=_ aS ae eS eee ee ee chismosa y, finalmente, lo més preocupante es que las mujeres se sobrepongan a la rivalidad y se vuelvan cémy temen los hombres y las mujeres, es decir, tamonte proscrito en la cultura patriarcal, os la alianza entre mujeres, Por os0 los hombres desca ican las actividades comunes de sus preocupaciones y todo lo que tiene que ver con roses privados. La cultura thisme, con su connotacién negativa, como protoxto para la descalificacién global do las mi or e50 los hombres desprecian el chisme y lo aprovechan para evidenciar que consideran deleznables e intras cendentes las pliticas sobre pafales, sobre crladas, sobre trapos, xy sobre todas esas cosas de las que hablan las mujeres, Por es jones famoninas en las quo no se va a hacer nada més que platicar son monospreciadas. A an chismosas, exorcizan el contenido de su encuentro, protenden escapar a su poder. poder de Ia palabra y el rito en torno al chisme, crean un halito particular, una inti mujeres, y conforman dénvo para su encuentro. Juntarse para hablar, hablar ios emitir opiniones, para mante- .ceres do los demés, pata conocer porsonas y los hechos, para las muj sus i nerse informadas sobre los la opinién do las otras sobre configurar su propia ide —_es eee ee ee oe Capitulo IX LAS MADRESPOSAS Las madresposas historia que lasconforma como madres y osposas,(La maternidad y la conyugalidad son las esforas vitales que organizan y confor- ‘manos modos de vida femeninos, independientementede la edad, de la clase social, de la definicién nacional, religiosa o politica de yn madresposas aunque no ten- {gan hijos ni esposo, asi como es ‘mujeres con hijos o casadas, tionen dificultades para cumplir con su debor y asumirse como tales, o para ser identificadas como madres 0 como esposas, de acuerdo con los estereotipos de ads- cripcién vigontos. Sor madre y ser esposa consiste para las mujeres en vivir de acuerdo con las normas que expresan su ser—para y de— otros, y tener relaciones de servi- dumbre voluntaria, tanto con el dober encarnado en los otros, como con el poder en sus mis variadas manifestaciones, Esta iclén a de la maternidad y de la conyu- vamento, 303mee ehhh ah ee El contro metodol6gico que define esta construccién este contenido de las rolaciones, de las funciones y del poder, qup permite la intercambiabilidad de los sujetos y su posibilidad de se indistintamente, de acuerdo con las circunstancias, madres y esposat En cambio en la cultura dominante, la maternidad y la con. yugalidad son reconocidas s6lo en tanto involucran a los hijosy a esposo, aunque de hecho, las mujeres maternalizan a cualquiera do diferentes maneras: simbélica, econémica, social, imaginatia afectivament Las mujeres pueden ser madres temporales 0 permanentes —ademis de amigos, hermanos, novios, esposos, nueras, yernos, allogados, compafieros da trabajo o estudio, alum. nos, vecinos, etc.; son sus madres al relacionarse con. ellos y cuidarlos maternalmente. Son esposas de sus esposos pero tam. bién de sus padres, de familiares, de amigos, de novios de jofos, de maestros, de compaferos de trabajo, de hijos; lo son al relacionarse icos y privados como si fueran sus conyugalidad, que no pasa por el matrimoni los esponsales, ol noviazgo, o el amas ésa tampoco potla realizaci6n del erotismo conyugal dominante, Aunque la conyw- galidad fant4stica implica variadas y, en genoral, voladas formas do erotismo. Elhechode que la maternidad y a conyugalidad no involucren directamente ni Ia procreacién para la primera de ellas, ni el erotismo conyugal dominante en la segunda, hacen que en la cultura no existan como tales. Ocurre también que en la concien- cia de los sujetos, en primar t6rmino de las mujeres, no se aprecia que esas rolaciones, actividades y afectos constituyan formas de maternidad y de conyugalidad. La incapacidad pata Identificar estos fonémenos intelectual- ‘mente como maternidad y conyugalidad obedece, en parte, a que on la sociodad las rolaciones estén normadas de ‘no ocurren como la norma lo ent también que las relaciones se institucionalizan y ocurren en am- bilos circunscritos. No existe conceptualmente la posibilidad de 364 HBUUBHHMH Ane jones con motivaciones, funciones y contenidos diversos y polivalon(es, aunque sucedan on la realidad social. De ahf quo la maternidad y la conyugalidad soan apreciadas ‘como tales s6lo si ocurren en las condiciones del ciclo de vida, de idad, y de instituctonalidad sancionadas, Por ejemplo, en yunos matrimonios y maternidades que no ocurren conforme a e1caso de la maternidad la genitora no se hizo cargo maternal de los hijos. La categoria que abarca el hecho global constitutive de la condici6n de la mujer on la sociedad y la cultura es madresposa, y sorvidoras voluntarias de quienos ja sociedad. Las mujares deben ina los hombres, en este caso, a los ahf quu todas Ins mujeres son madresposas. sean madres (no tengan hijos) las mujeres son concebidas y s Y desde luego que varones, y toda esposa os 365madre de su cényuge. Y todas las mujeres por su condicién son madresposas. Marx plantea que el trabajo “...a la par que actiia sobre la naturaleza exterior a él y la transforma, transforma su propia naturaleza desarrollando las potencias que dormitan en él y some- El objeto sobre el que se apl elsorhumano. Su trabajo, y de manera més amplia susactividades es, consisten en teproducir materialmente, en su corporeidad, ivamente en sus formas de percibir ol erdlicas, y politicas; consiste también, desde el nacimiento y en los pri largo dela vida, cada dia, on humantzar al ser humano en su propia ura, en su época, de acuerdo con su género, con su clase, grupo y tradictones. La madresposa y el mito 1h Marfa, Virgen de Guadalupe! ‘mancha costa esposa de Jost Maxlre tierna de fess modelo acabado de esposas y de madre. La Virgen simboliza a la mujer como madresposa. Desde luego que contiene un conjunto de atributos de comportamionto, de rolacién con los hombres y de jén de su sor que, como en as las virgenes, se concreta en un cuerpo intocado, no, al que so asemeja con Jeza. El hijo de la deidad es un 1, por la volun , pasa por su Cuerpo para mate> 180 le piden obtenor d “la gracla de cumplit tad pa Ja paciencia, la domés vir recomienda a y que hacon la felicidad y el honor de las ‘So homologa en esta oracién la relacién de la esposa con poso, con a de la Virgen con San José y do la Iglesia con Cristo, al que so ve como esposo de la Iglesia. “Todas las relaciones de poder carac son homologables con la cony ugalidad de las mujeres. En cuanto sella misma, pide ser buona esposa, lo que significa que ol marido rin su corazén”, que la unién santa que hemos jeccién de su esposo y lo haco dsde una clara definicién politica: proteged a mi esposo en todas sus empresas; yo te pido su salud y su exsitencla més que la mia, {én sintotizada en la oracién significa la forma do porque sélo su reconoc Para que la mujor exista es necesaria la proexistencia del hombre isto social eindividualmente por esta relaci6n. En cam ia importancia del Jazo conyugal de las rmujores. De ahi que deban ser esposas para 1. Este nexo essintusis de la rolacién de dependencia vital de este caso de monogamia femeni- na, s0 espera quo cada mujer se haga de un esposo. ‘La mujer sola es Imaginada como la mujer carent jombre, Inmediatamonts a la peticién en torno al marido, en torno a su ser esposa, la plegaria pide por sus hijos como madre:."Yo corazén a mis pobres hijos: sed su so] corazén en la piedad que jamds se aparten ia virtud: que sean folices...". ‘un discurso mégico de expec La mujer pide por su esposo y por sus hi de uno y por la felicciad de los otros. Pero no pide por el 1e, porque ella no existe como ser auténomo, sino sélo Je Jos otros. Al pedit por ellos, al pedir por sus funciones recta por ella misma. Porg 367fs ee ee ee hay un momento en quo pide para s{ misma y lo que pide ‘cumplir sus dobores de hija, de esposa y de madre. Vida en familia Circunser Ja famil (én ocurre entre esta teorfa y la vid 8 que viven en diferentes grupos domésticos, provienen do familias y, en muchas ocasiones no logran constituir ‘una propla, Sin embargo, las mujeres siempre conforman grupos domésticos.? El grupo doméstico En In ideologia dominante sélo se reconoce la existencia de la familia, No so acepta que hay formas diversas de domesticidad y, * Lo importante del enfoque antropoligico es que destaca 1s familia en el sentido de ser un hecho sociocultural multidel ‘con principio y fin. Con este enfoque es evidente fami, analizan su extincién en sociedades contempori Linton, Fromin, Parsons y oltos reunidos bao el titulo La fam de Linton (1982). Bs claro quela diversfiacién de fuentes dela re contribuyen a su do la familia ha sido