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VITAMINA D Por José Luis Gil Monteagudo. Médico y psicoterapeuta.

INTRODUCCIÓN
En la Europa de los siglos XVIII y XIX, en pleno auge de la
industrialización, hubo una emigración masiva de población
desde las zonas rurales a las ciudades. El raquitismo, una
enfermedad infantil que se manifiesta con graves
deformaciones esqueléticas debido a un deficiente
desarrollo de los huesos, se había convertido en una
epidemia cuya causa, por aquel entonces, era totalmente
desconocida.

En 1822 Jezdrzej Sniadecki, un médico polaco observó que


la incidencia de esta enfermedad era mucho menor entre
los niños que vivían en el campo. Poco después, tratando a
niños enfermos que vivían en las ciudades descubrió que
se curaban con un método sencillo y barato: los baños de
sol. Dos años más tarde, científicos alemanes descubrieron
que el aceite de hígado de bacalao era efectivo contra el
raquitismo pero como todavía faltaba un siglo para que se
descubrieran las vitaminas, el novedoso hallazgo no tuvo
demasiado eco. Nadie supo que el agente curativo del
hígado de bacalao y del sol eran el mismo.

Décadas después, a comienzos del siglo XX, cuando los


antibióticos todavía no se habían descubierto sólo se
conocía un remedio efectivo contra la tuberculosis, una de
las plagas más graves de esos tiempos. Nadie sabía por qué
pero los baños de sol eran muy efectivos para curarla. Fue
finalmente en 1922 cuando se descubrió que la substancia
que estaba presente en el aceite de hígado de bacalao era
la misma sintetizada por la piel en contacto con la luz solar.
Investigaciones posteriores descubrieron sus propiedades
antibióticas capaces de curar la enfermedad causada por el
Mycobacterium Tuberculosis.

Hoy en día se considera a la vitamina D un micronutriente que se comporta como vitamina


y hormona, participando en innumerables procesos biológicos del organismo. Gracias a las
investigaciones de los últimos 30 años ha pasado de ser la vitamina que regula el
metabolismo del calcio y el proceso de osificación del esqueleto, a convertirse en un
poderoso anticancerígeno, un magnífico regulador del sistema inmunitario muy útil en las
enfermedades autoinmunes y un eficaz protector de la inflamación y el envejecimiento de
las células. Pero hay que tener en cuenta que muchas de sus asombrosas propiedades se
manifiestan solamente cuando sus niveles en sangre son más altos que los que
normalmente tienen la media de población mundial. También se ha podido correlacionar
sus niveles bajos con un incremento de numerosas enfermedades como por ejemplo el
cáncer o la esclerosis múltiple.
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De acuerdo con un comunicado de prensa emitido en enero de 2013 por Orthomolecular
Medicine en la actualidad hay 33.800 documentos médicos sobre la vitamina D. Los
resultados de estos estudios indican que la vitamina D tiene beneficios de amplio espectro
para la salud en diferentes aparatos y sistemas, como el sistema inmunitario, nervioso,
cardiovascular, endocrino-metabólico, piel, dermatológico y ocular entre otros.

METABOLISMO DE LA VITAMINA D
Existen dos formas iniciales de vitamina D:

- Vitamina D2 o ergocalciferol que es una substancia sintetizada por ciertos


vegetales como algunas setas, a partir de esteroles mediante la acción de la luz solar.
- Vitamina D3 o colecalciferol que es la vitamina sintetizada en la piel por los
queratinocitos de la epidermis que son capaces de transformar una molécula de
colesterol llamada 7-deshidrocolesterol en vitamina D3 gracias a los rayos solares
ultravioleta B (UVB) que tiene longitudes de onda entre 290 y 315 nanómetros y a la
presencia de calor.

Vitamina D3 colecalciferol Vitamina D2 ergocalciferol Calcitriol 1’25 dihidroxicolecalciferol

Ninguna de estas dos formas de vitamina D es biológicamente activa. Para activarse, es


necesario que estas moléculas experimenten un doble proceso de transformación. Primero
atraviesan un proceso enzimático de hidroxilación en el que se le añaden dos tercios de una
molécula de agua transformándose en 25-hidroxicolecalciferol, también llamada calcidiol
o calcifediol o 25-(OH)D o de manera simplificada 25D. Este proceso enzimático de
transformación se realiza en su mayor parte en el hígado y en menor cantidad a nivel de la
piel. A continuación, cuando el organismo tiene necesidad de vitamina D, se encarga de
transformar de nuevo la 25-OHD mediante otro proceso de hidroxilación en 1’25
dihidroxicolecalciferol, también llamada calcitriol o 1’25 (OH)2D o simplificando: 1’25D.
Esta reacción se produce fundamentalmente en el riñón aunque también en otros lugares
como la piel, mucosa intestinal, cartílago, próstata, células del sistema inmunitario y, en
cantidades muy significativas, en la placenta durante el embarazo. De este modo, ya
tenemos una primera conclusión importante: la piel es el único órgano del cuerpo capaz
de realizar todos los pasos metabólicos de la vitamina D, desde su síntesis a partir de la
radiación solar hasta su forma biológica más activa: 1’25D. Una segunda conclusión es que
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muchos son los tejidos capaces de obtener el 1’25D, lo que parece indicarnos la gran necesidad
que tiene el organismo de ella. El exceso de vitamina D3 se almacena en el tejido adiposo, al
que llega transportada por la DBP, (D-Binding Protein: proteína de unión o fijadora de
vitamina D), que es una -globulina sintetizada en el hígado. Esta proteína actúa como
transportadora en la sangre de la vitamina D sintetizada en la piel y de todos sus
metabolitos, aunque el mayor depósito o almacén corporal de la vitamina D es el plasma.
Hay que tener en cuenta que el colecalciferol (D3) es 3 veces más potente que el
ergocalciferol (D2) en el proceso de conversión a calcitriol.

La vitamina D ingerida en la dieta es absorbida junto a las grasas en el duodeno y el íleon.


Para ello necesita la presencia de ácidos biliares para su absorción (como sucede con todas
las substancias grasas o liposolubles), de manera que cualquier alteración en la presencia
intestinal de sales biliares puede disminuir la absorción intestinal de vitamina D, tanto
la que está presente en los alimentos como la que ingerimos en forma de fármaco. Esto
sucede, por ejemplo, en casos de pancreatitis crónica, enfermedad celíaca u obstrucción
biliar que suele ser debida a cálculos (colelitiasis). Una vez absorbida por la mucosa
intestinal, la vitamina D se incorpora a los quilomicrones y circula por vía linfática hacia el
hígado, donde se libera para sus reacciones metabólicas. La vitamina D puede ser también
transportada en las lipoproteínas plasmáticas. El transporte en forma de lipoproteínas o
unido a la DBP depende de su origen: la vitamina D de origen endógeno (piel) se transporta
unida a DBP, mientras que la de origen exógeno se transporta en quilomicrones y
lipoproteínas. El medio de transporte determina entre otras cosas la velocidad con que la
vitamina D es suministrada al hígado, siendo más rápida su captación cuando está unida a
lipoproteínas (origen exógeno).

Con respecto a la inactivación y excreción de la vitamina D hay que tener en cuenta que la
bilis es la principal vía de excreción de sus metabolitos y en cantidades mínimas (menores
del 5%) se excreta por la orina. Los compuestos que inducen hidroxilasas dependientes del
citocromo P-450, como los barbitúricos y los anticonvulsivantes primidona y
difenilhidantoína, provocan un incremento en la degradación y excreción de 25D por vía
biliar. Hay que tener cuidado con el uso prolongado de anticonvulsivantes que puede
generar déficit de vitamina D. Sobre todo hay que tener en cuenta que los barbitúricos
activan también la inducción de la 25-hidroxilasa que incrementa la hidroxilación de la
vitamina D3.

PROPIEDADES Y MECANISMOS DE ACCIÓN


La vitamina D es considerada una hormona más que una vitamina porque se sintetiza en
un tejido y después circula por la sangre para ejercer su acción sobre numerosos tejidos.
Una de las características más importantes del calciferol es su capacidad de adoptar una
gran variedad de formas al tratarse de una molécula muy flexible. Estas distintas
conformaciones le permiten acoplarse a diferentes receptores. Existen varios tipos de
receptores para la vitamina D que son moléculas con las que se acopla para realizar su
abanico de efectos. Una de ellas se ha identificado a nivel de las membranas celulares y se
llama “receptor de membrana de la vitamina D” o RVDmem que son los responsables de las
respuestas biológicas rápidas de esta vitamina.

La vitamina D también ejerce su acción comportándose como un interruptor génico que


enciende o apaga, activa o desactiva ciertos genes. Esta acción la realiza uniéndose a un
factor transcripcional llamado “receptor nuclear de la vitamina D” o RVDnucl que es una proteína
situada en el núcleo celular y que pertenece a un grupo o familia de factores de transcripción
llamados receptores nucleares que responden a la acción de hormonas como los estrógenos
y la testosterona. Esa capacidad para ejercer una acción sobre el ADN de las células
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generando o deteniendo determinadas funciones celulares convierte a la vitamina D en un


asombroso regulador de, al menos, 1.000 genes diferentes descubiertos hasta la fecha.
De ahí se derivan sus múltiples propiedades.

Existen diferentes tipos celulares que son sensibles a los efectos de la vitamina D. Entre ellos
tenemos los siguientes: células de hueso, riñón, intestino, hígado, páncreas,
paratiroides, mama, próstata, sistema inmunitario, tejido graso, piel, nervios y
cerebro. Todas estas células son sensibles a los efectos de la vitamina D, por lo que puede
ser de importancia para restaurar la salud en estos órganos y sistemas.

