe, desde “La


Pirámide de la Galería” en Caral emulando el ocaso en las fechas
correspondientes a los solsticios y equinoccios.

Sin embargo, es necesario tener en cuenta que la declinación


del Sol varía mucho más rápidamente cuando transita los
equinoccios que cuando transita los solsticios, por lo que los
puntos de salida y puesta se desplazan por el horizonte
mucho más rápidamente en los alrededores de los
equinoccios que en los alrededores de los solsticios.
Este hecho tiene consecuencias observacionales
importantes. Por una parte, resulta muy sencillo determinar
con precisión el punto del horizonte por donde sale o se pone
el Sol el día del solsticio, porque en los alrededores de esa

84
fecha el Sol prácticamente se .para varios días en la misma
posición del horizonte. Pero, por la misma razón, resulta
difícil averiguar cuál es exactamente el día del solsticio
observando el lugar del orto o la puesta del Sol en el
horizonte. Por otra parte, es difícil determinar la dirección
exacta del Este y del Oeste ya que en los equinoccios la
declinación del Sol cambia apreciablemente en el transcurso
de un sólo día. En cambio, si se ha podido determinar esa
dirección con cierta exactitud, es fácil saber que día traspasa
el Sol esa dirección y fijar, por tanto, la fecha del equinoccio

Gráfico nº 23

u) Movimiento del Disco Lunar


Las revoluciones lunares son uno de los fenómenos más
utilizado a lo largo de la historia para registrar el paso del
tiempo, pues proporcionan de manera natural una forma fácil
de medir períodos de tiempo intermedios entre el año y el día.
La existencia de calendarios lunares puede remontarse a los
tiempos del paleolítico superior (Marshak 1972).
v) Mes sinódico
Se denomina mes sinódico al tiempo que tarda la Luna en
completar una vuelta a la Tierra con respecto al Sol. Su
duración aproximada es de 29.53 días. Durante un mes
sinódico la Luna pasa por sus cuatro fases, que por comodidad
hemos numerado de la siguiente manera: 0 Luna nueva, 1

85
cuarto creciente, 2 Luna llena, 3 cuarto menguante y 4≡0, de
nuevo, Luna nueva

Gráfico nº 24
Después de haber estado invisible 2 o 3 días en el cielo debido
a su cercanía al Sol, la Luna aparece por primera vez durante
un corto espacio de tiempo en el horizonte oeste a la puesta
del Sol (día 1). En los días siguientes aparece a la puesta del
Sol cada vez más alta, más al este y más iluminada,
alcanzando el cuarto creciente unos 6 días más tarde (día 7).
Una semana después la Luna sale llena por el este, en el
momento de ponerse el Sol por el oeste (día 14). A partir de
entonces, la Luna sale sobre el horizonte este cada vez más
tarde y menos iluminada, alcanzando el cuarto decreciente a
salir a mitad de la noche una semana más tarde (día 21). Unos
6 días después se ve la Luna por última vez saliendo en el
horizonte este por unos momentos, justo antes de la salida del
Sol (día 27). A partir de entonces la Luna permanecerá oculta
por la luz del Sol durante 2 o 3 días (días 28/29/30), volviendo
a verse de nuevo brevemente el primer creciente en el
horizonte oeste justo a la puesta del Sol, 29 o 30 días después
de verse el primer creciente que comenzaba el ciclo (día 1).
Consecuentemente, durante la primera mitad del mes sinódico,
es decir, entre el primer creciente de Luna y la Luna llena, se
ve la puesta de la Luna en el horizonte, pero no se ve su
salida por ocurrir de día. Por el contrario, en la segunda mitad
del mes se ve la salida de la Luna todos los días, pero no
puede verse su puesta por ocurrir de día.
w) Mes sideral
Se denomina mes sideral al período de tiempo que tarda la
Luna en completar una vuelta a la Tierra respecto a las

86
estrellas. Su duración aproximada es de 27.32 días. Suele
comenzar con el paso de la Luna por una estrella o por una
constelación, cuya elección varía entre culturas. Si observamos
en un momento determinado de la noche el paso de la Luna
por una cierta estrella, el siguiente paso tendrá lugar 27 días y
unas 8 horas después, por lo que puede suceder de día y no
puede observarse, pudiendo ocurrir lo mismo con el siguiente
paso. Sin embargo, el tercer paso sucederá aproximadamente
a la misma hora de la noche en que ocurrió el primer paso. Por
tanto, conviene tener en cuenta el período de 3 meses
siderales ≅ 82 días, por el cual la Luna vuelve a pasar por la
misma estrella, aproximadamente una hora antes de la hora de
paso inicial .
La observación sucesiva de estos pasos se complica al ocurrir
en diferentes fases de la Luna y en diferentes posiciones de la
estrella respecto al horizonte. Dado que la Luna se mueve
diariamente unos 13º sobre su órbita con respecto a las
estrellas, algunas culturas han dividido la franja del cielo
recorrida por la Luna en 27 o 28 zonas, llamadas mansiones
lunares, de modo que la Luna permanece cada día en una
mansión distinta, regresando a la misma mansión 27 o 28 días
más tarde.
y) Mes dracónico
Se denomina mes dracónico al tiempo que tarda la Luna en
completar una vuelta a la Tierra con respecto al nodo
ascendente de su órbita. Su duración aproximada es de 27.21
días. Resulta de interés para el cálculo de eclipses.
x) Regresión de los nodos
Los cambios en los extremos de los intervalos mensuales de
declinación de la Luna a lo largo del período de regresión de
los nodos (18.61 años) implican los correspondientes cambios
en la posiciones relativas de los azimuts de sus orto y puestas
en los Lunasticios, cuyos efectos pueden verse en la figura
siguiente. En ella se representan las posiciones relativas del

87
orto y puesta del Sol en el solsticio de invierno (SI) y verano
(SV), y de la Luna en el lunasticio mayor norte (LMN) y sur
(LMS), así como en los Lunasticios menores norte (LmN) y sur
(LmS). Las amplitudes de los ángulos dependen en cada caso
de la época elegida y de la latitud del observador. Nótese que
los intervalos de declinación en los Lunasticios vienen
estrechándose lentamente en los últimos 3,000 años debido a
la disminución de la oblicuidad de la eclíptica.