relvindicads como estes ‘organizaciéa comunitaria rotismo, y Ia ereaciéa, Las para desarticuar Ia apresién Estado '6{ cota la necesidad de la disolucién de ambos pora lograr la liberacién rule al socilismo demerit, “Domestic (choza, lugar en qua babita lncasa u hogar: fogar, fuego, cl ee por esa razdn, a cualquier grupo de reproduccién de este nivel se 10 familia y a partir del modelo se la evaltia, puede ser un grupo doméstico, pero un grupo doméstico puede basadas en I amistad que mantienen miembros de la familia o la familia como tallcon personas no vinculadas ni por filiacién ni por conyugalidad. El grupo doméstico estd basado en la corresidencla con fines de reproducclén privada de un grupo social, no necesarlamente emparentado, Asi, un grupo doméstico puede ser una comuna, ‘una banda, una familia, un grupo de ellas, o grupos parientes, pero también son grupos domésticos las comunidades que viven en os, en prisiones, en orfanatorios, en hospitales, en conventos, smados y en manicomi Los grupos domésticos son Ambitos de reproduccién de los n torno a relaciones, actividades y » Sexuales (procteadoras y erdti- cas), afoctivas, so foas. Los grupos domésticos comparten algunas de las siguientes caracter{sticas reproductivas: 1) La procreacién de seres humanos y reproducirlos de acuer- do al orden social y cultural. {i) La humanizacién a los individuos én su propia cultura, es docir, convertirios en sujetos. La conversién de los seres humans en seres sociales con sjes de génoro, el moi conyugalidad, por el protagonismo en la reproduccién de otros 0 por ser el sujeto reproduci iv) Roproduccién de es! jerarqufas, rangos, poder so- cial y del Estado, a partir de la identificacién en el proceso de formacién de identidades. Con formas do trato, rituales, normas particulares de las relaciones pr. ¥) Reproduccién de las 369ase SBD OB Mw mw ow en lo privado. construccién privada y doméstica del consenso, y iclén do sus formas de cosrcién: dolor, tomor, cautiver in, exclusién, prohibicién, premiacién, vida-muerte, La estructuracién do la hegemonia, de la direccién y ol dominio de un bloque de clases y categorias sociales, x) La conformacién de un espacio que implican, ademas de trabajo, explotacién y dominio para los suj reproduceién como gon la privacté afectos, el erotismo, la proteccién y los culdados Las mujeres el niicleo de los grupos domésticos; éstos giran en tomo a su existencia y a su trabajo que en primera instancia la significan, Cuando no son progenitoras (no tienen hijos) ni esposas (no tienen cényuge), las mujeres son concebidas y son madresposas de manoras vas: cumplen las funciones reales y simb: cas de esa categoria sociocultural con sujetos sustitutos y on plo, hay mujeres que son esposas de su padre (conyugalidad realizada en la fllalidad) o madres de sus hormanos o de sus amigos (maternidad realizada en la afinidad) ¥ desde luego que toa madre es esposa hija de sus hijos varones, y toda esposa es madro de su cényuge. ¥ todas las mujeres por su condicién son madresposas. la matemidad y conyugalidad La vigencia y la erisis de la fa lugar on la sociedad y en cultura frente a otras fuentes de roproduecién social y cultural ‘mujeres solas con la prole, mujeres solas en vecindaric que viven 4 partir de redes domé ir con el esposo de la madre, o ser cuidado maternalmente por Ja tercera esposa del padre, tener ics hermanos en dliferontes grados, etcétera, Sida uno de los grupos de reproduccién nuevos o viejos, se 70 se dofine como el Ambito social y cultural privado, come el espacio primario de pertonencia, definicién y adscripcién del sujeto, como una Institucién del Estado en la sociedad, La familia est4 conformada por conjuntos de relaciones, ins! nos, personajes y territorios, Las relaciones familiares to de la filiacién y de la conyuga- laciones de parentesco. No todos : parens (ascendientes, descendientes ‘A voces no familiares son parientes (como los los compadres, las madrinas y los ahijados). Las redes de parentesco hipotéticamente serfan infinitas y rebasan, con mucho, a la fa Por el grado de pasontesco y por las instituciones y relaciones que requiere para cumplir su funcién de reproducir a sus miem- bros, la farnilia es extensa o nuclear, aunque se reconozca a més parientes, © Para Haris la organizacin de la vide domdstion e basa, en primer término, a dea deafinided o dels relactnes através del matrimonio: segundo, en iacin. Las personas relacionadas entre sia través de la filacién o de combinacidn filiacin son ‘parientes, Elcainpo de ideas consti- a7teee ee ee Las instituciones 1) La matornidad: basada en la progenttura como exp’ evidente y comprobable, personal y corpérea de la mi solaai6n con la crlatura y con la persona la transforma en madr y aun cuando ésta muriese, la mujer continsia madre, La mat dad dura toda la vida @ implica los culdados porm: reposicién y reproduccién cotidiana que prodigan las muje ‘otros. A una relacién basada en el privilegio de la evidencla biolégica de la progenitura materna, so adjudican todos los hechos Ja constituyen. {én biolégica hace que la mujer asuma la maternidad obligatoriamente, aun fuera de otras insttuctones. La progentture materna funda de inmediato la La madre y los hijos no constituyen materno-filial de parlontes. La madro os una de las centrales de la sociedad y ra patrlarcales.* Dice Kollontai (1918:45) “Es caracteristico observar que la maternidad ha sido siempre considerada como el Ultimo refugio do la felicidad de la mujer”. familia sino un grupo tuciones Maternidad y chase ‘ La situacién de clase de las mujeres determina en gran medida el contenido especifico de su maternidad, Millones de mujeres en México viven la maternidad de la misoria.® Por ejemplo, la maternidad de mujeres como aquellas madres do 50 000 nifios del Estado de México que han sido reportados por Jas instituciones de salud como en “grave estado de desnutricién”, 48 les conoce como los “nifios de Biafra hospi “casi moribundos por cuadros diarreicos y deshidratacién. Ca dos unos por hambres, otros por infecciones gastrointestt inal + Vor el inciso La madre, en este capitulo, 5 +51 40% de le 3 millones de nit que vveo an el Estado de México sufren distntr grados de dnutricin, dase los casos uy loves basta os draméticns nce ado, Se calcula que por lo manos $0000 niflos en le etd, tenes ae rerstas similares You:"ni6os Biafra” (Vioante Castellanos, Bl Universal. 27 agosto de 1088) 372 muchos se recuperan, pero hay cientos, tal vez miles que mueren sin recibir atencién médica. Fallecen de hambre, complicada con enformedades infecto contagiosas. Muchos no se recuperan de Gafios cerebrales irreversibles y otros més regresan alos sols moses ‘en estado de gravedad”. de la maternidad de mujeres desnutridas, que viven en conc , con otros hijos ‘més a quienes cuidar y “crecer*, Se reporta que muchos de ellos ho son visitados por sus padres y que otros son abandonados. ‘Aducen los padres no tener dinero para el camién “pero cuand {os visitan egan se siontan junto a la cama y permanecen os; padre o madre no hablan con el nifio, no le dirigen una palabra de carifo, no Jo arrullan en los brazos, no Jo besan, ni le dan una nuestra de allento”, (Castellanos, 1988, sogiin ol médico Alfredo fe de guardia del Hospital del Nia del Sistema para el ral de la Familia en el Estado de México). ‘an los padres de esos nifics moribundos darles muestras de afecto positive cuando ellos se encuentran on la misma icidn, pero e1 dad en esas condiciones es un espacio de ox significa el dolor y sin que esié en sus manos | can la ideologia de que la vid La madre muere de mabia y culpa, de sufsimionto, ante la graved: y la muerte de su criatura, porque de todas maneras aun la maternidad doliente esté en el centro de su ser. No existen seguimientos sobre la relacién entre la muerte del 19 de la madro, Poro es evidente que la mujer que por muerte en la miseria, vo mente abortard, y tendré problemas en el embarazo, com- ‘oy en el puerperio, o ya los ha tenido antes. mis para cientos de mil dofinici6n vital proviene de dos hech bbarazo, es decir, la enajenacién de su fecundidad a la que se ven 373las mujeres, y las condiciones miserables de su vida y Ja desus hijos. Sexualidad y explotacién llevadas a las condiciones extromas de la opresién; es decir, la expropiacién de las mujeres de su cuerpo, de su trabajo, de su sexualidad, de sus hijos, y de su capacidad politica, conducen a la muerte, La paternidad: basada on la supuesta progenitura, en ol hecho no comprobable y no evidonte dela intervencién del hom. bre en la procreacién. La relacién con la madre y por su mediacién, con ol hijo, ransforman al cényuge de la madre en padre. Es una rolacién de convencién social, as