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EL ENIGMA PERONISTA: LA LUCHA POR SU INTERPRETACION César Teach Lia politica argentina presume de inclasificable. Esta presuncién fue alimentad propios protagonistas, y en especial. por cl peroaismo. Este habria sido un me nico, original, extraordinario, reacio a las clasificaciones y marcos tebricos de cias sociales. Su sedicente singularidad distintiva hunde sus raices en la narracié cada de sus origencs, vinculados a la detencién de Perén en octubre de 1945 y « cripcidn esquemitica seria la siguiente: “Pera fue liberado por su pueblo moviliz especial, por los descamisados convocades por Evita: asi comenzé una nueva era por la felicidad del pueblo y la grandeza de Ia nacién”. Lejos de ser inclasific: mito originario del peronismo repite de modo riguroso todos los elementos de rrucciones fundacionales del populismo. En términos elememtales, un pueblo-al « Je reconocen clivajes de clase y un lider taumatirgico que es portador de una Ciertamente, ¢] universe intelectual argentino disté de acompaiiar al mito | nal. En él terreno literario, la versién mas radicalmente antiperonista fue expri Jorge Luis Borges, quicn en octubre de 1953 —an mes después del derrocan Peron escribia para la revista Sur: “Durante los afios de oprobio y de boberia, dos de propaganda comercial y de la Jiteriture pour concierges fueron aplicados i no de la Repoblica. Hubo asi dos historias: wna, de indole criminal, hecha de cdr turas, prostituciones, robos, muertes ¢ incendios; otra, de carécter escénico, necedades y fabulas para consumo de patanes”.* En la misma época, Ernesto Sit yaba en una reflexién mds indulgente y no exenta de seage autocritico: “La mayo, los partidos y de la inteligentsia, en vez de intentar una comprensién del ena nal y de desentrafiar lo que cn aque! movimiento confuso habia de genuino, de iru de justo, nos habiamos entregado al escarnio, ala mofa, al bon mor de sociedad "Se ha sefalado al roxpecto que “toda prometa debe ir awalads por una daocrrima [..). Pero esto ca, dorade de pildora, La davtrine jasticialitéa et todo lo que sale dc la boca de Peri, 21 pensumie se reinterpreia y manipala por Mac con plena auiordad [...J, ¥ abi reside, précisamente la fuera del toda creencia nia wecesita ser coherente inielectualmente porque es por defimcién irrefutable” June, “Magia y dtica en la retvinea polfiea”, em J. Alvarez Junco (comp.), Fopetisma, cawdilieyle demagigice, Centro de Investigaciones Socsoldgicas, Madrid, 1987, p. 227, * Jorge Luis Borges, “L'illasion comique”, revista Sur c° 237, noviembre-diciembre de 19 Aires, p 9. Historia Social, "43, 2002, pp. 129-139, macién que en absolute correspondia al hecho real, ya que si en el peronismo hat motivo de menosprecio o de burla, habia también mucho de histérice y de justiciv En cl plano historiogréfico, el afin per encontrar y defender una caracteriz bal del fendmeno peronista tendié a desplazar la elaboracidn de reconstrucciom cas concretas de una época que se percibia como demasiado cercana. En todo ca: troversia giraba en tomo a quienes identificaban al peronisme con una versién del fascismo (José Luis Romero) y aquellas que por el contrarie suponian que k rez de las clases sociales argentinas ~su burguesia y su clase obrera~ habia het Ia irrupeién de un tipo especifico de bonapartismo antimperialista (Abelardo Rz dilema {fascismo 0 bonapartismo? dividid a los historiadores en los afios inmed posteriores a la caida de Perim en 1955, pera no dejé huellas perdurables que se | on investigaciones empiricas especificas, Estas, en cambio, fueron fértiles en e| la sociologia y nutrieron interpretaciones sobre las bases y apoyaturas sociales de mo cuya influencia se extiende hasta nuestros dias, En una secuencia algo simp! podrian distinguir tres fases. Una de interpretaciones ortodexas inaugurada por ! mani en la segunda mitad de los aflos 1950, otra de interpretaciones heterodoxas Tlada a partir de los afios 1970 por autores como Juan Carlos Portantiero, Pete Eldon Kenworthy; y una tercera de interpretaciones exmacénmicas, que a diferer anteriores fueron construidas por una nueva generacion de historiadorcs que ¢ trabajar a partir de mediados de los “RO en la reconstruccién genética del peromis provincias argentinas. Por cicrio, estas Gltimas ficnen un alcance mis limitad grandes relatos a los que se aferraban los historiadares argentinos que en las d 1950 y de 1960 discutian acerca del fascisme o el bonapartismo. Igualmente compara con los marcos interpretatives elaborades por los sociélagos. Sin emba ‘tan nucvas miradas, material cmpirico y claves indispensables para dilucidar ¢ peronista™. INTIERPRETACIONES ORTODOXAS: GERMANI, Di TELA, WAISMAN Una primera familia de interpretaciones del fendmeno peronista muvo co: central al sociéloge Gino Germani.* Desde su punto de vista, el peronismo era ¢ de una etapa del desarrollo histérico argentino, carscterizada por el transito de dad tradicional a una sociedad moderna. Su andlisis enfatizaba que

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