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El documento presenta tres historias brevemente: 1) La relación entre la periodista Marta Dillon y la cineasta Albertina Carri, y cómo Dillon le grita a Carri que no la toque cuando se lastima el brazo con el perro de Carri. 2) Un libro para niños sobre una niña con una tía lesbiana que no es monja. 3) Una reflexión sobre por qué muchos artistas plásticos viven mucho tiempo, sugiriendo que crear en medio del vacío y con paciencia los conecta con la vida.
El documento presenta tres historias brevemente: 1) La relación entre la periodista Marta Dillon y la cineasta Albertina Carri, y cómo Dillon le grita a Carri que no la toque cuando se lastima el brazo con el perro de Carri. 2) Un libro para niños sobre una niña con una tía lesbiana que no es monja. 3) Una reflexión sobre por qué muchos artistas plásticos viven mucho tiempo, sugiriendo que crear en medio del vacío y con paciencia los conecta con la vida.
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El documento presenta tres historias brevemente: 1) La relación entre la periodista Marta Dillon y la cineasta Albertina Carri, y cómo Dillon le grita a Carri que no la toque cuando se lastima el brazo con el perro de Carri. 2) Un libro para niños sobre una niña con una tía lesbiana que no es monja. 3) Una reflexión sobre por qué muchos artistas plásticos viven mucho tiempo, sugiriendo que crear en medio del vacío y con paciencia los conecta con la vida.
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Amores perros conexion con la realidad Acaban de conocerse, hace días que hicieron el amor por primera vez y ya le está gritando que no la toque. La larga vida _¡No me toques!– le grita Marta a de los artistas Albertina. Y sangra. Retengan esta imagen que les di- “Nada es casual”. Una frase go cómo llegamos hasta acá. que se suelta a cada rato y a la La periodista Marta Dillon y la ci- que no suele oponerse mucha neasta Albertina Carri –lo cuenta resistencia para evitar áridas Laura Ramos en su libro La niña discusiones de tono psicoa- guerrera– se habían visto por pri- nalítico, esotérico, metafísico mera vez en una cena y una cierta o new age, pero que obviamen- electricidad había corrido entre te es un error. Muchas cosas ellas. Se habían besado, se habían son casuales. Otras no. Por alejado, se habían mandado mensa- ejemplo, que tantos artistas
Arroz con leche, mi tía no
jes, se habían desencontrado, se ha- plásticos sean tan longevos. bían encontrado de una manera que Hace rato que me pregunto por no era cualquier manera, que no era las causas de ese envidiable para un día, que no era light. “Odio a los militantes”, había di- cho Carri, que es hija de desapare- es monjita y se quiere casar privilegio. No por casualidad la pregunta volvió a visitarme hace días, cuando la esculto- cidos. “Yo milito por todo”, había ra francesa Louise Bourgeois contestado Dillon, que encerrada “Tengo una tía que no tiene esposo y no no ser monjita, era lesbiana y le expliqué murió a los 98 años. en un cuarto oyó cómo un grupo quiere tener”, dice la protagonista del cuen- que yo tenía novia y que las mujeres podía- Quizá haya un principio de res- de tareas se llevaba a su mamá. to. “Tiene muchas amigas mi tía. Eso sí”. mos hacer eso”. puesta en algo que dicen que Entonces llega el encuentro, se “A veces viene con una que tiene el pelo Así es nomás: las Patlatonalli producen libros dijo Dalí, que vivió 85 años: “El presiente el amor, Dillon va a la rojo, bien chistoso y también unos zapatos para que niñas y niños vean que existen op- verdadero pintor es aquel que casa de Carri y le salta el perro. El grandes como para trabajar en el campo”. ciones sexuales y amorosas –y si las tiene la es capaz de pintar escenas ex- mastín napolitano de la amada. Le “Se que la quiere mucho porque un día las tía, por qué no ellos –que no tienen por qué traordinarias en medio de un salta al brazo, lo mastica, la sangre vi besarse en la boca”. doler. Pero algo más: ahora pelean para que desierto vacío. Aquel que es se desparrama por las paredes de ¡UY! ¡Una lesbiana en un libro para chicos! estos libros –ya sacaron tres títulos– entren capaz de pintar pacientemente la cocina. Sipi: el libro se llama Tengo una tía que en los planes del Ministerio de Educación. una pera, rodeado de los tumul- Es entonces, con el brazo herido, no es monjita, su autora es la hondureña Porque la nena tiene una tía que no es mon- tos de la historia.” Por un lado, con el dolor subiendo por los ner- Melissa Cardosa y lo sacó, en México, Edi- jita, como mis nenes (uno y