instituciones que lo jue en verdad ese hijo es iclones se relajan, se relaja la paternidad. Por eso se exige en nusstra sociedad la monogamia femonina, para asogurar la paternidad: de un lado, para toner la certeza de quién es ol padre, que no pudo s do otro lado, para asegurar al hombre ser reconocido por la mujer como el progenitor. | hombre ejerce su poder paternal fundado on un derec! biol6gico incomprobable de manera directa y positiva, aun cuando la progenitura paterna sélo es aproximable negativamente. En la sociedad y la cultura patriarcales el padre® os instituciones basicas y est4 compuesto por un complejo de rel ciones, de funciones y person: padre simbé. los padres ade las \roploges bal definido y el genitor,o padre bioligico rea caso de la ‘madre. Au Imente defini os normlainentelagenetrix, la préctica de la edopoidn eres ‘muchas dizcrepancias entre las maternidados omic y aie” a74 aginarios do cada quien. Esta figura recoge el conjunto de or los Pe La Idoologta pariarcal considera que ol padre os el hombre | adulto que trabaja, que organiza la sociedad y dirige el Ja sociedad y el Estado, Su calidad de padre se suma entonces a los atributos masculinos patrlarcales y le otorga el poder de quien trasciende mediante los hijos, on quienes se perpo- {ia y sobre quiones ejorce, a nombre dol poder, la direccién y el dominio en la cotidianidad. tro de la familia que recoja y exprese, iii) El matrimonio” es la institucién que asegura la conyugall- dad bajo reglas, por ejemplo las de monogamia y poligamia para cada género, las de duracién: eterna. Como pacto social, se espera que ol matrimopio se mantenga por la compulsin a ciones econdmicas, afectivas, erdticas, reproductivas, juridicas, sociales, de un cényuge con el otro. En la sociedad dividida por géneros, ambos cényuges cumplen roles, realizan funciones, ocupan espacios excluyentes y exclusi- vos, y cada cual tiene dabores para con el otto, obligaciones, dorechos, evaluacién y sanciones. {generals para de las instituclonas bisicas de la familie y de otras unidades domésticas, que Permiten la reproxiuccién de la sociedad en su coajunto, desde su dianensién Privada, (Para un andlisls antropologico, véase Matrimonio de Lucy Mair, 1974) 375ee et Mmueehowmuowsa ww matrimonios concretos, que deja a los cényuges posibilitados parg ot las madrasiras yy ley adopcién, con los consecuentes padres y madres, hijo, « hijas adoptivos. La tervitorialidad La familia, y cualquier grupo doméstico, se asocia a un t rio y se arraiga a éste, basicamente por las doterminaciones de {espacio de rosidoncia) se le asim! a los padres (en algunos propiedad caracteristic Telaciones entre sus lontidad de algunos de ellos, constituye la heren: familias, de las comunidades y que se expresa también en Estado, consiste en que no siempre hay tierra, ni corresidencia, ni propiedades, ni herencia. ’ La madre’ 4éQuién es la Chingada' ‘Ante todo es la Madre La madre® es una institucién histérica, clave en la reproduccién de la sociedad, de la cultura y de la hegomonia, y on la realizacién dol ser social de las mujeres. Las madres contribuyen personal- © Octavio Paz, Bl laberinto de la solodad, Fe, México, 1963, hijo. Tr-imonsional porque adomés de esa luna mujer. esto es un ser especifico dotado de aspiraciones propias, que a menudo no tienen nada que ver con las dle su marido ni con los daseos del ni. definiciém sociolbglea se basa en la ideologis dominante do la matericad, yo 376 siento, de manora exclusiva en el period formativo y compartida durante toda lav del consenso del sujoto al modo de vida dominant En particular que de acuerdo con las con: ran. A través de srnida fonsora y custodia del orden impers en su esfora vi los rituales domésticos 0 sociales, como los cuidados, ‘cargo de las mujeres y forman parte de su condicién historica. Desde el menor hasta el mayor grado de participacién personal, idado de la vida de los otro: particutares sf misma como pal pero también del conjunto de de instituciones y de concepciones en que clrcunstancia, las mujeres. madres son intel: narias del Estado en la sociedad civil.'® 377La relacién primera con la madre es uno de los procesos rales més complejos. En breve tiempo, la madre logra e] proceso de humanizacién, 0 80 in de la criatura, le ensefia su cultura on comprimidos de aculturacién. ‘ponsajas y simbolos gestuales y verbales, conscientes e incons- Gentes, con los cuales expresa y comunica su propia elaboraclén do la concepeién del mundo para ese sujeto que 6s su hijo osu hija. y nombra las manda, Lo hace de manera y contenidos diferentes si se trata de cas domés. Ensefia a la criatura no s6lo a sentir, a pensar y nocesitar, ccémo pensar y qué necesitar, contribuye dos y nocasidades. La madre hace una adaptacién més o menos libre de su propia cultura para cada género: de la misma forma en que de sus pechos manan leches diferentes si aznamanta a un hijo oa una necesidades y formas de aprehensién del mundo, mediante su yelacién materna, ; su voz, con sus daqivas y con sus carifios, con castigos y ‘on su lengua matemna, con su cuerpo materno, con su pedagoy el aprendizaje del tlempo, del espaci pasado, el recueyio; el desplazamiento y la separacién de los pobladores del mundo: yo y los otros. La muerte. La lengua mater- terioriza —on rituales de poder politico de la madre sobre el s ol cuarto o el nacido después de un aborto, si se trata del hijo de la soparacién o del reencuentro con la pareja; si ne pareja y si esa pareja est4 dispuesta a asumir la paternidad, si es soltera o si pertonoce a algiin grupo de mujeres que tienen prohi silo engendré en la salud o on la enformeda: el producto de osi fue un “volac después de varias mujeres, 0 si “salié mujer” cuando so esporaba hombro. La madre debe educar y reproducir en el hijo las cualidades Ja norma: lo prohi basicas primarias, y por reproduce a lo largo de toda la vida de ambos, Para nacer he parido simbélico del nacitniento de la verda- ‘Todas las mujeres son madresposas indepondientemente de 12 ota eng lings 379BeHeeeuuu se que lleguen a concretar la progenitura y ol matrimonio. El espaciy roducctén soclal y su cuetpy toda se desenvuelve en |, aprociado s6lo por su existencia, no es un cuerpo humano. Ideolégicamente, el cuerpo humano se distingue por su desa. rrollo aut6nomo y por su control sobre sf misma Noes un cuerpo determinado camonte dirigido, es un cuerpo @. En cambi mujeres —uno do los cuerpos humanos— ha sido asimilado cul. turalmente al cuerpo do otros sores vivos. El cuerpo de las mujeros es un cuerpo destinado para, regida sogin la ideologla dominante do la feminidad por la biologta, por loza, pero al igual que ell para ser usufructuado, posefdo, ocupado, aprop ralivos blolégicos y no histéricas. A esta asimilacién precede la aproplacién social dal grupal,b) La particularidad sexual, coimo elemento. rador clasifiatorio. ) La implicacién de la totalidad de caractoristicas onl soxo. La inclusidn de la edad como constitutiva dal género 4 Véaso ol Capitulo VI, prino 380 n embargo, el cuerpo de ibertad con- turaleza. No pertenece a nadie, como a nadie st predestinade fo pore! hombre. La mujer no es duefia de su cuerpo, pertenece a un destino asociado a sus caracteristicas que son Ideologlzadas como impe- su dimensién de cualidades humanas, tividad fornenin escindidas. Especi ivencia del cuerpo de la mujer para su sexualidad y para su placer, o para salir de ese ambito @ Incursionar en otros espacios sociales y vitales. Do ah{ que todas las mujeres, més alla de la edad y de la proge : su subjotividad se deriva, se organiza, y tiene sus proplas contradicciones a partir de la espectalizacién histérica exclusiva, La reproduccién es la impronta que ha defini- do hasta el presonte al’género femenino, (Y sobre el cuerpo materno, véase El cuerpo escindido y el mito, en el Cap. V1). ‘Aunque el género masculino participa en la tepraduccién, s0 jodo compromiso social e incluso de muchas que de esta manera so asocian al La comida La mujer produce alimentos con su cuerpo, con su trabajo y con jesde la leche materna, hasta los guisados cotidia- es una extension d la mujer es comida ella misma, La mujer que cocina so desprende de una parte de si, y la es un producto de su cuerpo tanto para ella‘como para los quien da de comer, indepondientemente de la edad ola aptitud del benetici {fo para hacerlo por s{ mismo. Es més, es vilido que una 381Persona adulta se dirija a la mujer dicténdole damo de comer, asociando en la o: in la accién de dopositar los alimentos on, los trastes © do llevarlos al comedor, eteétera, con la accicn matorna de dar de comer, de alimentar al minusvalido. La mujer hace la comida y da la comida, alimenta con platil que son