Sie sind auf Seite 1von 15

siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 7

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

últimos avances en el enfoque y


concepción de las personas con dis­
capacidad intelectual
[Changes in the Understanding and Approach to Persons with Intellectual
Disability]

Miguel Ángel Verdugo Alonso ■ ■ ■


Instituto Universitario de Integración en la Comunidad. Universidad de
Salamanca
Robert L. Schalock
Hastings College, Nebraska, EEUU

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21
resumen

Los avances en el campo de la discapacidad intelectual suceden con mucha


rapidez, lo que obliga a replantearse la concepción de la misma para gene­
rar conocimientos nuevos y actualizados que permitan mejorar la vida de
las personas con esas características. En el artículo se presentan muy resu­
midas las ideas principales planteadas en la 11ª edición del Manual de la
Asociación Americana de Discapacidades Intelectuales y del Desarrollo
(AAIDD) publicado en este mismo año (en español lo será en el año 2011),
cuya lectura es imprescindible para una comprensión más detallada y
extensa. Se presenta una nueva terminología, discapacidad intelectual, y se eli­
mina definitivamente la expresión retraso mental. Se actualiza el modelo con­
SIGLOCERO
ceptual desde una perspectiva socio-ecológica y multidimensional, exponiendo
una definición operacional y otra constitutiva de la categoría. Se presenta la defi­
nición y premisas que lleva implícita, y se determinan con claridad los criterios
psicométricos a utilizar para establecer bien los límites del diagnóstico. La clasifi­
cación se enfoca también desde una perspectiva multidimensional basada en las
diferentes dimensiones del modelo propuesto. Finalmente, se examinan las
implicaciones para los servicios educativos y sociales del enfoque multidimensio­
nal propuesto, con un planteamiento de las funciones clínicas habituales que se
centran en el diagnóstico, la clasificación y la provisión de apoyos individualiza­
dos.
7

PALABRAS CLAVE: discapacidad intelectual, definición, diagnóstico, evalua­


ción, clasificación, apoyos.
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 8

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

summary

Advances in the field of intellectual disabilities happen very quickly forcing


us to reconsider the condition to generate new and updated knowledge
to improve the lives of people with intellectual disabilities. The article
briefly summarizes the main points raised in the 11th edition of the
Manual of the American Association of Intellectual and Developmental
Disabilities (AAIDD) published in 2010 (in Spanish will be in 2011), which
reading is essential for a more extensive and detailed understanding. At
last we present a new terminology, intellectual disability, eliminating the
term mental retardation. The conceptual model is updated from a socio-ecologi­
cal and multidimensional perspective, explaining the characteristics of an opera­
tional definition and a constitutive definition of the category. There has been
significant changes over the last decades in the operational definition we use to
define the class, the assumptions that are implicit in such a definition, and the
use of statistically-based cutoff scores, standard error of measurement estimates,
and statistically based confidence intervals to determine who is included in the
class. A summary of the emergence of multidimensional classification systems
and the parameters of an exemplary multidimensional classification system is
presented. Finally, we examine the implications of the multidimensional model
of human functioning for education and social services, how best to align clini­
cal functions, how to conceptualize and deliver a ‘systems of supports’, and cla­
rifying the personal and family-related outcomes that should provide the empi­
rical basis for public policy outcomes.
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

KEY WORDS: Intellectual disability, definition, diagnosis, assessment, classifica­


Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

tion, supports.

panorama general ■ ■ ■ En el año 1987 Scheerenberger habla­


ba de un cuarto de siglo prometedor al
referirse a la evolución de las concepcio­
En las últimas décadas hemos llegado a
nes y tratamiento de las personas enton­
una mejor comprensión de la discapaci­
ces denominadas con ‘retraso mental’.
dad intelectual (DI), lo que ha traído con­
Mas de 30 años después podemos confir­
SIGLOCERO

sigo nuevos y mejores enfoques para el


diagnóstico, la clasificación y la provisión mar que la esperanza no era vana, los
de apoyos y servicios. Nuestro mejor avances desarrollados desde la propuesta
entendimiento se refleja en la terminolo­ hecha en el año 1992 por la entonces
gía que usamos para nombrar la condi­ denominada Asociación Americana sobre
ción y el modelo conceptual que utiliza­ Retraso Mental han supuesto un cambio
mos para explicar su etiología y caracte­ radical del paradigma tradicional, aleján­
rísticas. También hemos modificado nues­ dose de una concepción de la DI como
tros enfoques para definir la DI, clasificar rasgo de la persona para plantear un
a las personas así definidas e identifica­ modelo ecológico y contextual en el cual
das, y proporcionar una educación basa­ la concepción se basa en la interacción de
8

da en la comunidad y unos apoyos indivi­ la persona y el contexto (Verdugo, 1994,


