Sie sind auf Seite 1von 93

Pamplona

Universidad de

Centro de Educación Virtual y a Distancia

Programas de Educación a Distancia

Política Económica
y Pobreza en
Colombia
Luis Alfonso Suárez Delgado

43 Años Formando Colombianos de Bien


Álvaro González Joves
Rector

María Eugenia Velasco Espitia


Decana Facultad de Estudios Avanzados, Virtuales, a Distancia y Semiescolarizados

Luis Armando Portilla Granados


Director Centro de Educación Virtual y a Distancia
Tabla de Contenido
Presentación
Introducción
Horizontes

UNIDAD 1: Política Económica


Descripción Temática
Horizontes
Núcleos Temáticos y Problemáticos
Proceso de Información
1.1 REFERENTES HISTÓRICOS
1.1.1 Política Económica en Colombia 1830-1880
1.1.2 Desarrollo Capitalista en Colombia
1.2 POLÍTICA ECONÓMICA
1.2.1 Política Económica 1980-2000
1.2.2 Economía y Narcotráfico
1.2.3 Política Económica - Política Social
1.2.4 Categorías Económicas y Éticas
1.2.5 Economía y Medio Ambiente
1.2.6 Indicadores Sociales
1.2.7 El problema del Empleo en Colombia
1.2.8 Planteamientos de Política Económica en Colombia para el
Próximo Milenio
Proceso de Comprensión y Análisis
Solución de Problemas
Síntesis Creativa y Argumentativa
Autoevaluación
Repaso Significativo
Bibliografía Sugerida

UNIDAD 2: Pobreza en Colombia


Descripción Temática
Horizontes
Núcleos Temáticos y Problemáticos
Proceso de Información
2.1 ECONOMÍA - POBREZA Y GRUPOS ARMADOS
2.2 VIOLENCIA EN COLOMBIA Y EL EXODO EXTERNO
2.3 EL DESEMPLEO EN COLOMBIA
2.3.1 ¿Qué es el Subempleo?
2.4 ENDEUDAMIENTO EXTERNO
Proceso de Comprensión y Análisis
Solución de Problemas
Síntesis Creativa y Argumentativa
Autoevaluación
Repaso Significativo
Bibliografía Sugerida

BIBLIOGRAFÍA GENERAL

ANEXO 1: La Economía Informal en América Latina


ANEXO 2: Economía Informal
Política Económica y Pobreza en Colombia 1

Presentación
La educación superior se ha convertido hoy día en prioridad para el gobierno
Nacional y para las universidades públicas, brindando oportunidades de superación
y desarrollo personal y social, sin que la población tenga que abandonar su región
para merecer de este servicio educativo; prueba de ello es el espíritu de las
actuales políticas educativas que se refleja en el proyecto de decreto Estándares
de Calidad en Programas Académicos de Educación Superior a Distancia de la
Presidencia de la República, el cual define: “Que la Educación Superior a Distancia
es aquella que se caracteriza por diseñar ambientes de aprendizaje en los cuales
se hace uso de mediaciones pedagógicas que permiten crear una ruptura espacio
temporal en las relaciones inmediatas entre la institución de Educación Superior y
el estudiante, el profesor y el estudiante, y los estudiantes entre sí”.

La Educación Superior a Distancia ofrece esta cobertura y oportunidad educativa


ya que su modelo está pensado para satisfacer las necesidades de toda nuestra
población, en especial de los sectores menos favorecidos y para quienes las
oportunidades se ven disminuidas por su situación económica y social, con
actividades flexibles acordes a las posibilidades de los estudiantes.

La Universidad de Pamplona gestora de la educación y promotora de llevar


servicios con calidad a las diferentes regiones, y el Centro de Educación Virtual y a
Distancia de la Universidad de Pamplona, presentan los siguientes materiales de
apoyo con los contenidos esperados para cada programa y les saluda como parte
integral de nuestra comunidad universitaria e invita a su participación activa para
trabajar en equipo en pro del aseguramiento de la calidad de la educación superior
y el fortalecimiento permanente de nuestra Universidad, para contribuir
colectivamente a la construcción del país que queremos; apuntando siempre hacia
el cumplimiento de nuestra visión y misión como reza en el nuevo Estatuto
Orgánico:

Misión: Formar profesionales integrales que sean agentes generadores de


cambios, promotores de la paz, la dignidad humana y el desarrollo nacional.

Visión: La Universidad de Pamplona al finalizar la primera década del siglo XXI,


deberá ser el primer centro de Educación Superior del Oriente Colombiano.

Luis Armando Portilla Granados – Director CEVDUP

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 2

Introducción
Hablar en Colombia de política económica a través de la vida republicana y lo que
ha venido sucediendo en los últimos veinte años del siglo XX, es hacer mención a
la situación de pobreza a la que se ha visto abocada la sociedad Colombiana.

Decir que la pobreza en Colombia como variable social y económica está


íntimamente relacionada con política económica, es comprender la debilidad de la
estructura socio - económica del país que ha estado sujeta en una primera fase de
su historia a la esfera intercambista y de endeudamiento externo en el transcurso
del siglo XX. Es aludir a una realidad que ha sido y sigue siendo dependiente de
fuerzas externas, sin una estrategia de política económica, que haga una lectura
de la verdadera realidad y necesidades socio económicas del país.

Los contenidos temáticos y problemáticos que aborda el módulo, están distribuidos


en dos unidades íntimamente relacionadas entre sí: una primera unidad que
aborda el problema de la política económica en Colombia de finales del siglo XIX y
el desarrollo del capitalismo, en relación con el proceso democrático y justicia
social en Colombia. Una segunda parte donde se alude a la política económica de
los últimos veinte años del siglo XX, donde aparecen fenómenos concomitantes
con la economía como: el narcotráfico, el medio ambiente, el desempleo, la
corrupción, las desigualdades sociales, la violencia armada, la globalización y el
neoliberalismo, entre otros.

La segunda unidad, se ocupa del problema de la pobreza en Colombia, el


desempleo y el endeudamiento externo. Política económica sustentada en los
vaivenes de la política internacional de cara a la llamada aldea global.

Los contenidos temáticos del módulo intentan ofrecer al alumno - profesor, una
visión integral y esclarecedora de lo contradictoria que es la realidad Colombiana
en relación con la política económica y la pobreza. Aclarando además que el
módulo es una herramienta de trabajo que requiere de una mirada critica y
reflexiva. Como herramienta, el módulo debe estar acompañado de material
complementario e información de diversas fuentes: Internet, revistas, textos,
periódicos e investigaciones realizadas sobre el tema, que faciliten al estudiante
una mejor comprensión, argumentación y análisis de la problemática Colombiana.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 3

Horizontes
• Orientar el desarrollo de experiencias de aprendizajes teóricos – prácticos y
significativos que le permitan a los estudiantes de licenciatura en educación
básica de los diferentes énfasis, de la modalidad a distancia, lograr las
competencias básicas con relación a los problemas relacionados con la política
económica y pobreza en Colombia.

• Propiciar el análisis crítico y reflexivo en el estudiante – maestro del complejo


panorama de la realidad económica y social del país a puertas del próximo
milenio.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 4

UNIDAD 1: Política Económica


Descripción Temática

La primera unidad hace referencia los elementos históricos de la economía a partir


del siglo XIX, y principios del siglo XX, como al desarrollo capitalista en Colombia y
la política económica del siglo XX.

Esta primera unidad contiene dos capítulos interelacionados y significativos del


desarrollo económico del país, con sus múltiples contradicciones, interrogantes y
modelos en el corto espacio de vida republicana en Colombia: referentes
históricos y política económica.

La segunda unidad aborda el problema de la pobreza en Colombia como gran


núcleo temático, con unos núcleos problemáticos, concomitantes con aspectos
tales como: los grupos armados, el narcotráfico, el desempleo, la preocupante
situación del progresivo endeudamiento externo en el país y la escalada del
subempleo y la economía informal en Colombia.

Los contenidos temáticos que se abordan en él modulo, están orientados desde


diversas perspectivas teóricas, metodológicas y políticas, con él animo de
presentar al estudiante una visión holística desprovista de interpretaciones
ideológicas sesgadas.

Horizontes
• Inferir las causas históricas de la política económica y pobreza en Colombia
desde la época republicana, el desarrollo capitalista y la política económica del
siglo XX de cara al próximo milenio.
• Encontrar elementos históricos significativos de la política económica en
Colombia que permita discernir las causa y consecuencias de las misma, como
encontrar caminos viables para resolver los problemas socio - económicos de la
realidad Colombiana.
• Escudriñar y comprender el fenómeno del narcotráfico y sus sucursal
económicas.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 5

• Analizar las categorías económicas y el sustrato ético de las mismas en la


realidad Colombiana.
• Profundizar en la relación economía - medio ambiente, con él animo de
propender por un desarrollo sostenible en Colombia.
• Identificar las causa del desempleo y economía informal en la política
económica Colombiana.

Núcleos Temáticos y Problemáticos


• Referentes Históricos
• Política Económica 1980 - 2000

Proceso de Información
En el primer ítem de la unidad se analizan los elementos teóricos conceptuales
relacionados con los referentes históricos de la política económica en Colombia de
finales del siglo XIX y el proceso de desarrollo capitalista del país de principios del
siglo XX.

La intención de los contenidos problemáticos en primera instancia, de esta primera


unidad, es aportar al alumno maestro los elementos sustantivos de comprensión y
reflexión frente a la problemática económica y social del país.

Para la segunda unidad el estudiante, deberá plantearse interrogantes y preguntas


sobre los efectos y consecuencias de la política económica y social en los últimos
veinte años del siglo XX y principios del próximo milenio. Además deberá indagar
y analizar los efectos y elementos de la política económica actual, cómo las
consecuencias del narcotráfico, el medio ambiente, el desempleo, la violencia, la
economía informal etc, en la economía Colombiana.

Las siguientes actividades sugeridas al alumno maestro intentan y buscan


apropiarlo de elementos mínimos en la comprensión del fenómeno de la política
económica e incidencias históricas de la misma.

• Consultar artículos, revistas libros, ensayos, paginas en Internet y otros que


estén a su alcance, con el propósito de que construya un concepto personal
sobre: política económica, desarrollo capitalista, categorías económicas e
indicadores sociales.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 6

• Indagar sobre los referentes históricos de la economía Colombiana en el siglo


XIX y siglo XX haciendo un contraste entre estos periodos históricos, resaltando
elementos comunes.

• Indagar sobre las políticas internacionales sobre el medio ambiente y las


repercusiones de la misma en la estructura económica mundial y sus efectos en
la economía Colombiana.

• Realizar un análisis sobre los efectos de las políticas económicas de: Banco
Mundial, Fondo Monetario Internacional, Banco Interamericano de Desarrollo y
el CEPAL, con relación a la política económica Colombiana.

• Identificar los elementos que identifican la globalización y el neoliberalismo, y


que efectos producen en la política socio económica del país.

1.1 REFERENTES HISTÓRICOS

1.1.1 Política Económica en Colombia 1830 – 1880

La lucha en torno a políticas favorables a la expansión del comercio exterior lo que


comúnmente se conoce con el nombre de librecambio se dio en frentes muy
diversos. Los dos más importantes fueron la batalla por la eliminación del
monopolio del tabaco y por la adopción de un sistema arancelario liberal. El
desarrollo de nuevos sistemas y vías de comunicación y la política de baldíos
fueron también importantes para el desarrollo comercial, aunque en el último caso
sólo claramente cuando se trataba de la explotación de recursos forestales. Puede
pensarse que las políticas liberales en general, al permitir una mayor circulación de
la tierra y de la mano de obra, también tuvieron el mismo propósito, pero las
conexiones son aquí mucho más remotas, según veremos más adelante. En el
caso del proteccionismo, el sistema arancelario fue objeto de atención prioritario,
pero también desempeñaron un papel importante las luchas por obtener
monopolios y subsidios de distinta naturaleza. Hubo, además, reclamos insistentes
sobre la necesidad de establecer escuelas técnicas y de oficios para instituir a los
artesanos, pero los ensayos en esta dirección fueron muy modestos.

Tanto la lucha por la liberación del monopolio del tabaco como aquellas que se
libraron en torno al sistema arancelario muestran claramente los límites dentro de
los cuales operaban las concepciones más puras de librecambio y proteccionismo.

En el caso del tabaco, debe recordarse que la implantación del monopolio fue
particularmente traumática en la Nueva Granada, hasta el punto de haber sido una

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 7

de las causas básicas de la Revolución de los Comuneros, en 1781. La resistencia


al monopolio, que se expresaba a través de siembras clandestinas, fue un
problema constante en los últimos decenios de la colonia, en particular en las
zonas donde la implantación del estanco había reducido significativamente las
áreas cultivadas. La libertad del cultivo y comercio de la hoja o, al menos, el
arrendamiento de las factorías figuró, además, como uno de los reclamos
reiterados de los comerciantes en los primeros decenios de la república . Esto
último estuvo asociado no sólo a las posibilidades que planteaba el comercio
interno de la hoja sino también, y quizá especialmente, a las potencialidades que
brindaba el mercado internacional.

En efecto, a diferencia de los otros monopolios estatales importantes (aguardiente


y sal), el del tabaco se refería a un producto con bajos costos de transporte “un
hecho decisivo, cuando se tienen en cuenta las precarias vías de comunicación que
existían en Colombia en los primeros decenios de la república y las características
geográficas del país” y una buena demanda externa, asociada en los años treinta
y cuarenta al cambio en los patrones de consumo internacionales (de la pipa y el
rapé hacia el cigarro) y a la desorganización de la producción en Virginia y
Maryland, en los Estados Unidos, que hablan sido en el siglo XVIII las principales
fuentes de abastecimiento de tabaco para el mercado internacional.

Pese a este conjunto de factores favorables, las necesidades fiscales impidieron


por mucho tiempo considerar seriamente la posibilidad de eliminar el monopolio; la
supresión de otros tributos y el fracaso de la contribución directa en los años
veinte reiteró la necesidad de mantener el monopolio. su reorganización en los
años treinta fue, en gran medida, obra del gobierno liberal moderado de Francisco
de Paula Santander. No obstante, las condiciones bajo las cuales se reorganizó el
estanco permitieron la penetración del sector privado en el negocio, lo cual
satisfizo en parte las aspiraciones de los comerciantes, pero también hizo
inevitable su privatización.

El sector privado entró en el negocio tabacalero a través de dos vías diferentes. La


primera de ellas fue la exportación. Como parte de las medidas de reorganización
de la renta, y ante la solicitud de una casa comercial extranjera, el gobierno de
Santander permitió la primera exportación de tabaco. Aunque ésta se hizo por
cuenta del gobierno, las remisiones subsiguientes estuvieron en manos del sector
privado, ya sea como producto de los remates de tabaco para exportación
realizados por el monopolio, o del pago de deudas públicas garantizadas con los
recursos del estanco. Por otra parte, como resultado de la continua penuria fiscal,
el gobierno se vio obligado en algunas ocasiones a recurrir a los fondos de caja de
las factorías para cubrir sus gastos ordinarios. De esta manera, en el momento de
hacer los pagos a los cosecheros, se encontraba sin fondos suficientes. Este

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 8

problema fue particularmente grave durante la Guerra de los Supremos, llevando


al gobierno a emitir vales que no había pagado todavía en su totalidad dos años
después de terminada la disputa. Esto lo obligó, además, a permitir siembras a los
hacendados que tuvieran acceso al crédito y a pensar en entregar la
administración del monopolio al sector privado, utilizando facultades que se le
habían concedido desde 1832.

Este último paso se dio finalmente en 1847, durante el gobierno de Mosquera, el


cual aprobó, además, la creación de nuevas factorías destinadas exclusivamente a
la exportación. La entrega de la administración del monopolio al sector privado
permitió un crecimiento rápido de las exportaciones de la hoja. Ante este hecho,
la presión para abolir el estanco se torné frontal. Pese a la oposición del gobierno
de Mosquera, el Congreso aprobó la abolición del monopolio en mayo de 1848,
sustituyéndolo por un impuesto a la exportación. Un año después, este impuesto
fue reemplazado por uno mixto, a la exportación y a las siembras. Ante los
reclamos según los cuales los tributos eran excesivos, en mayo de 1850 la
producción y comercio de tabaco quedaron finalmente libres de toda restricción y
gravamen.

En el caso de la política arancelaria, las posiciones librecambistas fueron mucho


más tibias en los primeros decenios de la república e incluso predominó más bien
una actitud moderadamente proteccionista. Después de mediados de siglo, las
necesidades fiscales se tornaron, además, en obstáculos francamente insalvables
para la adopción de los principios más puros del librecambio en materia
arancelaria. Desde el punto de vista fiscal hubo, así mismo, una clara
contradicción entre la lucha de los comerciantes por la libertad del cultivo del
tabaco y por un arancel liberal, que se resolvió en favor del primero. En efecto, la
abolición del monopolio sobre el comercio y el cultivo de la hoja aumentó la
dependencia del gobierno de la renta de aduanas y eliminó, as!, la posibilidad de
nuevas aventuras librecambistas.

En los primeros años de la vida independiente, la moderación de las posiciones


librecambistas sobre el arancel de aduanas tuvo diversos orígenes. Según hemos
visto, la independencia misma había logrado para los criollos, y en particular para
los comerciantes neogranadinos, uno de los objetivos por los cuales habían
luchado con más ahínco a fines de la colonia: la libertad de comercio con todas las
naciones. Igualmente, es probable que los derechos arancelarios establecidos a
comienzos de la república hayan sido en la práctica inferiores a aquellos que se
cobraban a fines de la colonia. La explicación de este hecho es muy simple: la
mayoría de los gravámenes a las importaciones se cobraban directamente en
España, al ser internadas o exportadas las mercancías, constituyéndose de hecho
en el mecanismo más importante para extraer un excedente fiscal en colonias que,

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 9

como la Nueva Granada, sólo pudieron remitir a la metrópolis sumas exiguas de


excedentes que dejaban las finanzas públicas en su propio territorio. De esta
manera, fue posible conciliar el interés de los comerciantes en aranceles más bajos
con las necesidades fiscales de la naciente república. Fuera de lo anterior, y pese
a la influencia que ya tenían los fisiócratas y los economistas clásicos, es evidente
que el pensamiento liberal en materia de comercio exterior no tenía aún el peso
que tuvo posteriormente. Las ideas proteccionistas derivadas del pensamiento
mercantilista no dejaban de tener, además, algún atractivo en países que apenas
despertaban a la vida independiente.

En cualquier caso, es evidente que los primeros años de la república fueron, al


menos en las ideas, años de proteccionismo moderado. En la década del veinte
los escritos del principal secretario de hacienda de la época, José María del Castillo
y Rada, expresaban ya claramente el concepto según el cual las aduanas “deben
ser consideradas no sólo como fuente de una renta cuantiosa, sino también como
uno de los medios poderosos de fomentar la agricultura, las manufacturas y el
comercio”. En los años treinta, las tendencias proteccionistas aparecieron con
mayor nitidez. Francisco de Paula Santander, José Ignacio de Marquez y Francisco
Soto, entre otros los dos primeros, presidentes de la república; y el tercero el
secretario de hacienda más influyente del periodo, expresaron puntos de vista
similares a los de Castillo y Rada sobre la necesidad de concebir las aduanas como
instrumento simultáneo de protección y de generación de ingresos fiscales.

Márquez, sin duda el más decid do proteccionista de la época, atribuyó la


decadencia que observó en las regiones artesanales al efecto acumulado de un
régimen colonial opresivo, de un período de continuo estado de guerra y de la
excesiva libertad de comercio característica de los primeros años de la república, y
no dudó proponer prohibiciones y otras trabas al comercio exterior para vivificar la
actividad económica interna.

Los mismos consulados del comercio no fueron ajenos a esta tendencia,


conjuntamente con los reclamos de paz, mejores vías de comunicación y libertad
del cultivo del tabaco, solicitaron medidas para recuperar los mercados internos
contra la competencia externa, llegando a sentenciar, como lo hizo el consulado de
Bogotá, que “un pueblo debe tener a la mira no depender de otro en lo que es
indispensable para subsistir”. Expresando una tendencia que era común en la elite
neogranadina desde la colonia, las solicitudes de protección más importantes se
referían, no a las manufacturas, sino a la agricultura al trigo, sobre el cual los
reclamos en el siglo XVIII habían sido interminables, pero también al tabaco y al
algodón, entre otros productos, el primero afectado por la desorganización del
monopolio durante las guerras de independencia, y el segundo por la competencia
estadounidense. Pocas voces verdaderamente librecambistas se oyeron durante

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 10

este período. Tal vez la única excepción importante fue la del comerciante inglés
Guillermo Wills, quien, en contra de las apreciaciones de Marquez, saludaba con
una satisfacción mal disimulada la competencia que experimentaban las regiones
artesanales de Santander con los textiles ingleses, e instaba a las primeras a
dedicar sus esfuerzos a actividades agrícolas más provechosas.

Pese al espíritu proteccionista de la época, los impuestos a las importaciones no


fueron muy elevados durante estos años. La tarifa promedio (es decir, la relación
entre recaudos arancelarios y valor de las importaciones) fue de 22% en los años
treinta y se elevó a 28% a comienzos de la década del cuarenta. Este aumento
fue el resultado no tanto de la elevación de los gravámenes propiamente dichos,
como de la caída de los precios internacionales, particularmente de los textiles,
que no se reflejaron en un ajuste simultáneo de los valores oficiales de las
mercancías, sobre los cuales se cobraban las tasas arancelarias que establecía la
ley. Los intentos más importantes de aumentar los gravámenes fueron, además,
revertidos rápidamente. El primero de ellos fue la elevación de la alcabala que se
cobraba sobre las importaciones, del 3 al 15% en agosto de 1828, pero cuatro
meses más tarde se redujo al 4%.

En 1832 y 1833 se hicieron nuevamente recargos importantes a los impuestos a la


importación. Para la mayoría de los textiles, los impuestos conjuntos de
importación, alcabala y otros menores se elevaron de¡ 24 al 30%,de los valores
oficiales de las mercancías. Estas alzas fomentaron el contrabando y terminaron
por reducir los recaudos aduaneros. Por este motivo, a fines de 1834 y en mayo
de 1835 se hicieron rebajas que disminuyeron los gravámenes a las importaciones
a poco menos del 24%.

Finalmente, en 1844 se aprobó una nueva reforma, que elevó los gravámenes
sobre los alimentos y algunos textiles. Pocos años después, en 1847, se aprobó,
sin embargo, la primer gran reforma librecambista del siglo XIX. Cuando se
analizan las características del régimen arancelario de la época por tipo de
productos, se aprecia, en forma no muy sorprendente, que dadas las concepciones
de la elite, los mayores niveles de protección beneficiaban a productos agrícolas.
Si nos referimos únicamente a los alimentos más comúnmente importados en el
siglo pasado, se encuentra que el azúcar fue de prohibida importación hasta 1847;
antes de la reforma liberal de dicho año el arroz pagaba, además, impuestos
equivalentes al 150 0 170% de su precio en puertos de Estados Unidos, y la harina
de trigo y la manteca gravámenes del 50 al 70% sobre la misma base. Las telas
tuvieron gravámenes ad valoren más modestos, aunque crecientes, ya que la baja
en los precios internacionales de estos productos fue particularmente marcada en
los primeros decenios de la república.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 11

El ensayo más ambicioso de protección de las actividades manufactureras no


estuvo en el frente arancelario, sino en la concesión de privilegios exclusivos, y no
favoreció, de esta manera, a los artesanos sino a la elite económica. En efecto,
con base en monopolios temporales concedidos por el Estado para utilizar ciertas
técnicas de producción, en los años treinta tuvo lugar un intento fallido de
industrialización en Bogotá, que incluyó, entre otras, fábricas de textiles, loza,
vidrios y papel. Debido, sin embargo, a problemas técnicos de diferente índole
(entre ellos, la escasez de mano de obra calificada), a los altos costos de
transporte de la maquinaria, a limitaciones de¡ mercado interno, a la Guerra de los
Supremos y a las especulaciones financieras de la época, estas fábricas
languidecieron rápidamente y muchas de ellas abandonaron sus labores en el
decenio siguiente. Este fracaso fue, sin duda, decisivo en el cambio de orientación
de la elite dirigente hacia el librecambio en los años cuarenta.

