SISTEMATIZADO POR SIMON LOPEZ, ENCUENTROS DE CONSTRUCCION
DEL CURRICULO INCES , 2012, 2013.
La pedagogía crítica aparece como una propuesta alternativa que pretende
provocar transformaciones en el sistema educativo. En Latinoamérica, Freire es un importante referente, en tanto es considerado por muchos como uno de sus fundadores. La propuesta de Paulo Freire de la educación como praxis liberadora es considerada un aporte que funda la pedagogía crítica, la que se inscribe dentro de la perspectiva teórica general de la teoría crítica. Aunque no constituye un campo teórico unificado, se constituye como un cuerpo de ideas comunes formuladas y difundidas por autores tales como Paulo Freire, Henry Giroux, Peter McLaren, Michael Apple y otros.
Algunas de las CARACTERÍSTICAS que conforman esta teoría son:
- Es necesaria la formación de la autoconciencia para lograr crear un proceso
de construcción de significados apoyados en las experiencias personales.
- Está encaminada a la transformación social en beneficio de los más débiles.
La educación debe considerar las desigualdades sociales existentes en el mundo globalizado, así como adquirir un compromiso con la justicia y la equidad.
- Debe permitir a los profesores, y a la comunidad educativa en general,
identificar las limitaciones y potenciar las capacidades de tal forma que éstas sean la base para la autosuperación. Algunos de los elementos FUNDAMENTALES de la Pedagogía Crítica son:- Participación- Comunicación- Humanización- Transformación- Contextualización
La concepción tradicional de la enseñanza involucra un concepto de
aprendizaje neutral, transparente y apolítico. En la pedagogía crítica, en cambio, se concibe el aprendizaje como un proceso vinculado a los conceptos de poder, política, historia y contexto. Se promueve un compromiso con formas de aprendizaje y acción en solidaridad con los grupos subordinados y marginados, con centro en el autofortalecimiento y en la transformación social.[1]
Los pedagogos críticos norteamericanos Henry Giroux y Peter McLaren
plantean una propuesta en la que se piensa la educación del profesor como parte de un proyecto político contra hegemónico o una política cultural que definen como la creación de esferas públicas alternativa
FORMAR UN NUEVO SER HUMANO
Dentro de ese marco, el Estado Venezolano, considera la importancia de
formar un hombre nuevo, para lo cual diseña un constructo curricular que denomina Educación Bolivariana con el objetivo central de formar el Nuevo Republicano que refundará la Nueva República de corte Socialista; y cuyo perfil se conforma, en lo axiológico, teleológico y filosófico, buscando educar un ciudadano capaz de valorarse a sí mismo, solidario y productivo; de ser protagonista de la transformación de esta sociedad en otra más ética, justa y equitativa; expectativa ésta que se corresponde con lo que se ha planteado siempre desde los tiempos socráticos: formar un tipo de ser humano según la época que le toca vivir. El modelo educativo bolivariano promueve una Educación de Calidad para Todos, una Educación Liberadora y Transformadora, propuesta ésta que fue resultado de una revisión de las políticas educativas que se realizó en la Constituyente Educativa en 1999, para redefinir la escuela, sus propósitos, estructura, metodologías y currículo.
QUE ES LA EDUCACION?
LA educación es una práctica social, cultural y política. Para las clases
dominantes explotadoras por siglos, ha sido la educación el medio e instrumento de dominación e ideologización para sustentar su hegemonía como clase, mantener a través de estos procesos culturales de ideologización el dominio sobre los medios e instrumentos de producción, sostener unas relaciones de producción y explotación mediante la alienación de los y las trabajadores(as) hoy modernamente con potentes y eficaces medios globalizados de comunicación y redes sociales. De aquí se desprende que la educación es la lucha por libertad, contrahegemonica, emancipadora, Sus espacios son espacios de lucha de clases. , la praxis de la Pedagogía Critica se vincula con la teoría marxista, la lucha de clases desde la educación, formando conciencia crítica
La estrategia central es transformar la educación en otra de carácter
humanista; que se constituya en espacios para la reflexión crítica y la construcción del saber; para crear sentimientos de libertad y transformar la sociedad venezolana en otra más ética, justa, equitativa, multiétnica, democrática, libre y pluricultural, mediante la formación de un Nuevo Republicano; es decir, formar individuos integrales, con una conciencia crítica y activa de sí mismos; de pensamiento libre, responsable ante la República y capaces de resolver problemas cotidianos en su comunidad, su ciudad, su país y la humanidad entera; inclusive par el sistema educativo donde está inserto.
PAULO FREIRE: NI OPRESORES, NI OPRIMIDOS
Dentro de ese contexto, un aporte valioso a la Educación Bolivariana, en
el marco de la pedagogía crítica, Paulo Freire desarrolla toda una teoría que invita a la lucha de clases desde la educación, criticando lo instituido en el campo educativo, en su obra Pedagogía del Oprimido (1970). Allí presenta sus ideas revolucionarias, sosteniendo que hay construir una opción ética y política realizables, organizando las masas y movilizándolas. Para ello es necesario que cada ciudadano use ese mínimo de poder que posee, como una manera de liberarse del yugo del opresor, o que al menos éste no invada ese pequeño espacio de poder.
Es así como en lo ético, sugiere crear un sueño entre los responsables de
educar al hombre nuevo, al Nuevo Republicano, de manera que ese sueño pueda direccionar las acciones de los actores educativos, especialmente a docentes y estudiantes. Pero esta debe ser una opción donde sujeto y objeto se confunden en una misma esencia, una opción de quienes sueñan con ser considerados como sujetos; donde no haya opresores, ni oprimidos; que el autoritarismo se desvanezca y reine la democracia y el compartir entre los seres humanos. Pero ¿hasta qué punto nuestros docentes sienten el deseo de ser sujetos? La experiencia que hemos vivido en las escuelas y liceos es que carecen de sensibilidad para actuar en ese sentido y que no han sido formados para abordar, con pensamiento crítico y activo, la comunidad.
Se está hablando de una opción pedagógica y filosófica donde los niveles
de poder se achatan y nace un sentimiento de corresponsabilidad; basado en la libertad de pensamiento y acción; es la aplicación de los principios organizativos de carácter plano, horizontal, que mejora los niveles de comunicación entre los miembros de la organización; donde el diálogo los hace más parecidos, compartiendo objetivos comunes y criticando este mundo para crear otro con mayor libertad; como expresa Freire ( 1970), no para hacer lo que cada quien quiere; sino para construir entre todos lo que necesitamos
No obstante, en Venezuela, debe darse un proceso más auténtico,; es decir,
trabajar sobre un plan auténtico de liberación del hombre, sea opresor u oprimido, partiendo de una visión conjunta del mundo en que viven. En este caso, explica Freire que “es importante destacar que la intención del oprimido es superarse, no liberarse para convertirse en opresor, sino para compartir una misión de transformar al mundo”. CREAR ESPACIOS PARA CONSTRUIR LA TRANSFORMACIÓN
Si la esperanza es a largo plazo, en las acciones de mediato se requiere
crear un ambiente educativo donde docente y estudiante se conecten para dialogar y construir en conjunto. En otras palabras, el diálogo es la vía, la horizontalidad y el contacto que se genera de la comunicación entre estos protagonistas. Se trata de un ambiente de intercambio de ideas, conocimientos y experiencias, entre otros, donde cada quien desempeña su rol y existe un respeto del uno por el otro; existe un respeto y unos límites en la interacción docente-estudiante. Se colocan al mismo nivel; practican su libertad; pero cada uno está consciente de su papel..