Una sombra errante

Sin saber cmo ni por qu, casi de improviso, una sombra pas cerca de m.
Pas, y yo la vi. No s cmo, pero yo la vi. Ni siquiera me mir, y se fue de largo.
Fugaz: vista y no vista.
Al cabo de algunos minutos, retorn por segunda vez. Y tuve la suerte de
contemplarla desde muy cerca. En esta ocasin me mir, pero cuando
quise, ya haba desaparecido nuevamente.
Por tercera vez volvi a pasar junto a m. Entonces yo estaba preparado, y le
grit de una vez:
-Alto, sombra, escucha! Quin t eres? Cmo te llamas?
Ella se detuvo algo inquieta, temerosa, indecisa.
-Yo, yo no soy nadie: solo una sombra pasajera Me respondi sin
mirarme a los ojos.
-Pero, qu haces por aqu?, de dnde vienes?, adnde vas?
-Estoy sola, no hago nada: voy de aqu para all, no vengo de ningn lugar y
a ningn lugar voy.
-Pero, algo buscas, no? Le pregunto por tercera vez.
-No s, tal vez, es que alguien me daba el contraste frente a la luz, pero
en un descuido, me qued dormida, y desapareci de mi vista. Sola me dej y
sola me encuentro. Esto me pone triste, muy triste: tristsima.
-Entonces, buscas la compaa de alguien, de otra sombra acaso?
-De otra sombra, no. Para qu! Busco alguien slido y opaco que sea mi
contraparte. Qu hace una sombra sin sombrero? Pero no, nadie. Mejor es
acabar de una vez
-No, no! Espera un poco.
-Ya no tengo remedio ni solucin.
-Cmo que no! Tu caso tiene muy fcil solucin Entonces s me mir a los
ojos con sus ojos de cuencas vacas.
-Y cul es ese remedio para mi orfandad?
 -Como puedes ver, mi sombra me acompaa a todos lados, pero siempre he
querido disfrutar de dos sombras, de una hermosa pareja de sombras: la gran
ilusin de mi vida. Si t quieres, te unes a nosotros, hacemos los ajustes de
tamao y tresena de hecho! Mira, qu te parece mi boceto?

-Precioso!
-Bueno, si t quieres
-Es la propuesta ms armoniosa que he escuchado en toda mi vida.
-Te gusta, entonces?
-Claro, muchsimo. Y me hace muy feliz.
-Venga: dame tu mano y ven con nosotros Sent su presencia asombrada.
Nos cost un poco reajustar nuestras medidas: las suyas a las mas y las mas
a las suyas. Pero muy bien: con voluntad todo se puede. A partir de entonces he
conseguido una pareja inseparable de sombras; los tres caminamos juntos por
la vida, ms contentos que unas Pascuas de Resurreccin.
Y ya saben: cuiden su sombra, menla todos los das de sol y todas las
noches de luna, no vaya a ser que la pierdan para siempre

30 iraila/septiembre 2017
Almirante (Bocas del Toro)
Larunbata/sbado

xabierpatxigoikoetxeavillanueva