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CAS. N° 1608-2007 ICA.

Divorcio por Causal. Lima, doce de diciembre del dos mil siete.- LA SALA CIVIL
TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPUBLICA;
vista la causa número mil seiscientos ocho - dos mil siete, en Audiencia Pública
de la fecha, y producida la votación con arreglo a ley, emite la siguiente
sentencia: MATERIA DEL RECURSO: Se trata de los recursos de casación
interpuestos por Rosa Esther Zambrano Vigo, mediante escrito de .fojas
ochocientos trece, y por Felipe Anibal Casavilca Rubio, mediante escrito de
fojas ochocientos veintitrés, contra la sentencia de vista emitida por la Segunda
Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de lea, de fojas ochocientos seis, su
fecha treinta y uno de enero del dos mil seis, que confirma la sentencia apelada
de fojas seiscientos treinta que declara infundada la tacha formulada contra las
'constataciones policiales, improcedente la tacha contra la declaración
testimonial de Masyr Esquivel Gonzáles, fundada la demanda de divorcio por
causal de abandono injustificado del hogar conyugal por más de dos años
continuos, careciendo de objeto pronunciarse sobre la pretensión subordinada
de divorcio por la causal de separación de hecho y, en consecuencia, declara
disuelto el vínculo matrimonial contraído entre las partes el seis de mayo de mil
novecientos cincuenta y nueve ante la Municipalidad Provincial de Ascope,
departamento de La Libertad y por fenecida la sociedad de gananciales;
asimismo, declara infundada la pretensión accesoria de cese de la obligación
alimentaria, e improcedente la pretensión accesoria de separación de bienes
gananciales, dejándose a salvo el derecho del actor para que haga valer dicha
pretensión con arreglo a ley, ordenándose al demandante que continúe
otorgando a la demandada la pensión de alimentos establecida en el
expediente cinco mil seiscientos noventa y ocho - noventa y nueve;
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Que, ambos recursos de 'casación fueron
declarados procedentes por resoluciones del dos 'de agosto del dos mil siete,
por las causales previstas en el inciso 'tercero del artículo trescientos ochenta y
seis del Código Procesal Civil, en virtud de lo cual los recurrentes denuncian:
En el recurso de casación presentado por Rosa Esther Zambrano Vigo: I) la
contravención de las normas que garantizan el derecho a un debido proceso,
pues sostiene que el Colegiado Superior incurre en las siguientes
transgresiones procesales: a) Se ha desnaturalizado el proceso al admitirse
como petitorio de la demanda el divorcio por la causal de separación de hecho,
causal que recién fue introducida en nuestro ordenamiento civil el ocho de julio
del dos mil uno mediante la Ley veintisiete mil cuatrocientos noventa y cinco,
cuyo cumplimiento era juridicamente imposible ya que los dos años debían
computarse a partir de su vigencia y no de forma retroactiva; b) Se acumularon
pretensiones que eran contrarias entre sí, por lo que la demanda debió ser
declarada improcedente al amparo del inciso sétimo del artículo cuatrocientos
veintisiete del antes citado Código Procesal; c) No se valoraron las pruebas
ofrecidas por su parte, las cuales acreditan que jamás hizo abandono
injustificado del hogar conyugal, siendo que las cartas notariales no pueden
interpretarse como elementos que demuestran el supuesto abandono; II) la
infracción de las formas esenciales para la eficacia y validez de los actos
procesales, por cuanto las sentencias de mérito no se pronuncian sobre el
punto controvertido fijado en la audiencia, consistente en la separación de
hecho de los cónyuges, en cuyo caso quedaba subsistente el vínculo
matrimonial; tampoco se pronuncia sobre el punto controvertido referido a la
disolución de la sociedad de gananciales, siendo que la ,sentencia se
pronuncia sobre la separación de los bienes gananciales, figura totalmente
diferente a la fijada como punto controvertido; En el recurso de casación
presentado por Felipe Aníbal Casavilca Rubio: la contravención de normas que
garantizan el derecho a un debido proceso. pues el Colegiado Superior incurre
en las siguientes transgresiones procesales: a) el Juez no ha tenido en cuenta
que la pretensión de cese de la obligación alimenticia ha sido demandada en
forma accesoria, en consecuencia, al ampararse la pretensión principal, la
accesoria debió seguir su misma suerte, tal como lo dispone el articulo ochenta
y siete del Código Procesal Civil; b) los jueces debieron disponer el cese
inmediato de la obligación alimentaria entre marido y mujer, toda vez que se
encuentra probado en autos que el recurrente ha sido el cónyuge ofendido o
perjudicado, y además tiene a su cargo al hijo menor que sufre de