Veamos los mecanismos de acción y las funciones más importantes entre las conocidas
hasta la fecha:

Metabolismo mineral del calcio


La vitamina D3 interviene de manera activa en el mantenimiento de una homeostasis o
equilibrio con niveles adecuados en la concentración de calcio circulante en sangre.
Esto lo realiza actuando sobre la absorción intestinal de calcio, sobre la formación y
degradación del hueso y sobre la excreción renal de calcio. Estas tres acciones las lleva a
cabo conjuntamente con dos hormonas fundamentales en el metabolismo del calcio:
la parathormona (PTH) y la calcitonina. La primera se sintetiza en la glándula paratiroides
y se encarga de extraer calcio del hueso cuando se necesita en la sangre y la segunda se
sintetiza en el tiroides encargándose de la función contraria, almacenando calcio en el
hueso.

Cuando disminuye la concentración sérica de calcio se estimula la liberación de PTH, que a


su vez estimula la síntesis de calcitriol. Ambas substancias estimulan la reabsorción renal de
calcio (evitando que se elimine por la orina) y la movilización de calcio del hueso (resorción
ósea) para que pase a la sangre que es donde se necesita. Cuando aumentan los niveles
séricos de calcio, se produce la inhibición de la secreción de la PTH, disminuyendo como
consecuencia la síntesis de calcitriol y la movilización de calcio. Además de esto, cuando los
niveles plasmáticos de calcio suben por encima de lo normal, las células C del tiroides
secretan la hormona calcitonina que bloquea la movilización de calcio del hueso permitiendo
que vuelvan a la normalidad los niveles de calcio en sangre.

Podemos resumir sus efectos globales sobre los niveles de calcio en el siguiente esquema:

Equilibrio
mineral METABOLISMO DEL
CALCIO

INTESTINO HUESO RIÑÓN


la formación de hueso
la absorción de y  la resorción de
la excreción de calcio
calcio hueso liberando calcio a
sangre
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Estas acciones de la vitamina D son conocidas desde hace tiempo y forma parte del uso más
frecuente que se ha hecho de esta substancia a nivel terapéutico: osteomalacia (déficit de
mineralización ósea), raquitismo (es la osteomalacia cuando se produce en niños),
osteoporosis (densidad ósea disminuida) etc. En general se emplea para todo tipo de
enfermedades que precisan de un aumento de la concentración de calcio en sangre y
su correspondiente fijación al hueso. Pero ahora vamos a estudiar acciones menos
conocidas de la vitamina D3 que son las que se han ido descubriendo sobre todo en los
últimos treinta años.

Propiedades antiinfecciosas
Se ha comprobado que el calcitriol es capaz de inducir la diferenciación de monocitos a
macrófagos quienes constituyen la primera línea de defensa inespecífica del sistema
inmune, incrementando la fagocitosis y la producción de enzimas lisosómicas capaces de
destruir diferentes microorganismos. Se ha observado que los macrófagos tienen la
capacidad de sintetizar calcitriol a partir de 25D.

Existen datos epidemiológicos que señalan una correlación entre la deficiencia de vitamina
D y un mayor riesgo de infección. Estos estudios indican que la incidencia y la prevalencia de
enfermedades respiratorias en niños con raquitismo nutricional son mayores.

Existen muchos genes que regula la vitamina D que son capaces de sintetizar hasta 200
péptidos diferentes. Entre ellos hay dos que codifican proteínas con propiedades
antimicrobianas muy interesantes. Estas proteínas son la catelicidina y la defensina beta
2 que son dos antibióticos de amplio espectro que son activos sobre bacterias, hongos e
incluso virus. Gracias a estos hallazgos hoy podemos comprender la eficacia de la
helioterapia (baños de sol) en el tratamiento de enfermedades infecciosas como la
tuberculosis, una terapéutica eficaz que va más allá de los efectos fisiológicos de la
relajación y el efecto placebo con el que se trataba a estos enfermos en balneoterapia.

También se ha demostrado la eficacia de la vitamina D para el tratamiento de procesos


virales como el catarro común y la gripe.

Propiedades antiinflamatorias
Uno de los descubrimientos más revolucionarios sobre la vitamina D es su acción sobre la
inflamación que es uno de los factores causales más importantes en la génesis de las
enfermedades más frecuentes de nuestro tiempo, como las afecciones cardiovasculares,
enfermedades neurodegenerativas y el cáncer. Se ha visto que estas enfermedades
disminuyen en los pacientes con niveles de vitamina D alta. Se han realizado estudios que
relacionan la protección de la vitamina D frente a las inflamaciones agudas y crónicas. Se ha
comprobado que los niveles de vitamina D tienen un fuerte impacto sobre la inflamación y
la respuesta inmune, disminuyendo los marcadores inflamatorios como la IL-2 y FNT alfa.

Por otro lado, se ha observado que el calcitriol tiene efectos moduladores sobre el sistema
inmune. El calcitriol es capaz de regular la respuesta inmune tanto en órganos linfoides
secundarios como en tejidos diana mediante varios mecanismos mediante la inhibición de
diferentes mediadores inflamatorios en casos de respuesta exagerada. Debido a esto
se han realizado estudios clínicos para el tratamiento de diferentes enfermedades
autoinmunes.

La vitamina D se ha demostrado activa en ciertas enfermedades autoinmunes como la


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encefalomielitis autoinmune, artritis reumática, lupus eritematosos sistémico, diabetes tipo


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1, enfermedad inflamatoria intestinal, esclerosis múltiple y otras. La vitamina D estimula la
transformación del factor de crecimiento (TGF beta-1) y la producción de la interleukina Il-4.

Artritis reumatoide
Varios estudios indican que existe una evidente correlación entre el padecimiento de artritis
reumatoide, la gravedad de la enfermedad y los niveles bajos de vitamina D. Además,
estudios clínicos demuestran que la administración de 2 μg/día de vitamina D a pacientes
afectados de artritis reumatoide es capaz de aliviar el dolor y de producir una disminución
significativa de los niveles séricos de proteína C reactiva, un marcador inflamatorio.

El aumento de la suplementación de vitamina D se asocia con disminución de riesgo de


artritis reumatoide, según un estudio realizado con 41.838 pacientes de edad entre 55 a 69
años. También se ha podido constatar que la vitamina D tiene actividad inmunológica,
inmunosupresiva en experimentos de laboratorio.

Enfermedad inflamatoria intestinal


La enfermedad inflamatoria intestinal es otro proceso inflamatorio que ha sido relacionado
con niveles bajos de vitamina D. De hecho se ha observado que los pacientes afectados por
esta enfermedad no sólo poseen niveles más bajos de vitamina D sino que la cantidad de
ella disponible puede ser un factor importante en el desarrollo de la enfermedad. En
estudios recientes, se ha descrito que el receptor de la vitamina D podría tener un papel
crucial en la regulación de la inflamación en el tracto gastrointestinal y concretamente en la
enfermedad inflamatoria intestinal.

Enfermedad de Crohn
Hay investigaciones que han asociado los niveles bajos de vitamina D con un mayor riesgo
de la enfermedad de Crohn observando que la corrección de la deficiencia en vitamina D es
capaz de mejorar los síntomas de la enfermedad. Uno de los estudios más recientes
encontró una “interacción significativa entre los niveles de vitamina D y susceptibilidad de la
enfermedad de Crohn, así como también una asociación significativa entre los niveles de vitamina
D y el genotipo “. Parece que la vitamina D puede afectar la expresión genética asociada con
la enfermedad de Crohn, mejorando o empeorando el cuadro, dependiendo de los niveles
de vitamina D en sangre.

Esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple es una enfermedad en la que se produce una desmielinización
(pérdida de sustancia blanca) del sistema nervioso central que parece estar causada por
procesos autoinmunes mediados por los linfocitos T. Se ha observado que la prevalencia de
esta enfermedad es prácticamente nula en zonas cercanas al ecuador y manifiesta un
gradiente de prevalencia norte-sur. Por otra parte, varios estudios indican que en gran parte
de los pacientes afectados los niveles de vitamina D son insuficientes.

Un estudio con enfermos de esclerosis múltiple ha demostrado que la suplementación con


calcio, magnesio y vitamina D (125 μg/día) durante 1-2 años fue capaz de reducir la incidencia
de recaídas con respecto a las cifras esperadas. Varios estudios han demostrado que los
efectos beneficiosos de la vitamina D en la esclerosis múltiple pueden ser debidos a la
inhibición de las células Th1 (inflamatorias), a la inhibición de la producción de citokinas
inflamatorias por macrófagos activados, a un incremento de la producción de citokinas
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antiinflamatorias y a la acción antiproliferativa en linfocitos mediante la expresión del


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VDRnuc1,25.
Los niveles de vitamina D disminuidos en esta enfermedad parecen estar relacionados con
la evolución en brotes de la esclerosis múltiple a lo largo del año en función de los aumentos
y disminuciones de la radiación solar.

Se ha realizado un estudio con 187.563 pacientes en el que se ha constatado que la toma de


vitamina D se asocia con disminución de riesgo de esclerosis. Se introdujo un suplemento
de 400 UI día observando que disminuía un 40% el riesgo de esclerosis múltiple. (Kassandra
Munger, Harvard School of Public Health in Boston, publicado el 13 enero 2004. en la revista
Neurology).

Cáncer
Uno de los campos de investigación más prometedores de la vitamina D es en el ámbito del
tratamiento y prevención del cáncer. Se han realizado múltiples estudios en diferentes tipos
de cáncer con resultados muy prometedores.

La vitamina D es antiproliferativa, promueve la maduración celular, e induce tanto la


diferenciación (el retorno de las células cancerosas a su estado previo en los tejidos,
desempeñando sus funciones naturales) como la apoptosis (el suicidio de las células
cancerosas) en diferentes líneas celulares, incluyendo líneas cancerosas. El papel de la
vitamina D en estas células puede ejercerse mediante su unión al VDR nuc1,25. De hecho, se ha
demostrado la presencia de VDRnuc1,25 en células de la glándula mamaria, el colon, la próstata
y el sistema nervioso central. Por otra parte, se ha descrito que estas células también
expresan 25(OH) vitamina D3 1α-hidroxilasa, lo que podría indicar que pueden producir
localmente calcitriol con el fin de regular su diferenciación, proliferación y muerte celular
programada. Por tanto, en los últimos años se ha hecho patente que la vitamina D juega un
papel importante en el crecimiento y en la diferenciación celular, y que podría proteger
frente al inicio y la progresión del cáncer.