dualizados. 2003).
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 9

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

La novena (Luckasson et al., ción y determinar quien es un miembro


1992/1997), la décima (Luckasson et al., de ella; d) cómo clasificar a las personas
2002/2004) y ahora la onceava (Schalock así definidas e identificadas; y e) cuál
et al., 2010) definiciones propuestas por debe ser el objetivo central de los servi­
la Asociación Americana sobre cios educativos y sociales. El material pre­
Discapacidades Intelectuales y del sentado en este artículo se basa princi­
Desarrollo (AAIDD) han tenido un impac­ palmente en la 11ª edición del Manual de
to sustancial y de primer orden en los la AAIDD, Intellectual Disability:
cambios en la definición, concepción y Diagnosis, Classification, and Systems of
prácticas profesionales relacionadas con Supports (Schalock et al., 2010).
la DI en todo el mundo. Su influencia
Qué nombre dar a la condición:
sobre otros sistemas clasificatorios (DSM,
Terminología
CIE, CIF) es muy relevante, estando siem­
pre situada en la vanguardia de las pro­ Los dos términos históricamente utili­
puestas mas novedosas que luego son zados con mayor frecuencia para nom­
seguidas por otros. brar la condición han sido deficiencia
mental (1908-1958) y retraso mental
La novena edición de la AAIDD
(1959-2009) en el ámbito internacional.
(Luckasson et al., 1992) significó el gran
En España también se han utilizado los
cambio de paradigma en la concepción
términos subnormalidad, que estuvo en
tradicionalmente utilizada en décadas
pleno uso entre los años 60 y 90 y a veces
anteriores. Se rechazó una concepción
todavía es marginalmente utilizado, y

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


reduccionista basada solamente en las
minusvalía mental, que sustituyó a aquel
características o ‘patología’ de la perso­

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


con poca fortuna y que, incomprensible­
na, para proponer una concepción inte­
mente, ha permanecido hasta muy
raccionista en la cual el ambiente desem­ recientemente. Hoy, el término preferido
peña un papel sustancial. Se abrieron las es el de discapacidad intelectual (2010).
puertas de un enfoque multidimensional, Discapacidad intelectual es el término
y se introdujo el concepto de apoyos. En preferido porque:
la décima edición (Luckasson et al., 2002)
se revisó y mejoró el enfoque multidi­ • Evidencia el constructo socioecológico
mensional propuesto introduciendo de de discapacidad
manera significativa la dimensión de par­
ticipación, se profundizó en el modelo de • Se alinea mejor con las prácticas pro­
apoyos que pasó a ser sustancial en el fesionales actuales que se centran en
SIGLOCERO
modelo teórico propuesto, y se matiza­ conductas funcionales y factores con-
ron y modificaron aspectos esenciales del textuales
entendimiento de la clasificación y los cri­ • Proporciona una base lógica para pro­
terios a utilizar según su finalidad. porcionar apoyos individualizados
El propósito de este artículo es resumir debido a que se basa en un marco de
los cambios en la concepción y enfoque referencia ecológico-social
de las personas con DI centrándonos en • Es menos ofensivo para las personas
las cinco cuestiones históricas que refle­ con esa discapacidad
jan la evolución del paradigma de disca­
pacidad intelectual: a) qué nombre dar a • Es más consistente con la terminología
9

la condición (esto es, terminología); b) internacional, incluyendo los títulos


cómo explicarla; c) cómo definir la condi­ de revistas científicas, investigación
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 10

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

publicada y nombres de las organiza­ sona y su ambiente


ciones.
• Cambia la explicación de discapacidad
Explicación de la discapacidad inte­ intelectual alejándola de la defectolo­
lectual gía centrada en la persona hacia el
resultado de un desajuste entre las
Habitualmente la DI se explica sobre la
capacidades de la persona y las
base de tres conceptos significativos: a) el
demandas de su ambiente
modelo socio-ecológico de discapacidad;
b) un enfoque multifactorial de la etiolo­ • Se centra en el rol que los apoyos indi­
gía; y c) la distinción entre una definición vidualizados pueden desempeñar en
operativa y otra constitutiva de la condi­ la mejora del funcionamiento indivi­
ción. dual
Modelo socio-ecológico • Permite la búsqueda y comprensión
de la ‘identidad de discapacidad’
El modelo socioecológico de DI es cuyos principios incluyen: autoestima,
importante para la comprensión de la bienestar subjetivo, orgullo, causa
condición y el enfoque que tomamos común, alternativas políticas y com­
sobre las personas con DI porque explica promiso en la acción política
la misma en términos de: a) expresión de
limitaciones en el funcionamiento indivi­ Explicación multifactorial de la etiología
dual dentro de un contexto social; b) de la discapacidad intelectual
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

visión de las personas con DI con un ori­


gen en factores orgánicos y/o sociales; y Históricamente, se distinguía entre
Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

c) entendimiento que estos factores causas orgánicas y ambientales de la con­


orgánicos y sociales causan limitaciones dición a las que se hacía referencia como
funcionales que reflejan una falta de deficiencia mental, retraso mental o [más
habilidad o restringen tanto en funciona­ recientemente] discapacidad intelectual.
miento personal como en el desempeño Con la introducción en 1992 de la 9ª edi­
de roles y tareas esperadas para una per­ ción del Manual de la AAMR (Luckasson
sona en un ambiente social. De la misma et al., 1992/1997) se inició un enfoque
manera, un enfoque socio-ecológico de multifactorial para explicar la etiología
la discapacidad: de la condición. Factores prenatales, peri­
natales y postnatales están resumidos en
• Ejemplifica la interacción entre la per­ la Tabla 1.
SIGLOCERO
10
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 11

