Asociacién de Amigos del Pais
Fundaci6n para la Cultura y el Desarrollo
a Fescicuio’| BPQCA
Guatemala, 21 de septiembre de 1998
Historia y organizacién social de los
mayas clasicos(OT ep Aa inne Se Taare Spl Gia aaa wa A
| El Usumacinta: Piedras|
| yYaxchitin
"Palenque y la region occi
de las Tierras Bajas,
y Aguateca
El sureste de Bet
E] Periodo Clasico (300-900 nc) se considera
‘como la época de maximo florecimiento de la
civilizacién maya en las Tierras Bajas de
Petén y territorios adyacentes. Las socieda-
des de esta regién aleanzaron un grado de
complejidad mucho mayor que el de épocas
anteriores, acompaiiado por niveles de po-
blacién muy elevados.
Los sitios clasicos de las Tierras Bajas
han atraido la atencién desde el siglo pasa-
do, por lo cual existe una base de informa-
cién muy amplia para muchas regiones y
sitios especfficos. Esto permite ahondar en
el estudio de problemas particulares rela-
cionados con la organizacién econémica,
social y politica de los mayas clasicos. Pro-
bablemente, el aspecto mas distintivo dela
civilizacién maya de las Tierras Bajas sea
la presencia de un conjunto amplio de ins-
cripciones, cuyo contenido se ha podido elu-
cidar en parte. El andlisis de las inscripeio-
nes ha producido una enorme cantidad de
informacién sobre temas tales como la reli-
gidn, el calendario, la astronomia y la his-
toria politica de la regién. Ninguna otra
rea de Mesoamérica tiene una riqueza
semejante en cuanto a informacién escri-
ta. Los datos obtenidos del examen de las
inseripeiones enriquecen significativamente
la informacién obtenida por métodos
queologicos de reconocimiento, excavacién
y andlisis.
A pesar de la riqueza de informacién,
la sociedad maya de las Tierras Bajas to-
davia presenta muchos enigmas. Las re-
laciones politicas entre los sitios del rea
y sus transformaciones a lo largo del tiempo
apenas empiezan a comprenderse. Queda
mucho por hacer en la investigacién de la
demografia, patrones de subsistencia y ex-
plotacién de los recursos naturales. De he-
cho, todavia son escasos los conocimientos
de los que se dispone sobre la base econé-
mica que sustentaba el gran edificio de la
civilizacién maya clasiea. Todos esos pro-
blemas, a su vez, se relacionan con el enig-
ma del “colapso” de la sociedad de las Tie-
rras Bajas, al final del Periodo Clasico.
Los procesos econémicos, politicos y socia-
Tes que condujeron al “colapso” se conocen
slo en parte.Organizacién
sociopolitica
La unidad bdsica en la socie-
dad maya clasica era la fa-
milia extendida, conformada
por padres, hijos solteros y
casados, las esposas e hijos
de estos ultimos; todos ellos
habitaban en conjuntos resi-
denciales cercanos unos res-
pecto de otros, y préximos a
sus tierras de cultivo, En esas
unidades se realizaban las
actividades econémicas basi-
cas, incluyendo la produccién
agricola y artesanal, el pro-
cesamiento de alimentos, la
distribucién de recursos y al-
gunos rituales religiosos. El
sistema de descendencia era
patrilineal, es decir, los
miembros del grupo estaban
emparentados por la linea de
Jos hombres. Fi] jefe de la fa-
milia era un vardn adulto,
quien tomaba las principa-
les decisiones relacionadas
con el grupo familiar.
Aguellas unidades fami-
liares se hacen evidentes, en
términos arqueolégicos, por
medio de los numerosos con-
juntos habitacionales que
usualmente rodean a los si-
tios principales. En dichos
conjuntos pueden distinguir-
se dreas de vivienda, de pre-
paracion de alimentos, de
disposicién de desechos y, en.
algunos casos, también las
que se destinaban al proce-
samiento de materias primas
para la manufactura de ar-
tefactos de piedra, de cera-
mica u otros. Casi siempre,
los edificios individuales que
componen los conjuntos es-
tan agrupados alrededor de
patios o plazuelas. Estos pa-
social...
tios eran un componente pri-
mordial, pues se utilizaban
como areas comunes, para
efectuar reuniones sociales
y actividades de manufactu-
ra. En muchos casos también
es posible identificar peque-
fios templos domésticos o
reas de culto. Los miembros
fallecidos eran usualmente
enterrados bajo el piso de las
viviendas.
Es probable que los
mayas clasicos hubieran
tenido, igualmente, un
nivel superior de organi-
zacion, equivalente a las
parcialidades 0 barrios
que existfan en la época
de la Conquista. En el
pasado se pensé que los
miembros de esas unida-
des sociales estaban rela-
cionados por medio del pa-
rentesco, pero actualmen-
te se sabe que se vincula-
ban por la residencia, es
decir, que los habitantes
de conjuntos habitacio-
nales adyacentes pudie-
ron haber conformado un
barrio o parcialidad, mu-
chas veces dominado por
una familia aristocratica.
Estas unidades tenfan
gran importancia en la
distribucién de recursos,
administracién de justi:
cia y recoleccién de tribu-
tos. También desempefia-
ban un papel relevante
en loconcerniente a la ac-
tividad ritual y a la reli-
gién en general, y poseian
sus dioses tutelares.
La sociedad maya clé-
sica estaba marcadamen-
te estratificada, El rango
mas alto correspondia a
a sus familiares més cerca-
nos. Haba un amplio grupo
de nobles de diferentes ran-
g08, que ocupaban cargos en
Ta administracién de los si-
tios mayores o eran los Se-
flores de sitios menores. Los
miembros de la clase noble
eran también sacerdotes, je-
fes guerreros y artistas. La
mayor parte de la poblacién
los reyes, que poseian el 70 Estela 12, de Piedras Negras, Gua-
rango de Ahau, asi como
temala,Dr eA ones ES Historia Popular de Guatemala ac ep ties
to. Se nombra, por ejemplo, al
‘0 al Gobernante B, de Tikal.
sisi, sobrenombres, se;
jominales; por ejemplo, Nariz
ee de Yaxchilén. Por otf
pertenecia a las clases bajas, conformadas
por agricultores, sirvientes y esclavos. Ese
segmento incluia también un conjunto am-
plio de artesanos, guerreros y comerciantes,
que posiblemente ocupaban una posicién in-
termedia en la escala social. Gran parte de
lo que se conoce sobre los estratos bajos dela
sociedad se deriva de analogias que prosen-
taban las sociedades del tiempo de la Con-
quista o mAs recientes, lo cual se ha comple-
mentado con la evidencia arqueolégica. En
contraste, las clases nobles se conocen me-
jor, gracias a los testimonios escritos en las
inscripciones del Perfodo Clasico.