Hay evidencias de que la exposición a la luz solar se asocia con una baja tasa de
mortalidad por cáncer de mama, colon y próstata, mientras que la distribución
geográfica del raquitismo coincide con la de muertes por cáncer. Además, en varios
estudios se ha correlacionado bajas ingestas de vitamina D y niveles séricos bajos de 25D
con un incremento en el riesgo de padecer cáncer de mama, próstata, colon y colorrectal.
La agresividad del cáncer puede también estar relacionada con los niveles séricos de
vitamina D; de hecho, las concentraciones séricas bajas de vitamina D se han relacionado
con una mayor agresividad del cáncer de próstata y de mama.

A nivel molecular, varios estudios genéticos han identificado alelos específicos del VDR que
se correlacionan con un incremento del riesgo de cáncer de mama esporádico y con la
agresividad de las metástasis. Estudios similares han relacionado alelos específicos con el
cáncer de próstata y colon. Los efectos específicos del calcitriol sobre las células de cáncer
de mama, leucemia mieloide y tumores del sistema nervioso central han sido estudiados
principalmente en modelos animales y celulares. Entre ellos, se incluyen la inhibición del
crecimiento mediante la modulación de la maquinaria del ciclo celular, y la consiguiente
detención de las células en la fase Go/G1, y la disrupción de la función mitocondrial con el
fin de inducir muerte celular por apoptosis.

Además, se ha demostrado que el calcitriol puede suprimir la tumorogénesis mamaria.


En cuanto a los estudios clínicos, se ha descrito la efectividad del calcitriol en el tratamiento
de glioblastomas en un estudio clínico de fase II. Otro estudio ha demostrado que la
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proliferación de las células del colon de pacientes con riesgo de neoplasia de colon puede
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ser reducida con la administración de grandes dosis de 25(OH) vitamina D3.


Se ha observado que existe una enzima sobreexpresada en el cáncer de pulmón que
destruye a la vitamina D. La inhibición de dicha enzima aumenta la potencia y actividad de
la vitamina D capaz de suprimir el crecimiento tumoral. Niveles elevados de vitamina D
generan proteínas anticáncer, pero los cánceres con sobreexpresión de la enzima CyP24
contrarrestan los efectos positivos de la vitamina D (Pamela Hershberger et al., Universidad
de Pittsburgh Cancer Institute).

En una publicación denominada Informe Mundial de Ciencias llama la atención la


recomendación de un cirujano británico especializado en cáncer de mama, el profesor
Kefah Mokbel, que sugiere a las mujeres tomar suplementos diarios de vitamina D3 para
reducir su riesgo de cáncer de mama. Según cita el artículo: “El prof. Mokbel también ha
solicitado a Jeremy Hunt, secretario de Salud, que las personas tengan libre a acceso a las
pastillas de [vitamina D], ya que esto ayudará a salvar unas 1.000 vidas al año. “Hago un
llamamiento en nombre de todas las mujeres a partir de los 20 años de edad para que se les
suministre suplementos de vitamina D gratuitos en el Servicio Nacional de Salud (NHS), ya que es
eficaz en la protección contra el cáncer de mama”, dijo el profesor Mokbel.”

Una Investigación realizada por la Escuela Universitaria de Medicina de Creighton en Omaha


que analizó a mujeres menopáusicas del área rural de Nebraska durante más de cuatro
años, reveló que tomar suplementos de vitamina D junto con calcio disminuye alrededor del
60% el riesgo de cáncer, incluyendo cáncer de mama, de pulmón y de colon… “No es caro,
es seguro, y es fácil de tomar. Es algo que debe ser considerado por mucha gente”, dice Joan
Lappe, profesora de enfermería y medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad de
Creighton en Omaha, Nebraska. “Es algo de bajo riesgo que probablemente le
proporcionará una alta rentabilidad.”

De hecho, un número cada vez mayor de estudios muestran que la vitamina D tiene enormes
efectos protectores contra una variedad de diferentes tipos de cáncer, incluyendo el de
pulmón, ovario, mama, próstata, páncreas, colon, esófago, riñón, cerebro, vejiga y
piel. Las teorías que vinculan la deficiencia de vitamina D con el cáncer han sido probadas y
confirmadas en más de 200 estudios epidemiológicos, y la comprensión de su base
fisiológica proviene de más de 2.500 ensayos de laboratorio.

Por ejemplo, un estudio en 2007 publicado en el American Journal of Preventive Medicine llegó
a la conclusión de que un nivel de suero de 25D de más de 33 ng/ml se asoció con un riesgo
del 50% menor de cáncer colorrectal. Y una investigación publicada en el International Journal
of Cancer, hace dos años encontró que un discreto aumento de 10 ng/ml en los niveles
séricos de vitamina D se relacionó con una reducción del 15% en la incidencia de cáncer
colorrectal y una reducción del 11% en la incidencia de cáncer de mama.

Otro estudio de 2007 publicado en American Journal of Clinical Nutrition descubrió que
después de cuatro años de seguimiento, la supervivencia de cáncer fue del 77% mayor en
las mujeres que recibieron 1.100 UI de vitamina D y 1,450 mg de calcio por día, en
comparación con los que recibieron ya sea un placebo o calcio por sí solos. Según Carole
Baggerly, fundadora de GrassrootsHealth, prácticamente un 90% del cáncer de mama
normal podría estar relacionado con la deficiencia de vitamina D. Incluso el cáncer de mama
ha sido descrito como “síndrome de deficiencia de vitamina D”, al igual que la gripe y la
temporada de catarros invernales.

En un estudio Norteamericano se estima que cada año pueden morir entre 50.000 a 70.000
norteamericanos por toma insuficiente de vitamina D (Grant WB, Holick MF “benefits and
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requirement of vitamin D for optimal health:a review”. Altern Med rev, 2005, jun 10[2]). La
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disminución de los niveles de vitamina D se relaciona con aparición de cáncer, así como su
agresividad y disminución de la supervivencia (Schwartz GG, et al. 2007). La toma de 1.000-
2.000 UI día de vitamina D reduce la incidencia de cáncer colorrectal en más del 50%. La
vitamina D regula de forma específica el colon, previniendo al cáncer. Reduce la proliferación
directa del coloncito. (Colon –specific regulation of vitamin D hydroxylases- a posible novel
approaches for colon cáncer prevention”. Kallay et al. Carcinogenesis, 2005, 26(9).)

La toma de vitamina D en los pacientes con cáncer de próstata avanzado disminuye el


riesgo de trombosis que suele afectr a un 15-20% de los pacientes con cáncer. 250 pacientes
con cáncer de próstata avanzado recibieron tratamiento de quimioterapia con Docetaxel y
placebo o vitamina D3 en altas dosis. Aquellos que tomaron la vitamina D3 obtuvieron mayor
supervivencia, con una disminución de efectos secundarios de la quimioterapia, y
disminución de trombosis venosa y arterial. (Perter Venner. Alberta Cancer Board´s Cross
Cancer Institute; Annual meeting of the American Society of Clinical Oncology, Atlanta; 2 de
junio 2006). También se ha visto que la vitamina D potencia el efecto de la medicación
quimioterápica utilizada en el cáncer de próstata. El estudio se realizó con 250 hombres a
doble ciego, randomizado con cáncer de próstata andrógeno-independiente (Christopher
Ryan, 41 annual meeting of the American Society for Clinical Oncologist, 15 mayo 2005).

Un estudio indica que para la prevención de cáncer de mama se requieren 4.000 UI día,
de vitamina D, lo que supera al doble las recomendaciones de la Academia Nacional de las
Ciencias USA, que recomienda 2.000 UI día. El estudio se realizó observando que era
necesaria la cantidad de 52 μg/ml de vitamina D como protector de cáncer de mama,
y que esta cantidad se obtenía tomando 4.000 UI al día de vitamina D, y que estos niveles
podrían mantenerse tomando 2.000 UI al día más 15 minutos de sol diarios. (Garland
CF, Gorham ED et al. The journal of Steroid Biochemistry ans Molecular Biology; 2007).

Diferentes estudios indican que la toma de suplementos de vitamina D puede reducir el


riesgo de cáncer de mama en mujeres posmenopáusicas. Uno de ellos se realizó con
1.394 mujeres con cáncer de mama y 1.365 controles. (Abbas S, linseisen j et al. “Serum 25
hydroxyvitamin D and risk of postmenopausal breast cancer-results of a large case control
study”. Carcinogenessis, 2007 oct 31). Otro fue realizado con 289 mujeres premenopáusicas
con cáncer de mama y 595 control sanas, existiendo una asociación inversa entre el riesgo
de cáncer de mama y la concentración en plasma de 25D (Abbas S, Chang-Claude j, et al.
“Plasma 25-hydroxyvitamin D and premenopausal breast cancer risk in a german case
control study”. Int j Cancer, 2008, oct 6). También se han realizado estudios que indican que
la toma de vitamina D protege contra el cáncer de mama en las mujeres premenopáusicas.
(Jennifer lin et al., Archives of Internal Medicine, 28 de mayo 2007).

Los niveles de vitamina D predicen el éxito de la cirugía en cáncer de pulmón. El estudio se


realizó sobre 456 pacientes operados de cáncer de células grandes y los niveles de vitamina
D. Se observó que los pacientes que tenían niveles elevados tienen una supervivencia
de vida 3 veces mayor que los que no tenían niveles adecuados de vitamina D (Prof David
Christiani, 96th Annual Meeting of the American Association for Cancer Research, Anaheim,
California, 2005).