Las concepciones liberales sobre el manejo de¡ comercio exterior llegaron


triunfantes en 1847. Florentino González, el arquitecto de la reforma arancelaria
de dicho año, expresó con fuerza ideas que Guillermo Wills había sembrado en
terreno árido casi dos decenios antes: “en un país rico en minas y en productos
agrícolas, que pueden alimentar un comercio de exportación considerable y
provechoso, no deben las leyes propender a fomentar industrias que distraigan a
los habitantes de las ocupaciones de la agricultura y minería, de que pueden sacar
más ventajas”. Grandes pensadores liberales, como Miguel Samper, Salvador
Camacho Roldán y Aníbal Galindo, pero también grandes políticos conservadores,
como Mariano Ospina Rodríguez, predicaron puntos de vista similares en los años
siguientes.

El primero de ellos afirmaría varios años después, con deslices casi líricos: “da
vergüenza emprender a estas horas las demostración de una vejez tal como la de
que la protección es una quimera o una injusticia, cuando en ninguna parte se le
consagran, lo mismo que a su padre el socialismo, más honores que la oración
fúnebre y el epitafio”. Acorde con estos principios, la justificación proteccionista
del arancel desapareció por entero, quedando únicamente el motivo fiscal para
mantener impuestos aduaneros. Este principio quedó claramente establecido en el
Código de Aduanas de 1857: “el sistema de aduanas no tiene otro objeto que la
percepción del impuesto establecido sobre las importaciones y exportaciones”. Los
más radicales esperaban llevar este principio aún más lejos.

Aníbal Galindo, por ejemplo, soñó con un simple “peaje nacional en las fronteras”;
es decir, con un impuesto único y uniforme en las aduanas, que constituyera un
simple recargo a los costos de transporte. Algunos más soñadores, como Manuel
Murillo Toro, llegaron a sugerir la posibilidad de eliminar la renta de aduanas y, en
realidad, todos los impuestos heredados de la Colonia, sustituyéndolos por un

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 12

impuesto directo único y progresivo. Tuvo, sin embargo, el valor de reconocer que
las condiciones no eran propicias para semejante aventura.

Con la aceptación del librecambio por parte de segmentos abrumadores de la elite


de ambos partidos históricos, la defensa del proteccionismo recayó, por única vez
en el siglo pasado, en manos de los artesanos, dentro de la oleada de
movilizaciones populares que propició el liberalismo a mediados de siglo y que muy
modestamente imitó el partido conservador. Los artesanos movilizados por el
liberalismo no pertenecían, sin embargo, a los sectores más afectados por la
competencia externa. En efecto, el centro del movimiento fue la capital de la
república, donde no existía una tradición textil, mientras en las regiones
artesanales de Santander, ampliamente afectadas a mediados de siglo por la
competencia de las telas inglesas, permanecieron al margen de estas
movilizaciones.

La fracción draconiano del partido liberal fue la que asumió la defensa de este
sector de la población. Sería difícil, sin embargo, caracterizar esta fracción como la
“expresión política de los artesanos”, según lo afirma, a la ligera, Gerardo Molina.
Es mucho más apropiado pensar, con Germán Colmenares, que la defensa de los
artesanos no significaba en modo alguno un interés concreto de conservar ciertas
formas de producción o de preservar una manufactura nacional contra la amenaza
de la competencia de artículos extranjeros, sino más bien que los draconianos
confiaban en la fuerza política de un sector social o temían desafiarla.

1.1.2 Desarrollo Capitalista en Colombia

El signo que define la historia de Colombia en el siglo XIX, es el proceso de la


revolución democrática dirigida por los comerciantes, Desde el punto de vista
económico y político los objetivos de la revolución Nacional estuvieron íntimamente
relacionados con la revolución Mundial, a saber, el desarrollo del Capitalismo y la
implantación de un régimen de república Burguesa. Es de recalcar que las luchas
que se dan en el País surgen por divergencias en torno al objetivo de dicha
revolución. A diferencia de la revolución Democrática Americana, por ejemplo, la
clase que dirige el País no es la burguesía industrial sino la burguesía comercial.

En nuestro País las guerras civiles no son decisivas, tal vez con excepción de la
guerra de los mil días, la cual, en lugar de darle la victoria a la burguesía, se la da
a los terratenientes. Todo el proceso conocido como “regeneración”, no produce
sino el debilitamiento de un sector de los comerciantes, la claudicación de otro
sector y el fortalecimiento de los terratenientes.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 13

La revolución democrática en Colombia fracasa en el gobierno de Rafael Nuñez,


que le confiere a los terratenientes todo el poder, traicionando a un gran sector de
comerciantes. Cuando en Colombia se inicie el despegue del capitalismo, hacia los
años treinta (30), no se deberá a la política de la “regeneración”, sino a pesar de
ella. Colombia llega al siglo XX con una revolución democrática fracasada y en el
atraso más grande.

1.2 POLITICA ECONOMICA

El País en los primeros años del siglo XX, afronta los embates de la política de los
Países imperialistas, y el atraso económico. Colombia, en estos momentos exigía
una profunda modernización en todos los aspectos de la vida nacional. Para lograr
dicho objetivo era necesario en primera instancia retomar o proseguir la revolución
democrática que habían seguido algunos Países del mundo, o someterse a la
dominación imperialista interesada en un tipo de modernización de los países
atrasados del mundo, que sirviera a sus intereses de expansión económica.

En palabras de Olaya Herrera encontramos el dilema de la política social y


económica del País a principios del siglo XX:

“Pueblo que desarrolle su producción, canalice sus ríos, se forme buenas y baratas
vías de comunicación, perfeccione su utillaje agrícola e industrial, adquirirá por
virtud misma de estos progresos, seguridad interna para los derechos de sus hijos
y respeto internacional para su existencia soberana e independiente (Olaya
Herrera, Enrique”. Una independencia que peligra. En Oradores Liberales,
Selección Samper Ortega, Editorial Minerva, Bogotá, 1937, p. 223.)

El proceso de transformación que experimenta el partido liberal de la época, y la


crisis de la burguesía comercial, posibilitan el despegue en los años treinta de una
estrategia de desarrollo económico centrada en el endeudamiento externo, la
inversión directa Norteamericana en los recursos naturales y la incipiente industria.

Entre la primera y segunda guerra Mundial, Norteamérica diseña una estrategia de


expansión económica en América Latina. Busca en primera instancia consolidar su
posición económica en la región y al mismo tiempo impedir la expansión del
Socialismo en el continente Americano, liderado por Rusia.

La estrategia liderada por Franklin D. Roosevelr, con su slogan de “Política del


buen vecino”. Las conferencias Interamericanas de la Habana en 1928, de
Montevideo en 1933 y de Buenos Aires en 1936, son consecuencia de la política
Norteamericana. La injerencia del gigante Norteamericano en Latinoamérica se

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 14

fundamentó en una política basada en la estabilidad, la organización, y la asesoría


internacional, que no es otra cosa que la modernización económica. El proceso de
endeudamiento Colombiano frente al capital Norteamericano, se traduce en la
modernización del la infraestructura vial, y obras públicas con el fin de facilitar el
comercio entre los dos Países pero en términos desiguales. El enorme
endeudamiento de Colombia en la década de los años treinta, semejante ala de los
demás Países Latinoamericanos, precipitó la injerencia Norteamericana en; los
recursos naturales (petróleo), el acuerdo o tratado de libre comercio de 1935 que
dio un duro golpe a la industria Nacional.

Esta política de “modernización”, impuesta por EE.UU a través de su poder


financiero, de la incapacidad del estado Colombiano, es lo que ha permitido entre
otros factores, la preservación del subdesarrollo en el País. Donde se desarrollo un
capitalismo sobre la base del mantenimiento de todo el régimen terrateniente y en
donde se ha abierto campo a una economía en donde el control lo ejerce el
capitalismo imperialista. Esta dominación ha contribuido a establecer una
economía con tres características derivadas del estrategia modernizante a través
del endeudamiento:

• Capitalismo de Estado dependiente del capital financiero internacional.


• Economía controlada por las multinacionales y grupos financieros.
• Una economía industrial monopolista.

A mediados del siglo veinte, más concretamente al finalizar la segunda guerra


Mundial se agudiza la crisis social y económica en el Mundo, se constituye las
Naciones Unidas en 1945, sobre la base de la antigua Liga de las Naciones Unidas,
planteando como objetivo básico propósitos de desarrollo social y económico para
los países atrasados por parte de las naciones industrializadas. Para tal fin se
organizaron comisiones económicas regionales que se encargasen de diseñar
modelos de aplicación política en Países en vía de desarrollo. Así nació la comisión
económica para América Latina CEPAL. A la par con ésta estrategia los Países
desarrollados se dedicaron a estudiar y diseñar nuevas estrategias para afrontar
los nuevos problemas del desarrollo, construyendo múltiples y variadas teorías. De
ahí nacen las modernas teorías desarrollistas que en esencia, tratan de presentar
la propia realidad de los Países industrializados como modelo de desarrollo para los
Países atrasados. Se generaliza de esta manera la visión ideológica de
interpretación histórica que se pueden esquematizar en los siguientes puntos:

• Todas las sociedades fueron subdesarrolladas al advenimiento de la


industrialización capitalista.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 15

• Unas pocas sociedades lograron alcanzar una situación de desarrollo por medio
del mercantilismo y la revolución industrial.
• Mas tarde en el siglo XX, otras naciones alcanzaron el desarrollo, a través de la
planeación centrada.
• En tanto tales naciones vivieron su proceso de desarrollo, la gran mayoría no
alcanzaron la meta de desarrollo.
• Las naciones hoy consideradas subdesarrolladas, están llamadas a seguir los
mismos pasos y estadios que vivieron las Naciones desarrolladas, imponiendo
así una visión “lineal”, del desarrollo. Como consecuencia de esta visión
ideológica, se acuñó el concepto político de tercer Mundo, para calificar a todas
las naciones en vía de desarrollo. Las teorías se enfrentaron con el problema
de unir operativamente dos modelos de sociedades, una atrasada y otra
industrializada, se tomaron para tal fin, esquemas teóricos dualistas.

Recobraron vigencia pensadores como Toennies, Durkheim y Weber, a través de


conceptos como los de sociedad moderna vs. Sociedad tradicional y sociedad
industrializada vs. sociedad no industrializada. Aparecen entonces las teorías
sobre las sociedades en transición. En este proceso la concepción estructuralista
de la CEPAL, se abre paso en Latinoamérica apoyada en la idea de que era
necesario efectuar cambios de fondo en la estructura social. Estos cambios debían
centrarse en la redistribución del ingreso, a través de planes como la reforma
agraria. Pero el meollo del problema se centraba en el nivel político, ya que
pregonaba el cambio en las élites, con el fin de poder implementar los planes de
redistribución del ingreso y su consecuente estímulo a la industrialización. Habría
que fortalecer las burguesías Nacionales, por medio de una gran movilización
social de los sectores medios y la base popular.

En la América Latina actual, siguen en vigencia los modelos y teorías derivados de


la concepción lineal del desarrollo. Las posibilidades de las teorías estructuralistas
quedaron truncadas políticamente en América Latina, a raíz del golpe militar de
1964 en Brasil. País donde estuvo más cerca la implementación de los citados
modelos, ya que los planes de desarrollo del gobierno derrocado estaban a cargo
de Celso Furtado, uno de los principales teóricos de esta corriente. En Colombia,
el fracaso de las tendencias de desarrollo propugnadas por la ley de reforma
agraria de 1961, pudo lubricarse políticamente desde comienzos de la década de
los setenta, cuando el entonces presidente Pastrana Borrrero, planteo la necesidad
introducir modificaciones sustanciales a la ley 135, de reforma agraria, enfocada a
medianos propietarios, lo que coincidía con las teorías estructuralistas. Estas
teorías de la “dependencia”, partieron de la creencia de que tanto el desarrollo
como el subdesarrollo eran fenómenos paralelos, simultáneos y contemporáneos.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 16

Estas vinculaciones de las sociedades subdesarrolladas con los Países


desarrollados, se denominaron relaciones de dependencia, como respuesta a las
relaciones de dominación imperialista que ejercen las sociedades industriales,
sobre las subdesarrolladas.

La influencia que en América Latina han mostrado las teorías del desarrollo
derivadas de la concepción de la dependencia, se ha manifestado más en el campo
de las ciencias sociales que en el de la política económica estatal. Tal influencia ha
reforzado aún más la crítica a los modelos y teorías derivados de la concepción
lineal o tradicional del desarrollo. Igualmente, ha ejercido un efecto claro sobre las
teorías surgidas de la concepción estructuralista, al forzarlas a adoptar
progresivamente categorías y conceptos propios del Marxismo, para poder explicar
los fenómenos del subdesarrollo.

En América Latina, ha rondado tres concepciones históricas políticas sobre el


desarrollo; las concepciones denominadas “lineal o tradicional” “estructuralista” y
de “dependencia”.

Todas estas concepciones ideológicamente viciadas, productos ideológicos, que


desvirtúan el verdadero compromiso histórico de América Latina.

El proceso de industrialización Colombiano y los patrones de acumulación sobre los


cuales se ha descansado transcurren de un modo más o menos similar a los demás
países Latinoamericanos. Una primera etapa de sustitución de importaciones, que
si bien se inicia en los años treinta, adquiere su configuración decisiva en los años
cincuenta, manteniendo esta tendencia hasta los años setenta.

1.2.1 Política Económica 1980 – 2000

La transición de las economías latinoamericanas en los últimos 20 años, centrado


en un modelo de desarrollo “hacia adentro” a otro marcado por la apertura a los
mercados internacionales está profundizando la crisis socio - económica de la
región. La reconvención productiva y laboral, como la desmaterialización de los
flujos económicos han creado traumas severos en la estructura social del empleo y
de los ingresos.

Los altos costos de la política económica de libre mercado, el aumento de los


índices de pobreza en la región y especialmente en Colombia, hacen imperativo
analizar y cuestionar la pretendida “regulación” unilateral de los mercados por el
capital mundialmente dominante. El mundo Capitalista está exigiendo que el
manejo de la crisis funcione también en el ámbito mundial, global. Con el sofisma
de distracción que todos los países en vía de desarrollo y desarrollados están en

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 17

condiciones de participar en igualdad de condiciones de los beneficios y vaivenes


del mercado de manera compartida y solidaria.

En Colombia el mercado laboral se ha fragmentado, el incremento de la tasa de


participación laboral se ha incrementado de manera alarmante, propiciada por la
inserción al mercado de trabajo de mujeres y jóvenes, sin desconocer el aumento
del trabajo de menores en el sector informal de la economía como solución a las
angustias de la economía familiar, especialmente en los sectores más pobres de la
sociedad Colombiana. Situación que se aprecia con mayor fuerza en las ciudades
del País. Estas tendencias han producido el aumento de las tasas de desempleo y
el aumento desenfrenado del empleo informal. La CEPAL resume en un informe
sobre América Latina, el fenómeno en mención en la década de los 90, así: en el
periodo mencionado (1990-95 ), la fuerza de trabajo creció a una tasa promedio
anual de 3.1 %; el empleo, a 2.9 % y el producto, a 3.2 %. Por consiguiente, la
productividad aumentó sólo un 0.3 %. Una pequeña proporción de los empleos
generados corresponde a los sectores modernos de la economía, mientras que la
gran mayoría se concentra en el sector privado de menos productividad relativa y,
en especial, en el área de los bienes y servicios no transables; como ya se ha
mencionado, esta heterogeneidad laboral dificulta la superación de la pobreza y
una mejor distribución del ingreso. La proliferación de empleos de baja
productividad, trabajadores por cuenta propia, asalariados en microempresas,
empleados domésticos y trabajadores sin remuneración, ha venido acompañada de
falta de protección, contrataciones flexibles a plazo fijo, subcontrataciones y otras
modalidades que han aumentado a incertidumbre y la inestabilidad laboral.

Las Ciudades en Colombia se han hecho excluyentes, la pobreza se concentra con


mayor fuerza en ellas. Los altos índices de desplazados en el país se han sumado
a la apremiante situación de las ciudades en Colombia. El profesor Fabio E
Velázquez, de la universidad del valle, en un artículo publicado en la revista foro,
en Octubre de 1999, numero 37, páginas 44 y 45 planteó, en relación con la
pobreza en las ciudades de Colombia, lo siguiente:

La pobreza es la expresión más visible y de mayor impacto de la exclusión. Pero


no es la única. Otras formas han ganado terreno, tres de las cuales merecen ser
mencionadas por el modo como han permeado la estructura social de las ciudades.

En primer lugar, la segregación socio espacial. No sólo en las ciudades viven los
pobres, sino que las ciudades, ellas mismas son pobres: hospitales deteriorados,
escuelas insuficientes, áreas desarticuladas de las redes de infraestructuras y
servicios, espacios públicos privatizados, deterioro del medio ambiente,
asentimientos humanos precarios ubicados en zonas de alto riesgo etc. Las
ciudades evidencian una gran dificultad para garantizar condiciones dignas de vida

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 18

a sus habitantes, especialmente a los más pobres. El resultado es una ciudad


inorgánica, carente de toda posibilidad de convertirse en un espacio de encuentro
y de vida colectiva, muy mal dotada para hacer frente a los retos de la
productividad interna y de la competitividad de cara al mundo exterior.

En segundo lugar, la inseguridad y la violencia. Hoy día, las ciudades grandes e


intermedias pueden ser leídas en términos de víctimas y victimarios de la
inseguridad y la violencia. No sólo las tasas de delito en sus múltiples formas han
crecido, sino que el sentimiento de inseguridad crece entre los citadinos, lo que
genera un alto nivel de incertidumbre, máxime en aquellos países en los cuales el
Estado se muestra cada vez más incapaz de controlar, vía prevención o sanción,
las diversas manifestaciones de la violencia pública y privada. El informe de la
Cepal sobre la situación social de América Latina registra así el fenómeno: “existe
una percepción de inseguridad ciudadana cada vez más generalizada en la
población Latinoamericana, que tiene una base real en el aumento de los hechos
delictuales y de violencia, pero que también ha sido incentivada por la amplia
cobertura recibida en los medios de comunicación. La violencia tiene múltiples
causas y dimensiones, en las que confluyen circunstancias individuales, familiares y
sociales que inciden en los patrones de conducta doméstica y social. Los procesos
de rápida modernización que provocan incertidumbre, así como los efectos de la
exposición a la violencia en los medios de comunicación de masas y los períodos
de posguerra registrados en varios países, configurarían un contexto social propicio
para la acentuación de la inseguridad ciudadana. Es probable que esta situación
se agrave, como consecuencia de la desconfianza en los controles institucionales y
la sensación de que hay un recrudecimiento de la corrupción”.

La tercera forma de exclusión es la política: la elite del poder, para emplear el


término acuñado por C. Wright Mills, en estos países se ha aferrado a los
privilegios que se derivan de su monopolio y se resiste, en unos países más, en
otros menos, a democratizarlo. A pesar de que las reformas descentralistas y el
retorno a sistemas democráticos abrieron la posibilidad de que los ciudadanos
accedieran a algunos niveles de decisión, no cabe duda que la llamada “ clase
política” cada vez se inserta más en lógicas de auto-representación política y
acapara las grandes decisiones publicas. El lenguaje de la participación se ha
generalizado, es cierto, pero las practicas participativas tienen una mayor dificultad
para extenderse y convertirse en ingrediente de medular de los regímenes
políticos. Esta tendencia está igualmente relacionada con la creciente
fragmentación social, la automatización de voluntades y el dominio de
racionalidades privadas en la ciudad que han debilitado la esfera pública y crean
barreras para la consecución de metas compartidas.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 19

Por eso, uno de los grandes retos de las ciudades Latinoamericanas es la


Gobernabilidad democrática, es decir, la posibilidad de que la gestión urbana sea
capaz de resolver con éxito las demandas de loa población a partir de decisiones
legitimadas por las mayorías, al tenor de las coordenadas marcadas por el Estado
social de derecho y por la autonomía político administrativa de los municipios.

Esta Gobernabilidad compromete a las instancias gubernamentales y también a los


actores que operan por la esfera Estatal. Como afirman acertadamente Rodríguez
Winchester, el desarrollo sostenible implica la incorporación de demandas y
conflictos sociales a la tomo de decisiones en le gestión urbana, lo que obliga a
“reinventar” el gobierno de la ciudad. Ello exige la definición de un “proyecto de
ciudad” construido colectivamente; la democratización de la esfera pública, en la
que confluyan los distintos actores para la constricción de una visión compartida y
la adopción de un compromiso de largo plazo con las tareas implicadas en la
superación de la exclusión; en fin, la afirmación de identidades sociales, del
sentido de pertenencia a la ciudad y el valor cívico, condiciones necesarias para
que los citadinos se conviertan en ciudadanos.

El economista Peruano Oscar Ugarteche, plantea que las políticas Neoliberales


fueron introducidas en América Latina mediante un proceso que se ha denominado
“condicionalidad cruzada”, donde todos los países deudores deben cumplir con sus
acreedores o de lo contrario, se les cancelan los acuerdos con los otros. Por lo
general, los compromisos con la organización Mundial del comercio (OMC), y
acuerdos bilaterales entorno al medio ambiente están ligados a las exigencias del
F.M.I. Se trata en últimas de imponer un conjunto universal de condiciones a los
países deudores. Pero no sólo éstas son básicamente las mismas, sino que
también los diagnósticos de la crisis que hace esta entidad para todos los países.

La reforma laboral y fiscal adelantadas en el país en los últimos años responden a


las necesidades de la Banca Internacional y a los ajustes con relación a los
principios Neoliberales que rigen el acuerdo suscrito con el F.M.I. en el año de
1999, llamado acuerdo de facilidades extendidas que entre 1999 y 2000 facilitó el
despido de más de 5.000 trabajadores en Colombia.

El 22 de Febrero del 2002, se cumplieron doce años desde cuando el gobierno de


Virgilio Barco, lanzará el programa de la modernización de la economía colombiana
(P.M.E.C), más conocido como política de apertura. Eduardo Sarmiento,
economista y columnista del Espectador, afirmaba en uno de sus artículos: los diez
años de apertura son “los peores del siglo, en términos de decrecimiento
económico, traducido en el deterioro del ingreso percapita, y el desempleo. (El
Espectador, Dic. 19 – 1999, pág. 2 – B)

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 20

El sector industrial; pequeña y mediana industria en la década de los noventa,


sufrió los embates de la política económica, donde cerca de 1.600 empresas fueron
cerradas con el despido de 30.000 empleados. De otra parte, como consecuencia
de la apertura económica y la crisis industrial, se incrementó la concentración de la
propiedad de las empresas y la participación de los inversionistas extranjeros en el
sector productivo y de servicios.

La producción agropecuaria, con la apertura económica se vio altamente afectada,


cultivos claves en la alimentación de los Colombianos fueron desapareciendo del
sector agrícola: algodón, cebada, trigo, soya, sorgo y maíz.

En los actuales momentos la producción y comercialización del 95% de los


alimentos en el País se concentran en manos de las grandes Multinacionales. La
política de apertura económica, ha venido beneficiando al sector financiero, con
una alta participación y concentración del capital extranjero, a costa de los
sectores productivos.

En materia de privatizaciones los gobiernos no se han quedado atrás, aunque en


los gobiernos de Cesar Gaviria y de Ernesto Samper se incrementaron, en el
gobierno de Andrés Pastrana se llego lo más lejos en esta materia. Empresas de
servicios públicos: agua potable, energía eléctrica, gas domiciliario, y telefonía,
entre otros, han pasado a manos de multinacionales, lo que ha facilitado el
desmedido aumento de las tarifas en el servicio. La inversión en obras de
infraestructura se ha manejado con el sector privado, bajo la modalidad de
concesiones, lo que ha reducido sustancialmente la inversión pública en las
regiones más deprimidas y pobres del País.

Estas medidas de política económica en el último decenio, han sido altamente


recesivas, y entregadas a la banca internacional, F.M.I. y a la política de seguridad
implantada por el gobierno Norteamericano.