Las inscripciones se refieren, especial-
mente, a los reyes principales, que ocupa-
ban el rango de Chul Ahau, que significa
Sefior sagrado. En general, este rango era
‘ocupado por varones, pero, én forma ocasio-
nal, también hubo mujeres en esa posicién.
El titulo evidencia el cardcter sagrado de la
monarquia maya. Ademés
de poder politico, a los reyes
se atribuian poderes sobre-
naturales, que los colocaban
como intermediarios entre
los dioses y los hombres. Se
conocen casos de lineas di-
ndsticas que trazaron su as-
cendencia muchas genera-
ciones atrds, que inclufan
lejanos antepasados divi-
nos. Muchos de los regis-
tros escrites en los monu-
mentos esculpidos estan de-
dicados a conmemorar la
participacién de los reyes
en eventos de naturaleza
ritual, que servian, asimis-
mo, para enfatizar sus cua-
lidades sobrenaturales y su
poder politico.
El drea del Rio Usuma-
cinta es rica en monumen-
tos que contienen referen-
cias a los nobles de rango
secundario, Los murales de
Bonampak, Chiapas, in-
cluyen una multitud de
cortesanos que participan
en batallas, danzas y otros
rituales en los que el Ch'ul Ahau es la
figura central. Muchos de dichos nobles
llevan el titulo Sahal, que los identifica
como Sefiores de sitios menores. La inte-
raccién entre el Ch’ul Ahau de los sitios
principales, y los jefes de sitios menores,
los Sahalob y otros nobles de rango infe-
rior al del Ch'ul Ahau, fue un componente
central en la politica del Periodo Clasico.
Hay algunos paralelos entre el sistema
politico maya elasico y el que prevalecia en
Yucatan en la época de la conquista espatio:
la, En ese tiempo, la Peninsula estaba divi-
dida en una serie de reinos auténomos, do-
minados por familias aristocrdticas. Estos
reinos eran gobernados por Sefiores deno-
minados Halach Uinic. Habia también jefes
locales de pueblos y aldeas, que recibfan el
titulo de Batab. Otros nobles ocupaban ear-
gos, como los de Ah Kulel (delegado del ba-
tab), Ah Cuch Kab (guardian o cabeza delistoria y organi
barrio), Holpop (vigilante), Tupil (funciona-
rio menor) y otros.
Las entidades politicas mayas
clasicas
Respecto de Yucatén, los documentos escri-
tos del siglo XVI proporcionan evidencia so-
bre la subdivisién del territorio en reinos in-
dependientes, los que fueron lamados “pro-
vineias” por los espafioles. Sin embargo, las
pruebas disponibles no permiten extender ese
patron, indiscriminadamente, al Periodo Clé-
sico. Para reconstruir la organizacién politi-
ca de las sociedades antiguas, los arquedlo-
g0s se basan en el estudio de los patrones de
asentamiento, que tratan de establecer la dis-
tribucién espacial de los grupos humanos.
Usualmente se asume que los sitios més gran-
des tuvieron mayor poder politico, y que pu-
dieron haber ejercido hegemonfa sobre sitios
menores. Esta suposicién es razonable, pero
quedan muchos cabos sueltos al examinar,
en forma detallada, los patrones de asenta-
miento de una regién determinada. Por ejem-
plo, {qué extensién territorial pudo haber
abarcado el drea de hegemonia politica de
cada sitio? ;Cuél era la naturaleza de dicha
hegemonta? {Se basaba en un control abso-
Tuto por parte de los Sefiores del sitio princi-
pal 0, més bien, en un poder nominal sobre
os gobernantes locales de los centros meno-
res? {Incluia el pago de tributos u otros servi-
cios por parte de los sitios menores?
Ademés de los estudios sobre los patro-
nes de asentamiento, el andlisis de los tex-
tos jeroglificos ha proporcionado una herra-
mienta de gran valor para el conocimiento
del sistema politico maya clésico. De parti-
cular importancia ha sido el estudio de los
“glifos emblema”. Actualmente se sabe que
éstos identificaban a los individuos como
miembros de familias gobernantes, aunque
con cierta frecuencia esos mismos simbolos
podian designar a las ciudades, asi como
algunas casas reales del Viejo Mundo toma-
ban el nombre de su ciudad de origen. Los
gobernantes de muchos sitios, grandes y pe-
guefios, a lo largo de las Tierras Bajas, usa-
ban sus propios glifos emblema, En ciertos
mee
Ba Seated. age OTT}
casos, como Yaxchiln, se utilizaban dos gli-
fos emblema, lo que sugiere que los Sefiores
de ese sitio se consideraban miembros de
dos familias importantes. También ocurria
que los Sefiores de dos o mds sitios compar-
tieran el mismo glifo-emblema, en cuyo caso
se supone que fueron miembros de la misma
familia o dinastia.