Componentes de la vitamina D pueden ayudar a la prevención del cáncer de próstata. El


estudio fue realizado con el calcitriol y otros análogos de la vitamina D. Se observó que el
calcitriol es capaz de inhibir el crecimiento celular, inhibir la síntesis de ADN, favoreciendo la
detención del ciclo celular. Tienen efecto en el cáncer de próstata andrógeno dependiente.
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(Dra. Barbara A Foster, del Roswel Park Cáncer Institute. Noviembre 2005.) En enero del
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2006, en la revista Carcinogénesis, el Dr. Lee, de la Universidad de Rochester Medical Center


informa que la vitamina D ayuda y previene la propagación del cáncer de próstata, limitado
la actividad de dos enzimas. La vitamina D3 modula genes identificados en las células
tumorales de próstata. Los genes relacionados con los receptores de la vitamina D3
inducen apoptosis en el carcinoma de próstata. (Guzey et al., 2004). La vitamina D tiene
efectos terapéuticos en pacientes con cancer de próstata y aumento de PSA postratamiento
(Woo et al., Nutr Cancer, 2005; 51[1]).

La vitamina D tiene efectos antiangiogénesis, al inhibir el factor interleukina 8 que estimula


la angiogénesis. El calcitriol inhibe la señal NF-kappa B, uno de los más importantes
reguladores de la interleukina 8 (Bao et al., 2006).

En Journal of the Nacional Cáncer Institute, 5 de abril, 2006, el Dr. Edward Giovannucci publicó
un informe en el que se observó que un aumento de los niveles de vitamina D a 25
nanomoles/litro reducía el riesgo de incidencia de cáncer en un 17%, a un 29% de reducción
de mortalidad por cáncer, y a un 45% de disminución de mortalidad en cáncer digestivo.

En el año 1998, un grupo de investigadores japoneses correlacionaron que los pacientes que
vivían en latitudes más al norte con menos sol y menos vitamina D, tenían más muertes por
cáncer de páncreas que los vivían más al sur. La insuficiencia de vitamina D se relaciona
con cáncer de páncreas y la toma de vitamina D frena la progresión del cáncer de
páncreas. La toma de 400 UI de vitamina D disminuye en un 43% el riesgo de cáncer de
páncreas (Alcyon Skinner, Cáncer Epidemiology Biomarkers and Prevention, sep 2006).

La vitamina D tiene acción antimetástasis. Se estudiaron los efectos de la vitamina D3


sobre ciertas proteasas relacionadas con la invasión del tumor: metaloproteinasas,
activadores del plasminógeno y catepsinas. La vitamina D disminuye la actividad de la
metaloproteinasa 9 y de las catepsinas. Al mismo tiempo se observó que la vitamina E
potencia los efectos de la vitamina D frente al cáncer. (Carcinogenesis, enero 2006,
Universidad de Rochester Medical Center).

El aumento de la RDA (Dosis Diaria Recomendada) de la cantidad de vitamina D de 400


UI a 1.500 UI puede disminuir las muertes por cáncer en un 30%. Un aumento de 25
nanomoles de 25D se asocia a una disminución del 17% de incidencia total de cáncer y a un
29% de disminución de la mortalidad, y una disminución del 45% de la mortalidad de cáncer
del sistema digestivo. (Giovannucci, journal Of The National Cancer Institute, abril 2006).

Enfermedad cardiovascular
Se han realizado múltiples estudios en los que se ha observado una protección significativa
de los niveles altos de vitamina D en las siguientes patologías:

- Enfermedad cardiaca isquémica por enfermedad coronaria (angina e infarto de


miocardio).
- Insuficiencia cardíaca congestiva.
- Enfermedad arterial periférica acompañada de trombosis.
- Disminución de lesiones ateroscleróticas con depósitos de calcio en las arterias.
- Síndrome metabólico.
- Fallo cardiaco y muerte súbita cardiaca.
- Prevención de la hipertrofia cardiaca.
- Reducción del riesgo de enfermedad cardiovascular en sujetos obesos o con
sobrepeso.
10
Página
Hipertensión arterial
El sistema renina-angiotensina juega un papel esencial en la regulación de la presión
sanguínea. Se ha observado que el calcitriol es un potente inhibidor de la expresión
génica de la renina que es un activador fundamental de la tensión arterial. Varios
estudios clínicos y epidemiológicos han sugerido una relación inversa entre la vitamina D, la
presión sanguínea y la actividad de la renina plasmática. Efectivamente, se ha demostrado
tanto en pacientes normotensos como hipertensos que los niveles séricos de vitamina D
están inversamente asociados con la presión sanguínea y la actividad de la renina
plasmática. Además, en estudios clínicos se ha descrito que la vitamina D reduce la presión
sanguínea en ancianos hipertensos, demostrándose que el tratamiento con calcitriol reduce
la actividad de la renina plasmática, los niveles de angiotensina II, la presión
sanguínea y la hipertrofia del miocardio.

Sistema nervioso
Los efectos de la vitamina D sobre el sistema nervioso siguen impresionando a los
investigadores. Se sabe que el calcitriol puede sintetizarse en el cerebro, ya que se ha
demostrado la existencia de los enzimas y diferentes metabolitos de vitamina D en este
órgano. Además, tanto en el cerebro como en la médula espinal existe VDRmem1,25 por lo
que tanto las células de la glía, como las neuronas y los astrocitos podrían ser una
diana importante para el calcitriol.

La vitamina D podría tener efectos neuroprotectores en el sistema nervioso. Los


mecanismos descritos que avalan este efecto son, al menos, los siguientes:

1) Se ha demostrado que el calcitriol induce la muerte y/o rediferenciación de células del


glioma. Por tanto, su síntesis por células activadas de la microglia y neuronas, podría
constituir una respuesta antitumoral del sistema nervioso central. Esta respuesta parece
estar regulada por astrocitos.

2) Se ha demostrado que el calcitriol induce en astrocitos la síntesis de varias neutrofinas


como la NF3, el factor neutrófico derivado de la línea celular glial (GDNF) y factor de
crecimiento de nervios (NGF). Todos estos factores son capaces de ejercer efectos
neuroprotectores.

3) El calcitriol inhibe la síntesis de iNOS. Sabemos que los niveles elevados de óxido nítrico
son tóxicos tanto para las neuronas como para los oligodendrocitos. Además, el óxido nítrico
puede reaccionar con otras moléculas, produciendo radicales libres que resultan nocivos.
Por otra parte, la γ-glutamil transferasa, cuya síntesis por los astrocitos es inducida por el
calcitriol, podría prevenir la formación de radicales reactivos del nitrógenos y del oxígeno. El
VDRmem1,25 presente en el sistema nervioso, y por tanto la vitamina D, podría tener un papel
importante en la regulación de la neuro-ontogénesis.

Se ha observado que la vitamina D reduce el riesgo de esquizofrenia en aproximadamente


un un 25%. También se ha constatado que la vitamina D puede reducir el síndrome
depresivo que suele reducirse naturalmente durante los meses de verano. Los enfermos
depresivos que toman 4.000 UI diarias de vitamina D durante un año reducen las
depresiones invernales.

La vitamina D es necesaria para una óptima función cerebral uno de los indicadores de su
11

importancia es el elevado número de receptores existentes a nivel cerebral. El déficit de


vitamina D se asocia con empeoramiento de la capacidad cognitiva y deterioro del
Página

estado de ánimo. Hay estudios realizados con enfermos de Alzheimer en los que se ha
visto que el déficit de vitamina D se asocia con una disminución del humor y de la capacidad
cognitiva en un 58%, adicionalmente el déficit de vitamina D se relaciona con aumento de
demencia (Wilkins CH, Sheline yI et al. “Vitamin D deficiency is associated with low mood and
worse cognitive performance in older adults”. Am. j. Geriatr. Psychiatry, 2006; 14[12]).

También se ha comprobado cómo la suplementación de vitamina D beneficia a los niños


epilépticos con toma de medicación antiepiléptica. Estudio realizado con 38 niños con
epilepsia y en tratamiento antiepiléptico, y 44 niños control. Más del 75% de los niños
epilépticos padecían un déficit de vitamina D3 (25hidroxivitamina D) y un 25% de los sujetos
tenían los niveles de vitamina D normal baja o insuficiente. (Nettekoven S, Hahn A et al.
“Effects of antiepileptic drug therapy on vitamin D status and biochemical markers of bone
turnover oin children with epilepsy”. Eur j Pediatr, 2008, 167[12]).

Niveles elevados de vitamina D se asocian con una aceleración en la velocidad de


procesamiento cerebral según un estudio realizado con 3.369 hombres de edad entre 40 a
79 años de 8 centros participantes en el European Male Aging Study (EMAS). Los mecanismos
todavía son desconocidos, aunque se sabe que aumenta la actividad de acetiltransferasa
colina en el cerebro lo que podría explicar en parte sus efectos neuroprotectores. Se sabe
que la paratiroides y el calcio pueden estar afectados por el déficit de la vitamina D y que
están relacionados con la función cognitiva. Además, se sabe que niveles disminuidos de
vitamina D están asociados con depresión (David M lee, Universidad de Manchester, journal
of Neurology, Neurosurgery and Psychiatry, 21 mayo 2009).

También en la depresión y el dolor se han constatado efectos muy significativos. Se han


realizado estudios en mujeres diabéticas en los que se ha observado que suplementos de
vitamina D reducen la depresión y el dolor. Según el informe de PsychCentral 4 james: “Los
investigadores se propusieron determinar cómo los suplementos de vitamina D pueden afectar a
las mujeres con diabetes tipo 2 quienes también sufrían de depresión. Al inicio del estudio, el 61
por ciento de las mujeres reportaron dolor neuropático, como punzadas o ardor en las piernas y
los pies, y el 74 por ciento tuvo dolor sensorial, como entumecimiento y hormigueo en las manos,
los dedos y las piernas… Los participantes que sufrían de dolor neuropático y/o sensorial al inicio
del estudio informaron que estos síntomas disminuyeron en 3 y 6 meses después de tomar el
suplemento de vitamina D2”. Según el investigador Todd Doyle, Ph.D., la suplementación de
vitamina D “es un tratamiento prometedor para el dolor y la depresión en las personas
con diabetes tipo 2.”