un producto de su cuerpo, Y, el hecho poli lo hace en la opresién: isirveme!, es la voz més gonoral las acciones relacionadas con la comida, La orden sustituyé la expresién directa de la accién, porque en los hechos de la comida 80 reproducen el orden politico y la cultura patriarcal y clasista on el mundo, Cuerpo para atros El cuerpo de la mujer por otra part materiales, s la casa. Es un espacio siempre dispuesto « al otro, Muchas mujeres pasan la vida alternan- 4a carga del otro dentro y fuera de su cuerpo. En el embarazo, Jas mujeres cargan al hijo en su vientre, en su panza, con su uorpo; después dv nacido y por varios afios — manentomente y poco a poco de manera eventual 4o cargan a horcajadas en la cintura, en brazos, en la espalda por medio de rebozos y en el pocho con modernos cinturones, se desplazan con él. Con sus cuerpos, las mujeres arrullan y acunan otros cuerpos: en los brazos, en ol rogazo al estar sentadas, para dormir 6 calma para alimentar o para v madre durante un buen ti nacido como parte de su cuerpo, incluso le causa extrafieza su ausencia y la sionte como una falta, El cuerpo femenino es el espacio de vida antes y después del ento, es un territorio propio d ‘eno, sino que le pertenece, irumpe en él cuando lo desea, y lo ra empieza a alojarse, empieza la siguiente ién y asf suscosivamente, aaa wat ae ae ow eS La mujer también carga al enfermo que no se puade mover, jontable, lo amortaja, dispone los despojos para la inexistencia, Fh nmuler carga el cuerpo de los otros desde su formacién, hasta su ‘muerte, lo cuida, lo alimenta, lo purifica, con su propio cuerpo. La vida de muchas mujeres se desenvuelve en un cuarpo cargado”, por dentro o por fuera, durante muchos afios. Hay mujeres, sobre todo campesinas, pero también citadinas, que spre estén embarazadas, o acabando de parir. La vivencia corporal de la maternidad ocupa la mayor parte de su vida en un Jo que se conforma con la sucesién de: embarazo-parto-lactancia-embarazo-parto-lactancia-...carga embarazo-aborto-embarazo-parto-laciancia, 10 de vida femenino del cuetpoy dela persona de las mujeres dé idos —separados obejtivamente del cuerpo da la usar su cuorpo, sus productos, electual. Al mismo tiempo que la mujer gesta, cuida, limpia (purifica de inmundicias), produce con su cuerpo la comida como su propia extensién: cria, Es una alidad de vida, de tiompo, de atmésforas, dela puesta a dispo- sicién de Jos otros, De ahf las confusiones, la asociacién de los culdados con su biologia, de sus trabajos con la produccién do emanaciones de su cuerpo, La cazuela.y la escoba son como ‘mamés, como esas partes de su cuerpo especialmente destinadas otros, de los otros, iCémo negarse? ‘Madre no niegues la loche materna a tu es la mejor del ciones de salud, en una amplia campafa por la lacta inta fundamentar la excelsitud de esa leche y contrarrestar el muy aceptado uso de biberones y leches en polvo. Lo interesante es la asociaclén de amamantar con amar, al punto de convertir los conceptos en sinénimos y exclusivos. Sélo 383‘se da el amor maternal a través de la lactanc amor 66 ung’ etallded de la loche de que carecen la leche on polvo o de vaca. Ly madre es as{una vaca amorosa, Por eso, s!tuna madre no amaman. ta.a su hijo, aun por prescripcién médica pero sobre todo cuany os por voluntad propla, 10 que nloga a su hijo os ol afecto, Se manera natural, debe alimentar y dar el primer amor. ‘de la mujer como madre y alimento vital se manera evidente en momentos criticos del ojercica Ge la maternidad como el filicido, y on muchos de infanticido. En ‘el caso del homicidio de los hijos de Elvira Luz Cruz, la tragedia se inicla —de acuerdo con los diversos ‘relatos de los hechos (tanto Jos reportajes, como los testimonios de las vecinas y misma)~ con el hambre de los nlfios y lo que comioron Comieron. Los alimentos aparecen en escena. O no hay, ola pequefia victima habia comido, 0 Iba a com ‘0 aparecen de manera insistento: son usados para justificar ‘acto de pledad de la madro sufriente por sus hij fin osperanza. Pero la comida sirve también para condenar a fa supussta filicida es culpable del hecho porque fus extensién *natural” del descuido (aun cuando se deba a condicio nes do pobre no provocadas por la madre); ell es responsable di Mutilacién La mutllactn del cuerpo de las mujeres adquiore las més variadas formas, de acuerdo con el espacio cultural que las define. Sin embargo, se caracteriza por la extraccion de érganos, oa intervene cién quinirgica de espacios corporales identificados con la sexute lidad erética 0 materna. ‘La mutilacién corporal alas mujeres abarca desde las précticas ccuya base es religiosa y tionen que ver con la purificacién, hast squellas cuya veracidad cientfca las hace inobjtables, La ONU thu condenado, por opresivas, las précticas do clitoridectomia y ‘blacién do los labios suftidas por las mujeres musulmanss. Occidente se horroriza ante este tipo de intervenciones cuyo esPe" 384 sis do quo es 1a mujer quien obligatoriamente, de faz de alimentarlos. Aqu{ aparece el hémicidio como una § caltural las encuentra necesarias come parte del ritual de psa de las majoras 8a adultez."® res de esta violencia contra la integridad cibido que en Occidente mera para No son concebidas como vas, porque se derivan de discursos alt guratvas, Pera ee de la verdad clentifica y ol de los culdados mujer. ‘dad cada vez més se generallza la ideologia 'Y en ciertos grupos de la poblactén sujotos a ‘es necesario haber sido operado cuando En ol caso de las mujeres, en la mayoria spe intervencionesquirgicas queles son practices destacan Iaextirpacién de los rganos soxualos En México, es frecuente la realizact6n de histerei cién de ovarios, de las glindulas mamarias 0 de los se ona pureza laica de mbargo, es faciencia, so acepta la mutl evide mo pulitcas en la modicina de agrosién 2 las mujeres. Deveroux {1985:231-282) encuentra motivaciones inconscientes en estos hhechos: La negactén inconsctente de as diferencias sxuales ah fas puedo incluso hacer que médices neurélicas gperaciones cuyo objeto inconsciente Parsce set la seen de los érganos caracteriaticos del oto sexo, due Panes “suporfTuos" sogin el automodelo ligado al sexo del mi ‘Abunda Devereux en las mo .es nourdticas de las operacio- nes innecesarias, y considora que “la nega inconscignte del tlimorfismo soxual desempefia, en las operaciones a” entrafan aextirpact6n total o parcial de los 6rganos sexuales de pacientes del 8 para muchas de ests mutilacién 66 un hilo en la definicion de 54 fominidad,sinttiza su arribo a la comple 38sFS TwrTesa Fs FF otro sexo. Es posible que se hicieran menos histerectomfas si todo los cirujanos ginecdlogos fusran mujeres, y lo mismo puede decir. s0 do las mastectom{as”, ‘Asi, enesta cultura las mutilaciones sexuales al cuerpo de lag fora materna. La muttlacién nntan hoy como hechos qui hhan de ocurrir de una mané aa tod dosignio de ser madres y por el tratamiento mutilan —sientifico, quinirgico, demogréfico, sanitario— que da el pode Ser mujeres ser madre ‘Mujer es la que es madre. Por eso al parir —al “dar a luz”, al “dar al mundo"—, la mujer nace como tal para Ja mediacién del otro, dol hijo, Las nifias y las mujeres ndbiles, son mujeres en proces idas o larvas de mujer. Millonos de seres humanos incompl ‘espora de completud, Su transformacién se logra de maner quien confiore la plei varén, si daa luz una 1 imperfecto y se iniciala espera del nacimi El nifio otorga a Ja madre una parte sustantiva de su plenitud en cambio el nacimiento de una nifta es un tanto fallido. Sél él hijo varén su: al padre a su muerte, y se hard c: ‘madre, as{ como durante su ausencia permanente. Un hijo varén es alguien pleno en sf mismo, alguien en quien depositarse, quien depender, alguien “de la mujer” —la propiedad dol padre sobre los hijos es propiedad de la madre sob: sus hijos se estableco desde el custpo y los cuidados, y no apreciada como pacto—, que hard lo que ella no puede hacer pe 986 sucondictén, Una hija es una competidora desea, y un espojo de ja propia mutilacién, Pari es a la vez un hecho y un ritual simbélico de poder que ealiza la mujer, como s{ntesis de la matornidad. jin embargo, €s ‘permerocido en el momento mismo de su concaptualizacion por- gu s le considera “natura”, Las funclons, las actividades, os eripajos; el despliogue afectivo y de energia vital, son desvaloriza~ fos, conculcados de su carga social y cultural: las mujeres hacen teio, os decir son madres, ene] cumplimiento de una fuerza ajena, fxtraordinaria, que es la naturaleza, ‘as madres. Protagonistas de la maternidad Zn cuanto @ los aspectos do la matarnidad definidos en torno Gulones la protagonizan,intoresa sefalar a las mujeres como ol ante, como