{Cual es la importancia de los glifos em-
blema en el estudio de la organizacién poli-
tica? Por algin tiempo prevalecié la idea de
que cada sitio con un glifo-emblema propio
pudo haber conformado una entidad politi-
ca independiente. Sin embargo, en afios re-
cientes se ha descubierto una compleja red
de alianzas que ligaba unos centros con
otros, de modo que los principales ejercian
diferentes grados de hegemonia sobre los
menores, Estas relaciones se mantenian por
medio de vinculos que inclufan una intrin-
cada urdimbre de alianzas matrimoniales,
71 Fragmento de un mural de Bonampak, con repre-
sentaciones de nobles en ol acto de vestirse para
una ceremonia,=
(as : eetifistoria Popular de Guatemala fy G yp
evento muy important
morado también en la Estela 31, de Tikal, y en la Estela
axactiin. No se sabe exactamente cual
jumeante y los Sefiores de Tikal, eho
Estela 31, ella fue importante respecto de Ia ent
aio 379. De gran interés es el hecho de que ni €
ci | Cielo oso, aparecen citados en el texto
‘mat S dedicada por un individuo de rango inferi
| Chul Ahau, quien se declaré, a sf Subordinado de Rana Humeante,
visitas de los Principales a maya como esencialmente sentan como grandes haza-
los centros menores y, posi-pacifica. Esta visién se ha fias individuales de los re-
blemente, la educaciéndelos desvanecido frente a un eti- yes y nobles. Ello sugiere una
principes de las casas reales mulo de evidencias que in- _situacién andloga a la “gue-
Frenores en las cortes de los cluyen representaciones ar-__rra florida’, que practicaban
Principales. Bn muchos ca-_tisticas de guerreros y cauti- los aztecas contra los tlax-
sos, talesrelaciones inclufan vos, registros escritos de vie- _caltecas, en la época de la
también el sometimiento mi- torias, y grandes muros yfo- _conquista espafiola. Esa gue-
litar y el pago de tributes. sos defensivos que existenen ra no era una campafia de
algunos sitios. Sinembargo, conquista, puesto que su
ho est del todo claro cuales “inico objetivo era el de ha-
fueron las funciones socia- cer prisioneros, que poste-
les de la guerra, su escala y _riormente eran destinados al
Se ha discutido mucho sobre su papel enla conformacién sacrificio ritual, Mientras
el papel de la guerra en la de los Estados mayas. mas alto era el rango del cau-
Sociedad maya clisica. Enla Las inscripeiones enfati- tivo, mayor era la honra de
primera parte de este siglo zan los aspectos rituales y su captor. Sin embargo, tan-
eristié una tendencia a mi- caballerescos del conflicto, to los aztecas como los ma-
himizar su importancia, yse en especial las capturas de yas practicaban la guerra
presentaba a la sociedad prisioneros, las que se pre- con otros propésites, como la“a. Historia y organizacién social
expansién territorial, el control de recursos
y la obtencién de tributos. En algunos ca-
sos, esto se hace evidente, en los sitios de-
rrotados, por la colocacién de monumentos
esculpidos dedicados a los vencedores. Un.
ejemplo muy conocido es la escalinata jero-
glifica de Naranjo, monumento en el cual
los Sefiores del sitio Caracol conmemora-
ron su victoria sobre el primero, en el afio
627 pe.
Modelos de organizacién politica
La informacién derivada del estudio de los
patrones de asentamiento y de las inscrip-
ciones ha permitido plantear varios modelos
sobre la organizacién politica del Periodo
Clasico. En esta seccién se analizan dos de
esos modelos: el de la “entidades politicas
andlogas” y el de los “Estados segmenta-
rio’, Ambos se basan, en parte, en observa
ciones arqueolégicas, histéricas y etnogréfi-
cas de las sociedades del Viejo Mundo, las
que permiten hacer esquemas comparativos
relativamente bien documentados.
Las entidades politicas andlogas son caci-
cazgos o Estados que presentan patrones muy
parecidos, o idénticos, en cuanto a organiza-
cién politica, creencias religiosas, artes, len-
guaje, escritura y otras caracteristicas socio-
culturales. Dichas entidades no estaban su-
bordinadas unas a otras, sino que mante-
nian un sistema de relaciones reciprocas, que
podian incluir intercambios comerciales,
alianzas de poder, rivalidades y conflictos.
En tal sistema, las entidades politicas veci-
nas tenian niveles similares de organizacién.
y de complejidad politicas. Los cambios en su
esquema social y las innovaciones cultura-
les ocurrian mas o menos simultaneamente,
por lo cual presentaban rasgos culturales
parecidos. Un buen ejemplo de este sistema
se presenta en las ciudades-estado griegas,
particularmente en la edad de bronce.
Muchas de las caracteristicas aludidas son
aplicables a la sociedad maya del Periodo
Clasico en las Tierras Bajas. Como se indicé
antes, se trataba de una serie de entidades
politicas con sus propias familias gobernan-
tes, ligadas por una red de alianzas y otras
Ee
relaciones polfticas, culturales y econémi-
cas. E] problema principal en cuanto a la
aplicacién de este modelo radica en las vas-
tas diferencias de escala que existian entre
las entidades politicas mayas. Aunque la
posesién de un glifo-emblema propio permi-
te identificarlas como centros auténomos, no
parece probable que sitios relativamente pe-
queiios, tales como Machaquilé 0 Bonam-
pak, hubieran tenido la categoria politica de
los centros mayores, como Tikal o Caracol.
De acuerdo con el modelo de los Estados
segmentarios, el poder y la riqueza de los
reyes eran limitados, y se encontraban re-
partidos de modo que los nobles subsidiarios
y los Sefiores de los centros menores ejer-
cian control auténomo sobre su area inme-
diata, mientras que mantenfan una lealtad
minima a los gobernantes centrales, Las fun-
ciones politicas, econémicas y judiciales de
todos los Sefiores, sin importar su rango,
eran esencialmente similares, Dichos Esta:
dos tendian a ser débiles-¢ inestables, pues
la lealtad de los Sefiores de rango inferior
podia cambiar. El control politico efectivo de
los reyes se circunscribfa a un niicleo estre-
cho, mientras que las periferias eran flexi-
bles y cambiantes. En éstas, el poder del rey
se reducia a una hegemonia ritual, De he-
cho, la base de la autoridad real era caris-
matica y ceremonial, antes que coercitiva.
En cualquiera de los dos sistemas, los
atributos personales del rey, como guerrero
e intermediario ante los poderes sobrenatu-
rales, jugaron un papel determinante para
la extension de su poder politico. El desplie-
gue de poder, por medio de actividades ritua-
Tes fastuosas, amplios programas de cons-
truccién y el mantenimiento de grandes cor-
tejos y familias, eran esenciales para afir-
mar y aumentar el poderio real, atrayendo
la lealtad y los tributos de la nobleza y de la
poblacién en general. En las ciudades que
servian como sedes del poder politico domi-
naban los templos y palacios monumentales,
que eran el marco para la actividad ritual y
cortesana.
El modelo de los Estados segmentarios
ofrece buenas respuestas en la indagacién
respecto de muchos aspectos de la organiza-
cién politica maya clésica, a la vez que abreRO et lpn Hone Popul Be Ginteala
nuevas interrogantes. Puede explicar la apa-
rente inestabilidad y la extension territorial
relativamente pequefia de las entidades po-
Iiticas, asf como el alto grado de elaboracién
de las artes monumentales centradas en las
figuras reales. Por otro lado, plantea pre-
guntas importantes sobre las funciones eco-
némicas y administrativas de los reyes y
Sefiores. Las actividades de esta indole se
reflejan, s6lo de modo tangencial, en el arte
y en las inseripeiones, por lo que la eviden-
cia con respecto a ellas es minima. Sin em-
argo, estd claro que el pago de tributos fue
un componente importante en la relacién
entre los reyes, los nobles de rango secunda-
rio y la poblacién, as{ como en las relaciones
entre unos sitios y otros.
