pusieron a charlar. Despus de una hora de animada conversacin, el joven, de forma inesperada, le confes una pena que llevaba muy dentro del corazn.
Estamos aqu, riendo y pasando un rato
agradable Seguro que usted piensa que soy un hombre feliz, pero las apariencias engaan: mi vida es un desastre y me siento muy desdichado.
El anciano le mir fijamente.
Y por qu no eres feliz? Eres un chico
guapo, ests sano, y gracias a tu trabajo en el campo siempre tienes comida que llevarte a la boca No te parecen suficientes motivos para sentirte dichoso? El campesino, con los ojos llorosos, se sincer.
Mire qu pinta tengo! Mi ropa es vieja
y a pesar de que trabajo quince horas diarias slo puedo permitirme