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aquí , y como ya queda poquísima se lia echado mano de los
batallones de provinciales, que estaban de servicie en Palacio i
y ruaran relevados ayer por los nacionales , que en unión con
un batallón del 4." de la guardia dan el servicio á Palacio. Costó
trabajo el que »C dejasen relevar y estuvieron á pique de ha-
cer luego i pero SÍ' les convenció al Un , mas ni) .i (pie sal-
gan : pues dicen que no lo verifican: veremos q u e M e e n b o y ,
que es el dia señalado ; mucho me temo alguna desgracia pues
anoche desmandados por las calles alteraron la tranquilidad , y
el gobierno tuvo que poner un batallón en el Parque • y re-
correr las calles de Madrid , haciéndolo el capitán general .i
caballo. No puode \ figurarse el estado de insubordinación
del ejército: basta d e t i r a V qne el dia pasado luvo q u e ponerse
de rodillas en Lcganés un sargento . para que los soldados de
su compañía no matasen á un oficial, t'.asi todos los oficiales
se retiran (lel¡ servicio , menos aquellos q u e lio llenen que
c o m e r , ó les ha faltado la vergüenza.»
"Según las carias de Ciudad-llodruln, en Portugal se ha vuelto
á encender la guerra con eneai 'iii/.ainicntn p o r u ñ a y otra piule
Los miguelístas han lomado lauto cuerpo, que dan mucho que te-
mer en la situación a c t u a l — E n Lisboa ha ocurrido un cambio
p o l í t i c o , ó por mejor decir u n í insurrección semejaste .1 la de
Madrid Ll ejemplo de la revolución española ha influido gra-
vemente pira acelerar un resultado, que de lodos modos era
m u y seguro. El arribo de los dipulados del Duero y de la
Reirá-alta , pertenecientes todos al partido republicano, ha sido
la ocasión de q u e se han valido las sociedades secretas para
dar la ley á la Reina , que como la Cristina creía poder m o -
derar á su arbitrio la revolución , después de haberla soltado
la rienda , y haberla alhagado y robustecido lan inconsidera-
damente. Los batallones de la yuarelia nacional d e Lisboa , tan
pacífico?, y tan leales como los de Madrid , se reunieron en el
Rocío con la tropa de línea , q u e no está menos pervertida
que la de aqui : proclamaron la constitución del año 20 , y
nombraron una comisión de hombres perdidos q u e se presen-
tasen á la Reina pidiendo , ó mejor mandando la adopción de
aquel Código ( de triste memoria ) y la destitución de todo el
ministerio. La Reina que quería vivir y no ser atropellada,
temiendo con fundamento ser arrojada por los balcones si opo-
nía la mas leve resistencia , j u r ó humildemente la constitución,
y encargó á Sa-da-Bandeira la composición de un nuevo ga-
binete.—La casa de Palinella ha sido allanada , robados ó ro-
tos todos sus m u e b l e s , y atropellada su familia L o s e s - m i -
nistros Freiré y Carbalho han desaparecido : se dice q u e están
ocultos en el palacio de Doña María de la Gloria , cuyo e s -
peso , ( e l Príncipe D. F e r n a n d o ) parece no ha visto dé m u y
buen ojo esta revolución q u e acaba con la autoridad de su
esposa y con la gaya. Era necesario cerrar los ojos para no
haber previsto lo que le iba á suceder. Cuando este Príncipe
vino á Portugal , existia ya el árbol q u e necesariamente b a -
hía de producir este-fruto amargo ; porque jamas ha dado otro
ni puede darlo , si se consulta la historia y la naturaleza de
las r e v o l u c i o n e s — L o s ex ministros aconsejaban á Doña María
que no se degradase basta el extremo de j u r a r la constitución;
pero fue mas eficaz la elocuencia de los sables q u e la de los
consejeros.—Las fuerzas navales inglesas se han aumentado en
aquella costa , habiéndose aproximado tres navios de línea y
muchos buques menores. Ignórase el fin de estos refuerzos.
Los constitucionales han comenzado á temer.u
En el Español se lee • '"Sabemos q u e desde el dia 2 de
Setiembre se halla en la legación de Londres la Real orden
de BsffeM, para que todos los empleados presten juramento a
la constitución •. mas en esto parece q u e se anda coo pasos de
tortuga : porque el t*> un sugeto muy distinguido y veterano
en la causa constitucional , se personó ;í cumplir con la Real
orden , y la contestación no fue m u y congruente.»
aparezcan /os que sirvieron d los Ecycs , a José Sapotean , d
En el Courrier se lee una carta , q u e no manifiesta la m e - Fernando J'II. á la constitución misma...
jor disposición de parte del cuerpo diplomático español. los j u e c e s del Mogol ó de la China, ó p o n e r ' m o c i t o s i m b e r -
La Revista dice , q u e todas l i s campanas de b s parroquias, bes y acalorados que se pintarán solos para administrar justicia,
conventos é iglesias particulares han desaparecido : un e m p r e - . E n fin, el Castellano desea una España n u e v a : pero una
sario ingles compra todas las campanas de España. El conven- España , que planteado su p l a n , iba á convertirse en un (
to de las capuchinas de Mátala se ha convertido en teatro. mansión de horror y de espanto . que seria preciso abandonar
E l monasterio de S. Pedro Alcántara de la misma ciudad se aun por los mismos fautores de tan descabellados principa»*.
EN LA IMPRENTA REAL
ha demolido hasta los cimientos. Málaga marcha rápidamente
por las sendas del progreso.
El Duende se queja de que en medio de tantas victorias
supuestas nada se adelanta.
El Quardia nocional dice , (pie una rebelión infame d e s -
hizo la junta constitucional de Granada : pero que los nacio-
nales han despertado de su letargo, y vuelto á instalar la junta,
que será el Rabiarte de la libertad. N u e v o embarazo para el
gobierno de Galatrava.
El l'upnr dice , ipie el árbol de la libertad , si ha de dar
fruto , debe regarse con sangre : q u e los cadalsos deben m u l -
tiplicarse para llenar de terror í los serviles Kn! fin, sus filí-
picas son h'eTmana* carnales de las de Murat y llobcspierrc.
El Castellano pide medidas de rigor, y si fuere necesario,
una disolución general.
El último papel revolucionario de. que hemos hablado (el
Castellano^ observa , que sido dos medios pueden emplearse
para concluir la guerra civil : el de la lenidad y el del rigor'.
VA primero (el de la lenidad,, dice que se esta cusayando
tres años há sin fruto. No sabíamos , que la lenidad consis-
tiera en decretar prisiones , levantar cadalsos , y verter t o r -
rentes de sangre española en los fosos de un castillo ó en las
plazas públicas. Quisiéramos que los pedantes , sanguinarios y
cobardes de ese inmundo papelucho nos definieran la lenidad,
recorrieran después la sangrienta historia de nuestra revolu-
ción , y recordaran el número inmenso de inocentes que han
sido fusilados en toda la extensión de la Península desde la
muerte de F e r n a n d o ; pero dejémoslo aquí : á una especie
tan atroz y tan absurda no hay otra respuesta que la e x e c r a -
ción universal , c u y o peso caerá de Heno sobre el alma b r u -
tal , estúpida y íeroz , q u e sedienta de sangre humana , l e
parece poca la que se ha derramado en su patria misma e n
esta época de muerte y de desolación.