una) tuvieron crear algo en medio del vacío, vios, cuando Dillon grita: ciones Patlatonalli, que viene a ser el brazo una madre que no lo era. Y después dos. en medio de la nada, sentido –¡No me toques! ilustrado del grupo Patlatonalli, una orga- Como los nenes de mi amiga la lunga. La donde no lo había. Buscar vi- Es que Albertina no sabe –o ella nización de lesbianas que lleva veintipico nena de mi amiga cocinera. El nene de la da en medio de la muerte. Por no sabe si sabe– que Marta es de años defendiendo “el derecho a una fan de Betanhia. Y etcétera y etcétera y et- el otro, preferir la paciencia y VIH positiva. “Más preocupada vida sexual, afectiva, erótica, libre de po- cétera y etcétera. la pera a las urgencias y los por el contagio que por las heri- breza, discriminación, violencia, coerción Llegará el día en que libros como éste se lean “tumultos de la historia”. Otra das”, dice Laura Ramos. e inequidad en las relaciones de género, así en la escuela y ese montón de purretes deje manera, en fin, de conectarse Es una de las historias de vida que como con el respeto íntegro a sus demás de ser extranjero en una ficción familiar mo- con el mundo, con la vida, con Ramos coleccionó para este libro derechos humanos, incluidos los derechos delo Ingalls que, a esta altura de la familia uno mismo. Claro, hay verda- de retratos reales pum-pum-pum- sexuales y los derechos reproductivos”. ensamblada y el hogar monoparental, exclu- deros pintores –Goya (82), Pi- pum, con ritmo de semicorcheas. La tía no es monjita, no es infeliz ¡no es ye también a tantos de sus compañeros. casso (92)– que pintaron bom- Gabriela Cabezón dice que son asexuada! Es tranquilamente lesbiana. “Fui Por la felicidad y la salud de los grandes, bardeos y fusilamientos, pero (todas) como heroínas de manga. a visitar a mi sobrina de 8 años de edad y por la protección y las certezas de los chi- también naturalezas muertas. me dijo que si yo no quería tener hijos y no cos, por la libertad de los chicos que serán Es fácil imaginarlos pintando, quería casarme, entonces yo era monjita”, gays y lesbianas mañana, esta columna está ajenos a sus tumultuosas his- contó la autora a la prensa. “Creo que pa- enérgicamente a favor de la ampliación del torias personales, metidos en Tarugo musical ra ella no había más opciones y le causaba sorpresa que fuera una monja que no usara derecho de casarse a todo el mundo. Matri- monio con adopción. Los mismos derechos esa otra realidad de sus telas; sus vidas suspendidas o, más No hay muchos lugares más per- hábitos ni rezara. “Le dije que, además de con los mismos nombres. bien, vividas en sus peras, si fectos que el Caribe, que un hotel entendemos lo de Dalí como en la playa en el Caribe, pileta, bar una metáfora. libre por todas partes, esas cosas. A Joseph Albers (88) no le Pero póngale música ambiente en todas partes, como una per- Intimo recital de fado gustaban las peras. Tal vez las comía, pero no las pintaba. secución, y la felicidad baja unos a la luz de la lágrima Como el resto de los pintores puntos. concretos –¿casualmente más Es un disco que vuelve y vuelve, Corre la voz de que en casas ocultas hay ver- longevos aún que los otros pin- con el orden de los temas cambia- daderos auditorios. Que es un club mucho tores?– proponía la autonomía dos, como un loop. Una semana y más exclusivo que el Jockey Club. Que uno de las obras de arte respecto a Juan Luis Guerra no ha parado se entera por mail y con santo y seña entra de la realidad. Sus abstraccio- de subirle la bilirrubina; hoy en el a magníficos conciertos. nes eran color, forma, compo- desayuno, al rato y a todo volumen Esto es más o menos así, en pequeña es- sición; no representaciones de en la clase de aquagym, más tarde cala. Dieciséis sillas, un par de botellas de otros objetos. Nada de peras. en el bar de la playa. vino, una jarra de té de jazmín, una cama “La abstracción es real, pro- ¿Para qué ponen (me ponen) la en el living de un departamento antiguo. bablemente más real que la música como un tarugo de 8 mm Cama; una cama. Desde el recibidor llega la naturaleza”, dijo Albers. Otro en el cerebro?, ¿qué pensaron guitarra de Federico Mercado. Enseguida, mundo, otra realidad. Tan leja- quienes lo han pensado todo? la voz de Gabriela González López. Juntos nos de los golpes de la muer- Rellenar espacio, abolir el vacío, se llaman Luz de Lágrima y hacen un sutil, te como una pera pintada con pienso: all inclusive, panza llena, chiquito, delicioso recital de fado. Lo más tierna, infinita paciencia. no hay vacío. Y el tarugo ¿sale? ruidoso son los aplausos.