Sie sind auf Seite 1von 12

Introducción

El siguiente trabajo tiene como objetivo comprender la importancia del estudio de la


Historia en nuestras vidas, para lo cual es necesario realizar un recorrido por distintas
nociones de esta disciplina, con el fin de acercarnos un poco a su naturaleza.
Posteriormente, analizaremos que es lo que cuenta la historia; fechas, hechos, o
procesos, dado que este debate que se ha sostenido durante siglos en la humanidad, nosotras
no pretendemos llegar a una respuesta absoluta, sino que entregar algunos elementos que
permitan al lector profundizar en el tema y obtener sus propias conclusiones.
A continuación, realizaremos una apreciación más profunda del sentido de las leyes
históricas, para ver si la historia que conocemos es el único pasado posible. En caso de no
ser así, ¿qué es lo que permanece fuera de lo que conocemos?
Finalmente veremos la intervención del azar en la historia y de la historia en el azar.
I. El Trabajo del Historiador

Condiciones preliminares para hacer historia


1. Un historiador serio debe ser un habitante del presente, un personaje culto y buen lector
que debe ir con los ojos abiertos. No es un coleccionista de reliquias sino que dialoga
con el pasado desde el presente, puesto que le interesa el pasado tanto como el presente.
2. Es importante para un historiador tratar de conocer y comprender la naturaleza humana
porque su objeto de estudio es el hombre.
3. La primera función del historiador es preguntar y luego investigar. Tiene que ser una
pregunta inteligente, inquisidora y siempre hecha desde el presente.
4. Hay que tener una conciencia de humildad, ya que es difícil conocer el presente lo es
mucho más conocer el pasado. El historiador no es un gurú sino alguien que sólo
reconstruye el pasado.
5. El pasado no lo conocemos tal cual fue sino que tal cual lo alcanzamos a conocer y ver.
La historia es una representación del pasado en el presente.
6. La función del historiador es conocer el pasado; no debe juzgar la malicia de nuestros
antecesores sino sus razones.
7. El conocimiento es provisional, no definitivo. Siempre pueden aparecer hechos nuevos
que enriquezcan el conocimiento adquirido.

El historiador
1. El historiador es un humanista en el sentido amplio, cuya formación exige saber
distintas lenguas, literatura, filosofía, teología y ciencias. Es un buscador de la verdad
que no fabrica las fuentes sino las comprende. El historiador se debe al resultado de su
investigación. El historiador debe ser un buen escritor, tal como dice nuestro poeta
Vicente Huidobro: “el adjetivo cuando no da vida, mata.”
2. El historiador debe ser un hombre escéptico, puesto que ha visto caer tantas personas
poderosas, tantas culturas... no hay paraíso prometido, está convencido de la
temporalidad de los sucesos. Debe ser respetuoso de la diversidad; en la historia y en la
vida hay distintas posiciones, hay que comprender estas diferencias y respetarlas, no se
puede ser totalitario ni absolutista.
3. El historiador es amante de la libertad, ya que en última instancia todos los cambios
históricos tiene como fundamentos la libertad humana (tanto en lo interno como
externo). La comprensión de la libertad humana es propia del historiador; debe
aceptarla y comprenderla.

Las fuentes
La historia se hace con documentos. Un documento es cualquier signo o rastro que
nos da una luz sobre el pasado humano, en este sentido "todo lo que informa de la
presencia humana ya es útil…"1
La historia política privilegia el trabajo con documentos escritos y hasta comienzo s
del siglo XX se entendió a la historia como historia política, por lo que había una total
supremacía de los documentos escritos. En las últimas décadas ha habido una extensión del

1
Febvre, Lucien. Vivir la historia. Palabras de iniciación. En: Combates por la historia. Edit. Ariel,
Barcelona, 1985. Pag. 39.
campo de trabajo del historiador y por ende una ampliación de los documentos. Entre estos
cabe destacar la fotografía, el arte, las mentalidades, las ideas, las sociedades, vestigios del
pasado, etc. No se puede hacer la historia contemporánea sin la T.V.