los sujetos activos. las realizan actividades y fune ‘mantionen relaciones maternas espectficas. ‘En ol niveVteal concroto, distinguimos a las mujeres-madres, an cambio on un nivel tobrico filoséfico, no hacemos diferencia gnire el grupo mujeres y el grupo madres ya que se funden como cualidades recfprocas en un sélo grupo: todas las mujeres son ‘adres, independientemente de que concreten la progenitura, En consecuencia, Jas mujeres son madtes aunque no concu- rran en el hecho otros elementos que para el caso resultan secun- darios, como son Ia edad, el estado practicas eréticas, ol embarazo, la consanguinidad, La mujer-madre es fundante Jo ya que el hijo no es indispensable para que se dé la maternidad. En ésta puode ser ejercida sobre 0 por madiacién de personas di , pariantes 0 no emparontadas, 6 sobre grupos sociales, ‘oa través de actividades reconocidas como caracteristicas de la maternidad, Lo importante en esta parle de la ecuacién cultural planteada es la madro; del otro lado, estan los otros (pueden ser ‘os, padres, o sea parientes, pero también pueden ser personas no emparentadas con la madre, el ssposo, el novio, amigos, alumnos, camparieros de trabajo, personas bajo culdedo). Son maternizables por las mujeres todos aquellos —personas, 387 Bes BBB eB wD DBeee ee eae matrimonio o la conyugalidad no son las instituciones bas sino sus contenidos, La mujer no se encuentra como madre ent ol padre y el hijo. Por patad6jico que resulte, el hijo puede ser inexistente y, atin ‘més, puede no existir el esposo, de todas maneras la mujer ex ‘como madresposa, siempre. No importa su edad, o su capacidad fisica teproductiva, puede’ser una nifa o una mujer anciana que ‘nunea haya parido. Aun cuando la maternidad hace referencia a or haberlos reproducido. #¥esto se suma ol hecho iene significacién social plena sino por sus én con su padre 0 de parentesco con sus parientes varones, o de afinidad con su marido (el novio, 0 ‘odo lo cual pareciera indispensable para lograr su exi relaciones en el conjunto de la sociedad y en el Estado. La muj no es una ciudadana sino una ciudadana que materniza en su duble rol como madre y como esposa-hija: la mujer noes, hija o esposa y madre. nlia so prepara para ser madro, dad, La pequefia nia juega a que es madre, juega a la casita, a la doctora, cuida, protege, sana, se despoja do todo 388 1 G @ &@ @ ww ow we ra dar cabida a los otros en sf misma: en su tiempo, en sus Pividades, en su torttorio, en sus afectos, en sus intereses y on fs necesidades: el proceso es tan exitoso que lor otros, como ido de vida se convierten desde los primeros afios de vida ‘en una necesidad que roquiore ser satisfecha do manera permanente, (dad de ma al toner hijos. Su carencla y su necasidad son, por consiguiente, {nagotables y permanentes. En ellas se funda la permanente dis- nibilidad de las mujeres para culdar a otros, para laentrega, para ‘amor-maternal (a los hijos o a los hombres). Las mujeres égicamente buscan la plenitud y cional, afectivae intelectual de cada mujer, y corresponde con su dopendencia en los otros aspectos de la sociedad y de la cultura, tanto individuales como de grupo. La carencia y la dependencia vital son los mecanismos en los que se funda el consenso otorgado por las mujeres a su especial 5 al sustrato de la hegemonta pol Ly co y que se funda en su propia oprosién: la hegemonta patrlarcal Matetnidad y procreacién’ madre y genitora e, gesta, pare, y a pesar de todo es madre, La ideologia de la maternidad es consigna: ser madre es una funcién natural del cuerpo y maternos son una impronta corporal, Esta caractorfstica Ideolégica se concreta en La mujer que no con no es reconocida com ico y de mando que se expresa en el Estado y en el ico” (1974104) 389FBT SS BS que la sociedad y sus instituciones como la fami Jos involucrados, s6lo reconooen como mado a quien conetig iclones de contrat tornidad con el sélo testimonio del involuctado, ico, en lo estatal, existen figuras juridicas como ly adopoién o la patria potestad,}” relaciones juridicas de reconoa, miento estatal de los derechos y de las obligaciones de los padn se trata del: reconocimiente norm: mediado por |, sociedad, de la lidad del fenémeno, Sin embargo, en el derechy ‘enel sentido comin, como un principio fundan, ente sélido e irrevocable, se levanta el cariictay biolégico de la maternidad. La progenitora concibe, gesta y pare, la madre es un pacto social y cultural. Nuestra cultura no distingue entre ambos fené. menos por su extremo naturalismo, El mito de “madre sdlo hay una”: Ja matemnidad colectiva La maternidad no puedo ser desarrollada por una sola mujor, es! siempre una instituci6n colectiva, La distorisén que “madre s6lo hay una", pero nada osié realidad social. En las més divorsas'formas de organ! vida social, el espacio de | diversas mujeres, iene ayudas para cubrir las necesida- des requeridas para la vida de fos otros. Y cada individuo a lo largo de su vida es atentido, culdado maternalmante de manera susce- siva y en ocasiones simulténea por diversas madres. En efecto, en Seneral so nace de una mujer, se tiene una progeni pero madres hay muchas, 1 ta adopeién pad o de mac ico qua pernite adquirit et papel de 4a cual no se 6 gonitor. La patria res ~darechos y obligacio Yon particule 4 el embarazo y el parto. Aceptan rnidad y In maternidad, En esteysontido la ley reproduccién ha estado poblado por Be eSB BBD EB Cada sujeto tiene varias madres que constituyen verdaderos 1ujpos maternos conformados por abuelas, madres, tfas, hijas, SSrinas y hermanss, las cuales mantienen diferentes relaciones deparentosco.con los otros, pequenios ograndos, conello distintas bligaciones. También hay madres que no son parientas: vecinas, nas, sirviontas, maestras, etc. Y, desde luego, para los hombres, ton sus madres sus novias, esposas y amantes. Hay madres prin- tucién comploja, desarrollada por varias mujeres alo largo de la vida del sujeto de manera suscesiva, imulténea, y ¢s especifica para cada género. Ysidro na importantis se encuentran en laesfora priva- da, doméstica de la vida: 6gica-progenitora:el hilo que separa un cuer- podel otros tan fino como la metamorfosis dela mujer que gesta. So sobravaloran como un todo indisoluble la concepcién, la ges- tacién y el parto, y sobre estos procesos se se erige la filiacién y se Jido de la maternidad a la que simboliza. La progenitora es la tinica mujer considerada como la madre, y es intrinsecamente buena. La contradiccién surge cuando la proge- ra no realiza la maternidad —por muerte, abandono, despojo, incapacidad—o, como ocurre siempre, cuando nolo hace adecua- damonte, y porque la realiza y la comparte con otras, no recono- cidas como madres. fi) La nodriza-madro de leche: alimenta al otro con un pro- ducto de su cuerpo, la lache que se llama leche materna: contacto de la lactancia genera lazos afectivos bésicos y una jada de! hecho de compar limentacién corpo- 391a i a ee Hh ro respecto do los hijos llevados por éste al matrimonio” Alonso, 1982). Elprotagonistaen la conforma as <1 padre: 6l es propiotario tanto de La nueva my ‘a quuiones eva consigo a su nuevo mi que dofine et probloma es 1a conyugel iad, porque os la ion de la cuando se paga a una mujer inferior, la contradicci6o de clase; ne ana empleada productora de leche; la hija ool hilo 98 ama © amo, y la lactancia no es materna sino un derecho sobte esta ta o alterna, derecho dorivado del matronazgo 0 ido la figura dela madrastra yr, como de los ono. La rel sierva-madre: su funcién es exlusivamente smaterna y on gonoral se dosplloga durante [a Infancia, aungue mille duro toda 1a vida, Bl eje de la contradicciGn se encucnise tanto en la inexistencia del parontosco como en le ‘ase, que goneran relaciones amblvalentes eno actos Pe ib orfacn reconocia; la maternidad presente en la dott smadrastra, no 10 es. ‘El concopto madrastra se define por sus caracterisi ista, Es necesario destacar que el re y que, con todo, la maternidad .B] poder hace que Ja relacién 3s sucetla por la relacién de la m {los n-hilos com ol pace y no ontre {la nomenclatura correspon hecho y en In logica dominant rincipio del capitulo. las funciones son de rapro- “que implica ade- iv) La si duccién doméstica, en concroto “el quehacer ‘més de Javar, planchar, barror, sacudir, orvil de los nifios y de los adultos. La contrat parentesco y de clase igual que en Jos dos casos anteriores. La hija P hijo es en realidad ama(o) que ojeres el matronaz0 (Chodorow, S084} o patronazgo, sobre esta madre sustituta, o madre comple- montaria, que hace equipo co! . 