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Este salmo es una oración de confesión y arrepentimiento por los pecados. El autor pide misericordia y perdón a Dios, reconociendo que ha pecado contra Él. Aunque nació pecador, desea un corazón puro y renovado. No desea sacrificios sino un espíritu quebrantado y humillado. El salmo fue escrito por David después de pecar con Betsabé y ser reprendido por el profeta Natán.
Este salmo es una oración de confesión y arrepentimiento por los pecados. El autor pide misericordia y perdón a Dios, reconociendo que ha pecado contra Él. Aunque nació pecador, desea un corazón puro y renovado. No desea sacrificios sino un espíritu quebrantado y humillado. El salmo fue escrito por David después de pecar con Betsabé y ser reprendido por el profeta Natán.
Este salmo es una oración de confesión y arrepentimiento por los pecados. El autor pide misericordia y perdón a Dios, reconociendo que ha pecado contra Él. Aunque nació pecador, desea un corazón puro y renovado. No desea sacrificios sino un espíritu quebrantado y humillado. El salmo fue escrito por David después de pecar con Betsabé y ser reprendido por el profeta Natán.
por tu inmensa compasin borra mi culpa; 4 lava del todo mi delito, limpia mi pecado. 5
Pues yo reconozco mi culpa,
tengo siempre presente mi pecado: 6 contra ti, contra ti solo pequ, comet la maldad que aborreces. En la sentencia tendrs razn, en el juicio resultars inocente. 7 Mira, en la culpa nac, pecador me concibi mi madre. 8
Te gusta un corazn sincero,
y en mi interior me inculcas sabidura. 9 Rocame con el hisopo: quedar limpio; lvame: quedar ms blanco que la nieve. 10
Hazme or el gozo y la alegra,
que se alegren los huesos quebrantados. 11 Aparta de mi pecado tu vista, borra en m toda culpa. 12
Oh Dios, crea en m un corazn puro,
renuvame por dentro con espritu firme; 13 no me arrojes lejos de tu rostro, no me quites tu santo espritu. 14
Devulveme la alegra de tu salvacin,
afinzame con espritu generoso: 15 ensear a los malvados tus caminos, los pecadores volvern a ti. 16
Lbrame de la sangre, oh Dios,
Dios, Salvador mo, y cantar mi lengua tu justicia. 17 Seor, me abrirs los labios, y mi boca proclamar tu alabanza. 18
Los sacrificios no te satisfacen:
si te ofreciera un holocausto, no lo querras. 19 Mi sacrificio es un espritu quebrantado; un corazn quebrantado y humillado, t no lo desprecias. 20
Seor, por tu bondad, favorece a Sin,
reconstruye las murallas de Jerusaln: 21 entonces aceptars los sacrificios rituales, ofrendas y holocaustos, sobre tu altar se inmolarn novillos.
La Biblia de Jerusaln le pone a este salmo sencillamente el
ttulo de Miserere, palabra con la que comienza el texto latino. La introduccin al salmo, versculos 1 y 2, dice: Salmo de David, cuando el profeta Natn lo visit despus de haber pecado aqul con Betsab. Este salmo penitencial tiene un estrecho parentesco con la literatura proftica, sobre todo con Isaas y Ezequiel. Dios, totalmente puro e ntegro, al perdonar, manifiesta su poder sobre el mal y su victoria sobre el pecado (v. 6). El v. 7 nos recuerda que todo hombre nace impuro, y por ello inclinado al mal, Gn 8,21; aqu se alega esta impureza fundamental como circunstancia atenuante que Dios debe tener en cuenta. La doctrina del pecado original quedar explcita en Rm 5,1221, en correlacin con la revelacin de la redencin por Jesucristo. En el v. 16 se ha querido ver a veces una alusin al asesinato de Uras por orden de David, 2 S 12,9. Tambin se ha ledo all la expresin de la muerte prematura del malvado como castigo por los pecados, segn la doctrina tradicional. En el v. 20, al regreso del destierro, se espera, como seal del perdn divino, la reconstruccin de las murallas de Jerusaln. Y el v. 21 es una precisin litrgica aadida ms tarde: en la Jerusaln restaurada se dar todo su valor a los sacrificios legtimos, es decir, oficialmente prescritos. Para Ncar-Colunga el ttulo de este salmo es Confesin de los pecados y splica de perdn. Es un verdadero acto de penitencia, que segn una tradicin brot del corazn y de los labios de David, cuando Natn le reprendi por su pecado. Los versculos 20 y 21 son una adicin, hecha despus de la cautividad, para adaptar el salmo al estado del pueblo y a sus necesidades de entonces. En el Miserere, el salmista, consciente de su culpabilidad, apela a la benignidad divina. Ya al nacer est envuelto en una atmsfera de pecado porque pecador me concibi madre (v. 7). No hay alusin al pecado original, sino a la pecaminosidad inherente al hecho de ser fruto de un acto carnal, que en la mentalidad hebrea implicaba una impureza ritual