¿Qué tipos de documentos es el más importante?


Depende del tipo de investigación que se está realizando.

Tipos de testimonios
a) Voluntarios:
Se refiere al documento que es escrito por una persona que sabe que su testimonio
quedara para la posterioridad.

b) Involuntarios:
Los testigos dejan su relato sin saber que quedara para la posterioridad.

Crítica histórica
a) Crítica externa:
Se refiere a la veracidad de la fuente desde el punto de material, como por ejemplo el
papiro en una fuente egipcia.

b) Crítica interna:
Se refiere al contenido del documento que tiene que coincidir con el contexto, ello hace
necesario indagar sobre el contenido. Un ejemplo sería una mención a cantidad de
habitantes que pueden desvirtuar un hecho como una revolución y sus caídos.

Método de trabajo
El conocimiento que se obtiene del pasado es indirecto, puesto que el “historiador se
halla en la imposibilidad absoluta de comprobar por si mismo los hechos que estudia ... Por
lo tanto no podemos hablar de las épocas que nos han precedido sino recurriendo a los
testimonios”2
La historia tiene varias característica: sujeto, objeto, análisis y representación. La
tarea del historiador es unir estos postulados.
El sujeto es el oficio del historiador, que debe reconstruir el pasado. En primer lugar es el
trabajo de fuentes y luego la reflexión. El objeto es el pasado humano, o mejor dicho lo
humano en el tiempo. Lo humano es todo aquello que implica al hombre sin restricción
menta, en todas las dimensiones.
El análisis es sobre las fuentes y la bibliografía, donde la materia prima la
constituyen las fuentes y su complemento la bibliografía. El juicio es la evaluación, el
resultado, el razonamiento. El método de trabajo comprende dos procesos: el planteamiento
de una hipótesis y su comprobación a lo largo de la investigación.
El trabajo del historiador sin embargo no es premiar a los buenos ni castigar a los
malos, sino que la representación es poner al pasado en un todo. En este sentido el
historiador es un recreador o incluso un subcreador pero no inventa de la nada.

2
Bloch, Marc. Introducción a la historia. Fondo de Cultura Económica, México, 1990. Pag. 42.
II. ¿Qué es la historia?

La historia positivista
La palabra Historia es muy antigua, y amplia y el lenguaje es el principal medio
para conservarla.
Desde épocas remotas el hombre ha adoptado una actitud frente al pasado. Los
primitivos pueblos adquirieron conciencia de sí y a través de la tradición oral, no sólo
dejaron constancia de sus actos a las generaciones que les precedieron, sino que también
les otorgó identidad y cohesión a los distintos grupos. Los conocimientos y las estructuras
sociales que los caracterizaban no se perdieron con la generación que los elaboró y
desarrolló, pues cada una, se encargó de transmitirle a la siguiente los rudimentos
adquiridos.
Se activó la interacción entre generaciones y los lazos entre una y otra perduraron.
Más adelante la tradición oral se plasmó con la escritura, adquiriendo un carácter invariable
y configurándose de manera definitiva para la posterioridad.
Desde Tucidides hasta la escuela de los Annales la definición y el modo de hacer
Historia no había variado considerablemente, la historia- relato aún era el marco de acción.
En el siglo XIX se desarrolla la erudición que en la escuela francesa descansaba
sobre el poder del Estado, “la historia escribe el poder, es su horizonte, su espejo, su
sentido, le es sustancial”3. Nace una nueva escuela, la escuela metódica, “hija de Sedan y
de la voluntad de reconquista de Alsacia y Lorena”4, sus miembros se ofrecen a un poder
republicano y son contestatarios a la monarquía, se presenta como una “instrucción
cívica”5. Pretenden eludir el subjetivismo y establecer la verdad de lo que se relata,
limitando, así al historiador “al campo de lo visible, de lo dado; hace de él un esclavo del
documento escrito.”6
Los positivistas buscaban textos originales, lo más oficial posible. No había
reflexión, entendían a la historia como el unir documentos.
La historia no se reflexiona, no hay necesidad de indagar en las causas de los
distintos fenómenos que se investigan ni la relación que existe entre ellos. Como resultado
se obtiene un catastro de acontecimientos, una colección de datos sin interpretación.
Signos de ruptura, de cambio, se empiezan a percibir entre los historiadores a
principios del nuevo siglo. En el siglo XX, se gesta un movimiento critico, con el fin de
ampliar el radio de acción de los historiadores e integrar todas las dimensiones de la
realidad a los estudios. El proyecto tenia ciertas insuficiencias, por lo que debe esperar
hasta 1929, para concretarse, los Annales es producto de la nueva realidad europea,
posterior a la guerra y responde a las necesidades de la sociedad en que se gesta.
Esta nueva revista tenia como fin responder a las interrogantes que el hombre se
plantea, la historia ya no es sólo el estudio del pasado, sino que se hace a partir del
presente. Es una historia atrapada en los problemas de un momento, se debe reformular
constantemente porque cada época la construye e interpreta según sus motivaciones e
inquietudes. La verdad histórica pasó a ser relativa, cambiable y movible.

