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ISSN: 0185-0636
nuevaantropologia@hotmail.com
Asociación Nueva Antropología A.C.
México
Resumen: la antropología es una de las pocas disciplinas académicas, si no la única, que se basa
en una intersubjetividad utópica, siempre a la búsqueda de una relación horizontal. En este tra-
bajo reflexiono, a través de mis experiencias de investigación y escritura etnográfica, sobre los
retos y problemas de la investigación intersubjetiva horizontal y la etnografía, en el contexto de
algunos tipos de relaciones desiguales que hoy caracterizan a todo contexto cultural. Me centro en
cómo en mi trabajo de campo he encontrado que la desigualdad lingüística incide en la desigual-
dad musical. Muestro cómo estas desigualdades, a su vez, están incidiendo en la inequidad digital
en la ciudad de Mérida, Yucatán, un estado de la República mexicana en el que existen programas
para extender bienestar digital a todos los sectores de la población.
Palabras clave: etnografía, intersubjetividad, desigualdad.
Abstract: Anthropology is one of the few disciplines, if not the only one, based on a utopian ideal of
inter-subjectivity, always in search of horizontal relationships between researcher and local peo-
ple. Here I reflect, through my own ethnographic experiences, on the challenges represented by
these demands, given the contexts of actual, manifold inequality everywhere. I have found that
inequality among local languages and linguistic groups relate to inequality among types of music
and music performers. I then show how in the city of Merida, Yucatan, linguistic and musical in-
equality also relate to inequalities in musicians’ access to digital and other resources, even if the
municipal and state governments have launched a program of digital well-being expected to
bring access to the digital world to all sectors of the regional population.
Keywords: Ethnography, inter-subjectivity, inequality.
H
asta alrededor de 1980, a pesar logía era practicada como el estudio de
de las muchas voces que ya en la otredad. Las colecciones Reinven-
ese entonces clamaban por ting Anthropology (1972) de Dell Hy-
mes, y Anthropology and the Colonial
*Profesora investigadora titular C de tiempo Encounter, de Talal Assad (1973), así
completo en la Facultad de Ciencias Antropológi- como Orientalism (1978), de Edward
cas de la Universidad Autónoma de Yucatán. Lí- Said; La escritura y la diferencia, de
nea principal de investigación: Organizaciones y Jacques Derrida (1989, originalmente
cultura expresiva, Ciberespacio, Redes de infor-
mación, Sociabilidad en línea. Correo electrónico: de 1979); The Interpretation of Cultu-
gabrielavargas@uady.mx. res, de Clifford Geertz (1973), y Time
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idiomas locales (véase, por ejemplo, los gente local, de una solución intermedia
periódicos Alberta Native News y The que no es la mejor pero me permite
Windspeaker). En Alberta existen más una entrada inicial más o menos rápi-
de 60 estaciones comunitarias en las da a la vida cotidiana. Incluso estos
reservas indígenas, transmitiendo en dialectos, sin embargo, son para mí fá-
inglés indígena, métis y los idiomas ciles de olvidar, y regresar después de
indígenas locales, pero su ámbito de varios años de no hablarlos es tener
escucha es muy reducido y práctica- que admitir la desaparición de cual-
mente sólo pueden ser sintonizadas quier viso de comunicación intersubje-
localmente (Aboriginal Multimedia tiva horizontal con la gente local, más
Society, s.f.). El tzeltal, que es el primer allá de las relaciones afectivas con
o segundo idioma de miles de personas amigos y amigas cercanos. No me que-
en Chiapas, tanto en las montañas da ninguna duda de que olvido los idio-
como en las llanuras y la selva, ha ga- mas locales, así como los dialectos
nado espacios en medios impresos y en regionales de los idiomas hegemónicos,
transmisiones de los medios locales, porque puedo hacerlo y seguir funcio-
pero todavía no tiene la misma difu- nando como si esto no importara preci-
sión que el español. El sitio que enlista samente porque vivimos en un mundo
los idiomas en los que existen artículos desigual. Así, aun a mi pesar, alejarme
en Wikipedia es un buen índice de esta de esa gran diversidad lingüística me
desigualdad lingüística: la mayor par- convierte en agente de esa misma he-
te de los artículos están en inglés y ale- gemonía cultural que ignora los idio-
mán, y les siguen en números los mas locales porque puede funcionar
artículos escritos en ruso, francés, es- sin ellos o sólo tomarlos en cuenta en lo
pañol, italiano, polaco, portugués, chi- mínimo. Las inequidades lingüísticas,
no y japonés. a su vez, se imbrican con las inequida-
Mi trabajo de campo siempre está des musicales, como veremos a conti-
mediado por todas estas desigualda- nuación.