Gráfico nº 25

Movimiento de las fases en el horizonte


Según la posición del Sol en la eclíptica, la Luna recorre sus
declinaciones mensuales en determinadas fases,
independientemente de la posición de los nodos. Así, las fases
de la Luna se desplazan por el horizonte durante un año
tropical de la manera que se muestra en la Figura siguiente.
Las amplitudes de estos movimientos en un mes en particular
dependen de las posiciones de los nodos y de la latitud del
observador.

88
Gráfico nº 26

z) Los Ciclos de Milankovitch


Milutin Milankovitch fue un astrofísico serbio, profesor de
mecánica en la Universidad de Belgrado, que dedicó su carrera
a desarrollar una teoría matemática del clima. En 1941 publicó
sus conclusiones más importantes: los cambios en el reparto
estacional de la insolación, debidos a factores astronómicos,
son los responsables de la expansión y retirada de los grandes
mantos glaciares del Pleistoceno. Las teorías de
Milankovitch19, que ya habían sido sugeridas por el escocés
James Croll en 1864, fueron olvidadas y no renacieron con
fuerza hasta la reciente década de 1980, en que se comprobó
que existían correlaciones entre las periodicidades halladas por
Milankovitch y los ciclos glaciales e interglaciares del
Cuaternario. En 1920 Milankovitch publicó tales cálculos
realizados por él mismo para la Tierra, Venus y Marte

19
Milankovitch M. 1920, Théorie Mathématique de phénomenès thermiques
produits par la radiation solaire, Gauthiers-Volars, Paris

89
Gráfico nº 27

Debido a las influencias gravitatorias de los otros planetas del


Sistema Solar, a lo largo de los milenios se van modificando
cíclicamente diversos parámetros astronómicos del movimiento
de la Tierra, como son: a) la relación del momento de los
equinoccios y de los solsticios con respecto al momento de
mayor o menor lejanía de la Tierra al Sol (precesión de los
equinoccios), b) la forma ligeramente elíptica de la órbita
terrestre (excentricidad de la órbita), y c) la inclinación del eje
de rotación de la Tierra (oblicuidad del eje). Al combinarse los
tres ciclos de variación, con sus diferentes periodicidades e
intensidades, se producen variaciones complejas en la
cantidad de radiación solar interceptada en cada latitud y en
cada estación del año.
En la teoría de Milankovitch se asume que la energía solar
incidente en la Tierra en su globalidad y durante un año
completo es siempre la misma (excepto en los cambios de
excentricidad, en donde se admite un ligero cambio). La
variación relevante radica en el diferente reparto de la energía
en cada estación del año y en cada hemisferio, según van
variando a lo largo de los años las características de la órbita.
También es interesante anotar que cada uno de los tres ciclos
de Milankovitch puede producir efectos climáticos que son
diferentes en cada latitud.

90
Variación de la inclinación del eje terrestre

La inclinación del eje terrestre de rotación varía con una


periodicidad de unos 41000 años. Cuando el valor es alto, la
diferencia de insolación estacional es grande, y viceversa (si el
ángulo fuese cero no habría estaciones). El valor actual es de
23.4º y durante los dos últimos millones de años ha variado
entre un valor máximo de 24.5º y un mínimo de 21.5º.

Gráfico nº 28

La oblicuidad parece haber regido la periodicidad de los ciclos


glaciales en la primera parte del Pleistoceno (ciclos de unos
40.000 años) y probablemente tenga una gran influencia
también en la segunda, en donde los ciclos son más largos
(entre 80.000 y 120.000 años). Una inclinación fuerte
favorecería el deshielo veraniego de los grandes mantos de
hielo.

La inclinación del eje terrestre influye levemente en los azimuts


de los ortos y ocasos del disco solar en el horizonte, por lo que
es importante determinar el grado de inclinación del eje
terrestre en correspondencia a la fecha que data el
asentamiento arqueológico si se desea establecer una
correlación exacta entre alineamientos astronómicos y
orientación de edificaciones del pasado.

91
2.01.04 El calendario y la observación de los ciclos naturales

Desde muy pronto, el hombre aprendió a medir el paso del


tiempo utilizando los ciclos astronómicos básicos: el día, el mes
y el año. Consciente de la regularidad de estos ciclos y de su
relación con los ciclos de la naturaleza, aprendió a planificar y
coordinar las actividades del grupo utilizando como referencia
las posiciones de los astros en el cielo. Un calendario
astronómico es, básicamente, un sistema de cómputo del
tiempo a largo plazo, diseñado para mantenerse en sincronía
con las revoluciones de uno o varios astros, sus funciones
básicas son:

 Proporcionar un sistema consensuado de medida del


tiempo que sirva para planificar y coordinar las
actividades a corto, medio y largo plazo de un grupo
humano.

 Mantener una contabilidad y registro acumulado del


paso del tiempo.

Aunque las bases astronómicas coincidan, tanto los ciclos que


se eligen como la forma en que se combinan, calculan y
aplican para formar un calendario pueden variar mucho de
unas culturas a otras, y de hecho lo hacen. Algunos
calendarios son ajustados periódicamente mediante
observaciones astronómicas regulares, otros reiteran
estimaciones teóricas que inevitablemente terminan
desfasándose respecto de las posiciones reales de los astros.

Unos se rigen por reglas claras y precisas definidas de


antemano, otros por reglas ambiguas sujetas a reevaluaciones
a posteriori. Unos cuentan ininterrumpidamente miles de años,
otros sólo guardan la cuenta de unos pocos años. Unos se

92
registran y transmiten por escrito, otros de forma oral. Además,
en un grupo cultural pueden coexistir diversos calendarios,
cumpliendo cada uno de ellos diferentes funciones
económicas, sociales, políticas, religiosas o culturales Los
calendarios no son sistemas estáticos, pudiendo ser
modificados a lo largo del tiempo para mejorar su exactitud o
su utilidad, o bien para servir a otros intereses económicos,
sociales, políticos, religiosos o culturales.
El calendario inca
Sistema de medición del tiempo empleado por los Incas en el
Cuzco, hacia el siglo XV. Constaba de 12 meses de treinta días
cada uno, divididos en tres semanas de 10 días. Estaba
determinado a partir de la observación del sol y la luna.
El año, estaba dividido en 12 lunas de 30 días cada una. La
organización mítico-religiosa determinaba la sucesión en el
calendario a través de las 12 lunas. Correspondientes a
festividades y actividades cotidianas.

