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CAPITULO 1 Requerimientos de Clima y Suelo Francisco Tapia C. Antonio Ibacache G. Mario Astorga P. Hist6ricamente el olivo en Chile se ha catalogado como un cultivo marginal, al cual, por error, se ha asociado a climas de influencia marina, y las plantaciones se han relegado a zonas con limitaciones de suelo y agua. Aunque en su habitat natural el olivo crece en situaciones extremas de suelo, pluviometfa y temperatura, en general, éstas superan a las condiciones en las que se ha cultivado en nuestro pais, obteniéndose producciones relativamente bajas. Sin embargo, en condiciones dptimas de cultivo, el alivo se desarrolla en muy buenas condiciones, expresando al maximo su potencial productivo, mas atin si el manejo agronémico es el adecuado. En el presente capitulo, se entregan los requerimientos basicos necesarios para un cultivo comercial de alta productividad. Clima El olivo proviene de un clima mediterrdneo, el cual, a grandes rasgos, se caracteriza por presentar dos estaciones: una fria y humeda, en la que la especie logra el receso o dormancia invernal, y la otra es calurosa y seca, que es cuando se produce la fructificacion. En ese clima, durante la estacién invernal se produce la acumulacién de frio indispensable para que el olivo salga de la dormancia y alcance una floracién uniforme, definiéndose la temperatura umbral de 12,5°, bajo el cual se produce la acumulacién de frio u horas frio (HF). De acuerdo a la experiencia de los pafses mediterrdneos, las temperaturas de verano adecuadas para la fructificacién no debieran superar los 35°C y tampoco ser inferiores a 25°C, requiriendo de una acumulacién térmica para alcanzar un buen contenido de grasa o de azicares en los frutos, ya sea para la extraccién de aceite o para la elaboracién de aceituna de mesa. Aunque el olivo es capaz de soportar altas temperaturas veraniegas, del orden de 40°C, sin sufrir quemaduras, su actividad se detiene cuando éstas superan los 35°C. Enel Cuadro 2, se indican las umbrales térmico y temperaturas criticas en diferentes estados de desarrollo del oliva. Las primaveras muy calurosas, precedidas de inviernos frios, concentran Ia floracién, lo cual puede afectar también la fecundacién, especialmente si la humedad relativa ambiental es baja (inferior a 50%). Por el contrario, las primaveras frias alargan el perfodo de floracion. En general, y sobre todo cuando la floracién es extensa, las ultimas flores en abrir producirian frutos partenocérpicos, es decir sin que hayan sido polinizadas, y que son de mala calidad. Existen Capitulo 1: Requerimientos de clima y suelo Cuadro 2. Temperaturas criticas y efecto en diferentes estados fenol6gicos en olivo Brotes tiernos 5a Quemazén de apices y heridas en ramillas. Brotes menores de 1 afio =i0a-5 ‘Muerte de ramillas. Frutos menos de 5 Dafio de fruto, pérdida de cantidad y calidad de aceite Floracién 15420 Buena floracién. Maduracién 25435 Buena acumulacion de aceite y azicares, buen tamafio y color de fruto (mesa). Fuente: Adeptado de Navarro y Parra, 2001 variedades en que es comén la praduccidn de frutos partenocarpicas (|lamadas también zofairones, en Espafia, o uvilla, en Chile}, la que puede ser mejorado mediante el uso de variedades polinizantes y por aplicacién de productos promotores del desarrollo del tubo palinico, como aspersiones de boro al follaje en plena floracién. Las yemas vegetativas no parecen tener necesidad de frio para iniciar su actividad. El crecimiento de los brotes se inicia cuando los dias llegan a tener varias horas con temperaturas superior a 21°C. La humedad ambiental excesiva y permanente favorece el desarrollo de enfermedades, especialmente aquellas causadas por hongos. Las nieblas son perjudiciales para el olivo, principalmente si se producen en el perfodo de floracisn ya que provocan la cafda de flores. Acumulacién térmica: para que los frutos alcancen la maduracién requieren que se acumule una cantidad de calor desde inicias de floracion hasta la madurez del feuta La acumulacién térmica se expresa como “grados dia” 0 cantidad de calor que se acumula en 24 