Diabetes
Se ha observado que la vitamina D previene la resistencia a la insulina y la diabetes tipo
II: en un estudio se analiza la relación de los niveles de vitamina D y la sensibilidad insulina
en un grupo de adultos con tolerancia a la glucosa normal, y aquellos que tenían la vitamina
D disminuida eran más propensos a desarrollar síntomas de una diabetes tipo II, incluyendo
alteraciones pancreáticas y aumento de resistencia a la insulina.

Las mujeres diabéticas tienen habitualmente menos vitamina D que las no diabéticas. Un
60% de los pacientes con diabetes tipo II tiene un déficit de vitamina D3. La vitamina D
(1,25D) protege los islotes pancreáticos contra la apoptosis, previniendo la diabetes
tipo I. Las propiedades inmunomoduladoras de la vitamina D son capaces de prevenir el
desarrollo de la diabetes insulino-dependiente tipo I. Su eficiencia contra la apoptosis
inducida por las citoquinas en los islotes pancreáticos humanos parece estar mediado por
12

inactivación del FN-Kappa-B (Riachy et al., 2006).


Página

Existe una relación inversa entre la cantidad de vitamina D y la resistencia a la insulina,


así como prevalencia del síndrome metabólico (Ford ES, Ajan UA, et al. “Concentrations
of serum vitamin D and the metabolic síndrome among US adults”. Diabetes care. May
2005;28.) La suplementación de vitamina D mejora la sensibilidad insulínica posprandial.
Existe una relación positiva entre los niveles de vitamina D y la sensibilidad insulínica y una
correlación negativa entre la hipovitaminosis D y la función de las células beta, lo que sugiere
que la disminución de vitamina D aumenta el riesgo de resistencia insulínica y el síndrome
metabólico. Estudio realizado con 73 mujeres y 53 hombres de edad media 26 años en salud
(Chiu KC, Chu A et al. Am j Clin Nutr, 2004, 79).En un estudio randomizado, doble ciego,
control placebo sobre 71 sujetos sanos de edad media y hombres con obesidad central se
observó que aumenta la sensibilidad a la insulina en los sujetos que padecen resistencia
insulínica. (Nagpal j, Bhartia A et al. “A double blind, randomized, placebo controlled trial of
the short term effect of vitamin D3 supplementation on insulin sensitivity in apparently
healthy, midle aged, cental obese men”. Diabet Med, 2009; 26[1]).

También se ha visto que una dosis simple elevada de vitamina D mejora la función
endotelial en los diabéticos. El estudio se realizó con 34 pacientes de edad media 64 años,
con diabetes tipo 2 y bajos niveles de 25D en suero. Se ha observado que la toma de vitamina
D2 produce una mejoría del flujo relacionado con la dilatación de la arteria braquial (Sugden
jA, Davies jI, et al. “Vitamin D improves endotelial function in patients with type 2 diabetes
mellitus and low vitamin D levels”. Diabet Med, 2008, feb 13).

También se ha observado una gran disminución de riesgo de diabetes tipo I en niños


finlandeses nacidos en 1960 y que recibieron una megadosis de vitamina D. Un
metaanálisis de 5 estudios previos relaciona la toma de vitamina D y la disminución de riesgo
de diabetes tipo 1 con la toma de altas dosis de vitamina D, 2.000 UI (Pacific Nortwest
Diabetes Research Institute). Los niños que son suplementados con vitamina D tienen
menos riesgo de desarrollar una diabetes según un metaanálisis elaborado con 6.455 niños.
Cuando recibieron suplementos de vitamina D obtuvieron una disminución del 29% de
riesgo de padecer la diabetes tipo I. La suplementación de vitamina D tiene un efecto
protector frente a la diabetes tipo 1 según se desprende de un estudio realizado con
más de 12.000 mujeres finlandesas embarazadas en el que se analizó la relación entre
las cantidades de vitamina D y la diabetes en sus niños. Otro estudio indica que al cabo
de un año, los niños que tuvieron un suplemento de vitamina D de 2.000 UI/día tenían
mucho menor riesgo de padecer una diabetes tipo 1 que los niños no suplementados
(Hypponen E, laara R et al. “Intake of vitamin D and risk of type 1 diabetes: a birth cohort
study”. Lancet, 2001, nov 3; 358[9292]).

La vitamina D ayuda a disminuir el dolor en los pacientes diabéticos con neuropatía,


según el estudio realizado con 51 diabéticos tipo 2, con neuropatía. Se pudo observar que la
toma de vitamina D durante 3 meses disminuye el dolor, reduciendo en un 48´5% el dolor.
La vitamina D favorece el crecimiento del nervio y modula la función neuromuscular y
crecimiento y diferenciación neuronal (Paul lee, and Roger Chen, Archives of Internal
Medicine, 14 abril 2008).

Además de esto, la vitamina D tiene propiedades antiinflamatorias de las encías,


protegiendo de la gingivitis. Se realizó un estudio sobre 6.700 personas, y se observó una
relación entre quienes tenían baja la tasa de vitamina D y la inflamación gingival. (Dietrich T,
Nunn M, 2005). Otro estudio confirma que el aporte suplementario de vitamina D disminuye
el riesgo de gingivitis. (Dietrich T, Nunn M et al. “Association between serum concentrations
of 25 hydroxyvitamin D and gingival inflammation “Am J Clin Nutr, 2005, sep 82(3)
13

El aporte suplementario de vitamina D también protege a las infecciones de la piel y


Página

la dermatitis atópica. El estudio realizado con 14 sujetos con dermatitis atópica y 14


participantes sin patología. Se administraron 4.000 UI día de vitamina D durante 21 días de
tratamiento. En la piel de los sujetos que tomaron vitamina D se produjo un aumento la
síntesis del péptido catelicidina que ayuda a proteger la piel contra infecciones bacterianas.
la reducción de los niveles de catelicidina se relaciona con infecciones en la piel y eczemas
(Richard Gallo, Tissa R Hata, et al. journal of Allergy and Clinical Immunology, octubre 2008).

La vitamina D es beneficiosa para la piel, con efectos preventivos y curativos para diversas
dermatitis seborreica, psoriasis, queratosis actínica y
enfermedades como
fotoenvejecimiento. (Nagpal S, Na S, et al. “Noncalcemic actions of vitamin D receptor
ligands”. Endocr Rev, 2005; aug 26[5]). También se ha visto que supone una ayuda eficaz
contra la psoriasis. (Lehmann B “The vitamina D3 pathway in human skin and its role for
regulation of biological processes”. Photochem Photobiol 2005; feb 1 y Wolters M “Diet and
psoriasis:experimental data and clinical evidence”. Br j dermatol, 2005; oct 153[4]).

Asma
Se ha constatado que la toma de vitamina D puede ayudar a los pacientes con asma,
potenciando la acción de los esteroides que inducen la síntesis de Il-10, una molécula
señal que inhibe la respuesta inmune que provoca alergia. (Catherine Hawrylowicz, journal
of Clinical Investigation, 8 de diciembre 2005).

La ingesta de vitamina D puede llegar a disminuir en un 40% el riesgo de asma en los


niños, así como la toma de vitamina D en mujeres embarazadas disminuye en un 40% el
riesgo de asma en niños de 3-4 años de edad. Es posible que bajos niveles de vitamina D
puedan afectar al desarrollo de los pulmones del feto y del sistema inmune
(Universidad de Harvard, noviembre 2007).

Niveles elevados de vitamina D se correlacionan con mejoría de la función pulmonar,


según resultados de un estudio comparativo realizado en individuos con niveles bajos de
vitamina D. El estudio se realizó en los EE. UU. Entre 1988 y 1994, con 14.091 hombres y
mujeres, midiendo los niveles de 25D. Aquellos que tenían niveles elevados de vitamina D
obtenían mejores resultados en las pruebas espirometría que aquellos que tenían los niveles
bajos. (Peter Black, Chest, december, 2005). También se ha visto que la suplementación de
vitamina D3 mejora la respuesta al asma en pacientes que toman corticosteroides
(Journal of Clinical Investigation, 8 december, 2005).

Obesidad
Se ha observado que los niveles de grasa total en el cuerpo están inversamente
relacionados con los niveles de vitamina D (julio 2005, journal of Clinical Endocrinology
and Metabolism). Existe una asociación directa entre el aumento de la grasa total del cuerpo
y los niveles de la hormona paratiroides. Una disminución de vitamina D, puede favorecer la
adiposidad debido a la asociación con el aumento de la parathormona.

Paratiroides
Para el tratamiento de hiperparatiroidismo se ha comprobado que resulta beneficioso
la toma de 1.000 UI de vitamina D3/día con 2.000 mg de calcio elemental. De este modo
se consigue disminuir los niveles de la hormona paratiroidea.

Músculos
14

Se ha demostrado que la vitamina D estimula la producción de Il-4, una substancia necesaria


Página

para el crecimiento muscular que precisa de la fase de fusión de los mioblastos con los
miocitos, aumentando la expresión de moléculas de adhesión celular. (Sorensen et al. 1979,
Horsley et al. 2003).

Ojos
Hay estudios que indican que la vitamina D tiene efecto protector sobre las cataratas con
dosis de 800 UI día, pudiendo disminuir hasta un 72% el riesgo de cataratas. (Journal of the
American Geriatrics Society, Febrero 2007... Kery Broe and Douglas Kiel)

La toma de vitamina D3 puede ser beneficiosa en personas con ciertas enfermedades


oculares pues el calcitriol es un potente inhibidor de la neo vascularización
(antiangiogénesis) con efectos positivos sobre la proliferación celular endotelial de la
retina (Albert DM, Scheef EA et al. “Calcitrinol is a potent inhibitor of retinal
neovascularization”. Invest Ophtalmol Vis Sci, 2007; 48[5]).