6 iil), La siervamadro 6s fyudante inforior de la madre titular y de laydemés, Entre srtablece una rivalidad surgida de la competencia por 12 m= dad real y por la fa en el reconocimiento social y cultural que deviene ado y obtener prestigio o nega ) Otras madres: domésticas: las abuel tias, las hijas, es deci, las parientas; las madrastras; las ve lasamigas. Alls soles reconocen “naturales” hechos male ales vessa le otros, por ser mujeres, pero nunca son reconocidas So78 sus madres, Adomés de la cooperacién, también $0 bs blecen svvalidades y compatencia ante estas madres y a aire la madrastra a quien nto de la maternidé de los no- 1s, no debiera ser ra de la maternidad, sino con la amente el conflicto en la tinica rolacién roconocida: la conyugal- Ta vor madrastra se usa tambiin para nombra “cualqui cosa quo incomoda o daa: Madrastra, ain de aziicar, amarga’ No impopria el contenido real de las relaciones, madrasiras y = padrastros son desc mento como entes di sctos, las formas 0 y alos dé s de confarmacién del Madrebuena y malamadre: la madrastra wretcetonarla es patriarcalmente claro en su dfinicin dele or madrastra: “Madrastra (despectivo de madre) desde ol con gratitud, El materno,a partir do lo; placor. iglo xl. Mujor del 93 392Kloin afirma: “Es de este modo como el pecho de la mar, que gratifica o priva de la gratificacién, se torna en la monte dg bebé en ‘bueno’ o ‘malo’. Lo que denominamos pecho "bueno! 55 conylerte on prototipo do lo que a lo-largo de la vida serd bor ioso y bueno, mientras que el pecho ‘malo’ representa todo ly malo y lo persecutorio” (1980:247), Aniivol simbélico, el pecho bueno y el pecho malo estén en|y baso de las categorfas madre buena y madre mala, que expresan la experiencia desde la satisfaccién del sujeto y a partir de lay cuales éste se rolaciona y se percibe.-En la sociedad, on cambio, 4 las adres son por definicién personajes buenos, y las mujeres eréticas © cualquier tipo de madres fallidas son‘las malas, Laz madrastras han sido especializadas como madres malas, y se le homologa con las brujas; y on general las sabias. perienecen también a la catogorfa de las mujeres, malas. As{ como la madre es un personaje bueno, es necesario precte sar que en la relacién directa, todas las madres son malas porque {as mujeres nunca logran ajustarse al estereotipo, y aun cuando se acerquon a é! son malas madres porque nunca logran satisfacer el al o imaginario, consciente e inconsciente, del otro. Culturalmente so ha creado el personaje simbdlico de la ma- drasira, al cual se atribuye todo 61 mal que so niega en la macro, La sociedad y la cultura homologan maternidad con progenitura dosvo Asi, la madrastra, como personaje Politica, acta ol mal por las madres buenas, sirve de receptéculo 4 sus impurozas y permite la renovacién del ordan y do la imagen ola madre buena, incapazdel mal y deldafo, lagitima y p Como encarnacién del pecho malo, la madrastea recibe el odio aol no- in social porque no es una madre poder ordena. Recibe al odio Porque es marca y recordatorio vivo de la madre ausente (muotla, abandonadota, desconocida), buena por principio, La imp dad do compartir varias madres en la cultura de la madre tinica, hace de la mads iad del sujetoasu madre, yde su imposil wandonar el mundo infantil. La madras- la relacién fundante ~ realizable del otro, de su caroncia aos as{lasefal dol deseo fi da, - ss po jantratranagrode le fundaruentie de la ninterided inante: pretende ser madre de quienes no es progenitora; aasinaie Pans invisanta tune de lor bas etal or roated, y se relaciona ilegitimanente con su cényuge, oe puede toner una esposa que es la madre de sus hijos, fy imidad de la conyugalidad en este caso, de la ie temiad y no dol régimen juridico que permite la sucesién de diversos cOnyuges. rs lad entre la madre y la madrastra ocurre ra es madre consagrada, madre thuena, por ser la primera esposa y por sor la progenttora, y porque entre ella y el hijo media el tabd del ince La madrasti ida y odiada, como defensa ante el deseo, sa surgida dol miedo a ieee ee eee 1 Ia realizacién del deseo con una madre que no es parienta. Como madre usurpadora, la madrastra recibe un trato discri- rminatorio —tanto del cSnyuge como de los no-hijos—, originado on su papel socundario do la sucesién. La madrastra no es la imera, y no poiee ni puede ejorcer los derechos jerdrquicos dora madre. Asf, al proyectar la carga ‘no unon lazos buenos, ella se los no-hijos pueden amar a la ausente, res de culpa” a la madrastra. Una do las contradicciones mis graves para las mujeros so genera idad gondrica y su esterilidad particular. La inca- su mat 395th eS pacidad do toner hijos proplos,pardos por ells mlsmas constituye Te negecién de uno'de los hechos que constituye a las mujeres ‘como tales: la procreactén. $i cualquier mujor es un ser incomy madre estéril es luna mujer incompleta e imperfocta, ocasiona asombro y desdén, La relacién casi automética entre los hechos de su cuerpo y su Voluntad, asentada en Ia ideologla naturalista de la ferninidad, ocasiona que la vivencia de iddad por parte do las mujeres 'é marcada por la culpa y ol castigo “Algo habré hecho para que Es que tuve tantos abortos "Aun en visiones cientificas siempre se pionsa que la esterilidad es pslcosomética —y se supone que la mujer tiene un poder psiquico enorme, al grado de manejar sus males, mas 0 menos a Aiscrecién—, en pocas ocasiones se piensa que el origen os fisi légico y que la mujer no es culpable de nada, Y menos aiin se considora que el cényuge tenga problemas. Ja mujer estéril es incompleta, el hombre estéril es visual zado como castrado: no sélo fisicamente (imponente, deforme] sino que 0s percibido como un hombre sin falo: contranatura, ‘entado al orden del universo, La disposici6n Aultural es a culp: ala mujer y a considerar Ia esterilidad como una sanci6n al mi ‘como castigo. Esta concepcién se extiende de idéntica manera a las mujeres que tlonen hijos malformados, incapacitados fisicamente 0 con cualquier lesién o mal congénito. Las madres de estos nifios pasan su vida culpéndose y siendo culpadas por los males de los hij La culpa es compensada y transformada on sacrificlo: las mujores viven dedicadas en cuerpo y alma al hijo enfermo, ocupadas en reparar su fal jenden las gono1 del embarazo y IAs consideran deseo: Zacién se refuerza con la responsabilidad exclusiva que se exige & la matornidad de lo queocurra a los Las mujeres héf plasmado su sub} te, dur (oda su vida pero también hay mujeros que han dej arte, En él se exprosa su ser soci 396 experiencia personal; tal os cnsodo a pintera Frida Kahlo, quien ‘de manera simbélica el adentro de las mujeres, su vida sino vida interior, oncerrada, cauiva de eu condlcion genérion in algunas obras manifesta Frida Kahlo frustraci6n ante Is spaternidad. Aparoce ell ligada a fotos que, para ser mostrados y por noxnacidos, est fuera det cuerpo qu 18 Perea por inacabados. Ella es su cuorpo-maternal y los fels son par desu sor incompleto,laacabado, st6 |. Frida no-madre es Parjontro y surge de su cuorpo que lo impide satisfacer su rmatire; como negacién afirma al cuerpo como pri- firma el cuerpo-me- Las madres piiblicas ‘cas son todas las mujeres que a partir de sus idados, y desu trabajo, realizan la reproduc- as. Los casos mas obvios son mer: doras sociales, psicdlogas, brujas y chamanas, nanas do guardorfa, ccineras, meseras, do- récratas, socrotarias, hasta policfas. Estas mujeres, funciones do reproduccién que para ellas son social sy uridieamonte trabalo, y son reconocidas econémicamente me dlante el salario y otras formas cle pago. fan estas madres péblicas son conside- 0s, por ser roproductivos y, aun cuando ocurren en. jos culluralmonte como extensio~ ialmens alos do lo ese sentido se han so «ly oxpresiones de la maternidad. manora, con toda Ia carga maternal, la reproduccién 397es en lo privado. Recibe sal ‘implica compromisos, doberes y derechos. zado por mujeres trabajadoras y eso lo inferioriza doblement adomis ocurre on la dimensién de la sujecién laboral d facil identificacin con la servi publica de la maternidad de las mujeres a ferinizacién de estas actividades, y su doble inferiorizacién, 5 rotroalimentan y se convierten en pruebas de que las mujores soy aptas para hacerlos, de son est{mulo para que las mujores re: Su mater. Publicas, aclomés, aquellas mujeres que se rela. cionan maternalmente con los otros, hombres y mujeres, fuera de ambito doméstico. Las compaferas de escuel compaiteras de trabajo, las secre amantes, y las prostitutas, Los hombres y las mujeres buscan realizar la dimensién materna de sus necesidades filales en cualquier mujer. misma voz que son designadas ollas. El nombre es en este caso un espejo; In nifia dobo verso en esta anticipacién ‘emporal y entendetla como anunciacién de un destino irrenun- 398 oproduccién, je: ~ gpniacimlontos @ son trabajos para mujeres. Adem, 1ue parezca, ol destino es lo Ginico a lo que Nae ‘en cuanto lo asume inicia una vida . BI nombre es una férmula mAgica que ie: por no pi aoe rit nie o madre dew mca oxo espacio ‘al mune 1a apronde a ser madre, aplica los asaicn peak Pr wcinesntonreas 04 plenous 7 inegun vo al observar a su madre en relacién con ls ots. Al jugar voices exporimonta sentimientos,actitudes y formas de con st Mamionto propias de una madre y al. mismo tiempo es crore pu mufoca, como quisiera que su madre fuera con ra in mueca como Teciplonto de sus naceidades y como ir de envidias maternas. ik tn a ‘un espacio de la cotidianidad, pero = sa magico."