des lingüísticas. Cada vez trato de
aprender, entender y decir cosas bási- LA DESIGUALDAD MUSICAL
cas en alguno o algunos de los idiomas
locales durante la investigación de Parte de mis colegas en la Universidad
campo, pero nunca he logrado dominar Autónoma de Yucatán y en la antropo-
ninguno de ellos, y generalmente olvi- logía mexicana en general se pregun-
do lo que aprendí en cuanto cambio de tan por qué me dedico a estudiar la
región de investigación. La existencia música, y qué importancia puedan te-
de los dialectos regionales de las len- ner investigaciones como las mías.
guas hegemónicas ciertamente me Una colega, quien me tiene gran afec-
ayuda mucho durante los primeros to, me preguntó un día: “¿Cómo te atre-
meses. Considero que me acerca un ves? ¿No te parece que hay cosas más
poco a las y los hablantes de las otras importantes que la música y muchísi-
lenguas mientras me provee, como a la mo más urgentes? ¿Cómo alguien tan
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mostrado que en los campos de concen- paso de una etapa de la vida a otra; en
tración nazis (Gilbert, 2005), en las algunas culturas incluso señala el
crisis más severas (Library of Con- paso de la vida a la muerte, pues la
gress, s.f.), en las revoluciones popula- música está presente durante entie-
res (Gómez Maganda, 1998) y en los rros o cremaciones.
momentos en los que todo parece per- Un programa de arqueología antro-
dido, como durante la esclavitud en pofísica de la British Broadcasting
Estados Unidos (entrada Spirituals en Corporation (bbc), The Incredible Hu-
McNeil, 2013: 366-369), o el hundi- man Journey (Roberts, 2009) propuso
miento del Titanic (Turner, 2011), la que la música puede haber jugado un
música ha sido lo último en morir. En papel fundamental en la sobrevivencia
estas condiciones, los músicos se han de la especie Homo sapiens. Según
unido para tocar y, cuando ha sido po- esta serie, a diferencia de lo que suce-
sible, enseñar a otras personas a hacer dió con la especie Neandertal, que no
música o a interpretar los significados parece haber tenido música ni un arte
que ésta pudiera encerrar. Estos signi- pictórico simbólico, la especie Sapiens
ficados han incluido desde burlarse de habría desarrollado gran creatividad
guardias de los campos de concentra- para la adaptación por medio del arte,
ción durante el nazismo (Gilbert, 2005) y por eso no sucumbió ante los rigores
hasta prepararse y mantenerse ecuá- del cambio climático. Aunque me gus-
nimes, y seguir pistas codificadas en taría creer esto, pienso que tiene que
las canciones para alcanzar la libertad, ser tomado como una exageración y
entre esclavos prófugos en EU (entra- como algo difícil, si no es que imposible
da Spirituals en McNeil, 2013.). Perso- de comprobar. Claro, no cabe duda que
nas sobrevivientes del Titanic han la música, en tanto proceso creativo,
narrado cómo el grupo de músicos que tiene que haber ayudado a nuestros
no dejó de tocar les dio valor y esperan- ancestros a adaptarse y encontrar so-
za. En todos los movimientos sociales luciones prácticas a los problemas que
de los que existen pruebas documenta- enfrentaban, y también a serenarse
les, el ritmo y la música no sólo han para llevar a cabo lo más eficientemen-
estado presentes entre los manifestan- te posible las tareas que les demanda-
tes, así como entre las tropas, sino que ban los rigores de la vida cotidiana en
ha provisto de banderas sónicas de nuestro planeta.
