abrazarme al calor de tus piernas darle una falsa pausa al reloj de arena tomar de tu ombligo el beso aceptar darle tregua al destino refugiado en el oasis fresco de tus caderas
Afuera esta que arde el enemigo
y todos sus malditos secuaces como ratas en la madrugada de los mercados merodean y se confunden con sus propios chillidos alacranes ponzoosos que deambulan adictos a la arena de su propio desierto
Y aqui estoy yo general y soldado
fusil latigo y pual de mi propio ejercito no necesito la justicia de los hombres ni la mirada de los angeles total no hay justicia en esta tierra la justicia es la careta que cubre la voluntad del poderoso
si todo al rededor es una fachada una mierda
payasos jubilados de un circo que no les reclamo el vestuario sonrisas hipocritas adornadas con bizarro maquillaje total la tierra la hemos convertido en un infierno alegre y la tica no alcanza ya como moneda de cambio