Las mujeres embarazadas con déficit de vitamina D aumentan el riesgo de


preeclampsia (una complicación grave del embarazo caracterizada por hipertensión e
hinchazón de piernas, bajos niveles de vitamina en el cordón umbilical, y podría provocar la
muerte fetal. (lisa M Bodnar, Universidad de Pittsburg. journal of Clinical Endocrinology an
Metabolism, septiembre 2007). Se ha observado que la suplementación con vitamina D
durante la infancia disminuye el riesgo de preeclampsia en las mujeres embarazadas,
según un estudio realizado con 2.969 mujeres.

Los aportes de micronutrientes que se prescriben durante el embarazo a las mujeres


contienen niveles tan bajos de vitamina D que no son capaces de prevenir el déficit de
vitamina D en los niños. Estas son las conclusiones de un estudio realizado con 2.200
mujeres en el Magee-Women´s Research Institute´s Pregnancy Exposures and Preeclamsia
Prevention Study.

Antienvejecimiento
Se sabe que la longitud de los telómeros en los cromosomas (situados en los extremos de
éstos) se relaciona con la concentración de vitamina D. La longitud de los telómeros se acorta
de manera natural con el paso de los años pero lo hace de forma más rápida cuando
aumenta el estrés oxidativo (von zglinicki. “Oxidative stress shortens telomeres”. Trenes
Biochem Sci, 2002; 27[7]). Se ha visto que los altos niveles de vitamina D se relacionan
con reducción del acortamiento de los telómeros relacionado con el envejecimiento y
aumento de inflamación y estrés oxidativo. Se realizó un estudio con 2.160 mujeres de
edad entre 19 y 79 años; se estudiaron en sangre la vitamina D3 y la PCR, así como la longitud
de los telómeros medido en el ADN de los glóbulos blancos periféricos (leucocitos). Se
observó que los pacientes que presentaban altos niveles de vitamina D3 tenían una
equivalencia de 5 años de diferencia entre la edad biológica y la edad cronológica, mientras
que los que la tenían baja o normal-baja, tenían un acortamiento de los telómeros
equivalente a un envejecimiento de unos 7´5 años.

La vitamina D puede enlentecer el envejecimiento y aumentar la calidad de vida, previniendo


el declive en la longitud de los telómeros que aparece con la edad. Las mujeres con niveles
bajos de vitamina D tienen aumentada los niveles de PCR, un marcador de inflamación
crónica. Altos niveles de vitamina D se correlaciona con alargamiento de los telomeros
y de 5 años más de vida (Richards jB, Valdes AM “Higher serum vitamin D concentrations are
associated with longer leukocyte telomere length in women”. Am j Clin Nutr, 2007; Nov,
15

86[5]).
Página
La suplementación con vitamina D se relaciona con disminución de riesgo de muerte
durante un periodo de 6 años. Estudio realizado con 57.311 participantes que tomaron entre
300 a 2.000 UI día de vitamina D. (Philippe Autier de la Internacional Agency for Research on
Cancer in lyon and sara Gandini, del European Institute of Oncology in MIlan. Archives of
Internal Medicine, sept 10; 2007).

Se ha comprobado que los niveles de vitamina D 3 predicen la resistencia física y el


declive en las personas mayores (Wicherts IS, VanSchoor NM et al. journal of Clinical
Endocrinology, 2007; 92[6]). La ingesta de vitamina D reduce la media de mortalidad al
disminuir la mortalidad por cualquier causa (Autier P, Gandini S et al. “Vitamin D
supplementation and total mortality: a meta-analysis of randomized controlled trials”.
Archives of Internal Medicicine; 2007, 1616).

Riñones
Varios estudios demuestran la ayuda de la vitamina D en casos de insuficiencia renal. En
uno de ellos se demostró que la toma de calcitriol en los pacientes con enfermedad renal se
asocia con una disminución de la mortalidad en un 25%. La eficacia del calcitriol aumenta si
se administra vía intravenosa en los pacientes con diálisis renal para disminuir el
hiperparatiroidismo. El estudio se realizó con 1.428 pacientes no hipercalcémicos, en un
estadio 3-4 de enfermedad crónica renal. (Bryan Kestenbaum, journal of American Society
of Nephrology, agosto 2008).

La suplementación de vitamina D2 (ergocalciferol) beneficia a los pacientes con enfermedad


renal crónica estadio 5. Estudio realizado con 344 pacientes en estadio 5 de enfermedad
crónica renal. El 90% de los pacientes tenían niveles de 25D disminuidos menos de 40 ng/ml.
los pacientes recibieron ergocalciferol 50.000 UI semanales durante 6 meses. Se observó
que la administración de ergocalciferol producía una disminución de los niveles de
hemoglobina glicosilada, corrección del calcio y aumento de la hemoglobina (Blair D, Mc
Caffrey S et al. “Prevalence of vitamin D [25-Hydroxyvitamin D] deficiency and effects of
supplementation with ergocalciferol [Vitamin D2] in stage 5 chronic kidney disease patients”.
j Ren Nutr, 2008; 18[4]).

FUENTES DE VITAMINA D
Aunque la principal fuente de vitamina D para la mayoría de los humanos es la exposición
diaria a la luz del sol, existen muchos factores que pueden disminuir e incluso suprimir
esta síntesis endógena. Uno de los factores más destacados es el grado de exposición al sol,
que varía con la aplicación de protectores solares, el nivel de contaminación
atmosférica, la vida urbana en la que sus elevados edificios suelen obstaculizar una parte
importante de la radiación del sol, la tendencia a no salir de casa habitar o habitar en
regiones geográficas del mundo que durante el otoño e invierno no reciben suficiente
cantidad de luz solar.

Uno de los factores más importantes en la síntesis de vitamina D3 a nivel de la piel es el


ángulo de incidencia de la radiación solar. Eso significa que tanto la latitud geográfica
como la estación del año y la hora del día afectan a sus niveles de producción. Cuanto
más lejos uno se encuentre del ecuador, menor es el período anual en la que hay suficiente
radiación solar para sintetizarla. Como las radiaciones UVB procedentes del sol son
16

absorbidas a medida que atraviesan la atmósfera, a mayor latitud (más alejado del ecuador)
Página

el ángulo de los rayos del sol es mayor y, por tanto, el camino a través de la atmósfera es
más largo, llegando menos radiación UVB a la superficie de la tierra. En un mismo país
puede haber diferencias significativas. Por ejemplo, en el Norte de España a nivel del
paralelo 42ºN el ángulo de incidencia del sol desde noviembre a febrero es tan oblicuo que
muy pocos UVB llegan a la superficie de la tierra generándose muy poca vitamina D3 en la
piel. Sin embargo, en el sur de España el ángulo es menos oblicuo incluso en invierno, por
lo que la síntesis de vitamina D3 se produce durante casi todo el año. En líneas generales se
puede decir que en latitudes por encima de 40 grados al norte y al sur del ecuador la
producción de vitamina D3 en la piel está significativamente disminuida o es
prácticamente inexistente durante el invierno.

En cuanto a sus fuentes alimentarias la vitamina D3 es abundante en productos


animales, especialmente el pescado graso, como arenque, salmón o sardina. Su mayor
concentración se encuentra en aceites de hígado de pescado como el aceite de hígado de
bacalao. También los huevos, mantequilla, la carne de ternera contienen cantidades
significativas mientras que los vegetales contienen muy escasas cantidades de vitamina D2

Afortunadamente la vitamina D presente en los alimentos es estable y no es destruida por


el calor ni otros procesos culinarios. Hay alimentos como la leche, los cereales, el pan, la
margarina o el zumo de naranja a los que se añade vitamina D (en general en forma de
vitamina D2), sobre todo en países con niveles bajos de radiación solar invernal. En España,
gran parte de la leche desnatada o semidesnatada se enriquece con vitaminas A y D. La
adición de complejos multivitamínicos es obligatoria para algunos productos utilizados
durante largo tiempo como nutriente único por algunas poblaciones; tal es el caso de las
fórmulas lácteas para lactantes, los cereales infantiles, los productos para nutrición enteral
y parenteral de uso hospitalario, además de los productos para sustituir comidas típicos de
los regímenes dietéticos para el adelgazamiento.

Veamos una tabla del contenido de vitamina D en los alimentos:


17
Página
ALIMENTO µgrs/100 grs. UI (unidades
(microgramos) internacionales)

aceite de hígado de bacalao 210-330 8.400-13.200

angulas 110 4.400

salmón 16 640

arenque 27 1080

anguila 20 800

atún y caballa 25 1000

boquerón-anchoa 7-12 280-480

sardina 8 320

congrio 22 880

jurel 16 640

palometa 16 640

salmonete 0’8 32

pescado blanco trazas insignificantes

langostino 18 720

resto de crustáceos y moluscos trazas insignificantes

huevo entero 1’75 70

yema de huevo 4’94 198

leche de vaca 0’01-0’03 insignificantes

leche humana 0’04 insignificantes

nata 0’1-0’28 insignificantes

mantequilla 1-3 40-120

queso 0’03-0’5 insignificantes

yogur Trazas-0’04 insignificantes

jalea real 20 800


18

salsa de mostaza 10 400


Página
Setas shiitake frescas 2’5 D2 (secas 40) 100 (secas 1600)

Resto cereales, legumbres, verduras y 0 0


frutas

Fuentes de la tabla:
- Tratado de Nutrición. Tomo I Bases Fisiológicas y Bioquímicas de la Nutrición. Vitamina D Olga
Martínez Augustin Víctor Puerta Fernández María Dolores Suárez Ortega Editor: Ángel Gil
Hernández. Facultad de Farmacia Universidad de Granada 2010.
- Tabla de composición de alimentos. José Mataix verdú. Universidad de Granada 2009.