1.2.2 Economía y Narcotráfico

Colombia es el centro de debates en las principales reuniones gubernamentales de


carácter mundial. Y el tema que preocupa en forma predominante es el del
narcotráfico. Con relación a lo anterior se debe tener en cuenta dos aspectos a
saber: primero qué es Colombia y segundo, qué significa el tráfico de
estupefacientes a nivel mundial.

En primer lugar, Colombia es un país situado en la parte norte de lo que se conoce


como Sudamérica, posee costas marítimas por dos de sus costados, el norte y el
occidental, posee una extensa zona de bosques tropicales y llanuras inmensas en

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 21

las cuales hay grandes depósitos de minerales y petróleo en abundancia. Posee


tres cordilleras en cuyos costados se encuentra toda clase de climas a mínimas
distancias, de los más gélidos páramos hasta las depresiones más calientes
alrededor de grandes ríos que permiten una importante red de transporte fluvial.

La Economía colombiana tiene particularidades específicas que hacen del país una
nación rica en comparación con otras naciones; en Colombia se han estructurado
industrias de importancia, como la textil, la industria siderúrgica, la producción
cervecera, de alimentos y otras más que han generado un nivel de desarrollo
económico relativamente importante; en la economía agrícola el país posee una
producción cafetera y de banano de gran importancia en el contexto Latino
americano; también el petróleo es un renglón económico de grandes realizaciones;
además, hay oro, platino, carbón y otros minerales de menor nivel económico; la
burguesía colombiana es hábil en la generación de empresas y posee relaciones
internacionales que le producen un piso bastante firme a sus ramas productivas.

En el terreno socio – cultural, Colombia posee una rica gama de intelectuales entre
los cuales hay personajes de renombre mundial; al mismo tiempo existe una gran
riqueza científica proveniente de la época de la colonia en la cual se distinguieron
importantes personajes extranjeros y nacionales.

En el aspecto político es un país que se caracteriza por haber tenido gobiernos


civiles interrumpidos dos veces en un espacio de tiempo de un siglo por
seudogolpes militares; decimos seudogolpes porque los que se dieron estuvieron
auspiciados por civiles; en efecto, un primer golpe se dio en 1854 y apenas
perduró por unos seis meses al cabo de los cuales se unieron todas las fuerzas de
la oligarquía tradicional para restaurar gobiernos civiles, y en 1953 otro golpe fue
dado para restaurar la institucionalidad que se venía deteriorando en manos de un
partido reaccionario; en ambos golpes fueron los civiles organizados de la
oligarquía los que determinaron su producción y fueron ellos mismos los que les
pusieron fin. En este aspecto, pues, Colombia se distingue en forma muy clara de
el resto de países latinoamericanos en donde las dictaduras propiamente militares
y militaristas han sido una continuidad histórica hasta finales del siglo XX.

Sobre este panorama histórico es que se puede analizar realmente lo que acontece
actualmente en Colombia y en los países industriales con respecto a Colombia. Por
otra parte y respecto a lo exterior, es fundamental tener en cuenta que Colombia
pertenece, en lo que se refiere a su territorio y a su población, al proceso evolutivo
del coloniaje europeo, concretamente a España bajo cuyo dominio estuvo durante
más de quinientos años. Luego de la independencia en el siglo XIX, sus nexos con
las potencias industriales, fundamentalmente con Inglaterra, han venido
desarrollándose bajo el dominio de la potencia de turno, hoy lo es Estados Unidos

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 22

de Norteamérica. Más aún, en los conflictos bélicos nacionales, la participación


extranjera ha sido una constante; podemos citar el caso de las guerras civiles del
siglo XIX y, la última de ellas, la denominada de los mil días, en cuyo final fueron
los Estados Unidos de Norteamérica los que árbitros del acuerdo entre las
facciones de la guerra.

Colombia, como todo país que es colonizado, sigue bajo las pautas y políticas
económicas de las potencias capitalistas más poderosas del mundo. En este
momento de su Historia, el fenómeno del narcotráfico, generado en los últimos
años, ha colocado a Colombia en un punto referencial de la política de esas
grandes potencias.

El problema social de la drogadicción y el crimen modernos, se explica en base a la


decadencia de los grandes imperios y del capitalismo en particular, como modo de
producción actual. El alto desarrollo económico de las potencias imperialistas
mundiales lleva a su decadencia social y cultural; las clases dominantes entran en
un ciclo histórico en el cual se va desmoronando su existencialidad física y mental.

Esto quiere decir que la casta dominante genera en su descendencia la


degeneración física y mental debido a que lo posee todo, a que no tiene
necesidades de clase alguna que cubrir y esto lleva a la inactividad productiva y al
vivir de las ganancias que le generan los dominados, los explotados de su propia
sociedad. Fenómenos parecidos podemos encontrar en la decadencia de los
imperios antiguos, en Egipto, en Babilonia, en Grecia, en Roma, para citar los más
caracterizados imperios de Occidente, pero similar fenómeno se produjo en los
imperios de Oriente, el Otomano, el de las dinastías chinas e hindúes y también del
Japón.

Como la decadencia se precipita sobre el ocio y el vicio, hay sustancias que los
desarrollan y sostienen. En el Oriente ha sido el opio, en los grandes imperios las
grandes bacanales al calor del vino, las mujeres y las comidas exóticas. En el
presente son los estupefacientes que generan un estado de éxtasis y alucinaciones
psíquicas.

En los países y sociedades decadentes actuales, como son los países de Europa y
Estados Unidos, como también el Japón, los estupefacientes no son naturales, no
se cultivan allí las plantas que los producen; es en ciertas zonas del planeta en
donde las plantas que los producen crecen y dan sus frutos en mejor forma.

En Colombia se dan las condiciones más óptimas para la producción de tres


plantas base de estupefacientes de gran consumo y demanda: la marihuana, le
coca y la amapola, planta de la cual se extrae la heroína. La primera es una planta

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 23

de muy alta calidad pero ella ya se cultiva en ciertas regiones de los Estados
Unidos de Norteamérica, de la segunda procesa la cocaína y la tercera crece en los
campos como una flor hermosa de ciertos lugares del país.

Entonces, Colombia, así como produjo para exportar quina en la época de la


colonia, tabaco y café en todo su proceso histórico, cultiva esas tres plantas en
mejores condiciones y de mejor calidad que en cualquier otra parte del mundo;
pero además, posee las rutas más funcionales para que los productos, resultado
del procesamiento de las plantas, lleguen a las sociedades consumidoras de los
mismos en su proceso de decadencia social y cultural.

Se produce, entonces, la gran alianza entre la decadencia y la pobreza; porque


Colombia pertenece al campo de los países pobres, no en lo que se refiere a sus
recursos naturales y humanos sino al campo social en donde la pobreza es similar
a la de otros países del mundo dominados por las potencias colonialistas,
neocolonialistas y hoy capitalistas imperialistas. Este es un fenómeno histórico que
no depende ni las castas de los países dominantes ni de las castas de los países
dominados; los regímenes políticos y sociales no son buenos o malos, son
fenómenos históricos que produce el desarrollo de las fuerzas productivas y todo
esto es independiente de la voluntad de los asociados por más "buenos" que ellos
sean.

La alianza países industriales desarrollados, capitalistas mundiales, con países


como Colombia, se hace en base a problemas comunes pero que son más graves
social y humanamente en los primeros que en los segundos; esto por cuanto son
los individuos de los primeros los que van camino a la degeneración de su
condición humana a causa, irónicamente, de su mismo bienestar material. La
burguesía es emprendedora, dinámica, puritana en sus comienzos, pero las
generaciones que engendra no lo son en la misma medida: al recibir un acumulado
herencial como clase y como individuos, su accionar se hace más fácil, sus
ganancias aumentan, su consumo se hace fútil y exótico y el vicio se presenta
como un efecto inevitable. El vicio es el exceso de comodidad material y escasez
de elementos intelectuales racionales. Lo predominante, en las sociedades
capitalistas desarrolladas, es la preocupación por la propiedad, por el lujo y el
consumo masivo. Naturalmente que al lado de este aspecto se encuentra el
avance de la ciencia, el conocimiento y la tecnología, pero esto es propio de un
número de individuos muy reducido, generalmente al servicio de las grandes
empresas monopólicas mundiales. Lo mayoritario, socialmente, se centra en el
deseo de consumo de bienes en gran parte innecesarios y superfluos que
demandan un uso irracional de los recursos naturales y sociales.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 24

Lo que preocupa a los gobiernos capitalistas desarrollados y a los capitalistas no


desarrollados o subdesarrollados, como se les llama, no es el problema de la salud
física y mental de los consumidores de estupefacientes; si así fuese habría una
atención real para miles de enfermos por desnutrición y enfermedades mentales
no provenientes de uso alguno de sustancias psicotrópicas; lo que preocupa a las
castas dominantes es la desestabilización de sus economías, producida por el
inmenso movimiento monetario que el tráfico de esos estupefacientes genera en
todo el mundo y entre las naciones consumidoras y las naciones productoras y
procesadoras de los mismos.

Las castas dominantes sólo entienden el fenómeno de la ganancia y en dónde va a


quedar; esas castas se manifiestan dentro de este panorama existencial mundial,
Colombia es el mejor productor de estupefacientes, de productos que satisfacen la
decadencia humana de una buena parte de individuos en capacidad de
consumirlos, necesitados de su consumo al encontrarse ya en la pendiente de su
propia degeneración humana. Se produce una interdependencia, similar a la
establecida entre el individuo y la sustancia psicotrópica, entre la nación
consumidora y la nación productora, entre el consumidor y el proveedor. Las leyes
de la demanda y la oferta sostienen el proceso de interdependencia y, entonces,
se genera la reacción de los gobiernos ante semejante problema económico, social
y cultural. Que el país productor sea Colombia es una casualidad geográfica, pero
con el tiempo, los países industriales capitalistas irán produciendo esas sustancias
en forma industrial como ha sucedido con la droga médica para usos en el campo
de la salud a través de la doble moral clásica de las religiones que dominan el
mundo.

Los más agresivos perseguidores del narcotráfico son, muchas veces, sus más
adictos consumidores. En las reuniones sociales de esas castas poderosas
capitalistas burguesas, en las grandes capitales financieras e industriales del
mundo, son sus individuos los que se drogan para evadirse hacia mundos
supuestamente placenteros mediante el consumo de desinhibidores cerebrales que
les permiten vivir la fantasía que desean.

El fenómeno del narcotráfico genera infinidad de nuevos fenómenos tanto en la


estructura económica de las sociedades como en sus manifestaciones sociales,
culturales, familiares, individuales, etc. En lo económico, incide en las políticas de
los países involucrados, como ya lo anotamos, en lo social genera un debate sobre
el uso de los estupefacientes en el sentido de permitir su consumo libremente o
reprimirlo, en lo cultural produce una actitud mental, en lo familiar entre hijos y
padres se rompe, en muchos casos, la armonía existencial y en el individuo lo
puede liquidar como tal en su vivencialidad material y psíquica.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 25

A la vez, en lo económico, la alianza genera una traslación de recursos monetarios;


los países o sociedades consumidoras, capitalistas poderosos, disponen de sumas
inmensas para la lucha contra la producción de sustancias estupefacientes en los
países productores a más de las que gastan para la atención de los drogadictos
nacionales de sus propios nacionales. Esta traslación monetaria de recursos sirve,
a la vez, para aliviar las balanzas de pagos y los déficits nacionales, pero también,
y en gran medida, para vender armas y elementos de guerra a los países
productores en donde, también, hay profundas contradicciones sociales y la
pobreza acentúa su presencia en forma inevitable.

Podemos afirmar que mientras los países productores de estupefacientes reciben


grandes sumas de dinero para la represión al narcotráfico, los países en donde el
consumo se da logran inmensas ganancias vendiendo armas, precursores químicos
para el procesamiento de esos estupefacientes; entonces, lo que reciben los
productores son apenas una muy reducida suma de la gran ganancia capitalista de
los consumidores. Este es uno de los fenómenos que genera la sociedad
capitalista moderna, como hubo otros que generó en otros ciclos históricos de su
existencia.

El Plan Colombia, haciendo un poco de historia, evoca de alguna manera la


llamada Operación Colombia, quizás el primer plan de desarrollo que se gestó en el
País y que fue elaborado por el técnico Norteamericano, Lauchlín Curie, quien
había participado en el plan Marschall. Misael Pastrana Borrrero, retoma las ideas
básicas de la propuesta y las transfiere a su política económica denominada las
cuatro estrategias, que hacia énfasis en la construcción de vivienda, como motor
de empleo urbano para descongestionar la mano de obra rural asentada en las
principales ciudades.

Andrés Pastrana habló a principios de su gobierno de un plan Marschall para la


paz, que fue bautizado con el nombre de Plan Colombia. Plan que fue elaborado
en gran parte en EE.UU, discutido y aprobado en primera instancia por el congreso
de aquel País hegemónico. El Plan concentra sus esfuerzos en la “defensa y
seguridad Nacional”, para lo que se destinó el 64 % de los recursos, quedando
para la inversión social tan sólo el 21.7 % de los mismos. El dinero destinado a la
seguridad Nacional, está dirigido básicamente a mejorar la movilidad e inteligencia
de las fuerzas armadas Colombianas y entrenamiento de cuerpos élites.

Demostrando la desconfianza Norteamericana en la gestión militar y administrativa


de nuestras fuerzas militares, que se han visto involucradas en situaciones de
malversación de fondos y corrupción por ello, la presencia en la geografía
Nacional, de más de tres mil asesores militares Norteamericanos en unidades
Antinarcóticos y contra insurgencia.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 26

La política antinarcóticos y contra insurgente, como economía de guerra se puede


catalogar como política de control social. Los estudios que se han realizado en el
País, demuestran la posición de que el narcotráfico, no ha ocasionado
prácticamente ninguno de los problemas sociales, económicos y políticos que
afronta el País: se limita a potenciarlos y a hacerlos más complejos. Para nadie es
un secreto que la corrupción, las desigualdades sociales, la falta de oportunidades,
la incapacidad del estado, las luchas por la tierra, la insurgencia armada, hacen
parte de la historia y desarrollo de nuestro estado - nación.

Lo que si es inocultable y claro, es que el narcotráfico ha permeado la estructura


social Colombiana, haciendo carrera la denominada “cultura mafiosa o de la
ilegalidad”, planteada por diverso intelectuales y politólogos colombianos.
Situación que presenta al País como una de las naciones más corruptas del Mundo.

La corrupción en Colombia es tan grande, que en estudio realizado por la


contraloría general de la Nación, encontró que entre 1994 y el primer trimestre de
1998 el País perdió cerca de $2.27 billones (fuente, Dane). En dicho informe se
avala la investigación sobre la corrupción administrativa en Colombia, coordinada
por Fernando Cepeda Ulloa, que muestra que la corrupción está generalizada,
especialmente en entidades como el I.S.S., las empresas de servicios públicos, el
sector de comercio Exterior, aduanero, Colpuertos, telecomunicaciones, Incomex y
las entidades de tránsito y transporte. Colombia, según transparencia
Internacional, ocupa el deshonroso séptimo lugar entre los Países más corruptos
del Mundo. Pablo Elías González, director Nacional del CTI, en el año de 1999,
advirtió: “la inoperancia del Estado por corrupción administrativa o política, se ha
convertido en un factor altamente perturbador de la estabilidad democrática, al
punto que es un efectivo generador de violencia, de inconformidad y protesta
social”. La inquietud queda planteada, ¿la corrupción, es el factor de mayor
desestabilización y trascendencia en la realidad económica, social y política en la
Colombia actual?

La política económica en los años noventa en el País, se sustentó en tener en


cuenta ciertos factores o indicadores, como relevantes en la crisis social: la
educación, la salud y el empleo Simplificando el problema y las dimensiones de lo
social. Opciones que deja el Neoliberalismo a los Países para su atención a nivel
interno. Temas como servicios públicos adecuados; agua, saneamiento ambiental,
electrificación etc, educación, nutrición, capacitación, recreación y deportes, son
necesidades mínimas que no son satisfechas a cabalidad en la sociedad
Colombiana, haciendo del bienestar social un lujo que sólo alcanzan las clases más
favorecidas.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 27

1.2.3 Política Económica – Política Social

El termino política económica tiende a asociarse con política social, para tal fin es
necesario aclarar que existen tres tipos diferentes de asociación y relación entre
éstas. A saber:

• El primer tipo de relación, que explícita la disyunción, es difícil de sostener,


tanto en el terreno académico como en el campo de la política pública. A pesar
de que las ciencias sociales cada vez toman una posición más crítica frente a
este tipo de lectura, la diferenciación continúa siendo muy frecuente. Y la
visión maniquea se refleja en numerosos planes de desarrollo y en las
declaraciones gubernamentales. Basta ver lo que está sucediendo con el Plan
Colombia, al que cada día se le van colgado "componentes sociales". Estoy
convencido de que en un seminario de Trabajo Social no tiene mucho sentido
insistir en lo inapropiado que resulta esta visión dual.

• La segunda forma de enfocar la interacción entre la política social y la política


económica parte de reconocer su mutua interacción. Ambas están
mutuamente condicionadas, de tal manera que la una no se entiende sin la
otra. Esta perspectiva es la que suelen seguir quienes criticar las visiones
duales. Y aunque esta vía parezca más promisoria, en realidad sus aportes son
muy limitados. Aceptar la diferenciación entre las políticas económica y social
constituye, de por sí, un error metodológico. Una vez que se ha reconocido
que hay una política social y una política económica, las modalidades
vinculantes dicen muy poco y no son relevantes. No se avanza nada al afirmar
que la política social no excluye la política económica, porque ambas
interactúan. Esta forma de abordar el problema puede ser mejor intencionada,
porque busca ser más plural y menos monista que la primera. Pero,
finalmente, el resultado es el mismo: ambas caen en la trampa de pretender
establecer autonomías analíticas inexistentes.

• La tercera posición niega la pertinencia de la relación. Y la argumentación no


se fundamenta en la forma como se establece la relación entre las categorías.
La crítica va más allá. Tiene que ver con la pertinencia misma de las categorías
política social y política económica. Este lenguaje no ayuda a clarificar sino
que, por el contrario, confunde. La reflexión que propongo a continuación gira
en torno a dos apreciaciones. La primera es que las categorías económicas, así
sean las más básicas, tienen una implicación social inmediata. Y la segunda,
que toca el terreno de las política macroeconómica, es que cualquier política
económica es, por naturaleza, política social. No hay política económica y
política social. La política económica es intrínsecamente política social. Más
que insistir en el camino árido de buscar la distinción entre las política

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 28

económica y social, sería mejor examinar las implicaciones sociales de la


política económica.

1.2.4 Categorías Económicas y Éticas

El espacio de la ética tiene que ver con las relaciones que los individuos establecen
entre sí. Si la actividad económica no puede desconocer la interacción con los
otros, la dimensión ética es consustancial al quehacer económico. Walras (1887),
planteaba el problema de la siguiente manera, La ciencia económica tiene tres
campos investigación: el natural, el artístico y el ético.

El natural, es el que más aproxima la disciplina a las ciencias físicas. Analiza los
determinantes de la actividad económica que escapan a la voluntad de las
personas. Se trataría, entonces, de verificar si existe algo así como las "leyes
naturales". En el lenguaje de la disciplina se han introducido muchas de estas
nociones. Wicksell, por ejemplo, hablaba de una tasa natural de interés. Después
hizo su aparición la noción de tasa natural de desempleo, etc. La economía es arte
en la medida en que también se pregunta por la forma como se produce la
riqueza. La industria es un arte porque transforma. Finalmente, para Walras la
economía también es ética porque se preocupa por lo que es bueno para las
personas. La forma como las personas interactúan entre sí en función de lo que
consideran bueno, es el punto de partida de la economía institucional. Desde una
presentación como la que hace Walras no tiene ninguna relevancia distinguir la
política económica de la política social.

A pesar de que los libros de texto han popularizado un método de la economía


muy cercano al de las ciencias naturales, sobre todo a la física, lo cierto es que la
construcción de cada una de las categorías fundantes de la disciplina han estado
acompañada de una reflexión ética sustancial. La llamada "ingeniería económica"
ha desconocido la dimensión ética, creando condiciones propicias para plantear
disyuntivas erradas, como la de política social, política económica.

Entre todas las categorías básicas que podrían seleccionarse para mostrar que la
dimensión ética es inherente a la economía, he seleccionado tres: la función de
utilidad, el bien público y la identidad entre los salarios y la productividad marginal
del trabajo.

Desde mediados de los años cuarenta, Vickrey (1945) muestra que desde la
función de utilidad es posible encontrarle salida a la tensión entre incentivos e
igualdad, que se ha convertido en uno de los pilares de la filosofía moral
contemporánea. Si la función de utilidad incorpora el riesgo, dice Vickrey,
podríamos imaginarnos diversas combinaciones alternativas de incentivos e

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 29

igualdad. Cada una de las combinaciones correspondería a una función de utilidad


social. Se le pediría a cada individuo que escoja la función de utilidad social que
considere más conveniente para todos, con la condición de que la persona acepte
de antemano que cualquiera que sea su opción, tiene la misma probabilidad que
cualquier otro de recibir los beneficios y de asumir los costos que implica dicha
elección. Al referirse a este texto, Arrow (1994) señala que muchos años antes,
Vickrey ya estaba proponiendo una especie de velo de ignorancia similar al de
Rawls (1971), y un principio de equiprobabilidad similar al que más tarde
formularía Harsanyi (1953). En este tipo de consideraciones sobre la función de
utilidad, el problema no es cómo se relacionan las políticas económica y social,
sino que la pregunta es mucho más fundamental: cómo se resuelve, desde la
función de utilidad, que es el punto de partida de la teoría económica, el conflicto
entre libertad e igualdad.

El bien público, a diferencia de los bienes privados, no admite exclusión ni


rivalidad. En uno de los artículos en los que Samuelson (1969) se refiere al bien
público muestra que no es posible pensar una estructura impositiva, que sea una
aproximación de los precios de los bienes públicos, sin hacerse la pregunta
explícita por la justicia. La oferta y la demanda de los bienes privados, que sí
admiten la rivalidad y la exclusión, se determina en el mercado a partir de un
vector de precios único. En el caso de los bienes públicos este vector no existe
porque no hay manera de saber cuál es la preferencia que tienen las personas
frente a tales bienes. Si el bien público es puro no hay revelación de preferencias
y por tanto, no hay un vector de precios. Los impuestos que los individuos están
dispuestos a pagar son una aproximación, así sea remota, de la preferencia de los
ciudadanos frente a los bienes públicos. Y la fijación del impuesto obliga,
necesariamente, a explicitar un criterio de justicia.

La identidad entre el salario y la productividad marginal del trabajo es, claramente,


la expresión de un criterio distributivo. Marx (1867) critica duramente esta
identidad porque oculta la relación de explotación. El salario no es el pago justo a
la totalidad del trabajo, sino a una parte. El resto es apropiado por el capitalista
como plusvalía.

Estos tres ejemplos son suficientes para mostrar que desde las categorías básicas
de la economía no es legítimo establecer una diferencia entre política social y
política económica, porque estas nociones básicas incorporan la dimensión ética de
manera sustantiva.

La política económica es política social. No son dos tipos de política diferentes. El


campo de la política económica corresponde a un nivel de análisis menos abstracto
que el que desarrollé en la sección anterior. La política económica tiene mucho

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 30

que ver con la dimensión artística de la que hablaba Walras. Cualquiera de las
variables macroeconómicas: tasa de cambio, precios, tasa de interés, empleo,
impuestos, gasto público, etc. tienen impactos en el bienestar social de la
población. Desgraciadamente, y por la forma descuidada como se han evaluado
las incidencias sociales de las decisiones macro, no se han desarrollado
instrumentos de análisis adecuados, que permitan establecer las relaciones de
causalidad que vinculen las fluctuaciones de determinada variable macroeconómica
con el bienestar del hogar. Encontrar tales casualidades se convierte en un reto
investigativo prioritario. Y este ejercicio es cualitativamente diferente al estudio de
la forma como interactúan la política social y la política económica.

1.2.5 Economía y Medio Ambiente

La conferencia de Estocolmo (1972), tuvo el mérito de vincular la problemática


Ambiental, de manera tímida, al Ambiente social y cultural y relacionarla con el
problema de la pobreza en los Países en vía de desarrollo.