3
Dosse, Francois. La Historia en Migajas. Valencia, Edicions Alfons el Magnamin, 1988. Traducción de
Francesc Morato i Pastor. Pág. 33.
4
Ibid. Pág. 33.
5
Ibid. Pág. 35.
6
Ibid. Pág. 36.
Ahora se busca solución a los problemas planteados, de la historia- relato se pasa a
la historia- problema.
L. Febvre y M. Bloch
Desvían su mirada de lo político, los horizontes de investigación se extienden y, con
ello, las fuentes se amplían y el documento escrito pierde su hegemonía.
“Luchaban lado a lado contra una concepción de la historia que juzgaba demasiado
estrecha, contra el positivismo y su interés casi exclusivo por los acontecimientos políticos
y militares. Se esforzaban sobre todo por arrancar a los historiadores de su aislamiento.”7
Se integran nuevas disciplinas de las ciencias sociales. Se le da importancia a los
periodos de larga duración, se reivindica la continuidad y la permanencia. El historiador
toma un papel activo, no sólo debe descubrir documentos, sino que también descifrarlos.
Hay una realidad total que engloba lo económico, lo político y lo social. Surge un
nuevo interés por lo cotidiano y el mundo popular.

Fernand Braudel
Una nueva guerra se apodera de Europa, “... en una cultura (que) se negaba a
aceptar que era preciso responder a la violencia con violencia.”8 En el nuevo escenario la
conciencia histórica se altera y de ésta experiencia surge una nueva visión del ser humano.
La crisis acarrea nuevas preguntas, el crecimiento económico y el impulso de las
fuerzas productivas son cuestionados.
Se toma la herencia de los Annales pero adquiere un nuevo enfoque. La historia
pretende reconstruir los fenómenos humanos en su totalidad, porque todo influye sobre
todo.
“... una sociedad forma un todo,... debe ser considerada en forma global en el seno
de lo que la rodea y en la totalidad de sus componentes, en el entrelazamiento irremediable
de innumerables determinaciones de la que es inútil preguntarse cuál predomina sobre los
demás... porque lo único que importa son las interferencias y las conexiones.”9
El espacio geográfico pasa a ser el factor que explica los distintos aspectos de las
civilizaciones. El hombre deja de ser el centro de estudio y su libertad se reduce y pasa a
estar condicionada pro el medio social en el cual esta inserto.
“El hombre nada puede contra las fuerzas seculares que lo oprimen, contra los
ciclos económicos de larga duración”10.

Marx y la historia
Salta a la fama en 1948 cuando publica el Manifiesto Comunista. Conocido como
gran filósofo que critica a la sociedad. Su filosofía no estudia al pasado sino que lo
simplifica en dos grupos sociales. Según él la religión es “opio del pueblo” y la sociedad
burguesa adormece al proletario. Considera necesario crear conciencia de clase pero los
proletariados no puedan generarla o por su propia cuenta, para que la lucha se zanje a favor
del proletariado es necesario que su conciencia venga desde afuera, por lo que se debe
formar una vanguardia en manos del Partido Comunista que debe conducir el proceso.

