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Como consecuencia del auge del capitalismo nace el socialismo, una ideología
política que atacaba los cimientos del capitalismo como doctrina económica y
social.
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Gustavo Petro
Lunes 12 de noviembre de 2007
Tengo que confesar que esta es la primera vez que pronuncio una conferencia
desde una iglesia. Deben ser las paradojas del socialismo del siglo XXI. Tengo
que recordar, también, que en esta mesa se encuentra una persona a la que
no veía desde hace muchos años, estábamos en alguna montaña colombiana
vestidos de uniforme verde oliva, armados. Ella es Amaranta, para ustedes la
ciudadana ecuatoriana Patricia, miembro de Alfaro Vive Carajo, quien luchaba
al lado de nosotros en el M-19, en el batallón América, bajo ordenes de Carlos
Pizarro.
Pero una mirada más profunda extraería otra conclusión: El M-19 logró
proponer un proyecto democrático para la Nación, sintetizado en la carta
constitucional de 1991, que sin aplicar precisamente se convierte en el
programa del Polo Democrático, segunda fuerza electoral del país. La
perspectiva de lograr un pacto social y político que profundice la
democratización del estado y la sociedad colombiana es una verdadera
alternativa viable hoy para la salida pacífica del conflicto y la violencia, es una
respuesta realista y posible a la crisis de la nación colombiana. El Estado
Social de Derecho que recupera el espíritu filosófico democrático del
liberalismo del siglo XVIII y lo articula a la bandera de la igualdad social, se
cierne en el horizonte colombiano, desde la carta magna, como una
posibilidad inquietante para quienes han detentado el poder: las mafias, y los
monopolios económicos. En una economía rentista, profundamente desigual y
depredadora, el aliento democrático del desaparecido M-19 sigue sembrando
la zozobra en unos, la inquietud en otros y la esperanza en muchos por su
justeza histórica, su hálito; su espíritu sirve de base para organizar un partido
que hoy, siendo la segunda fuerza electoral, se constituye en una verdadera
alternativa de poder similar a los movimientos progresistas que han
conquistado pacífica y democráticamente la mayoría de los gobiernos de
América del Sur.
Por otra parte, las Farc se han colocado como el movimiento más rechazado
por el pueblo colombiano. A pesar de su fortaleza militar conquistada por la
experiencia de sus cincuenta años de lucha armada y por recursos ingentes
extraídos de la cadena productiva y especulativa del narcotráfico, han caído
en el peor de los aislamientos políticos que movimiento insurgente alguno ha
logrado experimentar. Las Farc son un movimiento autorreferenciado. Al
contrario de la guerrilla clásica, y de su propio pasado, que prescribía la
necesidad de un fuerte apoyo popular para lograr resistir y crecer, e incluso
triunfar como Fidel, el Che y los sandinistas, las Farc se financian tanto de la
actividad narcotraficante que se permite reclutar su ejército bajo la forma del
mercenarismo y desdeñar por completo el apoyo popular para su resistencia y
crecimiento. Gracias a esos recursos, las FARC pueden sustituir al pueblo
para su sostén y crecimiento. La guerrilla se autorreferencia. No necesita más
de construir políticas populares, de ampliar su espacio de opinión. Su lucha
campesina degenera en la venganza, la barbarie, el crimen de guerra. Como
Engels lo planteó en su estudio sobre las guerras campesinas en Alemania,
esta degenera en una mera lucha militar despótica y vengativa sin
posibilidades de poder, de transformación, de democracia.
Por eso el socialismo del Siglo XXI debe implicar una verdadera ruptura con el
socialismo del siglo XX.
Quiero confesar, como es propio en esta iglesia, que no soy un pacifista
radical: yo mismo tome algún día las armas en el M-19, y creo que los pueblos
en determinadas circunstancias históricas deben tomar las armas como último
recurso de la resistencia, y muchas veces como medio de triunfo, de
liberación. Pero las armas "per se" degradan. De eso debemos ser
conscientes. Las armas implican automáticamente la posibilidad de destruir el
ser humano y por ello, los individuos que las empuñan deben ser controlados
de múltiples maneras. Las armas siempre deben estar bajo el control público.
Siempre deben ser usadas de manera transitoria, ojalá nunca, mientras
menos tiempo mejor.
Las Farc han usado las armas durante más de cincuenta años en los campos
de Colombia, por eso se han degradado. El M-19 las dejó prontamente por
eso, aún su proyecto político pervive.
La experiencia histórica muestra que los medios determinan el fin. Y que por
tanto si el objetivo del Socialismo del siglo XXI es la construcción de una
democracia global: el reino de la humanidad; entonces sus medios tienen que
ser profundamente democráticos. Los medios son la escuela en donde se
prepara el fin, son su método de construcción. En los mismos medios se
encuba el contenido del fin. Por tanto el socialismo debe darle sana sepultura
al "fin que justifica los medios".