Estocolmo no plantea, no propende por un desarrollo con nuevas alternativas no


contaminantes y limpias, como exigencia planetaria. Sus esfuerzos van
encaminados a la necesidad de ampliar el margen de participación de los países
pobres en el desarrollo unidimensional. No se plantea la necesidad de nuevas
formas de desarrollo acopladas a las condiciones de la diversidad de las zonas de
vida, pero al menos plantea la concepción demasiado estrecha y reduccionista que
llevaban a la mesa de trabajo los países ricos.

Esta concepción que abarca los planteamientos sociales dentro de la perspectiva


Ambiental, pasa a la conferencia de Tbilisi (1978) y al seminario internacional de
Belgrado sobre educación Ambiental 1977. En Belgrado se acepta el
planteamiento de que la perspectiva Ambiental abarca el “medio Social y Cultural”
y parte del principio de que es necesario reconsiderar los modelos de crecimiento y
desarrollo.

En la reunión regional para América Latina y el Caribe preparatorio de la


conferencia de México (1991) sobre medio ambiente y desarrollo, se enfatizó
sobre la relación entre desarrollo económico y la sustentabilidad ambiental; Los
principales fenómenos ambientales que afectan a la región y su interacción con los
problemas globales del ambiente y desarrollo económico en el contexto de la
cooperación Internacional.

La reunión fue organizada por la Cepal con la participación de los ministros de


Economía y medio ambiente de 41 países de Latinoamérica, así como
representantes de alto nivel de organismos internacionales y multilaterales.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 31

La Cepal, presento un documento sobre desarrollo sostenible; Transformación


productiva equidad y medio ambiente. Documento preparatorio que permitiría
aportes importantes de la región a la discusión y temática de la conferencia
mundial.

La preocupación de los países en vía de desarrollo, por un desarrollo


socioeconómico y Ambiental sostenible, como la preocupación mundial en cabeza
de las naciones unidas (ONU), facilitan la convocatoria de la conferencia mundial
sobre Medio Ambiente (UNCEB), en 1992 en Brasil.

La conferencia de UNCEB de 1992 (Eco 1992, como se denominó), se celebró del


1 al 12 de Junio, su objetivo central era el de lograr acuerdos y compromisos
específicos por parte de los gobiernos y organizaciones internacionales, sobre
actividades definidas en materia del medio ambiente y el desarrollo, especificando
objetivos, calendarios y sentando las bases de planes de acción concreta.

Los jefes de estado del planeta reunidos en Río de Janeiro Brasil, discutieron y
revisaron el confuso presente y el futuro común de la humanidad.

La posición de los países ricos y pobres sobre medio ambiente y desarrollo, en la


conferencia de Río, se dio en un ambiente donde prevaleció los mecanismos de
poder político y económico de las naciones industriales sobre la que se encuentra
en vía de desarrollo.

Los países ricos (EEUU. Inglaterra. Entre otros), no les interesa modificar sus
modelos de desarrollo en los que están inmersos (recursos no renovables
petróleo, gas, carbón), a pesar que son depredadores y contaminantes.

La cumbre de Río, intentó sin mucho éxito abordar los temas del cambio climático
y biodiversidad, financiación de programas de medio ambiente para los países en
vía de desarrollo, mecanismos de transferencia de tecnología ambientalmente
sanas, cómo la adopción de acuerdos para reducir los principales problemas
ambientales a nivel planetario.

Hoy día la situación ambiental mundial no ha cambiado demasiado; el aire sigue


contaminado, los océanos continúan en su proceso de constante contaminación,
los acuerdos internacionales no han sido ratificados e implementados.

De los recursos que genera el planeta; dependemos cerca de 6.100 millones de


personas. A pesar de que la población mundial aumentó un 48% entre 1950 y
1975. Se estima que a mediados del siglo XXI la población mundial se estabilice

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 32

en los 11.000 millones de personas y no presione medidas urgentes en materia de


salud, vivienda y alimentación.

El desarrollo, tecnológico - científico en los países desarrollados, no pueden


esconder la realidad mundial, donde cerca de un tercio del mundo corre riesgo de
morir de hambre: 2000 millones de personas no tienen acceso garantizado a una
comida nutritiva y sólo 800 millones de ellos sufren de malnutrición crónica.

La presión sobre el alimento, en el próximo milenio es urgente, la ingeniería


genética deberá jugar un papel importante en las políticas agrícolas que jalonen un
desarrollo sostenible a nivel mundial. Los países desarrollados deben transferir y
desarrollar tecnologías y facilitar la infraestructura necesaria en países en vía de
desarrollo de biotecnología que cubran sus necesidades y propicien desarrollo
científico - técnico propios y autónomos en relación a sus contextos.

La tierra está cubierta en un 70% de agua de la cual sólo el 2.5% del agua es
dulce, y una fracción de ella es accesible al hombre. Solo 1.100 millones de
personas tienen acceso al agua potable limpia y más de 2.400 millones de
personas no tienen en sistema sanitario adecuado, “a menos que tomemos
medidas inmediatas y decisivas”, dice KOFI ANNAN, secretario de la ONU, al
respecto, tendremos un futuro más halagüeño.

Actualmente se desarrolla un programa a nivel mundial con la sigla en ingles wash


(agua, sanidad e higiene para todos), que se propone para el año 2.015,
suministrar agua y educación sanitaria a quienes no la tienen. En este esfuerzo se
encuentran la ONU; 28 países ricos y organismos internacionales no
gubernamentales.

Se estima que cerca de 2500 millones de personas en los actuales momentos no


tienen acceso a los servicios energéticos modernos (electricidad), esto presiona la
demanda de madera y combustibles fósiles (petróleo, gas, carbón), en los países
ricos y pobres, acelerando el grado de contaminación liberando cada día más
bióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero de la atmósfera.

En un informe de la ONU, sobre el medio ambiente, advierte sobre los efectos de


una nube que se extiende por todo el sur de Asia. La llamada nuve asiática
marrón, con un espesor de unos 3 kilómetros, que puede ser la causante de
cientos de miles de muertos al año provocados por enfermedades respiratorias.

La demanda de energía es tan apremiante que la mejor solución es buscar fuentes


alternas más baratas y limpias. En países como Kenia, Nepal y Sri Lanka, se

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 33

utilizan micro plantas de energía hidroeléctrica, sin necesidad de diques complejos


y embalses.

La sociedad para la energía de la aldea global, en la que participa el banco mundial


y varios organismos filantrópicos quieren, en un plazo no mayor a diez años
suministrar energía a 300 millones de personas, escuelas, hospitales y clínicas de
50000 comunidades en todo el mundo. Haciendo uso de recursos y fuentes
baratas y limpias como las microplantas eléctricas, energía solar en los países en
vía de desarrollo.

Otro factor incidente en el medio ambiente y economía mundial tiene que ver con
la progresiva extinción de cerca de 11.000 especies, animales y plantas en el
mundo. Daño no solamente estético, muchas especies proporcionan a los seres
humanos alimentos y medicamentos esenciales para combatir enfermedades. Se
calcula que en los próximos 30 años desaparezcan un tercio de todos los arrecifes.

A nivel mundial Cada año se talan alrededor de 36 millones de hectáreas de


bosques para satisfacer las necesidades del mercado y el hedonismo de las clases
pudientes.

Se ha acuñado para hacer frente a los problemas ambientales y ecológicos en el


mundo el concepto economista de desarrollo sostenible, que no ha hecho más que
aplazar el compromiso de la humanidad para defender la tierra como única morada
común.

Los países desarrollados, los grandes depredadores de los recursos naturales no


muestran evidencias claras de que la economía cuando crece, use menos
materiales, menos energía y produzca menos residuos. La economía esta
creciendo y los impactos ambientales son cada vez más grandes.

La cumbre de la tierra celebrada en Johannesburgo (agosto 2002) que tenia


como expectativa, reorientar los compromisos adquiridos por los países en la
cumbre de Río hace 10 años atrás y lograr un desarrollo sostenible en beneficio del
planeta, pero finalizó con una contundente derrota a la madre tierra.

La cumbre reflejó la arrogancia de los países ricos con relación al problema


ambiental; no fue posible resolver preocupaciones sentidas sobre energías
renovables e inquietudes de los países en vía de desarrollo. La deuda ecológica
que tienen los países ricos con los países pobres en relación con la producción de
desechos (basura) y la usufructuación de recursos naturales de forma voraz no
ha sido saldada.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 34

Cabe destacar de la cumbre de Johannesburgo el papel de los movimientos


sociales, en relación con el aspecto humanístico y el proceso de conscientización
altamente positivo permitiendo, la discusión y la disertación entre grupos tan
importantes como; amigos de la Tierra, vía campesina, comunidades indígenas y
étnicas, entre otras, sobre temas prioritarios y urgentes para la Humanidad.

Movimientos que se podrían catalogar como movimientos populares de justicia


Ambiental, comprometidos en la búsqueda de un lenguaje de seguridad Ecológica
a escala planetaria.

En la cumbre de Johannesburgo, con la participación de 191 países, se llego a un


acuerdo tácito, de disminuir la energía contaminante, pero sin especificar
porcentajes y plazos a cumplir en el inmediato futuro.

Grupos ambientalistas como Greenpeace, Intermon Oxfam y el fondo Mundial para


la naturaleza, señalaron en Johannesburgo que el no lograr acuerdos concretos
sobre la promoción del uso de energía renovable constituye un fracaso histórico.
Ignacio Carreras, director de Intermon Oxfam de España, califico la cumbre de
”oportunidad perdida”. En la lucha contra el deterioro del medio ambiente y la
pobreza recalcando que era sobre todo “una cumbre de desarrollo sostenible”.

Lamentablemente la cumbre no cumplió con los objetivos propuestos, ya que los


Países Desarrollados no están muy interesados en abordar los problemas
Ecológicos y Ambientales del desarrollo actual, encubriendo con esta actitud su
responsabilidad en procura de erradicar la pobreza en el Mundo. No se ha
cumplido con el imperativo moral y político de satisfacer y asumir financieramente
los acuerdos que firmaron para combatir la degradación Ambiental, las
enfermedades y la pobreza. Compromiso, propuesto en la cumbre del Milenio de
Nueva York en el año 2000. Como ha sido habitual en las últimas reuniones sobre
el futuro de la humanidad y el planeta, los 61000 millones de personas en el
mundo, han sido traicionadas por sus propios gobiernos en la tan esperada cumbre
de Johannesburg. De nuevo el presente inmediato de la humanidad queda
aplazado y sujeto a la arrogancia y caprichos hedonistas de los países ricos.

1.2.6 Indicadores Sociales

Los indicadores sociales no son la forma de juzgar la política social, porque como
se argumento en las páginas anteriores, la política social es la política económica,
pero los indicadores sociales sí pueden plantearse como objetivo para evaluar cuál
es el impacto que tiene la política económica en el bienestar de las personas. Esta
necesidad de la medición la expresa muy bien Sen refiriéndose a las
preocupaciones de Mahbub ul Haq, el creador del Índice de Desarrollo Humano.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 35

"Necesitamos una medición", exigió Mahbub [mahbub ul Haq (1934-98)


fue el creador del Indice de Desarrollo Humano], "del mismo nivel de
vulgaridad del PNB, sólo un número pero una medición que no sea tan
ciega a los aspectos sociales de las vidas humanas como lo es el PNB".
Mahbub esperaba que el Indice de Desarrollo Humano no solamente
mejorara o al menos complementara útilmente al PNB, sino además que
sirviera para ampliar el interés público en las otras variables que se
analizan abundantemente en el Informe Sobre Desarrollo Humano" (Sen
1999 b, p. 23).

A comienzos de los años noventa hubo numerosos estudios sobre indicadores


sociales, especialmente sobre pobreza, La Línea de Pobreza (LP) es un indicador
de ingresos y el Índice de Necesidades Básicas (NBI) es una medida de
necesidades. A finales de los noventa se han desarrollado dos indicadores que se
aproximan a una medida de estándar de vida: el Índice SISBEN (SISBEN) y el
Índice de Condiciones de Vida (ICV). Colombia ya lleva dos años calculando el
Índice de Desarrollo Humano (IDH) propuesto por Naciones Unidas. Sin duda, en
los años noventa el país ha dado pasos significativos en la creación de indicadores
sociales. Pero todavía hace falta realizar un largo trabajo para que la comunidad y
la sociedad los aprehenda.

En el último Informe de Desarrollo Humano para Colombia (Misión Social y PNUD


2000), hay evidencias claras de que la crisis económica de los noventa ha tenido
un impacto negativo en el bienestar de las personas. Junto con el deterioro del
capital físico y social, se ha producido un empeoramiento del capital humano.
Gracias a los indicadores sociales sabemos que:

• En las familias pobres ha disminuido la cobertura educativa en secundaria. Los


jóvenes han tenido que abandonar la escuela con el fin de buscar un trabajo
que les permita compensar la caída de los ingresos de los hogares debido al
desempleo del perceptor principal.
• El número de familias extensas ha crecido.
• El NBI ha dejado de bajar en los dos últimos años se ha estancado.
• La esperanza de vida para los jóvenes entre los 15 y los 25 años ha disminuido.
• La cobertura en salud se ha frenado.
• En los últimos tres años el ICV no mejoró como lo venía haciendo desde
mediados de los ochenta. Estos indicadores nos muestran que la política
económica aplicada durante los noventa ha tenido consecuencias negativas y
de largo plazo en el bienestar de las personas.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 36

Es importante seguir mejorando los indicadores sociales. De todas maneras, nos


recuerda Sen (1993, pp. 5-6) “difícilmente una medida puede ser más precisa
que el concepto que ella representa” (Sen 1973, pp. 5-6). El estándar de vida, el
bienestar y la pobreza son realidades muy complejas, que escapan a cualquier
indicador. La medida siempre es una aproximación lejana del concepto que ella
representa.

Los indicadores mencionados atrás no son institucionales, en el sentido en que no


han sido construidos a partir de las entidades que ejecutan los programas. El reto
futuro consiste en elaborar indicadores que partan de las entidades y que éstas los
utilicen para el desarrollo de su gestión cotidiana. El sistema de información será
exitoso únicamente si logra incorporarse a la gestión regular de cada institución.

Este requerimiento se cumple si los indicadores básicos que conforman el sistema


conjugan la sencillez con una fuerte capacidad explicativa. Cada uno de los
indicadores básicos debe ser relevante tanto para la institución, como para el
conjunto del sistema. Puesto que la proliferación de indicadores no se traduce en
un sistema de información, lo ideal es que los indicadores básicos sean pocos. Un
buen indicador debe reunir tres características:

• Espresar un concepto
• Poseer holismo local
• Ser sencillo

El indicador debe ser posterior al concepto. Esta principio no niega la posibilidad


de que el concepto pueda enriquecerse con el indicador. Sin un concepto previo,
el indicador pierde poder informativo. No sobra preguntarse, una y otra vez: ¿
para qué sirve este indicador específico? La dimensión conceptual involucra los
aspectos funcionales del indicador. Incorpora, por decirlo de alguna manera, los
fines que animan la elaboración de la medida. Los indicadores deben estar
construidos de tal manera que estimulen la libertad interpretativa. Esta no se
respeta si el indicador se elabora con la pretensión de validar la hipótesis previa
del investigador.

Se toma el término "holismo local" de Kuhn (1981), quien lo utiliza en el análisis


de los problemas inherentes a la traducción. Las reflexiones kuhnianas sobre la
historia de la ciencia están muy emparentadas con el análisis de la naturaleza de la
traducción. Kuhn muestra que el historiador de la ciencia se enfrenta con
problemas similares a los del traductor. Nos cuenta que al leer a Aristóteles desde
la perspectiva de la física moderna "sus escritos sobre el movimiento me parecían
llenos de errores garrafales, tanto en lo que se refiere a la lógica como a la

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 37

observación. Estas conclusiones eran inverosímiles. Después de todo, Aristóteles


había sido el muy admirado codificador de la lógica antigua" (Kuhn 1981, p. 62).

Poco a poco Kuhn se fue convenciendo que la única manera de entender la física
de Aristóteles era haciendo una traducción que respetara el contexto cultural y
filosófico en el que se definía cada uno de las categorías aristotélicas. Desde esta
nueva óptica, “Aristóteles me pareció un científico realmente bueno, aunque de
un tipo que yo nunca hubiera creído posible. Ahora podía comprender por qué
había dicho lo que había dicho y cuál había sido su autoridad”. La física de
Aristóteles sólo es comprensible desde la globalidad de su mundo.

Los indicadores también deben poseer holismo local. La construcción y la


interpretación del indicador deben garantizar la comprehensividad local. El
indicador no puede leerse por fuera de sus interacciones. Y éstas sólo son válidas
en un contexto específico. Como le sucedía a Kuhn con la lectura de Aristóteles,
es muy probable que la interpretación del indicador no se realice de manera
adecuada, porque no se respeta el holismo local.

El holismo local del indicador no sólo debe respetarse en el momento de su


lectura, sino también durante el proceso de construcción. Ello significa que las
interacciones que sintetiza el indicador deben ser las pertinentes al fenómeno
estudiado. Obsérvese lo que está sucediendo con el indicador NBI. Con el
proceso de urbanización el NBI ha ido perdiendo capacidad explicativa. Cada vez
discrimina menos, porque las interacciones captadas por el indicador ya no
permiten diferenciar claramente a los pobres de los no pobres. En este caso el
carácter "local" del indicador tiene que ver con el problema analizado: la
pobreza; y el carácter "holístico" remite al conjunto de interacciones que
describen la pobreza. El indicador se construye mal cuando se define de manera
errada el campo (lo "local"), o las interacciones descriptivas (lo "holístico").

La tercera característica del indicador es la sencillez interpretativa. Esto significa


que el indicador debe remitir a una realidad intuitivamente clara. Hay un indicador
sencillo y de mucho poder: el número de muertos. La alcaldía de Mockus en
Bogotá mostró que la política pública puede tener incidencia directa en este
indicador fundamental y, además, que una vez conseguido un cierto nivel,
cualquier deterioro tiene un costo político muy alto. La sencillez interpretativa no
riñe con un proceso de construcción complejo. El índice de precios al consumidor
(IPC) es intuitivamente claro: si el IPC sube el poder adquisitivo de la moneda
baja. La fuerza social que adquiere el IPC se explica porque la gente lo siente, así
no lo entienda. Otro indicador que tiene mucha aceptación social es el PIB. El
principio interpretativo es sencillo: los países con más alto PIB son más ricos. Es

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 38

mejor que el PIB suba que baje. El IPC y el PIB son indicadores que no obstante
la complejidad de su elaboración, remiten a escenarios sencillos y comprensibles.

En cambio, la medida de desigualdad de Theil es un indicador difícil de interpretar,


porque involucra el concepto de entropía, que únicamente es familiar para los
físicos. La dificultad interpretativa no desvirtúa la validez técnica de la medida de
Theil. La sencillez interpretativa facilita la aprehensión por parte de la comunidad.
Y en sociedades democráticas, si el indicador es asimilado, es posible incidir en las
decisiones de la política pública.

1.2.7 El Problema del Empleo en Colombia

Las cifras de pobreza, dadas a conocer recientemente por agencias nacionales e


internacionales, señalan que el 64% de la población colombiana, es decir 28
millones de colombianos, viven en la pobreza. De ellos 10 millones apenas
sobreviven en extrema pobreza. Estas cifras significan que retrocedimos a los
niveles de pobreza de 14 años atrás.

La pobreza alcanza al 55% de los habitantes urbanos, mientras cubre al 79% de


los campesinos. Se encuentran en pobreza extrema el 14% de los ciudadanos y el
37% de los habitantes del campo.

Colombia adicionalmente continúa ascendiendo en la escala de los países más


inequitativos del mundo, en una triste competencia por el primer lugar, lo que
quiere decir que las políticas económicas y de gobierno, aplicadas durante los
últimos años, han incrementado las diferencias entre el ingreso de los ciudadanos
más ricos y el ingreso de los más pobres.

El premio Nóbel de economía, Amartya Sen, afirma en su obra Desarrollo y


Libertad que sólo los países ricos pueden ser muy inequitativos, mientras el autor
del estudio del Banco Mundial; Carlos Eduardo Vélez, señala públicamente que
Colombia es hoy un país con mayores ingresos globales y que no hay razones para
que haya más pobreza.

El profesor Alberto Vasco Uribe señalaba en un Congreso de Salud Pública reunido


en Medellín, a propósito del cambio de siglo: “podemos decir que el principal
problema de salud pública del país es la relación pobreza riqueza. Nos
diferenciamos así de quienes piensan que es el SIDA o la violencia, por ejemplo.

Para finalizar, podemos decir entonces, que el principal problema del país es la
pobreza riqueza, pero que ese problema no se resuelve sin los pobres. No es pues

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 39

la pobreza en sí misma sino su relación con la riqueza. Es pues un problema de


relaciones sociales, económicas y políticas”.

La Creciente oferta laboral supera la demanda. En Colombia y en el mundo,


incluidos los países industrializados, la falta de empleo se convierte en la principal
amenaza para la futura estabilidad económica, social y política, consecuencia de
una creciente oferta de mano de obra, que cada vez supera en mayor proporción a
la demanda.

La situación actual del mercado laboral del país, en donde las tendencias
depresivas de su economía se han acentuado durante el primer semestre de 1997,
y cuyo crecimiento económico es bajo, la tasa de crecimiento del empleo no da
signos de aumentar, sino que por el contrario, disminuye rápidamente. Más aún,
el coeficiente de empleo (el número de ocupados por cada 100 personas
económicamente activas en edad laboral) nunca ha sido tan bajo como en la
actualidad.

Así mismo, en los últimos años Colombia presenta un aumento en la tasa de


población en edad de trabajar, mientras que el número de nuevas fuentes de
trabajo ha disminuido significativamente.

Esta mayor diferencia se refleja en las tasas de desempleo y subempleo, que en


términos relativos se mantiene entre un 8% y un 17%, pero en cifras absolutas
son mayores, considerando que el universo de población es cada vez mayor.

Hay regiones en donde la situación es más crítica, las zonas fronterizas (Pasto y
Cúcuta), donde las tasas de desempleo superan en cerca de 5 puntos el promedio
nacional. En áreas metropolitanas (Medellín, Cali, Barranquilla), el desempleo
está por encima de 10%.

A lo anterior se suma el hecho de que un porcentaje significativo, no precisado


oficialmente, corresponde a personas que se consideran ocupadas, pero en
realidad son subempleados, es decir, es decir, no tienen estabilidad, muchas
adelantan actividades no productivas (economía informal) y en consecuencia,
carecen de cualquier beneficio prestacional (salud, educación, subsidios).

Sin embargo, el coeficiente de empleo no es el único indicador del estado de la


situación laboral del país. El progreso económico adicional de las familias más
pobres (cuyo desempleo es mayor) está estancado.

De hecho, el mercado laboral está sometido actualmente a una inmensa


descomposición en las diferentes ramas y ocupaciones en las diferentes ciudades.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 40

La industria, y en particular algunas de sus ramas, las más afectadas en el


mercado doméstico y en el internacional, por la competencia externa y por la
marcada revaluación del peso, están rotando personal y han reducido sus plantas
de empleados. Otras (comercio, construcción), han cerrado sus instalaciones.

En virtud de lo anterior, el desempleo nunca desaparecerá, y las enormes


fluctuaciones en su tasa de crecimiento durante los últimos años está determinada
por eventos de fricción. Tiene origen en el movimiento del mercado de trabajo, de
carácter estructural, y surge del decaimiento de ciertas industrias y regiones, de
efecto cíclico, y nace de la disminución del ritmo de la expansión económica.

Dadas las perspectivas anteriores, es necesario adoptar medidas compensatorias,


tales como programas mínimos de empleo público, especialmente en áreas críticas,
que al tiempo constituyan una fuente de generación de ingresos, fortalezcan el
capital físico y humano y eleven la productividad de la economía, para
contrarrestar los niveles preocupantes a los que ha llegado la tasa de desempleo
en las principales ciudades del país, como Cali con un 17.4%, Medellín 16,4%,
Pasto 15%, Manizales 14% y Barranquilla con un 12.8%. Todo lo anterior se
deriva del bajo crecimiento industrial y el crecimiento de la violencia, lo cual
conlleva grandes desplazamientos de personas hacia las áreas urbanas.

