Título: Monjes

Técnica: Cerámica Policromática

Autor : Francisco Ruiz Ledezma

CADA QUIEN SU CRUZ.

Por Enrique Rodríguez Z.*

Hace mucho tiempo que no irrumpía en el panorama artístico

sonorense un artista plástico en plena madurez creativa y con
pleno dominio de sus medios, como lo ha hecho en su reciente
exposición individual titulada “Cada Quien su Cruz” el
ceramista, comunicólogo y promotor cultural Francisco Ruiz
Ledezma.
El arte cerámico ha tenido valiosos representantes en nuestro
país desde la época prehispánica hasta nuestros días y
ciertamente que en estos quehaceres cada cultura ha forjado
sus propias características, desde los mayas, olmecas,
zapotecas, mixtecos y tarascos en el sur del país y en el
Estado de Sonora las culturas “Trincheras” y “Huatabampo”,
prácticamente no hubo región de la república en que la
cerámica no tuviera una función utilitaria muy importante en
objetos domésticos de uso diario como platos, ollas, cómales,
vasos, tinajas, cajetes y hornillas, también en objetos de uso
religioso y funerario la producción de cada cultura tuvo un uso
distintivo, pero siempre bajo la premisa de que la producción
cerámica tenía fundamentalmente un fin utilitario adecuado a
las necesidades de cada comunidad. Otra cosa es el agregado
del artista y el artesano en el diseño de las formas, la
proporción y el uso del color en cada utensilio, en esto la
creatividad y el acceso al barro, óxidos y desgrasantes, era
fundamental en los resultados que se obtenían en cada pieza.
En etapas recientes del arte contemporáneo mexicano son
algunos los ceramistas que han destacado en el panorama
nacional, entre los que recordamos en su etapa temprana
desde la década de los sesentas, al ceramista Gustavo Pérez,
por la originalidad de su trabajo, en una exposición individual
en “La Esmeralda”, Escuela Nacional de Pintura y Escultura, en
México D.F.
La transición de la cerámica de arte utilitario a producción
artística para el goce , disfrute estético y contenido social, fue
un hecho natural como consecuencia de la producción
industrial de objetos llamados de consumo doméstico, platos,
tazas, jarrones, mantequilleras, ceniceros, etc., a los
ceramistas se les liberó del eje temático “utilitario” con el que
se ceñía el arte cerámico, es de esta manera como artistas
como Francisco Ruiz Ledezma exploran nuevos caminos, en el
que el color y temperatura, texturas y problemas formales en la
elaboración de objetos de barro adquiere una nueva dimensión
conceptual en la que la cerámica es un vaso comunicante de
expresiones que van desde los criterios históricos y políticos,
hasta los sentimientos y pasiones humanas.

En la obra del ceramista Francisco Ruiz Ledezma el símbolo

universal de la cruz se convierte en singular y personal a partir
de la definición “Cada quien su cruz”, que en el imaginario
colectivo adquiere distintas voces y equivalencias, de esta
manera cada individuo y cada grupo social carga su cruz,
algunos como penitencia y otros como lujo cultural colgada al
cuello.
La exposición de cerámica “Cada quien su Cruz” se encuentra
expuesta desde el 8 de abril en la Galería de Artes y Ciencias
de la Universidad de Sonora, en Hermosillo, pero es de
esperarse que otros públicos del Estado de Sonora y de otras
entidades de la república tengan la oportunidad de
contemplarse en ese espejo que refleja un aspecto tan rico y
variado de la condición humana y por tanto no menos trágico
de la crucificada realidad nacional, vista a través de la fina
sensibilidad del artista Francisco Ruiz Ledezma.

*
Lic. en Arte Enrique Rodríguez Z.
Pintor y Escultor. Especialista en
Políticas Culturales. (UAM)

Título : Bicentenario
Técnica: Arcilla Policromática
Autor : Francisco Ruiz Ledezma