Peor aún, cuando los procesos productivos globalizados del capital conllevan
en su seno la destrucción de la misma humanidad. Hoy la contradicción
antagónica no es entre Capital y Trabajo sino entre Capital y Humanidad.
Por eso el trabajo de Antonio Negri es tan estimulante. Para el filósofo italiano
la clase obrera ha dejado de ser el sujeto revolucionario al abandonar el polo
antagónico del capital, que para Negri, la dialéctica no fue sino una
equivocación filosófica de los socialistas. El nuevo sujeto revolucionario para
él es la multitud, que en la concepción de Spinoza corresponde a la unidad de
las diversidades humanas sin suprimirlas, es una concertación de
especificidades, una comunicación movilizadora entre particularidades
colectivas e individuales, como su nombre lo indica una multiplicidad humana
sin reducciones homogéneas. Yo pienso que la Multitud, en tanto global, no es
más que la Humanidad misma, consciente de sí misma, responsable de si
misma. Lo que nos lleva a la tesis que el socialismo no es más que el control
de la humanidad sobre los procesos del capital que la pueden destruir. Pero
también que la "Humanidad", a diferencia de "El Hombre" de los liberales del
siglo XVIII, es un concepto plural, múltiple, diverso, multicolor como el arco
iris.
Este vaciamiento del poder de los cascarones estatales deja sin sentido la
propiedad estatal de los medios de producción a menos que se trate del
control de recursos estratégicos para la sociedad nacional en concreto, y abre
la posibilidad del pluralismo económico: diversas formas de producir en manos
de la sociedad.
LA GLOBALIZACIÓN
Las políticas económicas de los países han tenido que tomar nuevos rumbos
con el fin prever las anteriores situaciones e implantar mecanismos para
contrarrestarlas. Algunos de estos mecanismos afectan las finanzas nacionales
porque implican recortes presupuestales en inversión social para destinar
recursos a estos nuevos propósitos. Como consecuencia, se ve afectando el
nivel de vida de los habitantes.
¿Se puede dar cuenta de la novedad sin reducirla a una mínima apariencia?
¿Se puede explicar el cambio sin negarlo, sin reducir el encadenamiento de lo
mismo a lo mismo?
De aquí viene el pensamiento de Rorty, quien no admite que algo tenga una
naturaleza intrínseca, una esencia real. Por el contrario piensa que todas las
cuestiones centrales se reducen, al final, a puras cuestiones terminolólogicas.
Por lo tanto estas dos palabras aluden a una cultura que se ha vuelto en
extremo sensible a los lenguajes, a su radical contingencia e historicidad. Ahora
son los lenguajes que la constituyen y le comunican lo que les interesa. No el
mundo, sino las visiones del mundo. No el texto sino sus contextos. No la
verdad, sino las épocas y los géneros a través de las cuales ella se expresa.
Una versión más sociológica sostiene que la posmodernidad no sería otra cosa
que una falsa conciencia del capitalismo globalizado; como un tupido velo
desplegado para encubrir el predominio del mercado universal y crear la ilusión
de que diferentes estilos de consumo equivalen a una pluralidad de formas de
vida, que tiene un ligero parecido a lo que se dice de la globalización cuando se
dice que ella escondería, sólo que de una manera mas sutil, el predominio de
una potencia imperial.
Nelly Arenas
Más lo que somos ahora mismo, es sólo una mezcla de todo lo que pasó en
tiempos históricos que se cruzan en nuestro subcontinente. Esto deviene del
ser heterogéneo que conformamos, donde se articulan, complejamente,
tradiciones y modernidades, con sus lógicas y racionalidades, con sus lógicas y
racionalidades particulares. Ello responde a la forma como se desarrolló
nuestra modernidad- no eliminó, y en muchos casos reforzó elementos
tradicionales. La modernidad por lo tanto debe ser leída de otro modo en
América Latina. La lectura que de ella se haga deberá dar cuenta de nuestras
mezclas y tiempos.
La Globalización Imaginada
Néstor Canclini
Pensar sobre lo global exige trascender estas dos posturas-. la que hace de la
globalización un paradigma único e irreversible, y la que dice que no importa
que no sea coherente ni integre a todos. Más bien parece todo lógicamente
necesario. ante las tendencias que homogenizar partes de los mercados
materiales v simbólicos, averiguar qué representa lo que la globalización
excluye para constituirse.
¿Que es la Globalización?
Ulrich Beck
Con la demolición del Muro de Berlín, muchos creyeron que había sonado el fin
de la política y llegaba una época de situada mas allá del socialismo y el
capitalismo, de la utopía y la emancipación. La globalización no apunta al final
de la política, sino a una salida de lo político del marco categorial del Estado
nacional y del sistema de roles al uso de eso que se ha de llamara el quehacer
político y no-político. La nueva retórica de la globalización trae importantes
consecuencias políticas en el riesgo de globalización económica, donde
instituciones industriales que parecían completamente cerradas a la
configuración política estallen y se abran al discurso político. Los presupuestos
del Estado asistencial y todas las ayudas se disuelven y resuelven en una
configurabilidad política. Los actores sociales deben reaccionar y dar una
respuesta concreta.