identificación a los distintos grupos en Existen también otro tipo de co-
conflicto. La música ha sido un recurso mentarios. Escuché en la ciudad de
importante para la readaptación social Cuernavaca un anuncio publicitario
de quienes han sobrevivido a calami- en el radio que decía algo como: “Joven
dades y conflictos, o quienes se encuen- campesino, no creas que la música te
tran en centros de rehabilitación va a llevar a una vida fácil. Dedícate a
social. Además, en muchas culturas la trabajar y a labrar un verdadero futu-
música necesariamente acompaña ro para tu familia”. Habiendo crecido
cada momento importante y marca el en Yucatán, nunca me hubiera imagi-
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nado que la música podía ser culpada sica que aman, el de compartir ese
de los males sociales. Éste también me gusto con otras personas, y poder
parece un acercamiento basado en transmitir a sus hijos e hijas la emo-
otra preconcepción equivocada: lo que ción que esta música les produce. Un
puede ser socialmente considerado trovador me explicaba en octubre de
como “mala música” va a llevar a quie- 2014 que la trova cada vez da para me-
nes se dediquen a ella a una mala vida, nos, especialmente ahora que niñas y
si no es que a una vida de crimen y niños quieren “tenis Nike para la es-
destrucción. Al menos de lo que pode- cuela, tabletas computarizadas, ropa
mos encontrar en el registro etnográ de marca”. A esta escalada en el consu-
fico, la música se relaciona con las mismo atribuía el problema de que
condiciones cotidianas de vida, y no al “la trova se está muriendo”. Si antes la
revés. Cierto, la música puede propo- música de trova podía “poner comida
ner modelos alternativos, como cuando en la mesa”, ahora cada vez más esto
el rock en los setenta facilitó la convi- ha dejado de ser así. Sin embargo, la tro
vencia entre jóvenes que de otra ma va continúa: los trovadores siguen to-
nera se hubieran visto como “de color cando y cantando, y las escuelas de trova
blanco”, “de color negro” o de algún yucateca en Mérida y otras partes de
otro “color”, fomentando lo que se ha Yucatán siguen teniendo estudiantes.
dado en llamar la aceptación interra- ¿Cuál es la situación de otros músicos
cial, pero hasta ahora no tenemos que se dedican a otros estilos musica-
ejemplos en los que haya sido la músi- les? El hip hop, por ejemplo, es un esti-
ca la que haya desencadenado alguna lo musical en amplia expansión en el
transformación social radical; la “revo- estado de Yucatán y en la península en
lución cantante” de Estonia, Lituania general. El español yucateco y el maya
y Letonia entre 1987 y 1991, que po- yucateco han encontrado a través del
dría pensarse como una excepción, en hip hop un vehículo de reafirmación y
efecto se basó en la expresión cantada renacimiento cultural. ¿Y podría ca-
de la inconformidad social, y no en la racterizarse la vida de quienes hacen
inconformidad social creada a través hip hop como lujosa? Todo lo contrario;
de canciones (Steves, 2010). al menos en Yucatán hasta ahora el
Es muy difícil explicar a quienes no hip hop es la música de los jóvenes con
aman la música lo que ésta puede sig- menos oportunidades económicas en la
nificar para quienes le dedican su vida. sociedad local.