Historia politica de los mayas
clasicos
Las inscripeiones proveen importantes indi-
caciones sobre los procesos politicos de la épo-
ca clasica en las Tierras Bajas, Los aspectos
formales de la escritura y del calendario, asf
como su proceso de desciframiento, se anali-
zarén en detalle en el Fascfeulo 9. Las si-
guientes paginas contienen un resumen de
Ta historia politica, documentada gracias a
lalectura de las inscripciones. Es pertinente
mencionar varios puntos importantes en re-
lacién a ellas. Algunos autores han cuestio-
nado la veracidad histérica de las inscripcio-
nes. Los textos labrados sobre las estelas y
otros monumentos, fueron encargados por
los propios reyes y estaban dedicados a glori-
ficarlos, presentdndolos como herederos en
lareas lineas dindsticas que muchas veces se
remontaban a los dioses, a grandes guerre-
105 0a ejecutores de actos ritwtales importan-
tes. No fueron hechos con propésitos de re-
gistro hist6rico propiamente dicho, aunque
es probable que existieran registros cronol6-
gicos y dindsticos mds sistematicos, escritos
en eédices que no se conocen en la actuali-
dad. Bs muy probable que el contenido de los
textos fuera manipulado para glorificar a los
reyes y, ciertamente no se registraron los
aspectos negativos de sus actuaciones. Los
textos jeroglificos no pueden considerarse
como veraces, sin un examen cuidadoso que
incluya el contraste de textos paralelos y el
apoyo de la evidencia arqueolégica.
Por otro lado, los resultados de muchos
esfuerzos interpretativos sugieren que, fue-
ra de los pasajes evidentemente miticos,
mucho del contenido de los textos puede con-
siderarse veraz. En algunos casos, ha sido
posible contrastar textos de dos sitios dife-
rentes, que se relacionan con el mismo asun-
to, sin encontrar inconsistencias significati-
vas. Mas importante atin es el hecho de que,
correctamente interpretados, los textos jero-
glificos ofrecen la posibilidad de acercarse a
Tas concepciones propias de los mayas clasi-
cos, en relacién con su historia y organiza-
cién sociopolitica. El cuadro nunca podré.
ser completo, porque no existen registros es-
critos para todos los sitios importantes a lo
largo del Periodo Cldsico. Los textos conoci-
dos, pertenecientes a muchos sitios, abarcan
periodos relativamente cortos, y varios lu-
gares importantes carecen completamente
de ellos, A lo cual debe agregarse la pérdida
de numerosas inscripciones, causada por los
efectos del tiempo y la mano del hombre. A
pesar de todo, los textos ofrecen una vision
muy amplia de la historia politica de los
mayas clasicos,
EI Clasico Temprano en Tikal
‘Tikal posee los monumentos mas antiguos,
fechados, con plena seguridad, en las Tierras
Bajas del norte, as{ como el mayor conjunto
de textos del Clasico Temprano. De hecho, se
piensa que Tikal sirvié como un foco de difu-
sidn de la practica de erigir estelas con ins-
cripciones, asi como de otros componentes de
la cultura clasica, a lo largo de las Tierras
Bajas, El monumento fechado, de mas anti-
giiedad, en dicha regidn, es la Estela 29 de
‘Tikal, que data del afio 292 nc. Esta estela
esté fragmentada, y no se sabe si tenia infor-
macién dindstica. Sin embargo, los registros
histéricos de Tikal se hacen mas conocidos en
el siglo subsiguiente. El primer rey, plena-
mente documentado, es el conocido como Na-
riz Rizada, quien ascendié al poder en el afio
379, y posiblemente murié en el 406 vc. Elee ter isis y ara
8 Aare SE
cuadro politico de Tikal, refe- _cripciones del sitio vecino de _fluencia teotihuacana en el
ridoa esa época, es muycom- Uaxactiin. Queda mucho por area maya, pero las investi-
plejo. No hay duda de que averiguar paraesclarecerlas gaciones han demostrado
NarizRizadaeraelrey,pues relaciones politicas entre que la presencia teotihuaca-
es el tinico que ostenté el ti. Nariz Rizada, Rana Hu- na en Tikal fue tanto o mds
tulo de Ch’ul Ahau de Tikal. meante y otros personajesde fuerte. Igual que en Kami-
Sin embargo, hay otros per- Tikal y Uaxactiin, en la épo- _naljuyd, en Tikal los edifi-
sonajes importantes en las ca aludida.
cios de estilo teotihuacano
inscripciones, incluyendo un La situacién se torna atin _ estan concentrados en cier-
Sefior conocido como Rana mas compleja al considerar _ tos sectores, especificamen-
Humeante, quien acompafié la influencia teotihuacana, te en el area de Mundo Per-
a Nariz Rizada en varios que se hizo sentir con
eventos relevantes, yqueen fuerza en Tikal duran.
algunos contextos pareciera te el Clasico Tempra-
haber tenido una posicién no. Anteriormente, se
més elevada que la del mis- pensaba que Kaminal-
mo rey. Rana Humeante fue _juyti habia sido el foco
citado también en las ins- principal de la in-
La'Tumba del Gobernante A,
de Tikal
EI Gobernante A, de Tikal, fue enterrado en una cé-
mara abovedada, que se construyé para este propési-
to en el lado este de la Plaza Mayor de Tikal, para lo
cual se demoli6 parcialmente un edificio antiguo que
se encontraba en ese lugar. Encima de la tumba se
levanté el Templo I, también conocido como Gran
Jaguar, sin duda el edificio més distintivo de Tikal.
La base de la cémara funeraria penetré en la roca
madre, que se acondicioné para formar una banca,
sobre la cual fue depositado el Gobernante A. Hay
evidencia de que el cadaver fue colocado sobre una
estera, y recubierto con pieles de tigre. Su ajuar fune-
rario era extremadamente rico. De su traje no queda
nada, pero cn cambio se preservaron numerosas jo-
yas de jade, las que inclufan un gran collar, formado
por 114 cuentas esféricas, el cual tiene un peso de
8.5 libras, También tenfa adomnos de concha, espinas
de raya, espejos de mosaico de pirita, un vaso de
mosaico de jade (Ilustracién 72), y 19 vasijas de
cerémica, incluyendo algunas muy finas. La ofrenda
més extraordinaria del entierro fue un depdsito de
huesos labrados con disefios incisos muy finos. Es-
tos incluyen figuras de cautivos, escenas de dioses
73 Vaso cilindrico procedente del En-
tietto 196, de Tikal, recubierto con
mosaicos de jade. Clasico Tardio.