Es difícil elevar la voz contra el poder mundial del mercado mundial. Esto sólo
es posible a condición de acabar con la idea de un mercado mundial
mundialmente poderoso que gobierna nuestros cerebros y paraliza toda
actividad.
GLOBALIDAD: no hay ningún grupo ni país que pueda vivir al margen de los
demás. Las distintas formas económicas, culturales y políticas no dejan de
entremezclarse y que las evidencias del modelo occidental no se deben
justificar de nuevo. Sociedad mundial significa la totalidad de las relaciones
sociales que no están integradas en la política del estado nacional ni están
determinadas a través de esta.
Existe una afinidad entre las distintas lógicas de las globalizaciones que no son
reducibles sino que antes bien deben resolverse y entenderse a la vez en si
mismas y en mutua interdependencia. Sólo así se puede abrir la perspectiva y
el espacio del quehacer político.
El Capitalismo
Sistemas Económicos
El sistema económico constituye la articulación armónica de las leyes, reglas e instituciones que rigen la
vida económica, no importa cual sea la naturaleza del organismo, así mismo el sistema económico
cumple una serie de funciones de toda saciedad.
El sistema económico se refiere, pues a la peculiar organización de las ideas, reglas, procedimientos e
instituciones creadas por una sociedad para resolver el problema económico básico, satisfacer sus
necesidades.
Lo que distingue a un sistema económico no son las funciones que desempeña, sino la forma o el modo
adoptado para conseguir este fin. Las diferencias entre uno y otros sistemas de encontrarlas en la forma,
reglas, procedimientos e instrumentos adoptados por la sociedad estén articulados para resolver el
problema económico fundamental...: la satisfacción de necesidades básicas y en constante crecimiento
con ciertos recursos económicos que resultan sumamente escasos.
El Capitalismo
1. INTRODUCCIÓN
El término kapitalism fue acuñado a mediados del siglo XIX por el economista
alemán Karl Marx. Otras expresiones sinónimas de capitalismo son sistema de
libre empresa y economía de mercado, que se utilizan para referirse a aquellos
sistemas socioeconómicos no comunistas. Algunas veces se utiliza el término
economía mixta para describir el sistema capitalista con intervención del sector
público que predomina en casi todas las economías de los países
industrializados.
3. ORÍGENES
Tanto los mercaderes como el comercio existen desde que existe la civilización,
pero el capitalismo como sistema económico no apareció hasta el siglo XIII en
Europa sustituyendo al feudalismo. Según Adam Smith, los seres humanos
siempre han tenido una fuerte tendencia a "realizar trueques, cambios e
intercambios de unas cosas por otras". Este impulso natural hacia el comercio
y el intercambio fue acentuado y fomentado por las Cruzadas que se
organizaron en Europa occidental desde el siglo XI hasta el siglo XIII. Las
grandes travesías y expediciones de los siglos XV y XVI reforzaron estas
tendencias y fomentaron el comercio, sobre todo tras el descubrimiento del
Nuevo Mundo y la entrada en Europa de ingentes cantidades de metales
preciosos provenientes de aquellas tierras. El orden económico resultante de
estos acontecimientos fue un sistema en el que predominaba lo comercial o
mercantil, es decir, cuyo objetivo principal consistía en intercambiar bienes y no
en producirlos. La importancia de la producción no se hizo patente hasta la
Revolución industrial que tuvo lugar en el siglo XIX.
El camino hacia el capitalismo a partir del siglo XIII fue allanado gracias a la
filosofía del renacimiento y de la Reforma. Estos movimientos cambiaron de
forma drástica la sociedad, facilitando la aparición de los modernos Estados
nacionales que proporcionaron las condiciones necesarias para el crecimiento
y desarrollo del capitalismo. Este crecimiento fue posible gracias a la
acumulación del excedente económico que generaba el empresario privado y a
la reinversión de este excedente para generar mayor crecimiento.
4. MERCANTILISMO
Desde el siglo XV hasta el siglo XVIII, cuando aparecieron los modernos
Estados nacionales, el capitalismo no sólo tenía una faceta comercial, sino que
también dio lugar a una nueva forma de comerciar, denominada mercantilismo.
Esta línea de pensamiento económico, este nuevo capitalismo, alcanzó su
máximo desarrollo en Inglaterra y Francia.
5.2. La doctrina de Adam Smith Las ideas de Adam Smith no sólo fueron un
tratado sistemático de economía; fueron un ataque frontal a la doctrina
mercantilista. Al igual que los fisiócratas, Smith intentaba demostrar la
existencia de un orden económico natural, que funcionaría con más eficacia
cuanto menos interviniese el Estado. Sin embargo, a diferencia de aquéllos,
Smith no pensaba que la industria no fuera productiva, o que el sector agrícola
era el único capaz de crear un excedente económico; por el contrario,
consideraba que la división del trabajo y la ampliación de los mercados abrían
posibilidades ilimitadas para que la sociedad aumentara su riqueza y su
bienestar mediante la producción especializada y el comercio entre las
naciones.
