LECCION 9
LA ADIVINACION
‘Ala persona no iniciada le parece casi una cosa de magia el poder ver el futuro.
De hecho el diccionario «Webster» define la adivinacién como «el arte de presa-
giar, mediante la ayuda de seres sobrenaturales (;los dioses?) los acontecimien-
tos futuros o averiguar a través de ritos, experiments y observaciones, las cosas
secretas 0 escondidas». Siguiendo por tanto esta definicién a su conclusi6n légica,
deberdn considerarse también como predicciones los partes meteoroligicos de la
prensa y televisién. Sea como sea, la adivinacidn, es una herramienta muy itil
y ocupa un lugar destacado en el Arte.
Existen muchas formas de ver el futuro o, para expresarlo con mas exactitud,
de ser conscientes de las fuerzas responsables para provocar en el futuro un re-
sultado probable. Creamos nuestra propia realidad. Nada esta predestinado, nada
tiene que ser. Si el individuo desea un futuro distinto, esta en sus manos el conse-
guirlo.
EL TAROT
Sujeto.
EI Yo Interior.
Las metas (ideales).
El pasado.
La Familia.
La Salu
La Religic
Los amigos.
La salida final.
PARMAR E
Practica la mds veces posible. Lee para todo el mundo —tanto para los conoci-
dos como para los desconocidos. No temas comunicar lo visto, pero emplea siem-
pre tu discrecién al expresarlo. Por ejemplo, en el caso de ver la muerte o algin
accidente grave, evita exclamar: «Vas a morir». Dirds, mas bien algo asi, «en vis-
ta de la situacién actual de las fuerzas, seria aconsejable actuar con extrema cau-194 Raymond Buckland
tela en el futuro préximo por existir la posibilidad de un accidente». Pues al fin
y al cabo, no es nada mas que eso —una posibilidad. Podremos, repito, evitar lo
que esta por venir.
No leas para ti mismo ni para otra persona con demasiada frecuencia. Una buena
norma es examinar e] ntimero de Arcanos Mayores. Si hay cuatro, cinco 0 més,
estan indudablemente presentes unas influencias fuertes, siendo aconsejable por
tanto, no esperar durante un mes, por lo menos, cambios importantes. No habria
mucho propésito en repetir la lectura hasta haber transcurrido unos treinta dias
—a no ser que se desee tratar un tema totalmente distinto. En el caso, por otra
parte, de encontrarse pocos o ninguno de los Arcanos Mayores, podrias volver
dentro de una semana a consultar las cartas por ser las influencias ligeras y cam-
biables.
‘Actualmente se puede encontrar en el mercado un sinfin de barajas «Tarot».
De hecho en el titimo recuento se totalizaron casi doscientas cincuenta. La més
conocida es la «Rider Waite», la cual, sin duda, ofrece una buena base, tanto para
el principiante como para el experto. Su ventaja principal consta en ofrecer una
imagen completa para cada carta, incluyendo (a) Arcanos Mayores y Menores.
Muchas barajas, por el contrario, no tienen simbolos para los Arcanos Menores,
ilustrindose, como modo de ejemplo, la tres de Espadas por tres espadas: la cua-
tro de Espadas por cuatro espadas. La baraja de Rider Waite, en cambio, nos ofrece
dos escenas completas y distintas para ambas cartas y, de hecho, para toda la
baraja, proporcionando de esta manera una amplia gama de materia con que traba-
jar. Otra baraja magnifica, basada en la de Rider Waite es la de Morgan-Greer:
a decir verdad es la que prefiero. Si deseas un cambio total, junto con un simbolis-
mo emocionante, recomendarfa la Baraja «Thoht» disefiada por Aleister Crowley.
Prueba muchas y asi encontrards la que mis te guste.
«VER» EL FUTURO
Qué fascinante es mirar literalmente el futuro, el pasado o el presente, Esto
se consigue mediante la utilizacién de casi cualquier objeto que tenga una superfi-
cie reflectora, aunque quizd los mds idéneos serfan una bola de cristal o un espeio
ideado para el proposito. Vamos a mirar primero la bola de cristal.
La bola no debe de presentar defecto alguno, ni rayas en la superficie ni burbu-
jas dentro, Las nuevas bolas de cristal acrilico funcionan bastante bien pero se
rayan facilmente. Deja reposar la bola sobre un fondo negro —un trozo de tercio-
pelo de este color es idéneo. La tela puede, a su vez, colocarse sobre tna mesa
delante de ti o alternativamente servir para tapar las manos si deseas sujetar el
cristal. E] fondo negro tiene el propésito de enfocar tu atencién tinicamente en
la bola, Y no en otros objetos a tu alrededor. Al iniciar tus précticas con la bola
deberds buscar un lugar solitario, una habitacién tranquila y oscura, siendo, desde
luego, el mejor lugar tu templo. Utiiza una luz pequefia, preferentemente una vela,El libro completo de ta trujerta de Buckland 195
colocdndola de tal forma que no se refleje en el cristal y quema incienso, pues
te ayudaré a concentrarte. Trabaja en un circulo consagrado, por lo menos al prin-
Gipio. Posteriormente, si deseas utilizar el cristal en cualquier otro lugar sera sui-
ciente imaginarte rodeado e inundado por una luz blanca —aunque incluso aqui,
te recomendaria que traces un pequefio circulo con tu athame. Comienza con una
oracién protectora (como el salmo de los Seax Wica), pidiendo a continuacién la
ayuda del Senor y de la Seftora.
