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EL EMPIRISMO DE HUME: CRITICA A LA CAUSALIDAD Y LA SUSTANCIA

Hume fue uno de los filósofos más destacados en el contexto del movimiento de la Ilustración
del S. XVIII.

Es uno de los máximos representantes del empirismo y podemos decir que inspirado por Locke
tomo la experiencia como punto de partida para fundamentar cualquier conocimiento válido.
Dos de las grandes cuestiones de Hume serán la crítica al principio de causalidad y a la
sustancia.

En primer lugar la crítica a la causalidad pero para ello tendremos que exponer que entiende
Hume como conocimiento.

Para Hume el estudio empirista de la naturaleza humana ha de comenzar por un estudio del
conocimiento.

Por lo tanto, ha de prestar especial atención a dos cosas relacionadas con el entendimiento o
mente: los contenidos del entendimiento y las operaciones que el entendimiento puede
realizar con esos contenidos.

A dichos contenidos Hume les llama percepciones y distingue dos clases distintas: impresiones
e ideas. Las impresiones son vivas e inmediatas. Las ideas son percepciones tenues o débiles.

Además Hume distingue entre dos tipos de conocimiento: relaciones entre ideas, y cuestiones
de hecho.

No obstante cabe decir que este principio de asociación intervienen diferentes operaciones: de
semejanza, contigüidad y causalidad.

Es en la operación de causalidad, es decir la que relaciona causa - efecto en la que Hume, pone
en cuestión su definición más general, es decir, no podemos afirmar que un hecho es la causa
de la existencia de otro hecho. Necesitaríamos experimentar anteriormente esta relación para
poder asegurar esta tesis y si no es así, carecemos de información empírica.

Sin embargo Hume admite que existe una idea de conexión necesaria a través de la cual
conectamos un hecho con otro porque creemos que están relacionados, pero esto sucede
porque la memoria recuerda las veces que ha sucedido un hecho y la imaginación crea por
hábito una conexión.

Pero no ha habido impresión por tanto no ha habido conocimiento, solo creencia.

Así pues Hume considera la causalidad como el hecho de que un fenómeno se produce tras
otro de manera constante en el espacio y en el tiempo. Pero sin la garantía de que siempre
ocurra así. Es el hábito el que nos provoca esa creencia.

Otro de los conceptos fundamentales de la Filosofía, el de sustancia también será objeto de


crítica.

Así el concepto de sustancia era tradicionalmente lo que permanece en un objeto a pesar de


los cambios de sus accidentes o cualidades. Sin embargo Hume se opondrá al concepto de
sustancia considerando que no existe la misma.

Según Hume, si todo nuestro conocimiento se reduce a datos de experiencia de sus cualidades
(impresiones de sensación –color, olor, sabor, sonido...- e impresiones de reflexión –pasiones,
emociones...-) no tenemos ninguna base para afirmar que existe una sustancia y por lo tanto
esta solo sería un montón de ideas simples que el ser humano unifica en la mente con la
imaginación y que recibe un nombre común.

Para concluir, podemos decir que David Hume, aporta una visión diferente frente a conceptos
importantes en la Filosofía como son el conocimiento y la sustancia. La experiencia y la
búsqueda de hechos comprobables como base su teoría pondrán en duda muchas de las ideas
tradicionales y darán un nuevo giro en el pensamiento de la Filosofía.

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