Así pues, tanto los fisiócratas como Smith ayudaron a extender las ideas de
que los poderes económicos de los Estados debían ser reducidos y de que
existía un orden natural aplicable a la economía. Sin embargo fue Smith más
que los fisiócratas, quien abrió el camino de la industrialización y de la
aparición del capitalismo moderno en el siglo XIX.
A finales del siglo XIX, sobre todo en Estados Unidos, empezaron a aparecer
grandes corporaciones de responsabilidad limitada que tenían un enorme
poder financiero. La tendencia hacia el control corporativo del proceso
productivo llevó a la creación de acuerdos entre empresas, monopolios o trusts
que permitían el control de toda una industria. Las restricciones al comercio
que suponían estas asociaciones entre grandes corporaciones provocó la
aparición, por primera vez en Estados Unidos, y más tarde en todos los demás
países capitalistas, de una legislación antitrusts, que intentaba impedir la
formación de trusts que formalizaran monopolios e impidieran la competencia
en las industrias y en el comercio. Las leyes antitrusts no consiguieron
restablecer la competencia perfecta caracterizada por muchos pequeños
productores con la que soñaba Adam Smith, pero impidió la creación de
grandes monopolios que limitaran el libre comercio.
7. EL CAPITALISMO EN EL SIGLO XX
Durante casi todo el siglo XX, el capitalismo ha tenido que hacer frente a
numerosas guerras, revoluciones y depresiones económicas. La I Guerra
Mundial provocó el estallido de la revolución en Rusia. La guerra también
fomentó el nacionalsocialismo en Alemania, una perversa combinación de
capitalismo y socialismo de Estado, reunidos en un régimen cuya violencia y
ansias de expansión provocaron un segundo conflicto bélico a escala mundial.
A finales de la II Guerra Mundial, los sistemas económicos comunistas se
extendieron por China y por toda Europa oriental. Sin embargo, al finalizar la
Guerra fría, a finales de la década de 1980, los países del bloque soviético
empezaron a adoptar sistemas de libre mercado, aunque con resultados
ambiguos. China es el único gran país que sigue teniendo un régimen marxista,
aunque se empezaron a desarrollar medidas de liberalización y a abrir algunos
mercados a la competencia exterior. Muchos países en vías de desarrollo, con
tendencias marxistas cuando lograron su independencia, se tornan ahora hacia
sistemas económicos más o menos capitalistas, en búsqueda de soluciones
para sus problemas económicos.
a) Razones
- Las críticas
" Esclavismo
" Feudalismo
" Capitalismo
" Socialismo
"Cooperación
- Ideología industrialista
- Optimismo tecnológico
- Similitudes
Ámbito de análisis
a) Relaciones de Producción
- Capitalismo
- Propiedad privada
- Socialismo
{Proceso compulsivo
- Significado de la estatarización
{Identificación Estado/Sociedad
{Bienes de consumo
{Economía sumergida
- Capitalismo
- El mercado asigna
{Empresarios y accionistas
{Trabajadores
{Inversores
{Los salarios
{El beneficio
{Laboral
{Bienes y servicios
{Mercado financiero
{Bienes raíces
{Participa activamente
{Regula indirectamente
{Lógica privada
- Socialismo
- El Plan asigna
{Competencia
{Precios libres
{Lógica social
{Evita el despilfarro
{Papel menor
{Precios administrados
" Competencia
{No convertibilidad
{Monopolio de divisas
- Lógica de la desconexión
- Socialismo
a) Razones
- En esos países supuestamente se han aplicado lo que Marx decía que era el
socialismo.
- Los que han criticado a las economías de tipo soviético dicen que demuestran
la propia inconsistencia del pensamiento de Marx: se mete todo en el mismo
saco.
- Marx se_ala que todos los países tienen que pasar por el capitalismo en esa
secuencia histórica: para Marx Inglaterra es el modelo de desarrollo económico
para los países pobres.
- Los intereses de la mayoría con los de la burguesía, que vive del trabajo de la
clase obrera. La riqueza acumulativa se concentra en el centro, mientras que el
empobrecimiento en la periferia. El capitalismo necesita de la cooperación de
muchos agentes económicos.
Ámbito de análisis
a) Relaciones de producción
Capitalismo
Socialismo
" Grupo social dominante. Se articula dentro del Estado, son los dirigentes del
Partido Comunista. Esta clase social es heterogénea, directores de empresa,
funcionarios, también clase obrera. Pueden tomar decisiones sobre que, como,
cuanto se produce.
" El Estado se apropia del excedente social. Los miembros de la clase social
dominante han sufrido menor penuria.