‘Ahora, siéntate y mira dentro del cristal, procurando siempre mantener tu mente
en blanco. Esto no es facil y requiere bastante préctica. No te quedes mirando
fijamente a la bola, pues lo tinico que conseguirés es un dolor de cabeza. Mira
constantemente pero pestafieando cuando te sea necesario. No intentes imaginar
la presencia de algo en la bola —esfuérzate dnicamente en tener vacia la mente.
Después de un rato —que puede ser de dos a diez minutos— experimentards la
sensacién de que el cristal se llena de niebla blanca o humo, llegando a cubrirse
por completo. Al cabo de unos momentos, y de forma gradual, el humo se disipara
dejando atras una imagen, casi como una pantalla de televisién en miniatura. Posi-
blemente sea en blanco y negro, pero lo més probable es que sea en color, pu-
diendo ser estacionario o mévil y representando el pasado, presente o futuro. Tam-
bién es casi seguro que la imagen se presente en forma simbolica, la cual, al igual
que los suefios, necesita una interpretacién.
‘Al principio, tendrés poco control sobre lo visto, teniendo que conformarte con
Jo que venga representado en el cristal. Sin embargo, a medida que progreses,
y antes de mirar dentro de la bola, podrés meditar durante unos momentos sobre
jo que deseas ver. En el instante de iniciar tu contemplecién, dejarés, no obstan-
te, tu mente en blanco.
La mayoria de las personas consiguen buenos resultados durante sus sesiones
con el cristal. Si no ves nada la primera vez, practica de nuevo la noche siguiente196 Raymond Buckland
y asi sucesivamente. Tal vez transcurra una semana o més antes de conseguir
ver algo, pero sigue intentando. Un tiltimo aviso: no prolongues tus intentos mas
de diez minutos seguides. En el caso de no poder obtener una bola de cristal,
es posible emplear una lupa cncava. Bien pulida y dispuesta sobre el terciopelo
negro funcionaré casi tan bien como la bola. De todas formas, tanto si utilizas una
bola o une lupa, utilizala vinicamente para el prop6sito tratado y naturalmente no
permitiras que otras manos la toquen. Guérdala en un trozo de terciopelo o seda
negra, protegiéndola de la luz del dia. Es tradicional «recargar» el cristal soste-
niéndolo, una vez al mes, hacia la luna llena.
Algunas personas consiguen mds éxito con un espejo negro. No son dificiles
de hacer, pues precisas tinicamente de un cristal en perfectas condiciones. Bl cristal
se hard opaco mediante la aplicaci6n de tres manos de asfalto y para que éste que-
de bien pegado, limpiaras bien el cristal con aguarrés, cubriéndolo a continuacién,
y mediante un pincel de pelo de camello, con el asfalto. Un método mucho més
sencillo es aplicar una espesa capa de esmalte al dorso del espejo, e! cual no es,
quizd, un procedimiento muy «magico» pero al fin y al cabo el espejo es nada mis
que un punto de enfoque para tus concentraciones. Las imagenes son proyecta-
das por tus poderes: no salen del espejo ni del cristal. Por ultimo diré que es me-
jor un cristal cOncayo, siendo a veces posible encontrar dicha pieza (como parte
de un reloj viejo) en una tienda de antigiiedades.
Una vez conseguido el cristal, enmércalo. La forma no reviste importancia —re-
donda, ovalada, rectangular o cuadrada. Graba o pinta, en letras ninicas o en uno
de los alfabetos magicos (véase la Lecci6n 12) y sobre la montura, los nombres
del Seftor y de la Sefora. Al realizar esta tarea —y de hecho durante todo el pro-
ceso de fabricar el espejo— has de concentrarte sobre tu propésito —la proyec-
cion de escenas del pasado, presente y futuro. Consagrards e! espejo en el Circu-
lo utilizando el rito explicado en la Leccién 5. Naturalmente sustituirds la palabra
«espejo» por la de athame. Cuando no estés trabajando con el cristal, envuélvelo
en una tela negra y gudtdalo.
Y aguf tienes un método fécil para empezar: antes de adquirir una bola o fabri-
car un espejo, practica con un vaso de agua. Toma un vaso transparente y llénalo
con agua. Miralo ahora en la misma forma arriba descrita. Deberds obtener bue-
nos resultados.
LAS VARAS SAJONAS
Las varas sajonas son muy eficaces en proporcionarte una contestacién direc-
tay répida a una pregunta. Tienen un cierto parecido con el I-Ching oriental aun-
que son mucho menos complicadas
Se requieren siete varas fabricadas de clavijas de madera. De estas siete, ha-
bra, por una parte, tres de nueve pulgadas y cuatro de doce pulgadas. Una de
ellas, ademas, ha de ser marcada o decorada de tal forma para que sea reconocidaEl libro completo de la brujeria de Buckland 197
como la vara «WITANn. Si quieres, podrés decorar con runas y simbolos las de-
mids varas, pero siempre asegurando la preeminencia de la primera mencionada.
Estando de rodillas, colocarés en el suelo, de forma horizontal y delante de
ti, la vara «Witan». Coge ahora las otras seis, sosteniéndolas por encima de la
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