No puede decirse, sin embargo, que los En mi experiencia etnográfica, la
músicos en Yucatán vivan vidas de lujo desigualdad musical siempre ha ido de
ni mucho menos. Las casas de la ma- la mano con la desigualdad lingüística:
yor parte de los integrantes de la trova las minorías lingüísticas siempre tie-
yucateca, por ejemplo, están muy lejos nen música propia, cantada en sus
de cualquier concepción de una vida de idiomas, y la mayor parte de esta mú-
“lujo”. El disfrute al que estas perso- sica nunca llega a los canales de dis
nas aspiran es escuchar y tocar la mú- tribución masiva, y ni siquiera a los
Reflexiones sobre el trabajo de campo: la utopía intersubjetiva en un mundo desigual 173
canales de “música del mundo”. Gene- Neil Young, Robbie Robertson, Dave
ralmente se requiere que la música lo- Matthews y Nelly Furtado han inclui-
cal cumpla con un cierto estándar de do canciones, ritmos y percusiones in-
calidad, juzgado desde las industrias dígenas en sus grabaciones. En 2012
musicales hegemónicas, para que Furtado, quien es originaria de Colum-
las melodías conocidas y amadas local- bia Británica, en Canadá, incluyó no
mente se conviertan en melodías que solamente sonidos sino también a ar-
circulen en circuitos comerciales nacio- tistas indígenas en sus videos, por lo
nales e internacionales. He encontrado que fue reconocida por la Asociación
que siempre existe un mercado local y Americana de Música Nativa con el
regional, en el que circulan artistas y premio anual Leyenda Viviente en
música que solamente es posible cono- 2013. Felipe Rose, hijo de un lakota
cer si se vive por un tiempo largo con sioux y una mujer puertorriqueña, se
una minoría lingüística, o al menos en hizo famoso como “el indio” en el grupo
algún lugar en el que haya una o más The Village People, pero fuera de usar
minorías lingüísticas. Por ejemplo, la los cascabeles de tobillo y a veces los
mayor parte de la música escuchada cascabeles de brazo en algunos de sus
por los indígenas en Alberta durante videos, contribuyó cantando y bailando
los powwows, incluyendo la música sin aportar sonoridades sioux o de
para bailar, la música para juegos de otras minorías lingüísticas indígenas.
manos y la música de la iglesia nativa, El conocido dúo Kashtin, cuyos inte-
circulan por medio de grabaciones ca- grantes eran innu, incorporaba, ade-
seras e incluso de grabaciones hechas más de los tambores de mano, violines
por pequeñas casas comerciales. Esta y guitarras que se usan en la música
música tiene sus propios canales de popular autóctona del norte de Que-
distribución, en los que a su vez se des- bec, sonoridades e imágenes de otros
taca una minoría de artistas y grupos grupos indígenas de Canadá, incluyen-
locales. Sin embargo, raramente llegan do elementos de la música de las pra-
a los canales de distribución comercial deras. La canción Akua Tuta, en
nacional y mucho menos internacional. particular, del álbum del mismo nom-
Pocos ejemplos existen de la forma bre, de 1994, está inspirada en la músi-
en la que la música de powwow, que ca de las praderas, y el video con el que
tiene su propio mercado en las reser- se dio a conocer incorporaba fotos de
vas indígenas, ha tocado la música po- artistas de powwow y de las montañas
pular y el jazz, pero sí los hay. Los Rocallosas en Alberta y Columbia Bri-
poemas y la música de la poeta y saxo- tánica.
fonista indígena Joy Harjo, los discos En Cerdeña, la música cantada en
del trío Walela y últimamente las gra- los distintos idiomas sardos tiene gran
baciones y conciertos de A Tribe Called circulación en la isla. Los artistas re-
Red están entre los pocos ejemplos de gionales se presentan en fiestas y con-
música indígena de las praderas que ciertos alrededor de la isla, siguiendo
ha llegado al mercado mainstream. el calendario santoral católico y el ca-
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culturas hegemónicas en las que, junto las pioneras a nivel mundial en co-
con muchas personas del planeta, me menzar a ofrecer internet gratis en es-
desenvuelvo. Encuentro, en este punto, pacios públicos. El ayuntamiento de
que las desigualdades lingüísticas y ese entonces lanzó una consulta públi-
musicales están relacionadas con la ca para que las y los ciudadanos vota-
desigualdad digital, y que mi propia ran por los tres primeros parques en
participación en la hegemonía lingüís- contar con ese servicio. Ante la deman-
tica, y en la hegemonía musical basada da popular, se comenzó con 10 parques.