" Especificaciones. Los trabajadores son el Estado, no hay relación entre dos
partes contractuales distintas, no hay una relación libre. Los trabajadores son
los dueños de los medios de producción. No hay relación entre colectivos
distintos y no está determinado por la economía. El Estado puede asignar
recursos. No hay una relación dentro del estado marcado por los criterios
políticos.
Capitalismo
. Los precios. Son la variable más económica desde el punto de vista del
funcionamiento del mercado. Son la vía fundamental a través de la cual los
agentes económicos reciben información. La información es lo que permite
tomar decisiones.
Socialismo
" El Plan por definición excluye el mercado; están ausentes algunos elementos
básicos no hay agentes ni empresas independientes. La configuración de la
economía es el resultado de una macro decisión política (todas las empresas
tienen el mismo dueño). No hay competencia, hay complementariedad. No hay
competencia dentro ni fuera, porque las transacciones financieras están
prohibidas por el estado. No hay precios libres, los precios no se forman
mediante la oferta y la demanda, no reflejan el coste, la escasez o preferencias;
los precios los fija el Estado conforme a sus objetivos estratégicos.
" Papel de la empresa. La empresa que opera en el mercado tiene como fin la
venta, no tiene con fin la venta, no pretende satisfacer las necesidades
sociales. En las empresas de tipo soviético no hay venta, existen transacciones
dentro del ámbito estatal. El output de una empresa es un insumo para otra
empresa (otro eslabón del sistema administrativo). No hay demanda externa a
la empresa. Si no existen los beneficios derivados de la venta las empresas no
se enfrentan a una restricción financiera fuerte porque su supervivencia no
depende de la venta de producto, sino del presupuesto que garantiza la
financiación de las empresas, los ingresos de las empresas se consignan como
ingresos públicos. En cuanto al tamaño este es grande porque se busca un
criterio de economías de escala para especializarse y en economías de
aglomeración.
" Papel de los precios. Son totalmente distintos que en la economía capitalista,
sirven para dar valor a los productos físicos y no van a variar. El coste de
producción es mayor al coste de venta, hay una subvención que permite que
los precios permanezcan bajos. Los precios reflejan las preferencias políticas
del Estado. Donde funcionan los precios es en el mercado negro, que reflejan
una situación de escasez.
- Capitalismo
- Socialismo
- Aspectos
" Las inversiones extranjeras han estado prohibidas, las procedentes de países
occidentales. Una inversión directa significa controlar la propiedad, disponer de
los activos. Si la inversión directa es el resultado de la cooperación entre
países socialistas si era aceptada.
- Lógica de la desconexión
Las relaciones exteriores han tenido una gran importancia, solo las que han
vinculado a los países del este entre sí. Las relaciones de tipo comercial han
permitido a los países centroeuropeos llevar a cabo una industrialización
rápida. La URSS suministró una dotación de materias primas abundante a un
precio inferior al mercado mundial. Los mayores costes los asume la URSS y
los mayores beneficios los países del este; se produce una transferencia
financiera por la asimetría en los precios. El sector exterior se regula de
manera distinta al capitalismo: el elemento fundamental es la coordinación
entre los planes. Las relaciones se articulan alrededor de un mercado común
comunista pretende coordinar los esfuerzos de los países que forman el área
comunista. Consejo de Ayuda Económica Mutua, CAEM.
- Capitalismo
- Socialismo
Personajes
Adam Smith
1. INTRODUCCIÓN
2. VIDA
3. PENSAMIENTO E INFLUENCIA
David Ricardo
1. INTRODUCCIÓN
3. DESARROLLO DE SU TEORÍA
4. ÚLTIMAS ACTIVIDADES
Desventajas
Hasta la crisis tailandesa de julio de 1997 todo fue bien. El centro aspiraba y
bombeaba dinero vigorosamente, los mercados financieros crecían en tamaño
e importancia y los países periféricos podían obtener un abundante suministro
de capitales abriendo sus mercados de capital. Había una expansión global en
la que los mercados emergentes obtenían resultados especialmente
satisfactorios. En cierto momento del 94 más de la mitad de entradas en los
fondos comunes de inversión de Estados Unidos, se destinaron a fondos de las
economías emergentes.
Esto fue una clásica recuperación temporal de un mercado que tiende a la baja.
Las expectativas para estas economías emergentes no son tan buenas como
antes y llega un momento en que las dificultades en la periferia no pueden ser
buenas para el centro. Es posible que hayamos llegado a este momento con la
crisis de Rusia.
Se supone que este sistema no podía fallar a causa del incumplimiento de los
pagos, pero con la inestabilidad causada por la crisis inflacionista rusa del 98,
este sistema recibió un duro golpe a causa del desplome del sistema bancario
ruso. Los bancos rusos incumplieron sus obligaciones de pago (estaban
arruinados por la crisis y además no podían cumplir con sus homólogos porque
los activos financieros que manejaban se habían revalorizado mucho), pero los
bancos occidentales pudieron mantener el tipo ante sus clientes. No se
encontró manera de compensar las obligaciones de un banco con las del otro.