7
Duby, Georges. El Placer del Historiador. Pág. 9.
8
Ibid. Pág. 30.
9
Ibid. Pág. 27.
10
Dosse, Francois. Ibid. Pág. 120.
Después de la revolución viene la “dictadura del proletariado” y es entonces cuando
deben desarrollarse las potencialidades para llegar a una sociedad sin clase.

Historia = lucha de clases (análisis de la historia)


Hoy = sociedad burguesa (presente)
¿Qué hacer? Sustituirla (futuro)

Karl Popper
Pone en duda a las ciencias exactas que consiste en buscar aquellos hechos que
pueden refutar la teoría postulada.
Para él la realidad es relativa en función del objeto, las cosas no son las que cambian
sino la apreciación que se tiene de ellas. Ninguna teoría es definitiva y todas tienen por
objeto ordenar y seleccionar los hechos. Este carácter selectivo las torna relativas, en el
sentido que ofrece una descripción y no otra, lo cual no significa que la realidad sea
relativa o que podamos abusar de ésta. Por ello nunca debe confrontarse la propia tesis con
la realidad. Para este pensador no existe una ley universal que configure realmente la
historia del género humano, por ende tampoco cree en la existencia de las leyes históricas.
En resumen, no puede haber historia del pasado tal como ocurrió en la realidad sino que
son interpretaciones históricas y ninguna de ellas es definitiva dado que cada generación
tiene el derecho y el deber de satisfacer sus cuestionamientos del pasado.
“Una historia concreta de la humanidad, si la hubiera, tendría que ser historia de
todos los hombres. Tendría que ser la historia de todas las esperanzas, luchas y
padecimientos humanos. En efecto, no existe ningún hombre más importante que otro; y,
evidentemente, esta historia concreta no puede escribirse. Debemos hacer abstracciones,
debemos eliminar, seleccionar y con ello llegamos por fuerza a la multiplicidad de la
historia.”
Popper plantea que se dispone de documentos limitados que no se pueden repetir
fidedignamente a como sucedió en la realidad, pues solo toman nota de lo que en ese
momento se considero lo suficientemente importante como para legarlo a la posterioridad.