Desea pues el periódico Castellano un régimen de mayor
rigor; pero para esto desea almas de u a temple particular,
es decir : un Marat , un Danton , un Robcspierrc ; quiere j ó -
venes á la frente del gobierno , es decir : hombres sin e x p e -
riencia , sin discernimiento y sin cabeza , hombres turbulen-
tos y apasionados , que bagan arder la España por todos sus
ángulos, si necesario fuere , para llenar el innoble objeto d e
su ambición : requiere un españolismo i/uc no conocen ni alía-
los pueblos mismos de España. Este despropósito merecía otra
respuesta , si la indignación q u e nos inspira la absurdidad d e
semejantes ideas no se resistiera al ridiculo (pie merece tama-
ña extravagancia. Tampoco quiere personas de alta categoría;
quiere solo hombres oscuros y e m b r u t e c i d o s , ocupados hasta
ahora en aquellos ejercicios , q u e si bien son necesarios en la
sociedad', son por su propia naturaleza incompatibles con la
cultura , con la filosofía y la humanidad : los matachines , los
carniceros , los marmitones de cocina , los menestrales de ofi-
cios mas sucios y groseros , son los q u e en concepto del Cas-
tcllano deben colocarse al frente de las municipalidades : el
sargento García y la hez de la soldadesca , venida de los p r e -
sidios ó recien salida del grillete , debiera mandar las armas,
y los energúmenos tragalistas deben colocarse en los tribu-
nales para q u e sacien su natural ferocidad en la sangre de sus
conciudadanos. N o se crea que esto es exagerar y q u e nos
atormentamos con una i l u s i ó n , una quimera. N o : no es asi.
Léase el número 318 del Español , y se verá cu el espíritu
de la prensa periódica cuáles son los principios de su cofra-
d e , y q u e no dudamos ser idénticos a los del Español, que
los publica y que al parecer los aprueba. Es prc< iso dice allí
mismo) buscar en el ejercito los mas bravos, ruab/uicrit que
sea su clase. No importa que sea un tambor i la instrucción
y la moralidad no son necesarias: un carácter feroz é i n e x o -
rable es lo que se pide. Esto basta y sobra.
Los tribunales reclaman jueces nuevos , t/ que des-
Habrán de traerse
(503)
_
-
ARTICULO DE OFICIO.
ou/iiC' Jai novedad en ¿it
¿mAortivi/e .itdttd.
De igual beneficio disfruta S. A. X. el Serenísimo Señor
Infante D03i SEBASTIAN GABRIEL.
<=*»_
Las últimas noticias que se han recibido de Snlzburgo ase-
guran, que continuaban en at/uclla Ciudad sin la menor novedad
en su importante salud S. A,. IX. el Serenísimo Señor PRIVCH'E
DE AsTLI'.IAS . los Serenísimos .Señores fufantes Don ,lr«.V
CARLOS y Don FEIÍS'ASHO M A M A , 4n Awjnsta Fia la Seee-
nisima Señora Infinita Doña M A M A T E R E S A . y la Serenísima
Señora Infanta Dona MAMA AMALIA.
MINISTERIO UNIVERSAL.
Secretaria de. Estado y del Despacho <U la Guerra.
P A R T E R E C I B I D O I:N E S T A S E C R E T A R I A .
Comandancia general de Guipúzfoa.—Excmo.
siete de esta mañana ha salido del pueblo de Alza el bata-
llón de peseteros q u e lo guarnece , en unión con dos c o m -
pañías de tropa de linca , en dirección 'a las casas de Alza
o
y Aculaz, q u e el dia I fueron ocupadas por mis tropas y
se hallan situadas entre ambas líneas , las q u e han sido i n c e n -
diadas , aunque en breve se ha cortado el fuego por haber
sido desalojados de ellas los enemigos , por la oportunidad con
q u e han llegado dos compañías y media del } . " batallón
y otras de) 3 . " , con las q(ic se ha principiado un vivo
fuego por espacio de dos horas , llevando á los contrarios en
vergonzosa fuga hasta sus puntos fortificados , después de h a -
b e r sido envueltos por sus dos flancos, distinguiéndose m u y
particularmente el subteniente del 3 . " batallón D- Joaquin
Ü
Banda y el cabo 2 Juan Bautista I z a g u i r r e , que han avan-
zado hasta colocarse á retaguardia de) enemigo , habiendo
ocasionado este h e c h o su fuga , en suposición d e q u e eran
acometidos por mayores fuerzas. Su pérdida lia sido de algu-
na consideración , pues se ha visto conducir m u c h o s heridos,
cuya retirada les proporcionaba su proximidad á la fortifica-
c i ó n , al paso que la nuestra ha consistido en 8 h e r i d o s , 3 del
•n ^e Qeldbve ^e 1836.
©FKQIIM l^
l." batallón y 6 del 3 ° , contándose entre ellos los t e -
nientes de este último D. Manuel Olasagarrc y D . José E l -
verdin , que también lo fueron cu el mismo punto el dia C
de Junio próximo pasado por su acostumbrado arrojo.—Lo q u e
elevo al conocimiento de V. E . por si estima hacerlo al d e l
REY N . S. — Dios guarde a V. E- muchos años. Hernani 8
de Octubre de 1836.—Excmo. Sr.—Bartolomé de Guibelakle.
— E x c m o . Sr. Ministro Universal.
PARTE N O OFICIAL-
noticias extranjeras. — ALEMANIA.
—La Gaceta de Francia en un artículo intitulado: Garla de
un conservador a jAird Palmerston , preguntaba últimamente á
este ministro ingles ¡ »Si habiendo tolerado el establecimiento
"de la constitución de 1812 en E s p a ñ a , n o se habia p o r el
I •'mismo hecho e m p e ñ a d o á tolerar la constitución de 1820 e n
i ..Portugal: si siendo la Gran Bretaña aliada d e las d o s reinas
«podía abandonar á la una y socorrer á la otra sin c o n t r a d e -
c i r s e á sí misma , y sin crear d o s especies de derecho p ú -
»blico en una misma c u e s t i ó n , cosa que la pondría en la a c -
«titud mas singular á los ojos de la Europa." Nosotros aguar-
damos ahora la respuesta de L o r d Palmerston á esta doble in-
terpelación de |a Gaceta de Francia, y estamos seguros d e
Sr.—A las
que el m u n d o político entero la eslá aguardando c o m o n o s -
otros para juzgar á este hombre de estado. {Diar. de Fraaf.J
1
- '
INGLATERRA.
El curso de los acontecimientos en España prueba mas y
mas la falsedad de las relaciones q u e los periódicos de la Rei-
na, tanto en París como en L o n d r e s , se han esforzado en in-
culcar á la credulidad del público hace m u c h o tiempo, ó bien
por ignorancia , ó bien por interés con respecto i la fuerza,
extensión y recursos de la insurrección carlista. N o s servirán
como de un ejemplar de las noticias q u e los proveedores li-
berales acostumbran vender al publico, las relaciones que han
hecho de la ejpedicion de Gómez desde el principio de su mar-
cha í las Asturias , después de la derrota del general Tello,
que se le opuso d e frente con el ejército de r e s e r v a , mientras
que se destaco Espartero del ejército de operaciones para caer
sobre su retaguardia Según los historiadores verídicos q u e e m -
plean sus plumas inventoras en favor del gobierno d e Madrid,
Gómez y su división habían sido tan frecuentemente d e r r o t a -
dos y hechos p e d a z o s , ó completamente dispersos , q u e nadie
que hubiera ereido la décima parte de estas r e l a c i o n e s , podría
imaginarse q u e el fajitioo Gómez aparecería con un cuerpo
bien organizado de tropas tanto navarras como de otras pro-
vincias á doce leguas de Madrid, y q u e derrotaría en aquel
 (50t>
punto los batallones escojidos del gnhieruo revolucionario, los
héroes de la Granja, que babiau ido á oponérsele.
Al misino tiempo que nosotros publicábamos las noticias
que nos comunicaba nuestro corresponsal en el norte de Es-
paña, relativas á los progresos de la expedición m a n d a d ' por Gó-
mez , el Monitor y lus Corresponsales ,le los periódicos crisli-
noss, ingleses y franceses suponían á este general lujilivo ilelanle
de su vencedor Espartero, quien b labia derrotado cuando
menos una media docena de veces ¿ Pero duncle estaba E s -
partero cuando Gómez destruyo á lo» héroes revolmlunarios,
que habían manifestado por sus hazañas en Madrid , ser mas
apropósito para verdugos , que para soldados .',;Estaba por ven-
tura el valiente Espartero ocupado en escribir obelos para la
<,<iatti de Madrid sobre U» nuevas victorias que había o b t e -
nido? ¿ G e s t a b a adormecido sobre su lecho de laureles, so
fiando en futuras victorias?