en tocar música en escalas mayores y Pronto se instalaron dos módulos con
menores con métricas europeas, se computadoras de acceso gratuito en el
acompañan también de mi práctica Parque de la Paz, que resultaron insu-
electrónica dentro de la hegemonía di- ficientes. En 2010 el programa Ciber-
gital de software propietario. móvil comenzó a extenderse ya no sólo
a los parques de la ciudad, sino tam-
LA DESIGUALDAD DIGITAL bién a las comisarías de Mérida. El
programa ofrecía 10 laptops en présta-
Por cuestiones de extensión y tiempo, mo cada semana, en forma rotativa en
en este último apartado me circunscri- diferentes parques de la ciudad, para
biré al caso de Yucatán. En parte por- que quienes no tuvieran una propia pu
que el proceso de digitalización dieran hacer uso de internet. El siste-
yucateco ha sido muy particular, y en ma de módulos de conexión con el que se
parte porque tiene que ver con mi tra- inició el programa en cada parque con-
bajo actual. Lo expondré en manera sistía en una mesa de metal al interior
más o menos extensa, dejando para de una caseta con un teléfono y un bo-
otro momento la discusión sobre digi- tón: si la o el usuario tenía problemas
talización de la isla de Cerdeña, otro para conectarse, levantaba el auricu-
proceso interesante a nivel mundial, lar y apretaba el botón, y un operador
pero muy largo de contar. u operadora le ayudaba. El programa
En Yucatán se ha estado promo- fue creciendo, de tal forma que en octu-
viendo, de diversas maneras y con bre de 2014, 125 parques meridanos ya
grandes inversiones económicas, la ofrecían conexión inalámbrica gratuita
igualdad en el acceso a las tecnologías y enchufes con conexión para laptops y
digitales. Este estado mexicano está dispositivos móviles (Ayuntamiento de
considerado actualmente una de las Mérida, 2012-2015, 2014). Al mismo
zonas más digitalizadas de América tiempo comenzaron a extenderse los
Latina, pues los servicios municipales módulos digitales de atención ciuda-
y estatales funcionan a lo largo y an- dana (cabinas en las que se procesan
cho de la entidad con apoyo significati- trámites de diversos tipos). Muchos de
vo de plataformas digitales, y el los trámites cotidianos comenzaron a
público accede fácilmente a internet y ser digitalizados, permitiendo que las
a servicios públicos de todo tipo. En solicitudes de servicio y los pagos de
2007 la ciudad de Mérida fue una de luz, agua, recoja de basura, tenencias
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sino que cada vez está ensanchándola: El uso de software en licencias co
está creciendo la diferencia entre quie- pyleft requiere de muchas horas más
nes pueden hacer música por medios de trabajo y de una mayor inversión de
únicamente digitales y quienes pueden tiempo que los programas similares en
hacerla por medios variados, inclusive sus versiones propietarias. Si bien es
los digitales. cierto que las computadoras se han
De 2012 en adelante he estado apren- hecho accesibles en el estado y en la
diendo a usar software de tratamiento ciudad, incluso las versiones “piratas”
de sonido y de producción y conociendo del software propietario para la pro-
el mundo de las tornamesas y los ins- ducción musical son difíciles o imposi-
trumentos programables, pues me inte- bles de usar en equipos como los que
resa el campo general de la producción ahora tiene la mayor parte de los jóve-
musical en Yucatán tanto en vivo como nes de Yucatán. El software libre se
en estudio. El lenguaje idiomático de presenta muchas veces como la única
la edición y producción sonoras en opción para los jóvenes de escasos re-
Yucatán es una especie de spanglish cursos que quieren dedicarse a la mú-
yucateco. Tengo gran ayuda de mis es- sica o cualquier otra ocupación. Si bien
tudiantes, quienes trabajan en temas en los noventa se pensó que el copyleft
relacionados con mi propia investiga- y la “piratería” llevaría a una democra-
ción, y de vez en cuando me apoyo en tización cultural “desde abajo” (véase
ayudantes de investigación por medio Vargas-Cetina, 2010), la etnografía de la
de contratos, sin embargo, todo está música en Mérida nos muestra que esto
implicando para mí un nuevo aprendi- no es exactamente así: ni todas las
zaje lingüístico a la par de un reapren- computadoras ni todo el software son
dizaje tecnológico. Estoy encontrando iguales, por lo que las batallas por el
que, a diferencia de los programas que acceso a los recursos culturales ana
yo aprendo a usar en cursos en nues- lógicos ahora se han sumado a las
tra Facultad de Ciencias Antropológi- batallas por el acceso a los estratos he-
cas y en cursos virtuales a los que la gemónicos del mundo digital.