Según la Organización Mundial de la Salud 1 UI de vitamina D3=0,025 µgr (lo que, a su vez, equivale a
65 pmol).

1 UI=0’025 µgr
1 µgr= 40 UI
25 µgrs=1.000 UI

INGESTA
Es importante recordar que la vitamina D utilizada como fármaco forma parte del arte y la
técnica de la medicina y, por lo tanto, es competencia del médico. Hay que tener cuidado en
ingerir dosis medicamentosas para las cuales siempre se debe consultar con un
profesional de la salud experto en el tema.

Todavía no hay un consenso establecido pero cada vez más médicos prescriben dosis
de vitamina D más altas de las recomendadas o establecidas por la RDA para prevenir
o tratar diferentes enfermedades, entre ellas las enf. cardiovasculares. En diciembre 2008,
médicos del Aurora Sinaí Medical Center, en Wilwaukee, administraron megadosis de 100.000
UI de vitamina D a todos los pacientes con dolor de pecho para después continuar
administrándoles 2.000 UI día. Hay protocolos en los que los pacientes cardiacos con
insuficiencia de vitamina D deben tratarse con una dosis de 50.000 UI a la semana
durante 8 semanas, para tomar después 50.000 UI cada 2 semanas o 1.000 a 2.000 UI al
día.

Es conveniente recordar que la vitamina D es una hormona que puede actuar en más de
1.000 genes diferentes por lo que probablemente constituye uno de los mejores
tratamientos preventivos y curativos que se puede administrar a un ser humano.

La cantidad de vitamina D necesaria dependerá de los niveles de vitamina D en suero, se


calcula que las necesidades diarias variarían entre 3.800 UI a 5.000 UI día para poder
conseguir niveles óptimos. Estudio realizado con 138 hombres y mujeres. Para niveles por
encima de 55 μg/d se requiere la toma de 95 μg o 3.800 UI día para aumentar a más de 75
nmol/l de 25 hidroxivitamina D, y para los que tengan menos de 55, se recomienda tomar
125 μg o 5000 UI día. (Aloia jF, Patel M et al. “Vitamin D intake to ataint a desired serum 25
hydroxyvitamin D concentration”. Am j Clin Nutr, junio 2008; 87[6]).

La toma de 5.000 UI día aumenta un 23% la densidad ósea. Actualmente se recomienda el


aumento de la cantidad de vitamina D que toman las mujeres y hombres mayores de 50
19

años. Un 70 % de mujeres entre 51 y 70 años y un 90% de mujeres mayores de 70 años no


Página

toman las cantidades adecuadas de vitamina D, y se recomienda la toma entre 800 y 1000
UI día en pacientes mayores de 50 años AMWA (The American Medical Womens Association).
El Dr. Richard Hellman, presidente de la American Association of Clinical Endocrinologists,
recomienda la toma de 1.000 a 2.000 UI día. En la mitad de los pacientes diabéticos se
encuentra deficiente. El déficit de vitamina D favorece la resistencia a la insulina.

El Instituto de Medicina Americano recomienda las siguientes cantidades:

Desde nacimiento a 50 años... 200 UI/día


51 a 70 años................................400 UI/día
71 años en adelante....................600 UI/día

El proyecto contra el cáncer y otras enfermedades sugiere de 1.000 a 2.000 UI día. (National
Institute of Health Office of Dietary Supplements). La suplementación de vitamina D diaria
es más efectiva que la suplementación semanal o mensual (Chel V, lips P et al.
Osteoporos Int, 2007, 14 sep).

Altas dosis de vitamina D son seguras. Dosis de 280.000 UI de vitamina D3 por semana se
puede administrar en pacientes con esclerosis múltiple, mejorando la situación de estos
pacientes. 1.200 mg de magnesio al día y una vez a la semana una dosis de 280.000 UI de
vitamina D, aumentado desde 28.000 en la primera sesión hasta llegar a 280.000 en la 28
semana. Los autores concluyen que la cifra de 10.000 UI/día de vitamina D3 puede estar
justificada y es segura. (Samatha M Kimball, Universidad de Toronto; journal of Clinical
Nutrition, septiembre 2007).

Un estudio afirma que la cantidad de vitamina D recomendada por la RDA y OMS es


insuficiente. Los pacientes geriátricos corren el riesgo de padecer complicaciones
relacionadas con una insuficiencia cantidad de vitamina D. En un estudio realizado con 80
pacientes de edad entre 65 a 89 años, el 74% padecían un déficit de vitamina D. La mayoría
de los pacientes consumían cantidades entre 400 a 600 UI día, según las recomendaciones
de la RDA. La recomendación de los autores es de tomar 1.200 UI día (Universidad de
Colorado Denver´s School of Pharmac. journal of the American Phramaceutical Association,
julio/agosto 2008).

Para mantener óptimos niveles séricos de vitamina D es importante mantener un nivel


terapéuticamente benéfico durante todo el año. Aquí los estudios indican que el mínimo
necesario para la prevención del cáncer es de alrededor de 40 ng/ml. La investigación
sugiere que un nivel ideal podría ser de alrededor de 60 a 80 ng/ml. Un artículo de revisión
realizado en 2009 titulado: “La Vitamina D para la Prevención del Cáncer: Perspectiva Global”,
publicado en Annals of Epidemiology establece que:

“Los niveles séricos más altos de la principal forma circulante de vitamina D, 25-
hidroxivitamina D (25 (OH) D), se asocian con tasas de incidencia sustancialmente más bajas
de cáncer de colon, de mama, de ovario, renal, de páncreas, de próstata agresivo y otros…
Se prevé que aumentar el nivel sérico mínimo de vitamina D, 25-hidroxivitamina D (25
(OH) D) de 40 a 60 ng/mL (100-150 nmol/L) durante todo el año, evitaría
aproximadamente 58.000 nuevos casos de cáncer de mama y 49.000 nuevos casos de
cáncer colorrectal cada año, y tres cuartas partes de las muertes por estas
enfermedades en los Estados Unidos y Canadá, según estudios observacionales
combinados con un ensayo aleatorio.También se espera que dichos consumos reduzcan a
la mitad las tasas de mortalidad de los pacientes que tienen cáncer de mama, colorrectal o
de próstata… Es momento de tomar una acción nacional coordinada con el fin de aumentar
20

sustancialmente el consumo de vitamina D y calcio”.


Página
Puntos de referencia para la ingesta de suplementos de vitamina D
Es importante controlar los niveles de vitamina D3 en sangre mediante la concentración
sérica de su forma 25-hidroxivitamina D también llamada calcidiol o 25 D la principal forma
de vitamina D circulante, que constituye un indicador útil del estado nutricional de vitamina
D. Sus niveles óptimos oscilan entre: 40-60 ng/ml. según GrassrootsHealth son unos
niveles que permiten prevenir la mayoría de enfermedades. Los resultados de las
investigaciones realizados por GrassrootsHealth sugieren que los adultos necesitan
alrededor de 8,000 UI por día para alcanzar un nivel sérico de 40 ng/ml. Una vez se han
normalizado los niveles se puede disminuir la dosis en función del criterio médico.

(http://www.grassrootshealth.net/index.php/documentation)

Hay que tener en cuenta que una exposición al sol de verano de una mujer de raza blanca
durante 15-20 minutos genera, al menos, unas 10.000 UI de vitamina D3 en la piel
pudiendo alcanzar las 15.000 UI. Tomar el sol durante más tiempo no sólo no aumenta
la cantidad de vitamina sino que la disminuye pues los rayos ultravioleta B solares
destruyen parte de la vitamina sintetizada. Parece ser un mecanismo de regulación de la
naturaleza para evitar hipervitaminosis D. No olvidemos que una sobreexposición solar
incrementa el riesgo de cáncer de piel. Basta con un leve enrojecimiento de la piel tras la
exposición al sol para que se hayan sintetizado niveles óptimos de vitamina D. La exposición
solar es la manera más barata y eficaz de sintetizarla. Es importante saber que los
protectores solares utilizados para la piel pueden llegar a disminuir hasta en un 98%
la síntesis de vitamina D3.

Es importante tener en cuenta que en las personas de raza negra los niveles de 25 D
suelen ser la mitad que la de las de raza blanca. Las personas de piel blanca sintetizan
vitamina D3 a una velocidad de hasta 6 veces superior a una persona de piel oscura debido
a que la melanina dificulta la llegada de los rayos UVB hasta los queratinocitos. En
Estados Unidos se ha realizado un estudio nacional de nutrición y salud que indica que el
42% de las mujeres de raza negra tienen niveles peligrosamente bajos de 25D por
debajo de los 15 ng/ml.

Por otra parte, existe una gran variación en los niveles de 25D entre las personas que
realizan actividades al aire libre (como el caminar) o las que no lo hacen. Se han realizado
estudios que indican que puede haber grandes variaciones entre los niveles de 25D en
ambos casos. También el tipo de vestimenta puede influir de un modo importante. Carbajal
A, Varela‐Moreiras G, Ruiz‐Roso B, Perea I, Moreiras O. Nutrición y salud de las personas de
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Otros factores que intervienen en la síntesis por exposición solar son la delgadez de la piel
y la disminución de los niveles de 7-dehidrocolesterol en sangre.

Hay que considerar que las camas solares que sólo aplican rayos UVA no permiten
realizar la síntesis de vitamina D, para la cual se precisan rayos UVB. Cuando tomamos
suplementos de vitamina D, también necesitamos aumentar el consumo de vitamina K2
a través de alimentos y/o un suplemento.