‘Altura: 25 om.
dedicados a la pesca en canoas, y un conjunto extraordinario de textos jeroglificos.
‘Algunos de los huesos muestran al fallecido Gobernante A, navegando en una canoa
conducida por deidades, posiblemente en su trénsito hacia el mundo de los muertos, Los
textos dejan fuera de duda que el ocupante de la tumba era, en efecto, el Gobemante A.EP peat TTS vopula ae TccnTs
dido y en el Grupo 6C-XVI, en que hay gran-
des edificios con el perfil arquitecténico de
talud-tablero, tipico de Teotihuacan (véase
el Fasciculo 6). El marcador de juego de pe-
lota encontrado en el Grupo 6C-XVI (Ius-
tracién 72) y otras esculturas de la época,
presentan elementos iconograficos de origen
teotihuacano. La cerdmica depositada en las
tumbas también incluye formas e iconogra-
fia teotihuacanas.
Igual que en Kaminaljuyti y en la Costa
del Pacifico, algunos investigadores han in-
terpretado la influencia teotihuacana como
el resultado de la hegemonia politica de la
metrépoli mexicana, lo que se combina con
el establecimiento de una colonia teotihua-
cana en Tikal, y se llegé a pensar que Nariz
Rizada pudo ser originario de Teotihuacan
ode Kaminaljuya. Como se indicé en el Fas-
ciculo 6, los datos conocidos en la actualidad
sugieren que Teotihuacan no fue el centro
de un imperio tan extenso. Es probable que,
en efecto, pudieron haber existido grupos de
teotihuacanos residentes en Tikal, y que
mantuvieron relaciones con los mas altos
Sefiores, pero no hay prueba suficiente para
afirmar que pudieran haber ejercido el po-
der politico. A su vez, los Sefiores de Tikal
adoptaron elementos teotihuacanos, como
parte del despliegue artistico de edificios,
esculturas y ofrendas funerarias. Es proba-
ble que también se hubieran adoptado algu-
nos elementos religiosos introducidos por los
teotihuacanos. En todo caso, es dificil esti-
mar el papel que pudo haber jugado Teoti-
huacan en relaci6n con el gran auge de Tikal
en el Clasico Temprano. La influencia teoti-
huacana también se manifesté, aunque con
menor intensidad, en otros sitios, segtin lo
indican, principalmente, las ofrendas fune-
rarias y depésitos especiales en lugares como
Beean, Rio Azul y Copan.
Tikal mantuvo su preeminencia bajo el
reinado de los sucesores de Nariz Rizada.
En forma gradual, la costumbre de erigir
monumentos esculpidos con inscripciones se
extendié a otras partes del area maya. Ini-
cialmente se erigieron estelas en otros sitios
del noreste de Petén, tales como Uaxactiin,
Xulttin, El Zapote y Yaxhd. En 435 nc se
esculpié en Copan un monumento con una
inscripeién tipicamente maya, y durante el
siglo siguiente esta practica se extendié ala
mayor parte de las Tierras Bajas del sur. A
la vez, muchos otros centros experimenta-
ron un crecimiento acelerado.
‘Los reyes de Tikal sufrieron un serio re-
vés en el afio 562, cuando fueron derrotados
por los de Caracol, Belice. Este tiltimo sitio
experimenté un enorme crecimiento en la
parte media del Clésico, hasta convertirse en
uno de los mayores de las Tierras Bajas. En
contraste, Tikal pas6 por una época de apa-
rente depresién, la que duré més de un siglo.
Aeste periodo, aproximadamente entre 550
y 690 pe, se le conoce como el “hiato’, y se
caracteriz6 por la ausencia de monumentos
esculpidos en Tikal y algunos otros sitios.
Anteriormente, se pensaba que esta crisis
habia englobado a todos los sitios de las Tie-
rras Bajas, pero las investigaciones recien-
tes en Caracol han demostrado que el hiato
se produjo esencialmente en Tikal, y que pudo
ser e] resultado de la derrota de los gober-
nantes de este lugar. Posiblemente, como re-
percusién de la depresién del gran centro de
Tikal, algunos otros sitios también cesaron
su actividad monumental en aquel periodo.
Tikal, Calakmul y las alianzas del
Clasico Tardio
‘Tikal experimenté un resurgimiento duran-
te el Clasico Tardio, bajo el reinado del “Go-
bernante A”, cuyo nombre probablemente era
Hasaw Chaan Kawil. Este rey llegé al poder
en el 682 Dc, ya su muerte fue enterrado en
el Templo I, también conocido como el Gran
Jaguar (Recuadro pagina 121). Durante su
reinado se iniciaron nuevos programas de
construcciones masivas en Tikal, y el sitio
volvié a adquirir el papel preeminente que
habia tenido en el Clasico Temprano.
En todas las Tierras Bajas los registros
escritos son mucho mas completos para este
periodo, lo que permite reconstruir parcial-
mente la secuencia de eventos que llevaron
al resurgimiento de Tikal. E] andlisis con-
junto de los textos ha revelado una serie de
alianzas centradas en el gran sitio de Ca-
lakmul, ubicado en el sur de Campeche,México, Al igual que Tikal, Calakmul era
importante desde el Preclisico, y durante
el Periodo Clasico crecié hasta rivalizar con
Tikal. Los reyes de Calakmul establecieron
coaliciones que se extendieron por las Tie-
rras Bajas. La victoria de Caracol sobre
Tikal, en el afio 562, tuvo que ver con el
hecho de que el primero de estos centros
era un aliado de Calakmul. Posteriormen-
te, los reyes de este tiltimo lugar establecie-
ron buenas relaciones con los de Dos Pilas,
un sitio mucho mas pequefio, localizado en
la zona de Petexbatiin, al suroeste de Pe-
tén. Parece ser que la familia gobernante
en Dos Pilas era una rama de la familia de
‘Tikal, puesto que compartian el mismo gli-
fo-emblema. En 679, el Gobernante I de
Dos Pilas, derrot6 militarmente al padre del
Gobernante A, de Tikal. Esta victoria de
‘un sitio pequeiio so-
bre el més grande so-
lamente se explica
por la alianza que
mantenia el primero
con Calakmul. Una
hija del Gobernante |
I, de Dos Pilas, se
traslads al gran sitio
Naranjo, muy cerca-
noa Tikal, y estable-
cié alli una monar-
quia poderosa, la cual
obtuvo éxitos milita-
res contra Ucanal y
otros sitios vecinos.