® En él es posible, por mediacién de clertas eras mndgicas, abrir ol espacio de la reallzacién simbd teada de deseos y fant y, a partir desu realleaci tener mdizaje y la vivencia do la maternidad infantil “que tal cosa "quo Ia mufieca era fulana, que esa pisdra era un castillo”, “Todas las mujeres, desde poquefias son estructuradas como tales, en Ia forma que lo plantea Simone de Beauvoir (1049) “la mujer no nace, sv hace”, No nacen mujeres, pero en breve tlempo aprenden a sor, Un conjunto muy complejo de relacionos, de fricticas do vida, de instituclones y de concepelones ae articulan para construir ol lo gonérico sobre ese cuerpo sexuado. La es angadas do conformar el género a través de la educacién, tosis idoolégica primaria que se realiza en dad. En la trans- conformacién do los génoros, la in lal 399ee ee ee on cién central es la maternidad y la relacién con la madre os prioritaria, Es necesario sefalar que Ia maternidad es dosplegada oni actualidad por la madre individual co por . dicho de otro modo, la teproduccién doméstica se ha transformady al aparocer mn una gran ayuda a ly mate no s6lo en el culdado y entretenimiento de los menores y do ella misma, sino por el peso extraordinario que adquiere en iy formacién genérica a través de la imagen visual y audi procesos subliminales, de proyeccién transferencia, o rimero que apronden las ser objeto sexual procreador. Aquollo que concierne al ser objeto sexual erdtico lo aprenden de manera simulténea, pero es repr. mido pot la cultura que no reconoce la soxualidad infantil, en particular la de las nifias. En busca de la madre perdi Etcontonido maternal en la nliia—como objeto soxual procreador, nutricio, dador de vida, de afecio, de protecciéry de culdados— se crea con base en la carencia surgida entre otros elementos de la represién, « ‘La matire prédiga es, a la vez, una carente y, en el dimorfismo genérico que se expresa en la relacié id, como recurso para allegarse a los otros. La madre lacta simbdlicamente a su hija como una carente, porque es su igual gonérica, y con ello la dispone a la bisqueda de To que le falta, ty nutricio de lo maternal se gesta por un lado, en o! trato con la madre quien no puede nutrir del todo en primora instancia_por I icién mono-gonérica. La carencla wero como recon imites genéricos, y y dol seno perdidos, in Envidia y gratitud. con ol pacho coma enel Pg disposicién a | as del ser mujer consiste en 4 la renuncia. De hecho, culturalmente, la vida do za.a partir de dos ojes estrechamente ligados: madre perdida, trans- 10s se despla: ae permanente bisqueda de la Jormada y volada on la bdsqueda familia, 1a cas i) Como la Ta completud en l ott. oot acuerdo con Freud, esta problemética so gesia en la fase ‘a, Se presenta como la renuncia al incesto, en primer ay In nar cambio dob), yhngo con el pre resultado es la incom que 0 oxpresan como wividia y como disposicién al culdado det otro. A diferencia del iso, se forja en la nifia la capacidad de goco on Ia renuncia a gonverlirse en un sor humano pleno en s{ mismo. ‘Desde ese momento que podemos simbolizar en el nacimien- Ia bisqueda de su completud en el otro: en la an Jos hijos. Estos Gllimos aparecen en su vida sacrificio en prenda para que quienes no logran s in no se casan, 0 no tienen hijos, como Ins mujeres sol: particular como social La frustractén genéri plonitud tampoco se cbtione deforma exclusiva en larel ida que se derivan de el la amistad, o! m: : La frustracién particular derivada de no tener siquiora e! Nifias-madres ‘Ademis de las madres- oxisten las nifias-madros que son madres en la infanc jin madre que son todas las mujeres, madres infantes. Se trata de mujeres .y son madres porque cumplen funciones y porque se relacionan de manera maternal con nifios menores, los cualos estdn a su cargo, en mayor oen menor medida. Nolo son por haber parido como las madres-genitoras. En goners sus hijos son sus hermanos, sus primos 0 sus vecinos, aut 401puoden ser también nifios a quienes cuiden maternalmente com un trabajo (nanas Las nifias- principio de mat Lafi Jas madresposas. Se convierten en madres por sus propias madres les heredan en vida a sus parcialmente: noles heredan el estatus, niel reconocimiento soci] al rol de madres. La sociedad no les confiore ol julo de madres a estas nifias, de propiedad que pasa porla_| concepcién, la gestacin y el parto, que pasa por el cuerpo; la ‘madre entonces, debe pertenecer a un grupo de edad ubicado entre la adolescencia y 1a edad adulta; y, finalmente, debo haber un padre, un hombre. Las nifias madres son nifias virgones, castas, puras, no pueden embarazarse y no tienen marido; es decir, no concuerdan con el estereottpo que sélo ve maternidad donde hay cuerpo y hombre, Y son madres porque la mai lene que ver con esa lacin entre la mujer y el nfi iertos cuidados, afectos, actividades amos reproduccién maternal, que puede ‘desempenar cualquier persona, independientemente del sexo y de la edad, Pero no sv reconoce como maternidad, débido a que en llasecentran el pocer yel reconocimiento de la madre: la primera que no esté cap: sobre sus otros hijos, ¢s la propia madre; silo hiciera, restaria valor asu sor. Las nifias-madres forman parte de la institucién de la mater- ida para reconocer la maternidad de su hija 402 nidad colectiva, una de cuyas relaciones basicas os o] parentesco. {Las hijas son, antes que nadie, las potenciales colaboradoras de la madre en las actividades de la reproduccién, ya que son las ‘mujeres més cercanas, presontes de manera permanente en a vida cotidiana, Son las hijas, quienes naturalmente cuidan a sus her- ‘manos. Por la dependencia y la sujeci6n opresivas que las ata a sus ‘madres, deben obedecor sus Srdenes y cumplir con esa obligacién. En la conciencia social, este quehacer no es representado ni como maternidad, ni siquiera como trabajo. A pesar do la eviden- cia, maternidad y trabajo, s6lo son considerados como contenido vida adulta, “Las nifias no son madres” y “las nifias no 1", son principios do interpretacién que impiden la com- prensidn de la maternidad inf La nifia-madre Juoga, entrotiene 0 cuida a los menores; de la misma forma 0 como ext jego.de “la casita”, a que “es ‘mamé de sus mufecas” o de sus mascotas, “al hospital”, 0 a que es maostra én la “oscuelita”. La ni madre es adiestrada como todas, con las mufiecas y con los hermanos por su madre y por todas aquellas que estuvieron involucradas en la maternidad colectiva que la crié a ella. En muchos puoblos lo primero que so regala a una nifia es un rebocito casi de juguete, para que aprenda a usarlo; la verdad es que muy pronto apronde a usarlo cargando nifios, lefia, matz, Los culdados que prodiga al menor otra menor, son observados también como ensefianz: pero la cultura on general no considera aprondiz. Entre que juoga, se entretiens y aprende, s favor ensefiéndole algo que ignor La maternidad concretada en la infancia os negada como tal y entendida como aprendizaje para el futuro, para la edad ad corre la suerte de todo lo que hacen y son los nifies y los jévenes ‘on la Idaologia que imiza: una perspectiva para el futuro. Las nifias aprondices adquieren en esta vivencia pedagégica y laboral, de manera simulténea, dones para la maternidad y con ello avanzan en la consecucién de la feminidad. El juego a las mufecas y el culdado a los menores y a los animales domésticos, son caminos de las nifias hacia la feminidad, a la vez que son 403rs fominidad on acto, Las nifias son madres en lo real concreto y manera simbélica. ja vecindad, la pequefia de 3 0 4 afios yao | madre de su hermano. En muchos casos la nifia apenas ha apren. 