Para saber si los niveles séricos de vitamina D están en el rango correcto lo ideal es hacerse
una prueba del nivel sérico de 25D cada seis meses, ya que hay grandes variaciones
21

individuales de respuesta a la exposición solar o a los suplementos de vitamina D3 oral. Lo


mejor es hacer los análisis en agosto y febrero para conocer los máximos y mínimos entre
Página
los que se mueve cada persona a lo largo de un ciclo anual. Lo ideal sería alcanzar un nivel
sérico que se pueda mantener durante todo el año entre 40-50 y 60-70 ng/ml.

Recordemos que existen 4 formas fundamentales de vitamina D:

- Vitamina D3 o COLECALCIFEROL. Es la forma natural que el ser humano sintetiza en


la piel mediante la acción de los ultravioletas B y el calor sobre la molécula de colesterol (7-
dehidrocolesterol). Es la que se encuentra presente en los animales sobre todo en los peces
grasos y en grandes cantidades en el aceite de hígado de bacalao.

- Vitamina D2 o ERGOCALCIFEROL que es de origen vegetal. Se ha demostrado que la


vitamina D2 es menos eficaz que la D3 para el aumento y para el mantenimiento de los
niveles en sangre (Scientific American 2007) Existen formas sintéticas de esta vitamina que
se obtienen a través de la irradiación de hongos y materia vegetal. Según un meta-análisis
realizado en 2012 por Cochrane Database5 (Cochrane Database Syst Rev. 2011 Jul
6;(7):CD007470) que evaluó las tasas de mortalidad en 94.000 personas que complementan
su alimentación con D2 comparándolas con quienes lo hicieron con D3, existen diferencias
significativas en los resultados. Los resultados concluyeron con una reducción del riesgo
relativo del 6% entre los que utilizaron la vitamina D3, mientras que se produjo un aumento
del riesgo relativo del 2% entre los que utilizaron D2.

- El calcidiol o calcifediol o 25D, 25-hidroxicolecalciferol (25-OH-colecalciferol), es un


análogo de la vitamina D3 soluble en los lípidos. Se trata de la molécula que resulta del
proceso de metabolización hepática. El calcifediol es mucho menos eficaz que el calcitriol
en pacientes con insuficiencia renal debido a la incapacidad del riñón para convertir
calcifediol en calcitriol. El calcifediol está indicado en el tratamiento de la hipocalcemia en
pacientes sometidos a diálisis renal crónica.

- El calcitriol o 1’25D que tiene más de dos veces la actividad vitamínica D del calcifediol.

La Academia Norteamericana de Pediatría recomienda un mínimo de 200 UI diarias para los


niños, sin embargo son numerosos los expertos que consideran esta cantidad insuficiente
incluso para la prevención del raquitismo.

No conviene olvidar que el riesgo de contraer diversas enfermedades (como fragilidad ósea,
aumento de procesos infecciosos, enfermedades autoinmunes y una mayor tendencia a
desarrollar tumores) es superior al riesgo de hipervitaminosis a las dosis aconsejadas por
los expertos.

Es importante ingerir la vitamina D DURANTE LAS COMIDAS pues necesita grasas para
su correcta absorción.

Necesidades excepcionales de vitamina D se dan en algunas situaciones como el


embarazo, intoxicación por metales pesados como mercurio y cadmio, ausencia de sol
y enfermedad de Paget. Para tratamiento de cáncer se recomienda usar 2.000 UI por día,
aunque hay otros investigadores recomiendan 6.000 UI día.

TOXICIDAD
Hay que tener en cuenta que la vitamina D puede generar toxicidad a dosis altas pero
también es necesario recordar que, según los expertos, para llegar a niveles tóxicos
22

habría que ingerir dosis diarias de 40.000 UI durante un largo período de tiempo
Página

(meses).
Nunca se ha detectado un caso de sobredosis de vitamina D por exposición solar por las
razones que antes hemos comentado por la destrucción de la vitamina tras exposiciones
prolongadas.

Solo si se toma vía oral en dosis muy elevadas durante meses, y de forma sintética puede
producir hipercalcemia, calcificaciones en tejidos blandos y vasculares, artralgias, cefaleas,
polineuropatía, necrosis cardíaca.

CONTRAINDICACIONES RELATIVAS
La toma de vitamina D a dosis farmacológicas puede interferir con el metabolismo de
glucósidos cardiacos como la digoxina. Hay que evitar administrarla en pacientes con
hipercalcemia, así como en casos de sarcoidosis e hipoparatiroidismo.

INTERACCIONES Y POSIBLES INCOMPATIBILIDADES


- Medicamentos utilizados en el tratamiento de la epilepsia (como fenitoína, fenobarbital y
primidona) y otros medicamentos inductores enzimáticos (favorecen la disminución del
efecto de la vitamina D).

- Medicamentos para el corazón y/o para la hipertensión arterial como los glucósidos
cardíacos, los diuréticos tiazídicos o verapamilo.

- Colestiramina, colestipol (para el colesterol), orlistat (para la obesidad): se debe separar


la toma de estos medicamentos al menos 2 horas.

- Aceite mineral o parafina (laxantes): se recomienda utilizar otro tipo de laxante o separar
la toma de ambos medicamentos porque disminuyen la absorción de la vitamina D.

- Algunos antibióticos (como penicilina, neomicina y cloranfenicol).

- Sales de magnesio.

- Otros productos con Vitamina D por el riesgo de sobredosis.

- Suplementos de calcio.

- Corticosteroides.

La vitamina D es más efectiva si se toma con sustancias agonistas como:

- Vitamina A
- Colina (ayuda a prevenir la toxicidad)
- Vitamina C (ayuda a prevenir la toxicidad)

También hay sustancias antagonistas de la vitamina D que disminuyen su eficacia, como:

- Alcohol
- Cortisona
- Anticonceptivos orales
23
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Assignment/Dr. Mercola: Vitamin D and Cancer― What Is the Amount Needed for Good Anti-Cancer Prevention?

Vitamin D Supplement Doses and Serum 25-Hydroxyvitamin D in the Range Associated with Cancer Prevention
28

Anticancer Research 2011― Studies indicate that intake of vitamin D in the range from 1,100 to 4,000 IUs a day and
a serum 25-hydroxyvitamin D concentration of 60-80 ng/mL may be needed to reduce cancer risk. This study found
Página

that the supplemental dose ensuring that 97.5% of the study population achieved a serum 25(OH)D of at least 40
ng/mL was 9,600 IU/day. It also concluded that intake of up to 40,000 IUs per day is unlikely to result in vitamin D
toxicity.

Vitamin D for Cancer Prevention: Global Perspective

Annals of Epidemiology July 2009 ― Cancer-free survival in the study women after 4 years’ follow-up and random
allocation to placebo, cancer-free survival was 77% higher in the calcium and vitamin D3 supplementation group
than the placebo group. This study looked at the MINIMUM year-round serum levels needed to prevent breast and
colorectal cancers, that minimum being 40-60 ng/mL. Quote: “The time has arrived for nationally coordinated action
to substantially increase intake of vitamin D and calcium.”

Prognostic Effects of 25-Hydroxyvitain D Levels in Early Breast Cancer

Journal of Clinical Oncology August 2009 ― Vitamin D deficiency may be associated with poor outcomes in breast
cancer. In this study:

Vitamin D and Prevention of Breast Cancer: Pooled Analysis

The Journal of Steroid Biochemistry and Molecular Biology March 2007 ― Showed that intake of just 2000 IU/day of
vitamin D 3 and, when possible, moderate exposure to sunlight, could raise serum 25(OH)D to 52 ng/mL, a level
associated with reduction by 50% in incidence of breast cancer.

Optimal Vitamin D Status for Colorectal Cancer Prevention: A Quantitative Meta Analysis

American Journal of Preventive Medicine March 2007 ― Concludes that a 50% lower risk of colorectal cancer was
associated with a serum 25(OH)D level of more than 33 ng/mL; evidence suggests that daily intake of 1000-2000
IU/day of vitamin D3 could reduce the incidence of colorectal cancer with “minimal risk” (of D3 toxicity).

Vitamin D: Its Role in Cancer Prevention and Treatment

Progress in Biophysics and Molecular Biology September 2006 ― The abstract does not give anti-cancer D3 levels;
however, it does encourage measurement of D3 levels as an important tool to monitor vitamin D status for bone
health and cancer prevention.

Estimation of Optimal Serum Concentrations of 25-Hydroxyvitamin D for Multiple Health Outcomes

American Journal of Clinical Nutrition July 2006 ― Evidence suggests that vitamin D intakes above current
recommendations may be associated with better health outcomes. … For all endpoints, the most advantageous
serum concentrations of 25(OH)D begin at 75 nmol/L (30 ng/mL), and the best are between 90 and 100 nmol/L (36–
40 ng/mL). The study notes that more than 1000 IU/day are necessary to bring the levels up to minimal standards.

The Epidemiology of Vitamin D and Cancer Incidence Mortality: a Review (United States)

Cancer Causes and Control 2005 ― This abstract does NOT give the D levels needed for anti-cancer prevention, but
it does say that “studies indicate that vitamin D may have anti-cancer benefits, including against progression and
metastasis, against a wide spectrum of cancers. The researchers encourage further studies on this, “given the
potential benefits from vitamin D.”

Vitamin D and Breast Cancer Risk: The NHANES I Epidemiologic Follow-Up Study, 1971-1975 to 1992

Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention ― While this study does NOT cite specific D3 levels for anti-cancer
prevention, is a good historical document for background information supporting the assertion that vitamin D from
sunlight, diet and supplements reduce the risk of breast cancer.

Prospective Study of Predictors of Vitamin D Status and Cancer Incidence and Mortality in Men

Journal of the National Cancer Institute April 2006 ― Vitamin D has potent anticancer properties, especially against
digestive-system cancers. This study encourages more research on the how and why of the relationship between
vitamin D3, sunlight and cancer prevention. The study concludes: “Vitamin D supplementation necessary to achieve
a 25(OH)D increment of 25 ng/mL may be at least 1500 IU/day.

Vitamin D Insufficiency NEJM 2011

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