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

Tabla 1. Factores típicos de riesgo prenatales, perinatales y postnatales

Prenatal

• Biomédico: alteraciones cromosómicas, alteraciones metabólicas, infecciones


transplacentarias (p. ej., rubeola, herpes, sida), exposición a toxinas o terató­
genos (p. ej., alcohol, plomo, mercurio), malnutrición (p. ej., deficiencia
materna de iodina)

• Social: pobreza, malnutrición materna, violencia doméstica, falta de cuidado


prenatal

• Conductual: uso de drogas por los padres, inmadurez parental

• Educativo: padres con discapacidad sin apoyos, falta de oportunidades edu­


cativas

Perinatal

• Biomédico: prematuridad, daño cerebral, hipoxia, alteraciones neonatales,


incompatibilidad del factor rhesus (Rh)

• Social: carencia de acceso a cuidados en el nacimiento

• Conductual: rechazo parental de cuidados, abandono parental del niño

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


• Educativo: falta de derivación hacia servicios de intervención tras el alta

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


médica

Postnatal:

• Biomédico: daño cerebral traumático, malnutrición, trastornos degenerati­


vos/ataques, toxinas

• Social: falta de estimulación adecuada, pobreza familiar, enfermedad cróni­


ca, institucionalización

• Conductual: abuso y abandono infantil, violencia doméstica, conductas de


niños difíciles
SIGLOCERO
• Educativo: retraso diagnóstico, intervención temprana inadecuada, servicios
de educación especial inadecuados, apoyo familiar inadecuado

Definición operativa vs. constitutiva de definición operativa y otra constitutiva.


discapacidad intelectual Esta distinción es la siguiente:

Como ya presentamos con mayor deta­ • Una definición operativa establece los
11

lle en Wehmeyer et al. (2008), el enfoque límites del término y separa lo que
actual para definir y entender la DI se está incluido dentro del mismo de lo
basa en una distinción crítica entre una que está fuera. Una definición opera-
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 12

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

tiva de DI incluye tres aspectos clave: lectual como en conducta adaptativa


a) la definición actual y las premisas tal y como se ha manifestado en
subyacentes; b) los límites del cons­ habilidades adaptativas conceptua­
tructo; y c) el uso del concepto esta­ les, sociales y prácticas. Esta discapa­
dístico de ‘error típico de medida’ cidad aparece antes de los 18 años
para establecer un intervalo de con­ (Schalock et al., 2010, p. 1).
fianza estadística dentro del cual las
puntuaciones verdaderas de la perso­ Premisas
nas se encuentran.
Las premisas son una parte explícita de
• Una definición constitutiva define el la definición porque aclaran el contexto
constructo en relación con otros cons­ en el cual la definición se plantea, y a la
tructos y, por tanto, ayuda a compren­ vez indican como debe ser aplicada. Por
der mejor los fundamentos teóricos ello, la definición de DI no puede presen­
del constructo. Una definición consti­ tarse por sí sola. Un uso adecuado de la
tutiva de discapacidad intelectual categoría diagnóstica de DI en las escue­
define la condición en términos de las y en la vida adulta requiere conocer y
limitaciones en el funcionamiento tener en cuenta en las prácticas profesio­
humano, implica una comprensión de nales habituales tanto la definición como
la discapacidad consistente con una
estas premisas. Con ellas se conforma una
perspectiva multidimensional y socio-
parte importante de lo que deben ser
ecológica, y subraya el rol significativo
estándares profesionales de funciona­
que los apoyos individualizados
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

miento de los equipos interdisciplinares


desempeñan en la mejora del funcio­
en todo lugar. Además, estas premisas
Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

namiento humano.
deben tener reflejo en las normas legales
a la hora de establecer los criterios para
el diagnóstico y la elegibilidad para
definición de la categoria ■ ■ ■ beneficios y apoyos.