esquizofrenia paranoide; y, CONSIDERANDO: Primero.- Que, mediante
escrito de fojas sesenta y siete subsanado a fojas noventa y nueve, Felipe
Aníbal Casavilca Rubio interpuso demanda a fin de que el órgano jurisdiccional:
I) declare disuelto el vínculo matrimonial contraído con la demandada Rosa
Esther Zambrano Vigo, por la causal de abandono injustificado de la casa
conyugal por más de dos años continuos; II) subordinadamente, declare
disuelto el vinculo matrimonial por la causal de separación de hecho de los
cónyuges por más de dos años continuos; III) accesoriamente, ordene el cese
de la obligación alimenticia entre el marido y la mujer, derivada del proceso
seguido entre las mismas partes por ante el Cuarto Juzgado de Paz Letrado de
Barranco y Miraflores, Expediente número cinco mil seiscientos noventa y ocho
- noventa y nueve; y, IV) accesoriamente, declare el fin de la sociedad de
gananciales y la subsecuente separación de los bienes conyugales en un
porcentaje del cincuenta por ciento para cada una de las partes, previo
inventario valorizado de los bienes; Segundo.- Que, como se puede apreciar
en el apartado "Materia del Recurso", las instancias de mérito han amparado la
demanda de divorcio por la causal de abandono injustificado del hogar
conyugal por más de dos años, sin pronunciarse sobre la pretensión
subordinada de divorcio por la causal de separación de hecho (al haber sido
amparada la pretensión principal), 'infundada la pretensión accesoria de cese
de la obligación alimentaria, ordenando que el actor continúe acudiendo con la
prestación establecida en un proceso distinto al presente, e improcedente la
pretensión accesoria de separación de bienes gananciales, por cuanto: i) De la
revisión de la demanda de alimentos se aprecia, • que la misma data del doce
de octubre de mil novecientos noventa y nueve, y la entonces demandante (hoy
demandada), Rosa Esther Zambrano Vigo señaló como su domicilio real el
ubicado en la Avenida Arequipa número cuatro mil seiscientos diez
departamento trescientos cuatro del distrito de Miraflores, en Lima; siendo que
en la Audiencia de Saneamiento, Conciliación, Pruebas y Sentencia al
responder la demandante a la pregunta "Diga Usted que es cierto que desde
hace tres años vive en el domicilio de la Avenida Arequipa del Distrito de
Miraflores..,.", a través de su representante legal dijo: "Si es verdad", ii) Con los
documentos que se adjuntan a la presente demanda, el demandante acredita
tener como domicilio habitual el ubicado en la Calle Begonias número
doscientos cuatro, Urbanización San Isidro, loa, en el que reside junto a su hijo
Felipe Aníbal Alexandro, afrontando cargas de la sociedad conyugal y
asumiendo él solo las obligaciones inherentes al mantenimiento y
administración de los bienes de dicha sociedad; iii) Ello se encuentra
corroborado con las Cartas Notariales de fojas cinco y nueve remitidas por la
misma demandada al actor, en las que solicita la división de los bienes
gananciales, así como en la declaración brindada en la Audiencia de Pruebas
cuya acta obra a fojas trescientos treinta y cuatro, pues pese a tener
conocimiento de que el demandante sufre de hipertensión arterial y de que su
hijo se encontraba delicado de salud y bajo tratamiento (por sufrir de
esquizofrenia), la demandada se retiró del hogar conyugal desligándose de sus
obligaciones establecidas en el artículo doscientos ochenta y ocho del Código
Civil; iv) Las constataciones policiales de fojas ciento treinta y nueve y ciento
cuarenta y uno, ofrecidas por la demandada como prueba que justificaría su
alejamiento (por presuntos maltratos físicos); además de ser declaraciones de,
carácter unilateral, se advierte que son de fechas doce de febrero de mil
novecientos noventa y ocho y el trece de marzo de mil novecientos noventa y
siete, es decir, son posteriores al alejamiento del hogar conyugal realizado por
la demandada, el cual se ha determinado como producido en el mes de marzo
de rnil novecientos noventa y seis; v) En cuanto e la pretensión subordinada:
carece de objeto emitir pronunciamiento respecto de la misma, al haberse
amparado la pretensión principal de divorcio por la causal de abandono
injustificado del hogar conyugal, de conformidad con el primer párrafo del
artículo ochenta y siete del acotado Código Procesal; vi) En cuanto a la
pretensión accesoria de cese de la obligación alimentaria, se advierte que, en
aplicación del artículo trescientos cincuenta primer párrafo del Código Civil, por
el divorcio cesa la obligación alimenticia entre marido y mujer, sin embargo ha
dé tenerse en consideración que conforme al artículo trescientos cuarenta y
dos del mismo Código, °el Juez señala en la sentencia la pensión alimenticia...