Igual que Tikal, Na-
ranjo habia sido de-
rrotado antes por Ca-
racol, en 627 pc.
El resurgimiento de Tikal, bajo el Gober-
nante A, fue decisive por su victoria militar
del afio 695, contra el rey de Calakmul. Este
hecho parecié resarcir a los reyes de Tikal
de sus anteriores derrotas frente a Caracol y
ante sus propios parientes establecidos en
‘Dos Pilas. La renovada importancia de Tikal
se reflejé en un amplio programa de cons-
trucciones, que modificaron, de modo nota-
ble, el aspecto de la plaza central y otros
sectores. Varios de los grandes tempos, que
actualmente dominan el horizonte de Tikal,
Altar Q, de Copan, que en sus cuatro lados pre-
senta imagenes de 16 sucesores en el tron. En
este lado, los personajes controntados en el cen
‘ro son Yax Kuk’ Mo’, el fundador de ta dinastia, y
Yax Pas, el decimosexto sucesor.
SG Beets 57)
fueron erigidos durante el reinado del Go-
bernante B, quien ascendié al poder en ol
784 vc. Igual que su padre, el Gobernante B
fue un guerrero victorioso. En los afios 743-
744 triunfé contra Yaxha y Naranjo, lo que
fue glorificado en los dinteles del templo IV,
el mayor de Tikal. Las victorias guerreras
de estos reyes alteraron el balance de poder
en las Tierras Bajas, el que antes parecia
inclinarse marcadamente en favor de Ca-
lakmul y sus aliados.
La periferia sureste: Copan y
Quirigua
Copan estaba Jo suficientemente alejada de
los conflictos entre Tikal, Calakmul y sus alia-
dos, por lo cual no resulté directamente afec-
tada por ellos; sin em-
bargo, no dejé de te-
ner los suyos propios.
Las inscripciones de
Copan han revelado
detalles sobre una di-
nastia de 16 gober-
nantes, todos los cua-
les trazaban suorigen
de un fundador que
vivié en el Clasico
Temprano, y que res-
pondia al nombre Yax
Kuk’ Mo’. Extensas
investigaciones han
indicado que este an-
tepasado debié haber
sido un personaje his-
t6rico. Bajo sus suce-
sores, Copan se convirtié en un gran centro
politico, con muchos habitantes y de gran
pujanza artistiea, cuya area de influencia se
extendié hasta el valle del Motagua. E sitio
principal en esa regién era Quirigué, un cen-
tro mucho menor que Copan, el cual, no obs-
tante, se constituyé en un poder importante
en el Clasico Tardio. A principios de este pe-
riodo, Quirigua parece haber estado domina-
do por los reyes de Copén. Esta relacién se
transformé durante el reinado de 18 Conejo,
el decimotercer sucesor de la dinastia de Co-
pan, En 738 pe, 18 Conejo fue derrotado porer Beh.
el rey Cauae Cielo, de Quirigud. A partir de
esa fecha, este tiltimo centro erecié conside-
rablemente. Sus reyes se embarcaron en un
amplio programa de construccién de palacios
y templos, a la vez que erigieron una serie de
monumentos esculpidos, que se cuentan en-
tre los més notables del arte maya. Todo pa-
rece indicar que el auge de Quirigua fue re-
sultado de su constitucién como un centro de
poder politico auténomo, a partir de su victo-
tia sobre Copan. Sin embargo, al final del
Clasico, los dos sitios mejoraron sus relacio-
hes, pues los textos de Quirigud conmemora-
ton una ceremonia ejecutada por Yax Pas, el
decimosexto rey de Copan, en el afio 810 pc.
De mucho interés es la informacién dis-
ponible sobre los nobles de rango secunda-
rio, que existieron durante el reinado de Yax
Pas, Varios de estos nobles erigieron gran-
des palacios en Jas cercanfas del sitio, los
cuales adornaron con esculturas e inscrip-
ciones, Aunque reconocfan su subordinacién
al rey, el privilegio de dedicar monumentos
induce a pensar que los nobles de rango
secundario tenfan una cuota elevada del po-
der politico en la regién. En la acropolis de
Copan se erigié un edificio que ostentaba,
en su fachada, los nombres de una serie de
localidades a lo largo del valle. Se piensa
que ésta pudo ser una Casa del Consejo, 0
sea, un punto focal para la reunién de todos
los principales poderes en el valle de Copén.
eo
El Usumacinta: Piedras Negras y
Yaxchilan
La zona del Usumacinta estuvo dominada
parcialmente, a lo largo del Periodo Clasico,
por los grandes sitios de Piedras Negras y
Yaxchilén. Hay indicaciones de que los reyes
de Piedras Negras mantuvieron relacién es-
trecha con Calakmul, lo que puede haber
constituido un factor importante para elevar
su poderio en el drea. El Dintel 2, de Piedras
Negras, muestra a un grupo de principes pro-
cedentes de Yaxchilén, Lacanhé y Bonam-
pak, inclinados frente al Gobernante 2, de
Piedras Negras; y también a un principe lo-
cal. De acuerdo con el texto, la escena repre-
senta una ceremonia militar, ocurrida en 658
(aul Historia Popular de Guatem:
iia opal We Canes Mass
vo, en la que los principes recibieron tocados
de guerreros, de parte del Gobernante 2, lo
que pudiera indicar que este rey tenia una
posicién preeminente con respecto a la de
quienes gobernaban los otros centros del érea.
Sin embargo, este balance de poder parece
haber cambiado posteriormente. El Dintel 3,
de Piedras Negras, conmemora una visita a
Piedras Negras del rey Péjaro Jaguar, de
‘Yaxchilan, lo que ocurrié en 757 pc, durante
el reinado del Gobernante 4. Dicha visita
aparentemente justificé la posterior ascen-
sién al poder del Gobernante 7, quien apare-
ce, como un nifio, en Ia escena que se repro-
duce en el Dintel 3. La preeminencia de Pé-
jaro Jaguar en esta representacién, y el cre-
cimiento de su poderfo en la regién quizds se
debian al hecho de que el citado personaje
era hijo de una sefiora de Calakmul.