Al hablar de la tercera cuestión históri­ Las siguientes cinco premisas son esen­
ca, ha habido cambios significativos en ciales para la aplicación operativa de la
los últimos 50 años en la definición ope­ definición de discapacidad intelectual:
rativa que usamos para definir la catego­
1. Las limitaciones en el funcionamiento
ría: en las premisas implícitas en la defini­
presente se deben considerar en el
SIGLOCERO

ción de DI, en el uso de puntuaciones de


corte basadas en la estadística, en las esti­ contexto de ambientes comunitarios
maciones del error típico de medida y en típicos de los iguales en edad y cultu­
los intervalos de confianza (también ra.
basados en la estadística) para determi­
2. Una evaluación válida tiene en cuenta
nar quien se incluye en la categoría. Cada
la diversidad cultural y lingüística así
una de estas cuatro cuestiones se comen­
ta a continuación. como las diferencias en comunicación
y en aspectos sensoriales, motores y
Definición operativa conductuales.
12

La discapacidad intelectual se 3. En una persona, las limitaciones coe­


caracteriza por limitaciones significa­ xisten habitualmente con capacida­
tivas tanto en funcionamiento inte­ des.
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 13

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

4. Un propósito importante de la des­ obtenidos.


cripción de limitaciones es el desarro­
llo de un perfil de necesidades de La tercera premisa pretende aclarar
apoyo. que hemos de tomar una perspectiva
positiva en la evaluación de las personas
5. Si se mantienen apoyos personaliza­ con DI y no abundar exclusivamente en
dos apropiados durante un largo las limitaciones, algo que quizás ha sido
periodo, el funcionamiento en la vida muy habitual por la influencia de la
de la persona con DI generalmente defectología y la psicopatología en los
mejorará (Schalock et al., 2010, p. 1). procesos diagnósticos. Si bien es necesa­
rio conocer las limitaciones, será la infor­
La premisa primera apela a los criterios mación existente sobre las capacidades
básicos a la hora de evaluar a alumnos o de la persona la que permita establecer
adultos con limitaciones intelectuales, y las líneas de acción educativas o habilita­
que es atenerse principalmente a un aná­ doras para construir un programa indivi­
lisis del funcionamiento de la persona en dual de apoyo.
un ambiente habitual normalizado, y
siempre comparando resultados en las La cuarta premisa une la evaluación
pruebas o en la observación clínica de con la intervención, y junto a la anterior
acuerdo a la edad y grupo cultural de la premisa tiene cierto carácter ético (en
persona evaluada. realidad todas lo tienen). Al igual que la
persona debe ser comprendida en sus
La segunda premisa pretende evitar capacidades y limitaciones (premisa 3),

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


errores que en ocasiones se han cometi­ las tareas de evaluación han de vincular

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


do, y todavía ocurren, en la evaluación y necesariamente la información que se
diagnóstico de la discapacidad intelec­ recoge con la puesta en marcha de pro­
tual. Las conclusiones diagnósticas deben gramas de apoyo dirigidos a mejorar el
basarse en una buena práctica profesio­ funcionamiento de la persona. La reco­
nal, la cual nunca debe tener un carácter mendación en este caso es que se debe
discriminatorio. Se considera que una mirar siempre hacia la ayuda que se
evaluación es ‘discriminatoria’ cuando no puede prestar a la persona y no invertir el
tiene en cuenta peculiaridades étnicas, tiempo en procesos que no llevan a
culturales, lingüísticas o personales (en tomar decisiones de apoyo salvo en casos
comunicación, comportamiento motor, expresos en que eso sea necesario.
conducta u otras) que afectan a los resul­
SIGLOCERO
tados de las pruebas aplicadas. Cuando La última premisa establece que no se
esas características de una persona o de debe dejar a nadie de lado por muy gra­
su contexto sociocultural influyen en los ves que sean sus limitaciones, aportando
resultados (de CI o de conducta adaptati­ una visión optimista y esperanzadora en
va), o no han sido tenidas en cuenta en cualquier situación. Eso si, las claves son
los tests o pruebas utilizados (baremos, definir qué apoyos son los apropiados y
grupo cultural), la explicación de los mis­ mantenerlos durante un periodo prolon­
mos podría ser precisamente por esas gado. Todas las personas tienen derecho
causas, y no se puede establecer una rela­ a una atención y apoyo individualizado
ción directa entre resultados y diagnósti­ apropiados. No olvidemos que ha sido
13

co de DI. Antes de ello habrá que valorar común, y continua todavía en alto grado,
el peso de esas influencias y hacer un jui­ entender que el trabajo con las afectacio­
cio clínico apropiado con los resultados nes graves es muy costoso (en tiempo,
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 14