horas por sobre una temperatura umbral (10°C). Para su célculo se utiliza le temperature media (T°, max. mas T°, min. dividido por 2), Por ejemplo, dos grados dia significa que la temperatura media esté dos grados sobre la temperatura umbral de 10°C, necesaria para alcanzar le maduracién del fruto, De acuerdo a esto, para calcular la acumulacién térmica mensual, se emplea la siguiente ecuacién Grados Dia = (T° media - 10°C) x N° de dias del mes Se asume 0 cuando la temperatura media es menor o igual a 10°C. La acumulaci6n térmica medida entre septiembre y junio para las principales zonas clivareras del pafs se presenta en el Cuadro 3. Manual del cultivo del olivo Cuadro 3, Acumulacién de grados dfa entre septiembre y junio, en siete localidades olivareras de Chile Azepa 2877 Copiapé 2227 Freirina 1.885 Vallenar 2.049 Ovalle 1.832 lapel 1.507 Rencagua 1.331 Taloa 1.748 La temperatura es un factor importante para el desarrollo del fruto. Por ejemplo, en las condiciones de Andalucia, en Espafia, donde por mas de cuatro meses las temperaturas oscilan entre 25 y 38°C, el fruto completa en ese perfodo su maduracién, alcanzando una mayor acumulacién de aceite y azdcares y la coloracién negra de fa aveituna. En Chile, por estar a una latitud mayor, las temperaturas son més bajas, por lo que la maduracién se retrasa y es muy diffcl obtener colores negros de piel en variedades de mesa, especialmente la veriedad Azapa (Sevillano). En el drea de Ovalle, con acumulaciones térmicas cercana a 1.700 grados de entre los meses de septiembre y junio, en nueve meses, esta misma variedad alcanzo una produccién de 8,4 t/ha en olivo de tes afios, con alrededor de 21% de grasa total en fresco, pero, en esas condiciones, no logra una coloracién total del fruto, siendo un rendimiento alto de acuerdo @ variedades encontradas en la cuenca del mediterréneo. Las variedades tienen distintas necesidades de acumulacién de calor. Por ejemplo, la variedad Azapa logra su estado de madurez plena en el valle del mismo nombre, donde la acumulacién térmica es de 2.877 grados dias, no asf en las éreas de la VI (Rancagual y VII Regidn (Talca), en que la acumulaci6n térmica es practicamente la mitad. No se tiene claro cual es el comportamiento varietal de olivo en las diferentes zonas, en cuyo tema se encuentra trabajando el INIA para resolver estas interrogantes. En el caso de aceitunas aceiteras es importante definir el rendimiento graso que se obtiene en Jas diferentes zonas, el cual seré mayor en la medida que la acumulacion térmica sea més alta. Para la cuenca del Mediterraneo se indica una acumulacién de 4.100 grados dias, condicién ideal encontrada en la zona de origen del cultivo. Acumulacién de frio u horas frio: el ciclo productive del alivo, junta con requerir de altas temperaturas para logrer la maduracién de sus frutos, necesita que en el inviemo, durante la estacién de receso, las temperaturas ambientales sumen una determinada cantidad de horas bajo 12,5°C, lo cual es conocido camo acumulacién de horas fra No existe coincidencia entre diferentes investigadores sobre la necesidad de frio del alivo, sin embargo, hay antecedentes que frente a inviernos célidos, la produccién se ve afectada ~ Capitulo 1: Requerimientos de clima y suelo negativamente, Con relacién a lo anterior, se han realizado estudios para determinar la importancia de algunos érganos como acumuladores de frfo y sus efectos sobre la cantidad y calidad de floracién, Un grupo de investigadores espafioles trabajando sobre la variedad Arbequina, determiné que las hojas son los principales érganos que intervienen en el proceso de acumulacién de frio y que con un determinado nimero de horas frio acumuladas, la floracién en la primavera siguiente era satistactoria En este sentido, en nuestro pais se tiene la experiencia que cuando los inviernos son célidos, especialmente en los afios que se manifiesta la corriente célida maritima “El Nifio”, las producciones siguientes son de menor intensidad, lo que indicarfa que el frio invernal es necesario para mantener floraciones abundantes en olivo. En todo caso, en condiciones normales, el clima