Fukuyama
Siguiendo el pensamiento de Hegel, postula que la democracia liberal venció al
socialismo político y económico, por lo que estaríamos presenciando el fin de la historia.
Su idea se basa en el hecho de que desde la década de los ochenta el capitalismo ha
avanzado notablemente en el mundo lo que nos llevaría a pensar que el liberalismo triunfó
en el plano de las ideas. Los fundamentalismos religiosos y el nacionalismo podrían
derribar este sistema, pero Fukuyama no los considera tan fuertes como para revertir el
proceso. Esta idea limita al hombre sólo a una esfera económica y política y se olvida de
que hay otras esferas en él.
¿Posee libertad el hombre?
El hombre no sólo responde a los estímulos que el medio le presenta, sino que en su
interior también alberga pasiones y motivaciones que no siempre se pueden explicar
racionalmente. No es un prisionero de su medio. Al estar dotado de memoria puede
comprender su presente e incluso permitir que los acontecimientos no vuelvan a ocurrir,
porque el pasado no muere, sino que permanece entre nosotros.
Pasado no es lo mismo que historia. La historia no es la recopilación de hechos ni la
acumulación de datos, todo tiene un pasado, pero no necesariamente una historia.
La memoria esta en función del pasado pero también del presente, pues para los que
somos protagonistas de nuestra existencia no podemos dejar de preguntarnos una y otra vez
sobre el ayer.
Conclusión
A partir de lo planteado podemos deducir que la especie humana es inseparable de
su propio movimiento, puesto que es ella la que lo origina. De ahí, entonces fluye la
necesidad de la historia y su valor como ciencia.
A pesar, de que muchas personas piensan que la historia sólo se limita a narrar
fechas, batallas, acontecimientos específicos y anécdotas, en realidad, esta comprende un
proceso más dinámico. No es un hecho aislado de la humanidad, sino que comprende a toda
la humanidad, y por ende, puede ser considerada como un desarrollo en el transcurso del
tiempo.
La historia, tal como la conocemos, comprende diferentes procesos humanos y su
registro, lo que nos ha quedado o podemos apreciar del pasado. Es una suerte de promedio,
lo dominante, y es entonces que podemos relacionarla con el azar y con la Ley de los
Grandes Números que hace referencia a la ocurrencia de un suceso en N experiencias
tiende hacia la probabilidad del suceso cuando N crece indefinidamente.
A su vez, el azar no es algo surge de la nada, sino que resume la evolución del
pensamiento de los filósofos, por lo que puede ser considerado como la historia en sí.
Pensamos que la dinámica del hombre es su evolución, caracterizada por cambios
en el entorno y su capacidad de transformarlo (aunque sea de manera destructiva). El
hombre, a su paso, promueve cosas, pero a su vez comete excesos, por lo que podríamos
afirmar que también lleva en sí el germen de la destrucción.
Es así, como la historia da cuenta de un sistema dinámico, con sus propios objetos y
sucesos de estudio que cada generación interpreta según sus tiempos, por lo que cada
persona es hija de sus propios tiempos.
En este sentido, la tesis de Fukuyama nos parece poco sólida, y se contradice con la
esencia íntima del ser humano: el progreso, ya sea en el plano negativo o positivo, pero que
en ningún caso implica el final de su desarrollo, exceptuando el hecho de que el hombre sea
capaz de provocar la destrucción misma de la especie. La ciencia ha llevado al ser humano
a crear las herramientas para su propia aniquilación. Esta situación responde a la necesidad
del hombre de darle una interpretación unitaria y global a su existencia. En un principio él
creyó encontrarla en las explicaciones teológicas, provenientes de las religiones
tradicionales, pero que fueron superadas por las nuevas ideas racionalistas que pregonaban
la fe en progreso indefinido e ilimitado. Se creía que el conocimiento científico era exacto y
seguro, pero a medida que se fue penetrando en este misterioso campo, las respuestas se
tornaron inciertas y generaron más incertidumbre. No se fue capaz de dar respuesta a las
múltiples interrogantes y se descubrió la faz oculta de esta nueva “amiga”, que no sólo es
capaz de producir el bien, sino que también el mal.
Ante esta situación nos enfrentamos a problemas nuevos que deben ser
solucionados. La guerra biológica y el bioterrorismo son una realidad ante la cual estamos
expuestos, hoy en día, sobretodo si se piensa en el actual conflicto de Estados Unidos con
Afganistán y “hay muy pocas cosas tan aterradoras como el creciente prestigio de los
consejeros con aspiraciones científicas que han aparecido, en las últimas décadas, en los
consejos de gobierno”11, porque no son capaces de preveer las consecuencias de sus actos y
olvidan el carácter especulativo de su empresa y “calculan las consecuencias de ciertas