Esto trajo el fin de muchos fondos de cobertura y otras cuentas especulativas
que sufrieron pérdidas tan cuantiosas que debieron de ser liquidadas. Los
diferenciales normales se vieron alterados y los profesionales que arbitraban
entre diversos derivados, es decir, que cambiaban un derivado por otro,
también sufrieron cuantiosas pérdidas. Fue un duro golpe para la especulación
que se había creado en Rusia a causa de la inestabilidad de la economía.
Estas dos crisis han traído dos efectos demoledores. El primero es el hecho de
que estos acontecimientos han inducido a la mayoría de los actores del
mercado a reducir su exposición en términos generales. Los bancos intentan
frenéticamente limitar su exposición, disminuir la razón préstamos-fondos
propios y reducir el riesgo. Esto a la vez que limita el riesgo en las inversiones,
limita un buen crecimiento en los bancos. El resultado es que los valores
bancarios han caído en picado. Se está gestando una comprensión global del
crédito, que está restringiendo el movimiento de fondos a la periferia, pero que
también ha comenzado a afectar a la disponibilidad de créditos en nuestras
economías internas. Un ejemplo es que el llamado "mercado de bonos basura"
estadounidense, ha cerrado ya.
Una prueba de este fenómeno es una publicación del periódico “Wall Street
Journal” en la que explicaba la siguiente noticia. `Una multinacional del sector
manufacturero de un país industrial, harta de los elevados costes salariales y
de la fuerza sindical de su país de origen, ha decidido desplazarse a un país
lejano con mano de obra más barata y sindicatos más débiles'. Hasta aquí todo
es habitual, pero prosigue: `En este caso el país de origen es Corea del Sur y
la multinacional es Coreana, y el país de destino es el Reino Unido donde los
costes laborales llevan tiempo estancados y los sindicatos son cada vez más
flojos... en un futuro más bien cercano, Corea del sur tendrá unos salarios
generales más caros que el Reino Unido. La insuficiente mano de obra en
Corea y Taiwán ha producido un importante aumento de los salarios reales'
Quizás esta noticia esté un poco hinchada por parte del Wall Street Journal,
pero deja bien claro que la deslocalización en sí no se produce como debería
producirse. La redistribución de la renta no se produce y las diferencias entre
primer y tercer mundo se mantienen o incluso crecen; y la única salvedad que
puede hacer pensar en una cierta deslocalización es que muchos países
subdesarrollados hasta los 70 han crecido de forma impresionante hasta el
punto de que en 30 años se han convertido en economías de primer orden.
Nada nos hace pensar que el efecto vaya a cambiar en los próximos años, y a
lo más que podemos aspirar es a creer que este efecto de desarrollo tan
intenso que se produjo en Corea, Taiwán, Hong Kong o Singapur y que les ha
llevado a ser países similares a los europeos; se dé en otras economías que ya
han empezado a emerger como puedan ser Tailandia, Malasia, Indonesia,
Brasil, México, Argentina...
El causante de estos efectos no es otro que el hecho de que el concepto del
estado-nación está presente incluso dentro de los agentes económicos
causantes de la economía global. Prueba de ello es que todas las
multinacionales céntricas que por cualquier razón deciden deslocalizarse para
abaratar costes, se desplazan siempre hacia los mismos países; y por tanto la
mundialización no se completa ya que más de la mitad del planeta queda
totalmente marginada.
Una de las principales características del comienzo del siglo XXI para la gente
del primer mundo es la sensación de que se ha acabado en dinero, o por lo
menos el bienestar (de que se van a trabajar mas horas sin que aumenten los
salarios reales) del que se gozó el último medio siglo. Se nos presenta una
mala asignación de recursos que en los países desarrollados va a trazar un
mapa en el que se combinan despilfarro, crecimiento económico y desempleo
(Que ya no son incompatibles). Mientras tanto, la ya más conformista sociedad
se intenta resistir a la pérdida de los derechos adquiridos (luchar por adquirir
alguno más parece utópico).
En el primer mundo la cosa cambia por momentos. Mientras que durante los
años 85-92 Estados Unidos contrajo el déficit presupuestario más grande de su
historia y se convirtió en la nación más endeudada del mundo, con lo que
países más dinámicos como Alemania o Japón atacaron su competitividad y
liderazgo; ahora va recuperando el terreno perdido y ha trasladado la crisis a
los otros dos colosos a los que esta pérdida de terreno les está sumiendo en
una importante crisis de identidad y confianza en su industria y en su sistema
económico.
1) Problemas actuales
Ni decir tienen que esta visión es falsa. Hay cosas que podemos decidir
individualmente; hay cosas que sólo se pueden abordar colectivamente.
Como actor del mercado, se intenta maximizar los propios beneficios.