de las zonas olivareras de Chile, permiten la acumulacién suficiente de frio durante el invierno, para la mayoria de las variedades tradicionales, existiendo variedades de bajo requerimiento de frio. Es el caso de ‘Azapa’ la cual se ha originado en las condiciones del desierto de Atacama. Sin embargo, cuando los inviernos son muy suaves, con temperaturas superiores a 15°C — situaci6n que se da cuando se presenta el fendmeno climético de "El Nifio"—, no se produce el receso invernal, lo que acarrea un desorden fenol6gico del olivo, que altera, en general, los procesos de floracion y fructificacién Las temperatura’ que se alcanzan en las diferentes regiones de Chile son variables: el extremo norte es mas caluroso, y presenta baja acumulacién de frio, en cambio en la zona central (Taica), los veranos son calurosos y mas cortos y en invierno las temperaturas son més bajas. En el Cuadro 4, se muestran las temperaturas medias extremas mensuales en siete localidades de Chile donde se cultiva el olivo comercialmente: Azapa, Copiapé, Freirina, Vallenar, Ovalle, Ilapel, Rancagua y Talca. Como se puede observar las temperaturas van disminuyendo gradualmente de norte (Azapa) a sur (Talca), Enel Cuadro 5, se presentan las horas frio bajo 12,5° C registradas durante el periodo de receso invernal en algunas éreas de las regiones de Atacama y Coquimbo. EI analizar los antecedentes del Cuadro §, de horas frio (HF) acumuladas en Huasco y las producciones de aceitunas presentadas en la Figura 1, es posible apreciar una relacién entre la disminucién de HF y el descenso de la produccin en la misma temporada, Humedad relativa La floracién del olivo transcurre cuando las temperaturas de primavera comienzan a subir sobre los 15 a 17°C, lo que es un desencadenante para la salida del receso invernal. E! primer evento fenol6gico que sucede es la floracién, la que comienza con la hinchazén de yernas florales y su posterior desarrollo, hasta llegar a plena flor, donde se produce la polinizacién y posterior cuaja, Para que este proceso suceda exitosamente, deben darse temperaturas, en promedio, de 20°C en el dia y una humedad relativa ambiental entre 60 y 80%. Si la situacién es de humedad relativa inferior a 50%, la viabilidad del estigma, drgano de la flor destinado a recibir el grano de polen, se reduce a menos de tres dfas, lo cual es insuficiente para que se desarrolle el tubo polinico y la posterior cuaja del fruto. En este caso se produce una deshidratacién del estigma. cultive del olive a si [oo] e6 | ze] ev | ce] ve UN ver | eu | su | vi] so] ee Pan S| sez | Vo | vie | 6a | SI | cer en % oa | cL] 85 | ce | se frsz uN | var | ov | oa | vo] ee | 08 Pan | a A TO YEW |_enbeouey g oe | se] ic] eo | WS ov uN g val | 9st [ ret | Ctr i { o0r Paw S eaz | vez | oe | om] ra] vai xe | _jedey 6 vil | v6 | 62 | 99 | cs | es UW var | ro | est | cer] om | on Pan 6 [ca { te | Ce | eat | oe | co en ayjeng w [vif oo] se | sc] | v9 ow sa | ra | es | S| vel ra Pan Ww [ese | eve | vez | ste | voz | oer ey #eua|t2A o je} su] ra} os | ce} &z oN Ta | vor | en | cu | cet] ea Pon 9 [oe] oz | sel | se | cel | oa XEN e [su] ool ze | oo | os | os uN va | 6a | em | er | Sel | sz Pan ey | vi | ese | vee | eee | cic | voc | coc | Bic er] vi | fee | ree | NW gderdog x [esi | sv | eer | Ca] sl | eu | ou | sal sw | vol va | co | go | ca | oa | sor] ssf za | a] sa Zor | oz | cez | re | mn 4 v9 | Fez | oz | coc | eer | vor | coc | rez] ov fe val mide ‘82 xe edezy ayitig U9 onyjo Jo ANNO as apuop Sealp sajediaund se] uo SeIpaUI A seUIlUjUL‘SewIXeAL (Jo) SaMeLadWAl “y oApeNng Capitulo 1: Requerimientos de Cuadro 5. Cantidad de horas-frio bajo 12,5°C registradas entre el 1 de mayo y el 30 de agosto Huasco = > | 1.193 468 303 654 Cerrillos de Tamaya 2.063 | 1.629 - | 2.066 | 2.249 - | 2002 Ovalle 1.965 | 1.930 | 1.987 | 1.600 | 1.523 - | 1.801 Los Vilos * > | 1985 | 2128 | 1.767 a 1.960 Illapel 2.091 | 1.725 | 2.300 | 2337 | 1.990 -} 2,089 Nota: llape! y Ovalle, promedio tltimos 5 afios; Cerrillos de Tamaya, promedio de cuatro afos, y Los Vilos, pramedio aitims tres afis. PRODUCCION 200102 Se re 63,8 0000) at a ae 67,4 1290) Se 