11
Arendt, Hanna. Sobre la violencia. Edit. Joaquín Mortiz México, 1970. Traducción de Miguel González
Pág. 11- 12.
constelaciones hipotéticas, renunciando, por tanto, a la oportunidad de comprobar sus
hipótesis en situaciones reales”12.
Es importante destacar que el historiador es un investigador sobre el gran universo
de acontecimientos humanos en el tiempo, para poder llevar a cabo su misión establece un
método para reconstruir y comprender a la historia. Para ello diseña una estrategia para
acercarse al pasado; su método comprende la casualidad y una explicación a esta. La
historia es una disciplina con espíritu científico, por lo que busca delinear un fenómeno y
ordenar el conjunto de conocimientos sin característica experimental, puesto que los
sucesos tienen un carácter único e irrepetible. La forma de llevar a cabo la investigación
histórica es a partir de una propuesta donde el investigador inicia una búsqueda en cierto
orden, observa y hurguetea entre los fenómenos y acontecimientos para luego establecer
relaciones que le llevan a una propuesta, que le guía en el viaje caótico del pasado. Su
método ha de ser crítico, tanto con las fuentes como consigo mismo y al final de su
recorrido intenta sacar conclusiones; visiones rescatadas del acontecer humano.
La historia es una disciplina con espíritu científico que busca dilucidar fenómenos
del conjunto de conocimientos sin carácter experimental (ya que son sucesos únicos e
irrepetibles) los cuales expone en propuestas que buscan entender el pasado y el presente.
Las proposiciones son las llamadas hipótesis o tesis que se establecen que tiene un sentido
ligado a la interpretación que le asigna un valor verdadero o falso. La ciencia histórica
nunca va a estar determinada por sus proposiciones y por ende es su propia dinámica (sin
una lógica formal) y sus cambios constantes los que llevan a que la historia continúe
existiendo mientras la especie humana perviva, puesto que los cambios dependen de la
relación de la especie humana con la naturaleza; los hombres realizan nuevos fenómenos y
también se descubren nuevos fenómenos hechos alguna vez por el hombre ¿quién
imaginaría hace algunos decenios que el hombre fue capaz de realizar obras monumentales
la cuidad de Tikal en México, hermosuras como Pompeya, obras tan perfectas como los
hombres de arcilla de China! Estos descubrimientos si bien hacen tambalear a muchas
teorías nos permiten reformulaciones cada vez más ricas y que contribuyen a darle
dinámica a nuestra ciencia. Las propuestas no son, con toda evidencia, las respuestas
definitivas: se buscan nuevas y atractivas ideas que permitan comprender mejor los sucesos
de hoy y del ayer, los nuevos descubrimientos han permitido la extensión de los
conocimientos.
Como es posible observar el historiador necesita de un alto grado de abstracción.
Las propuestas hechas nunca podrán ser realmente probadas, sólo a partir de lo observado
en la larga trayectoria del humano sobre el planeta crea proposiciones coherentes, axiomas,
que son elaboradas en base a la lógica y la casuística, sin embargo este método inductivo es
infinito, pueden hacerse muchos teoremas de un mismo suceso; los sucesos del 11 de
septiembre corresponden, según Fukuyama no corresponden más que "una serie de
acciones de retaguardia provenientes de sociedades cuya existencia tradicional está aún
amenazada por la modernización- y por ende- seguimos estando en el fin de la historia,
porque sólo hay un sistema de Estado que continuará dominado la política mundial, el del
Occidente liberal y democrático".13 Otros como Huntington lo ven como el "choque de
civilizaciones" producto de las reacciones ante u mundo globalizado y unificado que "son

12
Ibid. Pág. 12.
13
Fukuyama, Francis. "Seguimos en el fin de la historia", ensayo publicado en El Mercurio¸25 de Noviembre
de 2001, cuerpo E, pág. 2.
la mayor amenaza para la paz mundial- llevando incluso al -verdadero choque a escala
planetaria"14 , otros postulan teorías del odio y la aversión, algunos han psicoanalizado el
mundo musulmán e islámico, de la recurrente "ira de Dios" que interviene desde el mismo
comienzo de la Biblia con el relato del diluvio universal, otros mencionan la "crisis del
sistema político internacional", etc.
Todas estas teorías nos muestran como a partir de una misma realidad que nos es
más o menos cercana, distintos investigadores toman conocimiento del objeto y éste sirve
de inspiración o inicio de una abstracción que finalmente lleva a una explicación o
proposición. Todos desearían que sus teorías pudieran evidenciarse, sin embargo en el
campo de la historia la verdad no se encuentra en sus manos. La realidad de la historia es
múltiple está compuesta de una infinidad de partes que la componen como un gran todo; es
imposible enumerarlas todas, sólo se pueden proponer formas de organización como partes
de un sistema; pero las combinaciones de elementos que tomemos y dejemos fuera;
volviendo al ejemplo de los atentados en Nueva York y Washington son infinitos; podemos
combinar religión y nacionalismo, política y religión, nacionalismo y fanatismo, poder y
violencia, odio y violencia, agresión y venganza…
Fenómenos como los recién mencionados evidencian que lo imposible y lo cierto
son sucesos, que la ocurrencia de dos sucesos también es un suceso (aunque gente no lo
creyera un avión chocó contra una de las torres gemelas, y el de otro avión contra otra torre
también fueron sucesos) y que de todos los sucesos posibles en nuestra historia la
ocurrencia de alguno de ellos también es un suceso. Así como el azar tiene un modelo
matemático o una teoría de las probabilidades que explican todas las leyes del azar y se
obtienen teoremas de las leyes del azar que prueben de que la teoría funciona bien y tiene
axiomas, también encontró su crisis en los fenómenos cuánticos. En la historia esto ocurre
muy a menudo, y es por ello que su riqueza y evolución no tendrán fin, al menos, mientas
perviva el humano…