4 dido a caminar cuando ya se la ve cargando a horcajadas o sobre auespalda (con su cuerpo-para-otros), con el rebozo, a suhermang + monor, Acaba do dejar el pocho y ya es madre. A los ojos de los | demés, sélo lo entrotiene, lo limpia, lo camt 4 fueran actividades técnicas alsladas; no como el contenido contral del modo de vida que ya ha iniciado. La madre dice “ya me ayuda con sus hermanos”, “as que le gustan tanto los nifios chiquite “vieran que maternal salis", Ella diré cuando sea grande ontre 4 encores y con orgullo: “yo crié a mis hermanos, porque éramos § tantos*, o “porque mi mamé estaba mala”, 0 “so salfa a trabajary 3 me los dejaba”. La maternidad infantil no se agota en Ids culdados leves que hacen los hermanos mayores. Para estas nifias es una verdadera maternidad, aunque sea compartida con la madre y con mujeres, o aunque ocupe menor tiempo y esfuerzo que el invertido por la madre, Es maternidad porque la nifa es protagonista direct on la reproduccién social, afectiva, intelectual, y material de otro, y por ol espacio que osta relacién y sus funciones maternas ocupan, en su propia vida, en la conformacién de su propia identidad. La maternidad de las nifias es roconocida de manera velada, on la costumbre de convertir a la nifia-madre en madrina del nifio yen co-madre de su madre, El hecho significa el reforzamiento de ia familia y una distinei6n: parentesco ritual, la madrina es una suerte de madre s soleccionada por los padres. La madrina esté obligada a vigilar la formacién religiosa de los menores, a cubrir clertos gastos rituales y adar regalos al ahijado. En caso de muerte, de desaparicién ode impedimento grave de la progenitora debe, si es necesario, asumir 404 fundamentales en la institucién de la materhidad colecti 400 nvertir 19s y ser reconocida como tal, Sin embargo, al convert aia Je nifiamadte, se desconoce de manora formal su jad. Fi nae, privadas o pablicas, por amor 9 por dinero, ean ios hij de sus madres 0 do uss mazes son 8 al arezes doa madre y do las otras sg de acto materno, las nifas-madres aprenden a dar ol we lograr un intercambio equitatio que de todas maneras s0y0 Pa «pleno, ni con los hijos de la otra, ni con los propios. En eens rpacciones de quienes fueron idad infantil; o “vaciadas” por ios, huyen dol matrimonio, de “no son hogarefias Muferer que dossanferviontemento sus propios hijo, y 30 dontifican con la maternidad, Su experiencia las enriquecs, per toquloren Tos hijs propios, los que realmente les pertonotcan, Raquloren ser reconocidas y valoradas como madres verdacoras ‘Ain después de haber atendido y cuidado a varios hermanos, 8 ‘asan y tionen muchos hijos y se expresén satisfochas do se madres. Las nitias-nanas on ol dmbito privado como parte de La maternidad infantil ocurre a dad las rolaciones da parentesco, y como parte de wo también existe como actividad pébl siompre un salarlo, y forma parte de relaciones do origen y cualidades semiserviles do explotacién de las niias- ‘Son lfias o piberes de dos tipos: 4 4) Las nifias encargadas por sus padres para que acaben de nané 405crlarse, por oso se les llama también criadas (aunque el nombre, ha hecho extensivo a las trabajadoras domésticas adultas). i) Las nitias contratadas para cuidar nifios a cambio de hat {acién, de alimentos, de,ropa, o de salario. En goneral, no se ly aga en dinero, sino en éspecie. Cuando son asalarladas, rcibey menos que el salario minimo, det dos tipos de trabajo minorizado: 10 86 recone ni como trabajo n id oreadora, Es s6lo un esfuerzo que, en todo cas, iona gratitud. Se pionsa que la nifia se divierte, ya que toda s, idad os homologada con ol juogo, y el juego es concebido com 0 que emana de los nifios, como algo natural y que divierte, Ast, més que esperar la retribucién a un trabajo, la pequeta nana dobe agradecer la oportunidad que se le ofteco de tens, compafieros de juego, tacho, comida, o dinero como componsacin la que mira el cuidadg tud lidica y recroative~, i6n del trabajo infantil y femenino, asiento de la opresién particular de estas nifias, es ideologizada como protec cién a menesterosas que de manera natural cuidan y se divierten, Las madres-nitias ‘Son madres piberes o adolescentes, progenitoras de sus propios hijos. A esta maternidad se lo conoce como precoz, porque la norma nacional supone que las mujeros no deben tener hijos antes de los quince afios A lo largo del pats lo: lot y superior do edad ‘maternal varian enormemente por regiones, pero sobre todo pot Clases sociales, de acuerdo al medio rural 0 urbano ya un sinfin de tradiciones y costumbres. De tal manera que incluso la edad de Is Por ejemplo las mujeres burguosas, en general se casan después 406 baja para algunas clases sociales y alta para otras. 4 no més tarde los 23, inician su periodo de sa aa ste empo. En camo, mujeres de capas medias Pen méso mens jos 18 0 un poco antes, pero alargan un poco ‘nfs, hasta los 26. Para clortas regiones rurales muy tradicionales 15-14 afios es buena edad y yaa los 19, las muchachas que no & ncontrado hombre y no han tenido hijos se consideran Ja odad limite inicial para la maternidad es ‘que para un grupo social es la norma, para dad precoz, Asf, la precocidad se establece tv akmente en cada cbdigo civil estatal, los cuales disponen sem ‘diferentes. En el caso de Puebla, se mantienen los 12 afios ‘Goma a edad minima que aprueba el Estado ala que puede casarse la ica de Jas adolescentes.2° eal que clontos de miles de mujeres son madres antes de Jos 18 afios, antes de alcanzar la mayorfa do odad. La mayor‘a do Jas j6venes son aptas ~do hecho y por su roconocimiento en ol ‘ensus aspectos més delicados. tas funclones de reproducci6n estén sintetizadas en la la ideologia de la Revolucién Mexicana sobre las muj la mujer ‘mexicana es forjadora de los mexicanos del mafiana, dolas nusvas sgeneraciones, qué noble sacrifico y qué responsabilidad, Lax mu- jares son responsables dela formacién do los nuavos cludadanos yde la proteccién de la familia como célula soclal abio, no pueden votar, ni decidir, nf ocupar puestos de elecciéu popular. in jurfdica s6lo exprosa algo abordado de manera onsideracién de la maternidad como unaactividad tiva, confrontada con la politica, considerada una de las actividades creativas por excelencia, Para esta dltima, se 20” Gomuniacén personal del Lic, Clea, avior de proyecioe de reformat juris al dercho civ del Estado de Pusbla :considera nacesario sor mayor, tener més experiencia para to docisiones, etcétera.*1 A pesar de todas las diferencias iales y culturales, y do iy recoces en cada grupo, « ‘momento en que es apta para procrear. Enos otros grupos sociales y culturales, la maternidad infang es-un problema. Esto gonoralmente no ocurre on ol caso de lay ‘mujeres de la clase dominante porque el matsimonto debe se ing transaccién acertada para la familia. Sus intereses prevalecen, y si alguna jovencita resulta embarazada, aborta para permitis up matrimonio en orden. Ocurre en las otras clases y, en general, en condiciones muy desfavorables para las mujores. La Facultad de Filosoffa exige: si no las garantias, una GUAR: DERIA para asumir las ci huelga, Comisién de madre en potencia, (Pinta en la huelga del CEU, 1987), Menos informadas sobre el de su cuorpo, y con muchos igioso, las Jovenes que rompen nes erdticas con sus nov! responsable, La chica no se atreve a realizar un aborlo 0 desconoce la post ra", marcada de por vida, liga al novio a casarse y como no inte, porque atin es muy joven, no forman luna nueva familia; en calidad de dependientes y subordinados, como hijos menores, se quedan con una de las familias paternas, © incluso separados. ‘*stf ot contradiccién con su discriminacién politica e 408 rotismo matrimonial yotros, tienen * © amigos, y muchas veces | Joven desaparece ono sehace | |, con todos los problemas y suftimientos que le | nntar su situacién y tiene el hijo como “madre solts- | télica sobre la presorvacién de la vida fetal a toda costa obliga a fos patos a cargat con la paroja y la criatura, so hacen responsa- ies do ollos hasta que crecen y ejercen sobre ellos su poder pareja continda, pued quedan a vivir en la si A la joven transgresora todos padres que ya no le tienen confianea y la co suogros, “por sar una mujer {cil que atrapé a s truco del embarazo”, y el amante esposo porque por su culpa se ombarazé”, perdié su apreciada libertad Justo on la edad on q alos varones no sélo se les perm ejercicio de la soxualidad plena pol(gama, por estar j6venes y solteros. La pStdida de la libertad también es sopesad bajo y la responsabilidad de la mujer y ol hijo, que pn la sociedad patrlarcal son suyos. Ademés “si se acost6 con él, quion quita y se acuoste chava esté emabarazada, se aterra ante pasar de la adolescencia a la adultez por la via del matrimonio y paternidad, y la deja sola “a fin do cuentas ella quiso, ino?*, lla sabfa que le podia pasar, alld ella". La joven sin entender: adn fica ser madre, enfrenta a corta edad la separacién y el abandono. Se dibuja un futuro como madre sola, siempre con ol afan de encontrar marido, “de darle un padre a mi hijo”, de casarse, de'sor como cree que son todas. 409