6s 1998/99 86 1997/96 50 199995 i 48 23 a a 35 1991/92 —— = ss 1992/91 a 1989/90 eee Ssh 80 Figura 1. Produccién histOrica de 14 mil érboles del Fundo E| Mirador (Huasco), entre las 16 temporadas 1989/1990 y 2001/2002. Manual del cultivo del olivo Por el contrario, cuando la humedad es cercana al 100%, el palen se hidrata aumentando de peso, lo que reduce el efecto de polinizacién aneméfila (por el viento). Ademas, es posible que ante una hidratacién excesiva, el grano de polen se destruya Enel Cuadro 6, se presenta la humedad relativa ambiental existente en las principales zonas de produccién del olivo en Chile. La floraci6n desde norte a sur se va produciendo con un desfase en el tiempo, la que sucede a fines de octubre en Azapa, principios de noviembre en Atacama, mediados del mismo mes en Coquimbo y hacia fines de noviembre en las regiones VI y VII. Con este antecedente es posible ver situaciones criticas en Freirina, por exceso de humedad ambiental, y por ambientes secos en Talca, |o cual aumentar’a el riesgo de bajas producciones o marcado afierismo en aquellas zanas. Cuadro 6. Humedad relativa ambiental media mensual promedio existente en las localidades olivareras de Chile Azapa Copiaps | 68,7 |70.1|72.4|749| 7.0 [77.2746 Hiese....|_m. lanes) Meas = 1S [ow | calle Freirina | 80,9 /84,9| 86,7 {86,0 | 94.0 | 83,0/82.5 (83,2 [82,0/83,7|83,0|@00| 6 Vallener | 65,6 [69.5| 71.5 | 729 72.0 [68,3/68.4 (66.5 [68.0/67.0|68.2|67.1| 23 65,7] 8 72,7 | 70,4 |70,7|68,3| 27 Ovalle 62,5 [64,8 | 66,7 | 72,2| 75,0 |74,4]77.1 |74,1 |71,7 [66,4 |64,5|63,0] 10 Illapel 59,4 60,1 | 60,8 | 62,6 | 64,6 | 66,2 [63,6 [63,9/65.5|64,6|59.3|57.6| 5 Rancagua | 56,8 [61,5] 63,3 | 66.2 | 75.5 |87,8[81,6|78.4|75,1|707|62.6|585| 21 Talea 54,4 [57,4] 65,2 |73,4 | 82,8 [86,2/85.4| 80,6 | 75,1 |69,3)62,2|558| 36 Suelo Aunque el olive uede desarrollarse en suelos marginales, su productividad se ve disminuida cuando es cultivado en esas condiciones. Pues bien, los requerimientos de suelo del olivo son similares al resto de los frutales en la que se refiere a la parte fisica, es decir, profundidad, textura y aireacion fundamentalmente. Se definen como adecuado a aquellos suelos de profundidad efectiva superior a 0,8 m, donde el crecimiento de raices no sea impedido por algdn tertel o napa freatica. Los suelos cuya profundidad efectiva es inferior a lo indicado, se pueden mejorar construyenda camellones 0 Capitulo 1Requerimientos de clima y suelo Foto 1. Cultivo de clivo sabre mesas 0 camellones (INIA Huasco), alomados, que consiste en acumular suelos de las entre hileras en el sentido de la plantaciGn, dejando mesas de alturas de 0,3 a 0,4 m y anchos de corona de por lo menos 1 m (Foto 1). El nivel fredtico, idealmente, debe estar a una profundided mayor @ 3 m, de modo que na haya efecto de ascensién capilar del aqua desde la napa, y no se malogre el ambiente de buena aireacion para las raices del olivo, el cual es muy sensible a asfixia radicular, es decir, a suelos anegados, 0 suelos compactados. Los suelos mullidos, de texturas franco a franco arenosas y con un contenido de materia orgénica superior al 2%, son los que representan una maxima potencialidad productiva de la especie, Respecto de la tolerancia a suelos con problemas de salinidad, se puede decir que el clivo es une de las especies de mayor tolerancia y en este sentido es posible realizar plantaciones en suelos en que otros frutales ni siquiera sobrevivirfan. El olivo crece bien en suelos de reaccidn que van de moderadamente acidos a moderadamente alcalinos (pH entre 5,5 y 8,5). Dentro de este rango, son preferibles aquellos suelos de pH inferior 7,5, ya que con pH superior es dificil para la planta absorber, principalmente, los micronutrientes, lo que obliga a suplementar con fertilizantes de alto costo, En general, el pH de los suelos son mas basicos en el norte del pats (Azapa] y més dcidos hacia el sur, encontrandose suelos de pH 6 o menos en el area de Talca, La tolerancia a la salinidad, definida por la conductividad eléctrica (C.E.), expresada en deciSiemens por metro (dS/m), es bastante alevada, tolerando hasta menos de 4 dS/m sin que la potencialidad se afecte. Desde este valor hacia arriba, el rendimiento potencial disminuye proporcionalmente al incremento de la salinidad (Cuadro 7). ‘Manual del cultivo del olivo Cuadro 7. Limitacicn y efecto de la salinidad del suelo sobre la praductividad del olivo Salinidad total del suelo C.E.,.