Pero al lin se aclaro la verdad por el corresponsal erísimo
de un periódico de L o n d r e s , que liibi.i sido por alquil tiempo
cómplice inculpable en circular las falsedades de que se r e -
tracta abura Hablando de la denota de los revolución arios por
Gómez se expresa de esta manera. "Este iriovimienlo de. l e s e a r
"listas parece haber 4«apartado al gobierno, ( d e suerte que
í<cl gobierno y Espartero d o r m í a n ; llegando í COIIOCel' entull-
eces el peligro , que los luminosos p u l e s oficiales de lo«. ex-
onérales de (pastilla la \ ieja le babiau disfrazado.» Si hubiera
sido tan solamente el desmoralizado gobierna de Mullid-,
( q u e jura un día la coiislitiieíoii para qiiebranlarla el siguiente.)
el único engañado por los unjiuos parles oíiciales de los gefes
fle su ejército , la cosa no seria luí dolorosa ; pero desgracia-
damente un gran numero de ingleses han sido seducid' s
PiOr los tales partes para especular en los fondos esp. -
noles , y engañados miserablemente , viéndose reducidos algt.-
nos á la mendicidad desde la opulencia , y otros se han ar-
rojado aun al criminal acto del suicidio. Los que se han ápn -
Mechado de nuestros avisos se han salvado á tiempo, evitando
el embarcar sus medios de subsistencia en el mar borrascoso
de la especulación española, en que ha naufragado la propie-
dad de tantos infelices.
Los nuevos ministros españoles no bien se lian apoderado
de las riendas del p o d e r , cuando tratan ya de emplear sus
emisarios en engañar al publico ingles con una de las mas
impudentes falsedades, que jamas se ban forjado hasta abura en
la bolsa de Madrid. Dicen que va á verificarse un empréstito
forzoso de dos millones de. libras esterlinas , y que el uno esta
destinado para el pago de los intereses Ingleses, vuestra buena
fu t n creer las fraudulentas invenciones de artificiosos extranje-
ros es grande ; pero creemos que esle cuento del millón del
empréstito forzoso para pagar los intereses de la exhausta Es-
paña es demasiado monstruoso aun para vuestra credulidad;
v así le dejaremos que corra por el inundo del modo que
pueda , lo mismo que los SO,000 hombres que se van a poner
sobre las armas sin tener un cuarto en IO.-MITI-H, y violando
directamente la gloriosa constitución, que Calatrava y sus c o -
legas han jurado, guardar inviolablemente. (Herald.)
Un articulo oficial de la Gaceta de Madrid trata de incul-
car, que Maria Cristina goza de perfecta libertad , que la Ca-
pital esta pacifica y tranquila, y que la lealtad y la subordi-
nación reinan entre los soldados. Nuestras noticias particulares
(lo decimos con sentimiento) no son mas favorables que las que
«I Monitor y otros periódicos franceses publican , y por lo
que son tan mal tratados por el órgano oficial del gobierno
español. Estas noticias nos maniüestan, que la emigración crece,
y que seria mas general , si el gobierno no rehusase los n u -
merosos pasaportes que se le piden diariamente. La ansiedad
de abandonar el pais se ha acrecentado m u c h o , por los actos
de venganzas privadas que se cometen á cada paso con impuni-
dad. Se oyen mueras á todas horas. L'n personaje cuyo n o m -
bre no se menciona estuvo para ser asesinado por una c u a -
drilla de pillos, que le siguieron hasta la casa del Embajador
francés, y hubiera perecido sino hubiera sido protejido por
una numerosa escolta. La insubordinación de la tropa era tal,
que hacia necesaria la presencia del general Rodil , que es-
taba alarmado él mismo por los boletines que llegaban del
ejército en cuanto al recibimiento que le aguardaba, si se d e -
terminaba á irse allí. Su predecesor M e n d e z - \ i g o , que habia
rehusado salir para Badajoz, tenia que permanecer oculto en
U Capital.
Entre la poca seguridad, insubordinación y ansiedad de la
Capital, y la resistencia de las Juntas . que rehusan someterse
al gobierno central, la situación de Calatrava es muy poco envi-
diable. Se esta desconceptuando entre los de su mismo par-
t i d o , y el (5 del presente ap;n i -rieron en varios parajes públi-
cos de la C-q.il.il ios siguientes versos.
n s i u p §í r?; s ' " ; ' '''' lslui-ii se hubiera quemado ,
e s l i l l a CaKlrá' tan infcsladi
S • cree que M-ndi/abal lie-,na pronlo á un puesto que le
facilitará- reumbols.ii.se de lo n i m b o que ha contribuido para
laj últimas insurrecciones. (Moruiíj l'ust.)
iiqi er.vijciJíiuim ——
Este mismo periódico copia el siguiente trozo de. la carta
de uno de tus coi i-esponsales : " l a Junta de t. lanada se ha
" - ' ' l ó e n l o ,M. Romeo el c\ -intendente esta arrestado S acu-
lado de Ir.lición a la Junta El coronel Legúíá que última-
mente lle-o ib- |)es|,eii;,|irn-ns declara , que si se presentase
el mismo Ouiroga sena fusilado. Jla salido ya para Grillada;
I" 1 !" s-ria de ,lesear que tuviese nolicia a tiempo , y q u e e \ i -
laso la suerte que le espera. La Junta de C.idiz lejos de di-
solverse emilio el > un decreto de comercio de grande im-
poilancia. Hace responsable a la Junta de Malaga |>or el llano
que ba causado al trafico de Cádiz , importando .dennos géne-
ros bxtranicrós con derechos muy bajos En lílilaga ha habi-
do dfsturliWs '•> que ha snlo causa líe que la Junta expida un
decreto condenando á muerte á los que se apresaren robando.
En ¿ara;- iza , Evaristo S. Miguel declara , que no obrara como
no reciba refuerzos. En cuanto a Galicia su situación es alar-
mante. Las parlidas carlistas crecen diariamente apesar de los
esfuerzos de Lalre •>
—El Corno iiif/lrs d i c e : »que la lucha de España no tieno
ya por objeto la sucesión del t r o n o , sino que se ha hecho
una guerra de principios, Nosotros t e m a m o s , p u e s , razón en
ilei-ir, que ya no bahia en España carlistas ni e r í s i m o s , »mo
realistas y revolucionarios »
• —i»
F R A N C I A.
i nsinmoí
París.
Es m n v curioso ver al miserable gobierno de Madrid, que
despui-s de someterse á la rrvolu ion , al cabo de una i m p o -
tente lucha de tres años , sueña todavía en apoyarse en la
misma revolución para levantarse de la espantosa caída q u e
acaba Be dar Los nuevos ministros, empeñados (solo porque
lo s o n ) eo desterrar la a n a r q u í a , que ellos mismos han i m -
puesto á su país antes de ocupar los puestos en que se ven
colocados , trabajan en Váida ; porque ios muchos que pensa-
ban serlo y no lo han conseguido , vienen empujando por d e -
tras , y no es posible restablecer el orden que se requiere
para gobernar i los sucesos justificarán nuestras previsiones , lo
mismo que ban justificado las que indicamos anteriormente.
\ amos á enumerar primero los obstáculos , y en seguida
los medios de superarlos. El gobierno de Madrid quiere c o n -
servar el apoyo moral de la Francia y sobre todo el de la
Inglaterra: tal ha sido la política de Mendizabal , cuya influen-
cia se ha manifestado en los primeros actos del nuevo gabi-
nete de Cristina , pero en el dia es preciso resolver un problema
mucho mas ílifici! ; porque debe á un mismo tiempo satisfa-
cerse i las juntas , tanto mas desconfiadas por haber sido una
vez engañadas , y tanto mas exigentes porque están al frente
de un pueblo á quien han subyugado : y se debe complacer
al ejército que ba ejercido la soberanía en pro de las pasiones
revolucionarias, y que no se dejará arrebatar como quiera el
premio de su heroica conducta.