Gráfico nº 29 Los incas desarrollaron instrumentos tallados en la roca base de


sus templos como el INTIHUATANA el cual funcionó como indicador visual
en conexión al desplazamiento anual del disco solar.
93
LOS DOCE MESES DEL CALENDARIO INCAINCO

1. Capac Raimi Quilla, Luna de la Gran Fiesta del Sol, mes de


diciembre o descanso.
2. Camay Quilla, Pequeña Luna Creciente, enero, tiempo de ver el
maíz creciendo.
3. Hatun Pucuy Quilla, Gran Luna Creciente, febrero, tiempo de
vestir taparrabos.
4. Pacha Pucuy Quilla, Luna de la flor creciente, marzo, mes de
maduración de la tierra.
5. Ayrihua Quilla, Luna de las espigas gemelas, abril, mes de
cosecha y descanso.
6. Aymoray Quilla, Luna de la cosecha, mayo, el maíz se seca para
ser almacenado.
7. Haucai Cusqui Quilla, junio, cosecha de patata y descanso,
roturación del suelo.
8. Chacra Conaqui Quilla, Luna de riego, julio, mes de redistribución
de tierras.
9. Chacra Yapuy Quilla, Luna de siembra, agosto, mes de sembrar
las tierras.
10. Coia Raymi Quilla, Luna de la fiesta de la Luna, septiembre, mes
de plantar.
11. Uma Raymi Quilla, Luna de la fiesta de la provincia de Oma,
octubre, tiempo de espantar a los pájaros de los campos recién
cultivados.
12. Ayamarca Raymi Quilla, Luna de la fiesta de la provincia de
Ayamarca, noviembre, tiempo de regar los campos.

94
Gráfico nº 30.- Astrólogo – representación realizada por Guaman Poma

La crónica de Guaman Poma contiene información sobre un astrólogo


indígena, llamado Juan Yunpa, quien conocía las posiciones del disco Solar
en el horizonte a lo largo del año, al observar sus ortos y ocasos, para lo
cual hace uso de “marcadores solares” denominados “cillas” (asientos)
donde el Sol se ubicaba de acuerdo a las fechas previstas, teniendo cada
mes o periodo su “cilla” correspondiente; enfatizando la posición del Sol en
la “cilla” correspondiente a Agosto, como referente para observar el
movimiento de este astro.

Asimismo, este cronista, da a entender el uso de ventanas, luz y sombras en


construcciones para efectuar observaciones astronómicas, con lo cual
podían tener fechas mas precisas que indicaran el tiempo de realizar
actividades agrícolas.

95
Con respecto a la representación de Guaman Poma de Ayala del Astrónomo
incaico, la imagen contiene información relevante a partir de sus grafismos
que consideramos oportuno comentar:

 Dualismo Sol ( izquierda superior ) Luna ( derecha superior )


 El quipu en la mano izquierda, el cual probablemente tuvo funciones
de registrar períodos de tiempo en relación al movimiento cíclico de
las luminarias y registro de calendario.

En Caral se encontró durante las excavaciones realizadas el 2005 en La


“Pirámide del Galería” el quipu más antiguo descubierto hasta la fecha, el
cual contiene los mismos elementos y técnicas del mismo tipo de quipu
utilizado miles de años después por los incas.

Gráfico nº 31 Quipu hallado en Caral – 2005 (PEACS)

96
La influencia del ciclo lunar nodal en el clima y el aumento
de los recursos marinos

Los trabajos realizados y publicados en el 2004 por el profesor


Harald Yndestad (20) del departamento de Ecología Industrial y
Gestión tecnológica de la “Universidad Noruega de Ciencia y
Tecnología” , representan un indicador y referente muy importante
para entender la influencia de la Luna , sus ciclos astronómicos y la
temperatura del mar relacionados con los ciclos de la vida en los
océanos, uno de los datos más significativos de su investigación
es la correlación entre los ciclos armónicos NODALES (18.6 años)
y el aumento considerable de la biomasa marina en momentos
específicos.

Los ciclos nodales pueden ser registrados a simple vista mediante


la observación del disco LUNAR con un punto fijo del horizonte
como referencia visual, por lo que es muy probable que los
antiguos pobladores de Caral hallan tomado cuenta de este
fenómeno y su relación con el aumento de la biomasa y recursos
marítimos que hayan derivado en la construcción de edificaciones
alineadas especialmente para la observación del ciclo nodal
armónico de 18.6 años.

Este hecho explicaría un importante factor de supervivencia


encontrado por los antiguos pescadores, usado para la
administración durante períodos específicos de abundantes
excedentes marinos del litoral y organizar las faenas de pesca, ya
que en base a investigaciones científicas del profesor Yndestad se
ha podido comprobar un marcado aumento de cardúmenes de
distintas especies en los océanos en conexión con la explosión
cuantitativa del plancton en la cadena trófica, en sincronía con
estos ciclos nodales de 18.61 años y que explicaría la abundancia
de vestigios de fauna marina en el interior de las pirámides.

20
Tesis doctoral, 2004 “The lunar nodal cycle influence on the barent
oceans”, Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología.

97
3.00 DECODIFICANDO CARAL
Para la verificación y confirmación de las hipótesis planteadas
sobre el modelo de organización y planificación espacial usado
en el “Complejo Arqueológico de Caral – Supe” hemos
establecido los siguientes componentes de análisis:

3.01 Urbano Arquitectónico.- Organización del sitio, identificación


de patrones, tramas urbanas y .estrategias de localización
regional que comprenden las variables relacionadas a:

 Alineamientos y orientaciones astronómicas de


edificaciones monumentales.
 Espacialidad del lugar, localización de los edificios y
ubicación de componentes arquitectónicos.
 Tecnología constructiva para utilizada para el trazado
urbanístico, control y dirección de ejes de
emplazamiento de los edificios.

3.02 Semiológico Significado e Influencia que habría tenido el


pensamiento mágico religioso en las decisiones para la
organización de la arquitectura en la zona.

3.03 Concepción espacio – temporal Aproximarse a la noción y


concepción del “tiempo” de los antiguos pobladores de
Caral, mediante el análisis de símbolos y elementos
arquitectónicos en las edificaciones monumentales que
posiblemente fueron usados como observatorios e
indicadores visuales de los ciclos del Sol y la Luna para fines
ceremoniales y administrativos.

En base a estos tres componentes nos aproximaremos a


posibles respuestas sobre algunas de las motivaciones que
intervinieron en la organización espacial de Caral, las que
fueron formuladas inicialmente en el planteamiento del estudio.