(dS/m) A 5 8 Salinidad del agua de riego C.E., (dS/m) 28 33 53 Reduccién de la producci6n (%) 10 2 50 Toxicidad por boro (ppm en extracto de saturacién) 2 Toxicidad por cloruros {meqj/l en extracto de saturaci6n) | 10-15 2 : Fuente: Adaptado de Freeman et al, 1984, Existe una relacién directa entre las precipitacianes y evapotranspiracién con la salinidad de los suelos, siendo las suelas mas salinos aquellos pertenecientes a climas secos y de alta evapotranspiracién, que aquellos de zonas de mayor pluviometria. También existen otros factores que incrementan los contenidas salinos de los suelos, cama ser el riego con aguas de elevado contenido saling, aporte capilar de napas freaticas a la superficie del suelo, problemas de drenaje, entre otros. Existen diferentes grados de tolerancia de las variedades de.olivo a niveles de salinidad. Es asi como el grupo de Investigadores de la Universidad de Cordaba ha definida estos grados de tolerancia a la salinidad en condiciones de laboratoria, regando con una solucidn salina de 100 mL de cloruro de sodio (NaCl) y evaluando el crecimiento del brote apical 49 dias después de iniciado el tratamiento (Cuadro 8) Cuadro 8. Crecimienta relativo de variedades de alivo en solucién salina Fuente: adaptedo de Marin Leta. (1995). En el Cuadro 8 se puede apreciar que la variedad Picual presenta un alto grado de tolerancia, reflejado en el crecimiento vegetativo. Sin embargo, de acuerdo a observaciones de campo, Picual 70 Arbequina 4 Frantoia 44 Gordal Sevillana 44 19 Manzanilla de Sevilla 41 realizadas en los trabajos que INIA Intihuasi esté ejecutando en la region de Atacama, se ha podido evaluar el comportamiento de diferentes variedades, siendo discordantes respecto de la Variedad Picual, a que ha tenido problemas cuando se ha cultivado en suelos de reaccién basica (pH sobre 8,5) y CE. superior a 6 dS/m. En estos trabajos, se ha visto también que ‘Kalamon’, ‘Azapa’, ‘Empeltre’, 'Frantoio’, se han comportado muy bien en suelos altamente salinos (CE sobre 5 ds/m). En iguales condiciones, las variedades Manzanilla Chilena y Leccino, han manifestado una tolerancia moderada. Reconocida es la capacidad de supervivencia que presenta el olivo frente a periodos prolangados de sequfa, situacién habitual en el érea mediterranea, cuna del cultivo. Sin embargo, cuando el olivo recibe cantidad y calidad de agua adecuadas, los rendimientos de produccion de fruta se incrementan considerablemente, reduciéndose también el efecto de la alternancia de la produccién, Si bien es cierto, el olivo tolera muy bien la sequfa, contrariamente, en suelos saturados se puede provocar la muerte del arbol, especialmente en la época de crecimiento; solo bastarfa dos a tres semanas de suelo anegado para que el olivo muera. En invierno este periodo de tiempo puede ser de 1 a 2 meses, siempre que el olivo esté en pleno receso. Las necesidades hidricas y calidad de agua serén abordadas en el capftulo de riego. choline’, Bibliografia Civantos, L. 1996. Técnicas de Produccién. En Enciclopedia Mundial del Olivo. Editorial Mundi-Prensa, Madrid CNR y Ciren-Corfo, 1997. Célculo y Cartograffa de la Evapotranspiracién Potencial en Chile INIA. 2002. Manejo Moderno de Huertos de Olivo en el Valle de Huasco, Informe final. Instituto de Investigaciones Agropecuarias, Gobierno Regional de Atacama Marin L.; M. Benllach; R. Feméndez-Escobar. 1995. Screening of olive cultivars for salt tolerance. Short Communication. Scientia Horticulturae 64 (1995): 113-116 Navarro, C. y M. A. Parra. 2001. Plantacién. En “E! Cultivo del Olivo”. Editorial Mundi-Prensa, Madrid. Pastor, M; J. Castro; V. Vega, y M. Humanes. 2001. Sistemas de Manejo del Suelo, En “El Cultivo del Olivo”. Editorial Mundi-Prensa, Madrid. Manual del cultivo del olivo

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