En los numerosos dinteles, escalinatas y
estelas de Yaxchildn, los reyes se represen-
taron como grandes guerreros, pero sus con-
quistas no se extendieron mucho mas all4
de la regién circundante en el valle medio
del Usumacinta. Otros sitios cercanos, tales
como Bonampak y Lacanhd, mantuvieron
dinastias propias. En Yaxchildn, como en
Piedras Negras y Bonampak, aparecen fre-
cuentemente otras figuras de nobles, mu-
chos de ellos con el rango de Sahal, partici-
pando en ceremoniales y escenas guerreras
que tienen como personaje central al Chul
Ahaw. Esto contrasta mucho, por ejemplo,
con las esculturas de Tikal y otros sitios del
noreste de Petén, que estén dedicadas ex-
clusivamente a glorificar al rey.
Palenque y la region occidental de
las Tierras Bajas
Palenque, en Chiapas, posee algunas de las
inscripciones mAs largas y més ricas, en cuan-
toa su significado esotérico, en el érea maya.
Este sitio experimenté un gran florecimiento
en el Clasico Tardfo, a partir del reinado de
Pacal (615-683 nc). Este fue el primer rey
documentado en textos contempordneos, pero
Jas inscripciones lo proclaman como el suce-
sor de una larga linea de antepasados, cuyo
origen se remonta miles de afios atrés. Aee
diferencia de los reyes de Co-
pan, que se representan como
descendientes de un antepa-
sado histérico, en el caso de
Palenque es necesario con-
cluir que la parte temprana
de la historia dindstica es de
naturaleza mitica. Pacal fue
enterrado en una cdmara
muy elaborada, construida en
el interior del Templo de las
Inscripciones, de Palenque.
Su hijo y sucesor, de nombre
Chan Bahlum, se embareé en
‘uno de los programas de cons-
truccién mas extraordinarios
del 4rea maya: los tres tem-
plos del Grupo de la Cruz, Es-
tos conmemoran el nacimien-
to de los tres dioses conocidos
como la Triada de Palenque, el cual ocurrié
cerca de la fecha base del calendario maya.
En el interior de cada templo se edificé una
pequefia cémara, adornada con esculturas e
inscripciones. Recientemente, la lectura de
Jos textos ha revelado que las pequefias cé-
maras son representaciones simbélicas de ba-
ios de vapor, en los que se atendian los par-
tos, en muchas sociedades mesoamericanas.
Por otro lado, Palenque no se mantuvo
ajeno a la tumultuosa politica de las Tie-
rras Bajas. Mucho del prestigio de Pacal
estuvo relacionado con sus victorias milita-
res sobre los sitios de Pomona y Yaxchilén.
Parece ser que en estas campaiias, Pacal
establecié lazos de amistad con el padre del
Gobernante A, de Tikal. Ademas, es proba-
ble que haya llegado a dominar los sitios
Tortuguero y Comalcalco, situados en el
extremo occidental de las Tierras Bajas.
Posteriormente, un hijo de Pacal fue derro-
tado y capturado por los reyes de Tonina,
otro centro principal localizado en las estri-
baciones de las montaias de Chiapas.
182m.
La expansion de Dos Pilas
y Aguateca
Los sitios Dos Pilas y Aguateca (Petén), en
Ja regién de Petexbatiin, ofrecen datos muy
toria y organizacién social.
75 Trono, de Piedras Negras, Petén. Dedicado en el afio 785, pertenecié
al Gobemante 7, el Ultimo conocido en este sitio, Alto: 123 cm; largo:
reveladores sobre la politica en las Tierras
Bajas, al final del Clasico, Como se indicé
antes, el Gobernante I, de Dos Pilas, era un
miembro de la familia real de Tikal, que
logr6 una gran victoria contra este sitio, en
alianza con Calakmul. El sitio Dos Pilas se
encuentra muy cerca de Tamarindito, que
parece haber sido originalmente el princi-
pal centro de poder en la zona. Sin embar-
g0, Dos Pilas se impuso, casi de inmediato,
sobre su vecino. Ademas de sus cualidades
guerreras, el crecimiento de Dos Pilas fue
el resultado de una diplomacia agresiva,
que se manifesté en su relacién con Calak-
mul y en una serie de alianzas matrimo-
niales con otros sitios. El Gobernante II era
hijo del Gobernante I y de una sefiora del
sitio ItzAn, situado al norte del Rio de La
Pasion. Una mujer de la dinastia de Dos
Pilas contrajo matrimonio con un rey de
Tamarindito, mientras que la hija del Go-
bernante I se establecié en un lugar tan
lejano como Naranjo, y jugé un papel domi-
nante en la politica de esa regidn (Recua-
dro pagina 126).
Seguramente, el mayor éxito militar de
los reyes de Dos Pilas fue la victoria que
consiguié el Gobernante III contra el sitio
El Ceibal, un centro antiguo e importante
localizado sobre el Rio de La Pasién. El Go-
bernante III tomé como esposa a una sefioraaT Se Ante ara Novela de Caatemata BEE MEO
La Sefiora de Dos Pilas
Uno de los personajes mas extraordina-
rios de la escena politica del Clasico
Tardio en las Tierras Bajas fue, sin duda,
la Sefiora de Dos Pilas. Inicialmente se
le dio el nombre de Sefiora de Tikal,
pero ahora se sabe que era hija del
Gobernante I, de Dos Pilas. No se co-
noce la fecha de su nacimiento, pero sf
que llegé al sitio Naranjo en el afio 682
De. Seis afios después, dio a luz a un
hijo, el que mAs tarde se convirtié en el
gobernante de Naranjo, conocido como
Ardilla Humeante. Se ignora quién fue
el padre de aquel personaje. Pudo haber
sido un gobernante de Naranjo, pero su
nombre nunca aparecié en los monu-
mentos esculpidos. En contraste, la Se-
fiora de Dos Pilas erigié varias estelas
en Naranjo, y es probable que ejerciera
el poder durante la nifiez de Ardilla
Humeante, quien ascendié al poder en
¢] afio 693, o sea, a la edad de 10 afios.