así como la que el marido debe pagar a la mujer o viceversa", este último
artículo debe concordarse con el articulo trescientos cincuenta y cinco del
Código Civil, entendiéndose de esta manera que resulta facultad del Juzgador
el señalar o no una pensión alimenticia, o mantener la ya fijada de ser
necesario, para cuyo efecto este Despacho toma en consideración la
participación, colaboración y dedicación (a decir del propio actor en su carta de
fojas seis) de la demandada, en el desenvolvimiento y progreso de la sociedad
conyugal, así como también su avanzada edad, por lo que no debe ser
desamparada; y atendiendo a que en autos obran copias del proceso de
alimentos seguido entre las mismas partes, deviene en infundada esta
pretensión; vii) En cuanto a la pretensión accesoria referida a la separación de
bienes gananciales, la misma resulta improcedente en el presente caso, pues
como consecuencia del divorcio se declara fenecida la sociedad de
gananciales, y de conformidad con el artículo trescientos diecinueve del Código
Civil se • considera que el fenecimiento de la sociedad de gananciales se
produce desde la fecha de la separación, y a efecto de realizar la separación
de bienes las partes tienen expedito su derecho para hacerlo con arreglo a ley;
Tercero.- Que, en cuanto al recurso de casación interpuesto por Rosa Esther
Zambrano Vigo, aquella sostiene que el presente proceso se ha
desnaturalizado al admitirse una demanda sobre la base de una causal que
aún no se había configurado a la fecha de interposición de la demanda, nos
referimos en este caso a la causal de separación de hecho por más de dos
años, introducida a nuestro ordenamiento civil mediante la Ley veintisiete mil
cuatrocientos noventa y cinco. Es preciso referir al respecto que este presunto
vicio procesal no fue alegado por la demandada en la primera oportunidad que
tuvo para hacerlo, en este caso, al presentar su escrito de contestación' de la
demanda el cual obra a fojas ciento cincuenta; por el contrario, aquella señaló
-respecto de dicha causal de divorcio-que no procedía su amparo por no
encontrarse al día el actor en el pago de sus- obligaciones alimentarias. Por lo
demás, es claro que la demandada no niega que la causal de separación de
hecho regulada por la Ley veintisiete mil cuatrocientos noventa y cinco
estuviera vigente en la época en que se interpuso la demanda, sin embargo
precisa que sólo procede ser alegada como causal de divorcio, únicamente en
el.caso de que hubieran transcurrido dos años desde su entrada en vigencia,
pues de lo contrario esto significaría aplicar la ley de forma retroactiva; no
obstante aquella interpretación, no debe entenderse que el cómputo de los
años de separación entre los cónyuges, como producto de la aplicación
inmediata de la Ley veintisiete mil cuatrocientos noventa y cinco, pueda dar
lugar a que se considere que se ha aplicado retroactivamente, pues dicho plazo
constituye sólo un parámetro mínimo fijado por la ley para determinar la
relevancia de la separación física; por lo tanto, es irrelevante cuestionar si la
separación de hecho tuvo lugar antes o durante la vigencia de la Ley antes
mencionada, la que sólo regula el divorcio como ' consecuencia de esa
separación; de tal suerte que dicho cómputo no contradice el principio de
irretroactividad de la Ley. En conclusión, el divorcio por la causal de separación
de hecho podía ser alegado como pretensión desde el momento mismo de su
entrada en vigencia, sin que sea necesario que previamente transcurrieran dos
años, pues la ley se aplica a las consecuencias de las relaciones y situaciones
jurídicas existentes, según lo informa el artículo tercero del Titulo Preliminar del
Código Civil; razón por la cual la causal procesal referida en el acápite a) del
punto I) debe ser desestimada; Cuarto.- Que, asimismo, la demandada
sostiene que existe en autos una indebida acumulación de pretensiones, ya
que aquellas son contrarias entre sí; pero no precisa con claridad de qué forma
