Nombre: Jean Carlos Rugel

El internet y las Relaciones Humanas

Si bien es cierto que el mundo intercomunicado abastece de muchas oportunidades a la
sociedad hoy en da, esa sociedad es limitada mientras que la cantidad de informacin
que debe acarrear es ilimitada y a veces insostenible y muchas veces lo nico que logra
es abrumar y ahogar a los individuos.
Por otro lado, no todos tienen las mismas oportunidades de acceso a las tecnologas que
ofrece el mundo intercomunicado, sino slo los privilegiados,
De esta forma, se hace hincapi a una sociedad ms individual y en s ms egosta, se
olvida que estamos inmersos en un todo que implica relaciones humanas y no redes
de relaciones - digitalizadas, Un claro ejemplo de este nuevo tipo de relaciones
digitales que estamos llevando con la gente que nos rodea, es el correo electrnico o e-
mail. Hace aos que se dej atrs la costumbre de enviar cartas escritas y con ello la
emocin del mero hecho de romper el papel para ver qu deca el escrito. Ahora con suerte
nos llega un impreso con la cuenta del agua. A eso me refiero con relaciones ms
despersonalizadas, ms digitales.
El contacto entre las personas se ha perdido pues lo que antes era una reunin de amigos
en un parque o una plaza para comentar los sucesos de la semana, se ha convertido en un
grupo de gente conectada a travs de un servidor, de una pantalla y un teclado, es
totalmente impersonal, ya que por mucho que sean tus amigos los que estn al otro lado,
tu, tan slo ves una consecucin de letras. De este punto a perder totalmente el contacto
con el gnero humano no hay tanto, ya que si no pasas tiempo con las personas no
aprendes a tratarlas y a ser sociable con las personas de tu alrededor.
Afecta sobre todo a los ms jvenes, a los adolescentes, porque las personas mayores son
ms rutinarias, ms vivenciales.
Hoy da, los muchachos viven en la interactividad con los medios privilegiados, es decir:
con la Internet y la telefona celular, los cuales estn destinados a convertirse en. Un
mundo con tantas opciones da a sus habitantes la oportunidad de escoger entre las dos
caras de la moneda, siempre con el riesgo a elegir mal y equivocarse. Y este equivocarse
puede incluso pasar a llevar los valores que desde pequeos nos han inculcado. Es el
momento de recordar que en esta nueva era, las comunidades de intereses comunes van
a progresar siempre y cuando se mantengan esos intereses