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Un nuevo modelo educativo

para potenciar la innovación


y el emprendimiento Roberto de la Vega Vallejo*

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Desde que, por primera vez, en 1934,


Schumpeter definió emprendimiento como
“creación destructiva”, los conceptos de
innovación y emprendimiento iniciaron un
camino común, a tal punto que emprendimiento
e innovación se han vuelto sinónimos.

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S egún él, el emprendimiento es una actividad crea-
tiva y el emprendedor es un individuo que lleva
a cabo nuevas combinaciones de recursos para
maximizar sus beneficios, haciendo innovación
en nuevos productos, métodos de producción, mercados,
estrategias o formas de organización (Schumpeter, 2000)
A este respecto, David Birch, un icono del emprendimiento
involucrado tanto en la investigación como en el desarrollo
de políticas en el tema, comentó:

“Varias escuelas de negocio enseñan exactamente


lo contrario a lo necesario en un emprendimiento.
Enseñan a hacer reportes financieros para las bolsas
Dicho esto, podemos plantear la incógnita de si se puede, o de valores, a conservar recursos y a tomar algo ya
no, enseñar a ser emprendedor. Durante la segunda mitad existente y asegurarse que le va bien en Wall Street.
del siglo pasado se dio una acalorada discusión sobre si la Básicamente, las escuelas de negocio enseñan a ser
capacidad de emprender puede ser enseñada. Aún hoy, si un buen empleado” (Aronsson, 2004)
se pregunta a los académicos que vienen de escuelas tradi-
cionales de negocios, es muy factible que la respuesta sea Este modelo educativo tradicional, descrito por Birch, se ha
que no, que el emprendedor “nace y no se hace”. Por esta limitado a enseñar las habilidades técnicas necesarias para
razón, las escuelas se dedicaron, y aun lo hacen, a enseñar una adecuada gestión de las funciones al interior de las
sobre emprendimiento, y no a desarrollar las capacidades organizaciones, como pueden ser: contabilidad, finanzas,
necesarias para lograrlo. marketing, estrategia, desarrollo organizacional y otras.
Dicho modelo mecánico, jerárquico, rígido y compartimen-
Sin embargo, no debe haber diferencia entre la influencia tado, se basa en construir la pirámide del conocimiento
de la educación en la formación de un emprendedor y mediante el uso de piezas independientes y fragmentadas
aquella en la formación de un médico o un ingeniero. En que se apilan unas encima de otras, arrancando con los
este sentido, y sin desconocer la importancia de la voca- cursos básicos, pasando por los cursos obligatorios más
ción, hay que reconocer que el médico, el ingeniero y el avanzados y las electivas y rematando con un curso que
emprendedor se hacen. Ninguno de ellos nace, y las dife- pretende, con bastante poco éxito, servir para conectar las
rencias entre los buenos y los no tan buenos médicos, inge- materias independientes, que aún se mantienen fragmen-
nieros o emprendedores está basada en una combinación tadas.
de factores intrínsecos (como mayor nivel de inteligencia
o habilidad motora), niveles de estímulo (como estar en Por el contrario, el modelo de educación basado en la
el entorno adecuado) y factores extrínsecos (como mayor práctica de la gerencia no solo incluye dichas habilidades
exposición a las herramientas y las técnicas necesarias y técnicas tradicionales, sino que también incluye y refuerza
mayor práctica del arte). aquellas habilidades más específicas del emprendimiento,
como son la optimización de recursos, el desarrollo de rela-
Entonces, ¿cómo enseñamos a ser emprendedor? Ya ciones humanas al interior de las organizaciones, la creati-
desde finales de los años ochenta, McMullan y Long (1987) vidad, el reconocimiento y evaluación de oportunidades y la
plantearon en “Entrepreneurship education in the nineties”, planeación de los emprendimientos. Así mismo, se carac-
que los métodos que estaban siendo utilizados para ense- teriza por borrar las fronteras y por integrar los diferentes
ñar emprendimiento eran inadecuados. Ellos plantearon silos de conocimiento vocacional, antes independientes y
que las escuelas de negocios no solo se enfocaban en fragmentados.
proveer a la gerencia media y alta de las herramientas
técnicas necesarias para conducir organizaciones grandes Para diseñar un currículo con un modelo basado en la
y maduras, muy distintas a aquellas requeridas cuando práctica de la gerencia, debemos recordar a Alfred
se hace frente a un emprendimiento, ya sea externo o al Whitehead, quien en su libro “The Aims of Education”
interior de la empresa en la que trabajamos, sino que lo habla no solo de la importancia de la experimentación
hacían mediante el uso de clases magistrales llenas de como mecanismo para evitar la osificación de los currí-
teoría, cuando el emprendimiento demanda métodos de culos académicos, sino del principio de la “trascendencia
aprendizaje experiencial en los cuales se aprende en un vocacional” (Whitehead, 1967), que atiende a aquellos que
entorno activo donde se conecte el saber hacer y el poder ven el fenómeno de emprendimiento de manera imagina-
hacer, de la mano de alguien que ha experimentado y ha tiva y no mecánica, yendo más allá de la mundanidad del
sido exitoso en la práctica de la gerencia. conocimiento vocacional y tratando de ofrecer al estudiante
una experiencia única que le dé algo completo, nuevo e
* Director Maestría en Administración (MBA), Pontificia Universidad Javeriana.
irrepetible.