se configura la -contradicción que alega, toda vez que tanto la causal de
abandono injustificado del hogar conyugal como la de separación de hecho de
los cónyuges, guardan relación estrecha. para ser acumuladas como
pretensiones subordinadas, pues ambas importan el alejamiento físico entre el
marido y la esposa por un determinado periodo de tiempo, siendo que en el
primer caso se analiza principalmente el aspecto subjetivo, esto es, el ánimo
deliberado de uno de los cónyuges (propiamente del cónyuge emplazado) de
poner fin a la relación conyugal, mientras que en la segunda causal, tal aspecto
subjetivo no resulta relevante para amparar la demanda sino sólo el aspecto
temporal, salvo para determinar cuál es el cónyuge perjudicado con la
separación. Sea por una u otra vía, el divorcio tiene por objeto poner fin a la
sociedad de gananciales y el cese de las obligaciones habidas entre los
cónyuges, entre otros, por lo que no se da la figura de la acumulación indebida
de pretensiones que se alega, razón por la cual la causal procesal descrita en
el acápite b) del punto I) también debe desestimarse, Quinto.- Que, la
demandada igualmente sostiene que no se han valorado las pruebas ofrecidas
por ella, las cuales acreditan que no hizo abandono injustificado de la casa
conyugal; sin embargo, las únicas pruebas destinadas a justificar su
alejamiento consisten en las dos constancias policiales que obran a fojas ciento
treinta y nueve y ciento cuarenta y uno, las cuales sí han sido valoradas por
las instancias de mérito, considerándolas insuficientes para acreditar sus
afirmaciones, no sólo por ser documentos de carácter unilateral, sino por ser
muy posteriores a la fecha en que la demandada abandonó el hogar,
sustrayéndose de sus deberes como madre y esposa. Las cartas notariales de
fojas cinco y nueve reafirman el resquebrajamiento de la sociedad conyugal,
pues acreditan que ya no existía comunicación verbal entre los esposos ni
intención de la demandada de continuar con la vida en común, sino por el
contrario de proceder a la inminente disolución de la sociedad de gananciales y
la subsecuente división de los bienes; razón por la cual la causal procesal
descrita en el acápite c) del punto I) resulta infundada; Sexto.- Que, respecto a
los puntos controvertidos fijados en la Audiencia de Conciliación de fojas
doscientos veintiséis, se advierte que aquellos fueron: el divorcio por la causal
de abandono injustificado y la separación de hecho de los -cónyuges; se de el
cese de la obligación alimentaria; se declare disuelto el vínculo de la sociedad
de gananciales; se declare fundada la presente demanda (sic). La demandada
sostiene que existe infracción de las formas esenciales para la eficacia y
validez de los actos procesales porque las instancias de mérito no se han
pronunciado sobre la separación de hecho de los• cónyuges; sin embargo, '
aún cuando al fijar los puntos controvertidos no se hubiera establecido con
precisión que aquella causal de divorcio era subordinada, es decir, que en caso
de que no sea amparada la pretensión principal (de divorcio por la causal de
abandono injustificado dél hogar conyugal), recién el juez podría pronunciarse
sobre ella; tal situación no puede dar .lugar a anular lo actuado, más aún si la
acumulación subordinada se desprende nítidamente del texto de la demanda,
por lo que el error incurrido por el órgano jurisdiccional al fijar los puntos
controvertidos no puede perjudicar al demandante. De otro lado, que con
respecto a la presunta omisión cometida por las instancias de mérito al no
pronunciarse sobre la disolución de la sociedad de gananciales, se advierte
que el vicio que se alega es inexistente, ya que el punto controvertido fijado es
en realidad el de la disolución del 'vínculo" de la sociedad de gananciales, que
no es otro que el vínculo matrimonial, aspecto que sí ha merecido
pronunciamiento de parte del órgano jurisdiccional, Tazón por la cual la última