1.2.8 Planteamientos de Política Económica en Colombia para el


Próximo Milenio

La teoría económica clásica, profesa que la expansión del comercio tendría un


impacto inercial sobre el crecimiento y el bienestar de la Humanidad. Las teorías
de Adam Smith sobre el intercambio comercial fortalecería la especialización;
división social del trabajo (D.S.T) en condiciones favorables, se apreciaron hasta
los años 70. cuando Corea y Singapur, países del Este Asiático, salían de la
pobreza y se integraban al mercado internacional, pero a partir de los años 90 la
situación fue cambiando y la brecha entre países ricos y pobres se amplió. El
premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz, reconoce que la globalización no opera
a favor de muchos pobres en el mundo. No ayuda a la protección del medio
ambiente ni contribuye en la estabilización de la economía mundial. Stiglitz,
reconoce las fallas y desatinos del capitalismo actual globalizado, ya que maneja
excedentes de capital flotante que provienen de la sumisión de las economías al
exclusivo criterio de ganancia. Este capital flotante es administrado y gestionado
por el FMI, BM y OMC. Capitales que llegan a los países más pobres y
necesitados, reforzando y asegurando la continuidad del pago de la deuda externa
del tercer mundo. Situación manifiesta en la devastación social y política de los
pueblos prestamistas: pobreza, precariedad, marginalidad, desigualdad social.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 41

América Latina, por ende Colombia, a pesar de los esfuerzos por industrializarsen
no mantienen una unidad e integración regional fuerte, la participación estatal es
incoherente e ineficaz. Las economías de la región no sólo muestran una baja
productividad, sino que los criterios políticos son débiles sin iniciativa para
desarrollar proyectos estratégicos regionales propios de integración, la economía
Colombiana como la de la región andina se han convertido en un agente pasivo de
la globalización.

La fuerza laboral en nuestro país es poco productiva debido a que las políticas de
modernización, imponen opciones tecnológicas modernas costosas en términos de
utilización como capitales y mano de obra calificada. Esta distorsión, sistemática,
hace crisis cuando a la pretendida modernización se la añade la desigualdad
creciente en la distribución del ingreso.

La política neoliberal imperante en el país a partir de los años 70 ha hecho crisis; la


libertad del mercado no ha solucionado los problemas sociales y políticos. Las
luchas sociales (movimientos sociales) se han incrementado, La pobreza alcanza
índices insospechados.

La ideología neoliberal expuesta por: Douglass North, Paul Krugman y Joseph


Stiglitz, está siendo evaluada inclusive por los países ricos. La economía mundial
liderada por EE.UU. sabe a ciencia cierta que economía es política y que las
correlaciones de fuerza (militares) que conocemos como lucha contra el
“terrorismo mundial” en los inicios del siglo XXI, no son más que estrategias de
dominación capitalista.

Se vende la idea de un mundo multipolar y democrático (después de la caída del


régimen socialista bloque soviético), amparado en la necesidad de romper
barreras nacionales, a través de organizaciones regionales con gran contenido
económico y político.

En la administración Gaviria, la apertura económica redujo la participación de la


agricultura en el producto nacional, exacerbando las condiciones de pobreza rural,
desplazó el empleo industrial masivo por la importación de materias primas y
amplío la brecha entre trabajadores calificados y no calificados, como bien lo anota
el economista Eduardo Sarmiento Palacio. El país en los actuales momentos está
“amarrado” por el elevado endeudamiento externo. La apertura dejó al país
expuesto a un déficit estructural de la balanza de pago. La economía se ha visto
abocada a ajustes fiscales y monetarios reduciendo la taza de crecimiento.

Las exigencias del FMI, imposibilitan el crecimiento y aceleran el desempleo y la


miseria. Colombia se encuentra en un dilema; acoger los criterios, del FMI o

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 42

adoptar esquemas propios que permita cubrir las obligaciones de la deuda externa
dentro de un marco de crecimiento, reducción de las desigualdades sociales y la
pobreza.

El doctor Caballero Argáez (El Tiempo 10-14-02) en su artículo, “La economía es


el arte de manejar recursos escasos”, critica la poca ambición de los responsables
de la economía, con esta pobre definición, que refuerza la desconfianza y poca
visión de la política económica del actual gobierno (U.V.). La economía es una
ciencia que buscar crear y sostener riqueza y brindar prosperidad (Adam Smith) a
las naciones. La riqueza como lo promulgó Adam Smith se logra a través del
trabajo y el ahorro, bienes bien escasos en los actuales momentos de la vida
nacional. Se necesitan estrategias creativas que estimulen la confianza en el
sector productivo, con garantías de endeudamiento, con tecnología y créditos
blandos en los sectores más deprimidos por la apertura que son en gran medida el
soporte de la economía colombiana: mediana, pequeña industria, economía
solidaria, microempresa y la manufactura, entre otras. Estas y otras medidas que
estimulen la inversión y el ahorro.

La nueva realidad del capitalismo mundial no se mide por la riqueza que tiene un
país en los sectores: primarios, secundario y terciario, como en otrora. En el
contexto de la globalización y desarrollo tecnológico la riqueza de un país se mide
en términos de una triple diversidad: genética, biológica y cultural, elementos que
constituyen la biudiversidad natural y cultural de un país.

La economía del futuro inmediato estará probablemente fundada en tres


elementos correlacionados e interrelacionados: el conocimiento, la tecnología y la
diversidad natural y genética (lectura del genoma transformaciones de las bases
genéticas). En Colombia se debe tener en cuenta que una política sobre la
productividad del trabajo depende de los espacios creativos comunicacionales,
afectivos y cognitivos, Tanto de los empresarios como de los trabajadores.

En nuestro país lo que falta no es capacidad intelectual (trabajo) sino empleo y


recursos. El desempleo en cierta manera, no es debido a la falta de trabajo, sino
que el sistema productivo está en desfase negativo con las fuerzas de cooperación
social.

Lo que está en juego hoy en día en Colombia no es la simple reducción del tiempo
de trabajo existente como se ha propuesto en determinadas ocasiones, sino la
invención de nuevas formas de trabajo, irreductible, a la relación salarial clásica.

En los últimos años en Colombia se observa en la política socioeconómica, un


proceso múltiple: por un lado la desproletización del trabajo industrial fabril, de

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 43

otra parte, expansión del trabajo asalariado en el sector servicios (sobre todo
mano de obra femenina) y una subproletarización intensificada del trabajo parcial,
temporal precaria.

La mayor parte del siglo XX, en Colombia se fraguo una sociedad inequitativa y
excluyente que destruye la naturaleza, carece de una verdadera democracia en el
ámbito de la vida ciudadana y disfrute del progreso humano. En la construcción
de una sociedad democrática y equitativa es menester enfocar los esfuerzos a la
consolidación del desarrollo de la sociedad humana.

Colombia y por ende Latinoamérica requiere transformaciones éticas en las


relaciones sociales, reformas institucionales profundas y cambios microeconómicos
y microsociales que permitan una redistribución del valor agregado en el proceso
de producción de bienes y servicios lo que supone modificaciones en el sistema
ocupacional y en la organización empresarial. Pero además, se debe buscar que
cada colombiano pueda disfrutar de los beneficios del progreso humano en
aspectos como educación, recreación, salud, atención a niños, ancianos,
discapacitados, y una mejor cobertura y calidad de los servicios públicos, etc. Un
modelo de desarrollo humano donde la libertad, la felicidad y autonomía, se
conviertan en horizontes, punto de partida y referentes de la búsqueda y
encuentro constante con una perspectiva más ambiciosa que las ciencias
económicas.

El reto del próximo milenio estará enmarcado por el avance en el desarrollo


humano. Insertarse en el proceso de humanización, entendida como búsqueda y
entrega de los valores supremos del ser humano.

Es prioritario en Colombia, modificar el modelo de desarrollo, ya que sus efectos


han propiciado una alta concentración del poder político y económico con la
correspondiente exclusión y marginación para la inmensa mayoría de colombianos
y la consiguiente pobreza material, social y espiritual para millones de ciudadanos.

Se requiere un nuevo compromiso social, basado en el desarrollo humano que en


esencia es más complejo que un modelo económico y que debe contener ideas
movilizadoras como:

• Mejoramiento de las condiciones de trabajo y vida de la población.


• La diversificación y ampliación del mercado interno.
• Acceso inteligente e incorporación eficiente a la sociedad del conocimiento.
• Cambio significativo hacia una democracia participativa como la plantea
implícitamente la constitución del 91.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 44

A comienzos del 2002, apareció en el mercado el libro repensar a Colombia un


nuevo contrato social. Elaborado por 130 expertos de diversos campos del saber,
en el ánimo de sacar al país de la crisis. Grupo liderado por el economista LUIS
JORGE GARAY. En dicho estudio se abordaron cinco campos específicos: Lo
público y la ciudadanía; educación, cultura y ética; la justicia; la seguridad
democrática y lo productivo y la competitividad sistémica.

Coinciden los expertos que la construcción y legitimación de lo público es lo


esencial ya que comprenden los espacios sociales que no son legitimados, ni
administrados por el estado. Proponen fortalecer el estado para que se desarrolle
la ciudadanía (democracia - inclusión social), se asuma con responsabilidad la
aplicación de la ley, se garanticen las condiciones de reproducción social de la
población y el control pleno del territorio.

En lo que compete a la política, ésta debe entenderse como una construcción


colectiva de orden social que parte del diálogo pluralista entre posiciones diversas
y no como la imposición de un proyecto que busca adecuar la sociedad a un orden
natural o racional previamente determinado.

En el tema económico aseguran los expertos que se debe generar riqueza con
inclusión social. Estos son requisitos indispensables, aunque insuficientes, para la
transformación de la sociedad colombiana en una moderna y democrática para su
inserción creativa en el nuevo orden mundial.

Proceso de Comprensión y Análisis


• Identificar las diversas tendencias y modelos económicos, que a través de la
historia republicana a adoptado el País hasta nuestros días. Para el desarrollo
de la actividad, construya un mapa conceptual, recogiendo los aspectos que
considere más relevantes.
• Analizar las características políticas e ideológicas que envuelven las tendencias
económicas propuestas en el País y sus consecuencias. Para desarrollar el
interrogante utilice un diagrama o cuadro sinóptico.
• Comprender las relaciones que se dan entre política social y económica en el
contexto de la economía mundial.
• Identificar los elementos mínimos para elaborar indicadores sociales.
• Identificar y analizar relaciones entre economía, medio ambiente y desarrollo
sostenible teniendo en cuenta las prioridades y observaciones hechas en la

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 45

cumbre de Río de 1992, y la conferencia de Johannesburg de 2002. Escriba un


pequeño ensayo donde plasme sus puntos de vista al respecto.
• Precisar los causas del desempleo en Colombia y el consecuente auge de la
economía informal. Realice una valoración en su región o comunidad sobre el
fenómeno, en un pequeño escrito no mayor a cinco páginas.

Solución de Problemas
• Teniendo en cuenta las políticas económicas y sociales impuestas en el
territorio Nacional, a finales del siglo XIX, y principios del XX, argumentar y
exponer con criterio crítico, las deficiencias de dicha política y las rutas que
debió tomar en su momento, en pro de un desarrollo autónomo y consecuente
con una sociedad justa e igualitaria.
• Teniendo en cuenta las políticas de la globalización y neoliberalismo en
Colombia, precisar en que son apropiadas a las exigencias del país y en qué
aspectos son nocivas en la política socio – económica del actual gobierno.
• Elabore tres preguntas inteligentes sobre las consecuencias del endeudamiento
externo con la banca internacional, especialmente con el famoso, Fondo
Monetario Internacional (FMI).

Síntesis Creativa y Argumentativa


• En un escrito no mayor a cinco páginas argumentar desde su perspectiva, las
causas endógenas y exógenas, de la crisis social y económica qué atraviesa el
país a las puertas del próximo milenio.
• Analizar y argumentar, cuales son los siete pecados capitales de la política
económica impuesta en los últimos diez años en Colombia.
• Describir y analizar, las consecuencias qué le ha dejado al país el narcotráfico y
la violencia armada.
• Describir y analizar en su región las características de orden social qué
determinan el fenómeno del desempleo.

Autoevaluación
• Elaborar un cuadro comparativo entre la política económica del siglo XIX y la de
principios del siglo XX.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 46

• Identificar diferencias y similitudes entre política social y política económica.


• Identificar las razones por las cuales los países desarrollados no están
interesados de manara permanente en la protección y conservación del medio
ambiente.
• Explicar las características y causas del desempleo en Colombia.
• ¿Por qué la economía informal en América Latina y por ende en Colombia
representa un alivio y solución a los problemas socioeconómicos de la mayoría
de la población?.

Repaso Significativo
• Elaborar un esquema de llaves o diagrama sobre la política económica de los
últimos veinte años en Colombia.
• Hacer un resumen sobre las causas y consecuencias del narcotráfico en
Colombia.
• Elaborar una propuesta socio - pedagógica, donde se den a conocer los
criterios de una sana política ambiental y económica para Colombia.

Bibliografía Sugerida
Revista, Economía Colombiana y coyuntura política. Contraloría General de la
Nación, números: 280. Octubre, año 2000. Y 287, dic. Año 2001.

Revista, Economía Colombiana y coyuntura política. En Internet.

Revista, ECO, Lógica. Educación Ambiental. Ministerio de gobierno. Bogotá.


Edición 3. 1989.

Cumbre Mundial. N. 7, Marzo – Abril – Mayo, 1991.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 47

UNIDAD 2: Pobreza en Colombia


Descripción Temática

La segunda unidad aborda el tema de la pobreza en Colombia enmarcado, en el


contexto de la situación de la violencia armada, el desempleo y el endeudamiento
externo Colombiano.

Horizontes
• Analizar las causas tanto internas como externas del fenómeno de la pobreza
en Colombia.
• Orientar y facilitar al estudiante la comprensión de los efectos y causas que han
encrudecido la pobreza y desempleo en Colombia.
• Inferir las causas y consecuencias de la política de endeudamiento externo, a la
que se ha abocado el país en los últimos años.

Núcleos Temáticos y Problemáticos


• Economía - Pobreza y Grupos Armados
• Violencia en Colombia y el Éxodo Externo
• El Desempleo en Colombia
• Endeudamiento Externo

Proceso de Información
En la unidad se realiza un acercamiento a las características y elementos
constitutivos de la pobreza en Colombia y la visión que ha tenido a la problemática
Colombiana la comunidad internacional en general, buscando en el alumno la
apropiación significativa de elementos teóricos y conceptuales sobre el problema
de la pobreza en Colombia.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 48

Los contenidos temáticos y problemáticos le permiten al estudiante plantearse


interrogantes concretos y preguntas inteligentes que lo lleven a profundizar un
poco más sobre l el problema de la pobreza y violencia en Colombia.

Las siguientes actividades sugeridas a los estudiantes responden a la necesidad de


apropiarse de elementos teórico - prácticos y conceptuales fundamentales en la
comprensión del fenómeno de la pobreza en Colombia. Para tal fin, se
recomienda:

• Consultar diferentes fuentes: textos, revistas, periódicos, Internet, otros, que


considere apropiados para abordar el fenómeno de la pobreza y su incidencia
en al estructura social Colombiana.
• Describir y analizar, los factores económicos, sociales y políticos que inciden en
la situación de pobreza en Colombia.
• Analizar la incidencia de la globalización y el neoliberalismo en actual situación
social del país.
• Analizar las consecuencias del conflicto armado con relación al desplazamiento,
producción agropecuaria, fuerza de trabajo y empleo.
• Diseñar una hemeroteca, donde recoja información estadística del desempleo
en Colombia y sus consecuencias sociales.
• Elaborar un (borrador) propuesta pedagógica, para estudiantes de básica (sin
importar el grado), sobre los elementos y características de la pobreza en
Colombia, qué estimulen y permitan un acercamiento al fenómeno, de manera
critica y reflexiva. Sea creativo.
• Identificar y analizar el comportamiento de la deuda externa Colombiana de los
dos últimos periodos presidenciales (programas de gobierno).

2.1 ECONOMÍA – POBREZA Y GRUPOS ARMADOS

Las ONG informan que Colombia tiene la cuarta población de desplazados internos
del mundo. El atroz conflicto entre paramilitares y guerrilla es ampliamente
responsable del desplazamiento forzoso de colombianos. Cerca de 300.000
personas, la mayoría mujeres y niños, fueron sacados de sus hogares en 1998
debido a la violencia rural. El gobierno de Estados Unidos suministró en 1999 5,8
millones de dólares para las operaciones en el hemisferio occidental del Comité
Internacional de la Cruz Roja, con destino a la ayuda para las personas
desplazadas en los territorios nacionales, junto con 3 millones de dólares
adicionales de asignación específica para Colombia. El gobierno de Estados Unidos
también aportó otros 4,7 millones al Fondo General para el Hemisferio Occidental

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 49

del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Parte de esa
suma fue utilizada para aumentar la capacidad de actuación institucional en
Colombia.

El gobierno nacional decidió, con el apoyo irrestricto de los estadounidenses, que


este departamento fronterizo (putumayo), sea la punta de lanza de la lucha contra
el narcotráfico contemplada en el Plan Colombia. El lugar donde pondrán a prueba
un proyecto piloto de desarrollo, mezcla de zanahoria y garrote, para acabar con
una zona donde se concentra el 50 por ciento de los cultivos ilícitos del país y que
se ha convertido en un corredor estratégico para el tránsito de armas y explosivos
para la subversión.

Esfuerzo que necesariamente implica eliminar la única fuente de ingreso de 13.000


familias campesinas. Ahí está latente la posibilidad de un nuevo paro cocalero
igual al que ocurrió en 1996 y movilizó a más de 50.000 personas en contra del
programa de fumigación del entonces presidente Ernesto Samper. O peor,
grandes movilizaciones de desplazadas hacia las fronteras, empujados por el
hambre y asediados por el plomo de la guerra que se librará sobre sus vidas y sin
respeto por sus recuerdos o deseos.

"El país no se imagina lo que está gestándose en el Putumayo. Es la bomba de


tiempo más grave que hay en Colombia", le dijo a la revista colombiana Semana
un oficial de Inteligencia de alto rango del Ejército que pidió no ser identificado.

La zanahoria para los campesinos cocaleros será el Plan de Desarrollo y Paz del
Putumayo. El garrote para los cuatros frentes guerrilleros y dos de autodefensas
que operan en la zona quedará en manos del Batallón Antinarcóticos del Ejército y
la Policía Antinarcóticos. El batallón fue creado, entrenado y dotado durante 12
meses por el escuadrón de los Green Berets estadounidenses (que se hicieron
famosos durante la guerra del Vietnam) como un cuerpo de elite para la lucha
contra el narcotráfico. La Policía no se quedó atrás. La responsabilidad de 3.000
hombres y el programa de fumigación recaerá en dos pesos pesados: el general
Ismael Trujillo, cerebro de la Operación Milenio, y el coronel Carlos Barragán,
oficial que logró la captura de los hermanos Rodríguez Orejuela

En el campo de batalla se encontrarán con 1.800 guerrilleros del Bloque Sur de las
Farc, la unidad más combativa y táctica de esta organización.

De los resultados que se obtengan en esta 'Guerra del Putumayo' dependerán las
estrategias gubernamentales para erradicar los cultivos ilícitos en los
departamentos de Caquetá y Guaviare y en la zona del Catatumbo (Norte de
Santander). Hay mucho en juego.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 50

Si bien la nueva ayuda de Estados Unidos para el Plan Colombia incluye 15


millones de dólares adicionales para ayudar a los desplazados por el conflicto en el
Sur de Colombia, no serán suficientes porque el problema no es sólo de dinero y
bala, sino que los campesinos afectados puedan encontrar una salida rápida al
hambre que significa perder su único medio de subsistencia. Si bien se plantea
sustitución de cultivos y facilidades para desarrollar cultivos productivos lícitos en
la región, el tiempo apremia con la picada de la guerra y el resentimiento.

Mientras las autoridades armadas y los actores en conflicto se preparan para una
guerra sin cuartel los campesinos se rebuscan la manera de sobrevivir. La
economía del Putumayo depende en gran medida del negocio del narcotráfico. En
una escuela de una vereda del valle del Guamuez, por ejemplo, los alumnos
cultivaban una hectárea de coca en un solar vecino y con el dinero que obtenían
compraban todos los útiles que necesitaban. En esta zona del país la coca
reemplaza el comercio de productos lícitos. Entre 1996 y 1998, según la
Contraloría Departamental, bajó de 69.000 a 39.000 metros cúbicos la explotación
maderera. En Puerto Asís, de acuerdo con la misma entidad, entre "1993 y 1995
se movilizaron entre 48 y 66 toneladas anuales de pescado, a partir de 1996 la
movilización no ha superado las 40 toneladas".

El problema ahora es que el negocio de la coca está paralizado. Los comerciantes


se quejan y la plata ya no circula con la abundancia del pasado. Un lanchero
contaba que antes se ganaba entre cuatro y cinco millones de pesos transportando
pasta de coca, hoy consigue la mitad o menos. Hace seis meses las Farc
decidieron sacar del camino a los intermediarios que compraban la droga y
encargarse ellas mismas de la compra y venta de la mercancía. En estos
momentos, y en ello coinciden las versiones de los campesinos en el área y de la
Policía Antinarcóticos, la guerrilla tiene almacenados por lo menos 2.000 kilos de
coca. Eso agrava la situación. El investigador exiliado tiene su propia teoría al
respecto frente a este tema: "La coca ya no es un producto rentable. Los
campesinos sienten que trabajan para la guerrilla y que lo que ganan no alcanza
para la comida, los venenos y los jornaleros".

En el Putumayo muchos campesinos desean cambiar sus cultivos, cambiar sus


vidas, con la ayuda del Estado. De ahí que las expectativas frente a lo que
sucederá una vez comience la guerra frontal contra la coca sean grandes. La
cuenta regresiva para el Putumayo ha comenzado. No hay vuelta atrás.

Colombia necesita un crecimiento económico sostenido del 4% anual hasta el año


2010 para disminuir la pobreza al nivel que tenía en 1995. Los estudios del Banco
Mundial llamados (Evaluación de la red de apoyo social en Colombia, disponible
solamente en inglés), analizan los avances logrados por Colombia en la lucha

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 51

contra la pobreza en los 90, fueron anulados por la reciente crisis económica del
país. También apuntan a la necesidad de reformar el sistema de protección social
colombiano, para asegurar que los grupos vulnerables dispongan de ayuda,
especialmente en momentos de crisis institucional y de Gobernabilidad.

Con más de la mitad de su población viviendo en condiciones de pobreza en 1999,


los estudios indican que la proporción de los pobres en Colombia retrocedió a su
nivel de 1988, después de haber mostrado una disminución de 20 puntos
porcentuales entre 1978 y 1995. Durante este mismo período, el índice de
extrema pobreza disminuyó más rápido, bajando 24 puntos porcentuales.

Las exigencias y recomendaciones que realizan las instituciones multinacionales de


carácter financiero al país, son mezquinas y desprovista de un autentico sentido
social.

Los responsables de la política económica en Colombia son tan miopes, que ven el
desempeño del F M I, como normal y su injerencia como necesaria. Sin embargo,
analistas de los más variados matices ideológicos y escuelas económicas, desde
premios Nobel hasta funcionarios de otros entes similares dentro de la economía
mundial, critican su desempeño amañado y poco efectivo, llegando incluso a pedir
de manera inmediata y pronta su desaparición.

El diseño de los programas del FMI tiene que cambiar. Se debe priorizar el apoyo
a la reconstrucción y avanzar hacia los objetivos de desarrollo humano. El enfoque
actual consiste en abordar el problema de la pobreza adjuntando al marco
macroeconómico del FMI unas redes de seguridad social. Pero como demuestra la
experiencia en el Este Asiático, las redes de seguridad social son inefectivas en un
contexto donde las reformas económicas están destrozando el medio de vida.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) es una de las instituciones financieras


más poderosas. En ningún lugar su influencia es tan pronunciada como en los
países más pobres del mundo. Las decisiones tomadas en su Oficina Central en la
calle 19 de Washington Tienen un gran impacto en las vidas de las comunidades
más vulnerables a lo largo de todo el mundo en desarrollo. Su accionar como
bombero en los incendios económicos del mundo le ha convertido en infaltable a la
hora de pensar en los responsables del rumbo que toman las naciones en el
mundo globalizado.

