El primer antecedente del trabajo, es que las personas necesitaban vivir. Para poder vivir, sacaban o trataban de buscar en la naturaleza, los elementos necesarios para poder subsistir, por ejemplo, los cazadores, recolectores, etc. Otro antecedente, en la edad media, se origina en Grecia y Roma, que es la esclavitud. Con la esclavitud, no era persona, eran considerados cosas que pertenecían al dueño, sea por guerra, por nacimiento, por pena, entonces, hasta este momento, estos eran los primeros antecedentes. Luego, comienzan los primeros oficios, los artesanos, y en este caso, lo que sucedía, es que las personas desarrollaban su oficio, su propia artesanía, tierra, etc. Ellos eran autónomos, es decir, trabajaban para ellos mismos, elaboraban su artesanía y la intercambiaban por otro bien, no dependían de otra persona. El decidía todo, ya que no dependía de nadie, pero, además, estas personas eran fuertemente resguardas frente a los problemas, resguardados por los gremios, estos eran especies de mutualidades que protegían fuertemente a estas personas, pero se dividían por oficios que se iban desarrollando. Para ingresar al gremio, había estructuras jerárquicas, había aprendices, los maestros enseñaban cómo aprender ese oficio, y los padres del aprendiz pagaban. Con el desaparecimiento de los gremios, viene el gran problema que es la revolución industrial. Con ésta, empiezan a desarrollarse las primeras fábricas, las personas trabajan en el campo o ciudad, y con estas ofertas que se hacían, dichas personas emigraban a las ciudades, trabajar en las fábricas. Las personas iban a trabajar para otras personas, para el empleador. Hasta ese momento, las relaciones eran reguladas por el derecho civil, hay que destacar la autonomía de la voluntad, en el contrato se puede pactar lo que se quiera, mientras las partes estén de acuerdo. Pero, además, las partes, son equivalentes, y que el art. 12 nos permite renunciar, entonces, pensemos en una relación donde una persona depende de otra, y donde están en un plano de igualdad, y con el art. 12 que nos permite renunciar. A la vez, con la revolución industrial, las personas comenzaron a migrar hacia las ciudades, los sueldos eran bajísimos, horas de trabajo muy extensas, casi no tenían descanso. Estas personas nunca habían trabajado para una fábrica, no recibieron capacitación, por lo que empezaron los primeros accidentes de trabajo. Resulta que no existía ley de accidentes de trabajo. Entonces, pasaba que las personas que tenían accidentes de trabajo, no podían continuar trabajando. Las personas vivían en formas hacinadas. Vivían muchas personas en una habitación. Además, se traían sus animales, con condiciones sanitarias malas. Comenzaron las enfermedades, pestes, etc. Todo esto empezó a originar lo que se llama la “cuestión social”. Hasta ese momento, había partidarios de ideas liberales, pero con esta cuestión social, empezaron a presionar a la iglesia y al Estado a que intervinieran. Pidiéndole que regulara estas situaciones. Es con esto, que surgen las primeras leyes laborales. En España empezaron en el 1900, sobre accidentes de trabajo. La primera en Chile fue la Ley de la Silla. Ahí recién comienzan las leyes laborales. El Derecho Laboral es realista, se forma con los problemas que han ido sufriendo los trabajadores, en virtud de esos problemas, se han regulado diversas situaciones. Destacar la situación de las salitreras, en donde había diversos problemas, y no se protegían los derechos de los trabajadores, resultando diversas familiares desprotegidas. Había un influjo de ideas marxistas y del anarquismo, en Chile, las primeras formas de manifestación empiezan a ser prohibidas, como la matanza de la escuela de Santa María. En el Derecho laboral, las partes no son iguales, parte de la base que hay una superioridad jerárquica, el empleador está por encima del empleado. Se debe proteger a la parte más débil, por lo que las leyes laborales son protectoras. Los tribunales, frente a cualquier duda, fallan a favor del empleado. En el código de trabajo, hay mínimos con los que se deben cumplir sí o sí (como los días de vacaciones, salario mínimo, etc.). En el derecho laboral, hay normas de orden público, por lo que son irrenunciables. La huelga es muy fundamentan en el derecho del trabajo, gracias a eso se han conseguido diversas cosas. El código del trabajo va sufriendo diversos cambios cada año, la ley laboral se va modificando. La relación de subordinación o dependencia es lo esencial. Si se cumplen los elementos para que haya subordinación y dependencia, hay relación laboral, y es regulada por el código del trabajo. Es importante hacer la distinción, porque una persona que trabaja con prestación de servicios, no tiene derecho a vacaciones, a licencia médica, etc. En cambio, una persona con contrato de trabajo, tiene derecho a todo lo anterior. Dentro del Estado, ahí no se regulan los trabajadores por el código del trabajo, tienen un estatuto especial. Están excluidos del código del trabajo, donde no se aplicará la legislación a los trabajadores del Estado. Tienen el Estatuto Administrativo, pero a la vez, el inciso segundo del art. 1 señala “en caso de que haya un vacío legal, y, siempre y cuando lo que se regule en el CT no sea incompatible con lo regulado en el EA, entonces se podría aplicarles a esos trabajadores el código del trabajo”. Sucede que el EA regula los trabajadores a planta y a contrato, no regula a los de honorarios, porque se parte de la base que tiene su contrato especial de prestación de servicio, que regula la relación de él con el Estado, no está regulado en el EA. El EA establece varias materias, pero hay varias materias que establece el CT que no están regulados en el EA, como la tutela por vulneración de DDFF. La jurisprudencia ha entendido que sería, en esta materia, competente el juzgado de letras del trabajo, por lo que se aplicaría el CT en dicha materia, desde el 2014 empezó a fallar así la CS. Con los trabajadores a honorarios, ha ocurrido la laboralización del sector público, se les aplicaría el CT, por lo que sería competente el juzgado de letras del trabajo. El trabajador a contrata, se supone que es para una función específica y un tiempo determinado, pero hay gente que lleva como 20 años en ese sector. Ha sido una labor jurisprudencial. El EA es bastante precario, porque es muy antiguo. Los trabajadores del sector público no tienen derecho a huelga, así lo dice la CPR, pero, aun así, hay un convenio 151 desarrollado por la OIT, que establece expresamente el derecho de los trabajadores públicos a irse a huelga y a negociación colectiva, ratificado por Chile.