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La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) reiteró que están dispuestos a elaborar y debatir con los facilitadores un documento alternativo, como parte de los esfuerzos de diálogo entre el Gobierno y oposición.
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) reiteró que están dispuestos a elaborar y debatir con los facilitadores un documento alternativo, como parte de los esfuerzos de diálogo entre el Gobierno y oposición.
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) reiteró que están dispuestos a elaborar y debatir con los facilitadores un documento alternativo, como parte de los esfuerzos de diálogo entre el Gobierno y oposición.
MUD fija posicin ante documento de los facilitadores:
UNIDAD PLANTEAR DOCUMENTO PROPIO A FACILITADORES Y
COMUNIDAD INTERNACIONAL Tal y como lo advirti la Mesa de la Unidad Democrtica, ni el pasado 6 de diciembre ni el reciente 13 de enero hubo ningn tipo de dilogo entre gobierno y oposicin. Esto ocurri como consecuencia del incumplimiento a los compromisos contrados por el Gobierno Venezolano en la Mesa de Dilogo, tal y como lo expresara Su Excelencia Monseor Pietro Cardenal Parolin, Secretario de Estado de la Santa Sede, en su comunicacin de fecha 1/12/2016. En la semana del lunes 16 al viernes 20 de enero estuvieron presentes en nuestro pas el Secretario General saliente de UNASUR, Ernesto Samper, y los ex presidentes Jos Luis Rodrguez Zapatero, Martin Torrijos y Leonel Fernndez, quienes acompaados por el Nuncio Apostlico en Venezuela, Monseor Aldo Giordano- hicieron entrega en reuniones separadas al Gobierno y a la Unidad Democrtica de un proyecto de documento titulado Acuerdo de Convivencia Democrtica, contentivo de 21 puntos relativos a diversos aspectos (institucionales, electorales, econmicos, sociales y de derechos humanos) de la aguda crisis venezolana. Ante ese proyecto de documento, la Mesa de la Unidad Democrtica fija posicin en los siguientes trminos: 1)
El experimento de dilogo que se desarroll en Venezuela del 30 de
octubre al 6 de diciembre de 2016 es un captulo cerrado que no se volver a abrir. El incumplimiento de los acuerdos por parte del gobierno y sobre todo la respuesta soberbia y grosera del rgimen a las demandas formuladas en la Carta del Vaticano suscrita por Monseor Pietro Cardenal Parolin revelaron ante el mundo lo que ya el pueblo venezolano sabe de sobra: Que el rgimen no tiene palabra, y que sin garantas no tiene sentido llegar a acuerdos con quien no tiene la menor intencin de cumplirlos. El incumplimiento oficial dinamit ese experimento de dilogo, a pesar de que el mismo cont con el respaldo de amplios sectores de la comunidad internacional. Por ello, ese experimento de dilogo (mal planteado desde el principio, al carecer de mecanismos para la verificacin y garanta del cumplimiento de acuerdos) no tendr por parte nuestra ni continuidad ni segundas partes.
2)
Con la misma rotunda claridad decimos que el dilogo como racionalidad
y como instrumento siempre tiene que estar en el conjunto de herramientas con que los demcratas debemos trabajar, sobre todo en situaciones crticas. La democracia es un sistema poltico, y la poltica tiene como misin solucionar con la palabra, con la organizacin social, con la movilizacin popular y con el voto las situaciones que de otra manera se enfrentaran con las armas y derramando sangre. En un pas como Venezuela, en el que sin padecer un conflicto civil abierto hemos tenido en los ltimos cuatro aos 100 mil vctimas fatales a manos del hampa (muchas ms que las vctimas totales de la guerra en Siria o en los Balcanes) construir una solucin pacfica, constitucional y electoral a la presente crisis es una necesidad fundamental.
3)
En el marco de estos considerandos estudiamos crtica y detenidamente el
proyecto de documento consignado por los facilitadores, y tal estudio nos
hallevado a la conviccin de la necesidad de elaborar otro texto, uno en que no slo las organizaciones polticas sino toda la sociedad democrtica plantee a la Comunidad Internacional sus demandas y propuestas para la restitucin del hilo constitucional en Venezuela y el retorno de nuestro pas a la democracia. En ese sentido estamos trabajando intensamente y haciendo las consultas a los diversos actores sociales, pues lo que hoy ocurre en Venezuela no es un simple forcejeo entre organizaciones polticas sino que es una lucha existencial de una Nacin entera contra un proyecto ideolgico y un rgimen corrupto que ha destruido la economa que hasta hace poco fue la que tena mas recursos en Amrica Latina, y ha destrozado la democracia que hasta el pasado reciente fue asilo y refugio para los perseguidos de toda la regin. 4)
El que estemos dispuestos a elaborar y debatir con los facilitadores este
documento alternativo no significa en modo alguno borrn y cuenta nueva. Por el contrario: la confiabilidad de cualquier mecanismo futuro de verificacin y cumplimiento de acuerdos se basa en lograr que los acuerdos anteriores sean honrados. La Mesa de la Unidad Democrtica reitera que la satisfaccin de las cuatro demandas planteadas por El Vaticano en la carta de S.E. Monseor Pietro Cardenal Parolin (atencin urgente a la vctimas de la crisis humanitaria, respeto a las competencias y atribuciones que la Constitucin asigna y reconoce a la Asamblea Nacional, activacin de los mecanismos conducentes a la libertad plena de los presos polticos y establecimiento CONCERTADO de un cronograma electoral) configuran la base de cualquier proceso de negociacin poltica futura, porque no tiene sentido construir acuerdos nuevos con quien ya ha incumplido anteriormente su palabra y compromisos.
5)
Llamamos al pueblo venezolano a intensificar la protesta pacfica,
constitucional y democrtica: Ninguna diligencia dialogante, ninguna negociacin poltica, ningn acuerdo de ninguna naturaleza tendr xito en el logro del cambio poltico urgente y en la defensa de los derechos econmicos y sociales de la poblacin si no esta respaldada por una creciente y sostenida movilizacin ciudadana. Tal movilizacin debe ser siempre combativa y pacfica, contundente y democrtica, combinando las grandes movilizaciones con las actividades de contacto directo cara a cara y casa por casa, alternando las convocatorias expresas con las actividades sorpresivas, integrando la dura lucha del pueblo venezolano por el acceso a alimentos, medicinas y seguridad ciudadana con el legtimo y urgente reclamo de cambio poltico. Esta activacin poltica de la calle social es la que podr rescatar la hoy bloqueada Ruta Electoral, para que los venezolanos podamos ejercer el derecho al voto en las elecciones que nos deben, regionales y municipales, y podamos tambin concertar el necesario adelanto de elecciones presidenciales, para dotar a Venezuela de un Gobierno de Unidad Nacional, capaz de llevar adelante exitosamente un Proyecto de Reconstruccin Nacional que tenga el apoyo de la determinante mayora de los venezolanos. MESA DE UNIDAD DEMOCRTICA Caracas, 26 de Enero 2017