Los hechos:

1. En la primera caricatura un adulto le señala a un niño un carro

2. En la segunda caricatura un adulto le señala a un niño una computadora
3. En la tercera caricatura un adulto le señala a un niño un celular
4. En la cuarta caricatura un adulto le señala a un niño la televisión donde se
pueden observar dos mujeres
5. En la quinta caricatura un adulto le señala a un niño un cubo lleno de basura
6. En la sexta caricatura el adulto sostiene un espejo frente al niño donde éste
último observa su reflejo
7. En la séptima caricatura el adulto le enseña al niño un billete
8. En la octava y última caricatura el adulto carga en sus brazos al niño

Opinión:

En la primera caricatura un padre le enseña a su hijo que ahora en vez de usar sus
piernas para caminar, el carro lo hará por él.

En la segunda caricatura, el padre le enseña a su hijo que no es necesario pensar las

cosas, sino que, de ahora en adelante, las computadoras se encargarán de hacer todo por
nosotros.

En la tercera, cuando le enseña a su hijo que ahora nos comunicamos los unos con
los otros a través de los teléfonos, en vez de hacer cara a cara

En la cuarta, le está enseñando que ahora lo que vemos en la televisión será nuestra
cultura, será nuestro sistema de costumbres y creencias. Lo que debemos creer y seguir
a partir de ahora.

En la quinta, le está diciendo que ahora valores como la honestidad, la moral y los
ideales no sirven para nada, son como la basura, inservibles.

En la sexta, le está enseñando que solo debe preocuparse por sí mismo, sin importar
lo que le pasé a los demás siempre y cuando él esté bien.

En la séptima, le está enseñando, al comparar el dinero con Dios, que es el dinero

que nos domina a todos; es decir que todo lo que hacemos, lo hacemos en el nombre del
dinero, es el que nos mueve a hacerlo.

En la última, el padre dice que es mejor que aprenda cómo son las cosas desde
pequeño, para que así se vaya acostumbrando y sepa como desenvolverse en el mundo
actual cuando sea grande, lo cual está gestionado por la perspectiva del padre.
Interpretación:

A lo largo de las 8 caricaturas que se mostraron anteriormente, un padre le está

enseñando a su hijo que ya no es necesario que haga las cosas por él mismo sino que
habrá otros que lo harán por él, como es el caso de las primeras 3 caricaturas. El carro
ahora es el que caminará por él, la computadora es la que pensará por él y el teléfono es
la vía por la cual se comunicará con las demás personas en vez de hacerlo por sus
propios medios.

También le está enseñando que no importa de donde venga él o su familia, las

costumbres y creencias que ahora tendrá son las de los demás y si las muestra la
televisión, aún mejor. No tiene importancia de donde vengas, cómo te criaron o tu
propia historia, la cultura que vas a seguir es la que la televisión te muestra, aunque lo
que te muestre no tenga significado para ti.

La honestidad, moral e ideales, son valores que actualmente ya no tienen

importancia, le está enseñando que no sirven para nada; que lo único que queda es
echarlos a la basura. Solo vale lo contrario, las mentiras y el mal trato. No se debe
preocupar por lo que le pase al otro, solo debe preocuparse por él mismo (como lo
indica la caricatura 6).

El dinero es lo que mueve al mundo, la gente hace lo que sea por él sin importar lo
que sea. Lo tratan como un Dios, como si fuera lo único importante en esta vida. No hay
nada por lo cual luchar sino simplemente por el dinero.

Por último, el padre dice que es mejor que vaya aprendiendo desde que es pequeño
cómo son las cosas, de manera que cuando crezca ya sepa como desenvolverse en el
mundo actual y no se quede atrás.

Aunque en la caricatura se ve un padre con su hijo, el primero puede ser

interpretado como otros actores; se puede ver como la escuela y la sociedad, que son
dos actores fundamentales en la enseñanza de un niño, además de la familia.

Juicio:

A pesar de que todo lo visto en las caricaturas es lo que está sucediendo

actualmente, no quiere decir que eso es lo que debamos enseñarles a los niños. Lo ideal
es enseñarles a hacer las cosas por ellos mismos. No está mal enseñarles que hay
herramientas que los pueden ayudar, pero que no siempre van a estar ahí para resolver
todos sus problemas. No van a tener siempre medios que le faciliten las cosas como un
carro, computadora o teléfono. Por esa razón deben aprender a resolver sus problemas
mediante sus propios medios.

Con respecto a la cultura, no todo lo que vemos en la televisión puede ser apto para
los niños. Está claro que los niños, sin importar la edad que tengan, tienen la capacidad
de entender lo que sucede a su alrededor, tienen la capacidad de saber cuándo está
pasando algo que por lo general los adultos pensamos que no están entendiendo. La
cuestión está en que sí entienden. Que ellos entiendan que algo está pasando a su
alrededor, no quiete decir que lo están entiendo con la perspectiva de un adulto. Por esa
razón hay que tener cuidado con lo que ven en la televisión. Hay que ayudarlos a
diferenciar lo bueno de lo malo. Si permitimos que todo lo que vean en la televisión sea
lo normal o lo que siempre debe suceder, nos arriesgamos a que ciertas conductas
negativas las perciban como correctas.

Debemos enseñarles que tener ideales, moral y ser honestos no es algo malo e
inservible. Que estos valores son importantes para convivir con las demás personas. Así
como también lo es el preocuparse por los demás, al igual que por uno mismo.

Si les enseñamos lo contrario, estaremos criando personas que en un futuro le harán

daño a otras para lograr sus objetivos personales; no se preocuparán por lo que le pueda
pasar a los demás siempre y cuando puedan lograr lo que se proponen y beneficiarse
ellos mismos. Cuando el ser buenos con los demás también puede ayudarlos a lograrlo.

Por último, si es cierto que actualmente el dinero es considerado la base de todo;

son instruidos para creer que lo necesitas para hacer cualquier cosa, incluso para vivir.
Pero eso no es todo lo que importa. Aunque necesites dinero para muchas cosas,
también es importante tener personas que te apoyen y acompañen a lo largo de tu vida;
al igual que la felicidad, el dinero no te compra el cariño o apoyo de los demás.