Para conservar el apoyo de los extranjeros hacen los g o -
bernantes que Cristina diga y repila mil veces , que está d e -
cidida i mantener el crédito p ú b l i c o ; y para lisonjear al eje r-
(5"5)
tito" hace que se le orreiea la puntualidad y exactitud de la
paga. ¿Y qué sé h i c e para satisfacer á las juntas V Violar la
constitución que ellas mismas han dictado : decretar un em-
préstito forzado de doscientos millones de reales , cuando ledos
sabemos que un empréstito , que ni se puede ni se quiere
reembolsar, no es otra cosa que un impuesto extraordinario ,
y que segun la constitución »o tiene el gobierno facultades
para decretarlo ; de consiguiente, infringen el mismo código
que acaban de j u r a r : adoptar medidas administrativa! que
tienden á indisponer al pueblo contra el nuevo régimen polí-
tico , que las juntas no dejarán de acusar de perfidia- esto es
lo que se hace para que las juntas queden satisfechas ; v solo
falta el resultado inevitable, que es la bancarrota.
No se concluye con esto • aun admitiendo que los extran-
jeros interesados en el e n d i t o de España fuesen tan crédulos,
que dieran fe á las declaraciones de un |K>der que se, acaba
por eon-mnrion , no sería suficiente para conservar el a p o \ o
moral dfé la Francia y de la Inglaterra ; porque en eslos países
los hombres que saben reflexionar eslán convencidos , de que
Cristina vencida , humillada , y sospechosa para con los exal-
tados , no puede resistir á las consecuencias de las iiislitu-io-
nes democráticas que acaba de jurar . . . . Para presentar al-
gunas garantías á sus aliados , Cristina (ó m i s bien su consejo
de ministros) ha anunciado que trata de modificar la consti-
tución , creando una segunda cámara titulada senario ,.pata' que
«1 nombre no desagrade á los -republicanos. Una comisión está
encargada de preparar este trabajo que , segun dicen , pondrá
» la constitución española en armonía con las de los paises
v e c i n o s ; y desde luego no hay duda en admitir que las juntas,
cuya influencia será preponderante en las elecci. n ? s , se con-
formarán con esta decisión del gobierno. Si la insurrección
militar no hubiera dado en tierra con el estatuto real, es muy
probable que las cámaras , de acuerdo con las pasiones po-
pulares , le hubiesen destruido enteramente para producir de
•un modo legal la constitución del año 1812: ¿ c ó m o pues ad-
mitiremos que los adictos á esta constitución , victoriosos por
«1 momento , consientan cu apoyar con sus votos un sistema,
que indirectamente no es mas que el estatuto mismo ?
Mas, aun cuando tal sucediera y se verificase este prodi-
gio , ahora que ha desaparecido enteramente el justo-medio
¿de dónde se sacarán eslos nuevos senadores ? Evidentemente
del partido revolucionario ; porque ni la chusma ni la solda-
desca tolerarían otra clase de sugetos en semejantes destinos.
Pues siendo asi , f para qué dos cámaras ? ¿ N o sería mas acer-
tado , como dice Royer-Collard , levantar un tabique en el
salón de las cortes , y sacar á la suerte los asientos de la d e -
recha y los de la izquierda ? Quisieran identificarse con el
sistema, segun se expresan , de Francia y de Inglaterra ; pero
las constituciones de estos dos pueblos difieren entre si esen-
cialmente : en Londres hay una cámara alta que es heredita-
ria , independiente de la corona y del pueblo, y á quien este
es deudor de su gran carta -. en París hay una asamblea cuya
existencia tolera la revolución después de haberla d e s c o n c e p -
t u a d o , y haber hecho de ella un dócil instrumento del poder
ministerial. V los liberales españoles, ¿consentirían en que se
reprodujera en Madrid un simulacro de la cámara de los lores
de Inglaterra? ¿ Y cómo seria posible que adoptasen nuestra
cámara ministerial , cuya abnegación forzosa bastaría para d e s -
acreditar el sistema de oposición que quieren establecerse ?
N o queda pues otro camino q u e el de las elecciones , y t e -
nemos dicho ya lo bastante acerca de esto.
Es imposible mejorar por medios legales la constitución de
Cádiz sin variar sus bases fundamentales : es decir , sin d e s -
truirla. Esta empresa pudiera haberse ensayado en tiempo de
calma, y después de una larga y desgraciada experiencia , que
b isl ise para desengañar á sus p irlidarios y conlinnar á su*
adversarios; pero seria una locura tocar este p u n t o , en el
momento misino que las pasiones populares y las ambiciones
subalternas del ejército han hecho de esle eétebrr-rixlitjo e|
blanco de sus esperanzas , y el estandarte de su reunión. Es
in'uil decir que no puede reformarse por las vías dictatoria-
les ; pori|iie el poder que sufre la ley de la fuerza , no puede
ni aun concebir la idea de recurrir á ella.
Antes de tres incses lilísima quedará privada de la regen-
cia ; i son l u d a s las r.i/.nes ipie hiv pira e s t o , que es im-
posible se desentiendan de ellas las cortes constitucionales
Los regentes se dlflgirátt de entre los adictos al movimiento.
V puede ser que rtWeWga la presidencia un augusto personaje ,
en seguida se volará la liancnrr.ita , único medio de salir de
apuros : este es el porvenir probable de la España revolucio-
naria. (('.. de P >
— Apenas ha vuelto al mando Mendizabal, cuando ya s „
posición es amenazada por las suciedades populares. J.a lucha
no puede durar Las consideraciones del rreiiilo \ medidas
de hacienda , no le sostendrán contra los ataques de los d e -
magogos — Los diarios de. Barcelona que llegan hasla el 20
de Setiembre no contienen sino declamaciones. Todo se r e -
duce á excitar é impulsar á las autoridades militares p:ira que
tomen medidas á fin de detener el progreso de los faccio-
sos. (Id)
" ' '" ' -—l' - " ••
N O T I C I A S D E ESTAÑA.
S. M. y S. A. R. salieron de Escoriaza el dia O a las nueve
y media de la mañana . y habiendo comido en Eloirio llega-
ron a las cinco v media de la tarde a la villa de Durango,
donde permanecen.
i
Los encargados de Negocios de las Folencias extranjeras
en Madrid se han retirado y algunos eslán ya en Francia. Solo
,
quedan los de Inglaterra y Francia. Sabemos por un c o n d u c -
to fidedigno , que la orden para la retirada de aquellos se dio
antes de la publicación de la constitución de 1812.
Dicen de Estclla con fecha del 2 ¡ » que segun noticias de
Pamplona los oficiales de aquella guarnición son insultados
diariamente por los sargentos y soldados , habiéndose llegado
i acobardar , de forma que no se atreven á salir de casa í
lo menos por la noche. — Se han pasado á nuestras lilas t>
argelinos.»
En carta de Huesca del 2G se lee : ''La llegada de Maroto
ha reanimado el espíritu de los apocados. Las gentes corren
á las armas llenas de ardor por la causa de CARLOS Vi V no
se duda que dentro de muy poco dominará Maroto todo el
Principado. — Las operaciones principiaron y a : se ban r e n -
dido dos c a s e r n a s , y se han hecho sobre 200 prisioneros, la
mayor parte nacionales.»
En carta de Madrid del 20 se lee : " Están embargando los
bienes de todos los carlistas y de cuantos se han ausentado
de la Corte desde el 1 • de Octubre del año 33 Se ban anu-
 (50t>
punto los batallones escojidos del gnhieruo revolucionario, los
héroes de la Granja, que babiau ido á oponérsele.