Como ciudadano es preocupante los valores sociales: la paz, la justicia, la
libertad, o lo que sea. No se puede dar expresión a estos valores como
actor del mercado. Si cada uno se impusiera sus propias reglas, afectaría
a la propia actuación de este individuo en el mercado pero no a los demás
individuos, ya que ningún actor por sí solo es capaz de influir en el
resultado.
a) desigualdad.
Aún así tampoco es extraño que los ciudadanos sean grandes demandantes de
grandes políticas sociales y fieles amantes de un estado del bienestar. De
hecho, en países como España parece concebirse la igualdad más como una
redistribución desde arriba que como una ayuda individual potenciada por la
ampliación de las oportunidades sociales. (Más como una limosna del estado
que como algo que es justo y que ayuda al desarrollo económico y social y que
es una obligación lógica del estado darla).
Hay que decir que esto que se ha redactado antes, es posible que esté un poco
exagerado; más si cabe porque últimamente parece haber aumentado un poco
la preocupación por la desigualdad. De hecho The Economist, una importante
revista económica americana, afirma que a partir de 1930, y durante casi
cuarenta años, la diferencia entre ricos y pobres se estrechó en Estados
Unidos; pero que desde finales de los 60 se ha ido ensanchando y que ahora,
finalizando el siglo XX, esa diferencia es la mayor existente desde la creación
del estado del bienestar. Esta publicación ha hecho crecer en Estados Unidos
la inquietud por la desigualdad, sobre todo porque aparece relacionada con
aspectos raciales (se ha ensanchado más entre blancos y negros y no tanto
dentro de la población blanca). El estudio de The Economist sobre Estados
Unidos no tardó en despertar otros sobre otros países desarrollados,
observando tendencias similares; siendo la Gran Bretaña de los años 80 (con
Tatcher en el gobierno) el ejemplo más fuerte. No obstante la creciente
desigualdad no es un asunto exclusivo del primer mundo, en muchos países
emergentes y ex comunistas se ha observado con la llegada de nueva riqueza
una desigualdad creciente.
Todo esto nos sugiere una pregunta. ¿Por qué? ¿Por qué ha aumentado la
desigualdad? La respuesta se halla principalmente en las políticas económicas
liberales adoptadas en muchos lugares del mundo durante los últimos quince
años. Muchos gobiernos han recortado el tipo impositivo (han bajado los
impuestos directos, beneficiando a las clases más pudientes), a la vez que han
recortado los subsidios a los pobres. Sin embargo, más importante que el
impacto directo de estas políticas ha sido la repercusión indirecta de la
liberalización económica. En los últimos años la competencia internacional y la
nueva tecnología han ganado importancia en la economía. Esto, entre sus
muchas ventajas, también ha traído un aumento de la desigualdad; una gran
competencia se puede decir que trae un importante incremento de los ingresos
de los agentes más competitivos o ganadores y un importante descenso de los
ingresos de los agentes menos competitivos o perdedores. Los gobiernos
liberales alegan que este proceso es tan necesario como deseable; necesario
porque es una consecuencia del progreso en marcha; deseable porque
canaliza el esfuerzo y otros recursos hacia usos que hagan crecer más
rápidamente a la economía global. A largo plazo, el crecimiento rápido
beneficiaría a todos y no puede negarse el desarrollo económico analizado a lo
largo de muchos años no se haya ajustado a esto (que no haya beneficiado a
todos al final). Pese a todo esto, tampoco puede negarse que un crecimiento
rápido no haya beneficiado mucho más a unos que a otros y no haya
aumentado la desigualdad.
b) especulación.
5.- ¿Estamos de verdad ante una crisis? Opiniones personales acerca del
tema.
No cabe duda de que afirmar que el siglo XXI va a traer con él una crisis es
quizá demasiado arriesgado por nuestra parte. Pero cuando varios
consumados economistas como George Soros, A. Morita, o Joaquín Estefanía
afirman que la leve expansión actual está trayendo pasivos que no hacen
presagiar nada bueno; debemos hacerles un poco de caso.
En resumen, los que afirman que le capitalismo global está en crisis puede que
exageren, pero tampoco mienten; prueba de ello es que en extremo oriente y
América Latina se han cerrado puertas. Tampoco se miente cuando se afirma
que una tensión en la periferia no puede acabar siendo buena para el centro.
De hecho, la caída de las inversiones en Asia, ha traído una caída de las
monedas de las economías emergentes. En Estados Unidos esto ha
proporcionado un abaratamiento de las importaciones que ha ayudado a aliviar
las tensiones inflacionistas internas; pero en otros países de la OCDE como
España e Italia, la caída de las monedas asiáticas, unido a nuevas barreras
consecuentes de la crisis, ha provocado una caída de las exportaciones (la
caída de las monedas en Asia ha encarecido enormemente nuestros productos
en esos países, si encima aparecen nuevas barreras, el aumento de precios es
mayor) y ha hecho aumentar el déficit comercial que ha contraído su
crecimiento. Con lo cual, aunque países como Estados Unidos se hayan
beneficiado parcialmente; otros se han visto seriamente perjudicados, y eso
que la crisis todavía no ha comenzado en serio, según se afirma anteriormente.