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

dinero, esfuerzo, etc.), se avanza poco y prácticas. Al igual que con el criterio
lentamente y, dado que son la minoría de funcionamiento intelectual, el
del colectivo, esto ha implicado que error típico de medida del instrumen­
nunca sean la prioridad, ni se ha incenti­ to de evaluación debe considerarse
vado apropiadamente la dedicación a las cuando se interpreta la puntuación
mismas. El panorama en publicaciones, obtenida por la persona.
experiencias innovadoras, incentivación
de buenas prácticas, y promoción de Error típico de medida e intervalo de con­
avances es desolador en muchos países, fianza
entre ellos España. Cualquier puntuación obtenida está
Puntuaciones de corte sujeta a variabilidad en función de unas
potenciales fuentes de error como son las
Las puntuaciones de corte se utilizan variaciones en el rendimiento en el test,
para establecer los límites de un cons­ conducta del examinador, cooperación
tructo (en este caso el de discapacidad del que aplica el test y otras variables
intelectual), por lo que se usan para ambientales y personales.
determinar quien es miembro de la cate­
• El término error típico de medida
goría. En lo que se refiere al diagnóstico
(ETM), que varía de un test a otro, por
de discapacidad intelectual:
subgrupos y por edades del grupo, se
• El criterio de “limitaciones significati­ utiliza para cuantificar la variabilidad
vas en funcionamiento intelectual” y proporcionar las bases para estable­
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

para diagnosticar discapacidad inte­ cer el intervalo de confianza estadísti­


Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

lectual es una puntuación de CI de co en torno a la puntuación obtenida


aproximadamente dos desviaciones dentro de la cual se encuentra la pun­
típicas por debajo de la media, consi­ tuación verdadera de la persona.
derando el error típico de medida
• Desde las propiedades de la curva nor­
para los instrumentos específicos utili­
mal se puede establecer un rango de
zados así como sus fortalezas y debili­
confianza estadística (esto es, ‘interva­
dades. Esto equivale generalmente a
lo de confianza’) dentro del cual se
una puntuación 70 de CI a la que hay
encuentra la puntuación verdadera de
que sumar o restar el error típico de
la persona, con parámetros de al
medida (el cual depende de la estan­
menos un ETM (66% de probabilidad)
darización del test de medida utiliza­
SIGLOCERO

o dos ETM (95% de probabilidad).


do, oscilando de 3 a 5 puntos).

• El criterio de “limitaciones significati­


vas en conducta adaptativa” para clasificación de los miembros de una
diagnosticar discapacidad intelectual categoria ■ ■ ■
se refiere a un desempeño que es
aproximadamente dos desviaciones La cuarta cuestión histórica está rela­
típicas por debajo de la media en: a) cionada con un problema crítico en el
una de los tres tipos de conducta campo científico en la actualidad: como
adaptativa siguientes: conceptual, clasificar a personas definidas e identifi­
14

social o práctica, o b) una puntuación cadas como personas con discapacidad


general en una medida estandarizada intelectual. El propósito en este apartado
de habilidades conceptuales, sociales y del artículo no es presentar en detalle los
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 15

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

sistemas actuales de clasificación CIE-9 y progreso de la discapacidad para poder


CIE-10, que se basan principalmente en formular así expectativas y metas realis­
puntuaciones de CI. Tampoco es nuestro tas y apropiadas; d) Favorecer un conoci­
propósito describir el sistema de clasifica­ miento mayor de la discapacidad, sobre
ción del DSM-IV, que actualmente se está todo en los casos en los que ésta no es
revisando y será publicado en 2013 como fácilmente reconocible por rasgos físicos;
DSM-V. Nuestro propósito en este aparta­ e) Identificar variables a evaluar para la
do del artículo es resumir la emergencia intervención; f) Planificar la intervención
de sistemas de clasificación multidimen­ e idoneidad de los servicios; y g)
sionales y destacar los parámetros de un Favorecer el desarrollo teórico.
modelo de sistema multidimensional de
clasificación. En estos momentos hay varias tenden­
cias en distintos ámbitos que desplazan el
La emergencia de sistemas de clasifica­ campo hacia sistemas de clasificación
ción multidimensionales multidimensionales, entre las cuales se
puede destacar: a) Agrupamiento para
Todos los sistemas de clasificación tie­
prestaciones o financiación basado en
nen como propósito fundamental pro­
porcionar un esquema organizado para alguna combinación y medida de los
categorizar varias clases de observacio­ niveles de necesidades de apoyo evalua­
nes. En la actualidad los sistemas de clasi­ dos, nivel de conducta adaptativa, esta­
ficación se utilizan principalmente con tus de salud, y factores contextuales
como el tipo de vivienda y localización

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


cuatro propósitos: financiación, investi­
gación, servicios/apoyos y comunicación geográfica; b) métodos de investigación

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


sobre determinadas características de centrados en predictores multidimensio­
personas y sus ambientes. Otros benefi­ nales del funcionamiento humano y de
cios posibles al utilizar sistemas clasifica­ resultados personales deseados; y c) servi­
torios son (Navas, Verdugo y Gómez, cios y apoyos individualizados basados en
2008): a) El conocimiento de la categoría el patrón e intensidad de las necesidades
diagnóstica puede ayudar a los padres a de apoyo evaluadas en las cinco dimen­
buscar de un modo más eficaz recursos, siones del funcionamiento humano (fun­
grupos de apoyo, ayudas de carácter eco­ cionamiento intelectual, conducta adap­
nómico o contacto con organizaciones; b) tativa, salud, participación, y contexto).
Favorece un diagnóstico precoz que per­ La Tabla 2 resume los componentes
modelo de un sistema de clasificación
SIGLOCERO
mite estimular el desarrollo cognitivo y el
mejor proceso de aceptación de los multidimensional que se está desarrollan­
padres y respuesta de éstos al desarrollo do (por los autores del Manual de 2010
del niño; c) Comprensión del ritmo de de la AAIDD).
15
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 16

