Sie sind auf Seite 1von 11

Universidad Central del Ecuador

Escuela de Sociología
Octavo Semestre Sociología
Sociología de la Comunicación

Ensayo Visual
Joseph Quishpe
El arte Tigua en Quito y sus espacios de consumo

En el Ecuador, el arte se ha caracterizado por presentarse como lo académico elitista,


entendido este como el dominante y un arte popular, relacionado siempre con lo excluido.
Sin embargo el arte popular ha sido instrumentalizado, el más claro ejemplo es la
utilización de imágenes de indígenas en el arte, en busca de una identidad nacional, la
realidad era distinta con el indígena de carne y hueso. En la actualidad todavía se conserva
esa característica, pero también el arte popular pudo hacerse de características del arte
académico-elitista para fortalecer su identidad, establecerse en el espacio urbano y sobre
todo utilizar una herramienta de resistencia frente al arte dominante.

En primera instancia el arte Tigua se ancla al espacio urbano a través de una táctica
entendida como “que no puede contar con un lugar propio […] las prácticas cotidianas
son de tipo táctico […] presentan continuidades y permanencias” (Certau 1980: L). Se
conoce de sobra la marginalidad en la que se encuentra una gran mayoría de indígenas
sin embargo, otros permanecen en el ámbito urbano, pero con ciertas alianzas se
establecen en un lugar determinado, este es el caso de los Pintores de Tigua que se
asientan en el parque El Ejido, han formado la asociación Runa Pakari que brinda un
espacio al indígena, pero solo en cuanto a su arte, aunque muchos prefieren que se le
denomine como artesanía.

El pintor de Tigua, también se ancla a otros espacios, como el Centro Histórico, sin
embargo su presencia se mantiene de forma simbólica con sus trabajos, algunos locales
solo disponen de las pinturas de los habitantes de la comunidad Tigua más no su presencia
como individuos y en otros las muestras como obras de arte exóticas.

La relación de consumo, es más compleja, por un lado encontramos la democratización y


reproductibilidad del arte que menciona Benjamín y por otro lado la industria cultural de
Adorno y Horkheimer. La cuestión conlleva que con la alta cantidad de objetos, los
individuos toman los que están a su alcance, es decir en palabras de Bourdieu
“competencia artística”, ubicado en una determinada clase social más un capital escolar
se tiene conciencia de que algo es una obra de arte y la especificidad misma de esa obra
de arte.

Por tanto el consumo del arte Tigua no lo hacen personas indígenas de otras comunidades,
el arte popular mantiene todavía su característica de exótico y en los dos lugares donde
ubicamos el arte Tigua se evidencia como el consumo es competencia, diferenciación y
distinción social, integración y comunicación, objetivación de deseos y ritualización
(García Canclini 1999: 34-40).
PARQUE EL EJIDO
CENTRO HISTÓRICO

Das könnte Ihnen auch gefallen