98
3.01 Componente Urbano arquitectónico :
Alineamientos y orientaciones astronómicas de las edificaciones
monumentales en Caral.
Empezamos con el análisis de patrones de ocupación en el lugar
con el trazado de “capas” sobre el plano del levantamiento
topográfico de Caral, para realizar este procedimiento es
necesario construir preliminarmente los siguientes indicadores:

1) Proyección Gnomónica.- Trayectoria del recorrido


solar durante el año, remarcando los puntos
relacionados con solsticios y equinoccios para la latitud
de Caral - 10º 53’ Sur (tabla nº 2)

2) Puntos de ubicación de Lunasticios.- En los puntos


del horizonte durante los ortos y ocaso solares en el
solsticio de verano y el solsticio de invierno se
adicionan un par de ejes con una separación angular
de 5º 8’ 43” que indicarán los alineamientos lunares
relacionados con el ciclo nodal (ver tabla nº 3)

3) Tabla de datos .- Los indicadores y valores angulares


son llevados a una plantilla conteniendo los datos
importantes del sitio arqueológico ha analizar para
realizar la grilla astronómica ( ver tabla nº 4)

Es importante recalcar que los datos para la elaboración de los


indicadores astronómicos se realizan tomando en consideración
la época en que aproximadamente fue construida la edificación
21
en estudio ( )

21
Según los fechados radiocarbónicos Caral se remontaría al año 3,000 AC, lo que
conlleva a ajustar levemente variables relacionadas con el cambio del ángulo del eje
de inclinación de la tierra y la Luna ( ver tabla 4 , gráficos nº 15 y nº 28), es
importante señalar que los cambios geológicos y astronómicos significativos ocurren
en períodos de decenas miles de años.

99
Culminado este procedimiento se podrá plasmar una grilla
astronómica sobre el plano del “Complejo Arqueológico de
Caral” para verificar o descartar correlaciones entre: eventos
astronómicos, ceremoniales religiosos en fechas específicas y
planificación urbanística del sitio.

La elección de los cinco ejes y puntos de referencia en el


horizonte en fechas específicas como equinoccios y solsticios
se argumenta en función a su conexión con los cambios de
estación y la evidente repercusión en la vida orgánica de la tierra
y sus fenómenos climatológicos (lluvias, sequías, cambios de
temperatura, crecidas de ríos, etc.)

Los que posiblemente fueron advertidos hace 5,000 años por los
antiguos pobladores y usados para la organización de sus
actividades agrícolas, productivas y como indicador visual del
tiempo en relación a los ciclos solares y lunares.

100
Tabla 2

101
Latitud: 10º 53’ Sur
Lugar: Caral - Supe

Tabla 3

102
Tabla 4
103
Matriz para el análisis astronómico de alineamientos de
edificaciones ceremoniales en Caral
Para realizar el análisis ordenado de la “Grilla astronómica”
sobre el plano del complejo arqueológico de Caral, construimos
una matriz con los siguientes componentes:

1) Filas.- Las que contienen los edificios monumentales


para el estudio, entre los que se encuentran:
 Pirámide mayor ( Sector E )
 Pirámide Menor ( Sector G )
 Pirámide de la Galería ( Sector H)
 Pirámide de la Huanca ( Sector I)
 Pirámide del Anfiteatro ( Sector L)
 Pirámide de la Cantera ( Sector B)
 Pirámide Antigua ( Sector C)

2) Columnas.- Las que contienen los dos tipos principales de


alineamientos a verificar y que se dividen en :
Alineamientos solares
 Solsticios de verano e invierno
 Equinoccios
Alineamientos lunares
 Lunasticio mayor norte
 Lunasticio mayor Sur
 Lunasticio menor norte
 Lunasticio menor sur

104
Tabla 5

105
Trazado de la “grilla astronómica”
Se generó un barrido con diversas tramas paralelas sobre
el levantamiento topográfico de Caral (Plano Nº 1) para
contrastar y verificar con la geometría de cada una de las
edificaciones monumentales los paralelismos,
alineamientos y orientaciones astronómicas planteadas en
las hipótesis de investigación. Este procedimiento contó
con el apoyo de programas informáticos y verificación en el
campo, para filtrar seleccionar los patrones que contienen
paralelismos con las geometrías de las edificaciones
monumentales.
A partir de este método se descartaron algunos ejes con
sus puntos de referencia visual en el horizonte y se
seleccionaron otros marcadamente significativos que son
presentados en los planos S-1 / S-2/ S-3 Y L-1 que
confirmarían una correlación astronómica de las luminarias
(Sol – Luna) en fechas específicas con los ejes de
emplazamiento de los edificios ceremoniales y vinculados a
toda la organización espacial del sitio:

Alineamientos solares:
 PLANO S-1 Proyección acimutal del ocaso para el
solsticio de invierno ( 22 de junio )
 PLANO S-2 Proyección acimutal del orto para el
solsticio de verano (22 de Diciembre).
 PLANO S-3 Proyección acimutal de los ortos y ocasos
para los equinoccios del 21 Marzo y 21 Septiembre, en
este plano no se encontró vinculación con ejes del sitio.

Alineamientos Lunares:
 PLANO L-1 Proyección acimutal del ocaso para el
Lunasticio mayor norte

106
Verificando alineamientos solares en el “Complejo
Arqueológico de Caral”.

PLANO S-1: Alineamientos y orientaciones astronómicas con el


punto del ocaso del disco solar durante el solsticio
de invierno (22 de Junio) Azimut: 294º 27’

El trazado y registro del paralelismo angular promedio de 294º


27’ Noroeste en escalinatas y muros aterrazados con similar
orientación azimutal, arrojaron los siguientes resultados de
alineamientos paralelos en tres edificaciones monumentales:

 Eje de escalinata principal orientado hacia el Noroeste y


paralelismo de ejes en 20 muros aterrazados de
plataformas escalonadas en la “Pirámide de la
Galería”.

 Eje de escalinata principal ubicado y orientado hacia el


Noroeste, 8 muros aterrazados de plataformas
escalonadas y seis ejes de muros en recintos ubicados
en la plataforma superior de la “Pirámide Menor”.

 En la Pirámide Mayor se registraron 52 muros que


conforman las plataformas escalonadas y más de 32
muros de recintos de espacios ceremoniales que
comparten paralelismo longitudinal con los ejes axiales
de la Pirámide Menor y Pirámide de la Galería.