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

Tabla 2. Componentes modelo de un sistema de clasificación


multidimensional

Dimensión Medidas modelo Esquema de clasificación

Habilidades intelectuales Tests CI administrados individualmente Rangos y niveles de CI

Conducta adaptativa Escalas de conducta adaptativa Niveles de conducta adaptativa

Salud Inventarios de salud y bienestar Estatus de salud

Medidas de salud mental Estatus de salud mental


Evaluación etiológica Factores de riesgo

Agrupamientos por etiología

Participación Escalas de integración comunitaria Grado de integración comunitaria

Escalas de participación comunitaria Grado de participación comunitaria

Medidas de relaciones sociales Nivel de interacciones sociales

Medidas de vida en el hogar Nivel de actividades en el hogar

Contexto Evaluaciones ambientales Estatus ambiental


(físico, social, actitudinal)
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

Evaluaciones personales Estatus personal


Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

(motivación, estilos de afrontamiento,


estilos de aprendizaje, estilos de vida)

Apoyos Escalas de necesidades de apoyo Nivel de apoyo necesario

Evaluación funcional de la conducta Patrón de apoyos necesario

el enfoque de los servicios educativos definir los resultados personales y fami­


liares que deben proporcionar las bases
y de habilitación ■ ■ ■ empíricas para –y una demostración de-
resultados de las políticas públicas.
SIGLOCERO

El quinto aspecto en el que los profe­


sionales del campo están centrando la Modelo multidimensional del funcio­
atención es el enfoque de la atención de namiento humano
los servicios educativos y de habilitación
para personas con DI, y la evaluación del La Figura 1 presenta un marco de refe­
impacto de esos servicios. Cuatro aspec­ rencia conceptual del funcionamiento
tos importantes de ese esfuerzo son: a) humano. Un aspecto clave en este marco
comprender las implicaciones de un son las cinco dimensiones que se mues­
modelo multidimensional del funciona­ tran a la izquierda y el rol de los apoyos
miento humano; b) saber ‘alinear’ mejor en la mejora del funcionamiento huma­
16

-utilizar de manera mas eficiente- las fun­ no. Cada una de las cinco dimensiones y
ciones clínicas; c) conceptualizar y pro­ la definición de apoyos y de ‘un sistema
porcionar un ‘sistema de apoyos’; y d) de apoyos’ se definen a continuación.
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 17

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

Figura 1. Esquema conceptual del funcionamiento humano

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


• Habilidades intelectuales: capacidad • Contexto: las condiciones interrelacio­

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


mental general que incluye razona­ nadas en las que viven las personas su
miento, planificación, solución de pro­ vida cotidiana; el contexto incluye fac­
blemas, pensamiento abstracto, com­ tores ambientales (por ejemplo, físico,
social, actitudinal) y personales (por
prensión de ideas complejas, aprender
ejemplo, motivación, estilos de afron­
con rapidez y aprender de la expe­ tamiento, estilos de aprendizaje, esti­
riencia. los de vida) que representan el
ambiente completo de la vida de un
• Conducta adaptativa: el conjunto de individuo.
habilidades conceptuales, sociales y
prácticas que se han aprendido y se • Los apoyos son los recursos y estrate­
practican por las personas en su vida gias que se dirigen a promover el
SIGLOCERO
cotidiana. desarrollo, educación, intereses y bie­
nestar personal de un individuo, así
• Salud: un estado de completo bienes­ como para mejorar su funcionamiento
tar físico, mental y social. individual. Un sistema de apoyos es el
uso planificado e integrado de las
• Participación: el desempeño de la per­ estrategias de apoyo individualizadas
sona en actividades reales en ámbitos y de los recursos que acompañan los
de la vida social que se relaciona con múltiples aspectos del funcionamien­
to humano en múltiples contextos.
su funcionamiento en la sociedad; la
Ejemplos de ello son los sistemas orga­
participación se refiere a los roles e nizativos, incentivos, apoyos cogniti­
17

interacciones en el hogar, trabajo, vos, instrumentos, ambiente físico,


ocio, vida espiritual, y actividades cul­ habilidades/conocimiento y habilidad
turales. inherente.
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 18