facultad me ha dado acceso, son los En Yucatán, la mayor parte de las
programas gratuitos en copyleft y ver- canciones y la mayoría del software
siones “piratas” de cierto software pro- están en español, pero muchos progra-
pietario los de mayor difusión entre las
y los músicos de las colonias pobres de chos de uso a quien compra el producto. En el
Mérida.6 otro extremo está el software de acceso y uso li-
bre, que generalmente está dentro de algún tipo
de licencia copyleft. Existen varios tipos de licen-
6
Existen dos polos en las licencias de soft- cias copyleft. La más abierta es aquella en la que
ware (programas para computadoras y para la o el autor permite tanto la apropiación del
otros aparatos electrónicos); por una parte está el núcleo del programa u obra para modificarlos,
software propietario, que pertenece a una per- así como su distribución libre, gratuita y sin con-
sona o compañía y cuyo uso está regulado por la diciones para el usuario final (para mayor infor-
legislación Copyright, que concede derechos de mación al respecto véase el sitio de la Fundación
exclusividad a quien detenta la patente y dere- Copyleft en http://fundacioncopyleft.org).
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acústicos, como rock, rock pop, música aquéllos colectivos que logran estable-
romántica, música electrónica y elec- cerse con su propia razón social, reco-
troacústica. Estos tipos de música ge- nocimiento del público y, muchas
neralmente requieren de una gran veces, apoyos del gobierno, general-
infraestructura en términos de instru- mente invierten en equipos más profe-
mentos musicales, aparatos y progra- sionales de grabación. Aun así, los
mas de efectos, preamplificadores, recursos para mantener el hardware y
amplificadores y ecualizadores, y con- el software actualizados no les son fá-
solas de múltiples entradas y salidas ciles de encontrar.
de señal. Estos estudios entran a com- En este momento, mis actividades
petencias internacionales por medio de investigación informan mi práctica
de sus producciones para la televisión, docente. Trato de transmitir a mis es-
el cine e internet, y sus operadores es- tudiantes los conocimientos que voy
tán certificados como técnicos por las adquiriendo adaptándolos a lo que
casas que producen el hardware (las considero formas más útiles y más ac-
computadoras, sintetizadores y conso- cesibles. Por ejemplo, ProTools de Avid
las) y el software que en esos estudios es el software estándar de edición de
se manejan. En los estudios más pre- audio en la industria musical, y el soft-
carios generalmente se producen beats ware que yo primero aprendí a utilizar
y tracks de hip hop, con la ayuda de al- tomando cursos en nuestra propia
gunos micrófonos, una o más torname- facultad, pero quiero que mis estu-
sas, con una o más computadoras para diantes aprendan a usar programas de
la grabación y producción de los otros tipos, como Audacity y Mixxx,
tracks.8 Los concursos en los que parti- ampliamente utilizados por los jóvenes
cipan las producciones de estos estu- de escasos recursos en la ciudad. Estos
dios son los de culturas populares, los programas son gratuitos y están basa-
de la ciudad de Mérida y los concursos dos en software libre. Me interesa que
regionales de “batallas” de hip hop y los programas que veamos en clase
break dance. El deseo de contar con es- sean multiplataforma, de tal manera
tudios de ensayo y grabación profesio- que funcionen al menos en Windows,
nales y la adquisición de mejores Mac y Linux. Esto implica dificultades
instalaciones y equipos es constante, y operativas en la edición, las cuales se
acentúan por las idiosincrasias de la
traducción. Me doy cuenta, sin embar-
8
Se le llama tracks a los canales en los que go, de que en cuanto dejo de dar clases
se graban las distintas melodías y segmentos de
percusión que forman cada pieza musical; tam-
relacionadas con el sonido, regreso casi
bién se llama tracks a las piezas que son graba- inmediatamente al software comercial
das en multitrack y pueden ser almacenadas en propietario, y que cuando salga de la
algún tipo de soporte material portable, como investigación en campo sobre produc-
cintas, discos de vinil, cd, memorias flash o tar-
jetas. Generalmente track se refiere a un seg-
ción musical entre jóvenes de Yucatán
mento de música grabada, sea una de las líneas seguramente se reducirá mi contacto
melódicas o una pieza entera. con el software alternativo.
