-Te fue sealado un plazo para escrutar en conciencia
tus tesis, que contradicen nuestra comn opinin.
Respndenos libremente, siguiendo tu conviccin, y escucha despus humilde lo que ordene tu sentencia. Sabes que no habr ocasiones de enmienda despus de hoy. Ests preparado? -Estoy. -Alguna fuerza invisible por el ter, fatalmente, nos lleva mientras hablamos en vertiginoso vuelo. En lugar de ser el eje que armoniza todo el cielo, giramos como peonzas en torno a una bola ardiente. Una ley desconocida gobierna este impulso ciego. Crees tales cosas? -Las niego. -El mundo que nos alberga no es el nico habitado. Otros seres con aspecto semejante, o bien diverso, viven tambin, repartidos por el ignoto universo que neciamente estimamos poco ms que un decorado. Quien crea en nuestro dominio del orbe es un pobre iluso. Tal afirmas?