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

Alinear funciones clínicas definió, un enfoque de sistemas de apo­


yos incluye la planificación y uso integra­
Proporcionar unas bases conceptuales do de estrategias de apoyo individualiza­
y de medida claras del diagnóstico y la do y recursos que acompañan los múlti­
clasificación y desarrollar un enfoque ples aspectos de la actuación de la perso­
multidimensional de los apoyos requiere na en contextos múltiples. Tal como se
alinear tres funciones clínicas esenciales: utilizan corrientemente, los sistemas de
diagnóstico, clasificación y planificación apoyos pueden construirse sobre el
de apoyos. Los componentes de este marco conceptual bien de elementos de
esquema para la evaluación se resumen la tecnología del funcionamiento huma­
en la Tabla 3. no, bien de las dimensiones principales

Tabla 3. Esquema de evaluación que alinea las funciones clínicas

Función de evaluación Propósito específico Ejemplos de medidas, Instrumentos y


métodos de evaluación

Diagnóstico Establece la presencia de DI Tests de CI

Establece elegibilidad para: Escalas de Conducta Adaptativa

-Servicios Edad de aparición

-Beneficios
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

-Protección legal
Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

Clasificación Apoyos necesarios Escalas de Intensidad de Apoyos

Investigación Niveles de CI/CA

Reembolso/financiación Evaluaciones ambientales

Características seleccionadas Factores de riesgo etiológicos

Medidas de salud

Planificación de apoyos Mejora del funcionamiento humano Planificación centrada en la persona

Mejora de resultados personales Evaluación funcional de la conducta


SIGLOCERO

Mejora en las elecciones de las Planes individualizados


personas Planes autodirigidos
Mejora en los derechos humanos Inventario ecológico

Sistemas de apoyos
de calidad de vida o de ambos. A conti­
Un modelo de sistemas de apoyos pro­ nuación se define cada uno:
porciona una estructura para la organiza­
• Elementos de la Tecnología del
18

ción y mejora de elementos del funciona­


Funcionamiento Humano: políticas y
miento humano que son interdependien­
prácticas, incentivos, apoyos cogniti­
tes y acumulativos. Como previamente se
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 19

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

vos (por ejemplo, tecnología de apoyo conclusión ■ ■ ■


o asistiva), herramientas o instrumen­
tos (por ejemplo, prótesis), habilida­
des y conocimiento, habilidad inhe­ Afortunadamente la concepción de
rente a la persona, acomodación discapacidad intelectual cambia cada
ambiental. pocos años. Y decimos afortunadamente
porque esto significa que estamos mejo­
• Principales áreas de calidad de vida: rando continuamente nuestra compren­
desarrollo personal, autodetermina­ sión y enfoque sobre la población a la
ción, relaciones interpersonales, inclu­ que se le diagnostica de esa manera. En
sión social, derechos, desarrollo emo­ el momento actual la referencia concep­
cional, bienestar físico y bienestar tual internacional lo constituye la 11ª edi­
material. ción del Manual de la AAIDD (Schalock et
al., 2010), y en ella, como coautores de la
Impacto de las políticas públicas
misma, nos hemos basado para escribir
A medida que las personas con disca­ este artículo. Las implicaciones para el
pacidad intelectual y sus familias partici­ uso de terminología apropiada y el desa­
pan más en la comunidad se hace más rrollo de buenas prácticas de evaluación y
necesario que quienes planifican las polí­ planificación de apoyos son evidentes.
ticas públicas y los programas de presta­ Una más extensa y mejor comprensión de
ción de servicios conceptualicen e imple­ la propuesta, que es imprescindible para
menten resultados que reflejen el valor e quienes apoyan en distintos roles a las

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


impacto de los servicios y apoyos recibi­ personas con discapacidad intelectual,
dos en los receptores de los programas. requiere leer el Manual citado y los artí­

Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21


La Tabla 4 resume tres conjuntos de resul­ culos previos que se han ido publicando
tados de políticas públicas: los relaciona­ internacionalmente y en Siglo Cero
dos con la persona, con la familia y, más (Schalock, Luckasson y Shogren, et al.,
en general, con la sociedad. 2007; Shogren, Bradley, Gomez, Yeager y

Tabla 4. Impacto de las políticas públicas

Áreas de resultados referidos a la persona

Derechos Desarrollo personal Autodeterminación Bienestar físico

Inclusión Bienestar emocional Bienestar material Participación


SIGLOCERO

Áreas de resultados referidos a la familia

Interacción familiar Bienestar emocional Desarrollo personal

Rol parental Bienestar físico Bienestar financiero

Participación en la comunidad Apoyos relacionados con la discapacidad


19

Resultados referidos a la sociedad

Posición socioeconómica Salud Bienestar subjetivo


siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 20

últimos avances en el enfoque y concepción de las personas con discapacidad intelectual

Schalock, et al., 2009; Snell, Luckasson, et al., 2009; Wehmeyer, Buntinx, Lachapelle,
al., 2009; Thompson, Bradley, Buntinx, Luckasson, Schalock y Verdugo, et al.,
Schalock, Shogren, Snell y Wehmeyer, et 2008).
bibliografía

Luckasson, R., Borthwick-Dufy, S., Developmental Disabilities.


