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ORD: 000786

ANT: ORD N°05/ 315 DEL 16-04-2010


MAT: INFORMA LO QUE INDICA

CHILLAN, 03 DE MAYO DE 2010

DE: JULIO MORAGA FUENTES


JEFE PROVINCIAL DE EDUCACION ÑUBLE (s)
A: ESTABLECIMIENTOS DE EDUCACION REGULAR Y ESPECIAL QUE TRABAJAN CON
NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES ASOCIADAS A LA LABOR PSICOLOGICA

1. Junto con saludarle, tengo el bien enviar a Ud. La transcripción del Ordinario N°05/315
referido a la aplicación del instrumento WISC-III v.ch (estandarización chilena):
1. Por documento del antecedente, dirigido a los Secretarios Regionales
Ministeriales, se remitieron las Orientaciones Técnicos paro la Evaluación
Diagnóstica de Discapacidad Intelectual. Asimismo, se estableció, que la
aplicación de dichas orientaciones sería exigida a partir del 2010 y que, para
facilitar la preparación de los/las profesionales, su implementación paulatina
podía iniciarse el año 2009.

2. Dadas las consultas, se reitera que la prueba psicológica para evaluar el


rendimiento intelectual de los(as) alumnos(as) que presentan Necesidades
Educativas Especiales(NEE), asociadas a discapacidad intelectual, es el WISC-lll,
v.ch. (estandarización chilena), dado que sus baremos y normas actualizadas
resultan apropiadas para dar cuenta del desempeño cognitivo de nuestros
niños(as).

3. En este contexto, los/las profesionales que han aplicado el instrumento, observan


diferencias importantes en los resultados obtenidos, en comparación al
instrumento aplicado en la antigüedad (WISC-R). Esto ha generado interrogantes
respecto de la aplicación de la normativa.

Al respecto, se estima conveniente aclarar lo siguiente:

3.1. Para recibir subvención de Educación Especial se toma en cuenta el diagnóstico


integral, entre ellos, el coeficiente intelectual (C.l.)

En función de la normativa, si bien es cierto, el coeficiente intelectual es


determinante para que un(a) estudiante con discapacidad intelectual "califique"
para recibir los recursos de la subvención de Educación Especial, no se debe
olvidar que la evaluación diagnóstica de ésta, debe considerar -además de las
habilidades intelectuales-, otras dimensiones en la vida del (la) estudiante, tales
como, su conducta adaptativa, el grado y calidad de su participación social, su
salud y su contexto. Por lo mismo, el diagnóstico debe ser integral y
multidisciplinario.

3.2. El apoyo del Estado atiende a la necesidad del alumno(a) para progresar en su
vida; no, en el resultado numérico del C.l.

Desde la perspectiva educativa, sólo tiene sentido evaluar y categorizar


la discapacidad intelectual en un/a estudiante, en función de determinar los
apoyos y la respuesta educativa que ese alumno(a) necesita para aprender y
participar en el curriculum. Es muy importante, que avancemos hacia procesos
en que la evaluación de la discapacidad intelectual, se centre principalmente
en los apoyos que los/las estudiantes necesitan para progresar en su vida, más
que en el déficit que presenta, expresado en un número y categoría de C.l.
3.3. Las evaluaciones WISC-R y WISC-lll v.ch. evidencian resultados diferentes porque
esta última es más exigente y actualizada.

Durante este año, es probable que se presenten diferencias significativa


de C.I. en evaluaciones realizadas con el WISC-R, en comparación al WISC-lll
v.ch., pudiendo implicar un cambio en la categoría de rendimiento intelectual en
que se ubica el alumno(a). Esto se debe, a que la nueva estandarización, tiende
a regularizar puntajes que estaban siendo conseguidos con normas menos
exigentes y que no eran las adecuadas para la generación actual de
alumnos(as) incorporados en nuestro sistema escolar. Además, el uso de
instrumentos diagnósticos actualizados, constituye una responsabilidad ética de
toda la comunidad escolar, especialmente cuando de las evaluaciones
dependen decisiones trascendentales para la vida de los(as) estudiantes.

4. En consecuencia, ningún estudiante que asista a un establecimiento de


educación regular, con o sin integración, debe ser egresado del mismo por el
sólo hecho de que la medición de su C.I. haya cambiado. No existe normativa
que ponga limitaciones respecto a qué alumnos(as) con NEE pueden estar o no
en integración escolar, sino que dependerá de las características, condiciones y
capacidades de la escuela para entregar los apoyos que el alumno(a) requiere
para participar y progresar en el curriculum; un cambio de C.I.- por sí solo-, no
tendría por qué condicionar un egreso del estudiante a una escuela especial.

5. En el mismo sentido, la Ley N°20.422, sobre Igualdad de Oportunidades e Inclusión


Social de Personas con Discapacidad, propende a la integración en los cursos de
enseñanza regular y, cuando no sea posible, atendida la naturaleza y tipo de la
discapacidad del alumno(a), la enseñanza deberá impartirse en clases
especiales dentro del mismo establecimiento educacional o en escuelas
especiales", tales como casos severos o muy especializados.

6. Cabe hacer presente que corresponde a los sostenedores y directivos de los


establecimientos educativos que incorporan alumnos(as) con NEE (asociadas a
déficit intelectual) la responsabilidad, tanto de adquirir el nuevo instrumento,
como resguardar que los(as) psicólogos tengan el entrenamiento adecuado
para aplicarlo.

7. Dado lo expuesto, agradecería a Ud. instruya a los funcionarios ministeriales en


este sentido y, por los canales pertinentes, sea informada la comunidad
educativa.

Sin otro particular, saluda atte. a Ud. Veronica Abud Cabrera, Jefa de División
Educación General.

2. En atención a la importancia de estas orientaciones, solicito que sean difundidas y


trabajadas con su equipo.

Saluda atentamente a Ud.

JULIO MORAGA FUENTES


JEFE PROVINCIAL DE EDUCACIÓN (s)
ÑUBLE
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