La Fundación Internacional para el tercer mundo, Intermon, hace una reflexión


muy sosegada de los que ha significado la intervención del FMI con su recetario en
la lucha contra la pobreza. Pobreza parece ser el costo de la acción en el club
monetarista. Al respecto dice un informe de la Fundación que: "la reducción de la

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 52

pobreza apenas está registrada en el radar del Fondo. Medio siglo después de su
creación, es necesaria una profunda reforma si quiere contribuir a afrontar los
desafíos del desarrollo humano del próximo milenio".

Los gobiernos de los países industrializados comparten la valoración positiva de las


terapias del Fondo. Juzgan la situación económica de los países más pobres en la
medida en que tienen derecho a recibir ayuda y alivio de la deuda casi
completamente con base a su cumplimiento con la medicina del FMI, parando rara
vez a preguntarse si esta ha sido prescrita sensatamente.

Oxfam internacional pone en cuestión la visión de que los programas del FMI están
funcionando. No se cuestionan sus pretensiones: el crecimiento económico y la
estabilidad son vitales para reducir la pobreza. Pero el FMI no lo está logrando, y
si persiste la ausencia de reformas fundamentales, el Fondo continuará actuando
como un impedimento para la consecución de los objetivos de desarrollo humano
adoptados por la comunidad internacional para el 2015. El mal diagnóstico ha sido
un problema constante. Los países que han acudido al FMI se enfrentan con
complejos retos de desarrollo, pero la plantilla del FMI tiende haber un único
problema: exceso de gasto. Ellos proceden a prescribir "un tratamiento que cura
todo", medicina en forma de austeridad presupuestaria, altos tipos de interés y
restricciones en el gasto público. Para muchos países estas medidas resultan
asfixiantes. Economías enteras han sido llevadas a un completo revés en sus
mecanismos, mientras las infraestructuras económicas y sociales se han paralizado
sin una salida viable a corto plazo.

Indicadores de Pobreza en Colombia a Nivel Nacional en el Sector Urbano y Rural:


1978 – 99

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 53

[1] Datos e indicadores del desarrollo Mundial, Basado en la paridad del


poder adquisitivo. [2] Miles de pesos (pesos año 1999), sobre la base del
ingreso familiar mensual.

El estudio atribuye los creciente niveles de pobreza a la recesión económica que


afectó a Colombia después de 1996 y que causó un desplome del crecimiento
económico, llegando a un crecimiento negativo del 4,5% en 1999, un aumento en
la desigualdad, una disminución en el desempeño macroeconómico y una
duplicación de los niveles de desempleo. "Incluso si el crecimiento positivo se
restablece dentro de poco, volver a los niveles de pobreza de 1995 demorará más
de una década", declaró Carlos Eduardo Vélez, quien encabezó el equipo que
preparó un extenso y detallado Informe sobre pobreza en Colombia.

El informe señala que a pesar de haber experimentado dos décadas de deterioro


en materias de seguridad, Colombia ha logrado mejorar el rendimiento escolar, la
expectativa de vida y la cobertura médica, y ha logrado disminuir la mortalidad y la
malnutrición infantil, y el trabajo de menores. La depresión económica se hizo
más severa debido a la sostenida violencia y delincuencia, que ha devastado a los
pobres del país y contribuido al desplazamiento de más de un millón de personas.

El crimen y la violencia familiar afectan mayoritariamente a los pobres. Los


jóvenes varones corren más riesgo de ser víctimas de homicidio, mientras los más
pudientes son blanco de crímenes contra la propiedad privada, la extorsión y los
secuestros. Estos factores se han conjugado para alejar la inversión y empujar a
los profesionales y empresarios creadores de empleo a dejar el país. Mientras
tanto, el informe indica que la violencia está claramente asociada con el tráfico de
drogas ilícitas y la presencia de grupos armados: guerrillas y grupos paramilitares.

Según el informe, los colombianos más vulnerables a la pobreza son los niños de
cualquier edad, los dependientes de jefes de hogar jóvenes con baja o mediana
calificación, los inmigrantes recientes (probablemente desplazados) y los que no
son dueños de su hogar. Durante la década de los noventa, Colombia hizo un
esfuerzo por incrementar su gasto público destinado a fines sociales, alcanzando
un 15% del PIB y así aumentó el acceso de los más vulnerables a servicios sociales
básicos. Con la excepción de las desigualdades existentes en los subsidios de
jubilación, el gasto social público, la educación básica y los servicios de salud no
favorecen a los más pobres y clases desfavorecidas.

En el estudio sobre la red de apoyo social, se concluye que la grave contracción


económica de Colombia, incluso si ha comenzado ha revertirse, ha dejado un
legado de niveles de pobreza y desempleo mucho más elevados que antes del
inicio de la crisis. Estos problemas se agravaron cuando la recesión llegó a sus

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 54

niveles más críticos, porque "Colombia no contaba con una efectiva red de apoyo
social para encarar las consecuencias de la crisis", (Banco Mundial).

Las inversiones colombianas en salud y educación antes de la crisis lograron un


aumento de 20 años en la expectativa de vida y elevadas tasas de alfabetización y
matrícula escolar. Sin embargo, estos servicios sociales, que también incluyen un
generoso sistema de pensiones públicas, dependen de la manutención de elevadas
tasas de crecimiento económico. Cuando el país se vio afectado por la recesión,
“los programas de asistencia social que se podrían haber movilizado para brindar
una red de apoyo durante la crisis se vieron restringidos por la falta de
financiamiento y la inflexibilidad institucional, la falta de dirección y la deficiente
orientación de los beneficios a destinatarios”. Aunque el programa de la Red de
Apoyo Social lanzado en 2000 para proporcionar empleo con salario mínimo,
transferencias condicionadas en efectivo y capacitación a los jóvenes abordó
algunas de estas falencias, en el estudio del Banco se recomienda que Colombia
impulse una red de apoyo social “anticíclica”. Una red de apoyo anticíclica de esa
naturaleza permitiría acumular recursos durante las fases económicas favorables,
de modo de contar con dinero para mayores gastos en redes de apoyo social
efectivas y duraderas durante las épocas de recesión cíclicas. En el estudio
también se advierte que las reformas de principios de la década de los noventa,
impulsadas por los cambios constitucionales de 1991, no incluían programas de
asistencia social, tan cruciales durante una crisis y simultáneamente
descentralizaban y aumentaban el gasto en servicios de salud y educación.

Aunque el gasto en salud y educación se incrementó de un 4% en los primeros


años de la década de los noventa a un 8% en 1996, el gasto del gobierno central
en programas de asistencia social se mantuvo sin grandes variaciones.

"Se trata de un nivel de gasto extremadamente bajo si se compara con el de otros


países que se encuentran en una etapa de desarrollo similar, como asimismo con
respecto a las necesidades de los grupos vulnerables específicos que no tienen
acceso a programas claves de ayuda social"

Se indica en el estudio. Incluso si se incluye el financiamiento temporal para los


programas de emergencia de la Red de Apoyo Social, el porcentaje del PIB
destinado a la asistencia social en Colombia es inferior al de países de la región,
como: México, Perú, Uruguay y Venezuela.

Sobre la base de este análisis, el estudio del Banco Mundial recomienda reformas
técnicas para mejorar la focalización, presupuestación, seguimiento y evaluación
de los programas de asistencia social. Asimismo se recomiendan iniciativas para
eliminar la superposición entre programas existentes, mejorar la calidad de los

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 55

programas de nutrición y asistencia diurna para los pobres, encarar las


necesidades de las personas desplazadas dentro del país y ayudar a los ancianos
indigentes. Finalmente, el estudio apunta a una reforma de la estrategia de
asistencia a más largo plazo del país, con recomendaciones específicas para
aumentar el presupuesto destinado a la asistencia social de menos del 0,7% del
PIB a un 1%, mediante la reasignación presupuestaria y una mejor orientación de
los recursos hacia los pobres; niños, madres cabeza de hogar, y desplazados.

Al formular estas recomendaciones, el Banco Mundial hizo hincapié en su


colaboración con el Gobierno de Colombia y el Banco Interamericano de
Desarrollo. "Este diagnóstico debe servir de punto de partida para un acabado
debate con el gobierno y la sociedad civil, entre otros, acerca de la mejor forma de
establecer una sólida red de apoyo social en Colombia", declaró Laura Rawlings,
quien encabezó el equipo del Banco que preparó la evaluación.

El informe del Banco Mundial sobre la manera como aumentó la pobreza en


Colombia demuestra que vamos como el cangrejo, de para atrás, y de allí la tarea
prioritaria de impulsar el Compromiso Social contra la pobreza.

Mientras todos los países del mundo avanzan en lo que tiene que ver con solución
de necesidades básicas de sus habitantes, Colombia retrocede, asegura al informe
los dramáticos informes del Banco Mundial advierten la manera como nuestro país
retrocedió catorce años en materia de lucha contra la pobreza.

Según esos informes, del total de 42 millones de habitantes que tiene Colombia,
27 viven en la pobreza y el 23 por ciento de ellos se encuentra en la miseria
absoluta, o sea casi 10 millones de compatriotas.

Sin ser alarmistas, la situación de la sociedad colombiana para el ano 2002, puede
verse reflejada en las cifras de pobreza dadas por agencias nacionales e
internacionales, donde se señala que el 64% de la población en Colombia, es decir
28 millones de ciudadanos viven en la pobreza, de los cuales 10 millones apenas
sobreviven en extrema pobreza. Cifras que indican que el país retrocedió a niveles
de pobreza de 14 años atrás.

Lo preocupante es que la pobreza se concentra en el sector rural con un 79%,


mientras que la pobreza en el sector urbano alcanza un 55% de habitantes;
además, la situación de pobreza extrema en el campo colombiano alcanza un 37%
mientras que en las ciudades llega a un 14%.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 56

Este panorama de la realidad colombiana a las puertas del próximo milenio, nos
presenta como un país altamente inequitativo en el panorama mundial y con un
horizonte preocupante.

Las siguientes cifras del banco mundial muestran la dimensión de la pobreza en


Colombia a las puertas del próximo milenio:

Pobreza en Colombia 2002

Población Pobres % No pobres %


TOTAL 43.834.117 28.O53.835 64% 15.780.282 36%
URBANA 31.394.936 17.267.215 55% 14.127.721 45%
RURAL 12.439.181 9.826.953 79% 2.612.228 21%

El panorama de la pobreza en Colombia no es un fenómeno aislado en el


panorama de América Latina, ya que la Cepal, estima que de los cerca de 214
millones de personas en Latinoamérica en el año 2001, casi el 43% de la población
vivía en la pobreza y de estos, 92.8% millones (18.6%), en la indigencia.

La actual situación social en América Latina y Colombia no avizora soluciones


claras en los próximos años; sino por el contrario, habrá un incremento de los
índices de pobreza.

2.2 VIOLENCIA EN COLOMBIA Y EL EXODO EXTERNO

Finalmente, no puedo pasar por alto el tema del éxodo externo. La crisis y la
guerra han desencadenado un fenómeno migratorio masivo, y Colombia sufre una
gran perdida de capital humano. Según el Departamento de Planeación Nacional
de Colombia, el país perdió 2.000 millones de dólares a causa de la fuga de
cerebros, lo cual contribuye al estancamiento económico y a la pérdida de
competitividad, como lo asevera un estudio de la Organización Internacional del
Trabajo. España no es el principal destino migratorio colombiano, pero sí es una
muestra reveladora. A marzo 31 de 2000 solicitaron regularizar su estancia en
España 13.475 colombianos, constituyéndose en la tercera población extranjera,
dentro de la que solicitó regularización. La migración debe ser tenida en cuenta en
los programas de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas y de la Unión Europea.

Es un colectivo al cual hay que abrir espacio en la construcción de la paz. La


comunidad internacional debería evaluar el éxodo desde la perspectiva de un país
en conflicto y otorgar un visado por razones humanitarias, como se ha hecho con
otros países que por causas políticas y de violencia han sido favorecidos.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 57

Hace años la paz de Colombia estaba casi en sus propias manos, vergonzosamente
no supimos alcanzarla, hoy depende mucho de las manos del mundo, confiamos
en que así sea entendido

2.3 EL DESEMPLEO EN COLOMBIA

La desocupación en Colombia, se ha incrementado de manera alarmante


especialmente en las grandes ciudades del país, basta darle un vistazo a las cifras
que nos revela los siguientes gráficos:

Fuente: Dane. Gráfico: Diseño Editorial/ EL TIEMPO

15,7
Desempleo siete ciudades

12,0

11,3

9,5

9,8
7,8 8,0

1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998

*Cifras a diciembre de cada año, fuente Dane. Gráfico: Diseño Editorial/ El Tiempo

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 58

Tasa de desempleo (siete principales ciudades)

19.5

15.9
15.5 16.6
16.7 16.3
15.0
12.5
10.6 11.4 14.2
11.9
10.6
10.4

Bogotá Medellín Cali B/quilla B/manga Manizales Pasto

Diciembre de 1997 Diciembre de 1998

TASA DE DESEMPLEO (%)

Marzo/98 14,4
Junio/98 15,9
Sept./98 15,0
Dic./98 15,6
Marzo/99 19,5
Junio/99 19,9
Sept./99 20,1
Dic./99 18,1
Marzo/00 19,5
*Dato no oficial: Fuente: Dane

En el año 2001, la situación económica del país es caótico, según el DANE y


FENALCO, la tasa de desempleo está sobre el 16.4%, lo más grave es que el
subempleo aumento a un 31% situación que tiene sus causas en la violencia
política; desplazamiento, y la apertura económica que favorece los intereses
internacionales en aras de la integración, modernización y mundialización de la
economía.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 59

2.3.1 ¿Qué es el Subempleo?

El subempleo, que no es la informalidad, quedó redefinido en la nueva


metodología, así:

• Por insuficiencia de horas: personas que trabajan menos de 48 horas a la


semana y desean laborar más tiempo.

• Empleo inadecuado por competencias: personas que desean o buscan cambiar


su trabajo por otro para utilizar mejor sus calificaciones o competencias
profesionales.

• Empleo inadecuado por ingresos: personas que desean o buscan cambiar de


trabajo para aumentar sus ingresos.

Mercado Laboral

Total nacional* Enero 2001

Concepto Cantidad
Tasa de desempleo 16,4
Tasa de subempleo 31,1
- Por insuficiencia de horas 15,5
- Empleo inadecuado por competencias 3,1
- Empleo inadecuado por ingresos 23,8
Población total (millones) 41,40
- En edad de trabajar (millones) 31,15
- Económicamente activa (millones) 19,73
Ocupados (millones) 16,49
Desocupados (millones) 3,24
Subempleados (millones) 6,12
- Insuficiencia de horas (millones) 3,06
- Empleo inadecuado por competencias (millones) 605,544
- Empleo inadecuado por ingresos (millones) 4,69

* Excluye los anteriormente llamados territorios nacionales


Gráfico: Diseño Editorial El Tiempo Fuente: Dane

Colombia, según la CEPAL, presenta la tasa de desempleo más alta de América


Latina y una de las peores a nivel mundial, donde además el país en materia de
seguridad social está en déficit, ya que el 32% de los asalariados laboran sin
contrato, es decir no tienen derecho a algún tipo de prestaciones, sistema de

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 60

seguridad social o estabilidad laboral. 3.5 millones de colombianos trabajan


informalmente mientras que un 48% del total de los empleados viven del llamado
“rebusque” frente a un 46% del promedio en la región.

Para la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF), la situación del


país es dramática si se tiene en cuenta que en el año 2001, hay 4.3 millones de
colombianos más pobres que hace tres años.

Para el Departamento Nacional de Planeación (DNP), el porcentaje de pobres en


el país pasó del 51.5%, en 1998 a un 60% en menos de 10 años. Es decir,
actualmente de los 42 millones de habitantes con los que cuenta Colombia, 25
millones se encuentran en situaciones de pobreza.

Las siguientes estadísticas nos muestran la situación social y de pobreza al finalizar


el milenio:

Porcentaje de Pobres que Tiene Colombia 1991 - 2000

1991
53,8
1993
51,7
1996
52,8
1997
53
1998
51,5
1999
56,3
2000
59,8

Fuente: Departamento Nacional de Planeación

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 61

Tasa de Desempleo (%) en Colombia

19.7
18
15.6

10.6 11.3 12
9.5 9.8 9.5
7.8 8
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000

Fuente: Dane

Mas de 25 millones de personas en Colombia viven con menos de $5.400 diarios;


11 millones con la mitad de esos recursos, y cerca de 2.7 millones de personas
están desplazados de sus tierras por culpa de la violencia política.

Se considera por parte de los Analistas que más de 3 millones de colombianos no


tienen empleo y casi otros 7 millones están subempleados. Los niños que trabajan
llegan a una cifra superior a los 2,5 millones y un poco más de 1 millón de
campesinos no tienen tierra en el país para trabajar.

Mostrando a las claras que la exclusión social en Colombia, unida a la incapacidad


del Estado para solucionar los problemas básicos de la población, convierte al país
en la segunda nación más ineguitativa del continente, después del Brasil.

Situación Actual de la Economía y Pobreza en Colombia

La Comisión Económica para América Latina (CEPAL), reveló que la situación del
país es peor que la de hace cinco años y que los índices de pobreza fácilmente
superan el 55% de la población; unos 24 millones de personas.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 62

Es más, de esos 24 millones de colombianos, 65 millones viven en la indigencia,


estos son, 27% de la población.

Los estimativos y cálculos de la Oficina de Planeación Nacional y el DANE,


consideran que apenas el 5% de la población colombiana (Estrato 5 y 6). Tienen
capacidad para subsidiar a la población más pobre.

El siguiente cuadro comparativo de la población Colombiana por Estratos


socioeconómicos, ilustra la preocupante realidad Nacional en materia de
oportunidades y desigualdades sociales que se acentúan cada día mas con relación
a las políticas económicas dictaminadas por el F.M.I:

Estrato 6 Estrato 5
602.453 1´428.218

Estrato 1 1.4 3.32


16.55
7´119.750 11.69

Estrato 4
5´030.531

Estrato 2
15´452.45
31.13
4
35.91
Estrato 3
13´397.260

Total población: 43.030.829


Fuente: Dane

Colombia, retrocedió seis puestos en la clasificación del índice de desarrollo


humano (IDH) del 2002, divulgado por las Naciones Unidas (UN), en su
programa (PNUD).

En relación a otros aspectos de la vida nacional, las Naciones Unidas, presenta


cifras no muy alentadores en relación al panorama Latinoamericano y Mundial:

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 63

Colombia obtiene un siete (7) en el grado de democracia, sobre una escala de 10


puntos. En el ámbito Latino Americano solo está por delante de Ecuador (6) y
Cuba (7).

En relación a libertades civiles y derechos políticos, la calificación es de 4 sobre 7,


lo que demuestra la poca atención desde el punto de vista institucional al
problema de los derechos Humanos.

Pero es preocupante la valoración en relación con la libertad de prensa y a la


variable de ley y orden estimada con un punto sobre 6 posibles. Por tal situación,
la profesión de informador es considerada por la prensa internacional como de alto
riesgo en Colombia.

Según el Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo (PNUD) y el


Departamento de Planeación Nacional, el índice desarrollo Humano (IDH) en
Colombia ha desmejorado en la última década. En el año 2001, el país ocupa el
lugar 68 entre 174 países. Este índice se basa en tres indicadores: esperanza de
vida al nacer; taza de alfabetización de adultos y nivel de vida, medido por el PIB
per cápita real. El siguiente cuadro ilustra la situación de los países
Latinoamericanos con relación al Desarrollo Humano:

Desarrollo Humano Alto


34. Argentina
38. Chile
40. Uruguay
43. Costa Rica

Desarrollo Humano Medio


54. México
55. Cuba
57. Panamá
68. Colombia
73. Brasil
82. Perú
90. Paraguay

Fuente: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo

La Contraloría General de la Nación reveló a mediados del año 2202, un informe


sobre exclusión social, con algunos datos preocupantes:

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 64

• El 58% de la población colombiana se encuentra en situación de pobreza.


• Hay 11 millones de colombianos que no perciben ingresos de ninguna índole o
viven con menos de un dólar al día. ($2.500 diarios) del total, 2 millones son
desplazados, con un alto porcentaje de mujeres y niños.
• La indigencia rural superara el 40%
• Hay más de 3.5 millones de niños sin escolaridad
• El analfabetismo llega al 8%, de la población mayor de 15 años.
• El 20% de los hogares más ricos del país concentra el 52% de los ingresos
totales de la nación.
• El 53% de la tierra está en manos del 1.08% de los propietarios.
• Hay una alta concentración en el mercado de capitales: las 10 empresas más
grandes absorben el 7% del negocio.

El Economista Luis Jorge Garay, junto con Analistas de la Contraloría General han
realizado un estudio, sobre la exclusión social en la última década en Colombia,
dando cifras preocupantes de la situación socioeconómica de los colombianos. Por
su significado, recogemos algunos apartes del citado estudio para la valoración del
mismo:

La Exclusión Social, Según Garay

“La pobreza es un concepto muy pobre, dice el analista Luis Jorge Garay, quien,
junto a investigadores de la Contraloría, ha desarrollado el de “exclusión social”.
Presentando algunos de los datos y su variación en la década.

Ingreso

• PIB per cápita: 2.145 dólares (1995), 1.798 dólares (2000)


• Población bajo la línea de indigencia: 23.4% (2000), frente a 20,4% (1990)
• Ocupados con menos de dos salarios mínimos: 66.2% (2000), frente a 65,5%
(1990).
• Ocupados con menos de un salario mínimo: de 23% (1991) a 37% (2000).

Consumo

Uno de cada cuatro colombianos no tiene acceso a la canasta básica. Por otra
parte:

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 65

• Mercado laboral: La tasa de informalidad era de 54% (1992) y pasó a 61%


(2000).

• Activos: En 1994 la población sin vivienda propia era un 37,2%; en 2000,


41,6%.

• Salud: El 48,6% de la población no está cubierto por el sistema de seguridad


social.

Educación

• Cobertura neta: En preescolar 40,5 por ciento; en primaria 83,6 por ciento; en
secundaria 63 por ciento; en superior 15,1 por ciento.
• Cerca del 73% de los estudiantes matriculados en la educación superior
proviene de los estratos más altos; sólo un 4% proviene de los más bajos.

• Pensión: Un 71% no está amparado por una pensión.

Género

• Tasa de desempleo femenina: de 13,1% (1991) a 24,5% (2000); frente a


16,9% entre los hombres (2000).
• Un 42,9% de las mujeres ocupadas recibe menos de un salario mínimo; en
1991 era un 31, 8%.

Derechos Civiles

• Tasa de secuestros: 5,9 casos por cien mil habitantes, la más alta del mundo.
• Libertad de asociación: entre 1991 y 2000 fueron asesinados 1.556
sindicalistas.
• Localización: un habitante de Bogotá dispone, en promedio, de ingresos 66%
superiores a los de otras regiones y 300% más altos que los de Vichada y
Nariño.

Infraestructura

• 10,4% de las viviendas no tiene acceso a ningún servicio público.

Desplazamiento

• Se ha triplicado en los últimos cinco años.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 66

Avances
• Afiliados a la seguridad social: de 23.85% del total (19939 a 51.4% (2000)
• Mortalidad infantil: de 10,1 por mil (1996) a 6,7 por mil (2000)
• Analfabetismo: de 12,3% (1985) a 8% (2000)
• Deserción escolar en grado primero: de 26,8% (1982-83) a 17,8 (1998)
• Años de educación en mayores de 15 años: de 6,2 (1990) a 7,3 (2000)

Tomado de la “exclusión social en la sociedad colombiana”, Contraloría General de


la Nación. 2002.