causal procesal descrita en el punto II) también debe ser desestimada;
Sétimo.- Que, en conclusión, de los autos se advierte que no se han
contravenido normas que garantizan el derecho a un debido proceso, ni
infringido las formas esenciales para la eficacia y validez de los actos
procesales, tal como estima la emplazada, en razón a que la decisión tomada
por las instancias de mérito es congruente con la pretensión y con los medios
de defensa esgrimidos por las partes, así como se han valorado en forma
conjunta y razonada las pruebas aportadas al proceso; Octavo.- Que, en
cuanto al recurso de casación interpuesto por Felipe Aníbal Casavilca Rubio,
aquél cuestiona básicamente el derecho alimentario que se ha declarado
subsistente a favor de su cónyuge. El actor sostiene que por tratarse de una
pretensión accesoria el cese de la obligación alimentaria, ésta debió seguir
necesariamente la suerte del principal y que, por lo tanto, también debió ser
amparada; tal razonamiento sin embargo no resulta ajustado a derecho, ya que
el juez no se encuentra en la obligación de amparar otras pretensiones
acumuladas sólo por el hecho de tener carácter accesorio; sino por el contrario,
está facultado a desestimarlas si advierte que las mismas resultan inviables o
no pueden prosperar. En el caso concreto, la facultad de los Magistrados de
pronunciarse sobre la subsistencia o no del régimen alimentario se apoya en
los alcances del articulo trescientos cincuenta y cinco del Código Civil, cuya
aplicación y pertinencia no ha sido cuestionada por el demandante a través de
alguna de las causales materiales. Por lo demás, debe tenerse en cuenta que
los alimentos a favor de la cónyuge demandada han sido fijados por el Cuarto
Juzgado de Paz Letrado de Barranco y Miraflores, expediente número cinco mil
seiscientos noventa y ocho - noventa y nueve, y hasta que no exista sentencia
recaída en un proceso específico que determine la extinción de la obligación
alimentaria, la pretensión invocada con el fin de que se ordene el cese de la
citada prestación no corresponde ser amparada en este proceso de divorcio;
por lo que debe dejarse a salvo el derecho del actor para que lo haga valer en
la vía que estime pertinente, teniendo en cuenta que las decisiones emitidas en
materia de alimentos no constituyen cosa juzgada; razón por la cual, las
denuncias procesales descritas en su recurso de casación (acápites a y b),
tampoco merecen ser atendidas; Noveno.- Que, en conclusión, las instancias
de mérito han fundamentado acerca del cese de la obligación alimentaria
existente entre las partes, razón por la cual no se advierte que haya
contravención alguna a los elementos que contiene el debido proceso;
Décimo.- Que, siendo así, al no configurarse las causales procesales
denunciadas, el recurso de casación debe desestimarse y proceder conforme a
lo dispuesto en los artículos trescientos noventa y siete, trescientos noventa y
ocho y trescientos noventa y nueve del Código Procesal Civil; por estas
consideraciones: declararon INFUNDADOS los recursos de casación
interpuestos por Rosa Esther Zambrano Vigo, mediante escrito de fojas
ochocientos trece, y por Felipe Aníbal Casavilca Rubio, mediante escrito de
fojas ochocientos veintitrés; en consecuencia, NO CASARON la sentencia de
vista de fojas ochocientos seis, su fecha treinta y uno de enero del dos mil seis;
CONDENARON a los recurrentes al pago de las costas y costos originados por
la tramitación del presente recurso, así como al pago de dos Unidades de
Referencia Procesal por cada uno de ellos; DISPUSIERON se publique la
presente resolución en el Diario Oficial El Peruano; en los seguidos por Felipe
Aníbal Casavilca Rubio contra Rosa Esther Zambrano Vigo y otro, sobre
divorcio por causal y otros; y los devolvieron; interviniendo como Vocal Ponente
el señor Ticona Postigo.- SS. TICONA POSTIGO, SOUS ESPINOZA,
PALOMINO GARCIA, CASTANEDA SERRANO, MIRANDA MOLINA C-277703-
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