Después de esta fecha, el registro mo-
numental de Naranjo se caracteriza por
la dedicacién simulténea de dos estelas,
en cada fiesta de fin de perfodo: una
erigida por Ardilla Humeante y otra por
su madre. Esta poderosa dama no fue
olvidada en su tierra natal. Su muerte,
ocurrida en una fecha incierta, fue con-
memorada en el texto de una banca
jeroglifica de Dos Pilas,
del sitio de Cancuén (Petén), localizado a
mucha distancia, en la parte alta del citado
rio. Fue también el Gobernante II quien
convirtié el sitio de Aguateca en una especie
de capital gemela. Por su localizacién, éste
era naturalmente defendible, lo que debié
ser un factor importante para su desarrollo,
y con el tiempo parece haberse convertido
en el centro principal. En sus dltimos afios, .
Hi)
Porn s
ei
76 Estela 24, de Naranjo, erigida en el afio 702 oc.
Representa ala Seniora de Dos Pilas de pie sobre
Lun cautivo, posiblemente de Ucanal. El texto en
{os lados relata su llegada @ Naranjo, el nacimien:
to de Ardila Humeante, y varias cereronias
importantes.
tanto Aguateca como Dos Pilas fueron ro-
deados con murallas defensivas, que haceni omen —
BE Wiscria y organlaacibs toca. SEG Milt THF;
evidente la situacién violenta que se vivia
en la regién en el final del Clasico Tardfo.
El sureste de Petén
En la regién de las Montafias Mayas se de-
sarrollé tn conjunto importante de entida
des polfticas. Desafortunadamente, se cono-
cen pocos textos de esta regién, por lo que no
es posible reconstruir, en forma detallada,
su historia polftica, Sin embargo, es proba-
ble que hubieran participado en el sistema
de alianzas politicas, centrado en Tikal y
Calakmul, pues una estela del sitio Ixtutz
(Petén), conmemora un ritual ejecutado por
un gobernante local, en presencia del rey de
Dos Pilas. También existen evidencias so-
bre las rivalidades y alianzas entre los sitios
de la zona. Los textos sugieren una coali-
cién entre los sitios Ucanal y Sacul (Petén),
y se conocen referencias a guerras protago-
nizadas por los reyes de Ixkén, contra am-
bos sitios en los afios 779-780 pc. Ixktn y
Sacul mejoraron sus relaciones después de
estas guerras, a juzgar por la Estela 1, de
Ixktin, una de las mayores del area maya, la
cual representa a los Sefiores de ambos cen-
tros en condiciones de igualdad.
Sumario
Sélo en los tiltimos afios se ha empezado a
analizar el conjunto de las relaciones politi-
cas entre los sitios de las Tierras Bajas. De
tal andlisis comienza a emerger un cuadro
muy complejo de relaciones entre las casas
gobernantes de los centros principales. Las
alianzas matrimoniales, guerras, visitas rea-
Jes y otros tipos de contactos entre los sitios
empiezan a entenderse como componentes
de un cuadro amplio de intereses contra.
puestos, Los sitios de Tikal y Calakmul se
perfilan como ejes principales de aquel sis-
tema de relaciones politicas, Al mismo tiem-
po, se abren nuevas interrogantes, como las
siguientes: {Cudl era la naturaleza de las
relaciones entre los grandes centros y sus
aliados? {Hasta qué punto Tikal y Calak-
mul controlaron la administracién interna
de los sitios aliados? {Habia algin flujo de
tributos desde sitios como Caracol y Dos Pi-
las hacia Calakmul?
En el pasado, algunos autores propusie-
ron la existencia de grandes Estados territo.
riales, centrados en sitios como Tikal, Ca-
lakmul, Copan, Yaxchiln, Palenque, y qui-
zAs otros, A la luz de la evidencia disponible
actualmente, no parece probable que dichos
sitios hayan sido capitales de Estados terri-
toriales muy extensos. Su esfera de control
directo debié haberse limitado a los sitios
cireunvecinos, mientras que sus relaciones
con otros més lejanos, mas bien parecen si-
tuarse en el terreno de la hegemonfa ritual
y de las uniones guerreras. Sin embargo, es
posible que las relaciones con algunos cen-
tros aliados hubieran sido asimétricas, en
cuyo caso las capitales principales pulieron
haber influido significativamente on la poli-
tica local, e incluso requerir tributos.
Recomendacién de lecturas
En este fascfculo, ademas de la informacién
contenida en el Tomo I de la Historia Gene-
ral de Guatemala, se han utilizado datos
contenidos en los articulos “Evidence for Ma-
cro-Political Organization Amongst Classic
Maya Lowland States”, por Simon Martin y
Nikoli Grube (manuscrito); “Palenque in the
Maya World”, por Nikolai Grube (manuscri-
to); “Symbolic Sweatbaths of the Maya: Ar-
chitectural Meaning in the Cross Group at
Palenque, Mexico”, por Stephen D. Houston
(Latin American Antiquity 7:132- 151, 1996);
“The Splendid Tomb of Temple I at Tikal,
Guatemala”, por Aubrey 8. Trik (Expedition
6(1):2-18, 1963). Se han utilizado, asimismo,
los libros Hieroglyphs and History at Dos
Pilas: Dynastic Politics of the Classie Maya,
por Stephen D. Houston (University of Texas
Press, Austin 1993); A Forest of Kings: The
Uniold Story of the Ancient Maya, por Lin-
da Schele y David Freidel (William Morrow,
New York 1990); Tikal Report N° 14: Excava.
tions in the Great Plaza, North Terrace and
North Acropolis of Tikal, por William R. Coe
(University Museum, University of Pennsyl-
vania, 1990).EPOCA PRECOLOMBINA
1
10
u
12
13
ADELANTE GUATEMALA
jSIGAMOS CRECTENDO JUNTOS!
El medio fisico y el origen
del nombre Guatemala
Mesoamérica y el area maya
Los primeros habitantes: de la
recolecci6n a la agricultura
Los seftorios preclasicos del
Altiplano y la Costa Sur
Los origenes de la civilizacion
maya de las Tierras Bajas
El Clasico Temprano en el
Altiplano y la Costa Sur
Cotzumalguapa y el Clisico Tardio
en el Altiplano y la Costa Sur
Historia y organizaci6n social
de los mayas clasicos
Calendario, escritura y religion
de los mayas clasicos
Arquitectura y artes de los mayas
clasicos
Economia, politica y el “colapso”
del Periodo Clasico
Politica y sociedad durante el
Postclasico Temprano
Sociedad, economia y cultura
durante el Postclasico Tardio
“4
Bashir