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Es por esto que el modelo basado en la práctica de la
gerencia busca fortalecer aquellos elementos curriculares
que permiten la “trascendencia vocacional” y que deben
TAL VEZ LA ÚLTIMA TENDENCIA estar presentes en cada una de las materias del progra-
ma (Hindle, 2007). Dichos elementos trascendentes son,
en la educación para el emprendimiento por ejemplo, trabajo en equipo, solución de problemas,
comunicación persuasiva, creatividad y espíritu innovador,
es el desarrollo de la habilidad asociada pensamiento estratégico y valores humanos.

al reconocimiento de oportunidades. Pero tal vez la última tendencia en la educación para el


emprendimiento es el desarrollo de la habilidad asociada
Aunque esta posición no es unánime, al reconocimiento de oportunidades. Aunque esta posición
cada vez más los investigadores están
no es unánime, cada vez más los investigadores están de
acuerdo con que el emprendimiento está primordialmente
de acuerdo con que el emprendimiento asociado a la identificación y explotación de oportunidades
de negocio, por lo que la habilidad para reconocer oportu-
está primordialmente asociado a nidades se vuelve fundamental.

la identificación y explotación de La habilidad de descubrir ideas productivas y de reconocer


oportunidades debe ser el centro de cualquier programa de
oportunidades de negocio, por lo que la formación en emprendimiento (Fiet, 2002). Y dicha habi-
lidad puede ser aprendida y ejercitada tanto mediante la
habilidad para reconocer oportunidades búsqueda activa y pasiva, como a través de metodologías
se vuelve fundamental.
para la creación de oportunidades (DeTienne & Chandler,
2004, Saks & Gaglio, 2002) como el pensamiento creativo,
el pensamiento divergente, el brainstorming y el pensa-
miento lateral (Gundry & Kickul, 1996).

