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Andrés, el hermano de Simón Pedro, predicó en Etiopía después de la resurrección de Jesús a pesar de haber huido cuando Jesús fue arrestado. Fue condenado a muerte por crucifixión por enseñar sobre el cristianismo. Mientras iba hacia su ejecución, Andrés expresó que estaba dispuesto y deseoso de morir en la cruz como su maestro Jesús.
Andrés, el hermano de Simón Pedro, predicó en Etiopía después de la resurrección de Jesús a pesar de haber huido cuando Jesús fue arrestado. Fue condenado a muerte por crucifixión por enseñar sobre el cristianismo. Mientras iba hacia su ejecución, Andrés expresó que estaba dispuesto y deseoso de morir en la cruz como su maestro Jesús.
Andrés, el hermano de Simón Pedro, predicó en Etiopía después de la resurrección de Jesús a pesar de haber huido cuando Jesús fue arrestado. Fue condenado a muerte por crucifixión por enseñar sobre el cristianismo. Mientras iba hacia su ejecución, Andrés expresó que estaba dispuesto y deseoso de morir en la cruz como su maestro Jesús.
Para cerrar, te exhorto a que no permitas que ninguna falla pasada te
retenga. No juzgues tu futuro por el lugar de donde has estado. Si lo haces, nunca irs ms all de tu pasado! No importa con cuanta frecuencia hayas cado, hay una esperanza que no falla: Dios se especializa en hacer campeones a los cobardes. Aleluya! Su poder es perfecto en la debilidad.
Como un ejemplo de nimo mira la vida de Andrs, el hermano de Simn
Pedro. La noche en que Jess fue arrestado, todos los discpulos, dejndole, huyeron (Mateo 26:56). Pedro no era el nico intimidado; tambin Andrs huy por su vida. Aunque esto fue un acto de cobarda, no signific que Andrs permanecera siendo un cobarde.
Luego de la resurreccin de Jess, Andrs predic en Etiopa, la cual estaba
bajo el gobierno Romano. El siguiente es un recuento histrico de como l glorific a Jess:
Cuando Andrs, a travs de su diligente predicacin trajo a muchos a la fe
de Cristo, Aegeas, el gobernador, le pidi permiso al senado romano para forzar a todos los cristianos a hacer sacrificios y honrar a los dolos romanos. Andrs pens que resistira a Aegeas y fue ante l, dicindole que un juez de hombres primero debiera conocer y adorar a su Juez en el cielo. Mientras que adorando al verdadero Dios, dijo Andrs, l podra desterrar a todos los dioses falsos y cegar a los dolos de su mente.
Furioso con Andrs, Aegeas demand saber si l era el hombre que
recientemente haba trastornado el templo de los dioses y persuadido a los hombres de que se hicieran cristianosUna secta supersticiosa que recientemente haba sido declarada ilegal por los romanos.
Andrs contest que los gobernantes de Roma no entendan la verdad. Que
el Hijo de Dios, quien haba venido al mundo por el bien del hombre, ense que los dioses romanos eran demonios, enemigos de la humanidad, enseando a los hombres a ofender a Dios causando que l los abandonara. Por servir al demonio, el hombre cay en toda clase de maldades, dijo Andrs, y despus que ellos murieron, nada es recordado sino sus malas hazaas.
El procnsul le orden a Andrs que no predicara ms estas cosas o
enfrentara una rpida crucifixin. Ante lo cual Andrs respondi: Yo no habra predicado el honor y la gloria de la cruz si le temiera a la muerte de la cruz. l fue condenado a ser crucificado por ensear una nueva secta y dejar de lado la religin de los dioses romanos.
Andrs, mientras iba hacia el lugar de su ejecucin y viendo la cruz
esperando por l, nunca cambi su expresin, ni cambi su declaracin. Su cuerpo no desmay, ni su razn se desvirtu, como suele pasar con los hombres que estn a punto de morir. l dijo: Oh cruz, bienvenida y anhelada! Con una mente dispuesta, gozosa y deseosa, vengo a ti, siendo el alumno de Aquel al que colgaron en ti, porque siempre he sido tu amante y he anhelado abrazarte.1 Esto no era el mismo hombre que huy por su vida cuando Jess fue arrestado. Haba cambiado.
De hecho, todos los discpulos que haban huido finalmente murieron a
causa de sus testimonios de Jesucristo. Dios les garantiz el privilegio de enfrentar la misma cosa de la que haban huido. Al dar sus propias vidas, el poder de la intimidacin se quebr!
Esto debera confortarte, sabiendo que el que comenz en vosotros la
buena obra, la perfeccionar hasta el da de Jesucristo (Filipenses 1:6). El testimonio de estos discpulos es muestra de cmo Dios cambia nuestras fallas en victoria! No te retires, sino atrvete a creer en Aquel que te amo y se dio a s mismo por ti. Oremos juntos:
Eplogo
Padre, en el nombre de Jess te ruego que me fortalezcas a travs
de tu amor y sabidura. Perdname por retirarme en los tiempos de dificultad a fin de preservar mi propio confort y seguridad. Seor Jess, hoy elijo negarme a m mismo, tomar mi cruz y seguirte. Soy tu siervo; recibo tu gracia que me autoriza para que pueda hablar tu palabra y cumplir tu voluntad con valenta y amor.
Ahora, dirijmonos al espritu de temor y control:
Rompo las palabras de intimidacin y control dichas sobre mi vida
por m mismo o por otros. Rompo la atadura del temor del hombre en mi vida. Ustedes, espritus inmundos de la oscuridad, sepan que someto mi ser a Dios y los resisto a ustedes. No les dar lugar en mi vida, por lo tanto voy en el nombre de mi Seor Jesucristo. Amn.
Y aquel que es poderoso para guardaros sin cada, y presentaros sin
mancha delante de su gloria con gran alegra al nico y sabio Dios, nuestro Salvador; sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amn. JUDAS 24, 25