14
Huntington, Samuel. El choque de civilizaciones. Edit. Paidos, 1997, pág. 386.
Cosas que se han dicho sobre la Historia

Karl Marx (El Manifiesto Comunista)


“ La historia de todas las sociedades existentes hasta el presente es la historia de la lucha de
clases”

Marc Bloch
"La historia no es disciplina del pasado, sería anticuaria, es la disciplina de los
acontecimientos humanos a lo largo del tiempo."

San Agustín (Ciudad de Dios)


“ Todos estos avatares de la Historia es, sin lugar a dudas, el Dios único y verdadero quien
los regula y gobierna, según le place. Quizá los motivos sean ocultos. Pero ¿serán por ello
menos justo?”

Manifiesto de los historiadores


“La historia no es solo pasado, sino también, y principalmente, presente y futuro. La
historia es proyección. Es construccion social de la realidad futura. El mas importante de
los derechos humanos consiste en respetar la capacidad de los ciudadanos para producir por
si mismos la realidad futura que necesitan.”

Santayana
“Los pueblos que conocen su historia están condenados a repetirla”

Francis Fukuyama
“Lo que podríamos estar presenciando no solo es el final de la guerra fría, o la culminación
de un periodo especifico de la historia de la posguerra, sino el fin de la historia como tal:
esto es, el punto final de la evolución ideológica de la humanidad y la universalizaron de la
democracia liberal occidental como la forma final de gobierno humano”

Mineduc
“El sector de Historia y Ciencias Sociales tiene por propósito desarrollar en los estudiantes
conocimientos, habilidades y disposiciones que les permitan estructurar una comprensión
del entorno social y les orienten a actuar critica y responsablemente en la sociedad, sobre la
base de principios de solidaridad, cuidado del medio ambiente, pluralismo, y valoración de
la democracia y de la identidad nacional.”
Bibliografía

- Arendt, Hanna. Sobre la violencia. Edit. Joaquín Mortiz México, 1970. Traducción de
Miguel González
- Bloch, Marc. Introducción a la historia. Fondo de Cultura Económica, México, 1990.
- Dosse, Francois. La Historia en Migajas. Valencia, Edicions Alfons el Magnamin,
1988. Traducción de Francesc Morato i Pastor.
- Duby, Georges. El Placer del Historiador.
- Febvre, Lucien. Vivir la historia. Palabras de iniciación. En: Combates por la historia.
Edit. Ariel, Barcelona, 1985.
- Fukuyama, Francis. "Seguimos en el fin de la historia", ensayo publicado en El
Mercurio¸25 de Noviembre de 2001, cuerpo E.
- Huntington, Samuel. El choque de civilizaciones, Edit. Paidos, Barcelona, 1997.
- Krebs, Ricardo. Vivir lo que tiene mas vida. Conversaciones con Nicolás Cruz.
Ediciones Universidad Católica de Chile, Santiago de Chile, 1998.
- Popper, Karl. La sociedad abierta y sus enemigos. Edit. Paidos, Barcelona, 1994.

Das könnte Ihnen auch gefallen