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Días de angustia, tiempo de milagro.

El límite de Moisés era el mar... Dios abrió!

El límite de Abraham era la muerte de Isaac... Dios proveyó al cordero!

El límite de Ana era la esterilidad... Dios le dio un hijo!

El límite de Job era quedarse sin nada... Dios le devolvió todo!

El de Pedro era quedarse atrapado... Dios lo soltó de los grilletes, de la prisión!

El de Daniel, morir por los leones... Dios lo sacó de la guarida de los leones!

El límite de Sadrac, Mesac y Abednego era morir por el fuego... Dios los libró de morir en el
horno!

El límite de la mujer del flujo de sangre era la eterna hemorragia... Jesús la curó!

El límite de la hija de Jairo era seguir muerta... Jesús la resucitó!

Jairo y la mujer con flujo de sangre, dos vidas llenas de fe, entre cientos de otras vidas
incrédulas.

Coincidencia, la niña que fue resucitada por Jesús tenía 12 años y la mujer que fue curada
del flujo de sangre, sufría también hace 12 años. Jairo y la mujer ganaron por la fe a sí
mismos, porque dejaron atrás las opiniones ajenas y contrarias que conspiraban a favor de la
muerte y del eterno sufrimiento.

Cuando los oídos de Jairo y de la mujer se encerraron al mundo y sus corazones se abrieron
a DIOS, se dio que "el pueblo fue puesto, Jesús entró" 9:24 Mateo y sus súplicas y súplicas
fueron atendidas!

Miremos a Jesús "autor y consumador de nuestra fe Hebreos 12:2", si queremos transformar


los entornos de muerte y si queremos callar los instrumentos de llanto y lo lamento. No son
muchos los que ganan a través de la fe, son sólo los que van en contra de la multitud incrédula.
Como Jairo, la mujer con hemorragia, el ladrón en la cruz y el propio

Jesús nos capacita para hacer lo mismo. Tengamos Fe! El límite de Lázaro era seguir
muerto... Dios lo resucitó! El límite de Cristo era la muerte... Dios lo resucitó! Cuál es tu
límite? Que Dios bendiga tu vida abundantemente en paz y salud, y que lo que lo limita sea
sólo el instrumento para el milagro de Dios en tu vida! No mires la situación que te aflige,
que te angustia, que te atormenta, que te des y que te agoniza, trayendo tribulación y ansiedad,
y que lo sofoca como si llegara al final de todo, sino como la única y urgente oportunidad De
la manifestación de la gloria de Dios!
No importa lo que te pase, tu alma puede estar llorando, pero tu semblante tiene que mostrar
serenidad, y, sonreír sonriendo mostrando alegría y confianza, y fe en Dios que todo va a
mejorar! Siempre y siempre todo mejora! La noche cede lugar, siempre, para un hermoso
amanecer! El sol vuelve a brillar! Para todo hay un tiempo, hasta el tiempo en que dios opere
en tu vida, aliviando tu sufrimiento, tu angustia, en fin, poniendo fin a tu tribulación!

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