2.4 ENDEUDAMIENTO EXTERNO

Otro aspecto que requiere ayuda internacional es el endeudamiento del Estado. La


deuda externa, sumada a los altos niveles de corrupción, está haciendo inviable el
Estado; éste es casi invisible socialmente, lo que contribuye a la pérdida de
legitimidad. Las masas populares ven el rostro estatal únicamente cuando son
reprimidas. La deuda externa se duplicó en el último decenio y equivale al 42.8%
del PIB; en 1990 ascendía a 17.992 millones de dólares y nueve años más tarde
superó la barrera de los 35.000 millones de dólares. En los próximos cuatro años
Colombia deberá pagar un monto cercano a 15.000 millones de dólares, esto es
dos veces el Plan Colombia. El presupuesto es deficitario en un 54%. El gobierno
aspira obtener de la comunidad internacional 3.500 millones de dólares y aportar
con cargo a crédito 4.000 millones de dólares. Para aliviar la capacidad de
inversión social del Estado, a fin de que recupere legitimidad, se necesita
replantear la estrategia de pagos, que no permiten una verdadera política social.

Sin duda la paz depende, en primer término, de lo que haga Colombia, pero
también de cómo actúe la comunidad internacional. A nuestro juicio, ésta debe
inspirarse en los siguientes criterios para que su participación sea eficaz:

• Reconocer que el conflicto sufre la influencia de la globalización económica y de


fenómenos delictivos transnacionales, y por tanto requiere acciones
internacionales;
• Que lo anterior demanda una cooperación internacional estrecha utilizando
todos los instrumentos de política exterior (diplomacia, fuerzas armadas,
comercio, migración, cooperación al desarrollo, etc.) de los países.
• Que es necesario dotar al Grupo de Apoyo al Proceso de Paz de capacidad para
adoptar medidas internacionales, que sin debilitar más el Estado, permitan
proteger vidas humanas; igualmente, no limitar la responsabilidad de los

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 67

estados únicamente al papel de donantes o a las figuras tradicionales de


mediación, acompañamiento o verificación.
• Que la ayuda externa, particularmente, la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD)
contribuya a aliviar las cargas y no añada nuevos problemas, ni esté
condicionada o ligada a sus intereses estratégicos nacionales, como viene
sucediendo. En cambio sí debe supeditarse a que el Estado muestre progresos
en materia de protección de los derechos humanos y depuración de sus fuerzas
militares y policiales.
• Construir un marco más equitativo y solidario de las relaciones comerciales a
fin de que Colombia pueda recuperar su estabilidad macroeconómica, mejorar
el entorno socioeconómico, generar empleo, y modernizar su aparato
productivo, altamente anquilosado y con poca inyección tecnológica.

Colombia hay que mirarla en la triple dimensión: de desestructuración del Estado,


de la influencia de la criminalidad global organizada y de un modelo económico
que ahonda el agujero entre pobres y ricos, y hace de ella un frágil estado
periférico límite de la economía mundial. Dentro de este tríptico, lo primero
produce violencia, lo segundo suministra dinero y armas, y lo tercero, manos
místicas, o mercenarias, para empuñar esas armas contra la población civil.

Este triángulo perverso sólo puede ser desarticulado con un plan orientado a
fortalecer el Estado, pero no sólo en lo militar; con una fuerte acción internacional
contra el crimen organizado global, y mediante la implementación de reformas
políticas, económicas y sociales que modifiquen las estructuras tradicionales, quizá
las reformas agraria y la fiscal sean las más urgentes. Los tres vectores demandan
una decidida cooperación internacional, y una férrea voluntad política de las elites
gobernantes y de las fuerzas insurgentes, que deben encontrar, con prontitud,
antes de que Colombia se sumerja en un profundo abismo de caos y disolución,
puntos de coincidencia que permitan abrir un nuevo capitulo de la historia.

Deuda Externa Suramericana

Los países con mayores problemas socioeconómicos en la región, mantienen en los


actuales momentos un creciente índice de endeudamiento con organismos
Internacionales.

Deuda externa en los países de Sudamérica se acentúa cada vez más, como lo
indican las siguientes cifras de la CEPAL: (Gráfico de Pareto).

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 68

300.000

244.100
250.000

200.000
171.000

150.000

100.000

50.000 37.967 37,200 35.167


28.700
14.167 8.567 4.467 2.533
0

Brasil Argentina Chile Colombia Venezuela Perú Ecuador Uruguay Bolivia Paraguay

Fuente: Bancoldex. Cepal. Cifras promedio 2000 – 2001 y 2002

Estructura Deuda Externa Colombiana

40000

35000

30000

25000

20000

15000

10000

5000

0
1970 1980 1990 2000 2002

Fuente: Banco de la República

El monto de la deuda externa del país, está muy cerca del 50% del producto
interno bruto (PIB), los pagos anuales por deuda pública son equivalentes al 40%
de las exportaciones. Nuestra deuda externa se ha multiplicado por trece (13)

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 69

desde los años 70, pasando de US $3.1000 millones a más de US$39.885 millones
en los actuales momentos. La cifra en pesos colombianos está cercana a los
$92.000.000.000 (noventa y dos billones de pesos), que representa cerca de dos
(2) presupuestos nacionales anuales.

En relación al salario per cápita, equivalente a decir que cada uno de los 42
millones de colombianos ricos o pobres debemos hoy al exterior (FMI - BM. BID)
aproximadamente $2.300.000.

La Cepal recomienda la necesidad de recurrir a políticas económicas y sociales que


refuercen las posibilidades de ampliar la base productiva, pero que a la vez
conlleven una redistribución progresiva que permita que el crecimiento económico
eleve mas rápidamente el nivel de vida de la población en menores recursos.

Situación que no representa salidas viables en la región debido a la concentración


de riqueza en pocas manos y a la desigual participación en el mercado mundial
jalonadas por la globalización y el neoliberalismo salvaje impuesto en la región.

Proceso de Comprensión y Análisis


• Identificar las diferentes concepciones y elementos que identifican la pobreza
en Colombia.
• Analizar e identificar las diferentes políticas en materia social y económica de la
banca multinacional: Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional. En el
diseño y aplicación de la política económica Colombiana, a través de un cuadro
sinóptico.
• Identificar las características y el movimiento de la deuda externa Colombiana
en los últimos diez años.

Solución de Problemas

• Diseñar un programa socio – pedagógico, que recoja estrategias ideales para la


solución del problema del empleo en Colombia.
• Elaborar de manera creativa un plegable informativo y programático para la
comunidad educativa de su institución con él animo de sensibilizarla sobre el
fenómeno del desplazamiento en Colombia.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 70

• Con base en las lecturas complementarias reformular las orientaciones que el


gobierno presenta en la solución del fenómeno del desempleo y la economía
informal.

Síntesis Creativa y Argumentativa


• Realizar un escrito no mayor de cinco paginas, sobre “la incidencia de la
violencia armada en Colombia”, en la estructura económica del país.
• Diseñar una estrategia que le permita al país pagar su deuda externa, donde
las condiciones socio - económicas de las clases menos favorecidas no sean
afectadas por la política del Fondo Monetario Internacional.

Autoevaluación
• Explicar las causas y consecuencias internas de la pobreza en Colombia.
• Realizar un mapa conceptual donde se sinteticen las causas del desempleo en
Colombia.
• Identificar las políticas de la apertura económica y su relación con la deuda
externa de los dos últimos gobiernos presidenciales.
• Analizar las variaciones del desempleo en Colombia (ver graficas) de los
últimos diez años en Colombia en relación con los demás países de la región.

Repaso Significativo

• En el contexto de su comunidad o región, identificar los sectores más


deprimidos y de menos atención por parte del gobierno local.
• Analizar la situación social y económica de su comunidad con relación al
fenómeno del conflicto armado.
• Elaborar un documento donde a través de imágenes y fotografías de la
situación del conflicto en Colombia, se exponga el drama social que vive la
población civil Colombiana.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 71

Bibliografía Sugerida
BIRCHENALl, J. 1998. “Distribución del ingreso, capital humano y crecimiento
económico”, UMACRO-DNP.

CARDENAS, M. Y C. Gutiérrez; (1998), “Determinantes del Desempleo en


Colombia”. Debates de coyuntura social, Fedesarrollo.

MONCADA, G. y Webb, R. 1996. ¿Cómo estamos?. Análisis de la Encuesta de


niveles de vida, Instituto Cuánto - Unicef, mayo, 61 - 99.

NINA, E. 1997. "Evolución del perfil de pobreza y desigualdad en Colombia",


Universidad Javeriana, Tesis de Maestría en Economía.

NÚÑEZ, J. Y R. Bernal (1997); “El desempleo en Colombia: tasa natural,


desempleo cíclico y estructural y la duración del empleo”. (1976 - 1998), Ensayos
sobre política económica.

SEN, A. 1978. "Three Notes on the Concept of Poverty", Income Distribution and
Employment Program, OIT.

SEN, A. 1981. "Appendix C: Measurement of Poverty", Poverty and Famines: An


Essay on Entitlement and Deprivation, Clarendon Press, Oxford.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 72

BIBLIOGRAFÍA GENERAL

ANAND, S. "Aspects of Poverty in Malaysia", Review of Income and Wealth. 1977.

BIRCHENALL, J. "Distribución del ingreso, capital humano y crecimiento


económico", UMACRO-DNP. 1998.

BLACKORBY, C. y Donaldson, D. "Ethical Indices for the Measurement of


Poverty", Econometrica 48. 1980.

CARDENAS, M. Y. C. Gutierrez, Determinantes del Desempleo en Colombia.


Debates de coyuntura social, Fedesarrollo. 1998.

CUEVA, Agustín. El desarrollo del capitalismo en América Latina. Edit. Siglo XX,
México, 1978.

DE SOTO, Hernando. El Otro Sendero. Edit. Oveja Negra. Bogotá. Colombia.


1987.

FOSTER, J., Greer, J., Thorbecke, E. "A Class of Decomposable Poverty


Measures". 1984.

FURTADO, Celso. Desarrollo y subdesarrollo. Edit. Universitaria de Buenos Aires.


Buenos Aires, Argentina. 1964.

GARCÍA, Antonio. Atraso y dependencia en América Latina. Edit. Ateneo, México.


1972.

KAKWANI, N. "Measurement of Poverty and Negative Income Tax", Australian


Economic Papers 16. 1977.

KAKWANI, N. "On a Class of Poverty Measures", Econometrica. 1980.

KUNDU, A. "Measurement of Poverty - Some Conceptual Issues". 1981.

LARRAÑAGA, Oswaldo. 1994. "Pobreza, crecimiento y desigualdad: Chile, 1987 -


1992". Revista de Análisis Económico.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 73

LÓPEZ, H.; Características y determinantes de la oferta laboral Colombiana y su


relación con la dinámica del empleo. Ponencia presentada en el seminario
Economía y empleo, Banco de la República, Marzo, 30. Bogotá. 2001.

Misión Social – DNP - PNUD. "Informe de Desarrollo Humano para Colombia.


1998", capítulo 6. 1998.

MONCADA, G. y Webb, R. ¿Cómo estamos?. Análisis de la Encuesta de niveles de


vida, Instituto Cuánto - Unicef. 1996.

NINA, E. "Evolución del perfil de pobreza y desigualdad en Colombia", Universidad


Javeriana, Tesis de Maestría en Economía. 1997.

NÚÑEZ, J. Y R. Bernal (1997); El desempleo en Colombia: tasa natural,


desempleo cíclico y estructural y la duración del empleo. Ensayos sobre política
económica. (1976 - 1998).

OCAMPO, José Fernando. Colombia siglo XX. Ediciones Tercer Mundo. Bogotá.
1981.

Oradores Colombianos. Editorial minerva, Bogotá . 1937.

RAVALLION, M. "Poverty Comparisons. A Guide to Concepts and Methods. Living


Standards Measurement Study", Working Paper 88, Washington, D. C. 1992.

SASTRY, S. "Poverty: Concepts and Measurement", Indian Journal of Economics.


1980.

SEN, A. "Poverty, Inequality, and Unemployment: Some Conceptual Issues in


Measurement", Economic and Political Weekly. 1973

SEN, A. "Poverty: An Ordinal Approach to Measurement". 1976.

SEN, A. "Three Notes on the Concept of Poverty", Income Distribution and


Employment Program, OIT. 1978.

SEN, A. "Appendix C: Measurement of Poverty", Poverty and Famines: An Essay


on Entitlement and Deprivation, Clarendon Press, Oxford. 1981.

SHORROCKS, A. "The Class of Additively Decomposable Inequality Measures".


1980.

SIERRA, O. Empleo, Lecturas sobre economía: Perfil de coyuntura económica,


CIE. Universidad de Antioquia, 52. 2000.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 74

SUNKEL, Oswaldo y Paz, Pedro. El subdesarrollo Latinoamericano y la teoría del


desarrollo. México. Edit. Siglo XXI, S. A 1970.

SZAL, R. "Poverty, Measurement and Analysis", OIT, Working Paper WEP2 -


23/WP60. 1977.

TAKAYAMA, N. "Poverty, Income Inequality, and Their Measures: Professor Sen's


Axiomatic Approach Reconsidered". 1979.

VAN Ginneken, W. "Some Methods of Poverty Analysis: An application to Iranian


Data, 1975-76", World Development 8. 1980.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 75

ANEXO 1: La Economía Informal en


América Latina

El escritor peruano José María Arguedas dijo en una ocasión que los pueblos
latinoamericanos éramos unas culturas antiguas, unos pueblos antiguos con
historia, con pasado, y con características indelebles. Yo diría que entre esas
características, tal vez una de las más notables sea aquella por la cual, nuestros
países, de tiempo en tiempo, se convulsionan de revolución a revolución.

En el Perú contemporáneo, de hecho, ha habido dos revoluciones muy


significativas. Una fallida, que fue la revolución que trató de llevar a cabo el
Sendero Luminoso, el grupo guerrillero maoísta que se insubordina en 1980; y otra
exitosa, la revolución de los empresarios populares, llamados generalmente
empresarios informales, que trabajan al margen de la ley en las ciudades del país.

De manera que, si tuviéramos que resumir en un concepto la historia de los


últimos 15 años en el Perú, yo diría que es la historia de esas dos revoluciones: la
historia de la revolución comunista del Sendero Luminoso y la historia de la
revolución informal de los empresarios populares; la historia de una revolución que
fue un fracaso, militar y político, y la historia de una revolución que ha terminado
siendo uno de los éxitos más impresionantes de la historia contemporánea.

La Economía Informal

Muchas veces hemos leído acerca de las actividades subterráneas de la economía


informal. Conceptualmente podemos proveer una definición muy simple de este
fenómeno. Las actividades que componen la economía informal son aquellas
actividades que teniendo fines lícitos se basan en medios ilícitos para llevarse a
cabo. Es decir, son actividades que no tienen intrínsecamente un contenido
criminal, pero que, a pesar de ser actividades finalmente lícitas y convenientes,
deseables en un país, tienen que servirse de medios ilícitos para llevarse a cabo.
La característica económica más notable de las actividades informales es que tanto
la gente directamente involucrada en ellas como la sociedad en general se
encuentran mejor si la ley es violada que si es seguida al pie de la letra.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 76

Sirva para aclarar ese concepto el ejemplo (que trataremos a fondo más adelante)
de los vendedores ambulantes de origen callejero que pueblan las ciudades de
América Latina. En ciudades como México, D.F., Sao Paulo, Bogotá y Lima, que se
encuentran entre las ciudades más pobladas y de mayor densidad del mundo, una
característica fundamental es la existencia de miles de vendedores ambulantes.

El vendedor ambulante es, en primer lugar, un comerciante. Sus fines son lícitos,
pero se tiene que basar en medios ilícitos no cumplir con las regulaciones legales,
no cumplir con las normas laborales, no pagar impuestos porque no le queda otro
remedio que hacerlo así. No puede ingresar en la economía formal porque ésta
impone sobre las sociedades latinoamericanas un coste tan oneroso que resulta
insufragable para las personas y para los empresarios con pequeños ingresos. La
informalidad es entonces una situación en la cual la gente quiere trabajar
legalmente pero no puede. Lo único que le queda es trabajar en esa zona de
relativa ilegalidad que el resquicio legal deja en la sociedad de Latinoamérica.

Aunque varia de país en país, la importancia de la informalidad es muy amplia. En


el caso de mi país, se calcula que en términos generales el equivalente a un 30 por
ciento del producto nacional bruto y el equivalente a un 60 por ciento de las horas-
hombre trabajadas se desarrollan en las actividades informales. Es decir, un 30
por ciento de la producción y un 60 por ciento del trabajo.

Eso nos permite obtener algunas conclusiones iniciales. En primer lugar, que
social y económicamente la informalidad es grande, ya que, si el 60 por ciento de
las horas-hombre están en el sector informal, el gobierno sólo controla 4 de cada
10 horas que se trabajan. En otras palabras, la mayor parte de los peruanos
trabajan fuera de la ley.

La segunda conclusión es que, pese a su importancia cuantitativa, las actividades


informales tienen una productividad baja puesto que, como hemos visto, el 60 por
ciento del trabajo hace solamente el 30 por ciento del producto. Eso nos
aproximará a algunos problemas que tendremos que afrontar más adelante: la
falta de instituciones legales que permitan maximizar sus beneficios o cómo
organizarse con mayor eficiencia. Los informales, por ejemplo, no pueden recurrir
a un tribunal para hacer valer sus contratos. Padecen igualmente de una
insuficiencia crónica de derechos de propiedad que, a la larga, termina influyendo
negativamente en su productividad.

Dicho esto, pues, es evidente que estas actividades de fines lícitos y medios ilícitos
es decir, la informalidad son significativas, aunque su importancia varia de un
sector a otro de la economía latinoamericana.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 77

La Construcción Informal

En el caso de América Latina es significativo, ilustrado por lo menos en la


experiencia peruana, que el sector informal tenga una presencia fundamental en el
terreno de la construcción y de la vivienda. De hecho, el desarrollo urbano
peruano se ha hecho fundamentalmente en el sector informal. La mayor parte de
Lima, aproximadamente la mitad de su área geográfica (Lima es una ciudad de 8
millones de habitantes), se encuentra desarrollada completamente fuera de la ley,
en lo que los peruanos denominan eufemisticamente "pueblos jóvenes," que no
son otra cosa que las barriadas barrios urbanos marginales, desarrollados por
invasión de terrenos públicos o privados por parte de migrantes del campo a la
ciudad de los últimos 40 años.

El desarrollo de este sector de la vivienda informal tiene una gran importancia


económica, social y política en el caso del Perú. En primer lugar, es
económicamente significativo porque la inversión realizada por la gente del sector
informal en sus propias viviendas equivale aproximadamente a 8,000 u 8,500
millones de dólares; inversión de viviendas que se ha realizado sin ningún tipo de
apoyo por parte del Estado.

En segundo lugar, es socialmente importante porque representa la emergencia de


un nuevo sector propietario. Tradicionalmente en el Perú, supongo que al igual
que en el resto de Latinoamérica, los sectores menos favorecidos han estado
ausentes de la propiedad. El acceso a la propiedad se ha limitado a los sectores
ricos o aristocráticos de esos países. A través de este proceso de urbanización
informal, no obstante, los sectores menos favorecidos de América Latina han
logrado reivindicar para sí el derecho a la propiedad, establecerlo activamente en
las ciudades latinoamericanas.

Finalmente, la construcción informal ha tenido una significación política muy


notable. ¿Por qué política? Porque, en última instancia, sólo la gente que es
propietaria lucha por algo. Sólo cuando se tiene algo, se tiene sentido de la
responsabilidad, de la lucha, y del desafío político. Los países que no son
propietarios son países donde la sociedad es débil, donde la ciudadanía no se
enfrenta al poder político porque finalmente hay muy poco espacio para el
desarrollo individual.

El Comercio Informal

Otro sector de suma importancia en la economía informal es el sector del


comercio. En el pasado la presencia de la actividad informal en el sector comercial
en el Perú ha sido bien notable. Tal vez sea de las más notables de todas. Se

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 78

lleva a cabo fundamentalmente, como decíamos, a través del comercio callejero


los llamados vendedores ambulantes o buhoneros que existen en todas las
ciudades de América Latina. Mucha gente, de origen humilde, probablemente
migrantes del campo a la ciudad, que, dada la situación en la que se encuentra,
tiene que dedicarse a comerciar para así generar una actividad empresarial que les
permita ganar una subsistencia mínima.

Aunque no se cuenta con un censo actualizado, se calcula que en el año 90 ó 91


había aproximadamente 300,000 vendedores ambulantes en Lima. Mucha gente
cree que a raíz de los programas de ajuste llevados a cabo por el gobierno de
Fujimori, ésta cantidad de vendedores ambulantes debe haber crecido
significativamente. De hecho, medio millón de empleados públicos han sido
despedidos por el gobierno peruano, y muchos de ellos muy probablemente deben
de haber encontrado su refugio en el sector comercial informal.

La importancia social de los ambulantes emana de su reivindicación de la empresa


privada para los sectores menos favorecidos de la sociedad latinoamericana. Por
lo general, hemos leído libros y hemos escuchado programas en la radio y en la
televisión que nos han tratado de convencer que el capitalismo es una cosa ajena
a América Latina; que quienes somos empresarios en América Latina formamos
una vanguardia de la penetración extranjera o un rezago de la aristocracia
colombina, pero que no somos auténticos peruanos, mexicanos, y, ni siquiera,
capitalistas porque no representamos al capitalismo. ¡Esto es mentira! Y para
probar esta mentira, no hay que escribir libros de texto ni citar a Adam Smith.

Para demostrar que es mentira basta con salir a las calles de cualquier ciudad de
Latinoamérica y enseñarles a aquellos que se resisten a aceptar la evidencia que
los pobres latinoamericanos ejercen el capitalismo en las mismas calles, aunque
nadie se lo haya enseñado; que no tienen que ser ricos para ser empresarios,
solamente les basta ser trabajadores; que no tienen que ser listos para ganar
dinero, solamente les basta ser ordenados; que no tienen que ser sabios para
descubrir una oportunidad, solamente les basta ser audaces. Con la decisión, con
la honestidad, y con la audacia, las calles de América Latina se han convertido en
la mejor escuela de empresarios que existe. De manera que esas calles vibrantes
de la actividad empresarial se constituyen en el mejor alegato en favor de la
empresarialidad y del capitalismo latinoamericano.

Es más, la existencia de este sector comercial informal nos ofrece el mejor


argumento disponible para convencer a aquella gente que tiene la reclusión
ideológica de negar que el trabajo y la responsabilidad son virtudes inherentes al
ser humano.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 79

La Industria Informal

Al igual que en la urbanización y en el comercio, la presencia de la informalidad es


también significativa en otras áreas como la industria y los servicios. En el caso de
la industria, la presencia de la informalidad se da en actividades obviamente
subterráneas.

A veces hablo de economía subterránea como sinónimo de economía informal,


prefiero utilizar el término informal, que me parece más técnico, porque la
economía subterránea ha dado una idea de ocultamiento que no es cierta en todos
los casos. De hecho, la urbanización informal, el comercio informal, y los servicios
de transporte informal son absolutamente públicos: no hay nada escondido, no
hay nada subterráneo en esas actividades. No obstante, en el caso de la industria
sí se trata probablemente de actividades subterráneas)

El industrial informal es de dos tipos en América Latina. Uno es el propio industrial


formal que informaliza parte de su producción como consecuencia del alto coste de
la regulación o de los impuestos. Aunque esconda parte de su facturación, no es
una persona diferente al industrial ya establecido. En muchos casos se ha visto
obligado a hacerlo porque el coste de la legalidad es muy alto en América Latina;
tiene así que abandonar la formalidad para ocultarse total o parcialmente en el
mercado informal. Esto se produce siempre que hay un alza de precios o siempre
que aumenta la inflación, que es una forma indirecta de subir los impuestos.

Pero hay también otro tipo de informales en el sector industrial que son los
artesanos o los industriales propiamente informales, que se dedican de una
manera completamente ilegal al desarrollo de alguna actividad manufacturera.

Existen áreas en el caso del Perú donde esta actividad es más pronunciada. Ellas
son las confecciones y los textiles, la fabricación de muebles de madera, y el área
de la mecánica. Son tres áreas donde existe una gran cantidad de actividades de
tipo informal. Por ejemplo, en el área artesanal, hay gente que en la intimidad y
en la seguridad de su vivienda montan un pequeño taller con familiares o
paisanos, a los cuales inclusive muchas veces no les pagan o les pagan de manera
indirecta enseñándoles el oficio. De esa forma, se genera una actividad
microempresarial significativa.