Al misino tiempo que nosotros publicábamos las noticias
que nos comunicaba nuestro corresponsal en el norte de Es-
paña, relativas á los progresos de la expedición m a n d a d ' por Gó-
mez , el Monitor y lus Corresponsales ,le los periódicos crisli-
noss, ingleses y franceses suponían á este general lujilivo ilelanle
de su vencedor Espartero, quien b labia derrotado cuando
menos una media docena de veces ¿ Pero duncle estaba E s -
partero cuando Gómez destruyo á lo» héroes revolmlunarios,
que habían manifestado por sus hazañas en Madrid , ser mas
apropósito para verdugos , que para soldados .',;Estaba por ven-
tura el valiente Espartero ocupado en escribir obelos para la
<,<iatti de Madrid sobre U» nuevas victorias que había o b t e -
nido? ¿ G e s t a b a adormecido sobre su lecho de laureles, so
fiando en futuras victorias?
Pero al lin se aclaro la verdad por el corresponsal erísimo
de un periódico de L o n d r e s , que liibi.i sido por alquil tiempo
cómplice inculpable en circular las falsedades de que se r e -
tracta abura Hablando de la denota de los revolución arios por
Gómez se expresa de esta manera. "Este iriovimienlo de. l e s e a r
"listas parece haber 4«apartado al gobierno, ( d e suerte que
í<cl gobierno y Espartero d o r m í a n ; llegando í COIIOCel' entull-
eces el peligro , que los luminosos p u l e s oficiales de lo«. ex-
onérales de (pastilla la \ ieja le babiau disfrazado.» Si hubiera
sido tan solamente el desmoralizado gobierna de Mullid-,
( q u e jura un día la coiislitiieíoii para qiiebranlarla el siguiente.)
el único engañado por los unjiuos parles oíiciales de los gefes
fle su ejército , la cosa no seria luí dolorosa ; pero desgracia-
damente un gran numero de ingleses han sido seducid' s
PiOr los tales partes para especular en los fondos esp. -
noles , y engañados miserablemente , viéndose reducidos algt.-
nos á la mendicidad desde la opulencia , y otros se han ar-
rojado aun al criminal acto del suicidio. Los que se han ápn -
Mechado de nuestros avisos se han salvado á tiempo, evitando
el embarcar sus medios de subsistencia en el mar borrascoso
de la especulación española, en que ha naufragado la propie-
dad de tantos infelices.
Los nuevos ministros españoles no bien se lian apoderado
de las riendas del p o d e r , cuando tratan ya de emplear sus
emisarios en engañar al publico ingles con una de las mas
impudentes falsedades, que jamas se ban forjado hasta abura en
la bolsa de Madrid. Dicen que va á verificarse un empréstito
forzoso de dos millones de. libras esterlinas , y que el uno esta
destinado para el pago de los intereses Ingleses, vuestra buena
fu t n creer las fraudulentas invenciones de artificiosos extranje-
ros es grande ; pero creemos que esle cuento del millón del
empréstito forzoso para pagar los intereses de la exhausta Es-
paña es demasiado monstruoso aun para vuestra credulidad;
v así le dejaremos que corra por el inundo del modo que
pueda , lo mismo que los SO,000 hombres que se van a poner
sobre las armas sin tener un cuarto en IO.-MITI-H, y violando
directamente la gloriosa constitución, que Calatrava y sus c o -
legas han jurado, guardar inviolablemente. (Herald.)
Un articulo oficial de la Gaceta de Madrid trata de incul-
car, que Maria Cristina goza de perfecta libertad , que la Ca-
pital esta pacifica y tranquila, y que la lealtad y la subordi-
nación reinan entre los soldados. Nuestras noticias particulares
(lo decimos con sentimiento) no son mas favorables que las que
«I Monitor y otros periódicos franceses publican , y por lo
que son tan mal tratados por el órgano oficial del gobierno
español. Estas noticias nos maniüestan, que la emigración crece,
y que seria mas general , si el gobierno no rehusase los n u -
merosos pasaportes que se le piden diariamente. La ansiedad
de abandonar el pais se ha acrecentado m u c h o , por los actos
de venganzas privadas que se cometen á cada paso con impuni-
dad. Se oyen mueras á todas horas. L'n personaje cuyo n o m -
bre no se menciona estuvo para ser asesinado por una c u a -
drilla de pillos, que le siguieron hasta la casa del Embajador
francés, y hubiera perecido sino hubiera sido protejido por
una numerosa escolta. La insubordinación de la tropa era tal,
que hacia necesaria la presencia del general Rodil , que es-
taba alarmado él mismo por los boletines que llegaban del
ejército en cuanto al recibimiento que le aguardaba, si se d e -
terminaba á irse allí. Su predecesor M e n d e z - \ i g o , que habia
rehusado salir para Badajoz, tenia que permanecer oculto en
U Capital.
Entre la poca seguridad, insubordinación y ansiedad de la
Capital, y la resistencia de las Juntas . que rehusan someterse
al gobierno central, la situación de Calatrava es muy poco envi-
diable. Se esta desconceptuando entre los de su mismo par-
t i d o , y el (5 del presente ap;n i -rieron en varios parajes públi-
cos de la C-q.il.il ios siguientes versos.
n s i u p §í r?; s ' " ; ' '''' lslui-ii se hubiera quemado ,
e s l i l l a CaKlrá' tan infcsladi
S • cree que M-ndi/abal lie-,na pronlo á un puesto que le
facilitará- reumbols.ii.se de lo n i m b o que ha contribuido para
laj últimas insurrecciones. (Moruiíj l'ust.)
iiqi er.vijciJíiuim ——
Este mismo periódico copia el siguiente trozo de. la carta
de uno de tus coi i-esponsales : " l a Junta de t. lanada se ha
" - ' ' l ó e n l o ,M. Romeo el c\ -intendente esta arrestado S acu-
lado de Ir.lición a la Junta El coronel Legúíá que última-
mente lle-o ib- |)es|,eii;,|irn-ns declara , que si se presentase
el mismo Ouiroga sena fusilado. Jla salido ya para Grillada;
I" 1 !" s-ria de ,lesear que tuviese nolicia a tiempo , y q u e e \ i -
laso la suerte que le espera. La Junta de C.idiz lejos de di-
solverse emilio el > un decreto de comercio de grande im-
poilancia. Hace responsable a la Junta de Malaga |>or el llano
que ba causado al trafico de Cádiz , importando .dennos géne-
ros bxtranicrós con derechos muy bajos En lílilaga ha habi-
do dfsturliWs '•> que ha snlo causa líe que la Junta expida un
decreto condenando á muerte á los que se apresaren robando.
En ¿ara;- iza , Evaristo S. Miguel declara , que no obrara como
no reciba refuerzos. En cuanto a Galicia su situación es alar-
mante. Las parlidas carlistas crecen diariamente apesar de los
esfuerzos de Lalre •>
—El Corno iiif/lrs d i c e : »que la lucha de España no tieno
ya por objeto la sucesión del t r o n o , sino que se ha hecho
una guerra de principios, Nosotros t e m a m o s , p u e s , razón en
ilei-ir, que ya no bahia en España carlistas ni e r í s i m o s , »mo
realistas y revolucionarios »
• —i»
F R A N C I A.
i nsinmoí
París.
Es m n v curioso ver al miserable gobierno de Madrid, que
despui-s de someterse á la rrvolu ion , al cabo de una i m p o -
tente lucha de tres años , sueña todavía en apoyarse en la
misma revolución para levantarse de la espantosa caída q u e
acaba Be dar Los nuevos ministros, empeñados (solo porque
lo s o n ) eo desterrar la a n a r q u í a , que ellos mismos han i m -
puesto á su país antes de ocupar los puestos en que se ven
colocados , trabajan en Váida ; porque ios muchos que pensa-
ban serlo y no lo han conseguido , vienen empujando por d e -
tras , y no es posible restablecer el orden que se requiere
para gobernar i los sucesos justificarán nuestras previsiones , lo
mismo que ban justificado las que indicamos anteriormente.