107
108
PLANO S-2: Alineamientos y orientaciones astronómicas con
el orto o salida del disco solar durante el
amanecer solsticio de verano (22 de
Diciembre) Azimut: 114º 27’ Noroeste.

El trazado y registro del paralelismo angular promedio de 114º


27’ Sureste en escalinatas y muros aterrazados con similar
orientación acimutal, arrojaron los siguientes resultados de
alineamientos paralelos en dos edificaciones monumentales:

 Eje axial de escalera principal orientado hacia el Sureste


y perpendicularidad en las escalinatas de la “Pirámide
Antigua”.

 En la Pirámide Mayor se registraron los mismos


paralelismo compartidos con la Pirámide Menor y
Pirámide de la Galería, ya que los 52 muros que
conforman sus plataformas escalonadas y más de 32
muros de recintos de espacios ceremoniales están en el
mismo eje longitudinal (Sureste – Noroeste) , por lo que
el Eje axial de la Pirámide Mayor está
perpendicularmente orientado en ambos sentidos que
podrían revelar indicios de su uso en ambas fechas.

PLANO S-3: Alineamientos y orientaciones astronómicas con


el orto y ocaso del disco solar durante los
equinoccios (22 de marzo – 22 de septiembre)
Azimut: 90º Este y 270º Oeste.

Durante el trazado de la grilla conformada por ejes paralelos


orientados acimutalmente hacia los puntos del orto y ocaso del
disco solar durante los equinoccios, no mostraron o
evidenciaron una relación ni paralelismo alguno con la
geometría de las edificaciones monumentales en estudio.

109
110
111
Verificando alineamientos lunares en el “Complejo
Arqueológico de Caral”.

PLANO L-1: Alineamientos y orientaciones astronómicas con


el punto del ocaso del disco lunar durante el
ciclo nodal o LUNASTICIO Mayor Norte
(Azimut: 299º35’ Noroeste).

El trazado y registro del paralelismo angular promedio de 299º


35’ Noroeste en muros aterrazados, muros perimetrales e
internos con similar orientación azimutal, arrojaron los
siguientes resultados de alineamientos paralelos en tres
edificaciones monumentales de la zona Sur:

 Dos Muros externos perimetrales, 15 muros internos y


paralelismo con escalinatas centrales en la “Pirámide
del Anfiteatro”.

 Paralelismo de ejes en 18 muros aterrazados de


plataformas escalonadas en la “Pirámide de la
Huanca”.

 Paralelismo de ejes en 6 muros aterrazados de


plataformas escalonadas en la zona Oeste de la
“Pirámide de la Cantera”.

112
113
Análisis urbanístico; Ubicación regional, espacialidad de
sitio y ubicación de componente arquitectónicos.
El modelo de organización espacial en Caral habría sido
planificado como parte orgánica e inseparable de un modelo
mayor de ocupación regional de 19 asentamientos
conectados en red y ubicados a ambos márgenes del río en
la cuenca del Valle de Supe, la estrategia de ocupación y
asentamiento humano habría sido de carácter lineal (22) a lo
largo de 30 km, donde el río actuó como abastecedor e hilo
conector, en la cual Caral cumplía un rol de ZONA CAPITAL
o núcleo religioso que se proyectaba también hacia una
amplia región que se extendía desde la Costa hasta los
Andes y la Amazonía(23).

Asentamientos arqueológicos del Valle de Supe

10 km.

Gráfico nº 32.- CENTROS COETANEOS AL “COMPLEJO


ARQUEOLOGICO DE CARAL” .- Las edificaciones
redescubiertas en Caral deben ser analizadas y estudiadas de forma
integral con los 19 asentamientos arqueológicos coetáneos que se
localizaron a lo largo del río Supe, como parte de una estrategia
global de la cultura Caral para la ocupación del valle.
22
Posiblemente con fines sanitarios, ya que concentrar permanente una densa
población de miles de habitantes en un solo sitio, conllevaría a solucionar
problemas de hacinamiento, higiene y manejo de desechos orgánicos.
23
En las excavaciones de las pirámides se encontraron plumas de aves amazónicas,
crustáceos y material orgánico oriundos la actual zona que ocupa Ecuador.

114
El modelo organizativo espacial de las edificaciones
monumentales redescubiertas en el “Complejo Arqueológico
Caral – Supe” no corresponderían un modelo de ciudad
como postulan los arqueólogos del PEACS, sino a un
centro ceremonial administrativo que se deduce a partir
de sus características espaciales, formales, funcionales (ver
tabla nº 6) y de localización regional expresadas en:

 Tipología monumental de edificios públicos de uso


predominantemente ceremonial.
 Extensas canchas y amplitud de espacios abiertos para
congregar a una gran multitud concentrada de personas.
 Gran distanciamiento entre edificaciones piramidales
organizadas alrededor de una explanada central.
 Desproporción evidente entre el número, jerarquía y tamaño
de las edificaciones ceremoniales sobre los denominados
anexos residenciales.
 Predominio intencional de masa y altura en la concepción de
cada uno de los edificios piramidales con fines rituales y de
imponer jerarquía.
 Alineamientos paralelos de edificaciones monumentales
funcionando como hitos astronómicos.
 Ubicación estratégica de Caral en el Valle medio de Supe en
el “centro” de 19 asentamientos menores que formaron parte
de una red de intercambios permanentes en la región.
 Hallazgos arqueológicos y evidencia de objetos para rituales
en los denominados sectores residenciales refuerzan la
hipótesis de uso predominantemente ceremonial de la zona.

115
*

( * )Tabla 6: La información contenida, ha sido elaborada y


modificada recogiendo el aporte y asesoría del arquitecto
Ferrucio Marussi.
116
UBICACIÓN DE COMPONENTES ARQUITECTÓNICOS.
Los patrones urbanos verificados en Caral y la orientación de
ejes de emplazamiento de las edificaciones en conexión con
los eventos astronómicos se refleja también en cada
edificación monumental, donde la disposición de sus
componentes arquitectónicos como: escalinatas centrales,
muros aterrazados, muros perimetrales, dinteles y portales
habrían servido como indicadores visuales de los
desplazamientos anuales y cíclicos de las luminarias:

En el caso de las edificaciones monumentales con


“alineamientos y orientaciones solares”, analizamos su
geometría y componentes utilizando el programa informático
“Ecotech v. 5.1”, encontrando en ellas las siguientes
características:

La Pirámide Menor (Sector G)


Analizando esta edificación con la asistencia del programa
informático mencionado comprobamos que durante el ocaso
del solsticio de invierno se produce la alineación astronómica
exacta de la escalinata central y principal que conduce a los
recintos sagrados de plataforma superior de la pirámide,
donde se realizaban los rituales para una fecha significativa
que marcaba el inicio del año agrícola y a la cual tenían
acceso únicamente los miembros de la casta sacerdotal.

