1 Yo tengo un pastor sublime A la diestra del Padre Creador; Su brazo gentil redime Del pecado al más vil pecador. Coro: Mi buen Pastor, tu cayado me guiará, Mi buen Pastor, con tu mano me sostendrás, Mi buen Pastor, nada mi alma temerá, Aunque en valle de sombra de muerte esté, Sé conmigo y seguro estaré. 2 Perdiendo una oveja un día, De su trono a la tierra bajó, Y hallándola ya perdida Por salvarla su vida entregó. 3 Acaso perdido errante, Sin Pastor vives hoy pecador, Si oyeres su voz amante, Ven entrégale tu corazón. 4 Yo tengo un Pastor que vive En el cielo a la diestra de Dios. Su vista mis pasos sigue Y dirige mi senda su voz.