Los Servicios Informales

Como en los casos anteriores, el nivel de actividad de los servicios informales es


bastante alto. Quisiera solamente reseñar el caso del transporte, que es el más
notable. En los países desarrollados, el transporte público es generalmente

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 80

estatal; en los países subdesarrollados, el transporte público es generalmente


privado e informal. Alrededor de América Latina, la emergencia de grandes
ciudades a ido emparejada con el desarrollo de grandes sistemas de transporte
informal.

En 1990, el 95 por ciento del transporte urbano del Perú estaba en manos de
pequeños empresarios, cada uno dueño de su ómnibus o de su kombi. (Ha
aparecido hoy en día el término "Capitalismo Kombi" para describir a este tipo de
empresarios.) En ese mismo año, el cien por cien del transporte urbano público se
fue a la quiebra. El gobierno peruano disolvió la única empresa pública que existía
en el transporte urbano al venderle a cada uno de los conductores su carro,
informatizado así por completo la actividad del transporte urbano. También en
1990, el señor Belmont, por aquel entonces el alcalde de Lima, liberalizó el
transporte urbano al declarar la libertad absoluta de rutas, de tarifas, y de entrada
y salida. Esto les obligó a los conductores de taxis a tener una gran imaginación
ya que, como empresarios que son, tienen que identificar el deseo del viajero y
ofrecer servicios diferenciados.

La libertad de tarifas también ha producido el fenómeno siguiente: hay todo tipo


de servicios y a cualquier precio. Si usted, quiere ir apachurrado como en una lata
de sardinas, paga un precio bajo. Si, por el contrario, usted, quiere ir
cómodamente sentado en un vehículo con aire acondicionado y televisor muchos
de ellos han puesto su televisor y pasan videos durante la circulación del vehículo
tiene un vehículo y un precio distinto. Inclusive hay un servicio especial nonstop
entre un punto y otro, de tal manera que ese es otro tipo de servicio y a otro
precio. Todo esto ha sido generado informalmente tanto en los vehículos de
alquiler, los taxis, como en los vehículos de transporte masivo. Es el reino
absoluto de la actividad informal.

Mucha gente cree que casualmente esta ha sido la clave por la cual el gobierno de
Fujimori no ha confrontado ni una sola huelga, ni un solo motín, ni un solo acto de
rechazo de su política económica en 6 años, pese a haber hecho el ajuste
económico más dramático y profundo de América Latina. ¿Por qué? Porque todos
los despedidos encontraron algo más ventajoso que hacer. La paradoja fue la
siguiente. La gente que salió del sector público como consecuencia de los ajustes
económicos de Fujimori, en total, entre 500 y 600 mil personas, inmediatamente
comenzó a trabajar en el sector privado, muchos de ellos dentro del servicio de
transportes. Sus ingresos en ese sector eran (y son) mucho más altos, ya que
los sueldos durante un proceso inflacionista como el que padeció el Perú (un
millón por ciento de inflación durante los cinco años del gobierno de Alán García)
eran mínimos, 10 dólares, 20 dólares, 30 dólares, 50 dólares en el mejor de los
casos en el sector público. En cambio, como transportistas privados, ganaban tres

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 81

o cuatro mil dólares mensuales. Esta gente se puso feliz porque salieron del sector
público, entraron en el sector privado, no tuvieron que invertir porque las
compañías distribuidoras de vehículos financiaron la adquisición de los mismos, y
entraron en una actividad con gran carisma que les proporcionaba unos ingresos
mucho mayores.

El Origen de la Informalidad

Como hemos visto, hay informalidad en la vivienda, hay informalidad en el


comercio, hay informalidad en la industria, hay informalidad en el transporte: hay
informalidad en todo. De hecho, no son informales los hombres, son informales
sus actividades. No hay peruanos formales e informales. ¡No! Si el 60 por ciento
del trabajo de los peruanos se desarrolla en el mercado informal es porque todos
los peruanos tenemos una parte de nuestro trabajo desarrollada formalmente y
una parte de nuestro trabajo desarrollada informalmente. El caso del empleado
bancario que tiene un vehículo y, de ida al trabajo y de regreso del mismo, trabaja
como taxista para suplementar su ingreso personal. El caso de la señora que
después de dejar a los niños en el colegio hace pasteles y dulces para venderlos a
restaurantes de la ciudad. El caso de la señora que coge el garaje de la casa y lo
convierte en un pequeño restaurante de almuerzos. Los casos de los peruanos
que reivindican permanentemente su derecho a trabajar con prescindencia del
Estado, sin pagar impuestos, y sin obedecer sus regulaciones.

Es importante entender que la informalidad es de las actividades y no de la gente,


¿por qué?; porque así entenderemos el origen de este fenómeno. Si estudiamos
los libros de sociología que se han escrito veremos que ellos nos dicen que los
latinoamericanos y en particular, los peruanos tenemos el defecto de ser tarados,
por lo cual nunca podremos salir adelante. La herencia indígena y el coloniaje
encima de la herencia nos entorpecieron dé tal forma que, junto con la corrupción,
el clima, y la comida picante y bien condimentada, nos han convertido en pueblos
ociosos. Esta argumentación está implícita en los textos eurocentristas
conservadores y en los textos alucinados marxistas. En el fondo, parte del mismo
rechazo a la imaginación, a la fuerza y a la autenticidad de los latinoamericanos es
un prejuicio contra los hombres de trabajo.

El origen de la informalidad no se encuentra en una tara cultural, en un problema


religioso, o un origen étnico; se encuentra en la ineficiencia de la ley. En términos
técnicos, somos informales por el llamado coste de la legalidad. Los políticos, los
legisladores, y, mucho menos, los abogados no entienden que la ley cuesta como
cualquier otra cosa. Si usted, quiere hacer un negocio, necesita tiempo e
información. Hacer el negocio cuesta algo independientemente del negocio
mismo. Vender pintura cuesta algo más que la pintura misma; cuesta la

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 82

oportunidad, la inteligencia, la ubicación, la percepción del deseo de los


consumidores. Igual la ley. La ley cuesta con independencia de lo que se quiera
hacer con ella. ¿Cuál es el costo de la ley, entonces? La cantidad de tiempo y de
información que se necesita para cumplir con ella.

En el Perú, al igual que en América Latina, la cantidad de tiempo y de información


que se necesita para cumplir con la ley es muy alta, de hecho comparativamente
más alta que la cantidad de tiempo y de información que se necesita en Estados
Unidos para cumplir con la ley. La diferencia entre países desarrollados y
subdesarrollados esto fue brillantemente documentado por Douglass C. North, que
ganó el Premio Nobel de Economía en 1994 está en la organización institucional
eficiente. Es decir, en el coste de la ley. Un país próspero tiene un coste de la ley
bajo en comparación con los ingresos de la población; un país que no es próspero
tiene un coste de la ley alto en comparación con los ingresos de la población.

En el Perú hicimos un famoso experimento en el año 86 que nos permitió medir el


coste de acceder al mercado. Formamos un equipo de simulación para simular la
formación de un pequeño taller de construcción, proponiéndonos cumplir con
todos los requisitos legales que la legislación imponía incluyendo proponerse no
pagar ni un centavo de soborno a nadie sino cumplir estrictamente con las normas
legales, aunque tomara el tiempo que fuera necesario. La tramitación nos demoró
casi un año y, en este proceso, se nos pidió soborno en 11 oportunidades, de las
cuales hubo que ceder en dos, pues, pese a cumplir con la ley, si no pagábamos
esos dos sobornos, no íbamos a poder continuar aunque tuviésemos todo en regla,
tal como las normas lo establecían. Posteriormente, para hacernos una idea
comparativa de si eso era mucho o poco, un profesor norteamericano hizo la
misma experiencia en Tampa, en Florida. Lo que a nosotros nos llevó un año, a él
le ocupó dos horas en una mañana y lo hizo por correo. Esa fue exactamente le
diferencia entre el coste de una ley y el coste de otra.

Los latinoamericanos no somos seres enfermos que vamos midiendo el coste de la


ley. Sólo medimos la ley cuando el coste de cumplirla es mayor a su beneficio. La
gente cumple la ley cuando le conviene; cuando no le conviene, no la cumple. Es
racional que sea así.

En América Latina y en el Perú, en particular, donde tenemos evidencia factible, la


ley es costosa. Es tan costosa que distorsiona al mercado y excluye de él a los
sectores menos favorecidos de la población. ¿Por qué hay informales entonces?,
porque la gente, dados sus pocos ingresos, no puede trabajar de otra forma, no
puede cumplir con la ley, no puede pagar los impuestos, no puede acceder a una
urbanización formalmente construida porque los trámites de hacerlo son

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 83

insufragables. Esta es la realidad objetiva. No es una tara cultural, no es un


problema mental, no es una herencia étnica. Es discriminación legal.

El origen de esa discriminación legal radica en ese capitalismo antidemocrático, el


mercantilismo. Lo que subsiste prioritariamente en los países latinoamericanos es
un capitalismo en el cual la propiedad privada no es un derecho sino un privilegio,
la empresa privada es también un privilegio, y la competencia no existe. El estado
se encarga de impedirla con trabas legales. Con esa capacidad conservacionista
que nos hace mantener una especie de parque jurásico institucional e ineficiente
en América Latina, hemos logrado mantener el dinosaurio del mercantilismo, que
finalmente es lo que padecemos: el Estado grande e inútil, por una parte, y la
hipocresía, por otra. Esta generalización de la hipocresía que permite mantener un
sistema de privilegio en América Latina puede considerarse sin lugar a dudas la
causa principal de nuestro subdesarrollo y de nuestra crisis.

Conclusión

Por eso decía que el Perú contemporáneo ha vivido dos revoluciones. Una
revolución fallida del Sendero Luminoso, que fue al fracaso porque no coincidía con
los deseos de la población; y la otra, la revolución de los informales, que han
reivindicado para sí el derecho a la propiedad privada, el derecho a la empresa, y,
sobre todo, la capacidad y el esfuerzo individual.

Al reivindicar para sí el derecho a la propiedad privada y a la empresa, los


peruanos y los latinoamericanos menos favorecidos se han convertido en la
vanguardia de la construcción de una auténtica economía de mercado
latinoamericana, del auténtico sector empresarial de origen popular, y han creado
una base fundamental para ser optimistas con el cambio. Hasta hace poco, los
grandes ajustes de los gobiernos merecían mucho pesimismo porque eran ajustes
que no tenían el sustento social. Hoy en día con la emergencia incontenible de las
actividades informales y el desarrollo de un sector empresarial de origen popular,
los grandes programas de ajuste tienen un sustento social. Hay gente que
demanda del Estado el derecho a la propiedad, la competencia, una moneda sana,
y menos gobierno; en suma, que demanda espacio para desarrollar su creatividad
y para ejercer su audacia. Esta gente nos ofrece tal vez, en el caso del Perú, de
manera contundente, un ambiente político propicio para llevar a cabo reformas
profundas y radicales.

Mucha gente se pregunta con admiración por qué Fujimori ha conseguido éxitos
tan espectaculares en el terreno económico en la mitad de tiempo, por ejemplo,
que lo hizo Chile. Perú se ha demorado 5 años en obtener lo que Chile se demoró
10 o 15. ¿Por qué?. Yo creo que entre otras razones porque existe una base de

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 84

legitimidad social. La gente no quiere oír más el cuento de la empresa pública, no


quiere oír más el cuento de la justicia social. Entre los jóvenes es inclusive una
burla. Esos muchachos de origen humilde representan un sector completamente
nuevo, que ya no cree en el sector público. En el fondo que es un sector que no
cree en nada, pero no creer en nada es una forma de nihilismo que permite el
desarrollo básico de la responsabilidad individual y la confianza de que solamente
con las fuerzas propias se puede crear una situación de progreso y de
responsabilidad. Esa confianza de las fuerzas propias del individuo
latinoamericano, esa convicción de que no existe en nuestro pasado nada que nos
aplaste nos permite sostener con convicción que la emergencia de la economía
informal es tal vez el hecho social y económico más notable en la historia
latinoamericana después del descubrimiento de Colón.

Con la certeza que en este ambiente profesional novedoso América Latina pronto
encontrará una base sólida para su desarrollo sostenido es que he querido esta
mañana contarles la experiencia de la economía informal; una economía que en
medio de la desazón que causa la crisis y en medio de las contradicciones que
muchas veces se encuentran en la vida cotidiana nos ofrece la convicción de que
pronto todos los latinoamericanos disfrutaremos enormemente de los beneficios de
la libertad.

Enrique Ghersi es escritor y abogado peruano, coautor con Hernando de Soto de


“El Otro Sendero”, y ex - diputado del congreso peruano. Este ensayo aparece en
inglés en el “Cato Journal”, vol. 7, no. 1.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 85

ANEXO 2: Economía Informal


Rodolfo Romero

Introducción

Estamos en el camino del redimensionamiento. Para ello es necesario re-pensar la


realidad y redescubrir los cambios permanentes que se van produciendo en ella.

Uno de los temas que exige un análisis exhaustivo es todo lo que se refiere a la
“Economía Informal” o también denominado “Sector Informal” de la economía.

La Central Latinoamericana de Trabajadores (CLAT) es una de las pioneras en


analizar esta novedad que impacta profundamente al movimiento de Trabajadores
y también pionera en la organización de los trabajadores atrapados en este
proceso.

El inicio del Siglo XXI nos obliga a profundizar en el estudio del tema, y por ello
nos proponemos abordarlo para lograr un conocimiento real que nos permita
ajustar y redimensionar todo el quehacer organizativo de los trabajadores de esta
mal llamada “Economía Informal”.

Presentamos por lo tanto algunas reflexiones y el plan del estudio que nos
proponemos realizar al respecto.

Comprensión del Fenómeno

La economía del mundo de hoy tiene una complejidad interesante y que se presta
a la confusión.

Ya es común hablar de una "Economía Informal" o de un "sector informal de la


economía" o también denominado "sector no estructurado".

Debemos precisar que no existe ninguna economía informal, y más bien lo que
sucede es que el capitalismo, gracias a los avances de la tecnología, inicia una
nueva etapa en su evolución, desestructurando la economía para romper el eje

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 86

fundamental en que históricamente se basa la lucha reivindicativa y


transformadora del Movimiento

Dentro de este panorama debemos advertir que existe mucha confusión con
relación al concepto mismo de “economía informal”, acuñado desde 1972 a partir
de un estudio realizado por la OIT en Kenya-África que decía que existía un gran
número de trabajadores pobres, muchos de los cuales se afanaban de veras en la
producción de bienes y servicios sin que sus actividades estuviesen reconocidas,
registradas, protegidas o reglamentadas por las autoridades públicas.

En el histórico informe de 1972, apareció en inglés la denominación “informal


sector”.

Esta estrategia a su vez es parte de una estrategia global que se denomina


globalización, que exige la apertura económica indiscriminada de los países, la
reforma del Estado a través de las privatizaciones, la desregulación, la
flexibilización y la precarización de las relaciones laborales.

Es importante ubicar a la mal denominada “Economía Informal” como parte de


una estrategia global del capitalismo salvaje para garantizar un rápido proceso de
acumulación de la riqueza para lo cual en esencia se desvincula de todo tipo de
compromiso social.

Hoy, las empresas capitalistas no asumen ningún tipo de compromiso con la


comunidad local, nacional y regional.

El “Sector Informal” o no estructurado de la economía se ha convertido en la


principal fuente generadora de empleo precario en nuestra sociedad
latinoamericana.

Más del 55% de la PEA está absorbido por el sector. Y según la OIT, en la década
pasada, de cada 100 nuevos puestos de trabajo, entre el 75 y el 80% lo generó el
sector.

En países como Perú, Bolivia, Ecuador y varios países centroamericanos el “Sector


Informal” representa más del 60% de la PEA y está saturando peligrosamente las
calles de las ciudades.

El sector se ha convertido en el salvavidas de la gente, y los Alcaldes aparecen


como principales represores de esta modalidad de trabajo.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 87

Esto es altamente preocupante porque se desestabiliza el empleo y se empobrece


la población trabajadora y lo más preocupante, crece el desempleo a ritmo
galopante, aumentando diariamente la cantidad de trabajadores autónomos que
como estrategia de sobrevivencia buscan ocupar las calles de nuestras ciudades; al
mismo tiempo aumenta la violencia y la desesperanza en la población.

La Central Latinoamericana de Trabajadores (CLAT) fue una de las primeras


organizaciones de trabajadores que prestó una atención directa a la problemática
de la Economía Informal, denunciando el mecanismo de explotación de los
trabajadores autónomos.

La CLAT, ante la reiterada mención de “trabajador informal” precisó que el


trabajador no es informal sino autónomo o no asalariado, también denominado en
ciertos países como cuentapropistas, trabajador ambulante, buhonero etc.

La constitución de la Federación de Trabajadores Latinoamericanos del Comercio


Oficinas y Empresas Privadas de Servicios (fetralcos) en 1982, permitió
desarrollar un rápido proceso organizativo de los trabajadores asalariados y no
asalariados al nivel de toda América Latina Caribe. Y en el III Congreso realizado
en 1994 profundizó en el análisis y comprensión de toda la compleja problemática
al que denominó subsector de economía informal precisando que la característica
esencial del mismo es su complejidad ya que se manifiesta en las diferentes ramas
y sectores de la economía y con denominaciones y particularidades propias de
cada país de América Latina Caribe.

Se dejó abierto el tema para un seguimiento sistemático ya que a medida que


avanzaba la ofensiva neoliberal y las modalidades de explotación del capitalismo
salvaje, se ampliaba la privatización, la flexibilización, la precarización y
tercerización de las relaciones laborales, por lo que aumentaba inevitablemente el
espacio y la cantidad de los trabajadores autónomos, manifestándose en el
comercio, en el transporte y en casi todas las actividades de producción de bienes
y servicios.

La “economía informal”, denominación que conservamos para evitar mayores


confusiones, desde finales de la década pasada ha entrado en una nueva etapa a
partir del hecho significativo que las ordenanzas municipales y ciertas legislaciones
nacionales se han ocupado profusamente del tema.

Desde el primer informe de la OIT y la aparición del libro de Hernando de Soto


“EL OTRO SENDERO”, en las que primaba el criterio de que era informal porque se
desarrollaba al margen de las disposiciones legales, las cosas han ido cambiando
significativamente.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 88

Hoy en día, los Municipios y Alcaldías buscan regular a través de ordenanzas las
actividades de la “economía informal”, por lo que ya no se puede seguir hablando
de informalidad. Tampoco se puede plantear como problema coyuntural que
desaparecería al recuperar la economía estructurada su capacidad de generar
pleno empleo.

El problema es diferente. Es un problema de carácter estructural derivado de la


nueva visión estratégica del capitalismo que gracias al avance tecnológico y al
proceso de globalización crea dos vertientes económicas, una que gira alrededor
del régimen de trabajador asalariado y otra alrededor del trabajador autónomo o
no asalariado, sin ninguna voluntad de regresar a la etapa anterior, ya que la
situación actual le facilita un proceso de mayor explotación de la fuerza de trabajo,
garantizando así una más rápida concentración del ingreso y acumulación de la
riqueza poder en pocas manos y en pocos países.

Por todo ello la (CLAT) está diseñando un proceso de estudio análisis de esta
modalidad para adoptar políticas y estrategias de carácter socio político, socio
económico y político organizativo para responder en profundidad y orgánicamente
al problema.

La importancia creciente del subsector, la cantidad de trabajadores comprometidos


en el mismo más del 50% de la PEA la necesidad de rediseñar y reagrupar las
Federaciones Sectoriales Latinoamericanas, entre ellas fetralcos que es la
organización que se ha ocupado del problema, ameritan el estudio que se irá
realizando para efectuar en el 2002 un encuentro latinoamericano para profundizar
la cuestión, adoptar criterios de orientación y poder luego las instancias orgánicas
de la CLAT y de las Federaciones Sectoriales Latinoamericana FSL tomar las
decisiones correspondientes para responder mejor a esta problemática que merece
un tratamiento a fondo y exige políticas y estrategias adecuadas.

El comienzo del siglo XXI nos obliga a darle un enfoque moderno y actualizado a
toda esta problemática. La CLAT tiene la voluntad de acometerlo. Proyecto de
Estudio de la “Informalidad”.

El Presente Estudio Tiene Como Objeto

• Comprometer de forma objetiva a la CLAT y sus instituciones con la evolución y


características esenciales del llamado sector informal o no estructurado,
precisando su carácter estructural y no meramente coyuntural de su desarrollo.

• Conocer, en el ámbito latinoamericano, la clasificación conceptual (oficial y no


oficial) que se viene utilizando en cada país, así como el parecer y/o opinión

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 89

que al respecto tienen los trabajadores del sector y sus respectivas


organizaciones.

• Conocer la variable estadística de la fuerza de trabajo en los distintos países y


medir el peso específico que en la misma tiene el sector.

• Ubicar a los trabajadores en el escenario y distinguir las diferentes tipologías


con toda su problemática, para conocer el tipo de modalidades organizativas
que se dan los trabajadores.

• Conocer la situación socioeconómica de las personas que activan en el sector


informal o no estructurado.

• Conocer las reivindicaciones comunes y/o particulares de las distintas


modalidades, trabajadores y organizaciones del sector.

• Contar con un instrumental de análisis estratégico para diseñar una política de


organización-acción y formación en este campo específico

Objetivos Operativos

Los resultados del presente Estudio nos deben ofrecer una serie de insumos para:

• Realizar un Taller con personas que conocen y trabajan en este campo, a fin de
analizar los resultados obtenidos y realizar los ajustes y/o recomendaciones
pertinentes.
• Ayudar a la conducción política de la CLAT, para definir una política hacia el
sector acorde con las situaciones presentes y tomar las decisiones político-
estratégicos para responder en forma orgánica y coherente a los retos que
presenta la problemática del sector.
• Realizar (año 2003) una Conferencia amplia para presentar los resultados del
presente Estudio y analizar las nuevas formas organizativas que deban darse
los trabajadores del sector, para enfrentar con éxito los nuevos paradigmas en
el mundo del trabajo.

Justificación del Estudio

La significación cuantitativa que representa hoy día el llamado “sector informal de


la economía” o “sector no estructurado” en la composición de la fuerza laboral
de nuestros países en América Latina, donde indicadores conservadores lo ubican
en un porcentaje general por encima del 50%. Esta situación impone la necesidad

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia


Política Económica y Pobreza en Colombia 90

de un tratamiento y atención sindical que responda a las exigencias que dicho


sector de trabajadores reclama.

La nueva cultura del trabajo, caracterizada por las políticas de flexibilización


laboral; presencia de nuevas formas de relaciones en la mediana y gran empresa
no se encuentran en disposición de generar seguridad laboral. Este hecho unido al
estado de desprotección legal y social en que se encuentran los trabajadores del
sector, significa un gran reto para el movimiento de los trabajadores, el cual debe
asumir una conducta y actuación creativa, distinta a la asumida hasta ahora y que
se adapte a las exigencias del momento y del propio proceso histórico que se nos
avecina.

En este marco de situación se hace necesario conocer el tipo de organización


gremial que se vienen dando los trabajadores del sector y la manera en que éstas
se relacionan con el movimiento de los trabajadores, analizando las debilidades y
fortalezas de esta relación para definir el nuevo marco de exigencias, relaciones y
respuestas de los trabajadores, de sus organizaciones y de las propias
organizaciones nacionales y sectoriales. En este sentido el estado de
desprotección legal y social en que se encuentran los trabajadores del sector,
impone la necesidad de una nueva forma de organización y lucha más eficaz en la
búsqueda de lograr las más sentidas reivindicaciones de los trabajadores y sus
organizaciones, lo cual ha de implicar nuevas formas y maneras en el accionar
sindical gremial y en las perspectivas de construir un verdadero Movimiento de
Trabajadores.

UNIVERSIDAD DE PAMPLONA – Centro de Educación Virtual y a Distancia

Das könnte Ihnen auch gefallen