\ amos á enumerar primero los obstáculos , y en seguida
los medios de superarlos. El gobierno de Madrid quiere c o n -
servar el apoyo moral de la Francia y sobre todo el de la
Inglaterra: tal ha sido la política de Mendizabal , cuya influen-
cia se ha manifestado en los primeros actos del nuevo gabi-
nete de Cristina , pero en el dia es preciso resolver un problema
mucho mas ílifici! ; porque debe á un mismo tiempo satisfa-
cerse i las juntas , tanto mas desconfiadas por haber sido una
vez engañadas , y tanto mas exigentes porque están al frente
de un pueblo á quien han subyugado : y se debe complacer
al ejército que ba ejercido la soberanía en pro de las pasiones
revolucionarias, y que no se dejará arrebatar como quiera el
premio de su heroica conducta.
Para conservar el apoyo de los extranjeros hacen los g o -
bernantes que Cristina diga y repila mil veces , que está d e -
cidida i mantener el crédito p ú b l i c o ; y para lisonjear al eje r-
(5"5)
tito" hace que se le orreiea la puntualidad y exactitud de la
paga. ¿Y qué sé h i c e para satisfacer á las juntas V Violar la
constitución que ellas mismas han dictado : decretar un em-
préstito forzado de doscientos millones de reales , cuando ledos
sabemos que un empréstito , que ni se puede ni se quiere
reembolsar, no es otra cosa que un impuesto extraordinario ,
y que segun la constitución »o tiene el gobierno facultades
para decretarlo ; de consiguiente, infringen el mismo código
que acaban de j u r a r : adoptar medidas administrativa! que
tienden á indisponer al pueblo contra el nuevo régimen polí-
tico , que las juntas no dejarán de acusar de perfidia- esto es
lo que se hace para que las juntas queden satisfechas ; v solo
falta el resultado inevitable, que es la bancarrota.
No se concluye con esto • aun admitiendo que los extran-
jeros interesados en el e n d i t o de España fuesen tan crédulos,
que dieran fe á las declaraciones de un |K>der que se, acaba
por eon-mnrion , no sería suficiente para conservar el a p o \ o
moral dfé la Francia y de la Inglaterra ; porque en eslos países
los hombres que saben reflexionar eslán convencidos , de que
Cristina vencida , humillada , y sospechosa para con los exal-
tados , no puede resistir á las consecuencias de las iiislitu-io-
nes democráticas que acaba de jurar . . . . Para presentar al-
gunas garantías á sus aliados , Cristina (ó m i s bien su consejo
de ministros) ha anunciado que trata de modificar la consti-
tución , creando una segunda cámara titulada senario ,.pata' que
«1 nombre no desagrade á los -republicanos. Una comisión está
encargada de preparar este trabajo que , segun dicen , pondrá
» la constitución española en armonía con las de los paises
v e c i n o s ; y desde luego no hay duda en admitir que las juntas,
cuya influencia será preponderante en las elecci. n ? s , se con-
formarán con esta decisión del gobierno. Si la insurrección
militar no hubiera dado en tierra con el estatuto real, es muy
probable que las cámaras , de acuerdo con las pasiones po-
pulares , le hubiesen destruido enteramente para producir de
•un modo legal la constitución del año 1812: ¿ c ó m o pues ad-
mitiremos que los adictos á esta constitución , victoriosos por
«1 momento , consientan cu apoyar con sus votos un sistema,
que indirectamente no es mas que el estatuto mismo ?
Mas, aun cuando tal sucediera y se verificase este prodi-
gio , ahora que ha desaparecido enteramente el justo-medio
¿de dónde se sacarán eslos nuevos senadores ? Evidentemente
del partido revolucionario ; porque ni la chusma ni la solda-
desca tolerarían otra clase de sugetos en semejantes destinos.
Pues siendo asi , f para qué dos cámaras ? ¿ N o sería mas acer-
tado , como dice Royer-Collard , levantar un tabique en el
salón de las cortes , y sacar á la suerte los asientos de la d e -
recha y los de la izquierda ? Quisieran identificarse con el
sistema, segun se expresan , de Francia y de Inglaterra ; pero
las constituciones de estos dos pueblos difieren entre si esen-
cialmente : en Londres hay una cámara alta que es heredita-
ria , independiente de la corona y del pueblo, y á quien este
es deudor de su gran carta -. en París hay una asamblea cuya
existencia tolera la revolución después de haberla d e s c o n c e p -
t u a d o , y haber hecho de ella un dócil instrumento del poder
ministerial. V los liberales españoles, ¿consentirían en que se
reprodujera en Madrid un simulacro de la cámara de los lores
de Inglaterra? ¿ Y cómo seria posible que adoptasen nuestra
cámara ministerial , cuya abnegación forzosa bastaría para d e s -
acreditar el sistema de oposición que quieren establecerse ?
N o queda pues otro camino q u e el de las elecciones , y t e -
nemos dicho ya lo bastante acerca de esto.
Es imposible mejorar por medios legales la constitución de
Cádiz sin variar sus bases fundamentales : es decir , sin d e s -
truirla. Esta empresa pudiera haberse ensayado en tiempo de
calma, y después de una larga y desgraciada experiencia , que
b isl ise para desengañar á sus p irlidarios y conlinnar á su*
adversarios; pero seria una locura tocar este p u n t o , en el
momento misino que las pasiones populares y las ambiciones
subalternas del ejército han hecho de esle eétebrr-rixlitjo e|
blanco de sus esperanzas , y el estandarte de su reunión. Es
in'uil decir que no puede reformarse por las vías dictatoria-
les ; pori|iie el poder que sufre la ley de la fuerza , no puede
ni aun concebir la idea de recurrir á ella.
Antes de tres incses lilísima quedará privada de la regen-
cia ; i son l u d a s las r.i/.nes ipie hiv pira e s t o , que es im-
posible se desentiendan de ellas las cortes constitucionales
Los regentes se dlflgirátt de entre los adictos al movimiento.
V puede ser que rtWeWga la presidencia un augusto personaje ,
en seguida se volará la liancnrr.ita , único medio de salir de
apuros : este es el porvenir probable de la España revolucio-
naria. (('.. de P >
— Apenas ha vuelto al mando Mendizabal, cuando ya s „
posición es amenazada por las suciedades populares. J.a lucha
no puede durar Las consideraciones del rreiiilo \ medidas
de hacienda , no le sostendrán contra los ataques de los d e -
magogos — Los diarios de. Barcelona que llegan hasla el 20
de Setiembre no contienen sino declamaciones. Todo se r e -
duce á excitar é impulsar á las autoridades militares p:ira que
tomen medidas á fin de detener el progreso de los faccio-
sos. (Id)
" ' '" ' -—l' - " ••
N O T I C I A S D E ESTAÑA.
S. M. y S. A. R. salieron de Escoriaza el dia O a las nueve
y media de la mañana . y habiendo comido en Eloirio llega-
ron a las cinco v media de la tarde a la villa de Durango,
donde permanecen.
i
Los encargados de Negocios de las Folencias extranjeras
en Madrid se han retirado y algunos eslán ya en Francia. Solo
,
quedan los de Inglaterra y Francia. Sabemos por un c o n d u c -
to fidedigno , que la orden para la retirada de aquellos se dio
antes de la publicación de la constitución de 1812.
Dicen de Estclla con fecha del 2 ¡ » que segun noticias de
Pamplona los oficiales de aquella guarnición son insultados
diariamente por los sargentos y soldados , habiéndose llegado
i acobardar , de forma que no se atreven á salir de casa í
lo menos por la noche. — Se han pasado á nuestras lilas t>
argelinos.»