Las sombras proyectadas en la superficie por el sol en


paralelo con la geometría de “La Pirámide Menor” durante el
solsticio de Invierno, es un indicio razonable y no casual para
considerar una intencionalidad previa la planificación de la
configuración de este edificio de carácter ceremonial
destinado a congregar a la población secular dentro de un
marco de rituales anuales.

117
Gráfico nº 33 ALINEAMIENTOS Y ORIENTACIONES SOLARES DE
COMPONENTES ARQUITECTÓNICOS EN LA “PIRÁMIDE MENOR”

118
La Pirámide de la Galería (Sector H)

Similares condiciones de paralelismo y orientaciones


astronómicas solares encontradas en la “Pirámide Menor” las
volvemos a percibir en esta edificación monumental, donde la
escalinata central y la orientación geométrica de “La Pirámide
de la Galería” coinciden con el azimut(24) del disco solar
durante el ocaso del 22 de Junio.

En la imagen adjunta el programa informático representa la


banda anual del recorrido solar para la zona de Caral, al cual
se le han ingresado los siguientes datos:

Latitud: 10.8913 Sur Longitud: 77.5212 Oeste


Día: 22 de Junio Hora: 17:45

Gráfico nº 34 Alineamiento del disco Solar con las escalinatas centrales de


la Pirámide de la Galería durante el ocaso del solsticio de invierno
24
Siempre tomando en consideración la pequeña “distorsión angular” de
minutos de arco producida durante los 5,000 años de existencia de la zona en estudio.

119
La Pirámide Mayor (Sector E)
En el caso de la Pirámide Mayor el eje longitudinal que
predomina en la geometría del edificio coincide con el “orto”
del solsticio de verano y el “ocaso” durante el solsticio de
invierno lo que posiblemente indicaría una función dual y
celebraciones rituales internos para ambos eventos.
Esta edificación monumental tiene además una característica
particular que comparte con la “Pirámide del Anfiteatro”, la
cual es la presencia de un pozo ceremonial circular como
antesala al templo, lo que denota un acceso restringido,
sirviendo posiblemente como filtro antes de acceder a las
escalinatas centrales que conducen a los recintos sagrados
de las plataformas superiores. Consideramos que ambas
edificaciones cumplieron roles distintos a las pirámides
escalonadas vecinas, posiblemente como centros de
transmisión oral y preparación por parte de la casta
sacerdotal de las siguientes generaciones de gobernantes.

Gráfico nº 35 Alineamiento del disco solar con el eje longitudinal de la Pirámide Mayor
120
durante el ocaso del solsticio de invierno y el amanecer del Solsticio de verano
UNA APROXIMACION A LOS PROCEDIMIENTOS CONSTRUCTIVOS
EN EL TRAZADO DE LA TRAMA URBANA DEL “COMPLEJO
ARQUEOLOGICO CARAL –SUPE”

Los procedimientos para poder realizar un trazado urbano en


conexión con los eventos astronómicos requirió de herramientas
sencillas y eficaces como: sogas marcadas con nudos equidistantes,
troncos de guarango y estacas de caña, las que posiblemente fueron
usadas como marcadores alineados con el disco solar en
momentos específicos (ortos y ocaso de los solsticios) a partir de los
cuales se demarcaban las bases geométricas para la edificación de
las pirámides. En las imágenes inferiores, mostramos una recreación
actual del procedimiento que posiblemente fue usado hace cinco mil
años para el trazado de ejes en alineamiento exacto con el disco
solar en una fecha y hora específica, el cual consistió en enterrar
una estaca de caña orientada hacia el poniente, a la cual fue
sujetada una cuerda con nudos equidistantes, durante el momento
preciso en que el disco solar se pone en el horizonte meridional,
luego alineamos la soga con otra estaca como segundo punto de
referencia quedando de esta manera establecido un eje alineado
astronómicamente a la fecha , hora y lugar elegido.

Gráfico nº 36 Posibles procedimientos constructivos para el trazado


de ejes de emplazamiento en conexión con eventos astronómicos.
121
Ordenamiento de las edificaciones menores

Las edificaciones menores que corresponden a residencias y


espacios polifuncionales se encuentran dispersas por el lugar y
en diversas orientaciones. (Sectores K / F / M / N / R / S / T / R /
U / V ). Un grupo de ellas se encuentran colindantes como
anexos a edificaciones monumentales ( ver zona naranja en
imagen ) por lo que probablemente sirvieron como residencias
de la casta sacerdotal, otro grupo de uso polifuncional estaban
emplazadas según criterios vinculados al relieve natural del
lugar y en espacios periféricos independiente de las
edificaciones monumentales (ver zona verde en imagen), esto
se puede deducir preliminarmente a partir de ubicación y de las
curvas de nivel observadas en los planos topográficos y
corroborados durante la visita de campo.

Gráfico nº 37 EMPLAZAMIENTO DE EDIFICACIONES MENORES


122
3.02 ARQUITECTURA Y PENSAMIENTO MITICO.- INFLUENCIA DEL
PENSAMIENTO MAGICO RELIGIOSO EN LA ORGANIZACIÓN
DEL SITIO

A partir de las excavaciones, hallazgos y estudios realizados por


el PEACS en el “Complejo Arqueológico de Caral- Supe” podemos
inferir que el nivel de organización social que se manifestó en
aquella época y lugar, alcanzó niveles de complejidad que les
permitieron establecer un modelo primigenio de Estado, lo que
posibilitó alcanzar un alto grado de cohesión social en todo el
valle, argumento que explicaría la ausencia de armas y sistemas
defensivos en las excavaciones , pensamos que la arquitectura
monumental desempeñó un rol vital , ya que las edificaciones
piramidales para la celebración de RITUALES a sus dioses
tutelares actuaron como articuladores entre la población y la
jerarquía dominante.

Consideramos que los asentamientos humanos desde la época


correspondiente al Período Precerámico (25) trataron de establecer
un modelo de orden en los lugares que habitaron en
correspondencia con el ORDEN UNIVERSAL percibido en la
naturaleza.

