Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
CONSAGRACIÓN
A MARÍA
No es solamente un
acto de donación
total,
es una vida,
un estado de unión
con María
La plenitud de nuestra perfección consiste en asemejarnos, vivir
unidos y consagrados a Jesucristo. Por consiguiente, la más
perfecta de todas las prácticas espirituales es, sin duda alguna,
la que nos asemeja, une y consagra más perfectamente a
Jesucristo.
Ahora bien, María es la creatura más semejante a Jesucristo. Por
consiguiente, la práctica o devoción que mejor nos consagra y
hace semejantes a Nuestro Señor es la consagración a su
santísima Madre. Y cuanto más te consagres a María, tanto más
te unirás a Jesucristo.
La perfecta consagración a Jesucristo es, por lo mismo, una
perfecta y total consagración de sí mismo a la Santísima Virgen.
Esta consagración consiste -en otras palabras- en una perfecta
renovación de los votos y promesas bautismales.
Antes del Bautismo, todos los cristianos éramos esclavos del
demonio, a quien pertenecíamos. Por nuestra boca o las de
nuestros padrinos, renunciamos en el Bautismo a Satanás, a sus
pompas y a sus obras, y elegimos a Jesucristo como a nuestr
Dueño y Señor, para depender totalmente de El como lo hizo la
Virgen María.
Es precisamente lo que hacemos por la presente consagración :
renunciamos al demonio, al mundo, al pecado y a nosotros
mismos y nos consagramos totalmente a Jesucristo, por manos
de María, para hacernos como Ella esclavos del Señor. Pero
hacemos algo más: en el Bautismo hablamos ordinariamente por
boca de otros –los padrinos– y nos consagramos a Jesucristo
por medio de ellos. Mientras que en esta consagración nos
consagramos por nosotros mismos, voluntariamente y con
conocimiento de causa.
El amor de Dios hace que la Virgen María
genere a su Hijo en cada criatura
“Ánimo hija mía, Yo, siento la irresistible necesidad de hacer conocer quién
!
es mi Madre, las dotes, los privilegios, y el gran bien que hace y que puede
hacer a todas las generaciones…. Nuestro amor imponiéndose sobre esta
criatura celestial, le daba la potencia de generar a su Hijo Jesús en cada
criatura, de hacerlo nacer y de hacer todo lo que era conveniente para
formar la vida de su amado Hijo…
La Santísima Virgen
conduce
necesariamente a
Jesús a todos
aquellos que se
entregan plenamente
a Ella.
Dice el Señor: el reino de Dios dentro de vosotros está.
Conviértete a Dios de todo corazón, y deja este mísero mundo, y
hallará tu ´anima reposo. Aprende a menospreciar las cosas
exteriores, y date a las interiores, y verás venir a ti el reino de
Dios. Ciertamente el reino de Dios es paz y gozo en el Espíritu
Santo; lo cual no se da a los malos. Si preparas digna morada,
Jesucristo vendrá a ti, y te mostrará su consolación. Toda su
gloria y hermosura es de dentro, y allí se complace. Al hombre
interior lo visita continuamente, y con él habla dulcemente, y
tiene agradable consolación, mucha paz y admirable
familiaridad Libro 2 Cap. 1
Escritos de la Sierva de Dios Luisa Picarreta
Leer comprensivamente y
meditar la llamada maternal
de la Virgen, resaltando las
frases o párrafos que
centraron mi atención.
“Mamá mía, te amo, y Tú ámame y dale un
sorbo de Voluntad de Dios a mi alma, y dame tu
bendición para que pueda hacer todas mis
acciones bajo tu mirada materna.