En carta de Huesca del 2G se lee : ''La llegada de Maroto
ha reanimado el espíritu de los apocados. Las gentes corren
á las armas llenas de ardor por la causa de CARLOS Vi V no
se duda que dentro de muy poco dominará Maroto todo el
Principado. — Las operaciones principiaron y a : se ban r e n -
dido dos c a s e r n a s , y se han hecho sobre 200 prisioneros, la
mayor parte nacionales.»
En carta de Madrid del 20 se lee : " Están embargando los
bienes de todos los carlistas y de cuantos se han ausentado
de la Corte desde el 1 • de Octubre del año 33 Se ban anu-
 (5oG)
tado las ventas hechas desde Ja publicación del saqrado có- acrimina vigorosamente • no se prostituye 'a los furores de un
digo , y se van á revisar cuantas se han hecho en estos tres p a r t i d o , sino q u e consulta las máximas de la razón y la j u s -
años ; Bello método para robar ! — " Mal , m u y mal se vive ticia : no proclama sangre y fuego, sino q u e anuncia los p r i n - _,„.. i^ati ÍC«IJOÍ^OB ^ ^
e n Madrid ; pero en lo restante de la Península no se puede cipios t u t e l a r e s , que garantizan la propiedad y las personas. ryr .
0/VD. 402. TVCXHCÓ * *H-il9ÍC
vivir de modo alguno , pues los pueblos siempre están e x p u e s - Asi se m e r e c e el nombre de filósofos ; pero atenta sacrilego i : Z.sVt moa i* t>-*tmtt \h ce L V l u o i e ? c 1836.
tos á los furores de un dictador , como sucede ahora mismo contra la filosofía , contra los principios de la moral eterna, el — — t>(Kl^
S ' U J 5 , Mi
en Cuenca , donde el hambrón de F e r m i n Caballero se ha periodista q u e ha declamado contra la supuesta indulgencia , BíOlEj 100 «ll
propuerto llenar su exhausta faltriquera , para tañer con que del primer período , los que han aplaudido la crueldad , loa itt ?;'.) ÜOÍ , o';<i
vivir fuera del Reino en el caso inevitable de una emigración, fusilamientos, los incendios del bárbaro R o d i l , de este c o -
riéndose de la desgraciada España , presa hoy d e todas las ^ n - - - - - -
barde , monstruo de crueldad y de barbarie , indigno d e v i - »i» •st ou;,¡b
furias infernales, lia sacado estos días con a p r e m i o s , amena- vir entre los hombres. Profanan la filosofía los que tan e s - -'jp
zas y tropelías 0.0,000 duros , y ha puesto en la cárcel pú- candalosamente encomiaron la conducta del sanguinario Mina,
blica á todas las familias carlistas.» s ,iVt "¿senil:;, ' «IMfl»9«I
los papelistas q u e entonaron el cántico feroz sobre las ruinas
—También en Barcelona ha sido obligado el vecindario a Uuu/ • * *»is» t , '"">* :> i» «OT»»***»» »"P
de tunliis pueblos , y sobre los cadáveres palpitantes de tati- •••i» í
presentar cu el término de seis horas 4:),000 duros y Valencia CMJ »I> í»ía»XqJ"i a w/«»*•> tot *id*a t * * *
tos españoles honrados . los que blasfeman hoy mismo de la
7.'¡,000, gravitando la mayor parte sobre el clero , y propie- rl »b o r a l i «BWIMW *»9 *•> vAitntoA *•>
convención Eliot , dictada por un sentimiento de humanidad,
tarios. — Apcsir de los secuestros , embargos y amenazas, l;t Jiiuiuoil s b ota^uiuiuM u« * * i $b*l9Íb , hrti'A
y lloran la sangre q u e se ha ahorrado con aquel paso v e r -
.j9* < * « | ¡supa. « O Í « b w o i i i «1 <*' *H> W * <
•

no se oye hablar sino de pasaportes, y de buscar medios para
lanzarse de aquí. — llar» principiado las visitas domicilia-
rias , y nadie está libre ni aun en su propio cuarto.—Al j u -
rarse la constitución en Lisboa se ha hecho una burla de Doña
María de la Gloria y de su esposo D. F e r n a n d o , llevándolos
a la casa consistorial á pié para que hiciesen allí el juramento
de la constitución ante el pueblo soberano.
Las últimas cartas de Madrid dicen , q u e Gómez se ha
reunido en Rubielos con Quílez y Eorcadell.
Parece q u e se han multiplicado las sociedades secretas,
c u y o foco está en Madrid ; allí se ha constituido el centro de
daderamente filantrópico. El Fapor q u e pide cadalsos : el Eco
: ? o a l s b « »b¡
q u e incita á una proscripción indefinida : el Patriota que r e -
"
comienda medidas de rigor : el Castellano que grita para que
V,P «naq « i h 8 « u p « n » V «**«»
se establezca en España el terrorismo de la convención fran-
-„rf • W H O T O W A Í I T I C I ' L O DB OFICIO.
cesa : los ministros revolucionarios q u e se han atrevido á e x -
tender decretos atroces con escándalo del m u n d o civilizado; .tUiviV- *^v. ¿(ova ¿m wwekm en ¿t»
ni son tolerantes , ni son filósofos; ni aun son h o m b r e s : son
unas fieras q u e h a n declarado la guerra á la humanidad, a la tvr>.Op?ta/ife Jauta.
filosofía, á las virtudes t o d a s , á la civilización, á los h o m b r e s ,
y a u n al mismo Dios. Ve tonal beneficio disfruta S. A. R. el Serení simo Señor
Infante D O N SEBASTIAN C A R R I E L .
Los países en estado de guerra tienen derechos indisputa-
. . . •
|
t r o s , ó bien para' dirimir discordias.— "i" Para la alternáis.!
en las audiencias públicas o r d i n a r i . s , visitas generar s ;,
manales de cárceles y todos los asuntos rfW'w'uWaA <>•••
á una y o,lra Sala , se partirá sn¡iu¡:ru de¡ p i i n n p i o de Í-I.
cómo sus Ministros cornpoiHUl i:a solo i'ribunal.--, í - ' l.n
cada Sala habrá el número ri.écásário J e ;ubatternos y d c -
pendientos: les relatores y escAljanos de Cámara dé la s e -
g u n d a tendrán la suficiente msi: rica y f,riHiiétt de
la legislación y sistema de enjuicjamiento de Castilla; y el
Tribunal propondrá á S. al. el numero y las personas que de
uuas y otras ciases deban ;;si:r,;ar.e á fas Sal. Los
' - • - '

bles q u e les concede la l e y , la razón y la justicia : los

una conjuración p e r m a n e n t e contra todos los tronos de Europa,
contra lodos los altares , contra todos los gobiernos existentes,
t o n t r a todos los intereses de la sociedad y del orden.
Hace poco tiempo q u e nos decía el Español, que la tole-
rancia , la filosofía y la humanidad eran los caracteres de
un gobierno representativo , y que el horror y la sangre eran
¡os atributos del fiero despotismo. Con un sentimiento de i n -
dignación vemos hace tiempo el epíteto de filósofos , toleran-
tes y amigos de la humanidad con q u e se honran nuestros
pretendidos regeneradores. L o s hechos ciertamente no han
correspondido ni corresponden hoy á semejantes anuncios.