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Y habiendo definido el contenido, ¿qué metodología debe- dichas historias inspiren a los potenciales emprendedores o
mos usar en la enseñanza? Desde que en 1947 Myles para que estos últimos reflexionen acerca de la importancia
Mace dio la primera clase de emprendimiento en la Uni- de la pasión, la creatividad y el liderazgo .
RJ
versidad de Harvard (Katz, 2003), el enfoque metodológico
se ha mantenido alrededor del desarrollo de un plan de
negocio, de clases y conferencias, de la mano de recono-
cidos profesores, pero aún enfocadas en el contenido más
que en el método de aprendizaje, y de la utilización de un
puñado de casos y programas de lectura (Ronstadt, 1990;
Solomon, Duffy & Tarabishi, 2002).
Bibliografía
Es particularmente interesante la importancia que ha tenido
el desarrollo del plan de negocio como herramienta meto- • Aronsson, M. (2004). Education matters—but does entrepreneurship edu-
dológica, a pesar de existir abundantes pruebas de que o cation? An interview with David Birch. Academy of Management Learning &
no hay ninguna relación entre un emprendimiento exitoso y Education, 3(3), 289-292.
la calidad del plan de negocio (Zinger & LeBrasseur, 2003) • Audet, J. (2004). L’impact de deux projets de session sur les perceptions
o de que hay una relación negativa cuando la compleji- et intentions entrepreneuriales d’étudiants en administration. Journal of
dad de la elaboración de un buen plan de negocio logra Small Business & Entrepreneurship, 17(3), 221-238.
desincentivar a los potenciales emprendedores (Audet, • DeTienne, D. R., & Chandler, G. N. (2004). Opportunity identification and
2004). Afortunadamente para aquellos que correctamente its role in the entrepreneurial classroom: A pedagogical approach and empi-
abogan por el uso del plan de negocio como herramienta rical test. Academy of Management Learning & Education, 3(3), 242-257.
metodológica, el problema no está en el desarrollo del plan
• Gundry, L. K., & Kickul, J. R. (1996). Flights of imagination: fostering crea-
de negocio, que es muy útil ya que obliga a los estudiantes
tivity through experiential learning. Simulation & Gaming, 27(3), 334-349.
a anticiparse a los problemas que se pueden presentar,
a desarrollar los contactos necesarios, a identificar sus • Hindle, K. (2007). Teaching entrepreneurship at university: from the wrong
propias debilidades y a entender la interdependencia de building to the right philosophy. Handbook of research in entrepreneurship
sus decisiones, sino en que en la mayoría de los casos se education, 1, 104-26.
hace muy pronto (Carrier, 2005) y no cuando el estudiante • Honig, B. (2004). Entrepreneurship education: Toward a model of con-
cuenta con todas las herramientas para sacarle el máximo tingency-based business planning. Academy of Management Learning &
provecho. Education,3(3), 258-273.
• McMullan, W., & Long, W. A. (1987). Entrepreneurship education in the
Sin embargo, existen otras herramientas metodológicas nineties. Journal of Business Venturing, 2(3), 261-275.
bastante menos exploradas y que han probado ser útiles
en la potenciación de las habilidades requeridas para el • Neck, H. M., Neck, C. P., & Meyer, G. D. (1998). Dead poet’s society:
emprendimiento. eight lessons for entrepreneurs. In Proceedings of USASBE Annual National
Conference (pp. 15-18).
Dichas metodologías incluyen simulaciones y juegos que • Ronstadt, R. (1990). The educated entrepreneurs: A new era of entrepre-
permiten a los estudiantes aprender a tratar y a resolver neurial education is beginning. Entrepreneurship education: Current develo-
problemas poco estructurados, desarrollar sus habilidades pments, future directions, 69-88.
de adaptación mediante la acción, el ensayo y error, a • Saks, N. T., & Gaglio, C. M. (2002). Can opportunity identification be tau-
manejar el fracaso y a desarrollar la resiliencia necesaria ght?. Journal of Enterprising Culture, 10(04), 313-347.
para superarlo (Honig, 2004). Así mismo, se potencian
• Schumpeter, J. A. (2000). Entrepreneurship as innovation. Entrepreneurs-
habilidades como hacer preguntas provocadoras sobre
hip: The social science view, 51-75.
el futuro del emprendimiento, el desarrollo de escenarios
alternativos, la redefinición de problemas para hacerlos • Shepherd, D. A. (2004). Educating entrepreneurship students about emo-
mas fáciles de entender y la búsqueda y promoción de tion and learning from failure. Academy of Management Learning & Educa-
ideas innovadoras (Stumpf, Dunbar & Mullen, 1991). tion, 3(3), 274-287.
• Solomon, G. T., Duffy, S., & Tarabishy, A. (2002). The state of entrepre-
Existen también los juegos de roles, que permiten mejorar neurship education in the United States: a nationwide survey and analysis.
ciertas habilidades de liderazgo como la perseverancia y International Journal of Entrepreneurship Education, 1(1), 65-86.
la empatía y que han sido utilizados para mejorar algunos • Stumpf, S. S., Dunbar, R. L., & Mullen, T. P. (1991). Developing entrepre-
comportamientos y actitudes, y para aprender a enfrentar- neurial skills through the use of behavioural simulations. Journal of Manage-
se a las emociones y a aprender del fracaso (Shepherd, ment Development, 10(5), 32-45.
2004). Adicionalmente, aquellos más arriesgados proponen
la utilización de películas, como la Sociedad de los Poetas • Whitehead, A. N. (1967). Aims of education. Simon and Schuster.
Muertos (Neck, Neck & Meyer, 1998) y de literatura clásica, • Zinger, J. T., & LeBrasseur, R. (2003). The benefits of business planning in
como El Príncipe de Maquiavelo, La República de Platón early stage small enterprises. Journal of Small Business & Entrepreneurship,
o El Rey Lear de Shakespeare, para que los héroes de 17(1), 1-15.

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