Para hacer el trabajo, se han usado una guía didáctica del Sistema Monetario
Internacional, una serie de datos estadísticos sobre la evolución del comercio
internacional de varios países y una leve explicación de Akio Morita acerca de
las diferencias entre el capitalismo japonés y americano; pero la base de este
ejercicio se basa en dos libros; uno de George Soros y otro de Joaquín
Estefanía donde se señalan en ambos el problema de la crisis del capitalismo
global en estos días. Sin embargo, a la hora de señalar culpables y soluciones,
ambos autores disienten.
Una sociedad que por ser más pudiente es más culta, y que poco a poco
van cambiando sus costumbres, proclamando economías totales de mercado,
consiguiendo democracias, y derrocando dictadores que adulteran el mercado
por intereses personales como en Malasia, además de evitar algún que otro
conflicto debido a estas razones. Corea y Taiwán son ejemplos de democracias
recientes debido a que el desarrollo social lo ha exigido.
Ahora, por último, nos queda abordar un problema que también amenaza el
capitalismo global, pero que es demasiado complejo de investigar: Una crisis
del sistema capitalista dentro del primer mundo debido a las dos vertientes
dominantes; el capitalismo renano (Japón y Europa Occidental a excepción de
Inglaterra) y el capitalismo anglosajón (Estados Unidos y en menor medida,
Inglaterra). Estas diferencias han existido siempre, pero antes con la presencia
de países comunistas, quedaban aparcadas. Ahora, la lucha entre los dos
bloques es una realidad. Ya no es como antes, una carrera militar; ahora es
más bien una lucha económica; pero las tensiones existen.
Antes de entrar a debatir, hay que hacernos una pregunta. ¿Qué tipo de
capitalismo es mejor? Si investigamos a economistas que hablen del tema, el
capitalismo europeo tiene más adeptos. Prácticamente todos los autores
europeos y japoneses, a los que hay que sumar algún autor norteamericano
(como Soros, cuando critica la radicalidad del fundamentalismo de mercado
entendido en Estados Unidos) aunque no profundiza demasiado en el tema);
respaldan el modelo renano. Sin embargo, se está observando como UE y
Japón se van acercando cada vez más al modelo anglosajón y no al revés. Si
la mayoría de los autores afirman que el capitalismo europeo es mejor que el
anglosajón, es inexplicable que el giro mundial sea inverso. Joaquín Estefanía
y Akio Norita si que profundizan en el tema y coinciden en señalarle como un
problema para la economía céntrica que por tanto amenaza la economía
mundial.
El capitalismo anglosajón podría ser aceptado, si los problemas que debe
solucionar un estado fuerte, tampoco aparecieran en un país con un liberalismo
visceral. Pero la desigualdad, la especulación y los abusos del mercado
aparecen de forma abusiva en USA y Reino Unido. Lo más grave de todo es
que los países más liberales tampoco se preocupan porque estos problemas
hayan aparecido, y simplifican la economía hasta el punto de que lo único
importante es crecer (se preocupan de crear y no de distribuir).
Sin embargo, basta que durante una década los países anglosajones crezcan
más que la UE o Japón para que éste se imponga. Hay que tener en cuenta
que es posible que este hecho no se deba a deficiencias de nuestro sistema.
En Japón, por ejemplo, la economía se resintió en el año 90 a causa de una
depresión de la economía mundial; pero tras este periodo, se produjo una crisis
de confianza en la industria nacional. Desde entonces, a la tecnología japonesa
le está costando innovar mucho más que antaño (ya no son tan capaces de
innovar en campos como el cine, el automóvil o la informática y la electrónica;
donde barrieron en los ochenta)
Globalización Económica
Ventajas
Tanto los propietarios de la tierra y el capital como los trabajadores, son libres y
buscan maximizar su bienestar, por lo que intentan sacar el mayor provecho
posible de sus recursos y del trabajo que utilizan para producir; los
consumidores pueden gastar como y cuando quieran sus ingresos para obtener
la mayor satisfacción posible. Este principio que se denomina soberanía del
consumidor, refleja que, en un sistema capitalista, los productores se verán
obligados, debido a la competencia, a utilizar sus recursos de forma que
puedan satisfacer la demanda de los consumidores; el interés personal y la
búsqueda de beneficios les lleva a seguir esta estrategia.
Bajo el sistema capitalista el control del sector privado por parte del público
debe ser mínimo; se considera que existe competencia, la actividad económica
se controlará a sí misma; la actividad del gobierno sólo es necesaria para
gestionar la defensa nacional, hacer respetar la propiedad privada y garantizar
el cumplimiento de los contratos. Esta visión decimonónica del papel del
Estado en el sistema capitalista ha cambiado mucho durante el siglo XX.