El Sol fue identificado como el agente divino proveedor de calor y


luz asociado a una figura masculina y la Luna como su
complemento femenino, asociado a la noche, para ambas
luminarias fueron construidos y consagrados monumentales
templos dedicados a su culto.

En aquella antigua visión del mundo prehispánico, lo humano y lo


espiritual fueron una dualidad que se halló en interacción dinámica
constante a través de un pensamiento mágico que atribuía a los
dioses el acontecer de los hechos, el equilibrio y la armonía de los
ciclos de la naturaleza.

25
La Galgada ( 2300 AC.) , Huaricoto (2,260 AC) , Garagay (1300 AC) y Cardal (1300 AC)

123
En Caral al igual que en las primeras comunidades de habitantes
sedentarios del planeta, los moradores se sintieron parte orgánica
de la naturaleza, no existió lo que hoy conocemos en nuestras
metrópolis como un “sentimiento de individualidad” o
“separatividad” de cada miembro con la sociedad y su entorno
natural.

Esta visión social y a la vez orgánica se entiende en parte por su


conexión y dependencia de los recursos alimenticios provenientes
directamente de la tierra (Pachamama) y el mar (Mamacocha)
que se tradujeron en rituales, ceremonias de agradecimiento y
sacrificios como gestos de reciprocidad a sus dioses.

La casta sacerdotal en Caral cumplía un rol dominante como


mediador entre la población y los dioses, siendo la encargada de
organizar los ritos y ceremonias anuales, además de asumir roles
jerárquicos en la administración de la sociedad y los recursos
productivos.

Las pirámides ceremoniales y su configuración arquitectónica son


el testimonio de aquella época y manifestación concreta de los
modos en que organizaron su sociedad, analogía que se traduce
en una verticalidad absoluta y visible jerarquía de la casta
sacerdotal que marcaba la diferencia entre lo sagrado y lo
secular.

El particular alineamiento y trazados de ejes demostrado en el


“Complejo Arqueológico de Caral – Supe” conectados con
solsticios y lunasticios son testimonio de la importancia que tuvo
el pensamiento mítico astronómico en la organización espacial del
sitio, como culto y representación del ORDEN CICLICO atribuido a
sus dioses tutelares.

124
3.03 CONCEPCIÓN ESPACIO – TIEMPO
La organización del lugar y disposición de los edificios ceremoniales,
nos sugiere que la observación de los fenómenos naturales por parte
de los antiguos pobladores de Caral fue un proceso que habría
tomado muchos años en consolidarse y se tradujo finalmente en un
modelo tangible que generó una cosmovisión de su particular forma de
ver, sentir y entender el UNIVERSO.
En el gráfico nº 38 proponemos una aproximación al proceso
construcción de la concepción espacio – temporal del antiguo pueblo
de Caral y sus conexiones con la arquitectura ceremonial a partir de
su percepción, observación e interpretación de cambios cíclicos de la
naturaleza y eventos astronómicos.

Gráfico nº 38

125
La presencia del símbolo de la espiral representa también una
valiosa evidencia arqueológica para acercarnos a una
comprensión de un rasgo particular de la concepción del tiempo
en Caral, al ser encontrado de forma reiterada en adornos y
dijes, así como surcada en monolitos cercanos a las
edificaciones monumentales, la cual estaría relacionada a la
percepción del eterno transcurrir cíclico del tiempo.
La espiral fue posiblemente el ícono de carácter sagrado, que
representó en Caral la noción del “tiempo” como la unión de lo
cíclico con lo infinito.

Gráfico nº 39 Espiral surcada en monolito hallado cerca de la


“Pirámide de la Cantera” Fuente: PEACS

126
4.00 CONCLUSIONES

4.01 Planificación del lugar y evolución del sitio

En base al análisis de patrones de ocupación para las


edificaciones monumentales y la verificación de sus
correlaciones con eventos astronómicos, podemos deducir que
el modelo de organización espacial del “Complejo
Arqueológico de Caral-Supe”, no fue espontáneo, casual o
aleatorio, sino resultado de la convergencia de múltiples
factores planeados anticipadamente, los que se dieron en un
largo período de tiempo que abarcó el proceso de
consolidación, evolución y declinación del sitio, el cual se
estima en aproximadamente 1,200 años.

Estos factores habrían generado un modelo de organización


espacial que sintetiza los elementos simbólicos-religiosos en
unión a requerimientos funcionales, administrativos, regionales
y de habitabilidad, donde el emplazamiento, orientación y
localización de componentes arquitectónicos de las
edificaciones monumentales estaría relacionado a
motivaciones de de carácter mítico y astronómico, común en
una sociedad y época caracterizada por adoptar el
pensamiento mágico – religioso para realizar todas sus
actividades.

4.02 Urbanismo mítico astronómico y observación del tiempo


Las edificaciones monumentales redescubiertas en el
“Complejo Arqueológico de Caral” habrían sido planificadas
para su uso como centro administrativo, que además de sus
ya comprobadas funciones ceremoniales, cumplieron
adicionalmente un rol instrumental de calendario astronómico
(Solar y Lunar), generando un modelo primigenio de URBE
CALENDARIO.

127
Este modelo de organización urbanístico de carácter mítico
astronómico, se deduce a partir de la exploración, observación,
análisis y verificación de dos tipos de PATRONES de ocupación
urbana, relacionados con los alineamientos y orientaciones de
las edificaciones monumentales en conexión directa con el
movimiento aparente de los dos objetos visiblemente más
importantes de la bóveda celeste: El Sol y La Luna , por lo que
en el complejo arqueológico de Caral existirían dos zonas
predominantes: a) Zona de alineamientos solares b) Zona de
alineamientos Lunares, con edificaciones monumentales
asociadas específicamente a estas deidades celestes, como
parte de una cosmovisión dual plasmada con intencionalidad
para la planificación del sitio.

a) Alineamientos solares.-
En donde las denominadas: Pirámide Mayor, Pirámide de
la Galería y Pirámide Menor por sus particulares
orientaciones, colocación de escalinatas centrales,
paralelismos de muros, localización de portales y
emplazamiento de plataformas aterrazadas sirvieron como
observatorios del ciclo anual del sol, desempeñándose
como hitos astronómicos de referencia visual del disco solar
alineados exactamente con el horizonte meridional el día 22
de Junio (solsticio de invierno en el hemisferio Sur).
La escalinata principal de la Pirámide Antigua y el eje
longitudinal de la Pirámide Mayor estarían orientados con
el azimut del orto solar del 22 de Diciembre (solsticio de
verano en el hemisferio Sur),
Estos alineamientos y orientaciones les habrían
proporcionado una guía o referencia para:

 Ubicarse en el tiempo anual y referencia visual para


sincronizar faenas laborales con los ciclos naturales
para la eficiente administración de los recursos de

128
producción agraria, condicionada a los cambios de
estación. (lluvias, sequías y crecida de ríos).