Los escritores del partido están recomendando hoy mas
q u e nunca el rigor de las medidas , y dan por laudables el
robo , la devastación y el a s e s i u a l o , cometidos á nombre de
la filosofía. El gobierno revolucionario sometido al maligno i n -
flujo de la prensa , se rinde á sus sangrientas inspiraciones,
y decreta la desolación d e toda la Península , y Mana Cris-
tina autoriza á su general en gefe para todo ; es decir , para
destruir , asolar , é incendiar la España entera , si necesario
fuere para el triunfo de. la revolución. N o exajeramos : e s t o e s
lo q u e quieren aquellos monstruos , que la revolución ha c o -
locado al frente de los negocios. Calatrava y sus colegas han
dado un nuevo testimonio de la pequenez de su espíritu, de
la malignidad de su corazón , de lo execrable de sus ideas,
y de lo indignos q u e son del nombre de filósofos y toleran-
tes. El filósofo no mata , sino p e r s u a d e : no atrepella á sus
conciudadanos , ni persigue de muerte las opiniones i n o ca-
lumnia á las personas , sino demuestra sus errores en el caso
J e q u e los haya : no justifica las atrocidades , sino que las
EN LA I M P R E N T A R E A L .
pacíficos ciudadanos no deben ser atropellados arbitrariamente:
la vida y la propiedad se respetan aun en los pueblos menos
cultos ; pero el exterminio de la población , la quema de los
sembrados ; el atropeltamicnto de los ancianos , niños y m u -
geres ; la expoliación universal , y el horrible sistema de n o
dejar a los infelices habitantes sino ojos para llorar, son ras-
gos q u e caracterizan a la revolución , y q u e han manchada
siempre las sangrientas páginas de su historia. Un bárbaro con-
quistador de la edad m e d i a , podría de alguna manera
atenuar la deformidad de tales procedimientos ; pero los m i -
nistros de Cristina , los hijos de la filosofía, ¿ cómo pudieran
pensar en el total aniquilamiento de su patria? ¿Será posible
que en el siglo en q u e vivimos se autorize á un gefe mili-
tar para q u e adopte la devastación general como principio d e
cstratejia , y medio de obtener u n resultado feliz? El oprobio
y la execración general caerán de lleno sobre tánjanos c r i -
minales.
AVISO.
Se halla vacante una de las dos plazas de cirujano de A y a ,
en Guipúzcoa. Los pretendientes acudirán con sus memoriales
al Ayuntamiento ó al Alcalde , quien les informará de su d o -
tación, y condiciones.
ERRATAS.
En la gaceta anterior pag. 499, col. 2 , lín. 14, donde dice
eampo; léase camino. E n la misma gaceta pág. 500, col. p r i -
mera, linea 8 , dice vohuro; léase valucro.
i »'Vto .• Litíu por otra incompatibilidad ,!,_• alj-uno-Mí !n4 \ i i n u -
m . ««4 . N*> #•»**; abogados ejercerán su profesión uniIstmiamente en ambas Sa-
las: y lo mismo los ni .1 a d -
mitir ah'unos que hayan servrifo sus oficios en los fribirnales
Las últimas noticias que se han recibido de Salsburgq ase- ile Castilla. — íbos g u a r l e f¡ '• l] i.:;:ct¡.>s :• al de
guran, que continuaban rn'nqrirüa Ciudad sin lamenof no; i F.stclla 29 tle Seliemine de | $ V i — - 1 i'ri'.unal de
en su importante, salud S. . / . R, el Screnish-'o Señor PnÍN Navarra y Provincias Vascongadas.
DÍ; A S T U R I A S , los fieyenisiims infante* ¡,Don .11 sv
C A R L O S I/ Doii n-:r,.v.A\!)o ' U M U ^ .•.-••/ •/;,•.•/.•/,-.</, Lia la p
nisima• Scñm;> Fjoift \ ! s ! U PERTSA |¡II la Screjii PARTE N O D
Señora infanta jl.,n.i M,\IUA AMAf.H.
Itoticias extranjii;•,.— ',},
Nuestro e^ilraordinario iius lia tiv.iuo alguna crjrresponden-
Secretaría de Estado y r/.7 Despa.l.o de tirada y Justicia. cia- mas ndebntada de Madrid j ¡ : . ¡ v,,-„na.
'i'odo~ conv:ei'.-n en q s re-
1 v. ;IICU,:,..i-.. ~ > • \ i auiirent.'iiido r-ada \ . •. y ^ f o ^ t í f r r
íjue'se destruyan m:itiiaui.:¡ . i/.a bi n¡ayt>r JVHci-
Para regularizar la administración dajustjeia en ese T r i b u -
nal, y e%itar <|iie míentrSs tos ..• : i •: -s eircuuslancias no p.-i- c • 1 y.-r.t Él ¡; i. > que tienen opri . s-.>
miten restablecer el Real t. . \,vair.i y la Oíancilieria ttduen el ii,i!,i>i> rio. Se nombran . :bal.
de \álladolid so contundan los uegoeíos contenciosos de este i . M T , ! > o ) . ) ei demagogo liclíran de l a -
Reino y de las Provincias Vascongadas, substanciándose iuilis- bien , que sus qrgaBys suii el | kfSiviHa.^S^íiicc,
ü n t a r a e n t e de un modo vicioso é ilegal que produciría con que los coinüneros mas leu., -zas,
frecuencia nulidad en los procedimientos; el HK¥ PÍE S. se ! Herrera Dávila , J'Vrmin Ca!
ha servido resolver lo siguiente.—• 1." El I'nliunal se d i \ i - i famoso Canb.-ro. Pertenecen á esi i hliiina brr- .,,,,-
dirá en dos Salas ademas de la especial del Juez mayor de . parle de ios oficiales abrogados , y si¡s perioiüens Sotr'J&xíés
Vizcaya. En la primera se radicaran todos ios pleitos civiles los de la capital. ,i excepción de los lioi l a iudicadií^, I
y causas crimínales del reino <¡>- Navarra de i|ue debería c o - I los n i a l e s se quejan de la pusilániniidad de los min
n o t « r su Consejo R e a l , procediendo;.' en la suslani iai ion y denigran á todos los oficiales • y mibi.-.r.
fallos con arreglo á las l e y e s , practica recibida y lórmulas de lian declarado decididamente por ei mtmi
í Navarra. La segunda conocerá de Ufe pleitos y ca'usas de Álava,
Violencia progresiva de esto,partido ,. q • ¡ . irjv.i
Guipúzcoa y Vizcaya, observando las lev, s generales de la Mo- podr.i so>knerse basta las próximas corle;.
n a r q u í a , los fueros resnpctivos t ¡a | . i . |j Li emigración sa aumenta asombrosann
Chaucilleria de \ allaib-iliii.— ü." Ei 'IIV.IU.TJ actual de ;,iü/is- solamente desde Madrid se han ¡ ii pasaportes psra
nistros del Tribunal , ó el que en lo sucesivo hubiere se dis- Francia. Vhrí'o's los solíeitap con nombres . BM*
tribuirá con igualdad en las dos Sitos pdiV él CoriiísaVio 1', que otros se despiden á la ¡Y
encargarlo ' d o la Presidencia del T r i b u n a l , que dará c•: ciio impolítico . es el mas .-
á S. M. de haberlo «jeeutado, il•• i • bj , < . la L:Í. ;<.;. a uiucion de iS:-J. Euir.;
- i a- •••' • i de ,.:.. s . p. ro í- ! : ¿.:.-. - ses de Miraftores y S in I
rán formando uu solo cuerpo, colegiado, y al efectuar cada c h e de! 13. Babiend
día la distribución de Salas aecstombr.ida'en lodos los tri- ocultos en Madrid por espacio de una se,..
bunales, ei que deba veniie.aria cuidará <l<- q u e para casos d a - se resolvieron a salir i',¿ iuco^niLo IU¡A> ios m i a b r e s supuestos
dos pase ii á cada una los Ministros que sean piecisos , ¡ de Martínez v Guillermo. (Heraldj
rindiendo de la dotación ordinaria . bii n pVwque la calidad de
los negocios exija aumento de rr.c_iistradi.j . ],un porque se En ".íadriJ continúan los a'bornfns, U c r f rece
líate de—ia_iij¡/iA<,-<i>y<.s J u e c e s d«fcwn w r "diversos de lo> de asesar de la «oroiadad conque las wwridad
pi ríes. La^ úlütn s medidas adoptadas por el
gobierno pai i aumentar el ejército no han producido dinero