Buntix, W.H.E. Coulter, D.L., Craig,
E.M., Reeve, A. et al. (2002 / 2004). Schalock, R. L., Luckasson, R. A., y
Mental retardation. Definition, classi­ Shogren, K. A. et al. (2007). The rena­
fication and systems of supports (10th ming of mental retardation:
Ed). Washington DC: American Understanding the change to the
Association on Mental Retardation. term intellectual disability.
[Traducción de M.A. Verdugo y C. Intellectual and Developmental
Jenaro. Retraso Mental: Definición, Disabilities, 45 (2), 116-124. [Siglo
clasificación y sistemas de apoyo (10ª Cero, 2007, Vol. 38 (4), nº 224, 5-20]
edición). Washington, DC / Madrid:
American Association on Mental Scheerenberger, R.C. (1987). A history
Retardation / Alianza Editorial]. of mental retardation. A quarter cen­
tury of promise. Baltimore, MD: Paul
Luckasson, R., Coulter, D.L., Polloway, H. Brookes.
E.A., Reiss, S., Schalock, R.L., Snell,
M.E., Spitalnik, D.M. y Stark, J.A. Shogren, K.A., Bradley, V. J., Gomez,
(1992 / 1997). Mental retardation. S.C., Yeager, M.H., and Schalock, R. L.
Revista Española sobre Discapacidad Intelectual

Definition, classification and systems et al. (2009). Public policy and the
of supports (9th Ed). [Traducción de enhancement of desired public policy
Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21

M.A. Verdugo y C. Jenaro. Retraso outcomes for persons with intellec­


Mental: Definición, clasificación y sis­ tual disability. Intellectual and
temas de apoyo (10ª edición). Developmental Disabilities, 47 (4),
Washington, DC / Madrid: American 307–319.
Association on Mental Retardation /
Alianza Editorial]. Snell, M.E. & Luckasson, R. et al.
(2009). Characteristics and needs of
Navas, P., Verdugo, M.A. y Gómez. L. people with intellectual disability
(2008). Diagnóstico y clasificación en who have higher IQs. Intellectual and
discapacidad intelectual. Intervención Developmental Disabilities, 47 (3),
Psicosocial, 17 (2), 143-152. 220-233.
SIGLOCERO

Schalock, R.L., Borthwick-Duffy, S.A., Thompson, J.R., Bradley, V. J.,


Bradley, V., Buntix, W.H.E., Coulter, Buntinx, W. H.E., Schalock, R.L.,
M-D., Craig, E.M., Gomez, S.C., Shogren, K.A. Snell, M.E. &
Lachapelle, Y., Luckasson, R., Reeve, Wehmeyer, M.L. et al. (2009).
A., Shogren, K.A., Snell, M.E., Spreat, Conceptualizing supports and the
S., Tassé, M.J., Thompson, J.R., support needs of people with inte­
Verdugo, M.A., Wehmeyer, M.L. and llectual disability. Intellectual and
Yeager, M.H. (2010). Intellectual disa­ Developmental Disabilities, 47 (2),
bility. Definition, Classification, and 135-146. [Siglo Cero, 2010, Vol. 41(1),
20

Systems of Supports. 11th Edition. nº 233, 7-22]


Washington, D.C.: American
Association on Intellectual and Verdugo, M.A. (1994). El cambio de
siglo cero 236 13/12/10 19:02 Página 21

Miguel Ángel Verdugo Alonso y Robert L. Schalock

paradigma en la concepción del Wehmeyer, M.L., Buntinx, W. H.E.,


retraso mental: la nueva definición Lachapelle, Y., Luckasson, R. A.,
de la AAMR. Siglo Cero, 25 (5), 5-24. Schalock, R.L., & Verdugo, M.A. et al.
(2008). The disability construct and its
Verdugo, M. A. (2003). Análisis de la relation to human functioning.
definición de discapacidad intelectual Intellectual and Developmental
de la AAMR de 2002. Siglo Cero, 34 Disabilities, 46 (4), 311-318. [Siglo
(1), 5-20. Cero, 2008, Vol. 39 (3), nº 227, 5-18]

Revista Española sobre Discapacidad Intelectual


Vol 41 (4), Núm. 236, 2010 Pág. 7 a pág. 21
SIGLOCERO

Recibido el 30 de agosto de 2010; revisado el 10 de septiembre de 2010; y aceptado el


20 de septiembre de 2010

Dirección para correspondencia:

Miguel Ángel Verdugo Alonso


21

Instituto Universitario de Integración en la Comunidad. Facultad de Psicología. Avda. de


la Merced, 109-131. 37005 Salamanca
E-mail: verdugo@usal.es

Das könnte Ihnen auch gefallen