 Organización de festivales anuales en fechas ligadas a


probables rituales de reciprocidad y agradecimiento a
sus “Dioses tutelares” y a la productividad de la tierra
(festividad posteriormente arraigada y conocida en el
Perú como el “culto a la Pachamama” e Inti Raymi
celebrada todos los años a partir del 24 de Junio). así
como posteriormente con la llegada estacional del
verano ( festival actualmente conocido como Capac
Raymi realizado el 24 de Diciembre)

b) Alineamientos Lunares
En donde las denominadas: “Pirámide de la Cantera”,
“Pirámide Menor” y “Pirámide del Anfiteatro” por sus
particulares orientaciones sirvieron como indicadores
para observar el lunasticio mayor Norte (ciclo nodal),
fenómeno astronómico relacionado al desplazamiento
aparente del disco lunar hacia el extremo meridional
Norte del horizonte a 5.14 grados de arco del punto de
ocaso solsticial de invierno y que sucede exactamente
cada 18.61 años.
Estos alineamientos lunares (ciclo nodal) tendrían
implicancias importantes para en los antiguos pobladores
de Caral que se manifestaron en:

 La administración de los abundantes excedentes


productivos del litoral y organizar grandes faenas de
pesca, ya que en base a investigaciones científicas
recientes (26) se ha podido comprobar un marcado
aumento de la biomasa marina y explosión
26
Harald Yndestad .- Tesis doctoral, 2004 “The lunar nodal cycle influence
on the barent oceans”, Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología.

129
cuantitativa del plancton en la cadena trófica, en
conexión con estos ciclos armónicos de 18.61 años y
que explicaría la abundancia de vestigios de fauna
marina en la zona arqueológica.

 Un calendario ceremonial paralelo de ciclos lunares


nodales de 18.6 años, que posiblemente estaría
ligado a rituales en los templos con orientaciones
LUNARES para ejes y muros aterrazados de; La
Pirámides del Anfiteatro, La Pirámide de la Cantera y
La Pirámide de la Huanca, rituales que estarían en
probable vinculación a cultos marinos y el
agradecimiento al sustento del Mar (Culto a la
“Mamacocha”) asociados con una probable mayor
participación sacerdotal femenina, según se
desprende de la evidencia arqueológica encontrada
en estas tres edificaciones.

4.03 Urbanismo Primigenio

Un rasgo de los modelos de ocupación territorial y urbanística


en el “Período Precerámico” fue la correspondencia entre la
arquitectura y el orden natural con sus ciclos ligados a
fenómenos celestes. Al igual que en otra latitudes del planeta
la arquitectura y el urbanismo fueron el reflejo geométrico de la
percepción de un orden cósmico, en esa unidad con la
naturaleza se desarrollaron las primeras que civilizaciones que
evolucionaron y alcanzaron un elevado grado de complejidad.

A partir del trazado urbano de la Caral podemos afirmar que


sus antiguos constructores poseían un nivel avanzado de
pensamiento abstracto y supieron establecer una
correspondencia mítica entre el orden astronómico y modos
de hacer arquitectura. Desarrollaron un sistema social que

130
vinculaba diferentes aspectos de la vida cotidiana: economía,
religión, tecnologías constructivas y arte en una sola unidad
orgánica.

La Arquitectura manifestada en las edificaciones ceremoniales


fue el eje principal a través del cual se integraban y
articulaban todos los aspectos fundamentales de la sociedad
en Caral:
Religión - Estado - Economía.

4.04 Centro Ceremonial Administrativo


El modelo de organización espacial en Caral habría sido parte
orgánica e inseparable de un modelo mayor de ocupación
cultural y regional de 20 asentamientos conectados en red y
ubicados a ambos márgenes del río en la cuenca del Valle de
Supe, donde Caral cumplía un rol de centro ceremonial
administrativo, zona capital y núcleo religioso que se
proyectaba también hacia una amplia región que se extendía
desde la Costa hasta los Andes y la Amazonía.

El modelo organizativo espacial de las edificaciones


monumentales redescubiertas en el “Complejo Arqueológico
Caral – Supe” no corresponderían un modelo de ciudad como
postulan los arqueólogos del PEACS, sino a un centro
ceremonial administrativo que se deduce a partir de sus
características espaciales, formales, funcionales y de
localización regional expresadas en:
 Tipología monumental de edificios públicos de uso
predominantemente ceremonial.
 Extensas canchas y amplitud de espacios abiertos para
congregar a una gran multitud concentrada de personas.
 Gran distanciamiento entre edificaciones piramidales
organizadas alrededor de una explanada central.

131
 Desproporción evidente entre el número, jerarquía y tamaño
de las edificaciones ceremoniales sobre las denominadas
residenciales.
 Predominio intencional de masa y altura en la concepción de
cada uno de los edificios piramidales con fines rituales y de
imponer jerarquía.
 Orientaciones y alineamientos paralelos de edificaciones
monumentales funcionando como hitos astronómicos.
 Ubicación estratégica en el Valle medio de Supe en el
“centro” de 19 asentamientos menores que formaron parte
de una red de intercambios permanentes en la región.
 Hallazgos arqueológicos y evidencia de objetos
ceremoniales en los denominados sectores residenciales
refuerzan la hipótesis de uso predominantemente
ceremonial de la zona.

Ordenamiento de las edificaciones menores

Las edificaciones menores que corresponden a residencias y


espacios polifuncionales se encuentran dispersas por el lugar y
en diversas orientaciones. (Sectores K / F / M / N / R / S / T / R /
U / V ) . Un grupo de ellas se encuentran colindantes como
anexos a edificaciones monumentales por lo que
probablemente sirvieron como residencias de la casta
sacerdotal, otro grupo de uso polifuncional estaban emplazadas
según criterios vinculados al relieve natural del lugar y en
espacios periféricos independientes de las edificaciones
monumentales, esto se afirma a partir de ubicación y de las
curvas de nivel observadas en los planos topográficos y
corroborados durante la visita de campo.

132
5.00 FUENTES DE INFORMACIÓN

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