182 Gabriela Vargas Cetina
Las inequidades lingüísticas y mu- hace unos 20 años, los que caracteriza-
sicales se extienden al mundo digital, y ban a las músicas locales que ahora se
es muy fácil dejar de ser “multilingüe” registran e interpretan en forma digi-
en software alternativo por cuestiones tal. Más allá de los discursos políticos y
de comodidad y acceso diferencial. Una programáticos de las instancias guber-
vez más, mi competencia en idiomas namentales, educativas, comerciales y
musicales digitales low-tech quedará de apoyo institucional, la etnografía
atrás en cuanto comience a dedicarme nos muestra que no es posible pensar
a un nuevo proyecto. Por tanto, mi co- en los programas de “desarrollo” o de
municación con los músicos y producto- “ecualización de oportunidades ante la
res de las áreas socioeconómicamente brecha digital” como las opciones para
marginadas de Yucatán volverá a ser remontar totalmente la desigualdad.
profundamente asimétrica, en términos La etnografía es el único método que
de las diferencias de uso de hardware nos puede revelar por qué estos pro-
y de software para el procesamiento di- gramas se quedan en buenas intencio-
gital del sonido y de la música. nes, y cuáles serían las posibilidades
reales de transformación local: el mejo-
CONCLUSIÓN ramiento de las condiciones de vida y
la ecualización del ingreso, que sola-
A lo largo de este artículo he estado mente podrían resultar de la transfor-
mostrando, a través de mi experiencia mación radical del sistema económico
de investigación, la relación de des- actual. Y es que aún quienes hacemos
igualdad estructural que se extiende etnografía reflexiva tratando de de-
desde las diferencias lingüísticas hasta sarrollar relaciones intersubjetivas
las diferencias culturales y en el acceso nos vemos, al final de cada proyecto,
a la infraestructura digital. Éste, me regresando a nuestras posiciones ha
parece, es uno de los grandes poderes bituales en las estructuras de la des-
de la etnografía: encontrar y poner en igualdad.
relieve, incluso en aquellos lugares in- Un segundo gran poder de la etno-
sospechados, los efectos de la desigual- grafía es el de mostrar, con nuestros
dad socioeconómica y cultural. Esta datos, que las personas en situaciones
desigualdad, como hemos visto, se ex- desventajosas no están allá porque se
tiende necesariamente a la desigual- lo hubieren propuesto o porque deci-
dad en acceso a recursos y productos dieron conscientemente no cambiar de
culturales, y en la poca proyección de lugar social. Nosotros mostramos cómo
los productos culturales regionales y esas personas están tan dedicadas
locales minoritarios hacia los merca- como nosotros a su trabajo, a sus fami-
dos hegemónicos. Más aún, la cultura lias o relaciones equivalentes, al arte, y a
y el mercado hegemónicos moldean ne- los proyectos colectivos en su localidad,
cesariamente la cultura local, pues el y mostramos también cómo las estruc-
software impone ahora ritmos y afina- turas homohegemónicas les afectan y
ciones que no necesariamente eran, limitan el impacto de sus producciones
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